Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

I N C O R R E C T O por Ckonny Nickole

[Reviews - 44]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

CAPITULO 2.

Naruto se encontró así mismo perdido en sus pensamientos mientras un muy agitado Boruto soltaba preguntas a diestra y siniestra aun excitado por la pelea de ayer. Intentaba ponerle atención o por lo menos responder a algo de lo que este decía, pero su situación actual con Sasuke no era algo que lo fuera a dejar tranquilo en esos momentos.

Es que sí había actuado como todo un cobarde, pero ¿qué más podía hacer? Tampoco es como si quisiera escuchar una razón directa de porqué Sasuke decidió abandonarlo ese día en el bosque, justo una semana después de haber estado cogiendo con él todos los malditos días desde que lo dejaron en libertad.

Y no descartaba en las posibles respuestas alguna molestia relacionada con el sexo que tenian ambos. Negó con la cabeza ante la confundida mirada de su hijo delante de él. A Sasuke le había gustado el sexo, si de algo estaba seguro en esta vida era de eso. Esos gemidos que le había escuchado no podían ser de alguien insatisfecho. Afirmó con la cabeza convencido de sus capacidades, ignorando a Boruto que comenzaba a reclamar por su falta de atención.

En lo que si no quería ahondar era en sentimientos más profundos. El simple hecho de pensar en que siempre fue el único enamorado le provocaba un malestar nada agradable en el estómago.

Boruto seguía hablando y el solo asentía o negaba dependiendo del pensamiento que se le cruzara por la cabeza. Shikamaru a su lado había intentado un par de veces despabilarlo, pero no funcionaba. Kurama por otro lado le había gruñido y nada.

Su cabeza estaba llena de Sasuke, Sasuke y más Sasuke…

Sobretodo sabiendo que Sasuke estaría una semana en Konoha.

Solo…

En esa cama de hospital…

— ¡Eso es ‘ttebayo! — Gritó de pronto tan fuerte que hizo a respingar a Shikamaru y Boruto.

— ¿Qué… qué diablos le pasa? — Preguntó Boruto a Shikamaru temiendo que el último tornillo de su padre se aflojara.

Shikamaru se llevó una mano a la cara —– Maldición, que molesto eres, Naruto —Gruñó por lo bajo.

—Si él no quiere hablar del tema y yo no puedo iniciarlo por iniciativa propia ¡Tendré que sacárselo a la fuerza ‘ttebayo! — Se explicó así mismo en el aire al darse cuenta de que la oportunidad que creyó única en realidad podía repetirse durante toda la semana que durara la hospitalización de Sasuke.

—Insisto, ¿Qué demonios?

—Boruto, no lo entenderías — Se negó Shikamaru a explicar viendo a un muy brillante Naruto halagándose a sí mismo en voz baja.

—Pero… — Boruto entrecerró los ojos desconfiado—Se puso más raro de lo normal ‘ttebasa. Vine pensando en que quería conversar conmigo sobre lo sucedido con Momoshiki, ya sabes, fue mi rasengan el que nos dio una oportunidad — Dijo Boruto en un tono de voz alto esperando que Naruto lo escuchara y volviera a sus sentidos— O por lo menos esperaba un regaño.

— ¿Un regaño? ¿Por qué habría de regañarte? — Cuestionó Naruto escuchando a medias la conversación — ¿Por haberte metido en una pelea innecesaria que resultó con Sasuke sin chakra y en el hospital? ¡Debería premiarte ‘ttebayo!

Boruto retrocedió nervioso por ser el centro de atención de esos ojos brillantes —Mira, no sé qué está sucediendo, viejo. Pero creo que debería ir a entrenar en este momento ‘ttebasa. Si, ¡Si, tengo que ir a entrenar!

Naruto dejó pasar la patética excusa de su hijo para largarse y observó a Shikamaru en su lugar, el cual se estremeció al instante.

—No sé lo que estás pensando, pero… —Comenzó a decir el Nara intuyendo las intenciones de Naruto detrás de esa sonrisa de oreja a oreja.

— ¿Cuál es la forma más rápida de hacer que me hospitalicen?

