Capítulo 12.- Tierra de por medio
Aunque no quisiera que esta situación le molestara, no podía evitarlo y estaba molesto, irritado sería una mejor palabra, algo estaba, sabía que no debería, que no podía inmiscuirse en ello, pero no podía evitarlo, Seiya había estado distante una semana, habían hablado lo necesario, el joven castaño había cumplido con su trabajo pero… las cosas habían cambiado irremediablemente, maldito Shura y maldita la hora en la que puso el primer pie en su firma, dioses…
Hades suspiró antes de bajarse del auto, miró la institución y sonrió de lado, esta casa hogar fue un proyecto de su corazón, el ayudar a rescatar a muchachos de la calle y ayudarles a forjar un mejor futuro le llenaba el alma, su firma ayudaba a organizar eventos benéficos y ahora mantenían y daban todo tipo de ayuda psicológica y ocupacional a más de cien muchachos, siendo Shun uno de ellos
- Señor Heissen, que gusto verlo, pase por favor – una mujer de mediana edad abrió la puerta y sonrió al ver que uno de sus benefactores había venido de visita
- Buenos días Melanie, no puedo quedarme mucho, realmente vine a hablar con la psicóloga, ¿está disponible?
- Si claro, venga por favor – la mujer señaló el pasillo y las escaleras, Hades siguió el camino, él había visitado esa casa un par de ocasiones nada más
- Gracias, cuénteme, ¿cómo se ha adaptado Shun?
- Bien, bastante bien, aún no duerme la noche completa, en varias ocasiones lo he encontrado caminando por la casa, no es sonámbulo, está despierto y me dice que no puede dormir entonces camina, trata de no hacer ruido para no despertar a nadie y usualmente baja al salón, se sirve un vaso con leche y lee, ese muchacho lee todo lo que puede, es muy listo, en la escuela están contentos con él aunque no es muy sociable que digamos, en eso Bian ayuda
- ¿Quién es Bian? – preguntó Hades confundido
- Otro de nuestros muchachos que está en el mismo salón que Shun, entonces van juntos y regresan juntos de la escuela, ambos entraron al equipo de básquet, Bian es un buen muchacho y ambos se agradan, Shun es un buen chico – explicó la mujer con una dulce sonrisa en el rostro
- Si, es un buen chico – dijo Hades compartiendo la sonrisa de la mujer, a él le daba mucha tristeza la situación de Shun y quería protegerlo, en el caso de que su hermano fuera a la cárcel, Hades si había pensado hacer con él algo como lo que hizo con Seiya, claro que no sería la misma situación pero… ya lo estaba pensando, no podía dejar a Shun desamparado si su hermano no salía de la cárcel
- Cumple con sus deberes, mantiene su habitación arreglada, no discute con los otros chicos, es callado y retraído, muy dulce, me ayuda a cocinar de vez en cuando, me cuenta de su escuela, me cuenta de su hermano, yo creo que me tiene confianza porque con nadie más se ha abierto, tal vez con Bian
- Eso es bueno, muchas gracias Melanie – Hades estrechó la mano de la mujer cuando la psicóloga abrió la puerta de su consultorio
- Señor Heissen, esta es una visita inesperada – dijo la doctora genuinamente sorprendida
- Es un gusto verla Dra. Nichols, ¿podemos hablar un momento?
- Claro, pase…
En la tarde, Hades estaba en su oficina repasando sus apuntes cuando unos suaves golpes sonaron en su puerta, levantó la mirada y era Seiya el que lucía inseguro en el marco de su puerta
- ¿Desde cuándo necesitas golpear la puerta para entrar a mi oficina? – preguntó Hades en un tono bastante impersonal, él estaba ocupado en ese punto
- Necesito hablar contigo un momento, ¿puede ser? – preguntó Seiya y miraba de una forma extraña a Hades que frunció el ceño y dejó los papeles que tenía en las manos y asintió, Seiya entró y se sentó en una de las sillas frente al escritorio del mayor pero no dijo nada
- ¿Qué pasa Seiya?, ¿estás metido en algún problema?
- No… no, nada de eso es… está bien… Hades… tú sabes lo importante que eres para mí, eres toda la familia que tengo, nunca podré terminar de agradecerte o pagarte todo lo que has hecho por mí, yo siempre te seré grato y siempre tendrás un lugar en mi corazón – Seiya dijo esto y se le aguaron los ojos, Hades no lo podía creer, él había visto llorar a Seiya dos veces en la vida, dos…
- ¿Estás renunciando? – preguntó el mayor con completa incredulidad, es lo primero que se le ocurrió al escuchar lo que el castaño le dijo, y peor se sintió cuando Seiya bajó la cabeza y respondió:
- Si… pero no…
- Explícate por favor, ¿qué diablos está pasando?
