No fue necesario que Akihiko intentara separar a su hermano del omega porque al instante vio a Masamune desplomarse, y Misaki moverse muy rápido para agarrar a Yuki.
—¡Masamune san!
Grito Misaki y el alpha cayó de espaldas a la vista de todos, él omega como pudo, sujetó a ambos bebés entre sus brazos y Akihiko corrió a auxiliarlo.
No tardó para que Tsumori se acercara a los hermanos para tratar de ayudar al pelinegro
Yasushi miró las pupilas del alpha y después sintió el pulso de su cuello presionando de forma ligera. El médico dio un suspiro al comprobar que era el desmayo producto del vínculo y permitió que el alfa terminara con su despedida
Masamune podía escuchar las voces como si fueran lejanas, en sus ojos cerrados las lágrimas se filtraban empañando su rostro, el entorno era negro y entonces, una delgada figura se dejó ver entre su confusión...
El alpha podía ver a su Ritsu sosteniendo un pequeño bulto cubierto con una manta, su sonrisaera perfecta, con el rostro tan bello que siempre le cautivó y sobre todo esos orbes verdes que destellaban luz y esperanza.
A paso lento el omega se acercó a Masamune y dio un beso en sus labios.
~Yuki es mi último regalo para ti, mi más preciada pertenencia, cuídalo mucho~
Masamune veía a su pequeño hijo durmiendo y a Ritsu depositando al bebé en sus manos.
—Ritsu, no.. no me hagas esto..
~Es algo que no puedo cambiar y sé que estarán bien, no te preocupes Masamune
—No.. tu no entiendes Ritsu..¿Como me pides que no me preocupe? ¿Que voy a hacer sin ti?
~A partir de este momento deberás esforzarte por él, por Yuki, es mi más grande anhelo
—!No! No lo acepto.. !¿Tan fácil para ti es decir esto?! ¡Debes regresar Ritsu!...por favor
~No es fácil para mí tampoco y lo digo de esta forma porque ya no quiero que sufras más. Ya no puedo hacerlo. Mi tiempo aqui ha terminado Masamune
—No.. no te vayas.. no me dejes Ritsu
Suplicó el alfa y Onodera limpio las lágrimas de Masamune con muchos besos.Ritsu sonrió de nuevo y ayudó a su alfa a ponerse de pie y mirar el cielo
~Debes de saber que te amé desde el primer momento que te vi.
Te amaré por siempre Masamune. Dile a Yuki que también lo amo.
—¡Ritsu! ¡Escúchame por favor!
El alpha vio como él omega le sonreía y a paso lento caminaba desapareciendo entre el bosque
—¡Vuelve! Por favor... Ritsu.. ¡Ritsu!
~Te amo Masamune, sean felices
Onodera colocó su mano en el corazón y desapareció.....
Takano aún con los ojos cerrados dejó escapar un sollozo por las últimas palabras de su omega y las lágrimas descendieron hasta su cuello. Akihiko le abrazó para controlar sus espasmos sintiendo mucho pesar por su hermano menor.
Misaki también lo sintió y el último toque de cítricos de Ritsu se sintió en el aire. Abrazo con mucha fuerza a su hijo y sobrino para después dedicarle las últimas palabras a su hermano
~Yo cuidaré de Yuki, es una promesa Ritsu.
Él omega volteó el féretro que ya estaba listo y pidió a los hombres encargados que terminaran de darle sepultura.
Todos los presentes sentían su corazón contraerse por el dolor de Masamune y del omega que sostenía a dos bebes.
Hatori despabiló después del mareo y se acercó para ayudar a Misaki a cargar a Yuki, y esto fue una mala idea, al hacer contacto con la tela de nuevo percibió ese aroma que le alteró los sentidos y buscó entre todos los presentes la fuente del olor pero no tuvo éxito.
Agitado, sostuvo al bebé con más fuerzas y se concentró en su amigo quien era sostenido por Tsumori, sus ojos se abrieron enorme al tratar de recordar donde lo había visto y se sintió terrible.
Era lamentable ver a un alfa despedirse de su omega, no existía peor dolor para ellos que perder a su destinado.
Él lo habia experimentado hace varios años pero nada era tan cruel como la muerte, nada se comparaba con el dolor que tener que despedir por siempre a quien amas con todo tu corazón
Porque así era. El lazo entre Ritsu y Masamune se había quebrado........
