—!Hijo de puta! ¡No puedes ser tu! ¡¡Estupido Akihiko!!
Miyagi lanzó el libro haciendo que una hoja saliera volando y se incorporó para salir con brusquedad de su departamento.
—¡Takahashi regresa!
El grito se pudo oir por toda la unidad habitacional causando un susto a las personas que caminaban por la acera
Desesperado, Miyagi corrió al menos tres calles intentando dar alcance al editor, aunque era ilógico, Misaki ya estaba en pleno carril, dirigiéndose a su hogar, pero el profesor sentía tanta adrenalina mezclada con enojo que siguió en su marcha.
—¡¡Misaki!!
Llegó al cruce y miró ambos lados buscando el deportivo negro avanzó un poco más y se detuvo para dar un gran respiro mientras recargaba su peso por sus rodillas
—Lo..sabías... y has estado...
En este momento algunas cosas cobraban sentido como el nombre de la "esposa" de Akihiko, fue muy tonto en creer que Misaki era una mujer. Yō golpeó un anuncio que tenía frente a él provocando que cayera al piso y que un hombre se detuviera a ver el desmán que provocaba Miyagi.
—¿Se le perdió algo? ¡Deje de mirarme!
El sujeto parpadeó varias veces y dió vuelta asustado por la voz tan grave que relució del profesor. Miyagi sacó su teléfono y al instante ya marcaba el número de Misaki...
Uno... dos.. tres tonos
Dejó que sonara un par de veces más y colgó... Era imprudente hablarle por el móvil mientras el castaño conducía.
Llevo sus manos a su cabeza y presionar, de verdad que se sentía un completo estupido y más por dejarse llevar por la actitud tan cordial y en apariencia sincera de Misaki.
Cogió de nuevo su móvil y marcaba a Hiroki con sus dedos temblando del coraje....
Misaki parecía perdido por lo ocurrido hace varios minutos, su corazón se aceleró al sentir los labios de Miyagi tan cerca de los suyos y reaccionó muy tonto huyendo del contacto del profesor
—¿De verdad.. Miyagi san..quería..b..besarme?
El sonido de su celular lo asustó y sorprendido veía como lo había invocado
—¡Es el! ¡Quiere hablar conmigo! ¡¿Que hago?!—Miraba entre la calle y el móvil todo nervioso. Muy tarde cogió su teléfono y de inmediato dejó de sonar....
—Parece...que se equivocó de número, es eso o se arrepintió de marcarme.
El castaño dió un enorme respiro y dejó el móvil en la ventosa colgada del tablero de su auto.
Pasaron como 2 minutos y volvía a sonar, esta ocasión era Aikawa san y la oía por el altavoz.
—¡Misaki kun! ¿Donde andas? ¡Estoy en tu casa, ya llevo dos horas esperándote!
—Aikawa, está por ser medianoche ¿No tienes cosas que hacer? ¿Qué haces afuera de mi casa?
—Estoy adentro, me puse cómoda en tu sofá y sí, tengo pendientes que hacer, pero da la casualidad que me encontré a cierto rubio guapetón en la editorial y me cuestionó varias cosas
—!¿Que cosas?!
—Me preguntó que si en realidad eres casado y sobre tu noviazgo con Miyagi san.
—¡¿NOVIAZGO con Miyagi Sensei?!Ese tipo sí que le hace falta un tornillo en la cabeza.¡¿De donde sacó eso?!
—No lo sé, pero fue muy amable conmigo tal vez este medio loco pero eso no le quita lo atractivo. Y le respondí que en efecto aún estás casado pero que te estás dando una oportunidad con Sensei. Debiste verlo, se puso muy contento y dijo que aún hay esperanza de que ese lindo trasero tuyo estuviera en su cama.
—No, No y No ¡¿Por que dices eso de mi Aikawa san? Por que mencionas que tengo novio cuando ni siquiera sé qué ocurre con Miyagi Sensei.
—¡Mira Misaki! ¡Alguien ofertó por un par de zapatos de Akidiota!
—Aikawa san... no puedo mirar y mejor dime ¿Por que le dijiste eso?
