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Verdades Ocultas por La_Oscura_Reina_Angel

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Notas del capitulo: otro fic mas con el que ya me puse al dia ^^
 

Capítulo 9: Yo estoy contigo

 

Los segundos que tardaron los paramédicos en volver a hacer latir el corazón de William, para todos menos para el inconsciente David, fueron años. Cuando uno de los paramédicos gritó.

 

- Rápido, respira, a la ambulancia.

 

Kadaj y Jakiel al sentir que sus pies no los aguantaban más, se desplomaban en los brazos de Yazoo por el alivio.

 

Tanto William como David fueron llevados por los paramédicos. Shiyuki, Kadaj, Yazoo y Jakiel fueron en la limusina al hospital.

 

* * *

 

En la sala de espera esperaban todos. Yazoo abrazaba a Jakiel, quien no había parado de llorar a pesar del dolor de cabeza horrible que tenía, no podía dejar de llorar simplemente.

 

Kadaj no sólo lloraba sino que caminaba de un lado para otro desesperado, mientras Shiyuki, visiblemente nervioso, golpeaba con su pie el suelo.

 

- Con un demonio, por qué tardan tanto.

 

Maldijo el mayor de los Shikura. En eso un médico salió y caminó hacia ellos.

 

- ¿Familiares de los Montes?

 

Preguntó. Todos dijeron que sí, ya luego darían explicaciones.

 

- Ha sido demasiada tensión para el señor David Montes. No creemos que podamos salvar al bebé. - Dijo el médico con pesar.

 

- ¿Bebé?

 

Preguntó Shiyuki en shock.

 

- Sí, bebé, el señor David Montes está embarazado.

 

Sólo le tomó unos segundos entender a Shiyuki de quién estaba embarazado David.

 

- Mío - Susurró - Ese bebé es mío - Repitió - Tiene que salvarlo. A ambos - Le exigió al doctor.

 

El doctor lo miró con lástima.

 

- Haremos lo que podamos, señor - Le prometió - En cuanto al más joven, William Montes, sigue en quirófano, temo que necesitaremos una transfusión de sangre de él. ¿Alguno de ustedes es compatible?

 

- No lo sé, pero yo dono mi sangre.

 

Dijo Kadaj decidido.

 

- Y yo.

 

Dijo Jakiel. Kadaj y Shiyuki asintieron también.

 

- Les haremos las pruebas.

 

Dijeron los médicos.

 

***

 

Jakiel, como era de esperarse para Shiyuki, que sabía la verdad, era compatible con William, y fue llevado para hacer la transfusión de sangre. Al final Yazoo tuvo que pedir un tranquilizante para su hermano y amenazar a su padre con uno para él si no se tranquilizaba y dejaba de acosar a los médicos.

 

Poco tiempo después todos estaban en el cuarto donde habían dejado a Jakiel, con un suero puesto luego de la transfusión, cuando la puerta se abrió.

 

Por ella entro una japonesa muy parecida a Shiyuki, hermosa, pelinegra y de ojos verdes, alrededor de los treinta y nueve años, a su lado una hermosa pelirroja de cabellos rizos, de ojos pardos y de rasgos latinos, que no rebasaba los treinta y dos años. Ambas venían acompañadas por un chico de rasgos japoneses y ojos verdes, pero cabello rojo como la latina, aunque a diferencia de ella, lacio como la japonesa y la pelirroja portaba en sus brazos a un niño pelinegro de ojos pardos que no debía de tener más de tres años, y era sinceramente adorable.

 

Eran Anzu Shikura, Lanie de Shikura, su esposa, y sus hijos, Reiji el mayor y Kichii el menor.

 

- Veníamos de visita, pero cuando llegamos a la mansión nos dijeron todo y vinimos de inmediato para acá.

 

Dijo Anzu acercándose a su hermano y abrazándolo. Lanie, mientras, saludaba a Yazoo y a Kadaj. Su hijo mayor, Reiji, quien tenía quince años, saludaba a sus primos, y Kadaj le quitaba de los brazos al pequeño Kichii de tres años.

 

Lanie se volteó hacia Jakiel y quedó estática mirándolo con el corazón removido. Aquel muchacho era la mezcla perfecta entre David y Gary. Se inclinó sobre él y lo besó en la mejilla.

