Cinco minutos después, ambas movilidades estacionaron frente a la casa de los Roger. El primero en bajar fue Bucky que camino lo más deprisa que pudo hasta su vieja habitación sin volcar a mirar a nadie de los que le hablo.
- Bucky, abre por favor – pedía golpeando suavemente la puerta
- hijo, abre – decía Joseph
- mi niño, hablemos – decía Sarah – soy mamá
- ¿Qué paso? – pregunto Tony
- amor, solo abre – dijo Sam – estaremos bien. quienes te amamos y a quienes les importas estamos aquí. tu familia está aquí. déjanos entrar
- hermano, ábreme – pidió Steve
- mi ángel, abre – decía Sarah conteniendo sus lagrimas
- Bucky escu…
- bajare en cinco minuto – dijo este sin abrir la puerta y con una voz totalmente neutra – no se preocupen
- hijo… – sollozo
- por favor mamá. solo cinco minutos
- vamos – dijo Joseph
- te amo Bucky – dijo Sam – te amo más que a mi propia vida
- ven Sam – dijo Joseph – démosle su espacio
Bucky miro a su alrededor. Sus viejos poster de los Backstreet Boys y Nsync, sobre la cabecera de su cama. Su viejo velador con su la lámpara sobre él. El escritorio y su vieja computadora. La que Steve le pidió a Tony que arme para regalársela en su cumpleaños 17, y en la que redacto su primer artículo para el diario de la escuela. Al lado la foto de Joseph y Sarah abrazados. La tomo mientras se sentaba en el suelo entre la cama y el buró, sintiendo como una lagrima rodaba por su mejilla
“¿quién querría un… “fenómeno” por hijo?” había dicho Winnifred con el mayor de los desprecios
***FLASHBACK***
Era verano. La temporada no había terminado y en la calle todos solamente hablaban del próximo partido de los Yankees, o al menos eso escuchaba entre los doctores y enfermeros. Se movió en la cama y le dolió su hombro izquierdo. Llevaba un mes allí y sus padres no habían ido a visitarlo
Golpearon la puerta y se sentó lo mejor que pudo en la cama. La puerta se abrió y una pareja ingreso.
- papá, viniste
- ¡eres un imbécil! – siseo el alfa – ahora ningún alfa pudiente te podría mirar
- no fue mi culpa – dijo asustado – Zemo me empujo. yo…
- ¡tú ya no me sirves! – dijo su padre – no te quiero en mi casa
- ¿Qué? – pregunto sorprendido – pero… – y miro a su madre pero ella permaneció imperturbable – ¿Dónde voy a vivir?
- en la calle supongo – dijo George – ese ya no es nuestro problema
- ¡Mamá! – suplico Bucky
- yo ya no tengo hijo – dijo ella
- ¿y yo? – sollozó Bucky
- vámonos – dijo George – y ya sabes. no nos vuelvas a buscar. tú no existes para nosotros – y sin más salieron
***FIN DEL FLASHBACK***
Se limpió sus lágrimas y sonrió acariciando la fotografía de los Roger. Nunca olvidaría ese día. Se suponía que sería el más triste de su vida, pero…
***FLASHBACK***
Salió del baño e iba meterse en la cama. Pero era incomodo con un solo brazo. Golpearon suavemente la puerta ¿serían sus padres? sin embargo cualquier ilusión murió cuando una cabeza rubia se asomo
- ¿Puedo pasar? – dijo Steve
- Steve – dijo con tristeza
- ¿cómo estás? – pregunto el rubio
- yo…
- supe… lo de…
- ellos vendrán – dijo Bucky – solo…
- mis papás también vinieron – dijo Steve entrando
- hola – dijo la omega rubia entrando con una gran sonrisa
- buen día señora Roger – dijo el adolecente – señor…
- nos enteramos de los problemas que por ahora estas teniendo – dijo Sarah y Bucky miro a Steve que bajo el rostro – estuvimos hablando de eso y… hay una habitación en nuestra casa para ti, si lo deseas
- yo… no tengo… como... pagarle… – dijo el omega – ni siquiera sé cómo pagare…
- no te preocupes por absolutamente nada ¿sí? – dijo Sarah limpiándole el rostro mientras liberaba algunas feromonas – mientras necesites unos padres, nosotros estaremos ahí. te apoyaremos. te ayudaremos a ponerte de pie y seguir adelante
- solo tenemos una condición – dijo el alfa mayor y Bucky los miro asustado –. en realidad un par de condiciones. iras a un buen psicólogo. el doctor ya nos recomendó uno e hicimos una cita para ti. harás todo lo que diga. volverás a la escuela y estudiaras duro
- no tengo como pagar eso – sollozo Bucky
- si tienes – dijo Sarah y el joven la miro asustado – terminaras la escuela y te postularas a una buena universidad. harás una carrera, la que tú quieras. no te impondremos ninguna, excepto esforzarte, quizás un poquito, solo un poquito más que todos los demás, y ser el mejor. el costo lo cubriremos nosotros. y como última condición, y más importante, te esforzaras por ser feliz. ¿si? ¿te parece un buen trato?
