PERDÓNAME… por Jeka

Eran dos horas de viaje. La villa estaba cerca de una que laguna (A: desconozco si  haya lagunas en Japón pero la idea se me ocurrió cuando fui con mi familia a nadar a una que esta cerca de donde vivo n.n).

El viaje iba tranquilo para los de Bad Luck. Fujisaki iba platicando amenamente con el manager y el productor sobre los proyectos del grupo. Mientras que Hiro y Shuichi jugaban tranquilamente.

Pero para un rubio ojidorado el viaje estaba siendo un verdadero calvario. Ya no soportaba a Touma. Siempre con su eterna sonrisa y preguntándole mil y un cosas. Solo respondía con movimientos de cabeza y monosílabos. Después de una hora prefirió hacerse el dormido solo así calló al hostigoso de su cuñado.

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Al llegar a la villa el primero en salir de la camioneta fue Shuichi que salio corriendo literalmente antes que algún otro se moviera.

• - ¡¡¡SUGOI!!!- gritó el pelirrosa. Mientras que sus ojitos brillaban al ver el lugar.

Era enorme parecía una elegante casa en lugar de una villa. Al costado de la casa se encontraba una hermosa laguna cristalina. Quedo fascinado por la hermosura del lugar. Un lugar lejos del ruido de la cuidad. Donde se podía estar en contacto con la naturaleza en paz y armonía.

• - Shu - dijo Hiro- ten cuidado de no caer a la laguna. Ya sabes que no se te da muy bien la natación - mientras que veía como su amigo se acercaba a la laguna.

• - mira Hiro - gritó el pequeño al llegar a la orilla. En el agua había pequeños peces de colores. Eran realmente bonitos. Definitivamente era un lugar para la relajación.

Su amigo camino hasta llegar a su lado. También le llamaron la atención los peces eran llamativos. Ahora que lo pensaba no había visto tan animado a su amigo desde hace mucho tiempo. Mejor dicho desde que dejó a el escritor. En esa tarde triste llego a su casa hecho un mar de lágrimas.

Flash back...

Era una tarde algo nublada. Últimamente Tokio estaba con un clima algo loco. Lo bueno es que ya casi acababan con los compromisos que tenían pendientes y les iban a dar dos semanas de vacaciones antes de volver a grabar el siguiente disco.

Tenía pensado viajar a Kyoto para estar con su novia. Tenía mucho que no la veía y ciertamente la extrañaba.

Aunque últimamente le extrañaba su amigo. Andaba muy extraño. Estaba triste pero no como siempre se veía. Mmm... como decirlo ¿derrotado? ¿Sin ganas de luchar? Esa actitud era muy extraña en Shuichi hasta cierto punto lo asustaba. El que era toda una fuente de energía inagotable, que transmitía su felicidad a todos. Verlo así deprimía a propios y a extraños. Tendría que sacarle lo que le molestaba. Aunque no dudaba que fuera algo relacionado con Yuki Eiri.

Se acaba de tumbar en su cama cuando el sonido del timbre lo saco de sus pensamiento. Maldijo por lo bajo al que estuviera tocando. ¿Que no sabía que estaba cansado? Mierda.

• - ya voy, ya voy- gritó el pelirrojo mientras tocaban insistentemente el maldito timbre.

Lo que vio no le gusto nada. Ahí estaba parado en frente suyo Shuichi llorando amargamente. Pero lo que no le cuadraba era que llevara todas sus cosas.

• - ¿que demonios sucede, Shu?- preguntó- ¿Por qué traes todo eso?

• - Yo... bueno... buaaaaa Hiroo- gritó el pequeño aventándose a sus brazos.

• - ¿Qué pasa?- definitivamente le estaba asustando su amigo.

• - Hiro, yo... yo... buaaaaa- siguió llorando. Por lo que veía Nakano primero tendría que tranquilizarlo para que pudiera contarle.

• - Ven, vamos entra- le dijo cariñosamente mientras lo ayudaba a incorporarse y metiendo sus cosas al departamento.

Le preparo un té mientras lo consolaba dándole pequeñas palmaditas en la espalda. En 15 minutos el chico ya había dejado de llorar y se encontraba sollozando.

