Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Accidentalmente por Misaky0

[Reviews - 14]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Cap 2 Primera Cita

 

    Bueno por lo menos esquive a mis amigos en el receso, les dije que Kaiba solo quería decirme de una recado de Mokuba que no era nada serio, noté que Tristan no se quedó muy conforme con eso, pero por milagro no preguntó más, todo por la estúpida bromita del tarado ese infeliz del ricachón, ¿en qué demonios estaba pensando cuando dijo eso frente a mi amigo?  

Lo que ocurrió después fue lo más raro que me ha pasado últimamente, mientras estábamos en clase, la maestra de inglés nos dejó hacer un ejercicio mientras salía del salón, algunos comenzaron hablar, pero como a mí me tiene en su “zona” como yo la llamo, seguro me preguntaría por lo que decidí terminar mi ejercicio antes de que regresara; mis amigos estaban distraídos y yo en lo mío cuando sentí una mirada sobre mí que venía desde el frente, voltee para decirle unas cuantas palabras a ese mirón, pero me quedé de piedra al descubrir al autor de crimen.

Resulta que mi “noviecito” estaba recargado en su escritorio con una mano sobre la barbilla mirándome por el rabillo de sus ojos y escudriñándome totalmente, me sentí enrojecer, pero él no movió ni un musculo, ni siquiera intentó disimular un poco lo que estaba haciendo a pesar de verse descubierto por mí.   “que”- le dije para que me leyera los labios, y el continuó con la conversación de igual manera.  

“nada”- me dijo, ¿que se creía?, que yo supiera él no me miraba antes ni de chiste, menos de esa manera tan, no sé, minuciosa.   “¿porque me estas mirando?” – le reclamé de algún modo.  

“por nada en especial”- me respondió, y yo estaba que me saltaba encima de él, o no, mejor que corría de este mundo paralelo a donde había caído; volteo a los lados a asegurarse de que nadie nos estaba mirando como creíamos y yo lo seguí corroborando que efectivamente nadie nos prestaba atención- “¿salimos hoy?”- me preguntó y yo casi me ahogo ¿había leído mal su boca?  

“que dijiste”- tenía que corroborar, ¡era demasiado extraño que me estuviera pasando!- “¿quieres salir hoy… en una cita?”- lo más claramente posible dije aquello y recalque la última palabra. Él me asintió. Pueden creerlo, me asintió como si nada, y luego lo recordé, ¡somos novios maldita sea! Eso era perfectamente normal, pero que él lo pidiera era lo raro, suponiendo que él que se confesó fui yo…  

“¿no quieres?”- me dijo, y negué con la cabeza, se supone que el encantado debería ser yo por eso me apresure a completar mi negación.  

“sí, quiero”- así que sonrió, al parecer mi negación del principio quedó como un “no es que no quiera (fue por la sorpresa), si quiero ir”, suspiré, esto debía llegar a este extremo, tal vez con esta cita nos demos cuenta de que nuestra relación esta por demás subestimada…  

“te recojo a las ocho en tu casa”- me dijo dando por terminada la propuesta, y entonces miró al frente de nuevo.  

Después de eso me fue imposible concentrarme, ¿y quién podría en mi condición? Iba a tener una cita esta noche con mi peor enemigo, era tan bizarro como haber descubierto a Mokuba pasándose de la raya con su pariente. Mis amigos tuvieron paciencia y no preguntaron mucho, me fui a mi trabajo al salir de clases y salí a las 6, corrí a casa a prepararme mentalmente para mi ¡CITA! Si, es tan malo como se oye, estaba temblando, ¿que si de pronto este raro y nuevo Kaiba intentaba besarme? ¿o pasarse de la raya también? ¿o si me golpea? O…miles de posibilidades que evitaré enumerar me pasaban por la cabeza, además ¿a dónde íbamos a ir? ¿Qué demonios me iba a poner?  

Okey, después de la ultima hora de estar pensando en cosas tan adolescentes decidí que debía calmarme, me estaba comportando por demás como tonto, de por si estaba haciendo muchas cosas que lo afirmaban, era peor sentir que de verdad me convertía en el monstruo de la estupidez viviente. Opte por ser yo mismo y me puse jeans y playera, punto, si a Kaiba no le gustaba, se podía ir mucho de vuelta a su casa. Puntualmente llegó a las ocho y me sorprendió verlo, como yo, con jeans y una playera, además traía una gorra azul y una chaqueta nada ostentosa, demasiado  ordinario para ser el engreído que era y para ser esta su primera cita conmigo.  

