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Lazos por RozenDark

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Notas del capitulo:

Iba a tardar más, debido a que no he tenido ganas de dibujar, así que tomaré el dibujo de lo que fue el capítulo anterior (no el extra). Incluso puedo decirles que tengo listo el extra de “Blonko”, “Levin”, pero no el último capítulo de la historia, así como tampoco me sale el dibujo para “Levin”, así que probablemente tardará más de lo que había pensado :(

Espero que no hayan sentido eterna la actualización, porque si es así, lo lamento mucho… 

Y pues, oficialmente esta versión de Ben ya tiene numeración, así que son bienvenid@s a adentrarse al universo 18 y las locuras que se me vayan ocurriendo ;)

En fin, los personajes de Ben 10 y Generador Rex, son propiedad de sus respectivos autores y los demás de mi propia autoría. Las imágenes utilizadas a lo largo del fic son de mi entera propiedad (que raro se siente aclarar eso sin sentir pena xD) y como podrán notar, estrenamos portada y me ha encantado el resultado.

La historia, así como la numeración y la idea del universo 18, es 100% mía, así que para cualquier adaptación, bien pueden preguntar. 

Y sin más que decir, les invito a leer (^3-)/

Max sabía que algo andaba mal con su nieto, pero la palabra “mal” se quedaba corta. Su nieto le había contado con lujo y detalle todo lo que había ocurrido ese día, y saber que ese tal Rook Blonko sabía sobre su estadía cercana a Omnitrix, no era nada a comparación de saber que su nieto, tontamente se había dejado marcar por ese mismo Alfa.

Obviamente, no lo tomó nada bien. Tantas veces que había hablado con Ben sobre no permitir la marca, y lo primero que hacía era desobedecer.

 

— ¿Cómo pudiste Ben? —preguntó—. Te lo dije una y otra vez, y es lo primero que haces. Te dije que no te dejarás engañar fácilmente, y así lo hiciste.

—Abuelo, por favor… 

 

Max quería ablandar su mirada y abrazar a su nieto, pero olvidaba todas esas intenciones cuando recordaba lo iluso que su nieto había sido. Y ahora, debían de asegurarse de empacar sus cosas y prepararse para huir antes que a ese Alfa se le ocurriera delatarlos.

 

—No voy a darte la razón Ben, porque desde un principio te lo dije. Siempre fuiste demasiado fácil de convencer, lo mismo hiciste cuando creíste que Kevin era tu destinado…

— ¿Qué dijiste?...

 

Max tarde se dio cuenta de lo que había dicho. Rápidamente, miró a su nieto, pero al ver la mirada sin brillo que Ben tenía, supo que él había sido el que le dio la puñalada final a su frágil corazón.

 

—Espera hijo, yo no quería decir eso —nervioso, trato de justificar las absurdas palabras que había dicho, pero no espero que su nieto utilizara un hechizo para inmovilizarlo. Lo peor llegó cuando Ben dijo algo que en verdad lo aterro.

—No te preocupes abuelo, ya no seré más un estorbo…

 

El viejo Alfa sintió eterno el tiempo para que el hechizo se disipara, y apenas sintió libertad, fue directo a buscar a su nieto. Sin embargo, al ver las intenciones de Ben, sintió un terrible miedo y vacío.

 

— ¡No lo hagas Ben! —

 

Había llegado justo a tiempo para lograr agarrar la mano de su nieto, aunque claro, fue tanta su prisa por lograr evitar la caída de Ben, que había sentido como el brazo del Omega había hecho un sonido casi quebradizo.

 

— ¿Estás bien hijo? —miró preocupado a su nieto, pero Ben no le respondía—. Ben, no quise decir lo que dije, estaba enojado, pero mi enojo no debí dirigirlo a ti, la culpa es de ese torpe Alfa. Él es el que no sabe lo valioso que eres. 

 

Ben por fin lo miró entre lágrimas. Sabía que su abuelo estaba arrepentido, y claro que él igual, pues al pensar en cosas del pasado y en el Alfa que había comenzado a rechazarlo, se había olvidado por completo de su estado.

Completamente desesperado y alterado, se aferró a su abuelo, quien no tenía culpa alguna de las mentiras que decían en su contra.

 

—Lamento lo que hice abuelo. Y juro que si quieres alejarme, lo entenderé, pues solamente seré un estorbo por mi estado.

—Max lo miró sin entender del todo, hasta que por fin captó lo que su nieto había querido decir, y solamente sintió odio hacia el mismo, pero sobre todo hacia el Alfa que había roto el corazón de su nieto—. No voy a abandonarte hijo, y menos ahora que esperas a mi primer bisnieto —respondió seguro—. Si ese Alfa fue lo suficientemente idiota como para no valorar lo que tenía, entonces él se lo pierde. Por ahora, regresemos a la nave a ver tu brazo, ya luego empacaremos como se debe.

 

Ben asintió no muy seguro, pero sabía que si quería mantener a su abuelo y a su hijo a salvo, debían huir antes que Rook Blonko los delatara.

 

 

“Lazos Distanciados” 

 

Cuatro meses habían transcurrido desde lo sucedido con el Omega que lo había engañado. Y ciertamente, Rook Blonko no sentía que había hecho lo correcto al dejarlo ir. 

Para empezar, por alguna extraña razón, sentía que Rex y Noah -especialmente Noah-, le ocultaban algo, sin embargo, su amigo y mucho menos Nixon, le decían algo. 

