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El último Milagro de Sherlock Holmes por sherlocked221B

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Notas del capitulo:

Hola, gracias por leer!  por favor no olviden dejar sus comentarios al final del capitulo 

un gran abrazo 

-Boni-

 

No podía resistirme a él, a su exquisito aroma envolvente, su mirada fija en mis ojos incitándome a caer en su juego, sin darme espacio a dudas, sus labios aprisionando los míos en un beso apasionado, sentía mi mente adormecida…en ese instante  solo había espacio para contemplar el bello rostro de Sherlock Holmes regalándome una erótica sonrisa mientras mantenía su cuerpo agazapado sobre mí, su abrigo flameando tras él, sus rizos desordenados por mis dedos mientras él dejaba un húmedo rastro de besos y lamidas por mi cuello arrancándome jadeos ahogados, deseaba quedarme en ese momento por la eternidad, solo nosotros, nuestras respiraciones erráticas y corazones acelerados…presa del deseo que despertábamos en el otro. Descendí mis manos hacia su trabajado abdomen…tentándome a ir más abajo, hasta llegar a un punto de no retorno, necesitaba más de él…sentirlo completamente… sin reparos, sin miedo alguno.

—John—escuché a lo lejos, abrí los ojos alarmado, pero solo pude ver oscuridad, Sherlock se había ido…dejándome deseoso y expectante…finalmente desperté jadeando, todo había sido un sueño…una ilusión creada por mi cerebro…mi mente me había traicionado, mostrándome quizás mis deseos más profundos—John, voy a abrir…—advirtió esa conocida voz femenina…Era Mary, este no era un buen momento para vernos, era uno bastante inoportuno—estuve llamando por varios minutos a la puerta…¿acaso no querías abrirme? —preguntó con actitud de reproche

—Lo siento…estaba dormido, hace mucho que no dormía tantas horas seguidas—dije con asombro al ver el reloj a mi lado—debí haber estado muy agotado—admití frotándome la cabeza y estirándome con pereza.

—está bien…estabas soñando—dijo observándome con seriedad, me removí y desvié la mirada incómodo ante sus palabras, me había descubierto.

—¿enserio? No lo sé…—dije vacilante intentando sonar convincente

—hablas dormido…bastante alto para ser sinceros—replicó con la mirada fija en mi

—¿ah si? Pues no recuerdo nada, deben haber sido puras incoherencias—dije restándole importancia

—mencionabas el nombre de Sherlock…es increíble que hasta en sueños hables de él…—Mary esa mañana lucía extraña, ya no sonreía como siempre, se veía apagada y pálida al extremo, las ojeras de su rostro estaban muy marcadas, parecía haber estado llorando ¿qué pudo causar su llanto? Mary llevaba una vida tranquila...alegre

—bueno, vivo con él…es parte de mi vida—admití pensando en el sueño tan realista que había tenido hace tan solo unos minutos.

—supongo que si…es inevitable—dijo dándome una mirada amarga…distante. ¿Qué sucedía con ella…? —como sea, quería saber como estabas, y cambiar tus vendajes…ya sabes, para que las heridas no se infecten

—¿Mary todo bien? … ¿acaso te encontraste con Sherlock abajo? Te dijo algo cruel…el suele ser así con las personas

—con todos menos contigo por lo que veo—dijo ella enarcando las cejas con cierta ironía mientras se acercaba a mi cama… “ay no…peligro” pensé—Sherlock no estaba abajo…estamos solos—señaló mientras removía las tapas de mi cama, intenté ocultar mi erección removiéndome y envolviéndome en las sábanas.

—Mary puedo hacerme las curaciones yo mismo, soy doctor…puedes esperarme abajo…no es necesario que tu…—pero fue demasiado tarde, Mary me destapó completamente y me observó con actitud acusadora mi excitación …nuevamente desvié la mirada, los colores comenzaron a subir por mi rostro evidenciando mi vergüenza

—vaya…no me esperaba esto. Si quieres podemos arreglarlo—dijo cambiando su actitud repentinamente, acercándose a mí con una sonrisa coqueta, avanzando en la cama—así que finalmente si estás feliz de verme…por estas reacciones en tu cuerpo—dijo depositando un breve beso en mis labios

—Mary enserio, esto se pasará solo…por favor puedes…

—tranquilo, ya es hora que demos el siguiente paso en nuestra relación…estamos solos, nadie nos interrumpirá, seré cuidadosa, lo prometo—dijo guiñándome un ojo, mientras se desprendía de su chaqueta, comenzó a tocar mi cabello y a acariciar mi cuello.

