- como no vas a sufrir o a llorar cuando tienes a una zorra que te dice todo lo que quieres oír, que es aceptada por tu padre, que es bonita, que tiene buen cuerpo, que te ama, y yo... solo intento reemplazarte con un despojo de hombre que solo va a golpearme...- se alejo - vete, déjame en paz.
-Severus... - ya no lo seguiría, solo lo vio irse y soltó un suspiro viendo como había destrozado tanto a ese niño que lo único que hizo fue amarlo, ese fue su único pecado, enamorarse de él...
En cuanto el menor se fue de entre las sombras salio un chico, detrás de Lucius.
- No crees que es... injusto? - pregunto Sirius después de ver toda la escena - si solo quería que te lo quitara de encima no hubieras venido a decirle nada.
-Sirius... yo lo quiero mucho, pero el no hubiera comprendido por si solo que ahora estoy enamorado y quiero a alguien mas, no quiero su amor, no quiero su cuerpo, ni sus problemas en mi vida, me duele hacerle esto, pero deseo ser feliz- dijo sin mirar a Sirius.
- feliz... a costa de que? de la desdicha de el? -
-no le estoy quitando nada, que quiere que haga? que llore por el?-
-no Lucius... el solo te quería a ti...- hubo un silencio de unos minutos
-te aumentare la paga, con tal de que esto parezca aun mas real - le dio una bolsita de tela llena de Galeones - comprale algo bonito, y lo que sobre para ti. El gryffindor tomo el saquito de monedas y miro a la serpiente.
-esta bien, me esforzare...-
-ahora ve a buscarlo, no quiero que llore mas- se acomodo su uniforme y camino a el comedor, Sirius por otra parte, sintiéndose mas culpable que nada, pensaba, como Lucius podría ser así?, había tenido un relación de varios años con el mas joven, y antes de dejarlo durante meses le coqueteo a su prima y le mintió de manera cruel a ella que el estaba soltero cuando detrás de aquello estaba Severus con su pobre corazón en sus manos entregándoselo por completo a Lucius, y peor aun... Narcissa que se Hacia llamar amiga de Severus, sabia bien como el menor sufría por el que ahora era su novio, y la maldita ni siquiera fue de esperarse un tiempo a que Snape sanara su ya destrozado corazón.
Se detuvo unos momentos cuando encontró a Severus, el menor estaba hecho un mar de lagrimas, que debía decirle?. Tenia ambas manos en los bolsillos y una de ellas jugaba con el morral lleno de monedas.
-Sev...- el menor al escuchar la voz levanto su rostro totalmente húmedo, se limpio sus lagrimas amargas.
-Sirius... creí que...- fue interrumpido por el gryffindor
-vi como te fuiste del gran comedor, me preocupe, te dijeron algo malo?- pregunto sintiendo pena por ese niño.
-estoy bien, solo... olvídalo Sirius, estoy bien- fingió una sonrisa.
- eres malo mintiendo, cosa rara en ustedes- dijo con cierto sarcasmo viendo la cara mojada del menor.
- perdón... solo, no estoy bien. - Sirius puso su mano en la mejilla pálida del mas delgado.
-entiendo que no quieras hablar mucho de ti- se sentó a su lado.
-No me preguntes del pasado,lo que no fue en tu tiempo, déjalo. Por que si sabes demasiado el amor queda condenado, es que no quiero yo perderte-tubo una pausa -te lo digo por que te quiero, es mejor comenzar de cero.-le miro a la cara - Por que hay cosas que no quiero,que no puedo que y no te debo de decir, por que no quieres saber todo de mi,el amor funciona así. Hay palabras que nos matan y hay silencios que nos salvan.
-esta bien Severus, respetare esa decisión - se inclino un poco y le busco los labios para pocos minutos después besarle primero sutil y después ya un poco mas apasionado. -prometo cuidarte Sev, no quiero que sufras mas.
-te lo agradezco... - rápido el menor fue a buscar refugio en los brazos del mas alto.
-No es nada pequeño... - dijo abrazándolo suavemente, en cierta parte le daba algo de pena aquel niño, un tanto ingenuo al pensar que así de la nada alguien como el, que le había fastidiado desde que le conoció sentía atracción a su persona. -quieres que te traiga algo de comer? no vi que cenaras.-
-no... no tengo hambre... solo quisiera... agg... no se que quiero-
-esta bien, te quieres quedar así?- estaban ambos ya sentados en el suelo, abrazados.
-si... - fue lo ultimo que dijo, Sirius básicamente lo cubrió suavemente con la túnica del uniforme, era algo muy curioso de ver, dos enemigos juntos, y el pequeño slytherin cubierto con la túnica de bordes color rojo. Sirius le quito la corbata color esmeralda para dejarlo un poco mas cómodo - no la vallas a perder.... no tengo mas-
-no?... - el tenia al menos unas 3 piezas de la corbata
-no... solo tengo esa.
-esta bien, no la perderé, tranquilo... - miraba la corbata, lucia mas descolorida que la de su hermano Regulus. -quieres que te compre una mas?
-no... no necesito ayuda de nadie, en nada-
-no es una ayuda sev... me gustaría regalarte algo, pero realmente no se que te gusta.
-no quiero regalos, Sirius...- el gryffindor ya no insistió mas, el menor era muy terco.
-esta bien Sev. -
Así se quedaron unas horas, en ese alejado pasillo dándose algunos besos en momentos, hasta que el menor se durmió, se vio obligado a despertarlo unas horas después, lo llevo a Slytherin, lugar donde se despidió de el, y después solo se retiro al dormitorio de su gremio, lugar donde se dio cuenta que la túnica se la dejo a Severus, sus compañeros ya estaban dormidos, vio a james removerse en las sabanas, no quería que le siguieran interrogando, así que no hizo mas ruido, y se fue al escritorio, donde comenzó a trazar en pergaminos, el camino que recorrió a la entrada de Slytherin, lugar que ellos desconocían por completo, y bueno, ahora ya podía trazar, esperaba pronto, poder trazar el nido donde estaban todas las serpientes.
-te mordió los labios? están algo hinchados...
-si, lo hizo...