Capítulo 11.- Punto de ebullición
Seiya estaba sentado en el piso del escenario del teatro y masajeaba su pie, se había sacado el zapato y lucía cansado, Shura había llegado hacía más de media hora pero se quedó en el fondo de la sala, no quería interrumpir a Seiya mientras estaba en su repaso y ahora estaban en un descanso, en teoría tenían una hora más de repaso, y el mayor sonrió cuando vio a su castaño sacar de su mochila una pera y darle un mordisco, por lo menos estaba haciendo caso a las recomendaciones de su médico, eso era bueno
Shura se quedó sentado en la oscuridad mirando el repaso, se notaba la buena vibra que tenía el grupo entero, todos los chicos se bromeaban y eso hizo llevadero el duro repaso porque su director de obra les hizo repetir una escena en particular más de 8 veces, el abogado no hubiera tomado de buena manera la forma en la que el director cortaba la escena, daba sus indicaciones y todos volvían a repetir lo actuado, y eso le puso a pensar en lo que le dijo Hades temprano en la noche
El pelinegro suspiró y sacó su teléfono, lo abrió y leyó algunos mensajes, ninguno de Hypnos o Hades, Hypnos si se lo había advertido, le había dicho que Hades no tomaría bien lo que había hecho, porque a decir verdad él envió los formularios a espaldas de Hypnos también y ahora estaba pagando las consecuencias, estaba fuera del caso, mierda… debió pensarlo mejor, esta firma no era como la fiscalía en donde lo amonestarían pero no lo botarían, ahora al ver a Hades tan molesto, si se sorprendió que no lo hubiera despedido ahí mismo, claro… Seiya… tal vez no lo botó por Seiya… ese pensamiento lejos de traerle paz, lo preocupó aún más…
Una vez terminado el repaso, el castaño estaba hablando con una muchacha castaña muy bonita y ambos reían juntos, Shura pensó sobre acercarse o no y decidió que sí, así que se levantó, se acomodó su abrigo y caminó por la periferia del salón, Seiya lo miró y una muy sincera sonrisa se dibujó en su rostro, Shura respiró apropiadamente, esa sonrisa le devolvió la vida
- Hey… no me dijiste que ibas a venir, que genial – Seiya saltó del escenario y literalmente se lanzó a los brazos de su novio que lo abrazó con fuerza y luego lo besó en los labios
- Me fui a caminar primero pero luego me puse a pensar en ti y vine a ver tu práctica, eso más que cualquier otra cosa me ha cambiado el humor – Shura sonrió y acarició la mejilla de Seiya que se entristeció al recordar lo que su novio hablaba
- Siento mucho que eso haya pasado, Hades es muy celoso con sus casos, pocas veces lo he visto así de enojado – dijo Seiya en un susurro
- ¿Y crees que se le pase o que me bote?
- Me dijo que no te iba a botar, además ya te sacó del caso, nada más puede hacer, pero por si acaso ni te le acerques un par de semanas, tengo que recoger mis cosas, ¿me esperas un ratito? – Seiya apretó suavemente la mano de Shura que lo besó suavemente en los labios y asintió
El abogado sintió que todos los compañeros de la obra de Seiya lo miraban con curiosidad, y ahí fue que una verdad le pegó en el alma, era algo que Hades dijo, “Cuando eres el novio de quien nunca tiene novio y ha mandado a volar a todos sus pretendientes pues… no, no hay nada privado en esta firma”, Seiya usualmente no tenía novio, no era puro, casto y virginal de ninguna manera pero… no era muy enamoradizo que digamos entonces, esa variable no había considerado, claro que no estaba en sus planes el tomarse a Seiya a la ligera pero… si era esto una presión extra en su vida aunque Seiya lo valía, claro que si…
Esa noche no hablaron más de trabajo, el escuchar a Seiya hablar todo emocionado de su obra de teatro le cambiaría el genio a cualquiera y eso es precisamente lo que le pasó a Shura, escuchó con atención todos los dilemas existenciales de su joven novio, escuchó todo sobre sus repasos, sus caídas en el escenario, sus olvidos de líneas…
- No no no, me has tenido engañado, yo hubiera apostado que te sabías las obras completas de Shakespeare de memoria, me las has recitado muchas veces – la pareja estaba caminando por el parque cercano a la casa de Seiya, habían cenado y ahora estaban caminando en el frío de la noche, tomados de la mano, bajo las estrellas, ambos se sentían muy bien
- Y si me las sé, el asunto es… una cosa es recitarte párrafos cuando estamos acostados en mi cama en franco plan de mimos, y otra diferente es recitarlas en el escenario, es complejo estar de pie en el escenario
- ¿Pánico escénico?
