Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Delirio por M M

[Reviews - 115]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Holiii les traigo otro capítulo.

Uff este es uno de los más esperados por mi en lo personal. Mañana hay cap también, no olviden dejar sus comentarios. 

 

Capitulo 41.
Herida expuesta.




Edward por primera vez en su vida no sabía cómo reaccionar o que decir, la mirada lastimera del menor le estrujaba fuertemente el pecho y el corazón. Sin percatarse siquiera de sus acciones había cavado su propia tumba por haber actuado tan impulsivamente. Se había dejado llevar por las provocaciones del otro ignorando la situación en la que estaba. Comenzó a sudar frío y una sensación de inseguridad de nuevo apareció recorriendole la espalda.

- Qué fue lo que hiciste? Respóndeme! Qué son todas esas cosas que estabas hablando por teléfono?- Day no perdió tiempo para empezar a reclamarle entre lágrimas.
-Day yo… yo…- apenas atinaba a decir entre tartamudeos.
- Me mentiste, dijiste que me cuidarías y que seríamos amigos… Qué te quedarías a mi lado… Y ahora resulta que participaste tú en esto y que siempre supiste todo?- Day tomó fuertemente de la playera a Edward buscan una explicación en su mirada. 
-Edward... También vas a utilizarme?- pregunta entrecortado, Como si no tuviera bastante con una traición ahora eran dos las que le lastimaban el alma.

El adolescente mayor trato de armar alguna oración inteligente dentro de su cabeza, pero nada más allá salía de esos labios que no fuera otra cosa el nombre de Day. 
- Resulta que siempre supiste de la infidelidad de mi hermano... Y  encima de ello fingiste no saber nada…. Para qué hiciste todo esto? De qué diablos hablas al tratar de querer mi corazón?- El menor subía su tono de voz demostrando por primera vez su enojo ante los ojos de Edward. 


Incluso enfadado se veía hermoso.
Como un hada peleando por las alas que le fueron arrebatadas.


- Tú sientes algo por mí?…- Pregunta al menor bajando un poco su molestia para dar paso a un tono triste.
-Day… yo… yo solo…- No lograba completar alguna oración. Se sentía Estúpido por no haber considerado sus acciones, al haberse expuesto de una manera tan ridícula por tratar de responderle al Imbécil de Claude.

Menuda manera estúpida de humillarse Asimismo.
- Me has utilizado para vengarte de los malos tratos que te brindó mi hermano, Tú sabías que tenía miedo de que mi relación con Anthony se descubriera y no dudaste de dar esa información a otra persona, Yo confíe en ti… Por qué has hecho todo esto? Y qué es lo que sabes de mi madre?- Day nuevamente zarandea a Edward de la playera exigiendo una respuesta.

Repentinamente Tony vuelve a tocar la puerta al escuchar la discusión entre ellos dos, no quiere quedarse atrás y perder lo que más a amado en su vida. Anthony tiene tanto miedo que golpea la puerta tratando de abrirla.
-Day! Day por favor abre la puerta!! Necesitamos hablar! Te lo suplico por favor! Tienes que escucharme! Edward te ha mentido todo este tiempo y yo también lo he hecho, Necesitas saber la verdad!- Gritaba Anthony  mientras forcejeaba para poder entrar a la habitación.
Edward entró en pánico y de nueva cuenta no supo que hacer o cómo reaccionar, las cosas se le estaban saliendo de las manos y no sabía qué sucedería si ese niño salía de la habitación y hablara con su hermano.

Todos sus esfuerzos por conseguir la libertad de ambos terminaría en un reencuentro amoroso de Day y Anthony. Edward estaba tan asustado de no tener más ases bajo la manga que ni una sola palabra más salía de sus labios secos. Day empujó hacia atrás adolescente de ojos cafés molesto de no tener una respuesta. 
El amigo que tanto deseaba conservar en la figura estoica de caballero se había derrumbado así como se había caído la de James anteriormente, pues atando cabos por las palabras dichas en el baño llegó a la conclusión de que los actos realizados fueron por un mero deseo egoísta. 

Todos ellos habían jugado con su persona y su confianza, no habían considerado siquiera lo que él quería o lo que deseaba para su propia vida,  ninguno de ellos se había sentado ante sus ojos hablado con él para ver lo que realmente su corazón quería. Se sentía estúpido de haber considerado protector a Edward  después del fracaso amoroso con su hermano mayor, ya no quería justificar a nadie por sus actos ni estar cerca de ninguno de ellos, quería regresar a su antigua vida y tener por lo menos algo de paz.