Sobre el día que sucedió lo peor que le hubiera ocurrido hasta la fecha, no podía recordar absolutamente nada de como Ben se libró de él, lo único que sí tiene en cuenta, es que por alguna razón -demasiado desconocida para él-, se quedó dormido toda una semana y que había despertado con un fuerte dolor en sus cosillas, las cuales fueron afectadas por las patadas de Noah cada que se veía obligado a verificar que estuviera bien, según palabras de un muy apenado Rex. Rook tenía muy en cuenta que el Omega de su amigo lo odiaba, y vaya que Noah Nixon lo odiaba demasiado. 

El rubio Omega no podía ni siquiera disimular el odio que sentía hacia él, especialmente cuando Nixon hacía breves comentarios de lo idiota que había sido al desaprovechar una oportunidad de la que ni tenía idea. Y ni hacer alguna mención o pregunta sobre lo que el Omega trataba de decirle, porque Noah simplemente le mostraba el dedo medio y lo mandaba al diablo.

Rook por un momento creyó que no tendría respuesta o alguna explicación cercana para que Noah tuviera ese comportamiento para él, hasta que sin proponérselo, sus dudas se disiparon.

Esa mañana, Rex le había pedido un pequeño favor, algo que en su momento le pareció completamente insignificante. Rook solo debía entrar al departamento que Rex y Noah compartían y tomar una caja que contenía un regalo que el Alfa Salazar le tenía preparado a su Omega por su aniversario de pareja. No era nada complicado o sumamente difícil, aunque por alguna razón, no dudo en desaprovechar en mirar el lugar.

Blonko tenía muy en cuenta que Rex y Noah llevaban siendo pareja ya bastante tiempo, pero a juzgar por las fotos, parecía que se habían juntado desde los catorce, tal vez hasta un poco más. Y a pesar de haber sido educado de manera correcta y sobre todo, a no ser un chismoso, el Revonnahgander en verdad quería entender las razones de Noah para odiarlo.

Es decir, si, tal vez llevaba siendo  amigo de Ben durante todo un año, pero a él lo conocía mucho más tiempo, así que no entendía las razones de Noah para odiarlo por sacar de su vida a Ben. Así que en su torpe intento por descubrir o tal vez, entender las razones de Noah, se topó con algo que jamás hubiera pensado encontrar.

Ciertamente, no pensó en indagar demasiado, pero se dio cuenta de que eso mismo había hecho, considerando que su amigo no había encontrado aquella prueba de embarazo, y pensó, tal vez esa era la sorpresa que Noah tenía para Rex, y ya deseaba ver la reacción de su amigo cuando su Omega le contará aquello. Aunque muy en el fondo, envidiaba a Rex, y deseaba poder permitirse de disfrutar lo que muy seguramente, Rex haría.

Dejó de lado esos absurdos pensamientos, y decidió que mejor tomaba la caja y regresaba con sus amigos. Y algo que terminó por sorprenderlo ese día, fue que justo al salir de ese lugar, vio al hermano mayor de Rex, justo a punto de entrar.

 

—Rex y Noah no están en casa. Yo solo vine por una petición de Rex —se apresuró a explicar aquello. Por alguna razón, César Salazar lo veía de una manera que lo ponía completamente nervioso.

—Entonces llévame con ellos, o mejor comunícate con ellos para que vengan lo más pronto posible, así tendremos más privacidad —pidió con seriedad. Había escuchado por boca de Noah que aquel Alfa había rechazado al chico Tennyson, y aunque no parecía ser su problema, se volvió sumamente personal, cuando Rex y Noah comenzaron a hablarle por separado de las peleas que los problemas de Rook Blonko habían causado, así que no, a César no le agradaba nada Rook Blonko.

—Rook lo miró apenado, mientras mostraba la caja que llevaba en sus manos—. Creo que debo decirlo más claro, Rex está teniendo una cita con Noah, pero se le olvidó el regalo que le iba a dar y me pidió que se lo llevara lo más rápido posible, así que dudo mucho que vengan de inmediato —explicó lo más breve posible, pues el Salazar mayor parecía no tener ganas de esperar por nada.

—Salazar solamente masajeo su sien, mientras soltaba un ruidoso suspiro—. Solo haz lo que te dije. Llámalos para que vengan con prisa, porque esto no solo les incumbe a ellos, también a ti, Rook Blonko.

—El Revonniano detecto cierto toque malicioso cuando el Salazar mayor dijo su nombre—. ¿Hice algo que te hiciera enojar César Salazar? —así que decidió quitarse la duda de encima.

—César lo miró con desdén—. Ciertamente, si, lo hiciste —respondió sin tapujo alguno—. Y antes de que me hagas perder más tiempo, lo que hiciste no fue precisamente en mi contra, pero si atentas con la felicidad de mi hermano menor y su pareja, entonces todo se vuelve demasiado personal, así que seré directo. No me agradas Rook Blonko, y no creo que eso cambie del todo, menos si por causa tuya, mi hermano y Noah discuten.

 

Rook sintió cierto temor con el comportamiento del Alfa Salazar. Y aunque deseaba decir algo para defenderse, no supo qué decir para contradecir a César. 

En su lugar, decidió llamar a su amigo y decirle que su hermano mayor se encontraba en Omnitrix y tenía algo de suma importancia para decirles.

No pasó mucho tiempo desde que llamó completamente apenado a su amigo, pero al parecer, Rex había llegado con prisa, debido a Noah, algo que sin duda alguna le extraño demasiado.

 

— ¿A qué debo tu visita hermano? —Rex ni siquiera espero un saludo formal, pues de cierta manera, le había irritado tener que posponer su cita, considerando las recientes peleas que Noah y él habían tenido.