—Diablos, entonces si sabía lo que estabas pensando. Demente.

— ¡Oh, vamos! — Se quejó Naruto— ¿Sabes que esto es de vida o muerte? Realmente podría volverme loco esta semana si no estoy junto a Sasuke para aclarar un par de cosas.

—Tuviste trece años para aclararlas, Naruto. Deja de ser tan problemático.

—Tu no lo entiendes, Shikamaru — Frunció el ceño Naruto al mismo tiempo que se levantaba de su silla para voltearse a ver la aldea desde la ventana de su oficina— Mi necesidad de él parece más fuerte después de haber compartido más que solo un minuto a su lado. Si antes no sentía la necesidad de aclarar las cosas era porque simplemente no tenía oportunidad de hacerlo. Pero ahora es diferente ‘ttebayo.

— ¿Y por qué no le preguntaste hace unas horas atrás? Ustedes dos siempre optan por el drama en lugar de lo práctico.

—Es porque somos demasiado orgullosos — Dijo Naruto formando una sonrisa en sus labios, recordando la horrible travesía por la que tuvo que pasar para traer a Sasuke de vuelta… para que luego el muy cabrón haya decidido irse de nuevo— Por consecuencia, Sasuke está intentando mantenerme a raya y yo lo había aceptado. Pero ya no estoy dispuesto a quedarme allí como si nada.

—Viejo, no te estoy entendiendo — Siseó Shikamaru sufriendo de un reciente dolor de cabeza por tanta información ambigua que soltaba Naruto sin parar.

—Shikamaru, eres mi mejor amigo, ¿Quién mejor que tú para entenderme?

—Creí que Sasuke era tu mejor amigo — Comentó confundido Nara.

La sonrisa de Naruto se ensanchó ante ese comentario — Oh, vamos. Tú siempre has sido mi mejor amigo, Shikamaru y lo sabes. Todos en esta maldita aldea y fuera de ella lo saben, así como también saben que Sasuke es más mi amor platónico que cualquier otra cosa ‘ttebayo.

Shikamaru no sabía por qué, pero en ese momento se le antojó darse un buen golpe contra la pared al presentir que la situación se estaba volviendo aún más complicada que antes.

—No sé cuántas veces te lo he dicho, Naruto. Pero, estas casado —Le recordó con sufrida paciencia— No puedes ir por ahí diciendo a la ligera cosas como que Sasuke es tu amor platónico, es incorrecto.

—Incorrecto es que él me haya terminado de esa manera. Yo lo amaba, maldición, ¡Yo aún lo amo! ¡Estar casado con otra persona no cambiará eso ‘ttebayo! ¡Es por eso que necesito saber qué diablos pasó entre los dos! — Naruto se volteó a mirar a Shikamaru para decir todo eso, con la expresión más decidida que nunca antes le había visto.

— ¿Y qué harás con esa información? — Se atrevió a preguntar Shikamaru— ¿Qué harás con tu familia entonces?

—Mira, ambos sabemos que no soy muy listo, así que pedirme que piense aún más allá de lo que tanto me ha costado pensar está fuera de mis capacidades ¡Lo meditaré en el camino!

Por supuesto que Naruto no tenía idea de cómo afrontar la situación. Hacia bastante tiempo que se había dado cuenta que casarse con Hinata había sido un error. Un error del que creyó poder vivir toda su vida para no dañar a la chica que por tanto tiempo lo amó.

No es que fuera egoísta. De verdad que no lo era, desde hace años que venía controlando los impulsos de largarse tras de Sasuke para no dañar la pequeña familia que tanto solía evitar día a día a base de clones de sombras que podían fácilmente reemplazarlo en su hogar. Pero es que, había llegado a un punto en el que seguir mintiéndose así mismo era aún más doloroso, tanto para él como para todos los involucrados, por lo que debía actuar de una vez.

—Entonces — Dijo Shikamaru intentando terminar de entender las razones de su amigo sin éxito.

—Entonces… ¿Podrías apuñalarme con un kunai envenenado? — Pidió esperanzado Naruto, sabiendo lo fácil que sería irse hospitalizado con eso.