Tras terminar el funeral, los Usami junto a Misaki y Aikawa fueron al lujoso departamento de Akihiko para descansar y probar un poco de alimento. Kymi y Yuki dormían en la cama provista para Misaki y este último se encontraba en la habitación del pelinegro.
Misaki escuchaba a Masamune sollozar por la fiebre que le atacaba, colocó un parche frío por su frente y le sostuvo un poco de la muñeca.
Para el alpha el dolor era más intenso por perder a su omega, Misaki aunque hubiese perdido a Kyo, una nueva conexión se formó al instante cuando gestaba a su hijo y después de dar a luz a Kymi el vínculo de madre e hijo se forjó de inmediato y de esta forma el castaño podría soportar mejor la pérdida.
Misaki no deseaba causar molestias a los Usami y menos cuando no tenia ni idea de porqué tanta desgracia en sus vidas.
La puerta fue abierta y Akihiko entraba con calma, no pasó desapercibido para sus ojos como Misaki sostenía a su hermano y de inmediato el alfa liberó su aroma como protesta.
Él omega soltó a Masamune y agachó la cabeza.
—¿Tardará en que le pase la fiebre a Masamune san?
—No lo sabemos, Tsumori san dijo que todo dependerá de mi hermano. A visto a alfas recuperarse en cuestión de días, otros les toma mucho tiempo y otros tantos jamás se recuperan dejándose morir. Su cuerpo está reaccionando a la falta de Onodera, él lo amaba de verdad
—Masamune san no debe rendirse, Yuki le espera
—El lo sabe, te lo aseguro.
Akihiko se acercó al omega y acarició su cabello, Misaki escondió más su rostro por la vergüenza y el alfa le tomó del mentón para observarle, los ojos violetas se clavaron en el castaño quien se sonrojó.
—¿Cuantos años tienes Misaki?
—Te..tengo 22 Usami san
—Te ves mucho más joven, pareces de bachillerato
—Me.. me lo dicen con frecuencia... incluso el primer año de Universidad a veces me negaban el acceso,creían que era un niño de 15 años o menos.
—¿Terminaste tus estudios?
—Si, este año en Economía. Quise apresurarme para que el último trimestre del embarazo lo pasara sin estarme preocupando por la especialidad—Misaki hizo una pausa—Al día siguiente de mi graduación, Kyo y yo nos casamos casi en secreto, él único en asistir fue Ritsu y.. y los bebés—sonrió por aquello él omega
Misaki dio un respiro y se colocó de pie para voltear el parche con que refrescaba al alpha.No quería seguir hablando de su vida porque corría el riesgo de soltar en llanto como todos estos días
—En cuanto Masamune san se mejore, nos iremos de aquí
Akihiko abrió los ojos muy asustado por el comentario del omega y se posó a lado suyo
—No, no tienes porque irte Misaki, ya te dije que yo cuidaré de ti—Akihiko le cogió del brazo y le presionó un poco para que lo mirara— Mi casa está dispuesta para ti y tu pequeño.
—Y yo le agradezco pero, coincido con Aikawa san, en que no debemos estar con los Usami. Usted no sabe el miedo e incertidumbre que siento. Alguien quiso o quiere acabar con mi familia. No sé qué ocurre con mis padres, ni siquiera papá Takahiro se han dado a la tarea de buscarnos, por lo menos a Ritsu si es que lo cree vivo. Estas 2 últimas semanas han sido las mas horribles de mi vida...y si continuamos aquí de seguro todo..
—Basta Misaki—El alfa le agarró de ambos brazos y lo obligó a verlo—Si el problema es que te sientas inseguro, yo veré la forma de ocultarte, te dije que te protegería y estoy viendo las opciones para mudarnos de aquí.
Toda la gente que trabaja para mi tiene ordenes explícitas de no comentar nada de lo sucedido aquí.Ni siquiera la gente de la editorial que vino a despedir a tu hermano.
Misaki se perdió un momento en los ojos del alpha, esos orbes tan idénticos a los de su Kyo no podrían mentirle ó ¿si?
—Yo no puedo Usami san
—Por lo menos en lo que tú te recuperas por completo del parto de tu hijo, por favor Misaki.
—Ya..ya le dije que no quiero causar más molestias..no quiero que usted
—¡Por favor Misaki!
Akihiko en un arrebato de miedo aprisionó a Misaki entre sus brazos y de nuevo esa calidez rodeaba el cuerpo del omega. El alpha jamás había sentido esa necesidad tan fuerte por algo ó alguien. Parte de su razonamiento lo hacía por la forma que Kyo le pidió tan angustiado que cuidara a Misaki y la otra lo hacía porque desde que conoció al omega, algo se había encendido en su cuerpo, una chispa surgió en su corazón.