• - y bien... ¿me puedes contar lo que te sucede?- dijo Hiro

• - ujumn...- asintió el pelirrosa- es que...es que...- mientras le empezaban a salir pequeñas lagrimas de sus ojos- es que necesito un lugar donde vivir- le susurró

• - ¿nani? ¿y ahora por que? ¿acaso Yuki-san te volvió a correr de su casa?

• - No...bueno en cierta forma si, no se si me entiendas- lo miró para ver la expresión de sus amigo.

• - No te entiendo- dijo finalmente

• - Mmm... como te explico- dijo mirando fijamente a su amigo. ¿Como se lo podría explicar?.

• - ¿me vas a decir?- pregunto con algo de fastidio él pelirrojo.

• - Mira... es que ya me canse de su frialdad y decidí salirme de ese lugar que me hace tanto mal. Decidí que merezco ser feliz y no imaginarme que lo soy por que el que sale perdiendo soy yo. Que debo pensar más en mí que en él. Que se quede ahí yo tengo que salir adelante aunque me duela en lo mas profundo de mi alma dejar a Yuki pero necesito también ser feliz.- dijo con un semblante serio que sorprendió al mismo Hiro. Ahora su amigo se veía tan decidido que no le quedaba más que apoyarlo.

• - Entiendo- contestó el chico- te puedes quedar conmigo todo el tiempo necesario- dijo sonriendo.

• - Gracias Hiro, no se que haría sin ti.

• - No harías nada- dijo burlonamente su amigo.

• - Jejeje gracias- dijo mientras se acercaba a su amigo y lo abrazaba.

Esa noche se sintió mas unido a su amigo. Más que nunca Shuichi lo necesitaba para superar su separación.

Fin del flash back...

Un grito lo saco de su ensimismamiento. Era K que los llamaba para entrar.

Entraron al lujoso lugar. Si era hermoso por fuera lo era más por dentro. El lobby estaba pintado de color blanco con terminados en madera. El techo era de un color crema. En verdad lugar hermoso sin duda alguna debía ser uno de los mejores de Japón.

Mientras se entraban vio como llegaba un auto deportivo a la villa. ¿No se suponía que solo iban a estar ellos ahí? Se acerco a su manager que estaba revisando las habitaciones.

-    ¿Mr.K, no solo nosotros íbamos a estar aquí?

-    yes - respondió el americano- ¿Por qué lo preguntas?

-    es que acaba de llegar un automóvil aquí-

-    ya veo, deja verifico- dijo saliendo del lobby y dirigiéndose a estacionamiento.

En quince minutos volvía el manager con Seguchi a su lado.

• - bueno- dijo el rubio americano- el jefe de N-G quiere aprovechar también esta ocasión para relajarse- anuncio con una sonrisa. Todos se quedaron con cara de ¿y?

• - bueno -dijo Seguchi con su eterna sonrisa- es que he estado muy estresado y me pareció buena idea venir igual con ustedes. ¡Ah! Pero también traje un invitado. Pase joven.

La persona que entró era un joven de 24 años, rubio y alto. Con un porte elegante y hasta cierto punto gatuno. Llevaba puesto un traje elegante color beige y unos lentes oscuros.

Hiro no podía creer lo que estaba pasando. Ahí estaba Yuki Eiri con su típica altanería. Voltio instintivamente a ver a su amigo pero este se encontraba con la mirada perdida. Viendo hacia la nada. Eso no le gusto nadita.

• - bueno - dijo Hiro algo nervioso- nos da gusto que haya venido Seguchi-san pero creo que yo y Shuichi nos retiramos- termino de decir y jalando a su amigo- ¿Mr.K, cuales son nuestras habitaciones?

• - Son las primeras dos - dijo algo sorprendido el americano.

• - Gracias. Con su permiso nos retiramos- mientras hacia una pequeña reverencia y jalaba a su amigo fuera del lobby.

Esa actitud dejo un silencio incomodo en todos los presentes. Todos estaban sorprendidos por la reacción de Nakano y de Shindou.

