Eran las 8 de la mañana y Alex se preparaba un café en la cocina de la empresa, cada tanto miraba hacia el ascensor.
Cuando por fin se abrió y salió Roberto se apresuró a recibirlo.
-Ey! estoy tomando un café, te preparo uno?
-Alex, tan amable!!! Pensé que Martina te armaría un escándalo después de la fiesta y pasarías un fin de semana del asco! pero veo que mis planes no funcionaron y estás de muy buen humor!
-No estoy de buen humor, sólo de humor normal -mintió el muchacho intentando que la ansiedad pasara desapercibida -Voy a serte sincero, me quedé asombrado con las chicas, ¿son del mismo club de los chicos?
-¿Qué chicas? -preguntó su compañero mientras mezclaba el café.
-Las chicas de la noche del sábado, Roberto!! las de la fiesta de despedida de solteros.
-Ah! esas chicas!!!!! -el compañero levantó la cara y lo miró con picardía -No me digas que te quedaste prendado de la minita que llevaste al baño! Estaba bueno, no?
-Quien?? Ah!! Si, si!! la que me llevé al baño. ¿Pero son del mismo club todos?
-Si! Ramirez, el de contaduría, me lo recomendó.
-Podríamos ir una noche de estas.
Roberto se atragantó con el café y casi tira los pulmones y el estómago, tosiendo. Alex se asustó y le estuvo golpeando la espalda todo el tiempo que duró el suceso que casi mata a su compañero y lo deja sin posible acompañante.
-¿Por qué quieres ir al club? Me imagino que no iras a buscar a la minita -le recriminó con los ojos llorosos por la tos y mientras lo observaba se acercó para susurrarle -Es una prostituta Alex. No quiero problemas con Martina. Me encantaría que cambiaras a esa bruja pero no sé si lo conveniente sería con una bailarina exótica.
-No voy a cambiar a nadie!!!! -susurró él también tapándole la boca y fijándose si alguien más había escuchado eso -quiero ver otras bailarinas, divertirme, el casamiento es dentro de un mes, quería salir y desestresarme, nada más.
Roberto lo inspeccionó, había algo extraño en Alex y no se lo estaba contando.
-¿Sólo es para desestresarte?
-Sólo para eso
-No irás a buscar a la minita que te cogiste el sábado?
-Shhhhhh!!! ni siquiera me acuerdo de la cara.
-Me lo juras?
-Te lo juro.
-OK -contestó mientras se terminaba de preparar una segunda taza de café para compensar la primera que había terminado escupiendo cuando se ahogó. Estaba por salir de la cocina cuando Alex lo paró, tomándolo del brazo.
-Y?
-Y qué?
-Cuando iremos?
Roberto en ese momento se convenció que había algo más, su compañero tenía los ojos casi dilatados por la ansiedad y cuando por fin lo miró detenidamente, observó también que estaba ojeroso.
-Bien Alex, por qué tanta premura? que mierda te pasa? dormiste bien?
Lo estaba por descubrir.
Roberto estaba por descubrir que tenía una necesidad casi urgente por ir al club cuanto antes para ver al enmascarado. Se sintió atrapado. ¿Cómo le explicaba que el gran Alex, heterosexual hasta la médula, pronto a casarse con una de las mujeres más hermosas... estaba a punto de ir en búsqueda de un extraño al que había visto bailar de manera erótica frente a un grupo de mujeres?
Era imposible explicarlo porque ni siquiera él entendía lo que le sucedía. No había podido dormir y cuando lo hacía soñaba con él; y no eran sueños normales justamente!!!! Necesitaba averiguar lo que le pasaba. Necesitaba calmarle a su cuerpo la urgencia que tenía por el otro... y que significaba eso?
No sabía, su cuerpo tenía urgencia por el cuerpo de otro hombre!!!!! Nunca lo había experimentado!!!! pero no podía parar, tenía que verlo una vez más. Tenía la ilusión que si lo hacía, que si lo veía de nuevo, tal vez su vida retornaría a su cauce normal y olvidaría todo.
Y si eso no pasaba?
Si luego quería seguir viéndolo de nuevo?
Juraba que eso era lo peor... porque estaba seguro que no le importaría nada!
-No, no estuve durmiendo bien, ando con insomnio. Ya sabes... de nuevo! está relacionado con la oficina, el papeleo me pone los nervios de punta, el contador me exigió que revise el balance mensual porque hay unos número que no terminan de cuadrar dentro del informe que nos da el banco y es la tercera vez que lo hago!!! hay algo que se me escapa y no sé que es. Toda la semana pasada me quedé haciendo horas extras, esto me tiene estresado, al final siempre termino decantando mi frustración en Martina y la pobre no tiene la culpa, por eso necesitaba salir, tomar unas cervezas y pasarla bien. Es eso o internarme en un manicomio -mintió y se asombró de si mismo por crear la historia en tiempo récord.
-Ok, tranquilo Alex, iremos mañana, te parece? aunque me hablaron de otro club de streepers que tiene fama de ser mucho mejor!
-No! -respondió en voz alta y su compañero se sobresaltó. -Es decir, vayamos primero a rapsodia y luego si no nos gusta podemos ir al otro.
-Alex! estás seguro que es por estres y no porque andas detrás de la bailarina... verdad?
-Roberto... te juro por mi vida que no ando por detrás de la bailarina -contestó con sinceridad, levantando la mano izquierda y poniendo la derecha en el corazón.
-Ok! ok! -inventate una excusa para que salgamos mañana, voy a decirle a Carlos que nos acompañe, te parece?
-Si, no tengo dramas.
-Ok
-Ok
Y Roberto salió de la cocina con su café, Alex se quedó unos segundos más, con su propio café frío en las manos. Tenía el corazón taladrándole el pecho. Era cuestión de esperar hasta el otro día.
-Un día más, Alex -se decía bajito -aguantá un día más!!!!