No podía dormir, de repente la cama era un poco mas fría, de seguro las doncellas del castillo habían cambiado las sabanas y se habían olvidado de poner algunas cobijas mas, se levanto camino al armario para al menos ponerse una chompa, dio la vuelta y la luz de luna reflejaba su cama, sabia que era grande pero no se había dado de cuanta cuanto lo era, su cuarto era tan grande, para el solo era mucho, solo…trato de dispersar esas ideas de su cabeza, de seguro era todo el ajetreo que había pasado, si tan solo Wolfram estuviera allí para apoyarlo, pero precisamente era la razón de todo, suspiro para dirigirse de nuevo a su cama.
-Parece que mi elegido tiene problemas con dormir, le aconsejo que lo haga, recuerde que tiene un reino que cuidar- le sonreía un ente que lo conocía –
-¡Shinou!- casi grita del susto- ¿Qué haces aquí?, ya es tarde- reprochaba el menor-
-Nada nada mi querido Yuuri, es solo que me llego un rumor sabes- se tocaba la barbilla mientras estaba para a un lado de su mesita de noche-
- Ah, eso- otra vez el trago amargo- bueno esto no iba a funcionar de todos modos-
-Pero claro que va a funcionar, estoy seguro que en tierras lejanas Wolfram será mucho mas feliz que aquí- lo decía como quien se refería al clima-
- ¿Qué?, ¿de que estas hablando? - ¿habría un viaje?, nadie le había dicho nada, y peor aun, Wolfram se iría, ¡se iría sin el!-
- ¿no se lo dijeron? - fingió asombro- Entonces lo siento su Majestad olvide lo que dije, yo solo vine a recomendarle un libro en la ausencia de su ex prometido- como el pelinegro seguía mudo como perdido en su mundo continuo- Se llama ‘el lamento de nadie’- solo al recordar el contenido de dicho libro, sentía un nudo en la garganta- bueno su majestad yo me voy, que tenga buena noche -asi como llego se fue-
Sentia como si en la habitación hubieran comenzado a quitar el aire y hubieran bajado la temperatura, tenia frio y se estaba asfixiando, no encontraba lógica a lo que sentía, algo comenzaba a molestarle, la molestia poco a poco comenzaba a transformarse en una espina, Wolfram tenia pensado irse, quería abandonarlo, si eran amigos seria cruel que lo dejara atrás, sus pensamientos comenzaban a marearlo y confundirlo, mañana hablaría bien con el y tratarían de arreglar diferencias.
Paso un rato y seguía dando vueltas en la cama, es que era tan grande y fría esa cama, no entendia como había podido dormir todo este tiempo, quizás le faltaba algo, llego a su memoria un rubio que siempre lo abrazaba al dormir, pues con el tiempo había aprendido a dormir sin moverse exageradamente, trato de borrar esa idea rápido, tenia que pensar como matar el tiempo para que le diera sueño y pudiera dormir.
Y ahí estaba el, caminando y cuidando que nadie lo viera como ladron en su propio castillo, su justificación propia era que no quería que nadie lo viera a esas horas de la noche y comenzaran a cuestionarlo; asi que hizo todo un recorrido hasta llegar a la biblioteca, por alguna razón el libro que le había dicho Shinou tenia un nombre raro, cuestionaba que algo tramaba asi que llevado por la curiosidad fue a buscar dichoso libro, era una suerte que Gunter le haya enseñado el idioma Mazoku a pesar de su terquedad en aprender, no es que no quisiera, era lento, se aburría rápido y además con sus idas a su otra casa no le hacían el trabajo facil, asi que después de 4 años él podía leer escribir correctamente el idioma Mazoku.
Tardo alrededor de una media hora buscando dichoso libro, cuando lo encontró estaba en la sección de Cuentos paradojas e historias fantásticas no entendía por que Shinou le había dicho sobre un libro como ese, el autor era un tal Janus estaba seguro que había escuchado ese nombre pero no sabía dónde, cuando abrió el libro se dividía en dos partes, uno de poemas y el otro parecía cuentos o relatos no tan cortos que seguían una línea de tiempo, se acomodó en el piso y abrió la primera página, no había ni una presentación o un Prólogo, solo el primer poema:
Escucho aves trinar, tan alegres por la lluvia
Se conforman con tan poco después de la sequia
¿Un corazón vacío funciona igual?
Que cuando le das una gota de vida,
¿comienza a conformarse con migajas?
