Touya Todoroki, fue mi nombre alguna vez, cuando era el orgullo de mi padre y en ese entonces solo quería que estuviera energullesido de mi esfuerzo por ser el mejor, pero nunca era suficiente para mi padre, los entrenamientos era demasiado para un niño y hacia un sobre esfuerzo para poder hacer lo que pedía, quería creer en sus palabras de poder y gloria, soñaba con lo que un niño desea en esa edad, que me quisiera.
Mi padre es el héroe número dos, conocido como Endeavor y apesar de que los superhéroes se mostraban deslumbrantes, brillantes y sonrientes, su padre nunca en su vida mostro una sonrisa en esa familia, ni si quiera sus propios fans, no recuerdo un momento feliz que haya compartido, solo sufrimiento y llanto. Y tal vez por eso yo nunca fui un niño sonriente, quizas es por eso que nose lo que es la felicidad.
Endeavor siempre maltrataba a mi madre, a mis hermanos y a mi. Tanto fue su ambición contra pelear con el numero uno de los héroes, All might, que lastimó a su propia familia, su hogar. Aunque no parece que le haya importado mucho, para empezar el se habia comprometido con su madre por su sangre, para crear una buena combinación de hielo y fuego. Solo que para que eso sucediera necesito varios años, su niño perfecto habia nacido, el niño que merecía su amor y comprensión.
Mientras que nosotros sólo fuimos un gran fracaso para su descendencia, un experimento fallido que no merecían amor y quizás tampoco apellido. Su mirada mostraba esa diferencia y menosprecio, hacia nosotros, como si fuéramos peste.Y yo sentía cierta responsabilidad por mi madre y hermana, ya que era en ese entonces el único varón. Pero que era un niño ante un hombre, solo me hacían a un lado para seguir atormentando a las dos, a mi hermana por débil y a madre por no cumplir sus deberes como esposa.
Y mi corazón se inundó de odió, mi sangre hervía a mil, incluso mis dientes rechinan al ver cruzar por mi camino. Nunca había sentido tanto desprecio por una persona y más por mi propio padre. Mi respeto por el y por los héroes se fue a la basura al igual que mi cariño y por mi ganas de ganarme su amor, su apreció y realmente quería verle destrozado ante mi.
Fantaseaba con matarlo y comencé a desarrollar un plan para realizar ese sueño torcido, mi propósito de vida comenzó para darle su final y su infelicidad. Quería ser su contra parte, un villano, digno de su poder y de su ñiñito perfecto, yo sería la razón de su rotundo fracaso, ganaría el poder solo para probarme que siempre fui el mejor.
Yo no podia perdonar sus acciones, queria destruir todo lo que realmente le importaba, la maldita sociedad de héroes y en cuanto tuve oportunidad, me escapé. Hubo un incidente el que hizo creer a toda mi familia que habia muerto, gracias a las llamas que habia logrado invadir en el cuarto de entrenamiento, fue suficiente para hacer creíble mi muerte, si era bastante joven pero no podía soportar mas los maltratos de mi padre, ya no mas.
Las calles me enseñaron sobre la vida real, nadie era bueno por nada y nadie te tiene en consideración, si estabas en problemas, estabas solo. Aprendí eso rápido y con ello me volví un villano, no tan popular pero lo suficiente para ser considerado para unirme a una pandilla para hacer grandes atracos con otros villanos.
Utilice las más bajas artimañas para conseguir mi objetivo, de ser poderoso y con ello fue el tiempo suficiente para salir de lo más bajo a las grandes ligas y unirme a villanos de grandes categorías para que me ayuden en mis objetivos.
Ahora uso otro nombre, al igual que otro aspecto, me tiñe el cabello en un tono completamente negro y comencé a utilizar paches en piel, parecía que tenia cicatrices en todo el cuerpo. Aunque mi aspecto lucia bastante aterrador y malvada, seguía teniendo el conocimiento de lo bueno y malo, era un canalla con los se lo merecerían.
Caminé esa tarde en busca de un buen café para empezar mi noche del crimen, al ir por ese callejón note a un villano de tipo viscoso, atrapando a un inocente y pequeño doncel, podía escuchar los gritos de súplica para que lo dejase en paz, se podía oír muy abatido y débil, iba a matarlo, solo era cuestión de segundos-¡¡¡Alguien, por favor!!! ¡¡¡Ayudenme!!!-.
Pestañeó con indiferencia y con intención de ignorar su problema, no era su asunto y en ese instante, algo le detuvo y se dio cuenta que en ese instante se parecía a su padre, iba darle la espalda e ignorarlo solo por ser débil-Yo, soy diferente a el-se volvió a su dirección en donde casi logra invadir por completo al niño y levantó sus brazos, empezando a encenderse.
-¡¡¡Espera!!! ¡¡¿Quien demonios eres tú?!!-le gritó la cosa viscosa.
Dabi ni se molestó en contestar, siguió atacando, sin detenerse, quemará cada cosa de ese despreciable ser y con eso logró liberar al pequeño de su cuerpo. Vio como al suelo y el se acercó para ver si seguía con vida, al verlo quedó mudo. Era un doncel bastante bonito, su cabello esponjoso, sedoso y verde, con esas lindas pequitas, le daban un toque angelical y al ver abrir los ojos, pudo ver los verdes más hermosos que había visto en su vida.
Y su cuerpo comenzó a actuar por su cuenta, le tomó de la mano para ayudar a ponerse de pie-Me haz salvado...¡¡Eres mi héroe!!-Y el encanto terminó al solo escuchar esas frases, dejando que se cayera de sus manos.
-Yo no soy algo tan fracasado para ser un héroe...soy un villano y de casualidad ese tipo estorbo en mi camino-no quería que su reputación recayera por ese buena acción que tuvo con ese pequeño niño bonito.
Entonces vio que el doncel se puso de pie, solo para dedicarle una sonrisa Bonita-Sea como sea, me haz salvado, eres mi malvado héroe...mi nombre es Izuku Midoriya ¿Y el tuyo?-Le preguntó con un tono infantil e inocente.
-Dabi-contesto secó y con es le dio la espalda para seguir con camino.
Ante eso Izuku también se apuró para seguirle-¡¡¡Espera Dabi!!! Yo quería preguntarte algo...¿Tu crees que alguien sin kosei pueda ser un héroe?-no sabia la razón pero quería preguntarle ese cuestión personal, quizá un villano tenía otra perspectiva.
Dabi se puso un poco gruñón pero se tomó la molestia de contestar-Yo creo que esa pregunta, solo te la puedes hacer a ti mismo...si tu no crees en eso ¿Quien lo creerá?-quería continuar pero por alguna razón espero a que continúe a su lado-Ademas ¡¿Porque conformarse a ser un héroe, si puedes ser un gran villano?!-volteo a ver su reacción y vio que el niño lloraba con un brillo especial.
-Me hace muy feliz su respuesta, no sabe que tranquilizador y necesario era ese tipo de respuesta para mi-llevo sus dos pequeñas manos a su pecho y su rostro comenzó a ponerse rojizo, pues se sentía muy apenado por la otra pregunta que le iba hacer-¿Puedo ser un villano junto a usted?-.
Se sorprendió a ésa pregunta, nunca habia tenido un seguidor, ni aprendiz y ese tal Izuku parecía la persona que necesitaba para fuese a su lado-Si es lo que quieres, puedes seguirme, aunque te advierto que no soy un pan de dios, soy un villano y actúo como tal ¿Entiendes?-.
-¡Si!-.grito muy feliz de seguir a su nuevo amigo, a su salvador, a su malvado héroe.
CONTINUARÁ...