 

- Hola, hace muchos años que no te veía. Jakiel ¿verdad?

 

Jakiel asintió extrañado.

 

- ¿Nos conocemos?

 

Preguntó mirando con curiosidad a la pelirroja. Lanie asintió con lágrimas en sus ojos pardos.

 

- Sí, aunque supongo que no me recuerdas. Soy Lanie de Shikura, la esposa de Anzu. Ellos son mis hijos, Reiji y Kichii, pero me conociste una vez como Lanie Torres, tus padres eran mis mejores amigos. Gary Mascoly y David Delacirt.

 

Jakiel le sonrió amablemente.

 

- No, me confunde con William, y es hijo de David Delacirt y Eddiel Montes, no de Gary Mascoly.

 

- No - Negó Lanie con la cabeza - William es tu hermano mayor, jamás los confundiría, William era un precioso crío de ojos grises y cabello negro, pero tú tenías el cabello de David y los ojos de Gary, eso no ha cambiado.

 

- ¿U... usted... usted está diciendo que mi pa' es David Delacirt?

 

Sólo entonces Yazoo, que había estado hablando con Reiji, Kadaj, quien estaba concentrado en Kichii, y Shiyuki, quien hablaba con Anzu, miraron a la pelirroja.

 

Lanie les devolvió la mirada confundida.

 

- ¿No lo sabía?

 

Preguntó lo obvio tragando saliva.

 

- No, Lanie, no lo sabía.

 

Suspiró Shiyuki negando con la cabeza resignado.

 

- ¿Me pueden explicar de qué demonios hablan?

 

Exigió Jakiel.

 

- Es una larga historia que todos deben de oír. Es hora de que se acaben las verdades ocultas - Dijo Shiyuki con un suspiro - Tú conoces el principio de esta historia, Lanie ¿La contarías?

 

Lanie asintió.

 

- Pero necesitaré tu ayuda para eso, Shiyuki, yo sólo sé hasta que Eddiel Montes se los llevó de mi vida.

 

Shiyuki asintió.

 

* * *

 

Cuando David despertó tenía suero y muchísimas máquinas conectadas a su cuerpo, algunas eran para verificar su tensión, ritmo cardíaco y demás, y otras para verificar lo mismo en el feto.

 

Miró a su alrededor aturdido, vio a Yazoo y a Kadaj acostados en un sofá, mejor dicho, Yazoo estaba sentado en un sofá y sobre su regazo dormían Kadaj y un joven japonés pelirrojo (Reiji).

 

Dos mujeres dormían abrazadas y sentadas al otro lado del sofá. Junto a su cama, al lado derecho, estaba Shiyuki sentado en una butaca y movió su cabeza al lado izquierdo al sentir un extraño calor en su mano, entonces vio a Jakiel, traía un pie de suero con la bolsita, y era la mano con el suero la que tenía puesta sobre la mano izquierda de David.

 

(N/A: Todos sabemos que no puede haber tanta gente en un cuarto de hospital, pero el dinero lo puede todo, y en cuanto a Kichii, el niño pequeño de Anzu y Lanie, se lo llevaron a la mansión Shikura)

 

David tardó unos segundos en saber dónde estaba y por qué.

 

- ¡William!

 

Gritó al recordar. Todos despertaron sobresaltados, las máquinas se dispararon, la presión de David así como su ritmo cardíaco comenzaron a subir.

 

Shiyuki se abalanzó sobre él, Lanie salió corriendo a buscar a un enfermero, los demás no sabían qué hacer.

 

- Me quiero morir, mi hijo, mi hijo está muerto.

 

Gritó David histérico sin oír a Shiyuki, que le rogaba que se calmara. Jakiel, sollozaba con el corazón roto.

 

- No, por favor pa', no hables así.

 

Sólo al oír la voz de Jakiel llamándolo pa', David dejó de gritar y forcejear, y se volteó hacia su otro hijo.

 

- Jakiel... - Balbuceó - William, está muerto, por mi culpa y...

 

- Shhh - Lo calló Jakiel poniéndole un dedo sobre los labios. - William está vivo, los paramédicos lo salvaron pa'.

 

Los ojos de David se iluminaron.