- wow- no pude evitarlo y le hice notar- estás demasiado ordinario para ser tú- le dije y al ver que estaba fresco saque mi chaqueta de mezclilla para abrigarme. Sonrió de lado como ya estaba haciéndome a la idea que así me respondería siempre.   - es un secreto nuestra relación, creo que si vengo un traje de inmediato notaran quien soy, así, con dificultad se fijarían en mi- dijo, pero para mí estaba muy equivocado, tal vez si se tardarían en vincularlo con su verdadera identidad, pero sí que se fijarían en el, está de más que lo diga, pero no está de mal ver… - vamos, conozco un lugar que deduzco va a agradarte.  

Se dio media vuelta y los seguí dándome cuenta de que nuestro trasporte era su perfecta y cromada motocicleta deportiva color azul estándar de cinco velocidades, extrañamente no se veía nueva como uno esperaría por ser él el Ceo de la KC, era como una moto normal de uso cotidiano, pero si muy bonita, seguro esta sería otra cosa que a Tristan le gustaría de él; me ofreció un casco extra y subimos, realmente me sentía como una adolescente en una cita normal, y empezaba a pensar que esto no era realmente malo. Al llegar al sitió me percate de que tenía toda la finta de ser un lugar de mi agrado, era un pequeño restaurante con una temática musical muy al estilo bohemio, tenía un escenario de karaoke y varias mesas, era algo oscuro el ambiente pero era de auto servicio, más que restaurante parecía bar, excepto por las mesas. Llegamos a la recepción así como en los restaurantes de comida rápida, donde estaba la caja y arriba de nosotros el menú.  

- ¿Qué es lo que quieres pedir?- me preguntó mi acompañante, miré el menú, definitivamente era el cielo, había ensaladas, pizzas, sushi, papas fritas, bebidas no y si alcohólicas, tacos, hot dogs, espagueti, en fin, era una lista interminable de mis comidas favoritas. Por un momento pensé que si era un parque de diversiones y estaba comprando en uno de los puestos de ahí, me decidí en una hamburguesa con papas y queso extra acompañado por una soda, Kaiba para mi sorpresa ordeno una también pero con otras variantes y una cerveza ¡por dios! ¡Una cerveza! Estaba conociendo al rebelde Kaiba en un solo día- ¿porque me miras así?- me preguntó con esa sonrisa de medio lado otra vez.   - ¿cómo que porque?- te lo resumo listillo- ¡estoy aquí, en un lugar que cero parece tu estilo, en un cita, en la cual fui recogido en una motocicleta por ti mientras vistes ropa normal y además de eso pides una cerveza! Y sabes que más ¡soy tu novio!- le recalqué, ¿quería que siguiera? Él solo se rió mas.  

- Te lo dije muchas veces cachorro, no me conoces ni un ápice…-pagó la cena y de inmediato la orden fue entregada, lo gracioso es que no era comida rápida, parecía ser hecha en casa. Tomamos una mesa en una esquina cerca de una ventana y al parecer decidió continuar la plática- este lugar me lo mostró alguien con quien salí, era algo parecido a ti, por eso creí que te iba a gustar- ¡Kaiba saliendo con alguien como yo! Sorpresa, sorpresa Wheeler, este hombre sí que está cambiando…- en realidad no tomo mucho alcohol, pero es verdad que relaja un poco, y después del trabajo en la empresa no cae mal de vez en cuando- mencionó y me puso mi comida frente a mí.  

- debo confesar que me estás impresionando de una manera muy positiva- tenía que decírselo…  

- pues debo confesarte que antes si solía ser aburrido como seguro pensabas que sería la cita, restaurantes caros y cosas así, pero luego conocí a esta chica quien fue la única que se atrevió a decirme que estaba harta de esas, ¿Cómo dijo?- se puso a pensar y por un momento me gustaría haber conocido a esa chica- ¡ha sí!- recordó- “rutinas de pingüinos”- no pude evitar reírme a carcajadas por eso, como no se me ocurrió nunca, esa chica expresó exactamente lo que pensaba de esas cenas- y que quería divertirse, entonces fue que decidí darle la oportunidad de planear la cita, me vistió ella, me trajo aquí, y comí mi primera hamburguesa en mucho tiempo- parecía contento al contar.   - y ahí descubriste que no era malo ¿verdad?- admítelo ricachón, este lugar esta de lujo. Asintió.  