- a partir de este momento – dijo Joseph – tú eres nuestro hijo, y como tal, te cuidaremos y te ameremos
- ¿aunque sea omega y sea un fenómeno? – dijo Bucky llorando
- ¿Sabes que es lo que necesita este lindo omega? – pregunto el alfa – que su padre lo abrase – y lo envolvió entre los suyo mientras el chico se abrazaba a él – y le diga bienvenido a casa mi niño – y le beso el cabello escuchando llorar abiertamente al joven – llora. déjalo salir
- gracias. gracias. gracias. gracias.
- ya preparemos tu habitación – dijo Sarah abrazándolo – por ahora solo tiene lo básico, pero en cuanto te sientas mejor iremos por todos lo que necesitas. ya verás cómo nos divertiremos. tú y yo comprando y este par cargando todo
- no te preocupes por la escuela – dijo Steve – nadie va molestar a mi hermano – y Bucky rio en medio de su llanto
***FIN DEL FLASHBACK***
Bucky no pudo evitar sonreír recordando cómo había ha sido esa salida familiar. La primera de muchas que habían tenido. Sarah lo había prácticamente obligado a saltar sobre unos veinte colchones en diferentes tiendas antes de decidir que el tercero era el ideal. Mientras su hermano y su padre cargaban bolsas y bolsas de ropa y accesorios para omegas
Definitivamente su familia era lo mejor que le había pasado en la vida. Y no por las cosas materiales que le habían dado, sino porque lo hacían sentir amado y protegido realmente
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Sarah lloraba en silencio sentada en la sala. Le preocupaba que Bucky hiciera una tontería. Después de todo un rechazo como el que su hijo acababa de sufrir no era fácil de superar. Los omegas aun marcados podían llegar hasta el suicidio si se sentían solos, y conocía lo suficiente a su hijo como para saber cómo se sentía exactamente en ese momento. No lo había llevado en su vientre pero era suyo, y eso era algo que ni Dios le podría discutir
Escuchó que la hermana de Sam le decía algo en voz baja pero no tenía cabeza para prestar atención, pero era obvio que el moreno no se quería mover de ahí sin ver a su prometido. Tony se había encargado de distraer a los niños y estaba en el patio de atrás. Steve preparaba un té para todos. Lo necesitaban. Mientras Joseph estaba sentado en su sofá favorito con la vista perdida. Se sentía impotente por no haber podido evitarle ese dolor a su hijo. Porque Bucky era su hijo y nadie tenía derecho a ponerlo en duda. Cuando una voz calmada lo saco de su letargo
- ¡Cuánto silencio!
- ¡Bucky! – dijo Sarah corriendo a abrazarlo
- también me encanta cuando me abrazas mamá, pero me falta el aire – dijo el omega medio ahogado
- ¡mi bebé! – dijo soltándolo un poco – tú no estás solo. yo soy tu madre y no voy a permitir que nadie te lastime
- eso ya lo sé – dijo Bucky sonriendo
- ¿estás bien? – dijo Sam
- dime lo que necesitas – dijo su padre – lo que sea
- necesito que se calmen y se sienten – dijo Bucky sonriendo, se sentía tan bien sentirse así de amado – debemos hablar, por favor
- mi amor… – dijo Sam
- vamos, es un buen alfa y siéntate – dijo Bucky empujándolo suavemente – vamos, vamos. ya sabes las reglas – y todos rieron sentándose también – ¿ya vieron que obediente es mi súper alfa? – todos se sentaron y él se paró en frente
- tio Bucky – dijeron los niños entrando a la sala y corriendo a abrazarlo
- mis niños lindos – dijo besándoles el cabello
- primero que nada. gracias, a todos. hoy hice algo que hace tiempo necesitaba. me enfrente a mi mayor miedo, me enfrente a mí mismo y… – respiro hondo –. Sam, verte defenderme hoy como lo hiciste, fue… me sentí seguro. en casa. no pensé que jamás nadie, a parte de mi papá y mi hermano, me hiciera sentir eso. ni tampoco me imagine que pudiese amar a alguien y sentirme correspondido como… contigo
- pero… – dijo Sam nervioso
- no puedo casarme contigo – dijo Bucky quitándose el anillo de compromiso y extendiéndolo hacia él
- Bucky – susurro Sarah Roger con un sollozo mientras se cubría la boca con la mano.