—¿Decir que?
—Pues eso que dices que tengo.
—¡¿Que tienes Misaki?! ¡¿Estas enfermo?!
—Ay Aikawa san....olvídalo, ahora comprendo porque se entendieron de maravilla Iason y tu, mejor sigue esperándome ya estoy por llegar y platicamos a gusto, ¿Podrías preparar café?
—Con todo gusto Misaki kun....
¡Por supuesto que son de Akihiko Usami! ¡Si yo misma los escogí! ¡Empecemos con 5000 yenes! ¿Que te parece?
Misaki rodó los ojos y decidió colgar para no seguir oyendo la subasta de la pelirroja.
El teléfono ya había sonado al menos 5 veces. Nowaki pudo notar como Hiroki volteó de reojo a buscar el móvil y entonces sus dedos se dirigieron a la entrada del profesor para empezar a palpar toda la zona mientras seguía devorando el miembro erecto
—N..Nowaki ahhhh
El pediatra hizo más presión en la punta y con su lengua hacia círculos por todo el contorno, la saliva escurría rumbo al ano del profesor y un dedo se abría paso por el recto haciendo que Hiroki gimiese más fuerte.
—Ahhhh... Nowaki... detente... podría..ser algo...importante... la llamada ...Ahhhh
—Nada es más importante que hacerte gozar mi amor
Nowaki sonrió, sacó el dedo de forma lenta y se separó de Hiroki para agarrar él teléfono móvil.
El demonio muy jadeante no comprendía que intentaba hacer su novio. Sintió como le colocaba el artefacto en el oído y Nowaki se erguía frente a él con su rígido miembro apuntando a su labios.
—Está bien, puedes contestarle al inoportuno de Miyagi Sensei
—¿Q..Que?...
—Lo que oíste Hiro san..atenderás su llamada y le demostrarás a Miyagi san, que ya aprendiste a hablar con la boca llena, mi amor.
—¡¡Que!! No.. no espe.....
Dicho esto Nowaki cogió al castaño de la nuca y metió su erección de golpe por la garganta....pulsando el botón verde.
—¡Kamijō! ¡¡Tu lo sabías!!..—Escuchó sonidos raros—¡Hiroki! ¿Me estás escuchando?— El docente miraba su teléfono y lo agitó varias veces pensando que había un error en la línea y por eso se oían aquellos sonidos tan extraños—¿Que carajo ocurre? Hiro...¡Mierda!
Miyagi quiso arrojar el móvil, sus nervios y celos lo traicionaban horrible, caminó en círculos analizando la situación y después de unos minutos, detuvo un taxi..
—Lléveme al hotel Hyatt y dese prisa. Es mejor dejar claro las cosas de una vez par de traidores.
—¿Dijo algo señor?
—Nada que sea su asunto y acelera
El taxista muy nervioso hizo lo que Miyagi pidió.
—¿Te parece si por la tarde vamos a ver los muebles que compraremos para nuestra casa Akihiko?
Shinobu colocó su bolso con sus escasas pertenencias y llamaba el ascensor para irse del Hyatt. El escritor cogía el par de maletas muy distraído sin contestar al rubio.
—Akihiko ¿me escuchaste? ¿Que estás pensando?
El nombrado volteó e intentó disimular su trance.
—Si te escuché y creo que será mejor que tú te encargues de eso, sabes que no soy aficionado a nada referente del hogar.
—Lo sé, pero como vamos a vivir juntos necesito tu opinión.
—Lo que decidas está bien y apurémonos, quiero dormir unas cuantas horas antes de la junta con Isaka san.
—Ya veo que estás decidido a publicar una nueva obra. Eso te mantendrá muy ocupado y dijiste que me ayudarías a preparar las clases.
—Desde un principio te dije que este receso solo era para vernos un poco más. Isaka autorizó porque mentí diciendo que ya tenía bastante avanzado de la novela. Y como sabes no tengo nada escrito. Pero...no deberías preocuparte, estaremos juntos por eso sugerí vivir juntos y por lo de tu clase pienso que es tiempo que tú mismo te formes carácter y hacer que tus alumnos te obedezcan Shinobu.