- además me di cuenta de que con esta ropa y en estos lugares no necesitaba sobornar a nadie para que no dijera que había estado cenando con mi cita- confesó divertido, eso no lo había notado, sí que es una ventaja- creo que nadie me buscaría aquí, soy una persona mas- dijo con satisfacción. Parece que el niño bonito ya aprendió la lección de vida, es agradable verlo así debo admitir, que lástima que Mokuba no pueda ver esto, se daría cuenta de que lo mejor para él es que continúe intentándolo y saliendo a probar el mundo, ahora que puede, que es joven y no está ni Gozaburo ni nadie para impedírselo…  

- oye, ¿y qué paso con esa chica?- le pregunté, capaz y sale con los dos el desgraciado, digo, no todo puede ser tan perfecto con él…  

- nada- no parecía dolerle hablar de ella ni nada, era como estar charlando sobre una amiga- se fue un día, iba a estudiar al extranjero y decidimos que no estábamos listos para ser una pareja, nos despedimos y seguimos con lo propio- me daba tanta curiosidad esa chica, si era como yo, entonces esto podría ser bueno y terminemos siendo tan buenos amigos como Kaiba parece ser de ella, eso sería más que fantástico…  

- ¿y cómo la conociste?- era mucha mi curiosidad, digo a mi me conoce por casualidad que estamos en el mismo instituto, pero de otra forma no tendría la oportunidad dorada de conocer a tan adorable espécimen como yo.  

- trabajaba de mesera en uno de eso restaurantes caros a los que llevaba a mis citas y un día hice enfadar a una novia mía, me arrojó vino encima y cortó conmigo, entonces ella me ayudó a limpiarme, entablamos una conversación y en aquel momento me dije “porque no” y la invité a salir- una historia divertidísima parecía asomarse por las palabras antes dichas por Kaiba, estaba muy curioso de saber del Kaiba que sale en citas.  

- oye- hasta ahora él había mencionado solo chicas eso me inquieto un poco, ¿no sería yo su primero hombre o si?- ¿has salido con otros hombres?- era tan extraño, este Kaiba no se inmutaba y sorprendía como yo pensaba que lo haría con mis preguntas, solo me sonreía de medio lado antes de hablar.  

- si- me decepciona un poco, no es que quiera ser especial ni nada para él, pero supongo que es normal sentirse desplazado por lo ex de tu novio ¿no?- he estado experimentando mucho- dijo y apenas note el leve sonrojo que le apareció sobre las mejillas, eso me tranquilizó un poco más, y entendí él porque me había respondió de esa manera acerca del no prejuicio- han sido solo tres aparte de ti- ¡vaya! ¿Solo tres, solo tres? Para mí eso ya es decir-  pero créeme, dos no me gustaron para nada-hizo una mueca adorable, digo, tierna pues, arrugando su nariz.  

- ¿y el otro?- le pregunte inseguro, es que, meterme en estas cosas cuando yo, pues no tengo experiencia y menos con hombres, me daba algo de morbo saber.  

- era un buen chico, atractivo y todo- valla esto me da tanta vergüenza pero quiero escuchar- pero solo salió conmigo para darle celos a su… como decirlo, a su… amigo que quería que fuera su novio- la persona que le gustaba, Kaiba, no es tan difícil decirlo- ¡y si que le dieron celos!- me imagino, si alguien super guapo y millonario saliera con la persona que me gusta tendría ganas de arrancarle hasta los ojos del coraje que me iba a dar por andar apañando lo mío- casi me golpea- de nuevo otra historia muy divertida que contar, me agrada mucho verlo así- bueno pero… no vamos a hablar de mis ex parejas en toda la cita ¿verdad?- es cierto no recordaba ese detalle de que según vengo a hacer de novio no de amigo confidente, pero es que de verdad me pica la curiosidad.  

