Capítulo 18° "Pareja de Voyeristas, Infiel"
Sai se encontraba trabajando como un flamante pintor; y había tenido bastante éxito, no era común tener en Konoha a alguien capaz de retratar con facilidad, así que ese déficit de artistas, les había favorecido en cuanto a su economía.
En general, el nerviosismo del pelirrojo aumentaba cada vez que alguien tocaba la puerta de su casa, solicitando algún encargo para el moreno; en cierto punto, lo intranquilizaba todo eso; a veces tenía la sensación que le abriría la puerta a su tío o alguno de sus amigotes.
Gaara estaba recostado en la ventana que daba directo a la puerta principal, esperando ver la figura de Sai asomarse por ella; intentaba mantenerse lo más calmo posible, evitando así que su extraño peinado se desarmara. Daba igual como habían terminado así, de hecho, no podía precisar el cómo, pero cada vez que Sai salía a "trabajar" por ahí, el pelirrojo removía cada uno de sus baúles, buscando alguna prenda que el pelinegro no conociera. Había jurado hace algunos meses, no volver a ponerse un kimono nuevamente en su vida; pero el bastardo que tenía por pareja, le había pedido como fantasía tener relaciones sexuales usando kimono hace un poco más de dos meses y medio; a fin de cuentas, le habían encontrado un gustillo a hacerlo así.
En cuanto vio a su moreno caminar relajadamente hacia la casa; dio un brinco, corroborando en un espejo que todo estuviera en su lugar; la trenza que una vez estuvo siendo una parte indiscutible de él, ahora volvía a serlo. Cuando amaba el olor de las pinturas impregnados en la ropa de Sai cuando iba a trabajar.
La puerta se abrió, y por ahí apareció un moreno, dejando su gran caja con utensilios cercana a esta. Llamó a su joyita pelirroja, pero no obtuvo una respuesta, hasta que sintió una brazos ceñirse a su cuerpo desde atrás.
-Hola ciruelita-se volteo despacio, manteniendo el agarre que tenía Gaara en su cuello; poso sus manos en la cintura, ahora más marcada por la ropa de su pelirrojo, al tiempo que le daba su beso de bienvenida.
-Has tardado mucho.
-Sí, pero ha valido la pena-le dio una ojeada de arriba abajo al pelirrojo frente a él-estás hermoso, ese no lo había visto antes.
-Lo tenía guardado...--el más pequeño se paró de puntillas, teniendo como apoyo el cuello del moreno, para darle un casto beso, solo un roce.
-Estás bastante cohibido hoy.
-¿Eso crees?
-Si, y muy bonito ¿quiere ir a dar un paseo?
-claro, sabes que me gusta caminar por los jardines.
-Yo me refería a la plaza...
-¿Acaso estas demente?, no voy a salir así a la calle, no me gusta que me vean así.
-Conmigo no tienes problemas
-Solo contigo.
Comenzaron a besarse, mientras intentaban dar bien los pasos para poder aproximarse al menos hasta una pared. ¿Cohibido?, eso era lo menos que el de ojos claros podía estar; tantos años solo, despreciado y reprimido, que en el preciso momento en que el moreno lo saco de su pequeño infierno, se aferró a él; y a pesar de mostrarse en un comienzo bastante reticente a mantener relaciones sexuales con Sai, se le había hecho costumbre esperar por el moreno vestido de chiquilla para poder imprimirle algo más de pasión y desespero; sobre todo en su acompañante, que a pesar de 10 semanas, aún no encontraba la forma de colar eficazmente sus manos en la ropa de su pareja. No era que fuesen dos conejos desesperados, pero amaban la vida en pareja.
-jeje todavía no aprendes.-a diferencia del pelirrojo que podía vestir o desvestir tanto a él mismo como a su pareja con los ojos cerrados, el moreno aun no tenía la práctica necesaria con las telas. Si bien, no era de los que manejaba a cabalidad la situación, podía juguetear con los hilos de la paciencia de Sai. Se tomo la libertad de empujar a su pareja hasta la pared, y hacerlo quedar sentado en esta en cosa de segundos.
-Eso ha dolido-no es que fuera muy agradable caer de lleno sobre el suelo, mientras intentas que un delicado pelirrojo no se golpee.
-con esto se va a pasar-un beso rudo y demandante fue dado por el pelirrojo, mientras corría la ropa, dejando salir el miembro de Sai, y bombeaba un poco para dejarlo a tono.
