Kyungsoo ha estado dos semanas en las ciudades, Incheon y Daegu. Asistiendo a reuniones con otros líderes del narcotrafico y estableciendo nuevos perímetros para que no haya problema con otros bandos. Había estado pensado en Tao, y lo había llamado al teléfono del club (en las noches cuando este estaba de turno), pero este no le había contestado. Más bien, sí, le contesto a la primera, y le dejo en claro que no quería saber más de él.
Esto descoloco a Kyungsoo de sobremanera, no sabía que había hecho mal. Fue una de las razones por la cual terminó matando a dos de los hombres de la familia Hwan por interrumpirlo cada vez que hablaba sobre una proposición.
Kai estaba más que sorprendido al igual que Yixing, el cual trataba de razonar con los líderes contrarios respecto a las acciones de Kyungsoo. Claro que los Kwon, Goon y Nam, no estaban para nada complacidos con las actitudes del nuevo joven jefe de la familia Do.
D.O’s POV
Me sentía confuso, nunca me había sentido de esta manera. Le entregue el arma a Kai otra vez y tome asiento junto a Yixing, frente a los otros líderes. Saque mi teléfono del bolsillo y busque el número del club para llamar a Tao, pero no marque, solo lo mire fijamente por unos segundos antes de escuchar un carraspeo.
— sí eso es todo, me retiro -me levante y les miré serio antes de darme la vuelta y salir del lugar- Yixing, quiero un listado de lo que hablaron mañana por la mañana
— sí, señor -Lay frunció el ceño, sabía que quien lo tenía así era Tao-
Luego de escuchar la respuesta de Yixing, me fui del lugar por completo y entré al auto que fue conducido por Chanyeol rápidamente. ¿Qué pasaba con Tao? ¿Por qué no me respondía?
Tao’s POV
Tao trato de enfocarse de nueva cuenta en su trabajo y estudios. Los finales ya estaban a la vuelta de la esquina, y andaba estudiando por las mañanas, dormía un rato por las tardes y en las noches se iba a trabajar hasta bien entrada en la madrugada.
No había tenido más privados luego del incidente aquel. Más bien era porque Sunggyu le había dado unos días para que no hiciera temporalmente los privados. Hacia de compañía, striptease, y limpiaba cuando era necesario. Sunggyu había vuelto con unos moretones y un brazo fracturado, lo cual me preocupó, pero entendí que Sunggyu quizás se metía con gente peligrosa también.
Tiffany, cada vez más, le miraba con odio. El problema con los aretes se había resolvido, pero cada vez que podía le hacía una jugada a Tao. Sunggyu no hacía nada al respecto, pese a que Tao fue a quejarse.
Pensaba en Kyungsoo mucho, pero aquella advertencia tenía más peso para alguien como Tao, que no tiene nada más que su propia vida y apenas sus estudios terminados. Sabía con antelación que le gustaba el joven Kyungsoo , pero aunque sabía que estaba mal, no le importaba. Sin embargo, ignoraba las llamadas y mensajes de dicho joven, no quería problemas.
No quería causarle problemas a Kyungsoo, cuando a penas y le conocía. No había pasado 2 meses desde que lo había conocido y ya tenía un gran impacto en su vida.
Sungjong me halo del brazo y nos dirigimos hacia un cliente que estaba sentado en el segundo piso (zona VIP). Nos sentamos y mire hacia abajo, la música retumbaba en aquellas paredes, personas bailando, cuerpos sudados y luces que cambiaban de color hacían dicha escena, digna de un club nocturno.
Lleve mi vista hacia mi cliente, un hombre mayor, en sus 30 años y con esposa supongo, por la sortija que lleva puesta. Sungjong le hacía reír mientras su mano acariciaba mis muslos de arriba a bajo. Le serví más vino para que el tiempo se fuera más rápido a mi pensar.
POV Normal
La noche siguió transcurriendo, y el club se fue vaciando a medida que la gente se iba, supongamos que para sus casas. Tiffany se había ido junto con otros compañeros. Tao se quedo un poco para meter sus pocas pertenencias en su mochila junto con el dinero recaudado de esa noche.
Cuando salió, se despidió del bartender y de los chicos que limpiaban el desastre que otras personas dejan atrás en el club. La noche era fría, y oscura, pero cómoda por el silencio que está traía. Tao camino hacia su apartamento, ya que el bus no trabaja hasta altas horas en la noche.
Cuando llegó y entró a su casa, comenzó hacer lo que hacía luego de recibir aquella carta: inspeccionar de que no hubiera nada ni nadie en su apartamento. Llamémosle paranoico, pero quería estar seguro. Luego de eso, tiro su ropa al hamper y se metió en la ducha. Al terminar de lavarse, se secó y vistió con unos bóxers y una camisa holgada, para posteriormente cepillarse sus dientes.
Se fue directo a su cuarto y cubrió con las mantas para dejarse llevar por Morfeo. No pasó mucho para que el sonido proveniente de su puerta de entrada lo despertase. Eran las 3:30AM para cuando se levantó todo desorientado y alterado por el ruido. Tenía miedo, y eso lo despabilo un poco de su sueño.
Se acercó rápidamente, pero despacio sin hacer mucho ruido para poder encender la luz y luego abrir la puerta posteriormente.
Pero lo que encontró, no fue lo que espero. Ahí yacía Kyungsoo, vestido de negro, pelo ondulado alborotado y con sus mejillas humedecidas, nariz y ojos rojos de haber llorado probablemente.
— ¿Qué pas... -no logró terminar lo que iba a preguntar porque el menor le abrazó fuertemente-
— ¿Por qué me ignoras? ¿Hice algo malo? ¿Te incomode? -preguntó despacio y con voz casi inaudible mientras finas lágrimas bajaban por sus pálidas mejillas- yo lo siento por cualquier cosa que hice Tao, pero no me ignores -sorbió por la nariz- dime que hice por favor
Tao quedo perplejo, sintiendo su corazón encogerse y romperse, con una mano le rodeó y con la otra comenzó acariciarle el cabello. No sabía cómo apaciguar su dolor y preocupación. No sabría si decirle acerca de la carta o no. Llevo el menor adentro y aseguró que la puerta estuviera bien cerrada con un Kyungsoo abrazado a él, antes de llevarle a su habitación y ambos acostarse para dormir: ambos abrazados.
Mañana hablarían.