- lo siento, es que me da curiosidad saber de tus otras parejas- ay que sincerarnos, el también lo ha hecho porque yo no.   - solo no te pongas celoso- ¡yo celoso! ¡Claro que no! Y menos por él, pues ni que fuera la mejor a puesta en la maldita cuidad… no lo es ¿verdad?- y que hay de ti, ¿has salido con hombres antes?- seguro mi cara enrojeció muy fuerte porque Kaiba soltó la carcajada, solo pude bajar mi cabeza y negar fuertemente -entonces soy tu  primero- esa voz… lo dijo tan lento y tan en susurro creo que me estaba… estaba… ¿seduciendo? Eso solo me puso más rojo- que bueno, porque te advierto que yo si soy muy celoso- no sé si era broma o no, porque aunque reía parecía decirlo en serio- ¿qué tal las chicas?- ese tema… no me creerá que tengo cero experiencia, pero es la verdad, que le digo…   - eso…- de veras me cuesta decirle una mentira ahora que se ha portado tan bien conmigo- pues no se puede clasificar como relación…- confesé hablando de May.  

- cielos- ahora sique te sorprendí no ricachón, parece que se le apareció el fantasma de Gozaburo hahah- ¿en serio soy el primero de todo?  

- no es que no me haya gustado nadie en mi vida, pero jamás había tenido una relación formal- le anuncie para que no se creyera tan importante.  

- de todas formas, soy tu primero- maldito, se siente su ego por todo el lugar…- pues lo bueno que no tendré mucho de que ponerme celoso- sonrió, como que no tendrá “mucho”, puedo no ser un modelo, pero no estoy mal, claro que tiene que ponerse celoso y cuidarme.  

- que te pasa si no soy alguien feo, no te sientas tan confiado- le expresé mi molestia.  

- no digo que seas feo, solo digo que tendré que preocuparme por los que vienen y no te conocen y por tus amiguitos, pero nunca por algo así como que viene tu ex que te mueve el piso y que sabe más cosas que yo de ti e incluso que pueda hacer que tengamos peleas hasta romper y aprovecharse de eso para poder regresar contigo- eso parece como una anécdota vivida…o está muy pensado y en realidad es el monstruo de los celos.  

- eso… o te lo pensaste muy bien o eres realmente paranoico Kaiba- se carcajeo de nuevo.  

- desgraciadamente lo digo por experiencia, últimamente me pasa de todo…- negó con la cabeza, en definitiva este Kaiba estaba hambriento de conocimiento, pero no precisamente del que viene de los libros- pues si te hace sentir mejor, solo he estado con gente con experiencia, eres mi primer persona con la que soy su primero…- como esas palabras puede llegar a gustarme tanto, después de todo, tal vez si sea una anécdota de él cuando terminemos, eso me gustaría… pero no es que me agrade tanto el ricachón ni nada, es solo que parece feliz de contar esas cosas.  

- oye, me inquieta es de que seas celoso con mis amigos, no querrás acapararme todo el tiempo ¿no?- además son solo mis amigos, ¿de que hay que estar celoso?  

- al parecer te subestimas a ti mismo…- espera, ¿eso que tiene que ver con esto?- y yo te sobrestime un poco también- hay algo que tengas que decirme Kaiba, solo suéltalo hombre esos rodeos no van contigo…- no creo, es más, me parece imposible que alguien en la escuela, descartándote a ti por supuesto, no tenga conocimiento de que le gustas a tu amigo el mono- ¡¿que QUÉ?! ESO NO PUEDE SER POSIBLE. No pude evitar escupir de mi soda otra vez.  

- ¡eso no es cierto!- me daría cuenta y además es como mi hermano, eso es imposible, se que Tristan también piensa eso de mi y entre hermanos el amor de pareja no es posible sentir… espera un momento… eso es precisamente por lo que estoy metido en este embrollo en primer lugar, por el amor prohibido entre hermanos ¿enserio para Tristan seré algo más?  

- sí que lo es, por eso se me hizo muy extraño que vinieras y me dijeras de pronto que querías salir conmigo- parece que me va a preguntar algo que no voy a querer contestar…- pensé realmente que le corresponderías a tu mono amigo y serían una feliz pareja como los “gemelos del mal”- me imagino que se refiere a Yugi y Yami con eso de los “gemelos del mal”.  

- no les digas así, además estoy seguro que Tristan no me mira de esa manera.  