—Lo siento mucho hermanito, sé que interrumpí algo sumamente importante, pero esto que vine a decir es de vida o muerte, así que mejor entremos para hablar con más calma.

— ¿Lo lograste? —

 

Para Rex y Rook fue demasiado sospechoso ese comportamiento, pero las cosas se tornaron más extrañas, cuando Noah preguntó aquello. 

Obviamente, optaron por entrar al departamento, aunque César y Noah no dejaron de lado su sospechoso actuar, especialmente cuando ambos se aseguraron de cerrar puertas y ventanas y bajar las persianas para evitar mirones.

 

— ¡¿Me pueden decir de una vez lo que está ocurriendo?! —Rex perdió la poca paciencia que había tratado de mantener. 

 

Ni para Blonko y mucho menos para Rex pasó desapercibida la mirada mutua que Noah y César se enviaron. Algo ocultaban esos dos y no había mucha paciencia de por medio. 

 

—Noah solamente suspiro con pesar—. Para empezar, justo el día que César y compañía regresaron a la tierra, le pedí a César que investigara algo sumamente importante —comenzó a contar con un gesto completamente serio—. Lo que le pedí a César investigar, fue el asunto de Maxwell Tennyson y lo que supuestamente había hecho.

— ¡¿Acaso te has vuelto loco Noah?! —

 

Rex no evitó soltar ese grito. Él sabía los problemas que acarreaba esa investigación, así que no entendía las razones de su pareja, para poner la vida de su hermano mayor en un riesgo de tal magnitud.

 

— ¿Y tú por qué razón aceptaste? —miró a su hermano con reproche, pues no entendía en lo que pensaba César al aceptar la petición de Noah.

—Antes que nada, tranquilízate hermanito —César solamente hizo un gesto de paz con su mano—. Y la razón por la que acepte, fue por lo que me dijo Noah, sobre Benjamín Tennyson y su abuelo.

 

César se aseguró de mirar a su cuñado, en busca de alguna negativa, sin embargo, Noah solamente asintió para que siguiera hablando. Y sin duda alguna, Salazar disfrutaría un poco el sufrimiento del causante del alejamiento de su hermano menor y su cuñado.

 

—Ya que Noah no me ha dicho nada para evitar hablar, seré directo —con un gesto serio y por demás lleno de dureza, miró al único ser Alienígena en el grupo—. Benjamín Tennyson es un Anodita.

— ¡Eso es imposible! —gritó Blonko en completo shock—. Noah entiendo que Ben se volvió tu amigo, pero hacer que César Salazar venga a decir esa clase de mentiras ya es demasiado. Ben Tennyson y su maldito abuelo no son inocentes. Y es demasiado imposible que Ben sea una de las especies extintas y además poderosas del universo. 

— ¡Ya basta Rook!...

 

Para cuando Rook se dio cuenta de lo que estuvo a punto de hacer, Rex ya lo tenía acorralado en la pared con uno de sus brazos robóticos. Y Noah lo miraba con desdén, sin ningún signo de temerle en lo absoluto.

 

—Deberías controlar a tu Omega como se debe —reprochó con enojo.

— ¿Disculpa? —Noah se mostró completamente ofendido y estaba más que dispuesto a golpear a ese insolente Alfa.

— ¡Ya basta los dos! —respondió Rex con autoridad—. Noah, esto lo causaste tú con tus secretos —mencionó con severidad, mientras miraba seriamente a su pareja—. Y Rook, mi hermano dice la verdad, de hecho, la razón por la que caíste dormido por toda una semana, fue porque heriste a Ben. Él fue quien utilizó sus poderes para hacerte dormir y así poder escapar.

 

Rook dejo de moverse en cuanto escuchó la respuesta de su amigo. Sin embargo, aún si eso era verdad, eso no quitaba el hecho de que Ben Tennyson había jugado con él y que era el nieto del causante de tantos asesinatos y destrucciones en el universo.

 

—Eso no cambia nada. Maxwell Tennyson no es alguien inocente, y al parecer, Ben se aprovecha de ser lo que es —mencionó con rencor.

—Rex, este idiota no entiende con el poder de tu amistad o lo que sea que quisiste hacer —dijo Noah con una mirada llena de odio hacía el idiota ese—. César, ya diles la verdad, y de paso muéstrales las pruebas de que los únicos culpables de la infelicidad de Ben y su abuelo son los malditos seres que existen en el universo.

—César solamente asintió con seriedad—. Justo después de que regresamos a la tierra, decidí enfocarme en la investigación, y aunque en un principio no parecía llevarme a nada, logré encontrar respuestas que aparentemente no tenían nada que ver con el asunto Tennyson —sin omitir algún detalle, decidió comenzar a hablar—. Antes de decir algunas cosas de gran importancia, ¿los Morningstar les han dado problemas últimamente?... 

 

No importando la reciente confrontación que Rook y Rex habían tenido hacía unos minutos atrás, ambos Alfas se miraron entre sí. 

A decir verdad, ninguno de los dos había tenido problemas con los Morningstar, lo que es más, ni siquiera habían escuchado algo acerca de ellos desde unos meses. Para ser más precisos, desde que Ben había desaparecido. 

Y si ambos lo pensaban con detenimiento, la repentina aparición del supuesto nieto de Richard Morningstar era demasiado sospechosa, especialmente para Rook, quien recordaba a la perfección que Mike Morningstar había mencionado que Ben era un Tennyson, como si lo supiera por completo.