• - Entonces - dijo Seguchi - nos veremos mas tarde

• - Si con su permiso nos retiramos. Dijeron Fujisaki y Sakano. Saliendo igual del lobby.

• - Yo igual me voy, que disfruten de su estancia - le dijo el americano saliendo igual que los otros.

Seguchi miró a Eiri que estaba viendo hacia la entrada. ¡Aaay! Iba a ser una tarea titánica el que se reconciliaran. Bueno todo sea por Eiri.

Yuki había visto la expresión de su ex amante. Vio como abrió enormemente sus ojos al verlo entrar. De ahí desvió su mirada y agacho un poco la cabeza. De seguro no se esperaba que llegara con Seguchi.

• - joven Eiri- dijo Seguchi- su habitación esta alado de la de Shuichi. Es un favor que le pedí a Mr.K así que haga lo posible por hablar con él. ¿de acuerdo?

• - Si. De acuerdo. Gracias- ahora tenía que hacer que Shuichi le escuchara. Aunque conociéndolo tal vez se negara. Ya pensaría un plan.

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Hiro metió a su amigo a la habitación. Shuichi seguía perdido en sus pensamientos.

• - Shu - le llamó su amigo- ¿te encuentras bien?- tenia miedo de todo lo que habían logrado superar en estos seis meses se vinieran a bajo por la presencia de Yuki. Sabía bien que su amigo aun sentía algo por él.

• - si, Hiro - mintió Shuichi. Él sabía bien que no era cierto. Que al verlo se sorprendió tanto que no había podido dejar de verlo en el instante que entraba. No podía dejar de preguntarse por que había venido. Tenía tantas ganas de correr hacia él y decirle que lo había extrañado horrores. Que aun seguía pensando en él y que cada noche tardaba en conciliar el sueño preguntándose por que él no podía corresponder sus sentimientos. Que extrañaba sentir su calor al dormir. Que aun lo amaba igual que el primer instante que lo conoció. Que lo iba amar por siempre. - claro. ¿por que debería sentirme mal?- preguntó sonriendo.

• - no se, tal vez por que Yuki esta aquí mismo y tal vez te lo topes a cada instante.

• - No Hiro- dijo mientras meneaba su cabeza negativamente- que no ya te había dicho que yo no siento nada por él- le volvió a mentir. Ahora le remordía la conciencia. Sabía que a su amigo no debía mentirle.

• - ¿Seguro?-insistió el pelirrojo- Shuichi sabes que a mi no me engañas. Se que aun lo quieres.

• - Bueno... -tartamudeo su amigo. Ahora que le decía. Sabía que él no podía engañar. Rayos.

• - ¡Ay! Shu. Solo te digo que resistas y si él te trata de hablar ignóralo. Y aléjate de él. Ese tipo te hizo mucho daño y no quiero que vuelvas a sufrir. Además te acusaré con Sakuma-san que le querías engañar- mientras le picaba con el codo las costillas- crees que no me he dado cuenta que andas haciendo con él.

• - Hirooo...- dijo sonrojado Shu. Recordó aquel día que su amigo entró al camerino y lo vio besándose con Sakuma. Le dio tanta pena que salio corriendo atrás de él para explicarle. Cosa que Hiro le dio tanta risa que casi no pudo explicarle nada. Solo le dijo que estaba bien lo que hacia que debía olvidar y ser feliz.

Ahora los dos amigos se despidieron y Shuichi salio hacia su habitación. Al abrir su puerta sintió una mirada en su espalda.

Ahí estaba Yuki mirándolo fijamente.

• - ho... hola - le dijo nerviosamente Shu- espero que disfrute mucho su estancia aquí Yuki-san.

• - ¿Desde cuando me llamas Yuki-san?- pregunto el rubio mientras se acercaba lentamente hacia él. Se detuvo a unos cuantos pasos. Podía ver como Shuichi se ponía nervioso con su cercanía.

• - Desde que no tengo nada contigo - le dijo desafiante- con su permiso me retiro- hizo el amago de abrir la puerta pero sintió una mano sujetarlo fuertemente.

