Capitulo 17: Un juego peligroso
Afrodita despertó y bostezo sentándose en la cama. Sonrió Radamantis había salido de viaje por ordenes de Hades el día anterior y estaría al menos tres días fuera y hoy era 10 de marzo, hoy era su cumpleaños. Su bebe pareció darle los buenos días con una patadita en su vientre. Afrodita se lo acaricio.
-Buenos días princesa-dijo con una sonrisa se levanto de la cama y se metió al baño. Se dio un rico y largo baño. Luego eligió entre sus ropas las más hermosas y que mejor le sentaran a su cuerpo de seis meses de embarazo. Salió tarareando para desayunar en el comedor con todos. Pero al entrar al comedor se quedo sorprendido y una sonrisa escapo de sus labios.
Sus compañeros se habían acordado de su cumpleaños. Habían globos por todo el comedor, un cartel que decía feliz cumpleaños Afrodita. Regalos y un banquete por desayuno.
Kannon se acerco a el tomo su mano y la beso. Afrodita le sonrió y dejo que lo llevara a la mesa. Desayunaron en alegre charla, Kannon, Sorroneto, Milo y Jabu se dedicaron a consentir al embarazado. Luego del desayuno abrieron los regalos. Sorroneto le regalo un bello collar de perlas marítimas hermoso. Milo le regalo una túnica nueva de color aguamarina a juego con sus cabellos. Jabu le regalo un juego de aseo con aroma a rosas justo como a Afrodita le gustaba y Kannon, su regalo fue el más especial de todos.
Kannon le dio un guiño cómplice a sus compañeros y levantándose le pidió a Afrodita que lo acompañara. El pisciano le dio su mano y con una mirada curiosa lo acompaño. Kannon lo llevo a sus propias habitaciones como el favorito de Radamatis, las habitaciones de Kannon eran las mas grandes. Pero afrodita se emociono al verlas, decoradas con sedas como sacadas de un cuento árabe y en la cama con sabanas de seda blanca un corazón de pétalos de rosa rojas. Antes de que Afrodita pudiera reaccionar o preguntar algo. Kannon lo tomo en sus fuertes brazos como se tomaría a un esposo y lo llevo al lecho.
-Kannon-se sonrojo Afrodita. El de géminis sonrió.
-Te amo-le dijo al peliazul antes de besarlo dejándolo en el medio del corazón hecho de pétalos en la cama.- Quiero hacerte el amor, pero solo si tu me dejas.
-Pero Radam...
Kannon acallo a Afrodita con un dedo en sus labios.
-shhh no menciones ese nombre, el no esta aquí y ahora solo somos tu y yo-le aseguro suavemente. Afrodita sonrió.
-Estoy gordo-le recordó.
-Estas hermoso-fue la respuesta del geminiano que le acaricio con devoción la pancita. Afrodita sonrió encantado cuando era Kannon el que alagaba su belleza le encantaba.
-Te amo-le dijo el pisciano y por respuesta empezó a desabrochar la camisa del geminiano. Kannon sonrió ante la aceptación de su pececito y el también comenzó a desnudarlo.
Kannon lo beso con ternura y Afrodita abrió sus labios permitiendo el aseso de la lengua de Kannon en su boca, sacando su lengua al encuentro de la del geminiano ambas lenguas enredándose juguetonas, mientras las inquietas manos se movían desasiendo la estorbosa ropa. Kannon pellizco con sus dedos de forma suave los pezones de Afrodita. Afrodita se arqueo soltando un gemido fuerte, esa parte de su cuerpo estaba muy sensible debido a su estado. Kannon sonrío al ver lo que la acción producía en su pisciano. Así que se inclino y tomo un pezón en su boca pasándole solo la lengua, mientras que el otro lo acariciaba con la punta de sus dedos. El pene de afrodita se irguió sumamente excitado mientras este gemía con fuerza meneando su cabeza hacia los lados desesperado por las corrientes de placer.
Kannon se apiado un poco de su pececito y al fin tomo el pezón completamente en su boca succionándolo, el pene de Afrodita goteo de la excitación mientras el pececito le jalaba los cabellos a Kannon sumamente excitado, jamás se había sentido así con Radamantis por que la diferencia estaba en que a Kannon si lo amaba en que eso lo estaba asiendo por que quería.
Kannon procedió a darle el mismo tratamiento al otro pezón para que no se pusiera celoso, dejándolos ambos duros y erguidos, luego trazo un camino de besos sobre el abultado vientre venerándolo prácticamente. Aun cuando no era sanguíneamente suyo aquel bebe, lo amaba y lo adoraba como si lo fuera realmente y solo por ser de Afrodita.
Afrodita podía sentir el cariño con el que trataba a su bebe protegido dentro de su cuerpo y se sintió mas amado que nunca en su vida, mientras sus ojos se llenaba de lagrimas.
Kannon siguió descendiendo pero ignoro el pene de Afrodita si lo tocaba este terminaría por estallar. Afrodita separo sus piernas por que quería a su geminiano entre ellas. Kannon beso sus muslos y entero su cabeza entre estos buscando la entrada del pisciano lamiéndola lubricándola con su saliva y luego empezó a prepararlo con sus dedos pero el de piscis ya estaba desesperado.
-Por favor Kannon basta-le rogo-te necesito dentro de mi-le suplico-ahora.
El geminiano fue obediente y se irguió sentándose en la cama y haciendo a Afrodita sentarse sobre su pene era la mejor posición para no aplastar el vientre del pisciano y mientras Afrodita solito se empalaba gimió de gusto echando la cabeza hacia atrás y Kannon aprovecho para atacar su cuello, besándolo y lamiéndolo, le hubiese gustado chuparlo asta dejarlo marcado pero Radamantis luego podría descubrir la marca y eso era muy peligroso así que se contuvo. Afrodita tomo su rostro con las manos y lo beso mientras que Kannon lo tomaba de la cintura para ayudarlo a moverse.
El éxtasis les llego a ambos a la misma vez, aun besándose, Afrodita se corrió en el vientre de Kannon y Kannon dentro de las entrañas de su amado antiguo caballero de la doceava casa de oro.
Ambos cayeron rendidos sobre la cama en una maraña de brazos y piernas, con sonrisas satisfechas en su rostro.
-Te amo-le dijo Afrodita.
-Te amo-le repitió Kannon-feliz cumpleaños-le deseo besándolo de nuevo.
-Oh que hermoso-la voz se escucho desde la puerta. Kannon y Afrodita sintieron un escalofrió recorrer su columna vertebrar y se miraron a los ojos con horror, esa era la voz de Radamantys en la puerta de la habitación de Kannon.
El juez había llegado antes de tiempo.
Continuara...