Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Princesa Heylin por minima

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

III

Grandes cambios a veces empiezan con cosas pequeñas.

Jack siempre había sido… Jack, para los ojos de las personas que le conocían, a veces un peón, a veces un rival, el primer rival que tuvieron los monjes xioling, algunos lo veían menos que eso, un gusano, y quizás por eso rara vez lo tomaban en serio, rara vez notaban un cambio en la irritante, egocéntrica y caótica personalidad de Jack.

Aunque hubo ciertas cosas, como que estaba más irritable en los duelos o no festejaba tanto si llegaba a ganar; un día cuando le toco pelear contra Kimiko no tardo ni un minuto en perder y eso que la chica solo había tenido que darle un golpe que no fue el más fuerte de ella, apenas un puñetazo, un “toque” y el había caído de la plataforma que se había formado perdiendo el juego. Nadie le vio extrañeza aunque lo anotaron en un record personal de que tan rápido habían derrotado al pelirrojo a pesar que este no era tan verdadera competencia en peleas cuerpo a cuerpo.

Pero si se hubieran tomado la molestia habían visto que aquel “toque” o “golpe” le había afectado, y no solo era la derrota lo que lo puso de mal genio o trastornado.

Un “toque” de una mujer.

Ya no se juntaba tanto con Wuya, aunque esta tampoco lo buscaba a menos que quisiera que hiciera algo para su beneficio, pero tampoco se acercaba en los duelos a ella para que pelearan juntos contra los xioling si había una oportunidad de haber ventaja.

Eran cosas que si no ponías atención, pasan desapercibidas.

Y luego empezó a faltar.

Aparte de los guerreros xioling, Jack era el que trataba de asistir a los duelos sin falta, con algunas excepciones, pero desde los comienzos él estuvo ahí, al menos casi siempre, y a veces representaba un verdadero problema, o traía nuevos rivales a la lucha intencionalmente o no, y su presencia, irritante y molesta para algunos, era constante.

Fue gradual, no de un momento a otro, quizás por eso tardaron en darse cuenta, lo cual fue días, luego semanas, hasta que antes de darse cuenta habían transcurrido algunos cuantos meses.

Y fue más por la monotonía en la que había caído su rutina y cierto momento de aburrimiento que se dieron cuenta que algo o más bien alguien faltaba.

-Ah estado muy tranquilo últimamente- comento Kimiko dejando de lado por un momento su teléfono.

-Dirás aburrido- dijo Raimundo recargado en una de las paredes del patio del templo.

-Nuestro éxito constante es prueba de nuestro mejoramiento en nuestro entrenamiento. Una prueba de que nos estamos volviendo excelente dragones xioling- Omi estaba practicante movimientos saltando de un lado a otro mientras decía eso. La racha de victorias en los duelos había inflamado su ego, que de por si era fácil de afectar al ser aun un niño.

-No niego que ha sido pan comido vencer a Wuya en los últimos enfrentamientos, pero ha sido ella solamente últimamente. Y sin magia esa vieja bruja es tan fácil de atrapar como un pez dentro de una red-

-¿Pero al estar dentro de una red no significa que ya está atrapado el pez?-

-Es una forma de decir Omi, como pan comido-

-Es fácil atrapar un pez con una buena carnada, el pan podría funcionar-

-No estamos hablando de pesca, estamos hablando que esto está demasiado tranquilo y aburrido-

-Rai tiene razón, no niego que entre más sencillo se vuelva nuestro trabajo sería mejor. Pero si lo piensan esto podría ser incluso sospechoso, como la calma antes de la tormenta- dijo Kimiko.

-Exacto, algo falta- Raimundo se enderezo y comenzó a caminar de un lado a otro.

-O más bien alguien. Ah sido un tiempo desde que no hemos sabido nada de Spicer o sus planes, es agradable no tener que lidiar con esa sabandija, pero seguramente está tramando algo mientras no hemos sabido nada de él- Clay no creía que alguien como Spicer se quedara tranquilo por tanto tiempo así como así, seguramente tramaba algo.

-Muy buena idea Clay, es mejor idea ir a ver que está tramando Spicer en estos momentos y detenerle-

-Yo no dije eso Rai-

-Raimundo tiene razón, la mejor forma de estar preparado para una batalla es saber que planea tu enemigo- Omi secundo al chico latino.

Kimiko que también se encontraba ahora curiosa por la idea de saber que planeaba Jack Spicer decidió apoyar la idea, y Clay pensó al final que no haría nada de malo en echar un vistazo.

Fue así que montando a Dojo llegaron a la propiedad de la mansión Spicer, una mansion moderna que contrastaba con el campo que lo rodeaba y ni se diga el templo xioling en el que todos ellos residían.

No siendo la primera vez que entraban a casa de Jack lograron abrir una de las puertas y escabullirse adentro, más que monjes xioling parecían ninjas pensando evitar cualquier robot sirviente o vigía que hubiera cerca, y al llegar al sótano pensando que toda esa táctica había sido un éxito, se dieron cuenta que en realidad había sido un desperdicio porque a quien buscaban o incluso todas sus cosa de laboratorio no se encontraban en el sótano laboratorio, que ahora parecía un sótano común y corriente.