Caminó rápidamente hacia la puerta y la abrió violentamente, tenía un nudo en la garganta y un enorme peso oprimiendole el pecho. Primero se había Decepcionado de James, luego de su hermano y ahora de Edward quién también había mostrado su lado bizarro y egoísta. 
Tal vez todo era su culpa pues de alguna u otra manera les había dado esperanzas estando consciente de sus actos o incluso no estandolo. El cuerpo de Anthony se posicionó en frente suyo pues pensaba qué el menor al fin deseaba hablar con él. 
Lamentablemente la única respuesta que recibió fue una bofetada sonora en su mejilla derecha. Tanto Anthony como Edward se quedaron estupefactos portal acción. 

Ilusiones que se desquebrajaron sobre mentiras.

 -Day…- dijeron al unísono ambos adolescentes mayores pues jamás habían visto al menor tomar una actitud violenta. 
Todo estaba pasando tan rápido que incluso el tiempo en esos momentos se había sentido resagado, quedándose en acciones lentas cuando sólo constaban de 
unos segundos en el proceso.
Anthony quedó impactado por la osadía en los ojos de Day, marcando su delicado rostro en determinación y rencor, la abnegación que caracterizaba su actuar se desvanecía como la nieve entre cálidas manos dando pie a una faceta dolida que no había presenciado incluso cuando le arrebato la virginidad.

Edward inmóvil y sin palabras más allá de aquel nombre que adoraba continúo anonadado, su pequeña obra de arte ardía en sus propias llamas revoloteando en un ataque violento para reivindicar su honor mancillado. 


Ohh 
Cuanta belleza en un arrebato de ira.


El menor bajó la mano sintiendo el ardor recorrerle la palma, jamás había golpeado a alguien y ahora que lo había hecho solo deseaba que ese dolor en el corazón se fuera anhelando que lo único que le lastimara fuera la palma de su mano. Nadie podía protegerlo en esa casa.
Un repentino grito proveniente de la sala de estar llegó a los oídos de todos los adolescentes que se encontraban en la puerta, descolocadolos por un momento pues Ellos tenían sus propios problemas pasando en ese mismo instante. 
- Tú no puedes ignorarme! Yo debo ser tu mujer!! Incluso ya inicie el proceso de divorcio!- Se escuchó claramente por su voz femenina.
Day no lo pensó siquiera y corrió en búsqueda de su madre, de nueva cuenta tenía la esperanza de encontrar refugio entre los brazos de la persona que le dio a luz ignorando los gritos de ella y sobre que hablaba.

No quería escuchar más de las tonterías de Anthony o Edward, y temía de cierta forma no poder protegerla de todas las mentiras que habían sido dichas y de las verdades expuestas.
Ambos jóvenes siguieron al menor tratando de controlar la situación sin interesarse siquiera en el porque la mujer estaba gritando. Lo único que les movía era el poder solucionar los errores que habían cometido por sus bajos instintos. 

Todo esto era una mierda, una bizarra pesadilla.  

Mentiras acumuladas por montones y máscaras que cubrían la ambición de cada uno de ellos.
Al llegar los tres jóvenes solamente pudieron contemplar una imagen asquerosamente descompuesta. 
Susan estaba besando al profesor Snow desesperada por mantener el hombre de sus sueños a su lado. Y es que nadie la comprendía realmente, sentía que a nadie le importaba ninguno de sus sentimientos forzándola actuar de esta manera tan destructiva. Ni su propio hijo ni nadie en lo absoluto comprendían el dolor de su corazón albergaba.

Day sintió su alma y su corazón terminar de destrozarse dentro de su pecho, como si un montón de vidrios rotos albergaran su caja toráxica. Cada pieza que conformaba la lógica en su vida se acababa de desbaratar, su mente colapsó en un solo instante.
Edward no entendía que estaba pasando dado a qué nada de lo que ocurría había sido planeado, pues se suponía que Day estaría al tanto de todo un tiempo después, no contó con la impulsividad de Susan al aferrarse de esa forma a sus fantasías.
Contaba con la discreción del señor Frederick para manejar el asunto a puertas cerradas para que de esta forma no terminara de destrozarle el corazón a su niño. Toda aquella astucia e indiferencia  se quedaban en el olvido, él que siempre había sido tan calculador y metódico estaba callendo en las consecuencias que deseaba mantener alejadas de su persona.