—Mary espera tienes que escucharme…—pero nuevamente no me hizo caso, comenzó a quitarse la blusa—¡Mary por favor! — Exclamé mirando hacia otro lado, sencillamente no podía hacer esto, Mary era una mujer bella, pero…después de ese sueño, yo…no podía, no deseaba intimar con ella, no quería lastimarla, pero no sabía como explicarle sentimientos que ni yo podía comprender del todo.

—¿John que sucede? —preguntó con desilusión en el rostro

—yo…no me siento listo

—¿son tus heridas?, cariño…si es por eso lo entiendo—dijo volviendo a abotonarse la blusa

—no, no es eso Mary…yo…quizás nunca esté listo…

—no te entiendo a que te refieres John

—lo que quiero decir es que…Mary no estoy seguro de que funcione lo nuestro, tu eres una mujer hermosa, excepcional, divertida e inteligente…has sido mi apoyo incondicional todo este tiempo pero… no se si seguir con esta relación nos lleve a alguna parte…quizás yo nunca esté listo para avanzar.  No quiero hacerte daño…porque que tus sentimientos hacia mí son sinceros, pero…

—es por alguien más—declaró con seguridad

—Mary yo…

—dime John…¿te atrae alguien más?—una lágrima se escapó por su mejilla, lucía realmente afectada, comenzó a arreglarse apresuradamente—al menos ten la valentía de admitirlo, ¿es por él? —sentí mi corazón acelerarse ante esas palabras…—el silencio otorga John Watson, siempre es por él…por ese psicópata—dijo escupiendo las palabras con asco

—Mary, ¡no te atrevas a llamarlo de esa forma!

—lo es John…te has preguntado por qué para él es tan sencillo resolver casos, atrapar a asesinos en serie, maniáticos y psicópatas …es porque él es uno de ellos, ayer vino a visitarme a mi casa, no sé cómo averiguó donde vivía, estuvo tocando la puerta más de 20 minutos a altas horas de la noche…me interrogó, se abalanzó sobre mi y me sacudió para que le dijera las palabras que él quería oír, lucía como un loco…como un demente…me dijo un montón de cosas realmente crueles John…¿ese es el hombre del que estás perdidamente enamorado? Si el realmente hubiese estado muerto John…¿me habrías elegido a mí? —preguntó con sincero despecho

—No lo se Mary…—dije algo mareado por la descarga de información ¿por qué Sherlock había ido a ver a Mary? ¿Qué estaba tramando? Vi como se dirigía hasta la puerta con indignación, al parecer había dado por terminada nuestra charla—Mary espera ¿de qué te interrogó Sherlock? Por qué a ti

Se volteó observándome alarmada por unos segundos —nada importante John…solo dijo incoherencias—estaba mintiendo, la conocía demasiado bien, por primera vez fui consciente…Mary ocultaba algo ¿se relacionaba con algún caso? Pero eso era imposible…Finalmente cerró la puerta tras ella, obedecí al impulso de seguirla, me debía varias respuestas…tomé las dos muletas que descansaban junto a mi cama para apoyarme al bajar las escaleras mientras le gritaba que se detuviera…

 

*******************************************

 

Sherlock no había dormido en toda la noche ideando ingeniosos planes para atrapar de una vez por todas al asesino… ¿el criminal conocería a las víctimas? Las cazaba a orillas del Támesis, caminaba con ellas y las convencía de seguirlo…ellas confiaban en él, lo acompañaban por su cuenta. Tenía que ser un hombre joven de mediana edad, necesitaba bastante energía para vestirlas luego de asesinarlas, debía ser encantador, vestir de forma distinguida, no lo suficiente para llamar la atención…tenía que conocer el lugar, la zona circundante al Támesis era un área bastante adecuada para raptar a las víctimas, había mucha gente…era uno de los destinos preferidos por los turistas. ¡Turistas! Pensó de pronto…la chica asiática, estaba bronceada, no conocía la ciudad…según los datos recopilados por Lestrade había llegado hace 2 días a Londres y no pensaba pasar mucho tiempo ahí…La mujer enferma de cáncer era de nacionalidad española, Málaga. También había viajado a Londres hacía unos días…por motivos médicos. Volvería a su país durante esa misma semana…ese era su patrón…todas las mujeres eran turistas que visitaban Londres por un periodo de tiempo reducido …