-Gaara... espera, tengo que prepar-
-Te necesito
-No quiero lastimarte
-No vas a hacerlo, ahora no quiero jugar Sai
-Espera unos segundos-los dedos del moreno quedaron a medio camino
-Estoy listo... te... te llevo esperando horas
Vi a Sai asentir, mientras los brazos de este se enredaban en su cintura para afirmarlo en todo momento. Se inclinó hasta posar su frente sobre la contraria, mientras se iba perfilando para autopenetrarse.
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-Naruto, ya te dijo una vez el pintorcillo, que si entrabas de improviso a su casa, tendrías problemas, ¿cuál es el afán de ir ahora?-no podía entender al dobe, simplemente no podía, mi copia ya lo había regañado una vez, bueno, en realidad más de una; y en el fondo no lo culpaba, a mi también se me saldría la iracunda bestia si alguien entrase al lugar donde intento tener algo de intimidad con el dobe. Un día de estos, íbamos a terminar pillándolos en el acto.
-No voy a molestarlo, voy a ofrecerle trabajo'ttebayo
-Podría ser mañana, así aprovecharíamos este rato entre nosotros, y no mirándole la cara de nada a la copia.
-Vamos teme, entre estar con ese montón de viejas amigas de mi abuela, y estar en casa con Sai, es mejor la última, así mañana tenemos el día para nosotros, deja de quejarte, pareces vieja cuarentona amargada'ttebayo
-maldito dobe
Quizás odiaría menos a la copia, o me gustaría más pisar su casa si esa casa no fuera el mismo lugar donde tenía mis citas a escondidas con el dobe!!; no es nada agradable cruzar la puerta y recordar las veces donde nos entreteníamos por horas enteras. El lugar me tentaba, tenía que admitirlo.
Como siempre, Naruto cruzó el jardín como si se tratara de su casa; y al ver la puerta entreabierta, entró sin problemas...
-El pintorcillo te va a retar en cuanto vea que no has to..ca.. do
Entre al recibidor, y quede helado.
La copia estaba en plena acción con una pelirroja. Y esa pelirroja no era Gaara.
Mire a Naruto, viendo como literalmente la boca se había desencajado, mirando el sube y baja de la tipa por Sai. No había que preguntar por donde subía o bajaba, estaba claro. Más si una infinidad de gemidos se escuchaba.
Demasiado excitante, no es que me gusten las chicas, pero al ver la expresión de Sai, te decía lo mucho que estaba gozando todo eso; y daba miedo ver alguna expresión en su rostro, cuando estabas acostumbrado a no ver nada.
Mi dobe negaba lentamente con la cabeza, debió de ser impactante para él ver al pintorucho montándosela con una tipa, cuando el pobre Gaara habla tan bien de él... si supiera, si ese pelirrojo supiera lo que hace Sai con una tipa en su casa cuando él no está, dejaría de ser tan pasivo con el bastardo!
Tiré del brazo del dobe para irnos, la cara de completo asco que puso mi rubio cuando vio a esos dos besarse, fue todo. Ahora entiendo la puta manía que tiene Itachi de espiarnos cuando íbamos a empezar con el dobe. Es demasiado incitante, tanto, que ya me esta afectando, y dudo que Naru llegue a su casa sin que yo haga de las mías con él tras un árbol...
Lo saque de la casa, aun mi dobe no daba crédito a lo que acababa de ver.
-Vámonos.
-Esta con una tipa, quizás con quien... como puede, Gaara lo ama, ¿Cómo puede hacerle esto?
-No es bueno meterse en las cosas de otras parejas, ellos van a arreglarlo después
-¿Después?, ¿Cuándo Sai la embarace y Gaara este destrozado?, ese infeliz me va a escuchar.
El dobe se soltó de mi agarré, y camino a paso rápido de vuelta a la casa... ¿Cuándo va a aprender?
Salí tras él, no quiero que el pintor de cuarta le haga algo por descubrir que tiene una amante.
-ERES UNA ZORRA!!-Creo que ya empezó; entré casi corriendo, para ver la cara estupefacta de Sai, mientras Naruto de un solo tirón ponía de pie a la susodicha para dejarla caer al piso, y aprovechando el impulso darle un buen golpe a Sai-¿QUÉ NO SABES QUE ESTE IMBÉCIL TIENE PAREJA?... Y TÚ BASTARDO, ¿CÓMO TE ATREVES A HACERLE ALGO ASÍ A GAARA?
-NARUTO SUÉLTALO!!...-me apoye en el marco de la puerta, para ver como el pintorcillo se arreglaba la ropa un poco y se reponía algo del golpe, antes de ir a quitarle al dobe la chica; mi pequeño si que era una fiera; no dejaba de zamarrearla y ya le había dado unas cuantas cachetadas. Al parecer la pelirroja todavía no reaccionaba bien, a penas si podía cubrir unos golpes del dobe, que no dejaba de gritarle-BASTARDO, AYÚDAME
-Se lo merece, y ojala después te agarre a ti-con esto, dudo que el pintorcillo me agrade.