Cómo si de una explosión mal calculada le afectara por su ineptitud e impulsividad.
No había sido racional en los últimos momentos dejándose Incluso en una peor situación que se encontraba Tony, el mismo había insinuado a través de esa llamada que estaba al tanto o que tenía conocimiento acerca de lo que estaba ocurriendo con Susan sólo esperaba patéticamente a que Day no lo relacionara con él. Trato de mantener la compostura miró fijamente las expresiones que tenía  el menor en aquellos momentos. El chico estaba estático totalmente impactado, unas cuantas lágrimas se desbordaba nuevamente de sus ojos azules, no había movimiento alguno de su cuerpo casi como si el alma misma se le hubiese escapado dejando un cascarón bastante aturdido.


Edward se mordió el labio inferior entrando en un estado de pánico, el deseaba que el niño se enterara de toda la verdad de una manera menos agresiva Pues a pesar de su propia avaricia para poder tenerle no quería lastimarlo más de lo que ya se encontraba, tendría que lidiar con más cosas innecesarias qué mal gastarían la salud emocional de su preciada obra de arte. Aquellos tintes de osadía en la mirada fría que el menor había dado hace apenas unos momentos al abofetear a Anthony habían desaparecido, marcando sus ojos en una total y amarga decepción. 

Se había dado cuenta hace ya un tiempo que la razón por la cual Day mantenía en secreto el amorío con su hermanastro era para poder proteger el matrimonio "feliz" de su madre, ya que el menor pensaba que si esto salía la luz el Señor Frederick pediría inmediatamente el divorcio rompiéndole el corazón a su madre dejándolos nuevamente en aquella posición precaria con los Sueños rotos de una familia unida, algo que sabía que a Susan le dolería bastante pues a los ojos de Day, su madre amaba bastante su padrastro y que ese matrimonio que apenas había iniciado se perdiera no era una opción Así que se dejó subyugar y destrozar a manos de un adolescente posesivo y si nada de autocontrol.

Por su parte Anthony no dejaba de mirar también las reacciones que su hermano menor estaba teniendo en esos momentos, estaba tan asustado de que al enterarse de esta noticia su corazón colapsara, bastante daño ya le había hecho él con su traición, las violaciones y  las constantes manipulaciones como para que el menor lidiara tambien con esta escena. Tragó duramente saliva para darse valor a sí mismo, toda su valentía e indiferencia a los resultados de sus propias acciones habían desaparecido, por primera vez en toda su vida deseaba el bienestar de otra persona que no fuera él. Deseaba proteger a la persona que más amaba así él tuviste que ensuciarse nuevamente.

-Mamá...- masculló el menor con un hilo de voz distorsionado.
Susan inmediatamente se dio cuenta de que estaba siendo observada por los tres adolescentes Y no sólo por ellos sino por el resto de los empleados que también se encontraban al fondo de la sala los cuales estaban presenciando todo de primera mano en un total silencio. El pánico se apoderó de ella separándose abruptamente del profesor, Apenas estaba dando cuenta de que había cavado su propia tumba en su misma casa, miró con miedo a su hijo y su expresión ensuciada por el maquillaje escurrido mostró cobardía.
James asustado de haber sido descubierto tan prontamente se le descompuso la cara en fracciones de segundos, miró a su alrededor y todos esos ojos se clavaban justamente en ellos dos.

Un sentimiento de furia y asco lo invadió abruptamente, Ninguno de los sacrificios que había realizado ni todos los sueños que él había contemplado tenían ya validez a estas alturas, Pues esa asquerosa mujer qué se supone que iba a ser utilizada para llegar a sus fines los había delatado en uno de sus arranques de celos. Inmediatamente puso sus ojos en su pequeño sueño quién tenía una total expresión de tristeza, como sí sólo hubiese quedado su cuerpo y el corazón arrancado. 

No! Maldita sea no! 