 

- ¿Vivo? ¿No me mientes?

 

- No pa', no te miento.

 

David comenzó a llorar de la emoción.

 

- David, cálmate, le harás daño a nuestro hijo, no llores.

 

Le pidió Shiyuki.

 

- Sí pa', le harás daño a mi hermanito.

 

Le dijo Jakiel. Sólo entonces David se dio cuenta de que Jakiel no le llamaba pa' como acostumbraba a hacerlo sino como si de verdad lo fuera.

 

- Jakiel... tú sabes que...

 

- ¿Que tú eres mi verdadero pa' y Gary Mascoly mi padre? ¿Que me llamo Jakiel Mascoly Delacirt? Sí, ya lo sé pa', y ha sido la mejor noticia de mi vida saber que soy tu hijo, que Kiromoto no es mi padre y que William es mi hermano.

 

David miró a Shiyuki acusadoramente.

 

- Tú se lo dijiste - Lo acusó - Pudiste haber logrado que me odiara, que nunca me perdonara.

 

Le reclamó.

 

- Él no me lo dijo pa', y jamás te podría odiar.

 

Lo defendió Jakiel.

 

- ¿Entonces quién te lo dijo?

 

Preguntó David confundido.

 

- Se lo dije yo, David.

 

Dijo una pelirroja que había entrado a la habitación acompañada de un enfermero.

 

- ¿Y tú quién eres...? - David calló al reconocerla - ¿Lanie? - Preguntó de pronto emocionado.

 

La pelirroja asintió con lágrimas en los ojos.

 

- Lanie Torres.

 

Gritó David emocionado abriendo sus brazos y Lanie se arrojó sobre ellos.

 

El enfermero carraspeó y Lanie se apartó de David.

 

- ¿Qué haces aquí?

 

Preguntó David impresionado.

 

- Digamos que pertenezco a la familia Shikura desde hace dieciséis años. - Dijo Lanie - Soy la esposa de Anzu, la hermana de Shiyuki. Y ya ves que tu hijo no te odia. - Le sonrió.

 

David miró a los ojos a Jakiel.

 

- ¿De verdad no me odias? ¿De verdad me perdonas?

 

Jakiel no pudo reprimir las lágrimas y lo abrazó.

 

- No tengo nada que perdonarte pa', te amo.

 

Le juró Jakiel y pa' e hijo se abrazaron como lo que realmente eran después de muchos años.

 

- Necesito revisarlo señor Montes... - Comenzó el enfermero, pero fue interrumpido por David.

 

- Si pretende que lo deje revisarme a mí o a mi bebé, más le vale llamarme David Delacirt o David a secas.

 

- En un futuro, David Shikura - Dijo Shiyuki y luego miró a David con amor - Claro... si David me acepta.

 

David abrió sus ojos impresionado.

 

- ¿Me estás pidiendo matrimonio?

 

- Sí, así son los Shikura al pedir matrimonio - Sonrió Lanie en un susurro mirando a su esposa. Anzu sonrió culpable abrazándola por la cintura y Reiji entornó los ojos divertido ante su madre y su mamá.

 

- Sí David. ¿Te casarías conmigo?

 

Pidió Shiyuki mirándolo a los ojos.

 

- Sí - Asintió David en shock - Claro que sí - Gritó con una gran sonrisa.

 

El enfermero sonrió.

 

- Bueno, si no sale de aquí, no se podrán casar así que déjeme revisarlo, David, y a su bebé también.

 

David asintió extendiendo su mano hacia Shiyuki mientras se acostaba en la cama para dejar trabajar al enfermero.

 

Shiyuki tomó su mano con cuidado de no mover ni lastimarlo con alguno de los sueros que tenía puesto.

 

- Señor, ¿cuándo podré ver a mi hijo William?

 

- El joven William se libró de esta - Le sonrió el enfermero - Sólo una pierna rota que sanará con el yeso, y la cicatriz de una bala. Aunque gracias a Jakiel, quien donó la sangre para su hermano mayor.

 

- ¿Es que todos lo saben ya?

 

Preguntó David confundido.

 

- Jakiel se lo decía muy orgulloso a todo el mundo. - Rió Reiji. Al ver que David lo miraba confundido se presentó - Soy Reiji Shikura Torres, hijo de estas dos hermosas mujeres aquí - Sonrió abrazando con cariño a Anzu y Lanie.