• - No he te he dicho que te puedes ir- le dijo en un susurro al oído.

• - No te me acerques. Aléjate- dijo con la voz temblorosa. Estar tan cerca de él le perturbaba. Lo hacia estar confundido.- sino te alejas juro que gritó- dijo amenazantemente el pequeño.

Yuki se sorprendió con esa actitud. Desde cuando Shuichi era así de desafiante, había cambiado. Y mucho.

• - Hazlo - sugirió Yuki sobre sus labios. Casi podía saborear sus dulces labios. Tenia tanto tiempo sin probarlos que no resistió mas y lo besó. Shuichi se estaba negando. Sentía como sus manos trataban de alejarlo pero lo sujetó con fuerza por la cintura. Sintió lentamente como el pequeño dejaba de pelear y se dejaba llevar.

Shuichi no quería volver a besarlo. Trato de alejarlo de él pero mas eran sus ganas de estar así con él que lentamente se dejo llevar por el sentimiento. Quería estar eternamente así con él. Sabía que cuando terminaran el beso esa hermosa atmósfera que se había creado se rompería y volvería a quedar solo.

Terminaron el beso y los dos  jadeaban por la falta de aire.

• - te odio - le grito después de recobrar el aliento- no sabes cuanto te odio- le dijo mientras entraba a la habitación y la cerraba de un portazo.

Yuki se quedo viendo la puerta de la habitación. Vio como salio Hiroshi de la suya al escuchar el grito de su amigo. Rápidamente entró a su habitación antes que él pelirrojo le dijera algo.

Hiro salio al escuchar la voz de amigo gritar fuertemente un "te odio" rápidamente supo que se había encontrado con el escritor. Salio para ver que sucedía y dejarle unas cuantas cosas en claro al rubio. Al salir al pasillo solio vio al escritor frente a la puerta de Shu y sin mirarlo se metió a la habitación contigua.

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Ya era tarde casi nadie había salido a comer todos estaba en sus habitaciones. Shuichi estaba en la suya llorando por lo sucedido. Se odio por no poder rechazar el rubio y más por seguir perdidamente enamorado de él.

Hiro había tratado de hablar con Shuichi pero este no le dejo entrar. Solo le decía que estaba bien, que quería estar solo y que lo dejara un rato. Luego iba a hablar con él. Hiro se retiro de la puerta un poco triste pero era mejor que su amigo lo buscara cuando necesitara hablar. Ahora tenia que hablar con el escritor.

Yuki estaba igual encerrado en su habitación. Trataba de escribir algo para su novela pero no podía. No estaba concentrado. Solo pensaba en la forma de hablar con Shuichi y decirle lo que sentía por él aunque le costara la vida tendría que decírselo.

Escuchó como tocaban la puerta de la habitación. Dejo que siguieran tocando pero el llamado era insistente. Se levanto y maldijo. ¿Qué no podían dejarlo en paz ni un segundo? Aunque sospechaba quien era el que tocaba.

Hiro estaba tocando la puerta pero no abrían. Sabia muy bien que él escritor estaba ahí porque no había ido a almorzar con los demás. Siguió tocando hasta que escuchó como quitaban el seguro y abrían la puerta.

Yuki abrió lentamente la puerta. Le iba a decir a Seguchi que lo dejara en paz pero en lugar de ver a su risueño cuñado se encontró  a Hiro.

Miro fijamente al joven. No se esperaba que fuera a verlo. Bueno conociéndolo tenía que habérselo imaginado. Con lo sobreprotector que es con su amigo no le extrañaba.

-    ¿puedo hablar contigo?- preguntó el pelirrojo.

-    ¿que quieres?

• - necesito hablar seriamente contigo

• - ¿sobre qué?- preguntó el rubio entrando al cuarto. Aunque ya sabía la respuesta.

• - Sobre Shuichi. No quiero que te le vuelvas a acercar. Ya le hiciste suficiente daño

• - Solo eso me querías decir- interrogo el escritor con un dejo de fastidio.

• - Si- respondió lentamente- si le haces algo te juro que te arrepentirás.