Tantos planes que tenía para el futuro hechos añicos en tan sólo unos instantes, las asquerosidades por las que tuvo que pasar con esa despreciable mujer habían sido en vano, se había dado cuenta de que jamás tendría a su lado a la persona que realmente amaba, estaría atrapado por siempre en la soledad frívola de ese estatus qué tanto se empecinaba su familia  a que conservara. Su propio corazón se estrujó amargamente y en su lengua un sabor agrio le invadía, nada de esto tenía que haber pasado, todos los planes habían sido calculados específicamente para su beneficio pero no importaba ya, su mirada color miel se oscureció posicionándola sobre la raíz de su verdadero problema. 


Susan estaba aterrorizada y su cuerpo temblaba descontroladamente, esa maldita mujer que arruinó todo tendría que pagar por sus sueños rotos, de un momento a otro todos fueron sacados de su propio estado de shock.
- Mamá qué significa esto?- Preguntó Day quebradamente.
- Esto no es lo que parece hijo.... Yo... Yo te lo puedo explicar- Ella tartamudeo en medio de su nerviosismo tratando de hallar alguna excusa dentro de su mente.
- Mamá no entiendo que está pasando... eres amante del profesor?- Pregunta asustado.
- Hijo Esto no es lo que tú crees.... Tu padrastro y yo nos separaremos pronto Así que no tienes porque preocuparte, planeaba decirte que tendrás un nuevo padre y esta vez será para siempre... Tú, él y yo seremos una familia, lamento en verdad que te hayas enterado de esta forma- Dijo esa mujer tratando de sonar lo más calmadamente posible pero su nerviosismo y miedo la delataban mostrando Así que ni siquiera estaba segura de lo que había dicho.


- Pero qué estás diciendo? De qué matrimonio me estás hablando? De qué familia estás hablando?!- Day nuevamente elevó su voz llamando a la atención de todos los presentes pues su actitud tan tranquila y sumisa fue cambiada por la furia que la invadía.
- Hijo tienes que entender qué a veces los padres tenemos que hacer esto, todo estará bien... Te lo prometo esta vez sobre será la familia que tanto te prometí... Verás que todos seremos felices...- La voz de Susan se tropezaba palabra con palabra torpemente.
- Ya está enterado mi padrastro de qué te quieres divorciar? Mamá hace apenas unos meses que te casaste! Ni siquiera tienes un año de matrimonio! Y planeas casarte con ese hombre?!- Day esta vez grito frunciendo el ceño.

-Day!! Cómo te atreves a gritarme?! Soy tu madre cuida más tu tono de voz conmigo!- Ella rápidamente tomó una posición defensiva frunciendo también el seño.
- El hombre con el que planeas casarte y hacer mi nuevo padre trato de abusar de mí antes!! Me hiciste jurarte que no diría ni una sola palabra de esto a mi padrastro sólo para que él no se pusiera triste y se decepcionara de su sobrino!! Me dejaste sin refugio justamente cuando yo más te necesitaba! Pensaste de verdad que lo aceptaría a él?!- Day gritó histérico mientras su rostro se ponía de un tono rojizo por la ira. 
Edward y Anthony estaban completamente anonadados y no podían reaccionar por la sorpresa qué les causaba las reacciones del menor.

- No te atrevas a gritarme Day!! No puedes cuestionar ni una de las acciones que yo hago! Soy tu madre y sé que es lo mejor para ti, además no creo nada de lo que dices, el estúpido de Anthony no sabe más que decir mentiras y estoy completamente segura de que James me ama solamente a mí, Por qué mierda se fijaría en un niño como tú teniendo a una mujer como yo?!!- gritó enardecida al tocar nuevamente a que el tema.
- Es que tú estás sorda o ciega?! Eres mi madre!! Cómo puedes creerle más a otra persona?! Cómo puedes dejarte llevar por la pasión de un hombre que ni siquiera te ama de verdad?!!- respondió agresivamente.


- Tú no haces más que cuestionarme! A ti tampoco te importa mi felicidad! Estoy cansada de tu horrenda actitud negativa, todo lo que hago y digo está mal para ti... No ves acaso que ya he hecho muchos sacrificios para darte lo que tanto he deseado para nosotros?!- Dijo ella colérica mientras su cabello se meneaba de un lado a otro al mismo tiempo que gritaba.
- De qué tonterías me estás hablando?! Darme lo que tú deseabas?! Sólo has pensado en ti misma todos estos años! Me has hecho aceptar tus deseos a la fuerza y todas tus acciones diciendo que es por amor cuando en realidad sólo lo haces por pura ambición!! Cómo puedes decirme que me amas y engañarte de esa forma destruyendo todo lo que tocas a tu paso!!- Gritó el menor agitando los puños violentamente mientras apretaba sus párpados tratando desesperadamente de no llorar.