- Quiero pedir mi cambio al despacho de Julián, su asistente se va a jubilar en un par de semanas y pues… yo…
- Te quieres ir a trabajar con Julián – Hades bufó y dejó caer el bolígrafo que tenía en las manos
- Hades…
- Déjame entender esto, ¿tú quieres el cambio al despacho de Julián o es tu novio el que quiere que te cambies al despacho de Julián? – el mayor no pudo evitar que el coraje se le subiera a la cabeza
- No Hades, no mal entiendas las cosas – Seiya estaba claramente nervioso porque se frotaba las manos
- No puedo creer que te dejaras convencer así Seiya
- Nadie me ha convencido de nada, solo quiero tener paz en mi vida y no lo voy a poder lograr si sigo en medio de fuego cruzado, la asistente de Julián se va a jubilar y es una buena oportunidad, con eso todos respiramos mejor
- ¿Todos?, Shura respirará mejor querrás decir – Hades se puso de pie y empezó a caminar por su oficina, siempre hacía eso cuando estaba molesto
- Hades por favor… no quiero hacer de esto un problema más grande de lo que ya es, yo te ayudaré a entrevistar a asistentes y podré cambiarme tranquilamente en 15 días cuando Sarah se vaya, no es tan grave, es solo un cambio
- No, no es solo un cambio y tú lo sabes
- Hades…
- ¿Sabes qué?, no, no tenemos motivo para esperar 15 días a que Sarah se retire, si quieres irte vete, yo no voy a amarrarte a la pata de tu escritorio, hoy mismo puedes ir al despacho de Julián si eso le complace a tu novio
- Eso no es necesario Hades, yo puedo…
- Dije que no, si quieres irte pues vete de una vez – Hades manoteó su escritorio y Seiya saltó asustado, asintió y caminó a la puerta, la abrió, se volteó y se limpió una lágrima de su mejilla al decir:
- Entiéndeme por favor, yo lo amo…
- Que te fueras dije – susurró Hades y se volteó, Seiya salió de la oficina pero no fue a su escritorio, fue directo al baño del piso, no quería que nadie lo viera así…
Hades vio a Seiya alejarse y en esos momentos quería morirse, matar a Shura primero pero morirse después, volvió a su escritorio, se sentó en su sillón y trató de retomar lo que estaba haciendo pero no lo logró, no podía concentrarse así que lo dejó todo y salió, iría a caminar o algo, no podía quedarse en su oficina mirando a Seiya empacar, en el supuesto no consentido de que Seiya en verdad empacara, pero claro que lo haría, a la final él mismo lo echó de su despacho, maldito Shura… mil veces maldito…
Cuando Seiya volvió a su puesto ya no vio a Hades en la oficina, bueno… esto por lo menos facilitaría las cosas, así que lo primero que hizo fue a hablar con Julián, Seiya tontamente habló primero con Hades, si Julián no lo recibía estaría en serios problemas pero no, Julián se sintió completamente aliviado cuando escuchó las propuestas del joven castaño, él sabía que Seiya era muy eficiente en su trabajo, si no fuera así Hades ya lo habría botado como botó a todos los asistentes que alguna vez tuvo, así que por ese lado no hubo problema, Sarah le iba a entregar toda la documentación y los archivos a Seiya que iba a ir desde esa tarde al despacho de Julián, ya él haría lo mismo cuando Hades contratara un reemplazo para su puesto
Esa noche Seiya estaba sentado en el piso del escenario del teatro, ya había acabado su repaso pero no tenía ánimo siquiera de moverse, ese día se había equivocado en todas sus líneas, se había tropezado con sus propios pies y le dolía la cabeza, aunque más acertado era decir que le dolía el corazón
- Hey… ya todos se fueron, yo estaba seguro de que ya no te encontraba
- Sorrento, ¿qué haces aquí? – Seiya saltó asustado al ver al abogado que lo miraba con una sonrisa en los labios
- Julián me dijo en dónde encontrarte, quería conversar contigo un ratito, ¿quieres ir por una cerveza o algo?
- Claro, dame dos minutos, ya regreso – Seiya se puso de pie y se perdió tras el escenario, Sorrento lo miraba todo con ojos muy abiertos, nunca había estado dentro de un teatro antes, pero no tuvo que esperar mucho porque Seiya enseguida salió y ya estaba cambiado de ropa y tenía su mochila en la espalda
- Hay un bar cerca que tiene unas alitas buenísimas, ¿te gustan las alitas? – preguntó Sorrento
- Si claro, ¿de qué querías conversar conmigo? – preguntó el castaño intrigado
- Dios mío, ¿siempre eres así de directo? – el abogado dejó escapar el aire que estaba conteniendo, su relación con Seiya siempre fue amistosa, se bromeaban mucho cuando coincidían en la cafetería, o en el elevador, pero no eran amigos, nunca lo fueron, a decir verdad Seiya no era amigo de nadie porque al ser el asistente de Hades, no necesariamente era muy sociable con nadie más, siempre lo buscaban a él para que les consiga favores de Hades y Seiya lo resentía, entonces se llevaba con todos sin llevarse con nadie
- Si, es mi falla de fábrica – respondió Seiya encogiéndose de hombros
- ¿No te viene a buscar Shura hoy en la noche?
