Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Desde que regresaste por Nameless Princess

[Reviews - 7]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Estoy pensando que actualizare de lunes a jueves. Todavia no es algo oficial, pero es lo mas probable.

El domingo no subire, asi qué hasta el Lunes les confirmare si los días de actualizacion seran: De Lunes a Jueves. 

 

Disfruten el capitulo. 

"Nada duele mas que darte cuenta que no significas nada para la persona que mas te importa"

Nagisa 

Realmente no podía ser real, lo mas probable era que mis ojos estaban siendo engañados. El no podía ser... Karma. Nos miramos por un largo tiempo, tal vez el estaba igual de asombrado como yo.

Por mas loco que fuera, tenia muchas ganas de abrazarlo. El estaba enfrente de mi, a escasos centímetros, pero ¿Por qué si estaba tan cerca se veía tan inalcanzable?

La mirada de Karma cambio unos segundos después, cualquier rastro de asombro se había esfumado. Ahora parecía que me miraba con resentimiento, como si me odiara, no podía entender porque me miraba así, después de todo, fue él quien se aparto y jamas me contacto.

—Estoy buscando un perfume para mujer —Respondió haciendo una mueca, su tono de voz era tan frió.

—¿Para alguna edad en especifico? —Pregunté y sin poder evitarlo mire sus manos, busque el tatuaje que se supone que tendría en su meñique. 

No había nada.

—Para alguien joven —Dijo a secas—. Quiero algo elegante, pero que no sea tan llamativo, ¿Me entiende? —Preguntó con ironía, como si creyera que no entendía su hablar, como si yo fuera algun idiota. 

— Claro que le entiendo Señor — Saqué un pequeño catalogo—. Trabajas una buena fragancia aquí, se llama Paradis du Coeur.

Le mostré las imágenes del perfume que se mostraban en el catalogo. Realmente era uno muy bonito, lo que toda mujer deseaba. Lo mire de reojo ¿A quien piensas regalárselo Karma?

 —Pero desgraciadamente se nos agoto hace dos días —Le dije —. Si no le urge puede venir mañana, nos traerán nuevo producto y con ello el perfume.

—Entiendo, ¿Podría ser capaz de apartármelo? —De verdad me habla como si fuera un idiota

—Si claro — Saque unos papeles  y un pluma para empezar a escribir los datos del pedido— ¿A que nom...

—¡Nagisa!  — Kayano me miraba con el teléfono del local en la mano —. Te busca el idiota

—Discúlpeme en un momento regreso  

Camine hasta Kayano y me lleve el teléfono al oído. 

—Bueno  —Hable. 

— ¿Nagisa?  —Se escuchó del otro lado de la linea.  

— Si el habla ¿Qué  necesitas Asano?

—Te deje un vestido en nuestra recamara, cuando regreses de tu estúpido empleo quiero que te lo pongas. —Dijo — . No iré por ti al trabajo, pero pasare a recogerte a las ocho a la casa. 

Te entiendo, estaré listo a esa hora

— Nagisa

— ¿Si?

—No quiero que me desobedezcas

—Si Asano.  

 —Dios, que te costaba ser así de obediente el día de ayer, si lo hubieras sido, tu cara no habría pagado el precio. 

 —Me tengo que ir Asano, nos vemos en la noche

—Si adiós

Suspire al terminar la llamada. Kayano quien me veía algo angustiada, le sonreí y le devolvi el teléfono. 

— Disculpe ya volví — Dije regresando hacia Karma—. ¿A qué nombre le dejo su pedido? 

 —Akabane Karma —Respondió con superioridad, ¿Desdé cuando tenia ese ego? 

—Perfecto  —Terminé de escribir sus datos, arranque el papel y se lo entregue— Mañana preséntense a mas tardar a las tres de la tarde, entregue este papel a cualquiera de los trabajadores, realice su pago y le darán el perfume.

—Esta bien, me retiro. 

Dio la vuelta y salio del establecimiento. Vaya ni gracias dijo.

 

.      .      .