Misaki respiro profundo la esencia de Akihiko, era muy agradable, no había punto de comparación entre Akihiko y Kyo pero sentir que alguien más quisiera protegerlo le hizo sentirse querido, al menos por ese instante que el de cabello plateado le abrazaba con tanta fuerza.....
Takahiro apenas si probaba alimento de las raciones que diario le ofrecían, él omega lucía demacrado y conforme pasaba su encierro obligado por Fuyuhiko, su cordura se escapaba de poco en poco.
Maldecía de forma constante el día que conoció a Usami y como su vida se convirtió en un desastre, no comprendía la obsesión del mayor por él habiendo tantos omegas jóvenes dispuestos a complacerlo.
El omega apretó el cubierto al oír que la puerta se abría y daba paso a Fuyuhiko.
El alpha se situó a su lado y se inclinó para besarle los labios
—Debes de alimentarte cariño, no es bueno para tu salud si sigues con esa actitud
—Cállate
—No lo haré y menos ahora que ya me perteneces, debes estar sano para que puedas darme un hijo.
—Estas loco
—No, no lo estoy
—¡Si lo estás! Yo..¡Yo ya no puedo tener hijos!
—¿Y esperas que te crea? Investigue todo desde que te conocí. Tu etapa reproductiva sigue intacta por eso es que hueles tan bien
—¡Me realicé una operación para...!
Takahiro fue callado cuando Usami agarró su rostro a la fuerza y le mordía el labio causando un quejido por el dolor.
—Se me olvido platicarte las últimas novedades: Al parecer tu hijito Ritsu esta embarazado, me mostraron una fotografía de hace unas semanas. Seria una pena que ese pequeño no viera la luz ¿No lo crees así Takahiro?—El omega quedó estupefacto y Fuyuhiko sonrió.
—Eres tan fácil de perturbar mi amor y por tu expresión puedo confirmar que ya lo sabías. ¿Por qué no me lo dijiste desde antes?
Takahiro tuvo que aguantarse las ganas de insultarlo y golpearle el rostro, si lo hacía,no habría ninguna duda que Fuyuhiko atentaría con su único hijo que quedaba con vida y con su nieto. Él omega comenzó a llorar y el mayor se agachó hasta quedar a su regazo.
—Como puedes ver mi hermoso Takahiro, no te conviene contradecirme, sé que te comportaras a la altura y puede que te ganes el derecho de ver a Ritsu cuando viajemos a Japón.
—¡¿Iremos a Japón?! ¿De...de verdad?
Takahiro sintió mucha ilusión de ver de a Ritsu.
—Lo haremos juntos si a partir de este momento me tratas como lo que somos: Una pareja y de una vez por todas terminas cualquier vínculo con Ren. No hace falta recordarte que si sigue vivo es gracias a mi.
Así que, tendrás que dejar que te marque, Takahiro.
Fuyuhiko lamió el cuello del omega que muy a su pesar aceptaba que lo hacía muy bien, Takahiro cerró los ojos y volvía a hacerse la misma pregunta de siempre.
¿Que es lo que había hecho mal para quedar atrapado en las garras de ese alpha demente?....
Chiaki se encontraba perdido viendo el jugo de naranja sobre la mesa y solo hasta que a Haruhiko se le cayó el vaso y oyó el estruendo logró reaccionar al ver los pedazos de vidrio en el suelo
—¡¿Estas bien Haru Chan?!
—Si...Lo...lo siento..
Usami se paró de forma torpe para recoger los fragmentos y una mano le detuvo. Tsumori llegaba justo en ese momento después de una ducha y retiró los dedos del alpha para que no se cortara.
Haruhiko no pudo evitar ver los músculos de Yasushi y su cabello mojado. Le sonrió agradeciendo su gesto y permitió que recogiera el vaso roto.
El médico terminó de limpiar y ayudó a Haruhiko a volver a la silla y que terminara de desayunar mientras Chiaki seguía perdido viendo a la ventana.
—¿Qué es lo que te tiene tan idiotizado Yoshino?—Preguntó algo que ya sabía
—¿Eh?....yo...Nada.. no tengo nada. Saldré un momento a caminar.