- eso lo dices tú porque tu no lo ves de esa manera, pero al igual que yo no pensé que sintieras cosas por mí, creo que tú te puedes equivocar- pero eso es porque esto es un farsa mi querido Kaiba, solo que no te puedo contestar con esas palabras.  

- pues yo dudo mucho eso de Tristan, es como mi hermano- no me harás cambiar de opinión ricachón.  

- sigue pensándolo si quieres, pero si te fijas un poco más te darás cuenta que tengo razón, además no vas a impedir que lo tenga vigilado por que igual te celare con él sin poder evitarlo- esa es una advertencia justa supongo y este noviazgo es la cosa más rara del mundo… ¿así son todos los noviazgos?   - okey, me parece justo…-se siente algo bien que te celen, solo espero que no sea un loco con eso de los celos.  

- bueno a lo que iba con esto no era precisamente para hablarte de tu amiguito- pues sí, pero ya entendí lo de la broma, lo hizo para poner un poco a raya a Tristan quien me imagino sospecha algo, claro, eso si Kaiba está en lo correcto de que le gusto, que no creo- ¿Por qué te gusto?- si, ahí está, mi presentimiento era acertado, la pregunta que no quiero contestar…- antes de que yo empezara con todo esto de cambiar, era,  por no decir cabrón, pésimo contigo…- si pésimo es una palabra totalmente correcta para describir nuestra relación de antes, pero cabrón es más acertada; piensa Joey, ¿qué puede ser lo que te gusta de este imbécil? Tal vez su asquerosamente divertido y muchas veces hiriente sarcasmo que raya en el de un comediante profesional, no creo que sea romántico responderle eso, piensa cursi Joey, más cursi…  

- Pues…-un comienzo de lujo, me parece que la cita era debida a su curiosidad de saber la respuesta a esta pregunta- no estoy seguro…- películas, telenovelas ¡a mí!- ya sabes que en eso del corazón uno no elige- eso está bien, pero parece que espera más… ¡su nariz! Sí, me pareció bonito eso de fruncir su nariz, algo de eso estará bien- me gusta a veces cuando haces una mueca que frunces tu nariz como un niño- si estuvo re cursi, ¿qué más puedo decirle?- y también- no le puedo decir sexy ¿o si? No, mejor eso no… que es buen hermano, eso está bien- que eres muy dedicado y muy entregado con tu hermano a pesar de tu trabajo-  sonrió, eso está bien, creo que con eso le basta para tragársela- y ahora esto que descubrí de ti, también me gusta- bocón, eso estuvo de más Joey Wheeler… pensé en voz alta, eso no lo quería decir…  

- pues parece que acabo de descubrir cosas que me gustan de ti también…- dioses, esta plática ya me dio miedo…- como por ejemplo tu cara sonrojada- ¡whaaaa! Como pudo decir algo así, sin poder evitarlo escondí mi cara de la vergüenza en mis manos, fue tan cursi de mi parte y el siguió riéndose como si fuera lo más divertido del mundo. Después de eso la música subió y las luces bajaron de intensidad, entonces Kaiba se acercó a mí.  

- ya empezó el Karaoke, veamos un poco y cuando quieras irte me dices- ambos quedamos uno enseguida del otro viendo hacía el escenario y no hubo más charla, el entretenimiento era bueno, en ese momento no me percate, pero después me di cuenta de que me había divertido en mi primera cita con Kaiba.


Entradas las 10 de la noche ambos decidimos que era hora de marcharnos, había escuela al siguiente día y ambos debíamos asistir, así que nos montamos en su moto y me dejó en casa, estaba nervioso porque no sabía si la despedida tenía que ser formal es decir ¿tenía que besarlo? Pero mi preocupación fue en vano, porque la llegar, me baje del vehículo, me quite el casco entregándoselo posteriormente, él ni siquiera se bajó, solo espero ahí hasta que llegue y abrí la puerta de mi casa, nos despedimos con las manos y arrancó.   Suspiré al entrar y ahí fue cuando medite… la condenada cita no fue nada bien, fue EXCELENTE, por lo que no estaba bien debido a que se supone que esa cita nos serviría para romper, pero lo único que hizo fue acercarnos más… bueno, ya estarán otras citas que tendré la oportunidad de arruinar.. Seguro es cuestión de tiempo que rompamos, supongo que esto nos servirá para hacernos amigos y así podré preguntarle sobre lo que me interesa saber del tema de Mokuba.