 

No me veía mal, al menos eso quiero creer. El vestido era negro con manga larga, la parte de los hombros la traía descubierta y del largo me llegaba un poco mas arriba de la rodillas. Había rizado mi cabello y me había maquillado con pinturas que Kayano me había regalado. 

Realmente no parecía un hombre, ni siquiera como un travestí forzado. Yo si parecía una mujer.

Sentí unos labios en mi hombro y unas manos acariciar mi cintura.

— Como me excita verte vestido de mujer — Una de sus manos bajo hasta mi pierna y comenzó acariciarla—. Verte vestido así,  hace que no quiera ir aquella fiesta — Beso mi cuello—. Me hace querer quitarte ese vestido. 

Me quede callado, mientras sentía sus labios recorrer todo mi cuerpo. Suspire, me costo demasiado arreglarme y si Asano seguía así me iba encontrar nuevamente desnudo. 

 — Que mal que no puedo faltar aquella fiesta — Se separó de mi—. Pero, podemos continuar cuando regresemos —Me dio una nalgada—. Vayámonos. 

Camine detrás de el, saliendo de la habitación.  Antes de salir de la casa tome un pequeño bolso y un abrigo para cubrirme de el frió. Asano me abrió la puerta del carro y me ordeno ponerme el cinturón.

—Ya sabes lo que tienes que hacer —Dijo ya dentro del auto —. Nada de estarme retando enfrente de los demás, ni hacer algún tipo de show porque ya sabes cual es el castigo  —Me sentencio.

  —Como digas Asano —Me miro con una sonrisa burlona en sus labios y predio el auto. 

Minutos después llegamos a un salón demasiado grande y lujoso. Habían muchos empresarios con sus hermosas esposas, realmente parecía ser una reunión muy importante. Asano tenia su mano en mi cintura, sosteniéndome con fuerza de forma posesiva, demasiado bochornoso para mi. 

Estando en la entrada pude ver a los padres de Asano sonriéndonos, ellos era buenas personas, cuando estaba con ellos siempre parecían estar preocupados por mi y en mas de una ocasión hablaron con Asano para evitar que me siguiera vestido de mujer. Les sonreí, en el fondo, ellos me recordaban a los padres de Karma. 

—Nagisa, que lindo te vez hoy — Me dijo su madre besando mi mejilla como saludo —. Pero te verías mas apuesto vestido de hombre —Miro a su hijo.

—Ya hemos hablado de esto madre.

La señora suspiro cansada y regreso su mirada a mí.

—Muchas gracias Señora usted igual se ve hermosa el día de hoy.

— Nagisa cuanto tiempo sin verte — Me dijo el padre de Asano. 

— Señor Gakuhō, ha pasado un largo tiempo. 

Bajo las indicaciones de un camarero tomamos asiento en la mesa que nos correspondía. Al parecer a los anfitriones les gustaba tener todo en orden.

—Familia Gakushuu me alegran que hayan podido venir — Suspire, conocía perfectamente aquella voz.

—Joven Akabane para mi es un gusto que nos haya invitado a esta fiesta —Le respondió el señor Gakuhō.

— Según tenia entendido eran tres nada mas, ¿Quien es su nuevo integrante? —Oh mierda se refería a mi, Inmediatamente Asano se paro y me indico que hiciera lo mismo, Karma al verme nuevamente se sorprendió 

—Joven Akabane, le presento a mi esposo Nagisa Shiota —Respondió Asano sonriendo  —. Aunque si no me equivoco ustedes ya se conocian.

Apreté mi puño con fuerza, maldito Asano. 

—Es un gusto nuevamente señor Akabane —Extendí mi mano para estrecharla con la suya pero la ignoro. 

—Es un gusto —Dijo a secas y llevo su vista a otro lado—. ¡Okuda! Ven por favor.

Una mujer algo chaparra pero sin duda mas alta que yo camino hacia nosotros con una sonrisa. Era muy bella y llevaba su cabello recogido en una coleta. Karma tomo su mano y la entrelazaron.

