Una mujer de cabello largo negro, alta de pecho plano y con aura intimidante, se encontraba vigilando a un chico pequeño de lentes que no paraba de hablar con uno de sus compañeros; detrás de una columna
Los estudiantes al reconocerla la evitaban o en todo caso fingían que no estaba ahí pues sabían que lo mejor era no meterse con ella
Sawaka Tennoji era una mujer de armas tomar y eso, los estudiantes lo sabían muy bien
La mujer miraba fijamente al chico de anteojos, que no dejaba su charla sobre quien sabe que cosa con un estudiante que poco tenía que ver con la armada Handa
Tennoji se mordió la mano para evitar gritar de frustración. Llevaba todo el día esperando por una oportunidad para acercarse y cuando creía que por fin la tenía un estudiante llego y le gano
El chico con el que ella esperaba hablar era ni más ni menos que Aizawa Junichi. Un estudiante dedicado, responsable, estudioso, un cerebrito en pocas palabras pero, lo que a ella le importaba, es que pertenecía a la Armada Handa
Por lo que le habían contado, el chico se acerco a Handa después de haber sido derrotado por él en las votaciones para saber quien sería el representante de su clase. Al parecer quedo prendado de su forma respetuosa de hacer las cosas así como de su sentido de responsabilidad para con el grupo
Y bueno, ella no podía culparlo por algo así. Handa era digno de elogios después de todo
Vio que el chico retiraba sus zapatos del casillero, ya sin señales del otro joven, decidió que esa sería su oportunidad
-Aizawa Junichi- le llamo apenas se acerco. El chico la miro por un momento antes de acomodarse los lentes
-Buenos días Presidenta- saludo firme, sin signos de miedo como los demás estudiantes masculinos
-Quiero hablar contigo- fue seria y directa
-¿Mhn? ¿puedo preguntar de qué se trata?- el chico era listo y precavido, tal como le habían dicho
-Handa Sei- respondió altanera y el chico de lentes la miro con seriedad
-¿Qué hay con Handa kun?-
-Necesito saber unas cuantas cosas sobre él-
-Lo lamento, no doy información personal sobre Handa kun- lo miro sorprendida, la mujer no esperaba que descubriera tan pronto sus intenciones pero de inmediato se recompuso
-No he dicho que quiera información personal sobre él-
-Entonces no hay razón para que estemos hablando sobre Handa kun- le miro molesta
-Tenemos que hablar sobre él-
-No- respondió seguro y eso la fastidio, ningún chico le había negado nada, sin contar a Handa -si es algo relacionado con los deberes del representante de clase entonces podemos hablar, sino no-
-¿El representante de tu clase, no es Handa Sei?-
-Lo es, sin embargo, yo me encargo del trabajo pesado para que Handa kun pueda encargarse de las actividades diarias de las que esta a cargo- respondió con una admiración radiante en su mirada
-Handa kun es perfecto pero el tiempo del que dispone es poco, por eso aunque sé que es poca, le brindo mi ayuda- sonrió orgulloso, dio media vuelta y se retiro
Dejando a la Presidenta con la palabra en la boca
…
Un chico de coleta se encontraba hablando con un par de chicas que le hablaban con notable emoción, el chico por otro lado, estaba sereno ante sus notables intentos de coqueteo. Era fácil adivinar que sutilmente les tomaba poca importancia, las rechazaba o las ignoraba
Nikaido Reo era el nombre del segundo objetivo de Sawaka Tennoji. Quien se encontraba molesta por fallar en poner de su lado a Aizawa Junichi
Sabía por parte de su informante que al igual que Aizawa, Nikaido había sido derrotado por Handa en el mundo del espectáculo. Al parecer la compañía de modelaje de Nikaido quería reemplazarlo con Handa, era un chico atractivo sin duda y, después de que Handa se negara le dio a entender a Reo que era alguien valioso y no debía permitir que lo dejaran de lado
Gracias a ese suceso, Nikaido Reo decidió vivir su vida como estudiante renunciando a su trabajo como modelo y poco después formar parte de la Armada Handa
Escondida detrás de una pared miro detenidamente como una por una de las chicas se iban retirando para ver como llegaba un estudiante que se le hacía vagamente familiar a intercambiar unas cuantas palabras con Nikaido, aumentando la irritación de la Presidenta. No tardo mucho en hablar con él pues segundos después se había retirado y al ver que el apuesto chico iba a seguirlo decidió acercarse
-Nikaido Reo- hablo con una voz que fallo en ser amable pero consiguiendo la atención del ex modelo
-Presidenta- saludo carismático, sin esa aura de seriedad del chico cerebrito ni la de miedo como los otros estudiantes. Era el segundo hombre en hablarle sin temblar, mentira, era el tercero
-Me gustaría hablar de unas cosas contigo- el chico sonrió confiado
-¿Tiene algo que ver con Handa kun?- se cruzo de brazos
-¡¿Q-que?! ¡n-no! ¿c-como…- respiro hondo y trago grueso -¿Cómo lo sabes?- admitió en un murmullo y terriblemente avergonzada
-Es increíble la cantidad de chicas que se acercan a mí con esa intención, Presidenta- seguía con esa sonrisa -y veo que usted no es la excepción- agrego confiado
-Si ya sabes por lo que he venido, dímelo-
-Lo lamento Presidenta- hablo Nikaido negando varias veces con la cabeza -pero como les dije a las otras chicas, no puedo hacer eso-
-¿Por qué no? Sólo necesitas darme lo que necesito Nikaido Reo- intento ser amenazante pero el chico se metió las manos a los bolsillos y dio media vuelta
-Nos vemos, Presidenta- le dio una última sonrisa antes de retirarse
La Presidenta con un enojo bullendo en su interior no pudo hacer mas que observar al ex modelo retirarse por el pasillo
...