- Pero en realidad no me amas!! También sólo has pensado en ti mismo! Cada que intento ser feliz tú estás en medio y me obligas a regresar a esa realidad que no quiero!- Susan de momento a otro comenzó a llorar, en el fondo de ella le dolió tener que decir todas esas palabras a su hijo.
- Eres mi madre maldita sea!! Cómo puedes decir que no me interesas y que no te amo?! Todo lo que he hecho lo he hecho por ti! Me he sacrificado por ti!! Todo para que tu matrimonio no se arruine y tu felicidad se extienda!! Pero como siempre el terminas arruinando todo lo que tocas!!- gritó nuevamente.


Anthony y Edward se miraron el uno al otro estando en la misma sintonía de tristeza y pena al ver que la persona que ellos amaban estaba explotando de aquella forma. Ninguno de los dos se atrevió a meterse, quedándose quietos en una sola posición, esta era una batalla que no podían evitar.

- De qué sacrificios me estás hablando?! Crees que acostarte y abrirle las piernas a tu hermanastro es un sacrificio?! Entregarte a la persona de la cual estás enamorado no es un sacrificio!- Susan gritó sin darse cuenta de lo que acababa de decir.
Todos en ese mismo instante clavaron su mirada en aquella mujer, Susan cubrió rápidamente su boca con ambas manos escuchándose un "plap" por el repentino golpe a su boca.
- Qué mierda acabas de decir?!- preguntó furioso James. Ella desbordó lágrimas mientras mantenía sus dos manos presionando su boca para no hablar nuevamente.

- Qué? Qué dijiste?- preguntó estupefacto Day.
- Tú sabías que tus dos hijos estaban en una relación?!- Pregunta el profesor jalando violentamente del brazo a la mujer para descubrir su boca.
-Mmh!- Atina decir ella tratando de apretar la única mano libre que le queda contra su boca.
-Esto es maldita porquería...- Masculla Edward dado a qué ni siquiera estaba al tanto de que esa mujer sabía ya del amorío entre los dos hermanos.
- Tú sabías de nuestra relación?.... Tu maldita mentirosa!!! Cómo puedes llamarte mi madre Y alardear qué me amas!... Hacerte la víctima y lastimar a todos a tu paso... Fingiste no saber nada... tú...- Day trataba de armar oraciones para expresar su ira pero las náuseas, La decepción y el coraje de sentirse nuevamente traicionado le estaban estrujando el alma.


- Todo este Maldito tiempo tú sabías qué Anthony estaba robándome el corazón de mi Preciado Day?! Cómo te atreviste ocultarme algo así?!- Violentamente James zarandeando del brazo a la mujer para que hablara.
- Porque si sabías todo no dijiste nada?! Dejaste que mi hermanastro me violara sólo con la excusa de que al final me enamoré de él!! Qué clase de madre eres que permite estas cosas?! Contéstame maldita sea!- Day comenzó a gritar nuevamente tragándose su propio vómito qué amenazaba con salir se le de la garganta.

- Day iba a ser mío!! Tu permitiste está incestuosa relación para mantener estable un matrimonio que al final no querías!!- Gritó colérico el profesor escupiendo esas palabras en el rostro de ella ignorando lo que el chico también decía.
Susan descubrió su boca manchando su rostro con los rastros de labial entre el forcejeo por mantenerse callada hace unos momentos, sus lágrimas habían escurrido el maquillaje de sus ojos y su mente se había centrado en una sola cosa.
- Qué acabas de decir?! Cómo que tu Day?! Qué quieres decir con eso?!- Preguntó entre molesta y celosa.
- No me vengas a mí con esa cara y esa actitud de niña mimada que me dan asco!! No soporto nada de ti! Tuve que fingir todo este tiempo que estaba interesado cuando en realidad a tus espaldas lo único que me provocabas eran náuseas!! Jamás te amé y nunca estuve interesado en ti, todo esto lo he hecho para obtener corazón de tu hijo... Es a Day a quién realmente yo deseaba tener!!- gritó el profesor para después darle una bofetada bastante sonora a la mujer ocasionando que cayera al piso violentamente.

Nadie de los presentes siquiera reaccionó A tal acto.