 

—Ahora que lo mencionas César, no hemos tenido ningún problema con Richard Morningstar. Ni siquiera nos ha mandado a sus matones para evitar que ganemos los combates —respondió Rex con extrañeza.

—Tampoco hemos sabido de su nieto, quien apareció por primera vez, justo el día en que Ben desapareció —murmuró un dudoso Rook Blonko.

 

César asintió seriamente. Él ya se esperaba respuestas similares, aunque no pensó que los Morningstar se movieran tan rápido y con tanta ansiedad.

 

— ¿Por qué la pregunta César?, ¿acaso los Morningstar tienen algo que ver con todo este embrollo? —cuestionó Noah completamente asombrado.

—Salazar asintió—. A eso iba Noah —respondió—. Mi investigación me llevó directamente a lo que una vez fueron bases de Plomeros, y a pesar de que en su mayoría no quedaba nada de gran importancia, logre dar con algunas respuestas —el Alfa ni siquiera se tomó el tiempo de quitar las cosas que estaban en la pequeña mesa de la sala, simplemente tiró todo y lanzó todas las carpetas que tenía en sus manos. Supo de inmediato que su hermano y cuñado se habían molestado por ese gesto, pero poco le importó, pues solamente se enfocó en abrir una de las tantas carpetas—. Esta carpeta contiene información un tanto esencial para poder entender del todo a lo que quiero llegar —de entre el montón de hojas sacó la fotografía de un Plomero de la especie Piscciss Volanns—. Este hombre, era el Magistrado Patelliday, y uno de los amigos cercanos de Maxwell Tennyson.

— ¿Era?, ¿qué le ocurrió? —preguntó Rex.

—Murió —respondió—. Aparentemente ocurrió de manera normal, pero al seguir investigando, la muerte natural quedó descartada, y termine por llegar a la conclusión de que alguien lo asesinó —César volvió a revisar la carpeta y esta vez se aseguró de sacar las hojas que confirmaban lo que había dicho—. Al parecer, Patelliday encontró algo que no debía y bueno, terminó por ser asesinado.

— ¿Y esto qué tiene que ver con la supuesta inocencia de Maxwell Tennyson? —cuestionó Rook de brazos cruzados.

—César lo miró con desdén—. Tiene todo que ver —le respondió con fastidio—. Para que tenga más sentido, regresemos al tema de los Morningstar. ¿Sabían que Richard Morningstar fue un Plomero? —preguntó, mientras buscaba en otra carpeta, para ser más precisos, la carpeta donde se demostraba lo que había dicho recientemente.

—Eso es algo difícil de creer hermano —mencionó Rex con sorpresa.

—Ni tan difícil hermanito. Con todo lo que me han contado Noah y tú, y lo que encontré sobre él, te aseguro Rex, que no es difícil de creer —respondió César—. Según los pocos registros que encontré, Richard Morningstar era uno de los pocos Plomeros que lograron llegar a ser Magistrados a una edad jovial, de hecho, Morningstar y el señor Tennyson fueron promovidos al mismo tiempo, incluso eran amigos, al menos hasta que…

— ¿Hasta qué...?

—César miró a Noah—. Hasta que Verdona Tennyson llegó a la tierra —respondió.

— ¿Verdona Tennyson? —inquirió Rex.

—César asintió—. Verdona Tennyson, antes conocida simplemente como Verdona, era una Anodita, y obviamente por ella es que su nieto Ben también lo es —explicó—. Al parecer, cuando Maxwell Tennyson y Verdona se conocieron, descubrieron que eran destinados, terminaron más unidos de lo que una sola misión les permitía. Sin embargo, Richard Morningstar terminó en una rivalidad que sin duda terminó por perder. Para hacerlo más sencillo de entender, Richard Morningstar no es un humano en su totalidad. La especie Alienígena del señor Morningstar es por completa desconocida, sin embargo, se sabe que tienen una gran obsesión por especies que los beneficien con energía, en este caso, un Anodita tiene energía de sobra como para llamar la atención de Morningstar.

— ¿Nos estas diciendo que Morningstar es un vampiro que roba energía en lugar de sangre? —cuestionó Rex. 

—Poniéndolo simple, así es hermanito —se limitó a responder—. Tratándose por completo de Morningstar, es obvio que comenzó a acosar a la señora Verdona, aun cuando ella ya se había casado y formado el vínculo con Maxwell Tennyson —decidió proseguir con su monólogo—. Y según los pocos informes que logre encontrar, Richard Morningstar terminó por ser despedido de los Plomeros, debido a los acosos incesantes en contra de Verdona Tennyson y los enfrentamientos con Maxwell Tennyson. 

—Supe de primera instancia que Morningstar era un lunático, pero no pensé que llegara a ese grado de locura —comentó Noah completamente asqueado. 

—Muy bien con eso. Pero aun no nos pruebas nada sobre la inocencia de los Tennyson, solo nos haces mención de un absurdo lío de pantalones que ocurrió en el pasado —respondió Rook con fastidio. 

 

Rex solamente pudo negar ante la necedad de su amigo, mientras que Noah y César lo mal miraban, aguantándose las ganas de matarlo. 

 

—Por un momento quise venir con ustedes, apenas encontré estas carpetas, sin embargo, me abstuve precisamente por lo necio y patéticamente testarudo que eres Rook Blonko —dijo César con fastidio—. Así que seguí investigando más sobre Richard Morningstar. Y las investigaciones y pistas me llevaron directamente al Consorcio.

 

Supo de primera instancia que Rex y Noah no solo se sorprendieron, también liberaron un aroma nervioso de manera inconsciente. 

