-Pues ya ves que es verdad… y no permitiré que le hagas daño ni a él ni a Naruto- Itachi se abalanzo contra su padre quien muy a tiempo emprendió el vuelo seguido de sus dos hijos que empezaban a lanzarle bolas de fuego incluso le intentaban encajar los colmillos para chuparle toda la sangre y acabar con esa pesadilla.
-Parece que esos chicos tienen asuntos familiares que arreglar… así que yo me encargare de ustedes- dijo el pelirrojo de ojos dorados que mostraba unas peligrosas garras. Deidara solo lo vio con desprecio, se separo de Naruto y mientras lo hacia su transformación empezaba… sus ojos azules se tornaban rojos, unos blanquecinos colmillos empezaron a sobresalir de su labio inferior y sus uñas empezaban a tornearse para convertirse en garras.
-Yo seré tu oponente… Naruto evita pelear a toda costa, pero si alguien quiere hacerte daño mátalo sin piedad- después de estas palabras dio un gran salto dirigiéndose hacia el jefe de los Sangaku Neko quien esquiva el ataque al ver que el rubio mayor intentaba darle un zarpazo con sus afiladas garras.
Naruto no sabía qué hacer, había soñado con el momento de matar a muchos vampiros en venganza a lo que le había hecho a su padre, pero ahora solo tenía miedo y no se podía mover sin embargo reacciono al ver que una de esas malditas criaturas se dirigía hacia él; como un verdadero ninja lo esquiva, utiliza su chakra de zorro demonio para darle un fuerte puñetazo que lanza al vampiro a mitad del lago. Y así logro distinguir que sobre el agua se encontraban ni más ni menos que Jiraya y su… ¿madre?
La guerra había comenzado completamente demonio zorro´s, vampiros y Sangaku Neko empezaron una feroz batalla, Kushina abre la palma de su mano dejando salir de ella chakra color dorado que tomo forma de espada y empezó a partir a la mitad a todo enemigo que se le ponía enfrente.
-¡Hijo! ¿Estás bien?- abrazo con fuerza a Naruto, mientras que el se sentía feliz de sentir los brazos de su querida madre; su valor empezaba a tomar fuerza y pronto le surgieron las ganas de pelear.
-Madre ¿Cómo has llegado hasta aquí?
-No tengo tiempo de darte explicaciones… primero hay que ganar esta batalla- dijo separándose de su hijo dando media vuelta en un grácil movimiento y partir en dos a un vampiro que se había lanzado desde los aires para intentar matar al rubio.
-¡¡¡OK!!!- Naruto junto sus manos para empezar a convocar su chakra de zorro demonio y rápidamente sus ojos se empezaron a tornar rojos como la misma sangre sus pupilas se empezaban a poner en forma vertical, sus uñas se tornearon hasta convertirse en garras y por ultimo unos finos y blancos colmillos empezaron a resaltar en su labio inferior. En un abrir y cerrar de ojos desapareció de la vista de muchos Sangaku Neko que se dirigían a su encuentro.
-¿Dónde quedo?... no pudo desaparecer así como así – dijo uno mientras todos volteaban a ver a sus alrededores.
-Estoy aquí- dijo Naruto antes de aparece en medio del circulo que había formado el enemigo y con movimientos muy rápidos se dirigió a todos ellos y sin que nadie se diera cuenta de lo que había hecho cayeron al suelo inconscientes.
-Vaya que has mejorado Naruto- comento Kushina que se encontraba encima de unos quince vampiros, algunos muertos otros…no tanto.
Fugaku esquivaba con mucha dificultad a sus hijos que con movimientos muy sincronizados intentaban darle una buena paliza… pero él no por nada era el líder de los depredadores más peligrosos del mundo.
-Hijos no quiero hacerles daño… todavía los puedo perdonar… así que por favor solo entreguen a ese hibrido y el asunto quedara olvidado… se los prometo como líder del clan de los vampiros- dijo con altanería, Sasuke e Itachi intercambiaron miradas para luego dirigirse nuevamente a su padre y reiniciar la pelea.
-¡Quiero que te quede una cosa bien clara padre… Naruto es lo que más amo en este mundo… no me importa si él me odia más de lo que me ama… yo pienso protegerlo de todo… incluso si te tengo que matar por su seguridad… ten por seguro que así lo hare!