Esa mañana desde muy temprano Sherlock Holmes estaba sentado frente al Río Támesis, aparentando leer un periódico distraídamente, mientras de reojo veía ir y venir a las posibles futuras víctimas del asesino, probablemente el criminal las observaba desde las cercanías acechándolas hasta escoger a la indicada. Holmes estuvo varias horas en esa tarea, sin éxito. Finalmente desistió tal vez el asesino invisible no repetiría su patrón después de todo…Londres era una ciudad multicultural, podía encontrar turistas en muchos otros sitios. Nuevamente el asesino había jugado con él…lo hizo creer que las pisadas de fango eran un acertijo para guiarlo al Támesis y verse los rostros…frente a frente.

El detective caminaba por las calles intentando detener un taxi cuando vio a Sebastián Brown de pie junto a un lujoso auto, observando las rutas en un centro de informaciones con extrañeza…estaba perdido.  Sherlock iba a seguir su camino cuando la voz del castaño llamándolo se escuchó por las calles

—¡Hey detective! …que bueno verle de nuevo—Dijo Brown con entusiasmo, Sherlock elevó la vista sin expresión alguna en su rostro. Sebastian fue a su encuentro y le dio un buen apretón de manos—, ¿puedes ayudarme? estoy perdido…—admitió

—es obvio…—respondió el detective con ironía, cruzando los brazos tras la espalda

—mira, vengo de la casa de Mary…me he quedado algunos días en la ciudad por asuntos de negocios y pensaba en darle una sorpresa en su hogar pero….

—Mary no se encuentra en casa

—exacto, ¿sabes de ella? No contesta el móvil y no conozco las rutas que hay que seguir en Londres para movilizarme en auto particular.  

—¿qué hora es? —preguntó Sherlock como si fuese un asunto totalmente ajeno

—las 11 AM ¿por qué? —Preguntó el hombre con extrañeza

—está en Baker Street—aseguró el rizado

—¿Cómo puede saber eso señor Holmes?

—es una corazonada…después de todo es la novia de John, está preocupada supongo…por su recuperación—dijo con aburrimiento el detective

—Bueno, necesito comunicarme con ella, iré  Baker Street entonces…si quiere puedo llevarlo, se nota que tiene prisa—dijo sonriendo el castaño

—Gracias—expresó Holmes con algo de extrañeza. Manteniendo su actitud seria—este es otro modelo— observó al entrar al vehículo

A Brown por primera vez titubeó antes de contestar—bueno, si…que puedo decir…mi debilidad son los autos de último modelo—dijo sonriendo nuevamente.

—Al parecer le va bien en su compañía

—Si, lo admito, lo suficiente para otorgarme algunos gustos…algo costosos—dijo finalmente sonriendo complacido. “típico jovencito adinerado, se vuelven locos por los autos” pensó Holmes—disculpe mi intromisión, pero…¿estaba usted en medio de algún caso?

—¿por? —interrogó el detective enarcando una ceja

—por nada, es solo que me atraen los misterios detestivescos…ya sabe usted…han salido en la prensa algunos asesinatos recientes…pensé que quizás podía estar conectado con usted…son extraños, es normal que lo llamen a usted para resolver ese tipo de casos—Holmes lo observó con el rabillo del ojo.

—¿es reportero Brown? —interrogó de pronto

—no, para nada…no me habrían permitido estudiar periodismo…vengo de una familia realmente conservadora—dijo el con una sonrisa incómoda.

—hace muchas preguntas…habría sido un buen reportero, considérelo. —observó Holmes sin ánimos de dar detalles sobre sus casos

—lo siento, es que…me interesa—admitió Brown algo titubeante, Sherlock advirtió su nerviosismo al pronunciar esas últimas palabras, había apretado su agarre sobre el volante, sus manos comenzaban a sudar.

—¿Qué le interesa? —dijo el rizado observando a Sebastian Brown por primera vez con genuina curiosidad.

—usted—dijo finalmente volteando a ver a Sherlock mientras lo observaba con intensidad

—¿por qué yo te interesaría? —preguntó el detective con cierta hostilidad “debería haber tomado el taxi” pensó para sí.

