Hoy le dan el alta a Takano y estoy muy emocionado ya que por fin no estará en el hospital sino que se instalara cómodamente en su casa, sin tener que aguantar las visitas inesperadas de Haitani o Erika.
- por fin estoy en mi casa. Aunque mi madre todavía no volvió de su viaje- ¿Qué clase de madre era ella? No podía comprenderlo. Mi progenitora jamás me dejaría solo. Aunque me siento pésimo por haberle mentido y seguirle mintiendo ya que mi profesor no quiso que volviese a sus clases.
- yo te haré compañía. Podemos ver una película o hacer la tarea que tienes atrasada- ¿en serio dije eso?
- ¿tu piensas en tarea hasta en estos momentos?- ¿Qué momentos?
-solo no quiero que te atrases en la escuela, eso es todo- sin mas me dedique a ver la gran casa de Takano, quien se notaba que tenia mucho dinero, pero que le faltaba cariño y amor
- ¡señor Takano! Que alegría volverlo a ver- una señora de edad avanzada nos recibió mientras yo lo ayudaba a caminar con sus muletas.
-a mi no me alegra verte pero da igual- siempre respondía así. Era grosero. En mi casa jamás le hablamos mal a los empleados, sino que los respetamos
- se mas amable con ella. Después de todo te recibe con alegría- el me miro y posteriormente rió.
-Mei ya esta acostumbrada a mi. Ella me trata peor ¿o no?- la señora solamente sonrío y posteriormente asintió.
-ya me acostumbre al joven. Es un amargado sin remedio, por ello se quedara solo, sin ninguna chica que lo quiera- esas palabras resonaron en mi cabeza. ¿Podría ganar su corazón?
-muy graciosa. Tengo hambre. Prepara dos almuerzos y llévalos a mi habitación- Erika era muy cercana a el pero al parecer no se amaban. Por ello yo quiero que el llegue a quererme de la misma manera en que yo lo hago.
-si no cambia ese carácter espantara al jovencito que esta a su lado, quien parece una buena persona- sin esperarlo el me abrazo por los hombros
-el no se apartara de mi. No lo dejare- y con aquellas palabras yo caí rendido una vez mas por el.
Cuando entre a su habitación me impresione: había tantas cosas que lo identificaban, libros, pósters de futbol, trofeos.
- veamos una película. Elige una- sin mas me mostró la gran pila de dvd que tenia y una de ellas era "la razón de estar contigo" por lo que sin dudarlo puse aquella ya que las películas de animales me encantan.
- ¿tu no tendrías que estar en tu clase? Creí que habías vuelto- y el mágico ambiente se rompió debido a eso. No le había contado a Takano sobre mi situación
-la verdad...es que el profesor no quiso tenerme como alumno nuevamente. Le pareció una falta de respeto mis ausencias por lo que me hecho- amaba tocar el violín, era una manera de ser yo, de conectar con el mundo, de olvidar que estaba solo ya que mis amigos seguían ignorándome.
-pues...si quieres hablare con el. No es por ti, sino que siento algo de culpa por tus faltas- ¿acaso el estaba siendo amable? Era algo nuevo
-eso...me gustaría- sin más me recosté a su lado y ambos nos metimos de lleno en la trama, tanto que no note cuando sus brazos me abrazaron calidamente.
-te dije que te abrazaría mas ¿no es así?- ya corazón...deja de latir tan rápido
-s...i- cuando termino la película un par de lagrimas cayeron. Era muy emotiva
-adoro a los animales. En mi casa tengo un perro llamado Ken- el me miro pensativo y posteriormente miro la pantalla
-yo nunca tuve una mascota. Mi mama es muy estricta con la limpieza y el orden así que no me dejo tener animales- un aura de tristeza lo envolvió y yo solamente pude pensar en regalarle una mascota.
-pues algún día la tendrás y será la mejor experiencia- ambos nos quedamos mirando hasta que Mei nos interrumpió anunciando que la comida estaba lista
-te aseguro que es lo mejor que podrás comer. Ella cocina de maravilla- y tenia razón ya que estaba muy delicioso
-Takano... ¿Por qué eras tan cruel conmigo? Yo...yo solamente quería ser tu apoyo- su mirada se apago por un momento
-quizás...veía en ti lo que yo quería tener. Tu...tienes amigos de verdad...sonríes...no tienes que adecuarte a las exigencias de todos. En cambio yo, siempre quise ser perfecto y ahora...pues nunca me sentí tan solo- no quería hacerlo sentir mal
-pues... me tienes a mi. Jamás te dejare, solamente quiero amarte y darte todo de mi- que vergüenza, no podía mirarlo a los ojos luego de aquello
- pues...gracias. Quizás no soy bueno para ti...quizás mereces a alguien mejor pero... me esforzaré- y cuando sonrío sinceramente supe que lo nuestro tenia futuro. Nuestra historia sería la más bella de todas.