Obtener al primer y segundo objetivo había fallado, era hora de ir por el tercer y más peligroso de todos los objetivos
Mirando por la entrada de un salón vacío se encontró con un chico alto de cabello rubio, grande en masa muscular y que aparentaba la edad de un chico de 21 más que de un chico de secundaria
Parecía estar concentrado en mirar por la ventana y admirar el paisaje, o lo que sea que estuviera viendo
No la extraño encontrarlo solo, por el contrario se lo esperaba y siendo sincera consigo misma, aquello le beneficiaba
Tsutsui Akane, ese era el nombre del ex pandillero que había dejado los estudios para convertirse en un maleante y que había vuelto a la escuela luego de que Handa Sei le hiciera una visita. No estaba claro que era lo que había sucedido pero al parecer Handa se gano el respeto de Tsutsui después de ayudarlo con un grupo de pandilleros, quedo maravillado con su sentido de justicia y al parecer también admiro la forma en la que los pandilleros huyeron al oír su nombre. O eso era lo que le habían contado
-Tsutsui Akane- hablo la Presidenta entrando al salón sin molestarse en pedir permiso para entrar, pues ni maestro había
-¡Ah! ¿Quién diablos eres tú?- pregunto a la defensiva apenas vio a la chica acercarse
-Soy la Presidenta del Consejo estudiantil- respondió Sawaki aparentando tranquilidad pero con una vena saltando su frente indicando su enojo
-Ah, la loca- hablo Tsutsui más calmado pero empeorando el humor de la Presidenta quien intento contenerse
-Quiero hablar contigo sobre Handa Sei- el chico la miro serio
-No- respondió para después seguir mirando por la ventana
-Pero-
-No-
-Al menos escúchame- la miro y le dio a entender que podía hablar -dime lo que sepas de Handa Sei-
-No- y la volvió a ignorar
-¡¿Cómo te atreves?! ¡Soy Sawaka Tennoji, la Presidenta del Consejo Estudiantil y te exijo que me digas lo que necesito saber!- finalmente había explotado en furia, su paciencia era limitada y ellos la habían sobrepasado
Fue entonces que el hombre de cabello rubio con negro se levanto de su asiento, dejando a la vista la notable altura de la que era poseedor. Miro por unos segundos detrás de su espalda y después la miro a ella desde arriba, con una voz fuerte sin llegar a gritarle hablo
-No- su voz que contenía una furia contenida hizo temblar a la mujer que le miraba desde abajo -personas como tú no merecen saber absolutamente nada sobre Handa kun- con seriedad aseguro mientras volvió a tomar asiento y se dispuso a ignorarla mirando una vez más por la ventana
Esta vez la Presidenta salió como pudo del salón controlando de milagro el temblor en sus pies. Creyó chocar con un estudiante en la entrada del salón con el que vagamente se disculpo, si contesto o no a su disculpa ella estaba demasiado ocupada reponiéndose del susto
…
Sawaki suspiro frustrada. Su plan de tener a la Armada Handa de su lado se había estropeado y todo porque ninguno de ellos quiso cooperar con ella
¿Qué había de malo en ella?
De seguro ellos eran los culpables de que su amor por Handa no prosperara, estaba segura que ellos le impedían declararle su amor
La chica iba lamentándose por el pasillo cuando los vio. A sus tres objetivos. Juntos
Apenas los diviso no dudo en correr a esconderse detrás de unos pilares para mirarlos con detenimiento
Ahí estaban los tres, sí, pero no estaban solos. Charlaban con un estudiante y, por la forma animada en la que lo hacían parecía ser más que un compañero de clase
Un sentimiento de remembranza se instalo en la chica e intento hacer memoria pues el chico se le hacía conocido pero no recordaba de donde
Fue entonces que vinieron a su mente los recuerdos del día. Cuando hablo con Aizawa, cuando espero a Nikaido y enfrento a Tsutsui, como si hubiese encontrado la respuesta de una pregunta sumamente difícil, su mente se aclaro
Ese chico había estado con ellos tres y era imposible pensar que sólo era coincidencia al observarlos hablar con tanta confianza. Entonces se formulo una pregunta
¿Ese chico también formara parte de la Armada Handa?
Y luego desecho la idea tan rápido como llego, burlándose de sus propios pensamientos. Ella ya había confirmado que toda información que le dieran fuera verídica y si sólo mencionaron a esos tres es porque solo esos tres pertenecen a la Armada Handa
Dio un largo suspiro para de inmediato ponerse seria. Ninguno de ellos había querido ayudarla e incluso se negaron a escucharla a pesar de saber quien era ella
Pues bien, no esperaría una ayuda que no le sería dada. Ella misma se encargaría de adueñarse del corazón de su enamorado
-Pronto serás mío Handa kun…- susurro observando como los cuatro chicos salían de la escuela
…
-Achu- estornudo un chico de ojos y cabello negro de apariencia común pero que inevitablemente resaltaba y atraía la atención de sus compañeros
-¿Estas bien?- pregunto un chico rubio de anteojos que iba caminando a su lado y quien presumía ser su mejor amigo.
-Sí, es sólo un estornudo- habló Handa pues se sentía bastante bien
-¿Seguro? Es la quinta vez que estornudas en el día- le dijo preocupado su amigo aunque su rostro cambio a uno divertido -la gente debe estar hablando de ti- supo que obtuvo lo que quería cuando su compañero volteo a verlo horrorizado
-No, no creo- intento convencerse más a sí mismo que a su amigo -puede que si se trate de un resfriado- razonó muy poco convencido
-Como tu digas- Kawafuji sonrió burlándose en silencio de la paranoia de su amigo lo que restaba del camino