- No, está trabajando en un caso con Kanon, lo que asumo que tú sabías, caso contrario no habrías venido
- Si lo sabes todo – el abogado lució contrariado por ello, usualmente Seiya solía decir que lo sabía todo pero lo hacía en plan de broma
- Obviamente no lo sé todo, ya dime, ¿pasa algo?
- Si… y no… lo que pasa es que… quiero saber cómo lo haces, eso es lo que quiero saber – Sorrento meneó la cabeza al decir esto, habían llegado al bar y entraron, fueron directo a una de las mesas del fondo y se llevaron un par de cartas con ellos luego de ordenar dos cervezas en la barra
- ¿Cómo hago qué?
- Muy bien, así como eres brutalmente sincero conmigo, voy a ser sincero contigo, no creo que no sepas mi dilema
- ¿Qué dilema? – Seiya estaba llegando al límite de su paciencia, odiaba que las personas vayan por las ramas y no le hablaran claro, diablos… en eso era igual que Hades, ese pelinegro si era una mala influencia en su vida
- Estoy saliendo con Julián, lo sabes, ¿verdad? – Sorrento susurró esto al tiempo que un mesero llegó con sus cervezas
- No tienes que susurrarlo Sorrento, toda la firma lo sabe, no son ustedes lo que se dice discretos, ¿pero cuál es el problema?, tú eres soltero, él también hasta donde yo sé – Seiya se encogió de hombros y bebió un sorbo de su cerveza
- El problema es que, antes de Julián, yo estaba involucrado con Kanon
- Ohhh… eso no lo sabía – Seiya se sorprendió genuinamente, a él nunca se le pasaba un chisme como ese pero al parecer en esa relación Sorrento y Kanon si habían sido discretos
- Nadie lo sabe, y es un problema de épicas proporciones porque Kanon es un imbécil y me lanza indirectas cuando Julián está por ahí, estoy preocupado porque las cosas con Julián van bien, en serio van bien, mejor de lo que pude haber pensado pero… ahora con esto, te juro que no sé qué hacer – el abogado bebió su cerveza y en verdad que lucía descorazonado
- ¿Y por qué crees que yo puedo ayudarte con esto?
- Por tu situación con Hades y Shura
- Mi situación con Hades y Shura no se parece en nada a la tuya con Julián y Kanon – dijo Seiya y lució confundido
- Pero yo pensé… ¿por qué pediste el cambio al despacho de Julián entonces?
- Si estás preocupado porque yo voy a estar cerca de Julián, por favor Sorrento no lo estés, yo nunca me metería en la relación de ustedes, no soy ese tipo de persona
- No, por todos los dioses Seiya, no, esa no era mi intención, yo sé que tú nunca harías algo así, no no no, no me mal entiendas por favor, es solo que yo pensé que tu tenías algo con Hades, lo siento, soy tan estúpido a veces – Sorrento dijo esto muy rápido y lucía en serio mortificado, el castaño meneó la cabeza y dijo:
- No… no te preocupes, todo el mundo asume cosas equivocadas en lo que respecta a Hades – Seiya dijo esto con cansancio
- Lo siento, sé que no es mi lugar preguntártelo, es que siempre me quedé con la duda luego de ese interrogatorio que te hizo Pandora
- Ohhhh… cierto… ella es compleja, pero no, yo no tengo nada con Hades, eso complicaría mucho mi vida y la verdad, me gusta mi vida como está
- No tienes nada, pero, ¿lo tuviste alguna vez?, te lo pregunto porque Hades es un hombre muy atractivo, yo no me pude resistir a Julián y no es que trabajamos mucho tiempo juntos antes de que algo pasara entre nosotros, tú has trabajado años con Hades, ¿nunca pasó nada entre ustedes?
- No… lo que pasa es que, el momento que algo llega a pasar lo arruinaría todo, la relación cambiaría para siempre, la amistad se diluye, y no, Hades es muy importante como para eso
- ¿Entonces por qué lo dejaste por Julián?
