T�tulo: Afinidades Electivas
Personajes: Harry/Draco
Disclaimer: Los personajes pertenecen a J.K. Rowling, no percibo beneficio econ�mico por esto.
Cap�tulo: Amor C�mplice
Era maravilloso despertar y no tener que pensar que ese d�a comenzaba una nueva lucha por sobrevivir. Ahora estaban a salvo, protegidos de la maldad y locura de Stefan, estaba demasiado agradecido de la inmensa suerte que hab�an tenido y no volver�a a tentar al destino nunca m�s. No se mover�a de Hogwarts hasta no estar seguro de que Stefan y ese grupo de locos finalmente estaban en Azkaban. Por supuesto que esperaba que Randall no compartiera la misma suerte, de no ser por �l no estar�a ahora ah�, con el chico rubio dormido a su lado.
Ahora s�lo se quedar�a ah�, no dejar�a la protecci�n que le daba Hogwarts. No deseaba informarle a nadie de su regreso aunque sab�a que le deb�a una explicaci�n a la familia Weasley. Hab�a partido de la casa de ellos sin aviso previo, esperaba que lo comprendieran y perdonaran por excluirlos de su decisi�n de ir en busca de Draco, esperaba que ellos pese a todo pudieran comprender. Pero entre toda esa gente que ignorar�a que ellos se encontraban ah�, no estaba incluida Narcisa Malfoy, ella ten�a derecho a recuperar a su hijo, aunque ser�a triste para ella que Draco no la recordara.
Harry deseaba tanto volver a retomar su vida y todo aquello que hab�a perdido tras el secuestro de Draco. Se qued� mirando por un buen rato las facciones dulces y tranquilas que mostraba el chico mientras dorm�a. Con delicadeza apart� los mechones de pelo que ca�an sobre la frente, ahora que lo ten�a a su lado iba a esforzarse porque Draco pudiera recordar todo eso que Stefan hab�a borrado, iba a recurrir a los mejores Medimagos, no iba a rendirse, necesitaba que no quedara ni una huella del mal que hab�a causado ese hombre.
Pensando en Stefan, se pregunt� si Kingsley que ya sab�a la ubicaci�n exacta del escondrijo de Los Custodios, habr�a entregado la informaci�n al Ministerio. Esperaba que s�, mientras antes se encargaran de ese grupo de locos y que por fin la gente en el mundo m�gico pudiera vivir en paz otra vez.
Harry ten�a deseos de quedarse para siempre en aquella cama junto a Draco, pero estaba seguro de que en cualquier momento aparecer�a alg�n elfo con el desayuno, as� que decidi� levantarse. Sobre una silla encontr� ropa, al observarla con cierto detenimiento pudo comprobar que era su ropa, la que hab�a dejado en casa de los Weasley. Eso s�lo pod�a significar una cosa, ellos ya estaban enterados de su regreso. Con cierto nerviosismo pens� en las explicaciones que deb�a darles por haber dejado �La Madriguera� sin decirle a ninguno de ellos, esperaba que no estuvieran demasiado enojados.
Dirigi� su mirada hacia Draco que dorm�a, no quer�a despertarlo a�n, tom� la ropa de la silla y se encamin� hacia la puerta del ba�o, pero a medio camino escuch� la voz de Draco.
��A d�nde vas Harry?
El chico moreno se volte� sorprendido.
�Pens� que a�n dorm�as� no quise despertarte.
�Mal hecho� quiero que mi despertar sea contigo a mi lado siempre �dijo el chico con una adorable sonrisa.
Harry volvi� sobre sus pasos y se acerc� a la cama y se inclin� sobre el rubio.
�Te vez tan maravilloso dormido que no quise renunciar al placer de verte dormir.
�Lo primero que deseo ver al despertar es a ti� ver tus ojos mir�ndome como lo hacen ahora �dijo Draco mientras enlazaba el cuello de Harry.
�El escuchar que me dices cosas que ya me hab�as dicho antes, me hace tener muchas esperanzas en que recuperar�s por completo todos tus recuerdos.
�No recuerdo haber dicho esto antes, pero es lo que me nace, t� Harry haces que salgan las frases m�s ins�litas de mi boca, creo que soy muy cursi.
�No lo son� siempre las dec�as� siempre has sido especialista en decir cosas que hacen que mi alma se emocione.
�S� ya lo s� el diario tiene escrita cada una de esas cosas, la que siempre repet�a era esa de �te amo tanto Harry� eres mi vida�.
Harry se qued� mirando con cierta tristeza al rubio, deseaba con toda su alma que el chico volviera a decirle aquello siendo el de antes del secuestro.
�Draco� prom�teme algo.
�Lo que t� quieras Harry.
�Cuando vuelvan tus recuerdos lo primero que me dir�s ser� justamente esa frase que estaba escrita en el diario.
�Te lo juro Harry, ser� lo primero que oir�s de mis labios cuando ese d�a llegue.
Harry sonri�, esperaba que ese d�a no tardara demasiado.
Draco sali� de la cama por fin y dirigi� su vista hacia la puerta del ba�o y luego mir� a Harry otra vez. La invitaci�n estaba hecha.
Naturalmente que Harry no se hizo repetir y le tendi� la mano, ser�a maravilloso compartir la ba�era con Draco sin preocuparse de que alguien los descubriera.
Harry que era ya un experto en esos menesteres se encarg� de preparar todo y cuando estuvo a punto, se quit� la delgada t�nica y se meti� en el agua, Draco lo imit� apenas un instante despu�s. Por supuesto que disfrutar�an de ese ba�o como lo hab�an hecho antes, pero sabiendo ahora que ese momento no vendr�a nadie a interrumpirlo, si alguien lo hac�a no importaba porque ser�a alguien que no se opon�a al amor de ellos.