-SAI
-NARUTO, DÉJALO...-Sai, como todo buen amante, se lanzó a defender a la putilla esa; pero cuando le puso las manos a mi dobe para forcejear con él, y así la soltara, paso a ser problema mío; nadie toca a mi dobe-LO ESTAS LASTIMANDO, DEJALO YA!!
-IMBECIL, EL ÚNICO QUE LASTIMA AQUÍ ERES TÚ... GAARA TE AMA, ¿CÓMO LE HACES ESTO?-el bastardo tomo a mi rubio por las muñecas, impidiendo que siguiera en lo suyo con la tipa.
-ESTO ES UN MAL ENTENDIDO!... DÉJALO!!
-ESO NO LO CREES NI TU, BASTARDO!! MIRA QUE TIRARTE A UNA PUTA EN LA CASA DONDE VIVES CON GAARA-Naru no dejaba de forcejear con Sai, que más preocupado por él, estaba ocupado de la mujerzuela en el suelo; no intentaba defenderse del dobe, solo soltarse...
-NARUTO CÁLMATE, SAI TIENE RAZÓN HAY UN ERROR-esa voz...
-EL ÚNICO ERROR AQUÍ ERES TU, MALDITA ZORRA
-NO VOY A DEJAR QUE LLAMES ASÍ A GAARA ¿ME ESCUCHASTE?
-Y TODAVÍA LO NOMBRAS IMBÉCIL-A diferencia de Sai que solo quería soltarse, mi dobe quería despedazarlo por haber engañado a Gaara; pero...
-NARUTO, SUÉLTALO!!...-sentí unas manos moverme rápidamente-Sasuke, has que suelte a Sai... por favor, esto es un error--¿Gaara?
-CLARO QUE NO, ESTO NO SE QUEDA ASÍ, VOY A DEFENDER A GAA-CHAN,!! Y TU NO ME TOQUES!!-me quede estático procesando, y antes de que Naru le diera a Sai el golpe de su vida, el o la pelirroja sujeto al dobe... no podía ser, eso no.
-NARUTO CALMATE-le hice el contrapeso al dobe para que soltara a Sai, que no tardo en ir a abrazar y ver el estado en que se encontraba el pelirrojo
-SUELTAME TU A MI TEME!!, ESTO NO TIENE PERDÓN
-ES UN ERROR
-COMO DICES ESO
-ES GAARA, LA PELIRROJA ES GAARA
-NO ME TOMES POR BAKA, GAARA NO TIENE EL PELO LARGO
-NARUTO MIRAME-lo tome con fuerza del rostro-créeme, es Gaara, esto es un error
-¿Cómo puedes defenderlos teme?-con un movimiento de cabeza, le insinué que mirar; Sai estaba de rodillas intentando contener a un Gaara, afirmado de su cosa, y buscando prácticamente unirse con Sai. Debo admitir que no había visto un arrullo más tierno, la forma en que se abrazaban lo decía todo, era imposible que fuera una prostituta, la tela de la ropa de Sai bajaba la intensidad de los sollozos e intentaba calmarlo hablándole al oído y dándole pequeñas caricias de consuelo.-¿Gaara?-al parecer el dobe ya se dio cuenta.
Besé la mejilla de Naru, que parecía realmente incrédulo de todo; se aproximo con cuidado, y en cuanto puso suavemente su mano en el hombro del pelirrojo, este lo rechazo con un manotazo.
-no me toques..
-yo.. lo siento... pensé que Sai.. no parecías tu.. pensé que..
-cállate.
-no quería hacerte daño Gaa-chan-a pesar del suave movimiento, las cosas no iban bien
-NO ME TOQUES!!
-Váyanse de aquí
-Sai... esto fue un error, yo no quería que
-salgan!!-Sai fulminó con la mirada a Naru
-NO!! No me voy a ir hasta que me escuchen ¿Qué querías que pensara si te veo con una pelirroja? Pensé que le eras infiel a Gaara-tomé al dobe del hombro, este no era el momento de explicaciones, los ánimos no estaban para eso.
-Vamos Naruto
-Pero teme..-negué, al tiempo en que arrastraba al dobe fuera.
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-Cálmate cielo...-todo había pasado rápido, de la nada sentí como me quitaban a Gaara de los brazos, y después todo esto...-por favor, cálmate..-lo arrullaba contra mi, quería que al menos me sintiera.
-Me dijo zorra...