Shikamaru pensó, ¿Sería bueno renunciar al puesto de consejero personal del hokage?

.

.

.

A Sasuke no le extrañó que Sarada se haya pasado por el hospital durante la tarde. Era su hija después de todo. Lo que sí le extrañaba era la amabilidad con la que solía tratarlo, porque siendo sinceros, nunca se había molestado en siquiera aparentar interés por las cosas que ella hiciera y lo había dejado más que en claro al haberse ausentado prácticamente toda su infancia.

Pero Sarada parecía el tipo de chica que no guardaba rencor, algo que sin dudas debía haber heredado de Sakura.

No pudo evitar preguntarse en si la menor vendría todos los días de su estadía en el hospital para contarle sobre sus misiones mientras insistía en que comieran juntos alguna comida que haya preparado solo para él.

No le molestaba la situación, solo que sentía que no merecía tanta atención de la menor. Por lo menos había podido distraerse con ella ahí haciéndole compañía evitando que sus conflictos internos relacionados con Naruto volvieran para mortificarlo.

“Naruto…” El séptimo hokage no había vuelto a aparecerse en la habitación en lo que resta de la tarde y por mucho que le costara aceptar que se sentía un poco dolido por eso, sabía que era mejor para ambos mantener la distancia que habían formado en los últimos años.

Lástima que Naruto no parecía pensar de la misma manera porque en el instante en que asumió que no volvería a verlo pronto por ahí apareció por la puerta con una de sus tantas sonrisas alegres.

—Qué bueno que estés despierto ‘ttebayo — Fue la manera de saludar Naruto, sacando de los bolsillos de su chaqueta dos latas de café entregándole una a Sasuke como si nada.

Sasuke demasiado sorprendido por la aparición repentina del otro aceptó la lata torpemente — Ya no son horas de visita — Comentó extrañado de lo muy quitado de pena que parecía Naruto en el hospital.

— ¿Y eso qué? Por si aún no te has enterado, soy el hokage, Sasuke — Respondió Naruto con una sonrisa de superioridad haciendo que Sasuke rodara los ojos con hastío.

—Ya, entonces porque eres el hokage puedes ir y hacerles la vista gorda a las reglas de la aldea — Siseó Sasuke dándole un sorbo al contenido de la lata.

—Uh-huh.

—Eso es abuso de poder.

—O hacer uso inteligente de mi poder. No es como si alguien se fuera a morir por el hecho de que yo esté aquí fuera del horario de visitas ‘ttebayo — Ahora fue Naruto quien reviró los ojos.

Sasuke simplemente se dedicó a beber su café, atento a cada uno de los movimientos de Naruto que se sentaba a su lado imitándolo.

Naruto analizó la habitación por unos segundos disfrutando del silencio entre ambos consciente de lo fácil que sería interrumpirlo. Sin mucho esfuerzo notó los envases vacíos de comida en el pequeño basurero al otro extremo de la habitación.

— ¿Alguien estuvo aquí? — Preguntó Naruto con fingido desinterés.

Sasuke creyó identificar un poco de celos en la voz del otro, pero lo ignoró creyendo que eran imaginaciones suyas — Sarada.

—Ah, Sarada-chan. Quien más si no ‘ttebayo.

—Sí, no es como si tuviera muchos conocidos que quisieran visitarme.

—Quizás los tienes y no vienen porque tú no los dejas ‘ttebayo — Bromeó Naruto conociendo lo cortante que era Sasuke con todas las personas la mayoría del tiempo.

—Es bueno que lo menciones, porque recuerdo haberte pedido que fueras a trabajar — Siseó el Uchiha recordando la pequeña disputa que tuvieron hace unas horas.

—Es casi de noche Sasuke, ¿Quién diablos trabaja de noche? — Se quejó Naruto terminando el resto de su café, lanzando sin cuidado la lata al basurero dando en el blanco.

Sasuke reprimió el impulso de contradecir las palabras de Naruto. Al parecer el hokage no recordaba las múltiples ocasiones que lo encontró a altas horas de la noche en su oficina firmando papeles a lo loco.