Rook por su parte, terminó por dejar de lado su expresión llena de fastidio. Él ya había oído algo sobre el “Consorcio”, y aunque no hubiera sido demasiado, sabía que ese grupo hacía de las suyas en el planeta tierra y que el grupo de Providencia -grupo al que pertenecían Rex y Noah-, hacían lo posible por controlar la situación.

 

— ¿Por qué iría con el Consorcio? —cuestionó Noah completamente nervioso.

—Eso no es cosa de hace mucho. De hecho, Richard Morningstar en su juventud fue un hombre sumamente adinerado, y aunque aparentemente no necesitaba trabajar, el hombre se unió a los Plomeros. Una vez que fue despedido, Morningstar aprovecho y siguió haciéndose de dinero y poder, algo que sin duda aprovechó demasiado —de manera inmediata les dio a los tres las carpetas que mostraban todos los movimientos que Morningstar había hecho en ese entonces—. Rex, tú recordarás mejor que nadie sobre los problemas monetarios que el Consorcio y Providencia estaban teniendo.

—Rex asintió—. Lo recuerdo. Eso sucedió unos dos años antes de todo lo ocurrido con los Plomeros. Aunque de un momento a otro, tanto Blanco como Negro lograron conseguir una cuantiosa suma de dinero para regresar a la cima lo que una vez fueron el Consorcio y Providencia, aunque nunca se supo cómo lo lograron.

—Buena memoria hermanito —aduló César—. Y si, precisamente mi investigación me llevó directamente a ese pasado, así que adivinen de donde salió todo ese dinero.

— ¿Richard Morningstar financio al Consorcio y a Providencia? —inquirió Noah sin creerlo.

—Y no solo eso cuñadito —dijo César—. Ustedes dos saben de primera mano que Negro y el Consorcio no estaban del todo de acuerdo con seguir cooperando con Providencia, y justo un año después de la caída de los Plomeros, Negro trato de convencer a Blanco para que se les uniera, llevando así la guerra entre el Consorcio y Providencia —explicó con seriedad, mientras sacaba una memoria de su bolsillo—. Esto es sumamente importante chicos. Richard Morningstar hizo un trato secreto con Negro y el Consorcio, y en dicho trato incluía la caída de los Plomeros dejando como único culpable a Maxwell Tennyson. Patelliday lo descubrió justo en el momento en que tenían una reunión y terminó por ser asesinado —de manera rápida, sacó de su maleta una pequeña laptop, donde inserto la memoria—. Richard Morningstar no solo ayudo al Consorcio, él se volvió parte importante del mismo. Y no solo eso, utilizo la ayuda del Consorcio para tratar de obtener a Verdona Tennyson, pero…

—Su plan salió mal. Eso fue lo que terminó con el planeta Anodyne, ¿no es así? —Noah terminó por preguntar con nerviosismo.

—César asintió—. Saben bien que con dinero, poder y tecnología se pueden hacer demasiadas cosas, solo hay que mirar este planeta. Con el basto dinero de Richard Morningstar y sus conocimientos en tecnología y el universo, el Consorcio obtuvo un gran aliado y los Plomeros y Providencia unos potentes enemigos. Lo que supuestamente Maxwell Tennyson había hecho para atentar con los tratados de paz, fue eliminar explícitamente a líderes y familias de los más influyentes planetas en sus tratados, sin embargo, el día que supuestamente ocurrió todo eso, el señor Tennyson se encontraba fuera del planeta tierra, junto con su esposa para visitar familiares cercanos de la señora Tennyson.

—Esto quiere decir que Maxwell Tennyson ni siquiera estaba en el planeta cuando todo ocurrió —murmuró Noah.

—Sé que puede sonar absurdo o demasiado apresurado, pero es todo verdad. Richard Morningstar estuvo por años maquinando su venganza en contra de Maxwell Tennyson, y lo logró. Culpó al señor Tennyson, terminó por causar una guerra universal masiva y se unió al Consorcio, todo eso para lograr obtener lo que supuestamente era de su propiedad, pero en su desesperado intento, terminó por destruir el planeta Anodyne, junto con todos los Anoditas, entre ellos, la señora Verdona Tennyson y su nieta Gwendolyn.

 

Noah se llevó ambas manos a la boca, mientras que Rex miraba los datos que se mostraban en la laptop, todo con una palpable preocupación. 

Rook por su parte, no podía creer del todo en las palabras de César Salazar, ni las pruebas que sus ojos veían. Es decir, aun si eso era verdad, muchos vieron a Maxwell Tennyson asesinar a sangre fría a los líderes de esos planetas. Tennyson había aprovechado que hubo una reunión con los Plomeros para llevar a cabo su plan, y por esa misma razón no terminaba de creer en lo que el hermano de Rex decía. 

 

—Puede que esas pruebas no estén del todo bien. En su mayoría, vieron a Maxwell Tennyson asesinar a esos Alienígenas —mencionó severo.

—A eso iba Rook Blonko —respondió—. La familia Tennyson no era del todo querida, al menos no los Tennyson que formaban parte de los Plomeros. De hecho, Richard aprovechó justamente que una familia de la especie Linopo o mejor conocida como Desperdicio, odiaba a los Plomeros Tennyson, debido a que su hija terminó por casarse justamente con  Joel Tennyson, sobrino de Maxwell Tennyson y un Plomero.

—Los Linopos pueden tomar la forma de cualquier ser que conozcan —mencionó Noah con reproche hacia Rook.