—Para ti es tan fácil decirlo porque no tienes que soportar a mocosos arrogantes y otros más que son un desastre al igual de despistados.
—No, pero lidio con Isaka san, la imprenta y los editores además de que al parecer me quedaré sin Aikawa san.
—Pues a mi me parece perfecto que esa maleducada no sea tu editora, no me cae bien. No entiendo como la soportas.
—Shinobu... cada quien debe de atender sus compromisos, puede que haya días que no nos veamos mas que para comer porque tengo que inventarme todo un libro de más 500,000 palabras y sin Aikawa haciendo las correcciones me retrasaré. Estoy en espera de quien pueda ser mi editor.
Shinobu frunció el ceño y malhumorado bajaba del ascensor, no le agradaba nada la idea de que Akihiko estuviera con otro chico ó chica y que pudiera hacer amistad con el.
—No sé.. eso no me agrada pero mientras comienzas a escribir aprovechemos el tiempo juntos, dormiremos un poco y después te prepararé el café para que lo lleves a la dichosa junta.
—Prefiero hacerlo yo Shinobu, si no te molesta. Y por favor no pidas factura a la recepción esta vez, luego te equivocas y la envías a personas desagradables.
—Ya te dije que no fui yo—El rubio cruzó los brazos en signo de molestia por el comentario, Akihiko no entendía que pudo pasar entonces—Bueno ya quita esa cara y vámonos
Un profesor con la creciente adrenalina por su cuerpo bajaba del taxi, apenas si dió unos pasos y sintió el ácido estomacal subir hasta su garganta y quemarla, de seguro desarrollaría una úlcera gástrica por todo el coraje contenido estos meses.
La escena frente a sus ojos era tan dolorosa y enervante como nunca creyó posible.
Su Shinobu sonreía mientras se colgaba del brazo del escritor de porqueria y este le acariciaba el cabello como tantas veces él lo hizo. Se acercó sin que los amantes se dieran cuenta hasta quedar frente a ellos.
—Buenas noches—saludo sin despegar la vista de Shinobu.
El rubio puso una cara de pánico total y a Akihiko casi se le salen los ojos al ver al ex novio, detalló el rostro maduro y enojado del pelinegro. Denotaba casi la misma edad que el suyo, solo que la furia invadía de forma clara en sus ojos.
—Puedo ver que tenemos el mismo gusto por los jóvenes Usami san.
—Que quiere Miyagi san
—¿Que quiero? Es simple, solo deseo una explicación suya, Usami san—apuntó con su dedo sobre el pecho del escritor
—Mi.. Miyagi vete de aquí ... hay mucha...gente que.. que...está llegando—Shinobu tembloroso se interponía entre Usagi y Miyagi evitando que quisiera golpearlo.
Eso fue la gota que derramó el vaso y agarró al abogado del cuello para estamparlo sobre la pared.
—¡No lo defiendas! ¡Y ni te preocupes! ¡Que al que le voy a dar una putiza es a ti! ¡Tu fuiste el que abrió las malditas piernas! ¡Este cabrón nunca te obligo!
—¡Suéltalo Miyagi!
Akihiko se fue sobre el, Yō dió vuelta con Shinobu provocado que el golpe fuera para ambos. El rubio soltó un quejido y las lágrimas brotaron de su rostro. El escritor quedó pasmado por su error.
—!Con que ahora lloras Shinobu!¿Duele verdad? Pues eso mismo siento yo al ver como pisoteaste mi corazón y todo lo que hice por ti lo convirtieras en mierda. ¡No solo a mi! ¡También el corazón de Misaki! Ustedes son un par de pendejos con tan poca madurez para decirlo a la cara y terminar por lo sano.¡Son tal para cual!
—Entonces...Misaki fue el que le dijo que estamos aquí
—¡No lo menciones Akihiko! No tienes derecho y no comprendo como pudo casarse contigo y me siento estupido por confiar en el.
—¡¿De que carajo hablas?!