—Además, necesitaba saber que estas bien — Agregó Naruto haciendo que Sasuke casi se atragantara con la pequeña cantidad de café que estaba intentando hacer rendir en la lata para mantener su mente ocupada.

—Te preocupas demasiado, tarado — Se quejó Sasuke en respuesta, teniendo cuidado con sus palabras para no introducir ningún tema indeseado entre ambos.

—No puedo evitarlo cuando se trata de ti, ya te lo dije antes — Recordó Naruto poniéndole atención. Pronto la luz de la habitación comenzó a disminuir por lo que se apresuró a cerrar las cortinas.

La acción aparentemente inocente de Naruto hizo que Sasuke sintiera una corriente eléctrica recorrerle el cuerpo hasta hacerlo estremecer. Tenía varios recuerdos subidos de tono que iniciaban con Naruto cerrando unas cortinas.

Agitó la cabeza. Esas cosas eran imposibles ahora. Sasuke encendió la lámpara al lado de la cama para asegurarse de tener la suficiente luz para no perder de vista a Naruto.

—Es tarde — Comentó Sasuke entonces.

—Sí que lo es ‘ttebayo — Le dio la razón Naruto sin ninguna intensión de moverse de su silla al lado de la cama.

Sasuke frunció ligeramente el ceño ¿Por qué diablos Naruto estaba tan insistente ese día? Estaba completamente seguro que Naruto había notado como todo su comportamiento corporal revelaba lo tenso que estaba con su presencia.

—Ve a casa — Ordenó Sasuke, siendo más directo con sus palabras provocando que Naruto pusiera los ojos en blanco unos momentos.

— ¿Qué? No, claro que no — negó inmediatamente el Hokage viendo al Uchiha como si estuviera loco — Voy a pasar la noche aquí otra vez, ya te dije que quiero estar seguro de que estas bien, pero déjame decirte que no me agrada mucho la idea de dormir en el sofá del pasillo otra vez. Es muy incómodo.

Si Sasuke hubiese estado conectado a cualquier tipo de maquina a cargo de monitorear su presión arterial, esta sin duda habría sonado advirtiendo un ascenso anormal.

— ¿Qué?

—No me digas que también estas sordo, Sasuke. Realmente esto es un problema ¿Y así dices que estas bien? — Se burló Naruto con ambas cejas alzadas.

Naruto sabía que Sasuke no estaba para nada cómodo con la idea, pero ya se había decidido y no podía ceder por mucho que al otro no le agradara su presencia.

Su plan en un principio consistía simplemente en quedarse a su lado todo el tiempo y actuar con normalidad creyendo estúpidamente que por arte de magia terminarían en medio de una acalorada discusión en donde se echarían más que un par de cosas en cara dando por finalizado el misterio de su ruptura, pero no contó con el hecho de que sus manos cosquillearan al verse solo con Sasuke otra vez.

En medio del silencio entre ambos, alzó una mano para acomodarle el cabello a Sasuke tras la oreja dejando a la vista el rinnegan que el otro mantenía oculto en su atractivo rostro. Agradeció en silencio que Sasuke no le cortara la mano por su atrevimiento de tocarlo.

—Naruto. Realmente no sé qué es lo que estas tramando, pero esto no es divertido — Mencionó Sasuke intentando mantenerse impasible.

—No estoy tramando nada, Sasuke. Solo quiero estar contigo, solíamos siempre estar pegados el uno al otro antes.

—Antes — Repitió Sasuke, enfatizando en esa palabra haciendo a Naruto fruncir el ceño.

—Sí, antes — Afirmó Naruto — Y yo realmente extraño eso. Yo realmente te extraño, Sasuke.

Esa confesión fue tan repentina que Sasuke sintió la urgencia de levantarse de la cama para empujar a Naruto fuera de la habitación y así evitar cualquier situación que pudiese conllevar todo eso.

—Tsk. No digas tonterías…

—No son tonterías y lo sabes. Tú más que nadie —Se defendió Naruto deteniendo a Sasuke que se había levantado a medias de la cama tomándole de la mano— Yo sé que sí lo sabes.

—Naruto — Gruñó Sasuke en advertencia— Déjame.

—No — Se negó Naruto con una mirada suplicante.