-¿Qué rayos paso aquí?-

-Esta todo…-

-Limpio-

Cuando llegaban a venir al laboratorio de Jack era como entrar a la escena del científico malvado de una película de ciencia ficción, con sus grandes módems para su computadora, su mesa de trabajo siempre llena de partes mecánica o herramientas, incluso había manchas de aceite o alguna extremidad robótica en el piso, pero ahora no había nada de eso, quizás un par de tornillos en el piso, pero aparte de eso todo, incluso las manchas de aceite, habían desaparecido.

-Esto no parece ser una remodelación-

-Aquí nadie esta re mordiendo algo Kimiko, ni siquiera un ratón-

-Remodelación Omi, cuando alguien cambia de muebles y decoración la casa-

-¿Hay gente que hace eso? En el templo conservamos los muebles de hace cien años y siguen funcionando perfectamente-

-Claro, con razón dormimos tan bien. Dormimos sobre un colchón de cien años-

-Exacto Raimundo-

-En serio debemos ya enseñarte que es sarcasmo Omi-

-Lo importante no es eso ahora Rai, sino donde esta Jack Spicer-

-Tal parece que se mudó Kimiko- Clay empezó a recorrer el sótano, sin todos aquellos artefactos que Spicer tenía el espacio era realmente amplio.

Poco a poco una idea y conclusión llego ante ellos mientras seguían viendo ese enorme espacio vacío.

Era simple, una idea que cualquiera puede hacer en un día, pero la simpleza y coherencia de esa idea les parece absurda.

Jack Spicer, ¿mudándose?

No eran amigos, ni aliados, eso estaba claro, pero que desapareciera sin aviso sin que ellos se dieran cuenta…

-Seguro es un truco. Te crees muy listo Spicer ¡¿no es así?!- Raimundo comienza a inspeccionar las paredes y el suelo, como si esperara encontrar algo oculto o fuera de lugar en estos, una pared falsa, un dispositivo, algo que diga a simple vista “Falso” o “trampa”, pero solo es concreto, algo de polvo, y unos cuantos tornillos olvidados en el suelo.

-Iré a buscar su habitación- Dice Kimiko subiendo las escaleras.

-¿Sabes dónde es su cuarto?- preguntan los demás.

-Ni idea, pero ahí deben estar sus objetos personales-

Kimiko está segura que aunque el sótano esta vacío la habitación de Jack no, ahí guarda su ropa, sus cosas personales, pero si realmente conociera a Jack sabría que sobre esas cosas el muchacho aprecia su laboratorio, por lo que la pequeña migaja de esperanza de encontrarlo ahí termina por aplastarse cuando revisa cada habitación hasta encontrar una completamente vacía. En las paredes hay marcas de cinta adhesiva, seguramente usada para colgar posters o quizás planos, la alfombra de color negro se encuentra algo hundida en algunas partes donde seguramente anteriormente descansaron algunos muebles, revisa el armario que es casi tan grande como un pequeño cuarto, y ahí solo ve una caja de cartón etiquetada como ropa regalada de mamá, al abrirla ve ropa elegante, camisetas coloridas, camisas blancas y algunos pantalones de vestir, pero nada del estilo de Spicer si no algo más que una madre quisiera que su hijo usara.

En la primera planta Omi también recorre la casa, la nota demasiado quieta y silenciosa, ya no se molesta en esconder su presencia ya que se dio cuenta que no hay ningún robot cuidándola.

Media hora después todos están afuera, Dojo los había esperado afuera tomando el sol y al verlos todos con caras tan largar no puede evitar preguntar.

-¿Por qué se ven tan tristes muchachos?-

¿Tristes?

-No estamos tristes Dojo, solo nos dimos cuenta que Jack Spicer se mudó al parecer- Raimundo es el primero en retomar su pose confiada negándose a creer que por un momento se vio triste hace unos escasos segundos.

-¿Cuándo?-

-No lo sabemos Dojo, al menos ya sabemos la razón por la cual no lo habíamos visto en los duelos últimamente. Había estado ocupado mudándose- le responde Kimiko saltando a su lomo.

-Ya veo. Bueno muchachos, ya lo veremos en los duelos. Aunque siendo sinceros me siento más tranquilo al no tenerlo tan cerca del templo-

-Sí, una cosa menos que preocuparnos- Raimundo siguió a Kimiko y tomo asiento en el lomo del dragón.

-Pero… ¿Por qué no nos avisó?- Omi, pequeño e ingenuo Omi.

De los cuatro era el más cercano a sentir algo similar al aprecio por el joven gótico, quizás porque fue su primera competencia en los duelos xioling, quizás porque aún era un niño pequeño con inocencia y era fácil para el apegarse a alguien, o quizás porque junto a sus mejores amigos, fue otro chico no tan cercano a su edad pero no un anciano monje en el templo, quizás no conscientemente lo veía como otra clase de compañero de juego aunque para Omi todo era entrenamiento y se tomaba muy en serio los duelos, aun así en su interior era un niño.

Que Jack se fuera así como así, no era agradable.

-Vamos pequeño vaquero, no creo que así de fácil deshacerse de Spicer. Esa sabandija es como hierba mala, muy difícil de deshacer de él-

-Tienes razón Clay, lo veremos pronto en un nuevo duelo, y le pateare el trasero-

Sí, no era tan fácil deshacerse de Jack Spicer, esa sabandija seguramente estuvo ocupado con su mudanza y por eso no asistió a los enfrentamientos.

Y en parte tenían razón, estar ocupado con mudanzas no te deja con mucho tiempo que desperdiciar. Pero los jóvenes no verían pronto a Jack, ya que no solo eso lo que absorbía el valioso tiempo del joven genio.

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).