¿Qué estaba pasando? 

—Les presento a Okuda mi futura esposa

Le sonreí a la mujer sin mostrar lo mucho que me habían afectado aquellas palabras y nuevamente extendí mi mano. 

— Mucho gusto soy Shiota Nagisa, esposo del joven Asano — Ella me miro sorprendida pero aun así estrecho mi mano con la suya 

—Oh me disculpara usted,  pero podía jurar que era una mujer — Me dijo mientras se sonrojaba.

Parecía una buena mujer.

—Ah no.. te preocupes —Le sonreí 

—Bueno nosotros nos retiramos — Le sonrió a los padres de Asano —. Que tengan una linda noche. 

Mire de manera dubitativa como los dos se iban dejándonos solos, borre la sonrisa de mis labios y baje la mirada al piso. No podía creer lo que había escuchado; ¿Esposa? ¿Karma se iba a casar? Estaba consciente de que ya no eramos novios, que yo tenia un esposo, pero... me dolía mucho el corazón.

Apreté mi mano izquierda con la derecha. Escuchaba a los padres de Asano hablar pero no lograba prestar atención a su conversación. También sentía la mirada de mi esposo en mi persona, pero no me importaba nada, al menos no en estos momentos. 

Me sentía mal, realmente mal. Estaba seguro que mis ojos se estaban cristalizando. Quería llorar por muchas cosas; Desde mi vida que era un mierda mientras que la de Karma parecía ir de maravilla, hasta llorar por como Karma me había estado tratando desde que nos encontramos en la perfumería. 

Como si me odiara.

  —Si te veo derramar alguna lagrima por ese idiota —Murmuro Asano cerca de mi oído—. Haré que tengas un motivo por el  cual llorar de verdad.

 

.      .     .

 

Suspire por milésima vez, estaba realmente aburrido y cansado. Las personas estaban bailando con sus parejas, todos sonrientes y disfrutando de la noche. Mire a Asano de reojo, el ni en sus sueños me sacaría a bailar. Hasta Karma parecía divertirse mientras bailaba con su futura esposa. 

El se veía tan feliz y yo me sentía mas miserable que nada. 

Me pare de mi asiento, le indique a mi esposo que iría a los baños y me aleje de ahí. Realmente no me andaba del baño, solo quería separarme un tiempo de el. Al llegar al área donde estaban los sanitarios  vi unos pequeños sillones blancos, como una pequeña sala. Sin pensarlo dos veces me senté ahí y recargue mi cabeza en el respaldo. 

  Quería irme de este lugar. 

  Sentí como alguien se sentaba a mi lado y trate de restarle importancia. Probablemente era alguna otra mujer tratando de escapar de su marido. Sonreí ante la idea. 

—Pensé que jamas te volvería a ver Nagisa. 

Mierda. 

  —Señora Akabane —Respondí, le hubiera dicho Lena, pero si su hijo me odiaba era muy probable que ella igual lo hiciera.

— ¿Quién te invito a esta reunión?  —La mire.

¿Qué había hecho para que toda la familia Akabane me hablara y me mirara así?

  — Mi esposo fue invitado a esta reunión 

  — Vaya jamas creí que fueras tan descarado, mira que atreverte a venir a pesar de lo que le hiciste a mí hijo.  

 —¿Lo qué le hice a su hijo? —Realmente no entendía nada. 

  — Vamos Nagisa no te hagas el tonto, siempre te tuve cariño y confiaba plenamente en ti,  pero al parecer has cambiado demasiado —Se levantó y me regaló otra mirada de odio—.  Nunca te perdonare lo que le hiciste a Karma. 

Perfecto, no entendía nada de lo que había pasado y según toda la familia Akabane, ¿Qué le había hecho a Karma? Nuestra relación había acabado hace muchos años, pero estaba seguro de que fue el quien jamas me escribió, aun cuando le mande mi nuevo numero telefónico... jamas obtuve respuesta. 

Pero el malo de la historia ahora era yo. 