—Yo me entiendo. Pero sabes... una parte de mí está agradecida por ya no estar con Shinobu. Quien engaña una vez, lo hará una segunda y tercera ocasión.Así que puedes llevártelo, alguien como él no vale la pena, ni siquiera para golpearlo. Sigan en lo suyo, sigan escondiendo su "amor"
El profesor aventó al chico con mucha fuerza sintiendo su corazón destrozarse, porque muy en el fondo, su amor no desaparecería de la noche a la mañana y lo de golpearlo era mentira.
—Quédate con Shinobu, está es la segunda vez que me porto agresivo con el y por mi bienestar mental, no quiero cometer una estupidez de la que después me arrepienta. Aunque te confieso que ver sus caras de pánico es muy satisfactorio. Si no te golpeo Akihiko es porque tú tampoco lo vales, ninguno de los dos vale la pena. Solo dime ¿Por que? ¿Por que meterte con Shinobu teniendo esposo?
—Shinobu es diferente...muy distinto a Misaki
—Tienes razón, nada que ver. Misaki....es todo lo contrario. Misaki es....— Miyagi ya no pudo controlarse y dejaba ver sus lágrimas frente al par de hombres
—No lo mereces, no debiste tener a alguien como él. Esperaba algo más que esa excusa.. pero ya.... no importa. Y tú Shinobu... solo recuerda que yo te llevé frente a ella, lo mío, sí fue sincero.
Miyagi limpió sus lágrimas con el brazo y se perdió por una de las tantas calles......
—¡¿Entonces dices que casi te da un beso?!
—¡Si!—Misaki rodaba en la cama abrazando una almohada todo emocionado.
—¡Pues que tonto! Yo lo hubiese jalado de la corbata y plantarle tremendo besote y meterle la lengua así
Aikawa se colocó de perfil e introducía la lengua por su taza vacía y cerraba los ojos haciendo gestos de placer
—Estas loca, pero tengo que aceptar que esa lengua parece muy hábil Aikawa san
—Si, me lo han dicho, eres todo un caso. Tuviste a ese bizcocho a centímetros de tu boca y huyes como niña, te mereces un cachetadón por lento Misaki. Si no te golpeó es porque hiciste de cenar y porque gracias a un par de zapatos ya tenemos 20000 yenes.
—¿Tu crees que Miyagi san pudiera estar interesado en mí?
—¡Por supuesto! Si no huyó de ti apestando a alcohol y las garnachas que nos tragamos ese día en el bar. ¡Entonces nada lo hará! Lo triste es que a este paso estaré muerta cuando decidas atreverte a más con Miyagi Sensei.
—No es tan fácil Aikawa san, aún estoy casado con Akihiko y verlo me duele... el.. el todavía tiene mi corazón y no hemos tenido la plática donde dejemos claro varios asuntos.
—¿Platica? Cual platica si ese ojete no tuvo los testiculos para decirlo de frente. Lo que deberías hacer es meter una demanda y quedarte con la mitad de su fortuna.
—El dinero ya lo estamos obteniendo con sus prendas.
—Oye Misaki se me olvidó preguntarte ¿Tienes la ropa interior de Akihiko? ¡Esa vale más!
—Puede ser... ya me imagino a varias(os) oliendo los calzoncillos o poniéndolos en su cabeza para hacer limpieza.
Misaki cubrió su cara por las lágrimas que comenzaron a salir, le dolía confirmar que Akihiko era un hombre tan deseado que cualquiera pagaba por tener algo de él.
Aikawa sin pensarlo lo levantó de la cama.
—Vamos Misaki, debemos lavarnos los dientes e ir a la cama. Mañana tenemos mucho que hacer.
Estas semanas será muy agitadas y lo sabes, lástima que no quisiste marcarle a Miyagi Sensei e invitarlo a salir para desestresarte.
Misaki con todo el trabajo que tenía sobre su escritorio miraba una y otra vez su móvil, 15 días había transcurrido sin una sola llamada de Miyagi y el con lo apenado que estaba, no intentó contactar con el profesor, sin embargo se hallaba preocupado por su actitud. Había sido tan amable diciendo que lo necesitaba fuerte para afrontar todo y resulta que en estos momentos era lo que menos tenía: fuerza de voluntad, se hallaba muy nervioso. Y quien sí había estado insistiendo era Iason, incluso le mandó presentes a la editorial;en cambio Miyagi, ni el mensaje de buenos días de hace mucho le había contestado.