- No, realmente no, es… yo supongo que tú sientes lo mismo cuando haces tus argumentos de apertura o cierre en tus juicios, la adrenalina te recorre, tu corazón late con fuerza, es la emoción del momento, y eso a veces hace que se te olviden tus líneas, eso me pasa solo en los repasos, nunca en las presentaciones, ya tengo tus boletos por cierto, los mejores asientos de la casa – Seiya sonrió y caminó de retro algunos pasos porque abrazó a Shura y lo besó en los labios
- No puedo esperar para el estreno – el mayor sonrió y abrazó al castaño que tomó su mano y caminó a la acera, ya se había cansado de caminar aparentemente porque estaban yendo ahora a su casa, últimamente habían pasado muchas noches juntos en casa de Seiya, el castaño no había hecho mención siquiera en ir a casa de Shura, era algo inusual nada más, de cualquier manera la pareja pasó la noche en el pequeño departamentito al que Shura ya se estaba acostumbrando y a la mañana temprano llegaron a la oficina
Seiya estaba de pie frente al carrito de café cuando Shura llegó por la acera, ellos no podían llegar juntos porque el castaño iba en su bicicleta, eso por ejemplo Shura no había podido convencer a Seiya de cambiar, le había ofrecido pagar los taxis cuando no dormían juntos en su casa pero no, el castaño no quería ni oír el dejar de ir a la oficina en bicicleta, decía que era todo el ejercicio que hacía y necesitaba conservarse en forma, así que el mayor ya le dejó de pelear eso
- No me parece justo que le lleves el café a Hades y a mí nunca me hayas comprado uno – el mayor se apoyó en el kiosko haciéndole una seña a Joe para que también le diera un café
- Tenías que hacer méritos cariño y nunca los hiciste – Seiya le sonrió a Shura y se paró de puntillas para besarlo en los labios
- Yo creo que anoche hice méritos suficientes – el mayor le puso una mano a su novio en la cintura y lo atrajo a su cuerpo, Joe lo escuchó todo por lo que Seiya se puso rojo en contra de su voluntad
- No no no, esos no son méritos, son… obligaciones placenteras por mi hospitalidad
- Amo tus ocurrencias – Shura acarició la mejilla del joven y lo besó en los labios con pasión
- Yo te amo a ti – susurró Seiya mirando a Shura a los ojos, ellos no se habían dicho que se amaban hasta esa mañana, el corazón del mayor se saltó un latido al juntar sus frentes y susurrar de vuelta:
- Yo también te amo
- El café está listo, no dejen que los interrumpa – dijo Joe poniendo los tres vasos en el counter, Seiya tomó los dos suyos, Shura tomó el que le correspondía y dejó un billete, Joe lo tomó y les hizo una seña
- En serio deberías invitarme un café alguna vez – dijo el mayor con una sonrisa divertida
- Ok., si nos ponemos técnicos, yo le llevo el café a Hades, él paga la cuenta mensual a Joe, entonces si lo pensamos un poco, él es el que me compra café todos los días, yo solo los transporto
- ¿Hades compra tu café? – ese Shura no lo sabía, y le parecía peor al hecho de que él creía que Seiya le compraba el café a Hades
- No me mires así, no lo voy a dejar en la banca rota por mi café mañanero
- No es eso… para Hades el dinero no creo que importe porque asumo que le sobra, es el hecho, es una de las razones por las que él cree que tiene derechos sobre ti, y eso no me gusta