-Pues entonces… ¡¡¡MUERE!!!- Fugaku perdió toda paciencia que tenia y con una velocidad increíble se dirigió hacia sus hijos y con un movimiento casi invisible golpeo a Itachi arrojándolo así a lo más profundo del lago; antes de que Sasuke reaccionara su padre ya se encontraba enfrente de él.
Fugaku estaba a punto de enterrar su mano en el corazón del pelinegro, que no le dio tiempo pues otro pelinegro de ojos rojos y piel blanca hizo su aparición para darle un fuerte golpe en la cara a su padre y así salvar a su medio hermano.
-¿Por qué me salvaste, Sai?- Sasuke en verdad no entendía el porqué de la acción de su medio hermano, los dos se odiaban hasta más no poder sin embargo lo había salvado, SAI LO HABÍA SALVADO DE UNA MUERTE SEGURA.
-Una persona me dio a entender que puedo sentir el calor de las demás personas… que no solo debo hacer el bien para mi mismo… sino que personas a las que he negado tenerles cariño… yo… yo quiero cambiar mi actitud… Sasuke… per… perdóname… hermano- Sai estaba rojo hasta más no poder pero aun así podía sentir su corazón más ligero.
-Sai… tú también… perdóname- Sasuke por alguna razón empezó a estimar a su medio hermano, los dos se estrecharon la mano pero no pudieron seguir son su conversación pues Fugaku se había recuperado del golpe y se dirigía nuevamente hacia donde se encontraban sus hijos.
-¡¡¡¿¿¿TU TAMBIÉN SAI???!!! ¡¡¡¿PORQUE A TODOS MIS HIJOS LES DA POR TRAICIONARME???!!!- Fugaku lanzo nuevamente una gran bola de fuego que fue esquivada a tiempo por los dos pelinegros.
-Padre… detén esto… si en verdad quieres a mi hermano deberías dejar que sea feliz- dijo Sai en forma calmada ignorando totalmente las miradas asesinas que les mandaba su padre.
-Tienes razón Sai… les quiero y por eso… debo alejarlo de el ser que el oráculo dijo iba a ser nuestro destructor… ¿Qué no ves que ese chico matar a todos los vampiros?
-Naruto no es capaz de hacer algo así… ¡Detén esto!- Sasuke se puso a lado de su medio hermano, mientras que Fugaku volvía a atacar pues no quería oír nada bueno de ese chico. Por otro lado Itachi sale del lago intentando respirar la máxima cantidad de aire que le fuera posible.
-¡Itachi! ¿Estás bien?- Deidara se acerco a su amado para ayudarlo a salir totalmente del agua, el pelinegro solo asintió para luego levantar su mirada y ver a la persona que mas amaba pero al hacerlo vio con asombro y espanto que estaba muy golpeado.
-Deidara… ¿Quién te hizo esto?- la ira le empezó a surgir desde sus adentros, nunca perdonaría a quien maltratara a su Deidara, en este aspecto Itachi era muy posesivo, celoso y sobre protector.
-Tranquilízate Itachi… estos son solo rasguños… para mañana no tendré ni siquiera una cicatriz- contesto Deidara de forma dulce para intentar bajar el enojo que su amado emanaba.
-No me has contestado- dijo el Uchiha en forma un poco cortante pues no quería enojarse co Deidara, el rubio dudo unos instantes en decirle pero sabía que si no lo hacia Itachi insistiría hasta que se lo dijera.
-Fue… fue el… el líder… de los Sangaku… Neko- Deidara solo vio como su amado se paraba bruscamente y empezaba a buscar al pelirrojo que le había hecho daño a su amado.
-Deja que lo encuentre… le voy a matar.
-Itachi el ya no se encuentra aquí… le gane y cuando me distraje para ayudarte él escapo- Deidara lo abrazo por la espalda, Itachi volteo para verlo pero antes de decirle algo lo jalo bruscamente para acercarlo más a su cuerpo y luego con su mano libre golpeo a un Sangaku Neko que se dirigía a ellos.
-Deidara, no puedo perdonar a las personas que te hagan daño… no descansare hasta verlo muerto por haberte tocado.
-Ya te dije que mañana no tendré ni una cicatriz además si quieres ayudar… ¿Qué te parece si ayudas a tu hermano?- dijo Deidara señalando el cielo donde se encontraban tres Kyūketsuki peleando… POR DIOS ¿Cómo se pudo haber olvidado de su hermano?, sin más beso rápidamente a Deidara y levanto el vuelo.