• - Aja. Creo que ya conoces la salida. Así que ¡largo!- espetó el rubio.

El pelirrojo le lanzo una mirada de odio. Se dio media vuelta y salió de la habitación sin antes azotar la puerta.

Cielos. Ahora se le estaba haciendo más difícil hablar con el pequeño. Tendría que pensar un plan.

De repente sintió ganas de escribir. Tal vez si le escribía algo al pequeño este dejaría que hablara con él. Prendió la laptop y abrió un documento para escribir.

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Shuichi ya había ido al ver a su amigo. Solamente le dijo que se había topado con  el escritor y que le trato de hablar y él le grito. Aunque no era del cierto todo. Parecía que su amigo se había quedado conforme con lo dicho así que salieron a dar un paseo por la laguna.

Ya estaba oscureciendo. El cielo se estaba tornando a colores rojizos. En verdad era hermoso.

Se sentaron cerca de la laguna a contemplar el atardecer mientras Hiro se había acostado en el césped. Tenia tanto tiempo que no estaban así de tranquilos. "estaría perfecto si no estuviera Yuki aquí" pensó el pelirrojo. Suspiro y voltio a ver a su amigo. Este estaba observando el cielo. Se veía tan sereno que prefirió no interrumpirlo y observar el cielo igual que él.

• - sabes Hiro- habló de repente Shuichi- es tan bonito aquí que me gustaría estar por siempre en este lugar.

• - Si - contestó su amigo- es muy bonito.

• - Aaah- suspiro pesadamente- es que todo es tan tranquilo que no me quiero ir.

• - ¿aunque este él aquí?- preguntó su amigo.

• - Si - contestó con una pequeña sonrisa- aunque este aquí - dijo mientras alzaba la mirada hacia el cielo que se empezaba a tornar de color azul oscuro.

Había decidido en el tiempo que estuvo llorando en su cuarto que no se iba a dejar, que iba resistir la presencia de Yuki aunque se muriera por correr a sus brazos. No iba a doblegarse por un simple beso.

Se levanto con pasimornia mientras le decía a su amigo que entraran a cenar. Tenía hambre después de todo lo vivido.

Entraron a la casa y ya estaban sirviendo la cena ellos se quedaron a esperar que bajaran los demás para cenar. Todos bajaron hasta Yuki. Comieron tranquilamente aunque se notaba cierto aire de incomodidad. Él y Yuki intercambiaron pequeñas miradas fugaces.

Terminaron de cenar y cada quien se retiro a su habitación.

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Los rayos de alba comenzaban entrar por la ventana. Despertando a todos a su paso. Era una mañana hermosa.

Shuichi empezó a abrir sus ojos lentamente mientras enfocaba todo a su alrededor. Vio su maleta, el espejo, un buró, un conejo rosa, la puerta... Un momento... ¿Un conejo rosa? Abrió ampliamente los ojos al percatarse de la presencia de alguien en la habitación.

• - ¿Qué... que haces aquí?- pregunto exaltado el pequeño

• - Nada no da. Solo vine a visitarte es que Kumagoro te extraña- dijo suavemente mientras se aventaba sobre el chico- te extrañábamos. Así que venimos a visitar- mientras lo abrazaba fuertemente.

• - Ryu...ichi-san - dijo entrecortadamente le pequeño- me esta ahogando.

• - Gomen. Gomen- dijo infantilmente el mayor mientras lo soltaba- es que venimos a jugar contigo

• - Pero ¿Cómo es que llego hasta acá? O mejor dicho ¿Cómo es que supo donde íbamos a estar?

• - Fácil no da- dijo sonriendo- le dije a Noriko-chan que quería verte...

Flash back...

Estaba Noriko sentada en el estudio de su casa. Mientras observaba como su amigo dibujaba tranquilamente en el piso. ¡Ah! Quería pasar los tres días de descanso con su hija y esposo no cuidando al niñato que tenía como amigo.

• - Ryu-chan - pregunto la chica- ¿no deberías estar en tu casa?

• - Sip n.n- contesto alegremente el peliverde- pero estoy aburrido así que vine a visitarte.