- Hades no tiene derechos sobre mí, ya hemos hablado de esto Shura – respondió Seiya con tristeza, esta era una discusión que al parecer nunca llegaba a su fin
- No digo que los tenga, él cree que los tiene, eso es peor
- Lo que Hades crea, me tiene completamente sin cuidado, yo creo cariño que eres un poco paranoico y posesivo, no me lo tomes a mal que no te lo estoy criticando, es solo que… no deberías dejar que esto te moleste – Seiya subió las manos enseñándole los vasos de café que sostenía, Shura meneó la cabeza y dijo:
- No me molesta el café, son… son los pequeños detalles, el diablo está en los pequeños detalles y no me gusta los detalles que él tiene contigo
- Uno de esos detalles, es que no te despidió, así que por hoy no critiques a Hades por favor – Seiya entró al elevador seguido de Shura que preguntó:
- ¿Lo estamos defendiendo ahora?, ¿de qué lado estás Seiya?
- No no no, eso no es justo, yo no estoy del lado de nadie y odio que ambos me pongan en el medio, yo no tengo nada que ver con sus discusiones y cosas, mi vida es lo suficientemente complicada como para opinar siquiera en ese tema – esto Seiya lo dijo muy rápido, señal inequívoca que se estaba molestando, por lo que Shura subió las manos indicando paz y dijo:
- Está bien, está bien, ya no digo nada, ¿almorzamos juntos?
- Ok., yo te llamo – concedió el castaño cuando se abrieron las puertas del elevador y cada quien tomó una dirección diferente, al llegar a su puesto, Seiya vio a Hades que estaba sentado en su sillón, leía algo mientras jugaba con su abrecartas, el castaño no perdió tiempo y entró a la oficina al decir: - Buen día Hades, ¿madrugaste hoy? – el pelinegro levantó la mirada y se sacó los anteojos para masajear el puente de su nariz
- Si… quería revisar esto, como entramos directo a juicio no tenemos oportunidad de hacer entrevistas previas, quiero tener mi lista revisada, ohhhh muchas gracias, la gloria – Hades tomó el café de las manos de Seiya y le dio un sorbito, estaba caliente
- ¿En serio se complicó mucho tu caso? – Seiya siempre preguntaba de los casos de Hades, siempre se interesaba por lo que sea que estuviera trabajando y usualmente Hades le comentaba de ellos, además solía decir que las opiniones de Seiya eran de bastante ayuda porque él era el ciudadano común, sin conocimiento de leyes pero con lógica, esta mañana sin embargo Hades notó al castaño todo apesadumbrado
- Si se complicó, no es algo insalvable pero… si puede ser decisivo al momento del veredicto, es como… si tuviéramos una nueva soda para lanzar al mercado y en nuestro grupo de estudio, a las personas que les vamos a hacer probar el producto, la mitad fuera adicta a la coca cola, y la otra mitad usualmente elige bebidas al azar independientemente, los adictos a la coca cola, por más que nuestro producto sea delicioso y mucho más saludable, no le van a ver el mérito porque a ellos les gusta su bebida y no hay poder humano que los logre convencer de que prueben siquiera otras opciones, entonces… mis posibilidades de hacer que le den una buena puntuación a nuestra nueva bebida, bajan considerablemente, ¿entiendes mejor ahora?