Por otro lado Naruto y Kushina vencían a todo enemigo que se les ponía en frente, Kushina usando sus poderes de sacerdotisa mientras que Naruto utilizaba su poder demoniaco; Jiraya y sus súbditos también ganaban pero los vampiros no eran criaturas que se debieran de tomar a la ligera pero a los que no les iba muy bien era al los Sangaku Neko pues después de que los abandonara su líder no sabían qué hacer si seguir peleando o emprender la retirada.
Naruto se separa de su madre para perseguir a un vampiro que empezaba a huir pero como tenía un ala lastimada pues no le quedaba de otra que hacerlo a pie.
-¿¡Donde crees que vas!?- Naruto da un gran brinco y se pone enfrente de dicho vampiro, pero no pudo hacer ningún movimiento pues alguien lo agarro por la espalda impidiendo totalmente los movimientos del rubio.
-¡¡¡¡¡ES MEJOR QUE SE DETENGAN O MATO A ESTE HIBRIDO!!!!!- automáticamente todos dejaron de pelear incluso la familia real, todos miraban hacia donde provenía el grito y muchos se asombraron de que era ni más ni menos que el líder de los gatos montañeses, quien sostenía a Naruto con la espada en la bronceada garganta del pequeño.
-¡¡MALDITO DEJA A MI HIJO!!- Kushina en verdad estaba furiosa pero no podía permitirse dar un movimiento en falso pues Naruto era lo único que le quedaba; si se lo quitaban no sabría que hacer de su vida. Su esposo Minato lo era todo antes de embarazarse de Naruto pero cuando se entero de que estaba en cinta no cavia de felicidad porque al fin se le había cumplido su deseo de tener una familia, la cual no pudo disfrutar porque esos malditos chupa sangre le quitaron a su amor, a su esposo, a Minato así que no permitiría por nada del mundo que le quitaran la única razón por la que se mantenía viva.
-¡¡¡FUGAKU ¿QUE HAGO CON ESTE?!!!- el líder tenia la vista clavada en el otro líder, con el cual había hecho un trato de que fusionarían a sus clanes para que naciera una criatura sin igual.
-¡Hay que matarlo!
-¡¡¡¡NOOOOOOOO!!!!- Sasuke no pudo evitar dar un fuerte grito y dirigirse rápidamente a donde se encontraba su rubio. El líder de los Sangaku iba a clavar la katana en la garganta del chico, pero antes de hacerlo se quedo estático, como si algo le impidiera que ahora él se moviera, volteo lentamente su cabeza para ver a una pelirosa que le encajaba lentamente su mano hasta alcanzar su corazón.
-Sa… ku… ra- no se lo podía creer su propia hija le estaba dando fin a su vida, su orgullo, su futura heredera al clan, la espada cayó al suelo mientras que Naruto se separa bruscamente del aquel cuerpo que cayó inerte después de que su amiga le clavara hasta lo más profundo su mano.
-Sakura… chan- Naruto veía con tristeza como su querida amiga caía de rodillas al suelo en estado de shock al ver que había matado a su padre solo por el impulso de proteger a Naruto. Todo quedo una vez más en silencio, nadie hizo movimiento alguno incluso la naturaleza nuevamente guardo silencio ante tal acto. Los que habían perdido las ganas de pelear definitivamente eran los Sangaku Neko al ver que su líder había caído definitivamente.
-Sakura… chan… ¿Es… estas bien?- por fin el rubio se empezó a acercar a la pelirosa que no dijo palabra alguna sino que vio al rubio con ojos vacios, como si hubiera perdido el alma… esos ojos llenos de vida y perversión se habían opacado totalmente.
-Yo… yo… mate… a… a… mi… pa… padre- las lagrimas empezaron a surgir mientras se veía notablemente que el cuerpo de la chica empezaba a temblar, Sasuke también se había acercado ya a la chica y la empezó a abrazar para consolarla por otro lado Naruto solo le acariciaba sus rosados cabellos.
Fugaku tardo demasiado en reaccionar a lo que había pasado pero cuando capto todo volvió a ordenar el ataque y la pelea reinicio nuevamente; Sakura no se podía mover de su lugar, su cuerpo no le respondía.
-Sakura… tienes que irte de aquí… en estas condiciones no puedes pelear- Sasuke intentaba que su amiga regresara a la realidad pero era inútil lo que había hecho no tenia perdón…mato a su padre… ¡¡¡A SU PADRE!!!