Pero si me quemas las alas
Me arrastras a seguir tus pasos a tu son
¿eres feliz con eso?
Esta ave trina ya no de dicha sino de dolor
El primer poema era corto, pareciera que el autor estuviera triste de alguna manera, no entendia mucho el contenido, pero lo ponía de alguna manera triste, leería al amanecer los demás, abrió la parte de los cuentos:
El leñador cuidaba un árbol, podía cortar todos a su alrededor, pero amaba a uno de hojas caídas y bastante viejo, podía danzar a su alrededor o contarle un cuento de buenas noches, lo visitaba cada mañana y lo idolatraba cada noche, el árbol solo se dedicaba a observar, un dia, el leñador se enamoro, era una buena mujer que nunca le pidió nada a cambio, sin embargo, el leñador le dio todo cerrando sus ojos para todos los demás excepto ella, asi era su cariño, solo destinado a una persona, ya no visitaba al árbol, cuando ya no habían buenos arboles que dieran madera, su mujer le pidió una única cosa, quería una casa para que vivieran juntos, el leñador no lo pensó dos veces y corto el árbol, el árbol era ahora una bonita casa dispuesta a proteger al que lo había cortado y lo había salvado de la soledad durante un tiempo eso bastaba.
Se sentía peor que cuando entro, cerro el libro, el autor definitivamente expresaba su tristeza en las letras, no entendía por que Shinou le había recomendado un libro asi, pero el sueño de alguna manera le estaba llegando, se acomodó en un par de libros que había sacado y no había guardado, así que se dispuso a dormir.
-¡Oh su majestad! Aquí se encontraba todos pensábamos que se había ido a ese otro mundo, su majestad es tan bueno al no dejar a su pueblo solo- lloriqueaba Gunter mientras seguía alabándolo, hasta que vio el libro que tenia en su mano- Su majestad no debería manejar ese tipo de literatura, ¿Buscaba algo en especifico?- Indagaba Gunter-
-Buenos días para ti también- lo decía mientras se acomodaba, le dolia la espalda, había dormido en una mala posición, luego recordó el libro que tenia en sus manos- ¿Sabes sobre el autor de este libro?, es un libro muy triste-
-¡Su majestad!, no debería leer estos libros, están catalogados como la literatura negra de Shin Makoku, el autor se suicidó, después de acabarlo, se rumoraba que había sufrido una decepción amorosa, que lo llevo a plasmar todos sus sentimientos antes de acabar con su vida-
-Entiendo- lo decía sin comprender ni la más mínima palabra, luego recordó lo importante y la razón por la cual había ido a la biblioteca, Shinou le había dicho sobre Wolfram-
-¿Dónde esta Wolfram?-
-…- Gunter dudo- Su majestad…-
-¿Dónde esta el?- Cuestiono un poco mas fuerte y serio-
-Se fue su majestad, hace una hora-
- ¿A donde?, ¿Por qué nadie me lo dijo?- sin querer estaba perdiendo los estribos
-Todos pensamos que se había ido a su mundo su Majestad- lo miro curioso, estaba a punto de transformarse en su versión Maoh-
-¿A dónde se fue?- pregunto entre dientes-
- Se ira a la frontera de Shimaron menor en la Ciudad de Cresal, ahora esta tomando un barco dirección a ese lugar- apenas termino de decirlo, Yuuri se fue corriendo-
No le importo si no estaba vestido, tomo a su caballo, y salio lo mas rápido que pudo, no podía perderlo, tenia que estar a su lado, era su amigo no podía abandonarlo, aferrado a esa idea se dirigio al puerto, cabalgo por casi media hora a toda velocidad hasta que encontró un barco de características de alguien con un buen puesto – bajo de su caballo rápidamente y corrió hacia el barco, estaban cargando algunas cosas, se dispuso a gritar el nombre de Wolfram a toda voz.
-WOLFRAM, WOLFRAM ¿DONDE ESTAS? - gritaba de un lado a otro hasta que choco con un tipo de cabello anaranjado- YOZAK- lo reconoció- ¿Dónde ESTA WOLFRAM? -Demando-
-Oh, mi queridísimo Rey lamento decirle que Wolfram von Bielefeld y algunos de sus hombres partieron hace media hora-
Cayo de rodillas, sin poder creerlo, el ya no estaba.
Lamento la tardanza, no podia poner el segundo capitulo jeje.