En ese momento entraba Kirishima san con una gran sonrisa por su cara.
—Misaki que bueno qué aún estás aquí, tengo que darte la buena noticia: Los directivos ya firmaron tu ascenso, mañana darán la nueva así que necesito el nombre de quien será el segundo a bordo.
—¡¿De verdad?!
—Claro, buen trabajo Misaki y yo también estoy feliz porque esto significa que ya podré hacer mis maletas e irme por una temporada con Takafumi. Así que dime
—¡Yuu Yanase! Él será ¿Crees que Aikawa podría estar en el equipo?
—No creo, el departamento zafiro la necesita más y con todo lo qué sabe sobre romance y novela le servirá mucho a las chicas. Además de que Isaka todavía no encuentra el reemplazo que ejerza como editor de Usami Sensei. Misaki... ¿Por que no fuiste tú su editor?
—Ese es o era el lugar de Aikawa san. Pero muchas veces le corregí varios escritos porque ella estaba muy ocupada y él muy cansado para hacerlo. Pero dejemos ese tema, me alegra mucho recibir esa noticia y le informaré a Yuu de inmediato.
—De acuerdo, me retiro, deberías ir a descansar también, mañana tendrás un día muy emocionante y ¡Felicidades Misaki!
—¡Gracias!
El castaño comenzó a recoger sus pertenencias para ir a su casa y preparar una rica cena. Yuu le había informado que iría a buscarlo y entonces le daría la noticia.
Apresurado salió de Marukawa rumbo a su hogar.
Hiroki colgaba el teléfono por quinta vez todo desilusionado, Nowaki dejó su libro en la mesita al ver la cara de preocupación de su demonio.
—¿Ninguna llamada te ha contestado?
—No....me siento mal y avergonzado por no contestarle la ultima vez.
—Te equivocas, si le contestaste— Nowaki sonrió de forma pícara al recordar esa noche candente.
—¡Nowaki! Estoy preocupado porque Miyagi lo único que hizo fue decir que se iría de vacaciones y ni siquiera se tomó la molestia de consultarlo conmigo. Hasta Takatsuki Sama está muy molesto y sorprendido. ¿Qué tal si le sucedió algo malo?
—El dicho reza "las noticias malas siempre tienen alas" y de ser así ya nos hubiéramos enterado si le ocurre algo malo a Sensei.
—Puede que sí y has él favor de ayudarme con algunos exámenes, tengo mucho trabajo por culpa de ese profesor tonto.
Hiroki le colocaba una pila de hojas sobre sus piernas.
—Y por el bien de Miyagi, más le vale regresar cuanto antes.
Misaki llegaba emocionado a casa para preparar la cena, ya lo tenía decidido: mañana iría a buscar a Miyagi Sensei a su departamento y charlar con el, tal vez le diría de la noticia de su ascenso y en el mejor de los casos podría invitarlo a comer. La sonrisa se borró de su rostro y su corazón se detuvo al ver a Akihiko parado frente a la puerta fumando un cigarro.
—¿Qué haces aquí?—apretó su bolso por el desagrado y paso de largo para ingresar a su casa.
—Vine porque quiero tratar cierto asunto contigo.
Misaki abrió la puerta, le quitó el cigarro de la boca y lo pisoteó
—No fumarás aquí adentro—Caminó sin darse cuenta que la puerta quedó medio abierta.
Arrojó sus cosas al sofá y cruzó los brazos en espera de lo fuese a salir de la boca del escritor.
—Parece que no pudiste hacerlo tú solo y mandas al estupido de Miyagi Yō a reclamar. Debiste ver el escándalo que se formó por tus idioteces.
Misaki quedó perplejo al escuchar ese nombre
—¿Miyagi san? ¿Que..que.. tiene que ver Sensei con esto? ¿Él está bien? ¿De..donde..conoces al profesor? No entiendo nada.
—¡No te hagas! ¡Tú le fuiste con el chisme y fue a buscarnos a mi y Shinobu!