—Y si ese grupo de Linopos odiaba a los Tennyson, eso significa que fueron ellos junto con Morningstar los causantes de todo esto —dijo Rex con sorpresa.

—Cesar asintió—. Todo fue un plan demasiado elaborado. Hubo demasiados afectados por eso, y los más afectados fueron los Tennyson, mientras que Richard Morningstar, la familia Mann y el Consorcio terminaron por obtener demasiado poder, tanto en el planeta tierra como fuera de este, y a su vez, otros terminaron por aprovecharse de eso, entre ellos Van Kleiss y los mutantes.

—Rex terminó por revolver su cabello con exasperación—. ¿Alguien más sabe esto? —pregunto preocupado.

—La doctora Holiday y el agente Seis tuvieron que enterarse cuando llegue demasiado herido a la base. De hecho, ni debería estar aquí, pero tenía prisa para contarles esto —confesó con una nerviosa sonrisa.

—Rex lo miró con preocupación—. ¿Estás herido? —le pregunto preocupado. 

—Obviamente que toda esta información no la iba a conseguir sin salir ileso —respondió como si nada, aunque terminó por tomar asiento y tratar de mantenerse firme para no preocupar a su cuñado y hacer enojar a su hermano. 

— ¡Diablos César! —exclamó Noah—. ¿Tan mal te viste?... 

—Bueno, no podía permitir que el Omega que se arriesgó para conseguir esta información saliera herido —mencionó—. La verdad, aun con todo lo que pase por conseguir todo esto, me alegro de haber aceptado, pues si no, no me hubiera encontrado de nueva cuenta con ese Omega. 

 

Noah y Rex se miraron entre ellos con extrañeza. No entendían del todo a lo que César se refería, pero tal parecía que ese misterioso Omega era sumamente especial, para hacer que el Salazar mayor pusiera esa expresión llena alivio. 

Rook por su parte, leía una y otra vez los datos que se mostraban en la laptop, sintiendo un abrumador vacío en su interior. Ben le había dicho que su abuelo era inocente y él no le creyó y mucho menos se tomó la molestia de escucharlo. 

Incluso la Omega que en su niñez y adolescencia fue su primer amor le había dicho que debía dejar de lado su odio y  rencor hacia Maxwell Tennyson o algún día terminaría por estrellarse. Tal parecía que Rayonna  había tenido razón, y ese día había llegado de una manera en la que jamás se hubiera esperado.

 

—Debo encontrar a Ben —murmuró preocupado. 

—Noah lanzó una risotada llena de ironía—. ¿Ahora si piensas en ir a buscarlo? —preguntó con desdén.

 

Los hermanos Salazar miraron al único Omega en el lugar, uno con preocupación y el otro de una manera comprensiva.

El Revonnahgander solamente atino a mordisquear su labio con nerviosismo. Sabía perfectamente que tenía bien merecidas las palabras llenas de odio del rubio, y ahora no estaba dispuesto a defenderse. 

Sin proponérselo siquiera, comenzó a mirar con insistencia el vientre del Omega, y aunque sabía que Noah estaba hablando -específicamente lanzándole toda clase de insultos-, había comenzado a escuchar solamente ecos incomprensibles. Completamente desesperado, se llevó ambas manos al rostro, al pensar que si hubiera hecho caso a Ben, tal vez y solo tal vez, el Omega ya estaría esperando un hijo suyo.

 

—Supongo que fui un completo idiota. Al menos tú y Rex podrán formar su propia familia —con dolor mencionó aquello, olvidándose por completo que muy posiblemente esa era la sorpresa que Noah iba a darle a su amigo ese día.

—Rex lo miró sin entender del todo—. ¿Qué quieres decir Rook? —cuestionó.

—Lo siento, arruine la sorpresa —se disculpó apenado—. Cuando entre a su habitación, sin querer me encontré con una prueba de embarazo. Debo decir felicidades y disculparme, más que nada, porque debo encontrar a Ben y suplicar perdón de ser necesario.

 

Rex se sintió ofendido, al saber que muy posiblemente Rook había esculcado entre sus cosas para saber la razón exacta del enojo de Noah, pero a su vez se sintió eufórico al creer que muy pronto sería padre. Sin embargo, al ver la mirada llena de odio que Noah aún tenía, supo que algo andaba mal.

 

—Lo lamento Rex, pero no estoy embarazado —dijo con pena, sin dejar de lado su mirada llena de odio hacia ese metiche—. Esa prueba fue hecha hace cuatro meses, justo unos minutos antes de que Rook Blonko arruinara su relación con Ben y perdiera una gran oportunidad.

—Rook lo miró sin creer lo que escuchaba—. ¿Qué quieres decir Noah? —preguntó en susurro.

—Noah sonrió sin sentir alegría—. Tu querías saber  de la oportunidad que te perdiste, ¿no?, bueno Rook, es hora de que la sepas. Ben se había hecho dos pruebas, una con sus poderes y otra con la prueba que te encontraste, así que si, Ben estaba embarazado cuando tu lo rechazaste, y la razón por la que te detesto es simple, rechazaste a tu Omega marcado cuando más te necesitaba, y aun si hubieras sabido de su embarazo, seguramente le hubiera ido peor si se quedaba, así que espero que no logres encontrarlo, él seguramente está mucho mejor sin ti.

—No puede ser —Rook vio desesperado al Omega, pero Noah simplemente golpeo su rostro hasta hacerlo tambalear.

— ¡Por dios Noah!, sabias todo eso y no se lo dijiste —recriminó Rex sin creerlo.