-Se confundieron, pensaron que te era infiel
-me duele... él... no..-lo apreté más a mi cuerpo, acaricie con cuidado su espalda para reconfortarlo, y me puse de pie para alzarlo y llevarlo hasta la habitación... Ya sabía que esos imbéciles un día nos iban a pillar en el acto, pero nunca pensé que así.
Recosté a Gaara en el lecho; mientras empezaba a quitar una a una las trabas dejándolo libre de su larga trenza, que ahora estaba desarmada por todo el barullo; le quite despacio el kimono, para arroparlo entre las mantas. Besé su frente con cuidado, mi muñequita aun estaba conmocionado por todo. Sus temblorosos dedos, delinearon mi labio partido por el golpe del rubio.
-no me gusta verte así... cálmate mi amor... el chillón y el bastardo te deben querer demasiado para armar tanto escándalo pensando que estaba con otro... solo se confundieron-asintió, de seguro lo entendía, pero eso no era suficiente por el momento.
Me acomode boca arriba, para así atraer y recostar a Gaara en mi pecho; en este instante, sobraban las palabras, solo quería que supiera que estaba con él...
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-me siento mal teme-a pesar de que el bastardo me arrastraba, quería volver a la casa de Sai
-no es para menos, le has golpeado pensando que era una prostituta; además, le has gritado de todo en el intento por descuartizarlo
-tampoco impediste que lo hiciera!!
-soy menos impulsivo que tu, pero si Gaara no me habla, tampoco me habría dado cuenta..
-tengo que hablar con él
-mañana dobe
-no, ahora-me solté y empecé a correr hasta la casa; azoté la puerta cuando entré, y subí, buscando a la pareja en el cuarto principal.
Gaara descansaba sobre el pecho de Sai, mientras este lo abrazaba y susurraba cosas para él... que envidia..
Me acerque hasta ellos, tomando la mano de Gaara
-je..ahora entiendo porque me decían que tocara entes de entrar... siento haberlos interrumpido, y.. bueno, todo, me descontrole al pensar que engañabas a Gaara... pero parecías una chica, es decir.. fue como.. no.. yo.. argh!!-estaba hecho un lío, y ninguno de los dos me hablaba. Me sentí tan ignorado y que sobraba allí, que despacio me fui hasta la puerta...
-Naruto-sonreí, la suave voz de Gaara me había llamado-toca antes de entrar-a penas y me sonrió, antes de volver a apoyarse en su moreno
-claro que si'ttebayo
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La puerta se cerró, miré el rostro de Sai, mantenía sus ojos cerrados mientras me hablaba bajito y me acariciaba arrullándome... me sentí culpable al ver su labio; de no ser tan impulsivo, no habría pasado algo así... me apoye en él, para limpiar con mi lengua un poco la sangre seca; de inmediato mi pintor abrió sus ojos mirándome con esos penetrantes ojos negros.
-¿sabes algo Gaa-chan?, me alegra que a pesar de todo, estuvieras con ropa... no habría soportado que el bastardo te hubiese mirado
-a mi también en cierto punto; ire a buscar algo para bajar ese morete Sai
-no, prefiero que te quedes aquí...ya se me pasa con un besito tuyo
-Sai-baka-inflé mis mejillas, antes de inclinarme a besarlo con cuidado.
-te amo cielo... no te sería infiel-susurro sobre mis labios después de besarnos
-lo sé...-sabía que no lo haría
^^^^^^^^^^Sukiya, casa de Yashamaru y dos de los hermanos Sabaku ^^^^^^^^^^
Yashamaru empacaba bastante rápido, le había llegado una propuesta de inversiones, y no podía perder aquella oportunidad, no cuando el bastardo de Orochimaru le había ganado terreno con Kabuto, y tenía que recuperarlo a como diera lugar.
Apuraba a toda la servidumbre para partir cuanto antes; su familia se había caracterizado por ser parte del imperio del té, no iba a perder ese puesto.
-Tío, el coche estará listo para partir a primera hora de mañana-la rubia se sentía feliz de tener unos días para descansar del estrés que generaba el mayor.
-lo necesito para hoy, lo antes posible; tengo que viajar a Konoha con urgencia, el imperio del té no va a irse de nuestras manos Temari.
^^^^^^^^^^La villa del Sonido, Mansión de cierta Víbora ^^^^^^^^^^
Había recibido correo, avisándole de una importante inversión que podía concretar si se movía de forma rápida, tenía buenos contactos; y saber que su vieja amiga Tsunade poseía grandes plantaciones de té, le abría el apetito sobre esas tierras
-Arregla todo, mañana viajamos
-¿Donde mi señor?
-A Konoha, le haremos una visita de cortesía a Tsunade...