-Nosotros nos la llevaremos- varios Sangaku Neko se acercaron hacia donde estaban los tres chicos, Naruto y Sasuke sabían que ahora no representaban un peligro así que dejaron que se fueran con Sakura en brazos.
-¡¡QUÍTATE DE MI CAMINO!!- el rubio y el pelinegro voltearon para ver a quien había gritado y era nada más ni nada menos que Fugaku que peleaba nuevamente con Sai e Itachi; ahora si estaba muy enojado y sus ojos daban a entender que mataría a todos los que se le pusieran en su camino y no le importaba que fueran sus propios hijos. Como la última vez Fugaku en un movimiento sumamente rápido golpeo a Sai mandándolo a estrellarse contra muchos árboles deteniéndose a muchos metros de distancia y con eso fue suficiente para que el chico ya no se moviera.
-¡¡¡SAI!!!- gritaron al unisonó los dos hermanos Uchiha y Gaara que por fin había llegado sin embargo ya no estaba en su verdadera forma pues la batalla había sido dura y ya casi no le quedaban energías.
-¡Gaara!- el rubio corrió hacia donde se encontraba el pelirrojo mientras que Sasuke volaba una vez más para intentar matar a su padre. Aunque eso ya no sería fácil pues Fugaku ya estaba peleando muy enserio así que no sería fácil vencerle.
El sol empezaba a salir, para Naruto esta era la noche más larga que había tenido; ayudo a Gaara a alejarse de aquel lugar pues ya que el pobre necesitaba descansar.
-Gaara regresare para pelear… tu quédate aquí y descansa- Naruto se alejo corriendo para entrar nuevamente en batalla, ambos clanes tenían bajas considerables pero más los vampiros que ya no tenían el apoyo de los Sangaku Neko.
Después de unas horas más los zorro demonio llegaron al punto de transformarse y mostrar su verdadera forma, y gracias a eso los vampiros tuvieron muchas dificultades y después de unas horas todos las vampiros fueron capturados a excepción de Fugaku, claro está.
-¡¡¡¡FUGAKU YA NO HAY NECESIDAD DE SEGUIR PELEANDO!!!! ¡¡¡¡ESTA CLARO QUE HAS PERDIDO!!! ¡¡¡ENTRÉGATE Y NO HAGAS ESTO MAS DIFÍCIL!!! – grito Jiraya al ver que Fugaku seguía peleando contra sus hijos.
-¡¡¡¿¿CREES QUE ME ENTREGARE ASÍ COMO ASÍ??!!! ¡¡¡PRIMERO MUERTO!!!- cuando termino de gritar eso, Itachi le clavo su mano en el pecho hasta que salió del otro lado mientras que Sasuke le clavaba los colmillos en la garganta… POR FIN HABÍA TERMINADO LA HORRIBLE PESADILLA.
-Espera… esto es- Itachi con asombro saco su mano y empezó a buscar con la mirada.
-Hermano esto es- Sasuke saco sus colmillos para ver con su “padre” se convertía en miles de plumas negras y desaparecía con el aire… ¡¡¡ERA UN CLON!!!
-Pero ¿cuándo?- Itachi y Sasuke empezaron a sobrevolar los cielos en busca de su padre.
-¡¡¡NARUTO, TEN CUIDADO QUE MI PADRE SIGUE VIVO!!!- Sasuke se estaba empezando a desesperar, sino destruía a su padre su amado jamás podría estar a salvo. Los demonio zorro estaban muy atentos a todos los movimientos de cada rama y animal que estaba cerca.
Naruto por instinto retrocedió unos cuantos pasos, sin darse cuenta que la espada que le había pertenecido al líder de los Sangaku Neko era empuñada y se dirigía a él con mucha velocidad…
-¡¡¡¡¡NARUTO, TEN CUIDADO!!!!!- aquel desgarrador grito sonó muy fuerte a tal punto que las montañas hicieron eco… la espada atravesó el pecho y siguió perforando hasta que la punta de esta se asomo por la espalda; el filo estaba teñido de rojo y de la punta empezó a gotear sangre… las lagrimas empezaron a recorrer su rostro para luego soltar un grito igual de desgarrador que el anterior…
-¡¡¡¡¡NOOOOOOOOOOOOOOO!!!!!-
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Continuara...