 

    ***  

 

Es otro día, sobreviví a mi primera cita y todo parece ir de maravilla, lo cual no sé si está bien o mal, el punto es que por ahora las cosas están en calma, es decir, no puedo sacar de mi cabeza todo lo que me aqueja, pero las cosas van marchándome bien. Tristan llegó y como siempre salimos rumbo al colegio, me siento algo incomodo con lo que Kaiba me dijo ayer de él, pero no creo que tenga la razón.  

- oye Joey…- presiento otra pregunta incomoda, seguro me preguntará por lo de la bromita del ricachón- ¿hay algo que quieras contarme?- ¿Qué?... ¡a que se refiere con eso! ¿Sospechará algo?, ¡MIENTE WEELER, MIENTE!  

- no, nada ¿porqué la pregunta?- debo ganarme un oscar por mi gran actuación casual, después de todo, claro que me muero por contarle el embrollo en el que me metí.  

- ¿enserio?- suspiro, ¿porqué tan desconfiado?-entonces ¿con quién saliste anoche? Llamé a tu casa y tu padre me dijo que alguien vino por ti- ¡ah demonios! ¿Qué le digo?- ¿acaso tienes novia?  

- no, no tengo novia, como crees que tendría una y no te lo diría…- no es mentira, tengo novio que es diferente… eso si que no se lo diría…y menos ahora.  

- si, eso creí- parece desanimado- además de que sería extraño que tu “novia” condujera una moto y llegará por ti- como demonios sabe eso, me está asustando.  

- ¿cómo sabes que fueron por mí en moto?- la mejor forma de evadir una pregunta es haciendo otra pregunta.  

- tu padre me dijo que un chico había ido en moto por ti, y que por eso pensaba que te habías ido conmigo- es cierto Tristan conduce una moto, con razón no me pregunto nada cuando le dije que me iba.  

- ha sí, era un amigo…- eso sí es una total mentira, pero Kaiba me dijo que no le dijera “absolutamente nadie” de lo nuestro, y es te incluye hermano, lo siento, aunque no es que quiera realmente admitir que salí con mi novio anoche y que me divertí,.. ah y claro, que es Seto Kaiba de quien estamos hablando…  

- un amigo- repitió, porque hace eso, ¿desconfía de mi? Bueno, sí, de acuerdo, le estoy mintiendo ahora, pero soy su amigo y si eso es lo que le digo el debe creerlo y sin discusión- ¿Qué amigo? Según yo, conozco a los mismos amigos que tú- eso es cierto, pero que no pude haber conocido a alguien en el trabajo o que se yo… eso le diré.  

- trabaja conmigo desde hace tiempo, no lo conoces- le dije y gracias al constructor que decidió hacer la escuela en este mismo lugar, llegamos a la puerta de entrada y nos encontramos con los demás, saludándolos y olvidando ese ridículo interrogatorio del FBI que mi amigo me hacía, ¿ahora resulta que no puedo salir con otros amigos? ¿Será que Kaiba tiene razón y esta ha sido una escena de celos? No, me niego a creer eso, seguro es solo curiosidad de Tristan.  

Ahora, como debo reaccionar cuando vea al engreído de mi pareja, no tengo idea de que hacer, digo, es cierto que ya no nos peleamos como antes, es más, nos convertimos en dos compañeros que suelen mandarse uno que otro sarcasmo de vez en cuando, pero no es que nos llevemos de las greñas. Estaba pensando eso cuando entre al salón y me lo encontré de frente, sobresaltándome un poco. No sé porque, pero las personas estaban como esperando a ver que nos diríamos, entonces Kaiba hablo primero.  

- te brinco o tu me brincas cachorro- es verdad, yo le bloqueaba la salida y él a mí la entrada al aula.  

- bríncame tu- le conteste por inercia- tú estás más alto- no es mucha la diferencia debo admitir, después le sonreí y me sonrió, supongo que íbamos a actuar normal y civilizadamente a la vez. Entonces opte por ladear mi cuerpo para pasar y él a su vez me imitó y salió del salón. Mis amigos estaban sorprendidos al igual que muchos ¿en serio es tan raro que seamos civilizados?- ¿qué, tengo algo en la cara?- pregunte.  

- no, es solo que no te enojaste porqué te dijo “cachorro”- acotó mi amigo Yugi.  