—¡¿Que tiene que ver Miyagi san con ustedes?!
—¡¿Como que?! ¿Eres o te haces Misaki? ¡por tu culpa quiso golpear a Shinobu!
—El idiota eres tu Akihiko, ¡no entiendo nada! ¡Y me vale lo que le ocurra al inútil de Shinobu!
¡Creí que vendrías a disculparte por tu traición y lo único qué haces es defender a ese estupido!
—¡Ese inútil como le dices me ha dado momentos más agradables! ¡Y lo hace mucho mejor que tú en la cama!
Akihiko sintió el puño de Misaki enterrarse en su nariz y la sangre brotó. El castaño se alejó con las lágrimas escurriendo por su rostro.
—Eres.. eres un pendejo.. no sé cómo pude amarte. Después de mucho tiempo comprendo que a ti lo que gusta es ser el centro de atención. Y como te aburriste de mi amor y caricias fuiste a buscar a otro lado.
—¿Le llamas amor a tus migajas?
—¡No son migajas! ¡No sabía cómo comportarme! Crecí con la idea de mi heterosexualidad, llegas tú y tienes sexo conmigo jurando amarme.¡Lo único que hiciste fue desquitarte por lo que nii-chan hizo contigo! ¡El mentiroso siempre has sido tú!
¡Y lo oí claro la otra vez cuando te seguí a la Universidad de Tokio!
¡No me vengas con que fue mi culpa! ¡Yo te di todo! desde el primer puto beso, el primer te amo.
¡Contigo fue con quien hice el amor por primera vez!
¿Y sabes por qué lo haces? Porque no puedes estar sin tus cinco minutos de atención. ¡Necesitas sentirte adulado y deseado por todo el mundo! ¡No soportaste sin estar vigente en el mercado sexual! ¡Siempre has sido un inseguro! En todo caso culpa a tus padres por tu deficiencia de cariño. ¡Yo siempre deseé lo mejor para ti!
—Si claro, desear lo mejor mientras te comportabas todo cariñoso con el mangaka idiota y ahora lo haces con el profesor ese. Hasta con el rubio que te fue a buscar a Marukawa.—Akihiko sintió bilis al pensar en los tres hombres..
—¡MENTIRA! Yo jamás he buscado cariño en otra persona. Y No los metas a ellos en esto! ¡Kyo y Miyagi no son como tú! ¡YO NO SOY TU! Yo te amaba Akihiko Yo..te...amo.. todavía.
Misaki se tumbó sobre el sillón escondiendo su rostro entre sus rodillas estaba a nada de hipar por todo el dolor que sentía.
—Pues eso debiste pensarlo toda las veces que me rechazabas, y te equivocas, hace mucho que supere los traumas que me atribuyes. En todo caso me disculpo por hacerte perder el tiempo, yo perdí mi tiempo contigo, eres joven, alguien de todos esos bastardos estará dispuesto a darte todo lo que yo...
Y hazme el favor de no volver a mandar a Miyagi san para desquitarte. Ya tengo suficiente con que un periodista haya obtenido información de Shinobu y mía de seguro tu enviaste esto—Akihiko arrojo un sobre y dió vuelta.
Se tambaleó al ver a Takahiro frente suyo, ninguno de los dos se dio cuenta que alguien había entrado por el calor de la plática.
El hermano mayor quitó sus lentes
—Nunca creí que fueras tan poco hombre Akihiko
—¡¿Nii-chan qué...que.,haces aquí?!
—Te lo dije por teléfono Misaki, te dije que vendría visitarlos y me encuentro con esto..
El pelinegro de dos movimientos arrojó a Akihiko sobre la alfombra y le pateó el estómago.
—¡Takahiro no!—gritó Misaki
—¡No lo defiendas!
Como pudo llevo arrastrando al escritor hasta la puerta sin hacer caso a los gritos del castaño. Yuu también llegaba y casi le da el infarto por la escena y no tuvo más remedio que detener a Misaki, dejando que Takahiro hiciera su trabajo.
—¡¡Nii chan no!!