- Pero mi amor... Porque me has pegado? Tú dijiste que me amabas!! Que nos casaríamos y  seríamos una familia!! Tú me prometiste una vida feliz y llena de riquezas!! Cómo te atreviste a mentirme!! Yo debo ser tu mujer no mi hijo!- Susan desbordó sus lágrimas sintiéndose totalmente estafada y desilusionada. Ahora la víctima aparentemente era ella.
- Maldita sea deja de fingir asquerosa mujer! Yo sólo estaba interesado en que podía obtener de tu marido para poder apoderarme de tu hijo! Eres tan ciega y tan estúpida que incluso cuando intenté poseer a tu hijo no hiciste nada,  me da asco cada parte de ti me provocas vómito, eres una basura de persona y una mala madre!!- James volvió abofetear a Susan esta vez rompiéndole el labio golpe tras golpe haciendo que la mujer terminara en el suelo temblando por el dolor.


- Basta!! No la golpees más... No es necesario que hagas esto- Day a pesar de toda la ira y la decepción que sentía en su corazón no toleraba ver a su madre maltratada. Su amor de hijo no le permitía ver a la persona que tanto amó en aquel estado.
- Esta horrible mujer no merece tu amor ni tu compasión.... Pero yo sí!! Tú y yo seremos felices lejos de ella.... De todo y de todos!! Elígeme a mí!! Te haré la persona más feliz del mundo si me das la oportunidad de redimirme- James trató de acercarse lentamente hacia el menor sin darse cuenta de que el mismo había empezado a llorar también.
Susan observó ida en su dolor, su príncipe quería tomar a su hijo y juntos la abandonarían... 
"Justo como él... Así ocurrió y así vuelve a pasar" pensó a sus adentros tirada sobre el suelo de fino mármol.

- No te acerques más a él... Eres un maldito psicópata enfermo, usaste a la madre y ahora quieres al hijo- Edward habló duramente interponiendose enfrente de Day. 
- Qué yo soy un maldito psicópata? De qué porquería es me estás hablando cuando tú eres igual a mí?! Tú y ese estúpido que está ahí parado como imbécil son iguales a mí!! Todos estamos cortados por la misma tijera!! Cegados por la ambición y la lujuria detener a alguien tan valioso como ese niño entre nuestras manos!! Hemos hecho y deshecho lo que hemos querido a nuestro antojo por tener su amor!- Respondió el profesor con una expresión lastimera escurrido en sus propias lágrimas.
- No nos compares contigo! No somos iguales- Respondió Anthony bastante molesto Y aturdido por todo lo que estaba ocurriendo.


- Somos iguales Te guste o no!! Tú utilizaste a tu hermano desde el primer momento en el que lo viste!! Lo violaste una y otra vez sin importarte si él estaba de acuerdo con aquella relación, abusaste del miedo de ese niño!! Ambos estábamos dispuestos a ser lo que sea con tal de poseerlo!- Gritó James para después ser callado por un puñetazo en el rostro de parte de Anthony. 
Tal vez de cierta manera eran iguales, tal vez ambos estaban enfermos y necesitaban ayuda pero no se rebajaría a quele comparara con Snow.

- Cállate la puta boca maldito mal nacido!! Yo al menos estoy consciente de todos los errores que he cometido y estoy arrepentido de haberle hecho tanto daño... Pero tú ni aún así sientes algo de remordimiento por haber manipulado también!... Yo estoy enamorado de mi hermano! Y lo amaré hasta el último momento de mi vida!!- Anthony primera vez estaba hablando de corazón Aunque En aquellos momentos mostraba una expresión bastante furiosa.
- Ya basta profesor, deje de compararnos con usted- dijo Edward irritado.

James un poco encorvado por el repentino golpe en el rostro simplemente atino a soltar una risa nerviosa y burlona, limpiándose con la manga de su saco el rastro de sangre que escurría de su nariz y parte de su labio. 
- Qué no somos iguales? Tú también vas a fingir tu santidad ante nosotros cuando fuiste tú quien junto con Claude se encargaron de hundir Anthony para poder apropiarte del amante de tu mejor amigo? Crees que no estaba al tanto de que coopera vas con Claude? Crees que no sabía que tú también tenías interés en el chico? Yo te vi desde la ventana cuando jugueteabas con él mientras te regalaba un jugo... Yo miré con mis propios ojos todas las expresiones que ponías cada vez que ustedes dos estaban juntos... Pero eres tan cobarde qué atacaste por la espalda, incluso Anthony es mejor que tú al menos él agrede de frente- James dijo aquellas palabras con una seguridad aunque le dolía hablar por el ardor en su labio partido. El sabor de óxido por la sangre que se mezclaba entre su lengua le hizo escupir hacia el suelo saliva roja.