- Ohhhh… si es un problema entonces – Seiya bajó el café, él también estaba bebiendo el suyo pero al entender lo que Hades decía, comprendió la gravedad de la situación, si le sorprendió que Hades no hubiera incendiado la oficina ayer
- Eso te digo, si se complicó pero no es insalvable, además el mejor abogado criminalista soy yo, hey… no quiero verte triste – Hades se levantó de su sillón y se acercó a Seiya para acariciar su mejilla y levantar su mentón
- No pensé que fuera tan grave, ¿va a tener que quedarse en la cárcel ese muchacho? – Seiya había visto las fotos de Ikky, lo había visto en televisión, algunas veces había hablado con Shun en la oficina, a él le daba mucha tristeza la situación de ese muchachito de ojos verdes que parecía tan indefenso y solo hablaba de lo bueno que era su hermano, de que era todo lo que él tenía en la vida, Seiya no podía evitar el sentirse identificado con Shun, y eso le asustaba y entristecía a la vez
- Haré todo lo que esté en mis manos para que no sea así – respondió Hades con tono grave
- Pero… ¿y si es culpable?, tu no crees que lo sea, ¿verdad?, por lo menos eso has dicho en entrevistas varias
- Bueno… es inconsecuente lo que yo crea, pero a decir verdad no… no creo que sea culpable, así lo haya matado – Hades suspiró al decir esto, Seiya lo miró y pestañeó algunas veces sin entender, y dijo:
- Ahí ya me perdiste, ¿cómo puede ser inocente si en verdad lo mató?
- Por los agravantes, esos videos que nos tocó analizar al inicio de todo esto, son chicos muy jóvenes, he tenido entrevistas con varios de ellos y sus padres, algunos no tienen padres pero lo que todos esos muchachos tiene en común es su vulnerabilidad, por eso saqué a Shun de esa comunidad, por eso lo puse en donde puedo tener mi ojo en él y cuidarlo
- Como me cuidaste a mi
- Tú siempre has sido un caso especial pero… si… no puedo negar que… de solo imaginarme que… esos muchachos en los videos son jóvenes, más jóvenes que tú, si hubieras sido tú uno de ellos, yo también hubiera matado a ese desgraciado, ¿entiendes ahora? – Hades ladeó la cabeza al decir esto y Seiya entendió las razones por las que este caso era tan pesado para su jefe, y entendió también de mejor manera las razones de su histeria compulsiva la noche anterior
- ¿Matarías por mí? – Seiya apretó la mano de Hades y le sonrió para tratar de suavizar el ambiente, era un tema muy denso como para tratarlo tan temprano en la mañana
- Yo lo haría todo por ti, y lo sabes, eso es lo peor – Hades tomó su vaso de café y le dio otro sorbito
- Eso siempre es bueno saber, y en esa temática ya tengo fecha para el estreno de mi obra, ya reservé tu lugar, los mejores asientos de la casa y los conseguí para ti
- No me la perdería por nada – el mayor apretó la mano de Seiya y lo jaló para abrazarlo, al hacerlo le besó la frente, Hades siempre lo besaba en la frente por lo que Seiya nunca se había hecho el quite, claro eso fue hasta que una molesta voz dijo:
- Perdón la interrupción – era Shura que estaba de pie en el marco de la puerta, Seiya saltó asustado y Hades no se movió en lo más mínimo, pero endureció la expresión al decir:
- No estás interrumpiendo, ¿qué se te ofrece?