—Obviamente no iba a hacerlo, si él mismo dio a entender que cualquier Tennyson no valía nada, eso incluía a su propio hijo. Además, es muy probable que ese bebé sea la última esperanza para traer de vuelta a los Anoditas, ¿crees que iba a dejar que un idiota Alfa los pusiera en riesgo?...

—Pero eso era entre ellos Noah. Ellos debían resolverlo como pareja —de manera testaruda, mencionó aquello.

—Lo siento, pero no. Tú viste como se comportó cuando César comenzó a mostrarnos las pruebas. Rook Blonko es alguien capaz de hacer daño si no confía, y vaya que lo hizo, porque un Omega recién enlazado es demasiado vulnerable, y si a eso le sumamos un embarazo, es algo delicado. Ben confió nuevamente en alguien y terminó herido, así que si él y su hijo están bien, lo mejor es que se mantengan alejados de este intento de Alfa.

—Rook negó con prisa—. ¡Debo encontrarlos! —dijo con desesperación. Pero supo de inmediato, que aun si Noah sabía el paradero de Ben, no se lo diría jamás.

 

Rook no espero nada más. Ahora que sabía la verdad, estaba dispuesto a buscar por todo el universo y poder encontrar a Ben y a su hijo. Así que con toda la desesperación y culpa que todo su ser se cargaba, salió con prisa del departamento de su amigo.

Noah por su parte, solamente se sentó de brazos cruzados al sentir la mirada llena de reproche que su pareja le enviaba. Sin embargo, fue César quien terminó por captar la atención de ambos.

 

—Noah, aunque creas que lo mejor es no encontrar a Ben, este equivocado —mencionó—. Ustedes me dijeron que los Morningstar habían desaparecido justo después de que Ben se hubiera ido, y eso me temo que es algo malo.

— ¿A qué te refieres César? —cuestionó Noah con preocupación.

—A que Richard Morningstar educó a su nieto de la misma manera. Michael o Mike Morningstar cree que debe vincularse con un Anodita, y el último Anodita y para su buena suerte, un Omega, es…

—Ben —murmuró Noah.

—César asintió—. Seguramente han comenzado a moverse para encontrarlo y si es así, tu amigo y el bebé que espera, están en peligro.

 

Noah y Rex entendieron eso a la perfección, y aunque Noah no lo quisiera, debían encontrar a Ben y al señor Max, antes de que los Morningstar lo hicieran.

 

—Debemos evitar que eso ocurra —murmuró Nixon con preocupación.

 

∞•*•♥•*•∞

 

—Pierce, ¿estás seguro que lograremos dar con el señor Tennyson y Ben en Omnitrix?...

 

El actual líder de aquel grupo que en un pasado no tan lejano, fue conocido como el de los niños Amalgama, solamente atino a asentir en silencio.

Desde lo sucedido con el planeta Anodyne y la repentina muerte de la señora Tennyson y la desaparición de su antiguo líder y la Omega que este había elegido, él había tomado el mando y habían comenzado a buscar con desesperación al resto de lo que se había vuelto parte de su manada.

Años habían pasado desde entonces, y por supuesto que ninguno desperdicio ni un solo segundo. Todos y cada uno entrenaron y buscaron, pero no habían logrado dar con la ubicación de su manada. Aunque claro, no habían tantas cosas malas en su vida, puesto que habían hecho varias cosas de las que no se arrepentían, entre ellas, detener a traficantes de especies, y aunque la mayoría de los Alienígenas rescatados, decidieron volver a casa por su cuenta, hubo una sola chica que decidió unírseles por la simple razón de haber encontrado a su destinado entre ellos.

Con palabras simples, Helen hacía mención de lo afortunado que su hermano mayor había sido, especialmente, porque Rayonna no era de las que odiaban a los Tennyson, así que fue demasiado sencillo explicarle la situación y su misión desesperada para encontrar al resto de la manada.

 

— ¿Y si no están? —cuestionó Argit.

 

Y claro que aquello era una posibilidad, sin embargo, aprovecharían para investigar y de paso llenarse de provisiones y combustible suficiente para seguir a su otro destino. 

Pierce tenía en cuenta que Ben y el señor Max debían mantenerse en movimiento, así que en dado caso de no haber señales de ellos en Omnitrix, tendrían que ir directamente al punto que el señor Max siempre mencionaba, aunque el planeta Galvan Pime era demasiado difícil de encontrar y más aún, de llegar hasta él.

 

—Si no están, solamente tomaremos lo necesario para continuar el viaje y seguiremos en dos días nuestro camino.

—Helen sonrió encantada al sentir como cierta personita jalaba su cola—. Al parecer a mi sobrinito le parece la idea.

 

Y allí estaba una de las razones para que los Amalgama siguieron batallando y haciendo justicia en caso de ser necesario.

Si aquel día, no hubieran intervenido, era muy posible que el pequeño Casey Wheels jamás hubiera nacido. 

Ese pequeño revoltoso de apenas un año, había demostrado que si quería algo, simplemente lo conseguía, en este caso, llegar gateando hacia sus tíos y padre para obtener toda la atención que se negaban a darle desde hacía un buen rato.

 

—Lo lamento, solamente me descuide un segundo en lo que preparaba su biberón —mencionó apenada la Omega.

—Descuida, es obvio que quería que papá le hiciera caso —respondió Pierce con una imperceptible sonrisa.

 

Tanto Manny como Helen decidieron darles su espacio, y claro, llevarse consigo a cierto Beta chismoso. Sin embargo, los tres pudieron ver como Alan desaparecía.