Chiaki fue a la salida y Tsumori le alcanzó
—Ya sabes que no debes de ir muy lejos, no hasta comprobar que estamos seguros en esta parte de Japón.
—Lo sé Tsumori, no tienes porque repetirlo además te estoy dejando espacio para que puedas estar a gusto con Haruhiko san. Se nota que le gustas, a pesar que no esta del todo bien de sus facultades
Chiaki dijo esto último y salió para relajarse por el inmenso jardín de la propiedad. No tenia el valor para decirle a Tsumori que durante el funeral de Ritsu y Kyo pudo percibir el aroma de Hatori, era un aroma distinto pero conservando su esencia.
Ese día Chiaki regresó al auto donde viajaron y quedó dormido enterándose hasta después del colapso de Masamune.
Su corazón se contrajo y brincó de emoción a partes iguales aunque tal vez no era necesario ocultarlo, Tsumori y Aikawa conocían toda su historia a la perfección......
Los días siguieron su curso dentro de la residencia Usami. Masamune continuaba con fiebres esporádicas pero se negaba en despertar del todo. Por momentos abría los ojos y preguntaba por Yuki y después por Misaki y su bebé.Hace un día por fin probó alimento y volvió a quedar dormido.
Misaki por su parte y a regañadientes de Aikawa aceptó quedarse con Akihiko, hasta que Masamune se recuperara del todo y poder hablar con calma sobre el futuro de Yuki.
El omega no tenia claro de lo que sería de su vida de ahora en adelante. Lo único seguro es que tendría que buscar empleo y con eso brindarle lo necesario a Kymi. Esforzarse por ese par de bebés y cumplir la promesa a Ritsu.
Recordaba lo que le dijo Chiaki sobre la cuenta que Kyo dejó a su nombre, pero no quería hacer uso de ella, lo dejaría todo de reserva para su hijo y sobrino.
Él omega tan perdido estaba en sus pensamientos que no olió al alpha que se acercaba a su lado. Akihiko veía con ternura a Misaki con un delantal de ositos mientras revolvía huevos en un bol para el desayuno
El alpha detalló su cuerpo, si bien la figura armoniosa de Misaki tomaría un poco más de tiempo en percibirse, no podía negar que es muy bello, el pecho levemente crecido por la lactancia era algo que Akihiko no podría pasar desapercibido. Él omega y su hermano fallecido eran muy atractivos en todos los sentidos, siendo Misaki el que más le cautivó después de conocerse.
—Me alegra ver que ya estás retomando tus actividades Misaki.
—Hacer el desayuno es lo menos que puedo hacer después de estar de a gratis en su casa Usami san.
—Ya te dije que por mi no hay problema
—Si lo hay, ya que gracias a que estoy aquí con mi hijo, usted debe realizar sus actividades a escondidas. Se que en este momento hay varios hombres vigilando afuera de la cocina y el resto de su departamento. Y eso debe de ser muy incómodo, he notado que usted es una persona solitaria, le veo disfrutar de esa soledad y cuando se aburre de ello, su salida son los libros tan exitosos que ha publicado. Mi hermano y yo fuimos un par de intrusos que venimos a interrumpir su perfecto ciclo de vida.
Akihiko quedó sorprendido por lo bien que Misaki lo había analizado en estos días y como él omega en ningún momento había intentado otra cosa con el, no a comparación del resto de hombres y mujeres que se le han insinuado por tantos años.
—Usted había vivido en calma todos estos años y mi familia y yo venimos a estropear esa paz.No solo la de usted, debido a que mi hermano se enamoró del suyo todo esto quedó hecho un desastre. Sin proponérnoslo involucramos para mal a usted y sus hermanos.
—En ese aspecto te equivocas, mi vida ha sufrido muchos altibajos y quiero que sepas que no te culpo de nada. Ni a Ritsu del estado de Masamune y no quiero sonar extraño, pero de no suceder todo esto, no te hubiese conocido Misaki, no tendría la oportunidad de que estuvieras aquí conmigo, a mi lado.
Akihiko acortó la distancia entre Misaki para quitar el bol y pasó de forma suave sus manos por la cintura y el rostro del castaño, él omega crispó al sentir el cuerpo de otro hombre sobre el suyo y entreabrió sus labios.
Usami no lo pensó más y dio un beso a Misaki él omega quedó estupefacto, con los ojos abiertos y después una sombra se acercó a ellos..
—¡Akihiko!
Masamune estaba parado tras el alpha y lo jalo del cuello intentando golpearle el rostro...