- Con su permiso… - Seiya salió de la oficina y lucía abochornado, Shura entró y tenía algunos papeles en las manos, Hades se volvió a arrimar en su escritorio y no hizo moción de hacer pasar a su visitante a su salita ni nada, así que el pelinegro se quedó de pie en donde estaba y dijo:
- Vine a hablar contigo sobre lo que pasó ayer
- No voy a discutir más mi caso contigo, estás fuera de él, ¿o no fui lo suficientemente claro? – el tono de Hades no enmascaraba su molestia del todo
- Quiero explicarte la falla en la defensa y como la fiscalía nos puede explotar esa bomba dejándonos sin piso – dijo Shura con urgencia
- Explícame pues – respondió Hades con todo el sarcasmo que pudo, Shura se sintió ofendido pero respiró profundamente antes de empezar a hablar, Hades dejó su café en el escritorio y se cruzó de brazos mirándolo inquisidoramente
- Los chicos de los videos son todos menores de edad por lo que no hemos podido identificarlos, en la iglesia, los demás sacerdotes han alegado demencia y no vamos a encontrar ayuda allí, he ido varias veces con Hypnos y contigo también y nos han estrellado las puertas en las narices, si tratamos de jugar la carta de abusos de la iglesia, nos van a reventar porque no tenemos forma de corroborar la evidencia de los videos, la fiscalía puede desvirtuar cualquier tipo de alegato que podamos presentar si no tenemos evidencia que lo sustancie, y no tenemos nada, entonces no podemos llevar la defensa por ese camino, debemos mantenernos con nuestro cliente y su historia, sin involucrar más alegatos, eso de desviar la atención pueda que haya funcionado en un caso en donde el racismo jugó un papel fundamental, en nuestro caso es la iglesia, eso es totalmente diferente, por eso era necesario cambiar la forma de selección del jurado – Shura explicó esto con vehemencia, Hades arqueó una ceja y miró hacia su pared de cristal para ver a Seiya que los miraba pero al verse descubierto bajó la mirada y fingió trabajar, el mayor rodeó su escritorio, abrió un cajón y sacó cuatro folders
- Hyoga Nara, Jabu Ross, Marin Brown, Nime White, esos son los testimonios de cuatro de los muchachos que salen en las cintas, el testimonio de sus padres, de sus psicólogos, y esta de aquí es el acta de defunción y evaluación psicológica de Johanna Harris, ella se suicidó hace un par de años – con cada nombre que dijo, el pelinegro dejaba caer el folder en la mesita de centro, Shura no lo podía creer, tomó uno al azar y su mandíbula casi choca el suelo
- ¿Cómo?...
- Contraté un investigador privado que rastreó a estos muchachos, dos de ellos están en una institución psiquiátrica, otro está en terapia pero ha alcanzado llevar una vida más o menos normal, la muchacha está ahora en un centro de rehabilitación, y como puedes ver ellos además de su testimonio proporcionan algo mucho más valioso
- Nombres… - Shura leyó las respuestas que Hyoga Nara había dado a las preguntas de Hades y había dado muchos nombres de muchos de sus compañeros de clases y de catecismo que habían sido abusados por el padre Docko, además de otros sacerdotes que sabían lo que ocurría allí y no dijeron nada, eran cómplices de los abusos
- Así es, entonces ahora explícame, ¿cuál era la falla en la defensa?
- Hades… esto yo no lo sabía… ni siquiera Hypnos…
- Ustedes sabían que yo estaba buscando esta información, por eso Hypnos trató de disuadirte del cambio de estrategia, él sabía que yo conseguiría esto a tiempo, pero tú, deliberadamente lo ignoraste a él y a mí, e hiciste lo que quisiste, y aquí es cuando cabe mi pregunta otra vez, ¿cuántos años de experiencia tienes en defensa de casos criminales de asesinato con agravantes? – Hades se volvió a arrimar a su escritorio y se cruzó de brazos nuevamente
- Lo siento… no fue mi intención…
- Lo sé… ahora fuera de mi oficina
- Hades no, sé que me equivoqué pero yo aún puedo ser de mucha utilidad en el caso, pueda que no tenga la experiencia en defensa de los casos criminales, pero representé a la Fiscalía por años, Aioros me entrenó, sé cómo piensa, sé lo que busca para minar los casos – Shura no quería dejar pasar esta oportunidad, él quería quedarse en el caso y probarse a sí mismo ante Hades, pero el mayor sonrió de medio lado y con el tono más frío que el hielo contestó:
- Si a eso vamos… pues yo también
- ¿Qué?
- ¿No lo sabías?, pensé que nuestro amigo en común te lo hubiera contado – Hades señaló sutilmente con la cabeza la pared de cristal a Seiya que los seguía mirando con disimulo
- No… no me ha contado nada, no puedo creerlo, ¿trabajaste en la Fiscalía?