- supongo que ya me acostumbre a que no se aprenda mi nombre nunca- en parte es cierto, ya son años de tener ese apodo y la verdad es que ya no me molesta.  

Y así continuó mi día, sin más percances con mi archi ex enemigo y ni una pregunta más del asunto del “chico en la motocicleta” por parte de Tristan. Me alegraba mucho que este asunto se calmara porque hay veces que siento que me pierdo del mundo por tanto pensar.  

Así que tuve una loca idea, llevar a mis amigos al sitio que me enseño Kaiba, seguro a ellos también les iba a gustar, y así me podría despejar un poco de todo lo que me está aconteciendo esos últimos días, además invitaré a Mokuba también, le hará bien salir de su mansión y alejarse un poco de las tentaciones.   -oigan chicos, que les parece si este fin de semana salimos, conocí un sitió muy divertido donde hay karaoke- propuse mientras íbamos saliendo, pareció agradarles la idea.  

- qué gran idea, hace mucho que no salimos a ningún lado- dijo tea sonriente, todos asintieron.  

- que les parece el domingo- propuso Tristan.  

- por mi está bien. Dijo Yugi, Yami asintió, pues si mi amigo estaba libre, obvio el también.  

- también estoy libre- dijo Tea- hay que avisarle Duke, seguro estará de acuerdo- siendo él su propio jefe, no hay porque de no tomarse el día.  

- entonces está decidido- sonreí… esperen, no me acordaba que yo tengo novio ¡rayos! Qué tal si quiere salir ese día, no se lo pregunte, bueno, pues va a tener que ser otro día entonces… le avisaré por… ¿por dónde? No tengo su móvil, y hablarle su mansión no es una opción, además, Mokuba estaría ahí… definitivamente no, debo pedirle su número- chicos, me disculpan un momento- rápidamente corrí de vuelta a la escuela, solo espero que Roland no haya llegado aún a recogerlo, di la vuelta en la esquina y lo vi justo entrando a su limosina- ¡Kaiba!- ha qué alivio, me escuchó.  

- ¿Qué sucede?- me dijo mientras bajaba de su auto, me imagino que esta extrañado de que lo siga, después de todo esto es un secreto, pero por suerte casi no hay nadie para vernos, además solo le hablaré, y no es que vaya a pedirle un beso ni nada, es solo su número.  

- es que…- el número Wheeler, concéntrate- este fin de semana…- esperen, no tengo por qué darle explicaciones de nada.  

- ¿quieres salir otra vez?- dijo en una voz solo audible para nosotros… okey, creo que ahora si necesito darle explicaciones, ¿por qué escojo mal las palabras cuando estoy con él?  

- no, no es eso…- espera, eso no es lo que se esperaría si se supone que soy el interesado- bueno, no es que no quiera- mejor, sí, eso está mejor- es que voy a salir con mis amigos, pero no sabía si tendríamos otra cita- esa palabra saliendo de mi me asusta de verdad- así que quería avisarte que no podría salir contigo el domingo, pero me di cuenta de que no tengo tu número de móvil y pues…  

- ha es verdad- me dijo al ver que no continué, la verdad es que me siento muy tonto diciéndole estas cosas- préstame tu celular- ¿para qué lo quiere? Bueno supongo que para escribir en él su número… ¡dha! Wheeler, te estás portando cada vez peor de tonto… se lo di e inmediatamente escribió en el- listo…- y me mostró la pantalla… ¡que demonios! ¡Porque puso eso! Y parece que me leyó la mente porque me respondió- que tal si tus amiguitos se les ocurre verlo y encuentras que tienes mi celular, creo que sería sospechoso, y más para tu amigo el mono, lo descubriría en un segundo…- que terco es con eso, solo por esa bromita no creo que Tristan se enterara ni en dado caso de que su suposición de que le gusto sea cierta, además que clase de apodo es ese.  

- no creo que sospeche nada, además ¿porque ese apodo? -es algo infantil ¿no crees Kaiba?  

- según tu y mi ex, eso es lo que parezco por ser una persona que come en restaurantes caros- se rió, ahora entiendo, es por eso, la verdad que si le queda, se lo dejaré entonces. Se metió a su limo de nuevo y se despidió de mí, me dejó con una sonrisa lo admito, ja “ el pingüinito”.

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).