• - Aja - suspiro la chica- ¿no tienes a otro lugar a donde ir? Al parque, al cine, que se yo... pero...- se callo cuando vio como su amigo se le empezaban a aguadar los ojos.

• - ¿Es que no me quieres?- pregunto el chico saliéndole lagrimitas por los ojos- ACASO YA NO ME QUIEREEEEES- grito estrepitosamente Ryuichi mientras le salían las lagrimas como cascaditas.- NORIKO-CHAN QUE MALA EREEEES.

• - Este... - tartamudeo la chica. Se estaba tapando los oídos. Sabía que nadie podía gritar más que Ryuichi. Si no quería quedar sorda tendría que callarlo- SI TE QUIERO- grito para que la escuchara.

• - En serio- dijo de golpe Ryuichi dejando de llorar al instante.

• - Si en serio u.uU - dijo la chica.

• - Que bueno na no da- contestó sonriente- Noriko-chan...- dijo tímidamente. Sabía que ella sabía a donde se habían llevado a Shu. Touma le habría dicho ya que confiaba en ella. Tenia que sacarle la información para poder ir con Shuichi. Empezó a acercársele lentamente mientras ponía carita de perrito regañado.- Noriko... - dijo melosamente mientras se empezaba a acurrucar como gatito por las piernas de la chica- ¿tu sabes a donde fueron todos los de Bad Luck?- preguntó inocentemente

• - No se- dijo secamente- pregúntale a Touma si quieres saber.- ahora entendía el porque de su visita. Tendría que mostrarse segura sino ese criajo le sacaría el lugar y de seguro haría que lo llevara.

• - Ya le pregunté na no da- dijo suavemente- pero no me quizó decir- mientras empezaba a restregarse de nuevo como gatito en sus piernas- te prometo que si me dices a donde fueron ya no te vuelvo a molestar

• - No. No se donde están- se hizo la indiferente alejándolo de ella

• - Ya veo - dijo mientras agachaba la cabeza y empezaban a salir lágrimas por sus ojos- ERES MALA. YO QUIERO IR CON SHUICHI, CON SHUICHI, CON SHUICHI, CON SHUICHI, CON SHUICHI, CON SHUICHI, CON SHUICHIIIIIIIII - dijo gritando a todo pulmón.

La chica instintivamente se llevo las manos a los oídos. Demonios. Ahora Ryuichi se iba a salir con la suya. Tendría que callarlo.

• - esta bien te diré- grito la joven para callarlo.

• - ¿En serio?- acallando su llanto al momento.

• - Si- dijo la chica resignada- están en una villa a dos horas de Tokio.

• - Sugoi - grito emocionado- Noriko-chan... ¿me vas a llevar, verdad?

• - ¿QUEEE?- grito la chica. Bueno ya se esperaba eso pero no dejaba de sorprenderle.

Que creía que iba a hacer un viaje de dos horas solo para que fuera a jugar con el niño ese. Que creía que era ¿su nana? ¿Su criada?- NO, es mi ultima respuesta...-sentencio la joven.

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A la mañana siguiente estaba despierta tenia que apurarse por que Ryuichi le hizo que le prometiera que pasaría por él a las seis de la mañana. Diantres ¿como es que se dejo convencer tan fácilmente? bueno después del espectáculo que le armo en su casa no le quedo otra alternativa. Llevaría a Ryuichi, lo botaría y regresaría a Tokio lo mas pronto posible para pasarla con su familia... todo sea por poder estar en paz esos dos días que le quedaban u.u lo que tenia que hacer por ello.

Fin del flash back...

• - así fue como vine aquí n.n- término de contar Ryuichi.

• - Ya... ya veo...- dijo Shu sonriendo forzadamente.

• - Entonces bajamos a comer. Es que me dijeron que te avisara para que bajaras no da

• - Cla... claro- tartamudeo. Se levanto mientras dejaba a Ryuichi en la cama. Se dirijo al baño, se lavo la cara y se cambio de ropa. Salio a buscar a su amigo.

• - ¿Nos vamos no da?- pregunto con los ojos brillosos- Kuma-chan tiene hambre.

• - Vamos.