- Si… los años que dices que tienes de experiencia no pueden ser más de 3, yo trabajé antes ahí, y así como tú, yo trabajé de primera mano con Aioros, entonces sé perfectamente lo que busca en un caso para desbaratarlo, sé cómo piensa porque lo conozco mucho más que tú, entonces no… no eres invaluable para este caso, y no… tampoco servirá que le vayas a llorar con esto a Seiya porque esta vez no me va a convencer
- Yo no le he pedido a Seiya que haga nada por mi – respondió Shura y sonó ofendido
- Mejor si ese es el caso, no te equivoques Shura, yo puedo ser muchas cosas pero manipulable no es una de ellas, y mucho menos si piensas en utilizar al niño para ello, funcionó para que no te despida, no va a volver a funcionar, te lo advierto – Hades bajó su tono de voz, eso lo hizo sonar amenazante, Shura estaba lívido en este punto y contestó:
- Yo no utilizo a Seiya, la relación que tenemos no tiene nada que ver con esto
- Me alegro – Hades volvió a tomar su café y le dio otro sorbito, ya estaba frío
- Y hablando de eso, no me agrada la familiaridad que tienes con él – esto Shura soltó sin poderse contener, ya lo había hablado con Seiya y habían decidido en que lo mejor era no decirle nada a Hades directamente de las dudas que Shura tenía, Seiya le había dicho que no quería problemas con Hades, que le debía mucho y le era muy grato, que lo quería mucho pero no de forma romántica, Shura no estaba del todo convencido pero, a una petición de Seiya no podía negarse
- ¿Ah sí? – Hades arqueó una ceja y sonó divertido al hacer la pregunta
- Seiya es mi novio y me ama a mi
- Ajá… suerte con eso… - el tono de Hades le pareció por demás ofensivo a Shura que avanzó hacia él con la clara intención de pegarle, Seiya al ver esto corrió desde su escritorio, abrió la puerta y se puso en medio de ambos, aunque dándole crédito a Hades, él no se había movido en lo más mínimo
- Shura por dios, ¿qué crees que haces? – Seiya puso ambas manos en el pecho de su novio para detenerlo
- Si… ¿qué crees que haces Shura? – preguntó Hades con clara burla y bebiendo su café
- Hades por favor – Seiya se volteó y miró a su jefe que se encogió de hombros y se volvió a cruzar de brazos sin moverse de donde estaba, Shura palideció del coraje y apretando los puños dijo:
- No sé qué es lo que quieres, o pretendes, pero si es mi renuncia no te preocupes, la tendrás antes de finalizar el día
- Shura no… - susurró Seiya todo preocupado
- No quiero tu renuncia, si te quisiera fuera de mi firma yo mismo te despediría, no tengo ni el tiempo ni la paciencia de jugar juegos de poder, yo si tengo trabajo que hacer con el caso que tengo que armar a pesar de las circunstancias actuales, pero te aclaro otra vez que la única razón por la que no te estoy despidiendo es porque el niño me lo pidió, Julián está impresionado contigo así que yo recomendaría que te dediques a los casos corporativos
- No necesito tus favores
- No he dicho que el favor fuera para ti – el tono con el que Hades dijo esto dejó sin piso a Shura, que abrió la boca pero la cerró inmediatamente, ya no dijo nada más y salió hecho una furia de la oficina dejando a Seiya de pie en medio
- ¿Por qué le dijiste eso? – Seiya se volteó y miró al mayor con dolor
- No he dicho nada que no fuera verdad
- Dioses Hades… esto es un problemaso
- La verdad no, no lo estoy botando de la firma, le recomendé que trabajar con Julián que en verdad está impresionado con él, ¿qué más quieres de mí?
- Nada… no quiero nada más de ti – Seiya salió de la oficina de Hades y corrió por el pasillo pero no encontró a Shura en la suya, el pelinegro ya no estaba en el piso, diablos…