- Es… complicado, hay muchos problemas entre Hades y Shura por el caso en el que Hades está trabajando, y me ponen a mí en el medio, por eso es mejor que yo no esté ahí, es simple la verdad, asumo que Julián te lo dijo – Seiya bebió de su cerveza, eso es lo que él le había dicho a Julián, era lógico suponer que su nuevo jefe se lo contaría a su novio, además, Shura estaba trabajando últimamente con Julián en sus casos así que igual se lo contaría, Seiya pudiera apostarlo
- Si, algo así me dijo
- Además yo voy a dejar la firma eventualmente, voy a graduarme este año, dependiendo como me vaya con mi obra, la compañía que la auspicia me podría ofrecer un trabajo, las cosas no pueden quedarse iguales eternamente, yo tengo que irme y seguir mi carrera, Hades lo sabe, esto solo lo acelera un poco
- ¿Y cómo va tu obra?, ¿cuándo se estrena?
- A finales de esta semana, deberías venir – Seiya tomó su mochila y sacó un panfleto, Sorrento lo tomó con una sonrisa al responder:
- Claro que voy a ir, no me la perdería por nada
- Y por Kanon no te preocupes, habla con Julián y cuéntale lo de Kanon, no es un crimen que hayas salido con él antes, si no eres sincero con Julián y él se entera de lo que pasó por otro lado, ahí si vas a tener un problema con él, mejor sincérate y se acaban tus problemas, ahí Kanon puede decir misa si quiere que a Julián no le va a afectar y tú vas a estar tranquilo, es lo que yo haría por lo menos
- Lo mismo me dijo mi hermano, pero me da miedo, no quiero arruinar la mejor relación que he tenido en mucho tiempo, no quiero perder a Julián
- No lo vas a perder, pero mientras más te tardes en hablar con él, peor va a ser, habla con él, si te ama te entenderá
- Pues ojalá… ¿alitas?
- Alitas…
Dos días pasó Hades histérico, la ausencia de Seiya le estaba pegando más de lo que le hubiera gustado admitir, ese viernes era la audiencia final para determinar a los miembros del jurado, Hades e Hypnos habían trabajado hasta tarde todas esas noches, ellos ya tenían su plan de ataque y los jurados a los que iban a eliminar, no iban a poder conseguir todos los que ellos quisieran, sus mejores candidatos fueron eliminados de un solo plumazo por Shura, ahora tenían que trabajar con lo que les quedaba
- Disculpen la interrupción, ¿puedo pasar un minuto? – Hades e Hypnos estaban en la sala de conferencias mirando la pared en la que tenían ya trazada la cronología de eventos de la noche del asesinato, tenían listadas las evidencias, los testigos, tenían ya esquematizado todo, entonces últimamente Hades ya nunca estaba en su oficina, estaba siempre en la sala de conferencias
- Pasa Seiya, ¿qué ocurre? – preguntó Hypnos todo amable porque Hades solo miró al castaño y se volteó sin responder
- Dejé esto hace dos días en tu escritorio Hades pero, no lo has revisado, pensé en traértelo personalmente
- ¿Qué es? – preguntó el pelinegro volteándose para mirar a su ex asistente que tenía unas hojas en las manos
- Es un listado que hice con los mejores candidatos para suplir el puesto de asistente, con este caso yo pensé que… lo necesitarías, tienes apilados muchos folders, comunicaciones y cosas en tu escritorio, si quieres puedo organizarlo o algo – ofreció el castaño y lucía inseguro, Hades respiró profundamente al decir:
- Gracias Seiya, en serio sería de mucha ayuda si lo organizas por mí, ¿podrías dejar ese listado sobre mi escritorio? – el tono de Hades fue mucho más sereno, Seiya sonrió y respondió:
- Claro que sí, con permiso – el joven castaño salió de la sala de conferencias con un peso menos en el alma, Hypnos miró a Hades que simplemente dijo:
- ¿Qué quieres de mí?, no me puedo enojar con el niño eternamente
- Yo no estaba diciendo nada – respondió el rubio con una ligera sonrisa, ellos tenían que acabar de prepararse para su audiencia de la tarde
Por horas trabajaron y solo tomaron un ligero almuerzo cuando Hades recordó que tenía que recoger unos papeles de su oficina antes de ir al juzgado, por lo que al entrar vio documentación varia organizada en su escritorio, tenía notitas pegadas con mensajes, el mayor meneó la cabeza y abrió el primer cajón de su escritorio para tomar los papeles que necesitaba
En eso estaba cuando algo llamó su atención, con un clip estaba anexada al listado de asistentes potenciales para la vacante de su asistente, una entrada a la obra de teatro de Seiya con una notita que decía, “Los mejores asientos de la casa” y una carita feliz, Hades no pudo evitar sonreír y guardó la entrada en la solapa de su saco, era para esa noche, haría todo lo posible por ir, pero su caso también exigía atención, el jurado se elegía esa tarde…