Misaki daba vueltas por el sillón
—Vamos Misaki ya deja de preocuparte. Tu hermano no va a matar a Usami san. Aunque si me pidiera mi voto yo alzaba mi manita con todo gusto y apoyaba él crimen.
—¡Yuu!
—Bueno ya, me disculpo por tener pensamientos asesinos, en todo caso mírate cómo estás por su culpa y ¿Qué es este sobre?
Yanase lo recogía y sacaba el contenido—¿Otra vez atormentando tu alma con esta fotografía Misaki?
El castaño muy sorprendido miraba la fotografía donde aparecía Shinobu y Akihiko. Fue corriendo al cesto de basura, Misaki estaba seguro de haberla tirado. Arrebató el sobre a Yuu al ver las dos impresiones, sacó todo el contenido y con desilusión veía a Miyagi con Shinobu en otra instantánea además de una factura de hotel....
Ahora tenía sentido la acusación de Akihiko y porque el profesor lo había ignorado estas semanas.
Cierto docente estaba sentado sobre la arena viendo el cielo estrellado, había regresado a la provincia donde yacía el cuerpo de su adorada Sensei para pedir disculpas por lo ocurrido. Se había negado a atender cualquier llamada o mensje, además de que sabía que en cuanto lograra hacer contacto con Hiroki le reclamaría por verle la cara con respecto a la información de Misaki y Akihiko.
No entendía porque lo había hecho pero en sus manos traía la pequeña hoja que cayera del libro de Usami, en realidad era una impresión y en ella se veía a un Misaki de adolescente con su uniforme, la imagen le produjo tristeza y nostalgia, trayendo consigo recuerdos de su juventud, maldijo a Akihiko por ser un farsante al dedicarle un libro a Misaki repleto de sentimientos y bellas frases.
—¡Maldición! Así que por eso te portabas amable, ¡quieres desquitarte conmigo por lo que te hizo ese imbecil! Con todo y eso .....yo..
¡¿Porque no puedo sacarte de mis pensamientos Misaki?!
!Desde el día que me salvaste he pensado en ti más de lo que debo!
¡El tonto de Kamijō tiene la culpa! Debería hacerle una visita y lanzarle unos cuantos libros en su cabeza.
Se dejó caer por la arena
—Sensei dime ¿Que tengo que hacer? Tu siempre fuiste muy inteligente, por favor ayúdame a olvidar.
Sábado por la tarde
Todo el equipo Japun, Emerald y zafiro estaba reunido en la sala 8 de Marukawa para el nombramiento de Misaki.
Isaka san miraba sonriente a todos hasta que su vista se enfocó en Takahiro que traía un parche en la nariz y otro en la sien.
—Takahiro san ¿Se encuentra bien? Disculpe mi atrevimiento pero ¿Tuvo un accidente?
—Isaka san es un gusto conocerlo después de tanto tiempo y me encuentro bien, podría decirse que sí, pase un accidente y créame que tuve muchas ganas de arrojar cierta basura por la ventana de mi auto.
—¡Nii-chan!
—Lo siento Misaki, me disculpo con usted Isaka san, puede dar inicio a la reunión.
—Solo será muy breve, bien queridos colegas, el día de hoy damos la bienvenida al nuevo jefe del departamento Japun, todos lo conocemos y creo que la mayoría hace buenas migas con Chibi tan
Así que: Muchas felicidades Misaki Takahashi a partir de hoy tú eres el jefazo y podrás disponer de todos los recursos de Marukawa para que los autores sigan publicando sin retardos. En hora buena Misaki, sigue cosechando éxitos y no dejes que nadie te haga dejar de soñar.
Todo en la vida son momentos así que disfruta lo más que puedas.
—Gracias Isaka san, lo haré, gracias a todos ustedes también por estar conmigo, esto es muy valioso para mi.
Misaki sentía que en cualquier momento lloraría, pero ver el rostro golpeado de su hermano por enfrentarse al idiota de Akihiko y el de sus compañeros lo hizo sentirse feliz. Todos aplaudieron y dieron la felicitación correspondiente.