—bueno…soy un hombre de buena situación, las personas que me rodean normalmente se acercan por un motivo…el dinero, ya sabe como es—dijo el castaño intentando aparentar modestia.

—mmm…aburrido, vaya al grano—exigió el rizado entrecerrando los ojos

—el punto es que cuando lo conocí en la clínica junto a John…usted causo en mi una gran impresión

—no es lo que suelen decirme

—bueno…me dedujo tras una fugaz mirada…uno no suele ver cosas así todos los días, menos yo en mi monótona vida de oficina…debo confesar que desde ahí comencé a buscarlo en la prensa y leí su página web y a leer el famoso blog…todas esas hazañas…espero que no me tome por acosador

—no…no es la primera persona que hace eso. Aunque si va a comenzar un club de Fans…ya existe uno, no necesito que continúe con su sarda de elogios, John expresa esas ideas en cada posible variante del lenguaje—dijo con actitud arrogante

—si bueno, es usted un hombre muy interesante…en viejas noticias y en el blog de John…mencionan a un criminal realmente temible…no recuerdo bien su nombre—dijo Brown frunciendo el entrecejo, intentando recordar…ah si…”Jim Moriarty”

—Llegamos— replicó Sherlock secamente.

—Oh es cierto—respondió sorprendido—Con la charla no me di cuenta—Pero no tuvo oportunidad de continuar, Sherlock había salido ágilmente del auto al ver a John discutiendo a las afueras de Baker Street con Mary Morstan.

—¿Qué es esto? ¡Si tienen problemas resuélvanlos adentro del apartamento, John aun no estás recuperado…!vuelve a recostarte ahora mismo! —exclamó Sherlock con tono demandante

—No te metas en la discusión —replicó Watson ante la inoportuna intromisión del detective de pronto John vio a Sebastian acompañando a Sherlock a unos pasos de distancia—Hola Sebastian, ¿ustedes…vienen juntos? —interrogó contrariado

—Si nos encontramos y…bueno venía en busca de Mary pero si están ocupados yo...

Mary interrumpió de pronto—No, Con John ya no hay nada más que hablar…dejó muy clara su posición hace unos momentos—Se acercó a Sherlock manteniendo la fiereza de su mirada y le susurró al oido—“Felicidades…hasta sueña contigo” lo que dije es verdad Holmes…no me rendiré tan fácil—Sherlock escuchó atento cada una de las palabras de Mary—vamos Sebastian…necesito un amigo de mi lado en estos momentos…—dijo con cierto rencor.

—Por supuesto—se detuvo, girándose elegantemente hacia Sherlock— señor Holmes nuevamente ha sido un placer gozar de su compañía, me encantaría tener la oportunidad de invitarlo a un café para  continuar con la conversación que dejamos pendiente—dijo esbozando una media sonrisa—adiós John, espero que te recuperes pronto— John abrió los ojos alarmado ¿acaso Sebastian estaba coqueteando con Sherlock Holmes?

Sherlock solo le dedicó una mirada ambigua a Brown, y luego se volteó tomó a John de un brazo para ayudarlo a subir las escaleras…El doctor Watson iba a protestar ante la imperiosa actitud del detective, pero este lo silenció al instante con tan solo una frase—hemos tenido demasiado drama por Hoy John…

—está bien…pero me debes una gran explicación Sherlock Holmes—dijo con fastidio subiendo con cuidado los peldaños de la escalera, de pronto se tropezó y Sherlock bajó ágilmente su mano desde la cintura de John hasta su cadera, tocando accidentalmente el trasero del doctor por unos momentos para evitar que el doctor cayera escaleras abajo, hasta que el rubio logró equilibrarse apoyando su peso sobre las muletas. John observó a Sherlock turbado por su impulso, pero el detective no pareció darse cuenta de su arrebato.

De pronto John sintió la voz del detective peligrosamente cerca, en el reducido espacio de la escalera no tenía escape para esos inapropiados acercamientos—tú también me debes una gran explicación John…quiero saber qué soñaste conmigo que molestó tanto a Mary—dijo en un susurro al oído de John, erizando la piel de su cuello y enrojeciendo automáticamente sus mejillas.

Notas finales:

Hola, gracias por leer!  por favor no olviden dejar sus comentarios al final del capitulo 

un gran abrazo 

Boni 

 


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