 

David le devolvió la sonrisa.

 

- ¿Cuándo podré ver a mi hijo?

 

Preguntó David.

 

- Sí, ¿cuándo podré ver a mi novio?


Preguntó Kadaj ansioso.

 

El enfermero le sonrió a ambos donceles.

 

- Mañana temprano seguramente lo podrán ver.

 

Les aseguró.

 

- Bueno - Habló Reiji - Yo creo que mejor me llevo a estas dos mujeres de aquí - Dijo señalando a su madre y a su mamá. - Estarán más cómodos con el cuarto más vacío.

 

Anzu y Lanie asintieron, prometiendo volver al día siguiente, y se despidieron marchándose con su hijo mayor.

 

- Deberían de irse a casa - Dijo Shiyuki a sus hijos y Jakiel - Yo me quedaré con David y hoy no podrán ver a William.

 

- Yo me quedaré con mi pa' también.

 

Dijo Jakiel poniendo ojos de cachorrito, y nadie pudo negarse.

 

- Yo me quedaré haciéndole compañía a Jakiel, no quiero dejarlo solo.

 

Dijo Yazoo acariciando los rubios cabellos de su ángel personal, y su acción fue recompensada con una dulce sonrisa de Jakiel.

 

- Yo también me quedo, por si hay algún cambio con William - Dijo Kadaj firmemente.

 

- Gracias a todos - Les sonrió David - No sólo les debo mi vida, sino también la de mi hijo mayor y la del que pronto nacerá. - Sonrió David bostezando, pues el médico le había inyectado en el suero un tranquilizante para ponerlo a descansar y que siguiera recuperando fuerzas.

 

***

 

Kadaj y Jakiel habían intercambiado lugares. Todos dormían menos Jakiel, quien estaba despierto aún entre los brazos de Yazoo.

 

Yazoo lo sintió moverse y se despertó, hacía un rato un enfermero le había quitado el suero a su ángel.

 

- ¿No puedes dormir? - Le preguntó el japonés al rubio menor.

 

- Te observaba dormir y pensaba.

 

Sonrió Jakiel.

 

- ¿En qué?

 

Le preguntó Yazoo curioso, besándole la frente.

 

- En que al fin entiendo qué es esto que siempre sentí por William y por mi pa'. Sabía en mi interior que David era mi pa', por eso lo adoraba. Y en cuanto a William, ahora entiendo que nunca estuve enamorado de él, sino que la sangre nos llamaba, que lo amaba como un hermano sin saberlo. - Aceptó Jakiel con una sonrisa, pues al fin había aclarado su interior. - Yo... ahora lo entiendo. Yazoo...

 

- ¿Qué?

 

Preguntó Yazoo mirándolo con una sonrisa dulce.

 

- ¿Me perdonarías por ser tan idiota?

 

- ¿Por qué dices eso?

 

- Porque me negaba a creer que te amaba. Pensaba que traicionaba a William y ahora lo entiendo. Te amé desde el primer momento en que te vi. Tenía miedo, tenía miedo de terminar como mi pa' o como aquella buena mujer que me crió. Tu poder, tu férreo carácter, así como me enamoraron me asustaron.

 

- ¿Estás seguro de lo que dices Jakiel? Sólo estás confundido amor y...

 

Jakiel lo calló poniendo sus labios sobre los de él.

 

- No, no estoy confundido por lo que digo, estoy completamente seguro, te amo Yazoo... la pregunta es.. ¿Aún estoy a tiempo de tener tu amor?

 

Yazoo le sonrió y lo abrazó besándolo.

 

- Ese siempre ha sido y será tuyo.

 

Le aseguró el japonés y se volvieron a besar.

 

David, quien se había despertado, miró todo con una sonrisa y se volteó hacia el otro lado para darles privacidad y fingir dormir. Entonces se encontró con los ojos de Shiyuki abiertos, y ambos se sonrieron cómplices.

 

Continuará...

 

En el próximo capítulo: el final. Y empieza la última parte de esta serie ‘Ardiente pasión:  la mafia' ^^

 

LA mafia Italiana contra la japonesa ¿qué os parece? ^^

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