Sasuke se armó de paciencia, al tiempo que intentaba poner en orden sus sentimientos — Ya, lo he pillado. Suéltame Naruto — Pidió con enfado— Somos amigos, es natural.

La mente de Naruto voló años hacia atrás, en donde se había enfrentado a Sasuke sobre un rio. Era increíblemente molesto escuchar las mismas palabras que alguna vez él dijo a Sasuke sin ningún tacto alguno.

“Somos amigos”

Recordaba la expresión de sorpresa en el Uchiha en ese entonces haciéndole sentir un idiota. Así es como se sentía entonces.

Naruto cayó de pronto en un muy inesperado silencio ante la atenta mirada de Sasuke que había logrado librarse del agarre del otro.

—Entonces, ¿Somos amigos? —Cuestionó Naruto después de unos momentos.

— ¿Qué más si no? —Se apresuró Sasuke dispuesto a usar un jutsu de tele transportación de ser necesario.

—No sé, dímelo tú — Insistió Naruto, intentando evitar la molestia que crecía en su interior rápidamente.

—Amigos — Aseguró Sasuke.

Los ojos de Sasuke se abrieron por completo cuando sintió ambas manos de Naruto posarse en sus mejillas acariciándolo.

—Naruto, ¿Qué diablos…?

—Nosotros nunca hemos podido ser simples amigos, Sasuke. No funcionamos de esa manera ‘ttebayo.

—Pues tenemos que hacer que funcione.

Ahora fue Naruto quien abrió los ojos con sorpresa y sus hombros se tensaron ante esas palabras.

—Estas bromeando, bastardo — Se quejó Naruto de inmediato, apretando con algo de fuerza las mejillas de Sasuke haciendo que este instintivamente le sujetara los brazos apretándoselos en advertencia.

—Somos amigos — Repitió Sasuke con seguridad— ¿No era eso lo que siempre solías decir? Pues bien, mira, te lo devuelvo. Soy tu amigo.

— ¿Es esta una de tus tantas venganzas? — No pudo evitar preguntar Naruto acongojado, sin soltar el agarre.

— ¿Por qué debería serlo?

Naruto no sabía qué le dolía más, si el aparente rechazo que le estaba dando Sasuke o esa mirada cargada de sentimientos que el Uchiha intentaba mantener ocultos de él.

—Los amigos no se besan, ni tienen sexo — Alegó Naruto, tocando a propósito un punto sensible entre ambos.

Sasuke perdió la paciencia y lo hizo notar activando su sharingan— Y esas son precisamente las cosas que no hacemos.

Naruto se levantó de su silla repentinamente y de un rápido movimiento empujó a Sasuke por los hombros para dejarlo acostado completamente en el colchón.

El Uchiha pestañeó un par de veces ante lo inesperado del asunto. Reconoció el tinte rojizo en los ojos de Naruto, clara señal de lo furioso que este se encontraba en ese momento, pero no cedería por lo que de inmediato intentó quitárselo de encima.

—Dime Sasuke — Comenzó a decir Naruto haciendo que Sasuke se le estremeciera el cuerpo entero producto de la cercanía— ¿Nosotros nunca hemos tenido sexo y nos hemos besado?

—Quítate, imbécil.

—Te estoy haciendo una pregunta, bastardo — Rugió Naruto con el chakra del zorro haciéndose ligeramente visible a su alrededor— Contesta.

Sasuke frunció el ceño a más no poder — ¡Eso fue hace años, Naruto! ¿Qué sentido tiene esta conversación? ¡Somos unos malditos amigos! ¡Eso es todo lo que somos ahora!

Se esperó cualquier cosa menos lo que vino a continuación.

Sasuke hubiese preferido mil veces un golpe de puño limpio en la boca en lugar de unos labios demandantes tratando de enredar la lengua con la suya.

Si, hubiese sido millones de veces mejor no haber recordado lo bien que se sentían los labios de Naruto y la respiración de este contra su piel, sin duda.

 

Notas finales:

Seguimos con problemas con el pc y ahora súmenle aparte internet


(? ?_?)? 


Bueno, ¡Nos vemos! Gracias por leer


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).