Ellos sabían que el más interesado por encontrar a Ben, era Alan. Incluso en su momento, sintieron pena, pues Ben se había enamorado de Kevin, y aunque parecía que su líder sentía lo mismo, ese enredo amoroso, terminó por dejar a dos con el corazón roto.

Por ahora, se concentrarían en encontrar a los Tennyson, y esperaban que con el tiempo, las cosas mejoraran.

 

∞•*•♥•*•∞

 

Ya habían pasado seis largos meses desde que habían comenzado a huir nuevamente.

Ben en verdad se arrepentía de haber confiado tan tontamente en el amor, por esa misma razón había decidido cerrar su corazón y solamente dedicarse a amar a su abuelo y a su pequeño que prontamente nacería.

A duras penas, su pobre abuelo había conseguido ropa que le quedara y lo más importante, alimentos necesarios. 

Lo que más lo molestaba en cierta manera, era que a su pequeño bribón se le antojaban todas las extravagantes comidas que su abuelo cocinaba, y aunque en otro momento vomitaría de tan solo pensar en que debía comer esas cosas, con su hijo en su vientre, esas comidas se le hacían las más deliciosas.

 

—Te lo digo abuelo, este bebé tendrá un gran parecido a ti. Especialmente en lo que al estómago se refiere —mencionó asqueado.

—Bueno, yo espero que se parezca a ti, aunque un buen platillo con hongos y tentáculos de vez en cuando, no le hace daño a nadie —comentó con burla, a sabiendas que eso solamente molestaba a su nieto.

 

Ben iba a replicar en contra, cuando se sintió una fuerte turbulencia que logró tirar varias cosas. Preocupado, miro a su abuelo, pero Max solamente se levantó para tratar de estabilizar la nave.

 

—Esta es la tercera vez en la semana abuelo —mencionó con preocupación —. ¿Crees que podamos llegar a Galvan Prime pronto? —preguntó, mientras sobaba su abultado vientre.

—Max sonrió apenas—. Te aseguro que nada malo pasara.

 

Sin embargo, otro terrible temblor comenzó en la nave, y aunque por un momento, Max pensó que no sucedería nada, la nave comenzó a caer hacía un planeta de colores ambarinos. 

Por más que el Alfa Tennyson intento tratar de maniobrar la nave, para evitar mayores daños, la nave ya no respondía como era debido. Así que hizo lo que tenía que hacer. 

Como pudo, tomó entre sus manos la última piedra que su esposa había dejado y abrazó a su nieto. La prioridad de Max era proteger a Ben y al bebé.

 

∞•*•♥•*•∞

 

— ¡Hay problemas Rook Da! —

 

El actual líder de los Revonnahgander endureció su mirada al oír aquello. De manera rápida, hizo una señal con sus manos, y los niños y Omegas comenzaron a correr en dirección al escondite que tenían en caso de que problemas acecharan a su planeta.

Tanto Rook Da, como un considerable grupo de Alfas comenzaron a correr en la dirección de los problemas que habían llegado. Aunque claro, nadie noto al niño que salió de su escondite y miraba con preocupación la dirección donde su padre se había ido.

 

—Debo avisarle a Blonko…

 

Si bien, antes de todo lo ocurrido con los Plomeros y Maxwell Tennyson, los Revonnahganders no necesitaban de la tecnología o armamentos, eso quedó atrás cuando comenzaron a atacarlos y se llevaron a varios de ellos.

Por esa misma razón, el más pequeño de los Rooks había decidido hacer uso del aparato de comunicación que poseían y avisarle a su hermano en caso de que los problemas fueran algo demasiado para ellos.

Solamente esperaba que su hermano respondiera y que llegará lo más pronto posible.

 

∞•*•♥•*•∞

 

—Amigo, creo que debes tomar un descanso breve —mencionó Rex con preocupación.

 

Desde el día que César había llegado a revelar la verdad acerca del asunto Tennyson, habían pasado dos meses más, así que en total, Ben ya contaría con seis meses de gestación, y claro, eso no ayudaba a que Rook se tranquilizara, menos con la revelación de que Morningstar también lo estaba buscando.

En cuanto a Rex y Noah, en lugar de mantenerse unidos, solo habían comenzado a discutir más seguido, pues Rex no quería entender las razones de Noah para ocultar tantas cosas, cuando en un pasado, los secretos casi los separan para siempre.

 

—No puedo calmarme Rex, no cuando ese maldito loco lo busca también —respondió desesperado.

 

Y aunque a Rook le hubiera encantado seguir con su desesperada búsqueda, y por supuesto, hacer caso omiso a las sugerencias de Rex, su comunicador comenzó a sonar, al parecer era un mensaje de su hermano menor, y era un mensaje de emergencia.

Ben debía esperar un poco más, pues problemas acechaban a su planeta.

 

Continuará

Notas finales:

Y eso ha sido todo con este capítulo, espero y les haya gustado. Y si es así y me lo hacen saber con sus hermosos comentarios, se los agradeceré muchísimo :3

Al fin se supo la verdad detrás de todo ese embrollo y Rook ahora sí, está más que desesperado…

Pero bueno, les dejo los spoilers correspondientes del siguiente capítulo…

 

.- Los Revonnahganders demuestran su odio y rencor…

.- Los chicos Amalgama llegan a Revonnah...

.- Rook llega demasiado tarde a su planeta…

.- El bebé ya va a nacer…

Todo eso y más en “El Lazo Que Nos Une”

 

En fin, nos leemos pronto

Chau chau (^3-)/


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