 —Si que has caído muy bajo Nagisa —Karma estaba enfrente de mi.

¿No estaba bailando con su futura esposa?

—  ¿Disculpa? 

—No puedo creer que terminaras conmigo por estar con un idiota como Asano

 Espera... ¿Qué acaba de decir? ¿Qué yo lo termine? 

—¿Terminarte? — Pregunte confundido—. Discúlpame Karma pero no te comprendo, tu fuiste quien nunca se contacto conmigo, tu rompiste nuestra comunicación. 

—Si claro hazte el desentendido ahora —Me miro enojado—. Tu arruinaste lo nuestro tras mandarme aquel mensaje. 

Me levante del sillón.

—¿Qué mensaje?  — Pregunté un poco desesperado—. En primera fuiste tu quien nunca respondiste los mensajes que te deje así que no me salgas con tonterías diciendo que todo fue mi culpa —Karma apretó sus puños  y me miro.

 No.

Tu no Karma, tu no me mires como lo hace Asano cada vez que me va a golpear. 

—¡Claro que todo fue tu culpa!

Retrocedí un poco.  

—Pero gracias a eso pude darme cuenta de una cosa — Se acercó a mi oído— . Tu no vales nada. 

No, te equivocas.

— Sabes voy a corregir lo que anteriormente dije; Tu no has caído bajo, mas bien que te vio el pobre de Asano, no tienes ningún atractivo.

 No ya no sigas, para.

— Y mira que vestirte de mujer, es que acaso ¿Ya no tienes respeto por ti mismo? 

Detente, por favor Karma.

— No se como me pude enamorar de ti.

 Detente es enserio, me estas lastimando.

—Como me pude enamorar de una puta.

Ese fue mi limite, levante mi mano dispuesto a darle un cachetada pero la detuvo. Tomo mi muñeca con fuerza. 

—Suéltame.. me estas... lastimando.. Karma - trataba de zafarme pero era inútil Karma siempre tubo mas fuerza 

— Oh no, tu no me vas a levantar la mano Nagisa — Me soltó —. Ah  por cierto soy Señor Akabane que no se te olvide, después de todo tu y yo ya no somos nada 

Dichas sus ultimas palabras se alejo del área de baños, dejándome solo con los ojos llorosos y el corazón roto. 

Karma tu nunca me habías tratado así.

 

.    .      . 

 

Asano y yo llegamos a la casa aproximadamente a las doce de la mañana. El no se contuvo y me llevo a rastras a la habitación, parecía estar desesperado por continuar lo que no pudo terminar antes y ayer. Acaricio mis piernas con rudeza, beso mi cuello y clavículas con fuerza. Me quito a tirones el vestido que traía puesto, probablemente lo había roto en el acto. 

Segundos mas tardes ya estábamos desnudos. 

Estaba tan cansado física y mentalmente por la fiesta que ni siquiera trate de detenerlo como otras veces, pero supongo que así era mejor. De esta manera no me golpearía.

Abrió mis piernas y se puso en medio de ellas. Entro de una sola estocada sacándome un grito. 

— ¿Qué sentiste al ver a tu amado Karma en brazos de otra mujer?  

Comenzó a penetrarme con mas fuerza. Sabia que Asano había disfrutado la noche, había disfrutado ver como todo mi cuerpo se había tensado al estar cerca de Karma, le había gustado ver como me había tratado y menospreciado. 

  — ¿Qué sentiste al darte cuenta de que no te ama como siempre lo creíste? 

Comencé a llorar, no por la fuerza de sus estocadas, ni por las marcas que me hacia con sus labios.  Empece a llorar por Karma, por su madre y por aquel odio injustificado que tenían sobre mi. 

Asano obtuvo su orgasmo y salio de mi interior. Seguí llorando incluso después de que Asano se quedara dormido, las palabras de Karma aun hacían eco en mi corazon. 

"No se como me pude enamorar de ti"

Fin del capitulo dos. 

 
Notas finales:

Gracias por leer.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).