Ambos salieron de la habitación. Se dirigieron al comedor mientras todos ya estaban ahí. Miraron sorprendidos al ver entrar a Shuichi junto con Ryuichi.

¿De donde rayos habría salido el cantante de Nittle Grasper?

- ¡¡¡hola no da!!- grito al ver a todos en silencio.- ¿Qué pasa?- pregunto inocentemente

Nadie contesto. Todo era un mar de confusión. Touma estaba perplejo de verlo, Yuki lo veía con una mirada asesina, Hiro, Fujisaki y Sakano lo observaban confundidos. Mientras Mr.K sonreía.

Yuki no podía creerlo lo que veía. Ahí estaba él idiota ese junto a su niño. ¿Desde cuando estaba se estupido ahí? O mejor dicho ¿Por qué estaba ahí?

• - ¿Qué haces aquí Ryuichi?- pregunto aun perplejo Seguchi- ¿Cómo supiste donde estábamos?.... Ah... ya se. ¿Como fue que conseguiste que Noriko te dijera?

-     fácil n.n -dijo sonriendo- solo le pregunte y me dijo.

-     no creo que te lo dijera tan fácilmente- inquirió el rubio.

• - bueno... no. pero lo logre y ya estoy aquí - dijo con un mirada seria- además no los molestare solo vine para estar con Shuichi- dijo mordazmente mientras abrazaba al chico y le dirigía una mirada desafiante al escritor.

Shuichi estaba apenado. No podía creer lo que estaba pasando. Todos lo veían  y después de la pequeña charla con Seguchi se dio cuenta que no era tan bien recibido el cantante. Se sonrojo hasta la orejas cuando Ryuichi lo abrazo. Aunque también sintió la persistente mirada de Yuki y noto la mirada asesina que le dirigía a Sakuma.

• - este... - intervino Hiro para sacar de ese momento tan vergonzoso a su amigo que lo voltio a ver suplicante - nos da gusto que haya venido Sakuma-san. Que bueno... Que bueno que haya venido- tartamudeo él pelirrojo.

• - Arigato!!!- grito Ryuichi rápidamente cambiando sus facciones a unas mas infantiles. Prometo no molestarles- dijo mientras jalaba a Shu de la mano para sentarse junto a él.

Todos quedaron en silencio mientras se sentía un ambiente pesado. Tan pesado que casi nadie comió.

Observaban como Ryuichi le daba de comer en la boca a Shuichi. Mientras este se sonrojaba.

Hiro estaba algo feliz. Le agradaba la idea de que el cantante estuviera aquí ya que así Yuki no se le podría acercar a su amigo.

Por su parte Yuki estaba furioso. Quería derramar sangre en ese instante. (A: muy celosito ¿no creen?) Ese baka le estaba provocando. Como le daba de comer a Shuichi, como lo limpiaba. Lo estaba matando. Además de las miradas burlonas que le dirigía el peliverde le estaban provocando. Respiro profundo mientras sacaba paciencia de quien sabe donde para no pararse y estrangular a cantantucho ese

Uno por uno se fueron retirando del comedor hasta que solo quedaban Yuki, Shuichi y Ryuichi.

Shuichi se sentía incomodo. Estaba enfrente de su ex amante y a lado de su pretendiente. ¿Cómo demonios llegó a esas circunstancias? Sentía las miradas que se dirigían Ryuichi y el escritor. Si pudieran matar por medio de ellas esos dos estarían muertos.

Lentamente Ryuichi se paro del comedor con la mirada fija en el rubio. Tomo de la  mano al pequeño.

• - vamos a jugar Shu-chan - dijo suavemente mientras comenzaba a jalarlo de la silla.

• - Cla... claro - dijo el pequeño- ¿Dónde vamos a jugar?

• - En tu habitación no da- dijo mientras fijaba su mirada en el pelirrosa.

No le dio tiempo de contestar por que el mayor lo jalo con fuerza para salir corriendo del comedor hacia la habitación.

Yuki estaba que echaba humo por la cabeza.

• - arrggg...- soltó con furia. Mientras se levantaba y se dirigía a su habitación.