—El acenso de Chibi tan es la excusa perfecta para ir a beber sake ¿Qué les parece si vamos todos juntos?—Propuso Isaka san
—¡siii!
Era como la tercera ronda que pedía Miyagi san, se encontraba todo desalineado, con la corbata amarrada a su cabeza y algunos botones de su camisa desabrochados. El bar FUZZY era testigo de su embriaguez y sus incoherencias.
—Hey... hey amigo.. ven... quiero platicar... contigo.
El mesero un tanto divertido por la actitud de Miyagi se acercaba a su mesa
—Si Miyagi Sensei dígame
—Niño.... nunca te enamores... el amor es un asco.... ese mocoso estupido me traicionó.
—Cuanto lamento oír eso Sensei
—Yop también lo lamento pero ¿sabes niño? Esta noche alguien va a morir....
—¡No Sensei! ¡No diga esas cosas! ¡No hable de muerte! ¡No vale la pena!
—Lo..digo.. porque así será, esta noche voy a matar mi orgullo, mi dignidad y voy a buscar a Misaki Takahashi....ese niño va a escucharme....así que cárgame por favor y pide un taxi...Ja ja ja... hasta le pedí a la secretaria la dirección de... el
El mesero muy sorprendido y sonriente obedecería la instrucción.
—¡Esa es la actitud Sensei, déjeme prepararle algo para el viaje!
Misaki algo relajado apenas si pudo terminar la yarda de cerveza que pidió. Su vida en tres meses cambió drásticamente, de un momento a otro el amor que Akihiko decía profesarle se esfumó como la espuma de su bebida. Y el mundo es tan pequeño que el amante de Usagi resultó ser el novio de Miyagi san.
—Misaki, cuando gustes puedes regresar a casa, mi corazón y familia siempre te recibiremos con mucho cariño. No tienes que pasar por esto tu solo. No sabes cuanto lamento haberte enviado con Akihiko.
—Todo tiene un porqué hermano, gracias por la oferta pero, ya tengo una vida hecha aquí en Tokio, mis amigos y trabajo me mantienen ocupado.
—Misaki... ¿tú tienes una relación con ese tal Miyagi Sensei?
—No, solo coincidimos en un incidente hace casi un mes y resultó en lo que escuchaste en la pelea con Akihiko.
—Misaki, quiero que me tengas confianza, no me ocultes nada. Fue algo doloroso enterarme que Akihiko y tú eran pareja; más cuando se casaron y no fuiste tú quien me lo dijo.
—Lo siento nii-chan
—Te ayudaré en lo de tu divorcio Misaki.
—No hermano, Akihiko es quien debe ponerle fin a esto. Él me traicionó y él es quien debe entregar él acta de anulación de matrimonio. Ya no voy a poner esfuerzo, mucho menos dinero en esta farsa de relación. El debe de encargarse de todos los trámites.
—Sabes que cuentas conmigo, me quedo un poco tranquilo al saber que Yuu y Aikawa están contigo. Y tienes que decirme quien es Iason.
—Solo un conocido de una borrachera. No te preocupes. Quiero ir a descansar a casa con todo lo que ha pasado me siento muy agotado.
—Como gustes, despídete de todos y regresó por ti....
Viajaron en silencio, Takahiro muy atento espero hasta que Misaki cerrara la puerta y puso en marcha el auto.
Misaki se desparramó por la puerta y quedó pensativo por varios minutos. Recordó que tenía que hacer unas llamadas a ciertos autores y fue al despacho.
El timbre sonaba con insistencia, Misaki creyendo que era Takahiro abrió la puerta muy rapido.
Al instante un Miyagi algo ebrio caía pesadamente sobre él tumbándolo al piso.
—¡Sen...Sensei!! ¿Que...
Los ojos dilatados del profesor lo miraban con ternura
—¿Estas dispuesto a llevarte mi dolor... Misaki..?
Sin pensarlo atrapo los labios del castaño en un beso muy demandante......
Hola qué tal gracias por leer
putiza: termino usado en Mexico para referirse que alguien va a ser golpeado hasta dejarlo inconsciente …
Ojete: Esa persona o zángano sin sentimientos que te hace pasar malos ratos.