- Todo lo que hice fue por amor... Ustedes dos lo único que hacían era utilizarlo y acosarlo por todos lados, yo le ofrecí libertad... Quería que Day se alejara de todo lo que le hacía daño, que se alejara incluso de esa mujer qué lo utilizaba Aunque a escondidas se revolcaba contigo Snow- Edward subió su voz intentando desesperadamente de justificar sus acciones. 


Todo había sido por amor, por amor.


- Tú también sabías ya de mi madre?! Habló el menor poniéndose de nueva cuenta furioso.
-Jajaja!! Y dices que quería salvarlo? Exactamente para qué?! Todos ustedes son iguales a mí- Rió sonoramente dejando escapar carcajadas tétricas James.
-Day yo....- Edward entró en pánico dándose cuenta que de nueva vez había sido imprudente e impulsivo.
- Pero qué demonios está pasando con todos ustedes?! No entiendo cómo es que funcionan sus cabezas!! Me han mentido, me han utilizado, a ninguno de ustedes le importó Yo realmente, Son unos malditos egoístas de mierda!! Los odio a todos!! Todos ustedes son iguales!!- Gritó descontroladamente el menor quebrándose en mil pedazos, ya no podía soportar su propia realidad, no podía manejar más tanta amarga información.


Todo había sido por amor.
Todo había sido por amor.
Todo había sido por amor.
Todo había sido por amor.



-Day espera... espera- Edward trato de calmar la situación acercándose con precaución al chico.
Una estridente bofetada impacto contra el rostro adolescente de ojos cafés haciendo que se tambaleara hacia atrás volteando el rostro entero. Su labio se partió y la sangre comenzó a brotar, sus ojos se llenaron de lágrimas más allá del dolor en su cara su corazón era el que realmente había sido lastimado.
- De ti no quiero nada! Todo me lo ocultaste!- gritó hacia Edward.
- Tú abusaste de mí y me traicionaste con todas las mujeres que te encontraste en tu camino... Tu amor es una maldita mentira!- Dijo Day a su hermano soltando una bofetada en su ya lastimado rostro. Anthony se fue para atrás cayendo sobre una de sus rodillas sin decir ni una sola palabra al estar consciente de que se lo merecía.

-Y tú... Tú eres la peor de todos... Eras mi madre tu deber era protegerme, me utilizaste y abusaste del amor que sentía por ti para mantener en pie un matrimonio en el que no querías estar... Dejaste que dos hombres abusaran de mí... Me abandonaste... Ignoraste mi dolor cubriendole los oídos para oír mis gritos.... Todo para poder vivir la vida que tanto deseabas... Me pusiste tu voluntad como una cadena al cuello... De ti no quiero nada más, ya no eres mi madre- Dijo Day bañado en su propio llanto al mirar a la rubia mujer inmóvil sobre el frío suelo, asqueado y a nada de tener un colapso nervioso.
-Day...amor... Yo puedo protegerte- hablo repentinamente profesor en un intento por ganarse de nuevo la confianza del chico. Aunque nada de esto le sirvió pues una patada del niño en sus partes nobles se impacto haciendo que se doblara del dolor. 


Todo había sido por amor.
Todo había sido por amor.
Todo había sido por amor.


- Maldito Sea el momento en el que le conocí, sólo me causa asco Profesor, no quiero que se me vuelva a acercar maldito viejo pervertido...- Soltó con desdén gimoteando entre sus propias lágrimas. 
Subió nuevamente en las escaleras abandonandolos a todos ellos en la sala, nadie de los empleados se atrevió a meterse y simple y sencillamente se mantuvieron en silencio camuflandose entre los muebles pues este problema era algo que se sobrepasaba de cualquier mano. Day llegó a su habitación y empezó a empacar todo lo que tenía a su disposición, ya no quería estar un segundo más ahí, ya no podía soportar tanta mentira. 

Todo le daba asco.
Todo había sido por amor.
Notas finales:

No olviden comentar TuT 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).