Draco se estremeci� cuando se acomod� sobre Harry, la erecci�n del moreno la sinti� endurecida bajo �l, rozando de forma tentadora sus nalgas. Gimi� intensamente, cosa que hizo que el entusiasmo de Harry se despertara con rapidez.
�Me vuelves loco Draco �susurr� Harry en el o�do del rubio.
El rostro de Draco fue cruzado por una sonrisa.
�Eso pretendo� enloquecerte para que me hagas el amor intensamente.
�Entonces no se diga m�s se�or� sus deseos son �rdenes para m�.
Harry acomod� su erecci�n entremedio de las nalgas delicadas del rubio, roz� la abertura con suaves toques, sab�a de antemano como responder�a el chico, aquella era una las cosas que lo enloquec�an. Y no hab�a cambiado, pues Draco gimi� esta vez m�s audiblemente. A continuaci�n masaje� tentativamente con su dedo, Draco se removi� deseando m�s contacto, Harry introdujo un dedo con suavidad y frot� lentamente, mientras el rubio recostaba la cabeza en el hueco de su cuello y lo besaba y gem�a con provocadores sonidos.
Sin embargo no permiti� que los besos lo distrajeran de su tarea y continu� masajeando, hasta que le fue posible introducir un segundo dedo en la cavidad. Draco mientras tanto decidi� encargarse de su propia erecci�n con bastante �mpetu, dejando escapar gemidos excitados que Harry no pudo ignorar, convencido de que el chico ya estaba preparado posesion� las manos en las caderas del rubio y comenz� a empujar lentamente hasta quedar completamente atrapado en la estrechez caliente, sintiendo como su propio pene palpitaba dentro de Draco exigiendo satisfacci�n.
����Harry�. Ya por favor� no puedo!!! �gimi� el rubio, movi�ndose sobre Harry, cosa que hizo al muchacho de ojos esmeraldas sentirse en la gloria.
�Oh Draco� eso se sinti� aahhh� por favor hazlo otra vez�
Draco naturalmente obedeci� y volvi� a removerse sobre Harry del mismo modo, arranc�ndole gemidos que a su vez lograron excitarlo mucho m�s a �l mismo. La sensaci�n de sentir a Harry dentro de �l en esa posici�n le resultaba maravillosa. Pronto Draco comenz� a sentir como Harry con movimientos de pelvis que no controlaba ya y sujetando sus caderas se hund�a m�s profundamente, y �l prestaba toda su colaboraci�n, pero no se sent�a del todo lleno, necesitaba m�s, mucho m�s.
Con un sorpresivo movimiento Harry sinti� su erecci�n, que m�s entusiasta que nunca, se apretaba en las estrechas y c�lidas paredes del rubio de pronto hab�a quedado expuesta y abandonada. Gimi� con frustraci�n y de inmediato abri� los ojos, pregunt�ndose que suced�a.
�Hmm� Draco�
�Sssshhhh� tranquilo amor� espera un segundo� s�lo uno�
Entonces Harry vio que Draco cambiaba de posici�n para sentarse a horcajadas sobre �l. Para enseguida acariciar con el pulgar su erecci�n punzante.
�Aaaaahhhhh� Draaa�co�
�S� amor� ya� ya estoy contigo �dijo Draco mientras iba lentamente empal�ndose sobre la erecci�n de Harry.
�Draco� aaahhh� Draco� hhhmmm�
�Lo s� amor� es maravilloso� aaahhh Harry� me llenas por completo �dijo Draco casi sin voz.
Para Harry era maravilloso comprobar que pese a que Draco no recordaba la relaci�n que hab�an tenido antes, en sus maneras no hab�a cambiado ni un �pice, su instinto le guiaba. Esa forma que ten�a el chico rubio de hacer el amor con �l era lo que m�s le fascinaba. Draco jam�s guardaba silencio, y eso le excitaba mucho, el chico rubio siempre hab�a tenido la costumbre de dejar escapar en medio del ardor del acto sexual frases er�ticas.
�Draco...
�S� Harry� soy yo� y soy tuyo� ooohhh Harry� me enloqueces� me siento tan bien teni�ndote dentro� sss����.
Harry sent�a que perd�a la cabeza escuchando aquellas frases. Mientras Draco sub�a y bajaba sobre �l cada vez con m�s velocidad, se incorpor� un poco y su brazo tom� la nuca del rubio y lo acerc� a su boca. Las lenguas de ambos se trabaron en una lucha feroz, que dur� todo lo que el aire guardado en sus pulmones les permiti�.
S�lo gemidos y jadeos llenaban el ba�o por momentos, la apremiante exigencia de la pasi�n durante un buen rato no les dej� articular palabras. Pero luego poco a poco el ritmo fue torn�ndose m�s pausado, cada embestida en ese contin�o dar y recibir, fue adquiriendo el comp�s de las olas que llegan a la playa lentamente para luego desertar con suavidad. De ese modo Draco, se hund�a suavemente en Harry, dejando escapar de sus labios cada vez un gemido entrecortado y dulce que llegaba a los o�dos del chico de ojos verdes como las notas del canto hipn�tico de las sirenas. Pero aquella serenidad no dur� mucho m�s, un instante despu�s sent�an que llegaban a la c�spide y fue necesario acelerar el ritmo una vez, tras unos segundos de fren�tico movimiento, finalmente Harry vac�o su esencia dentro de Draco y �ste entre sus propias manos.
Se mantuvieron unos segundos m�s unidos �ntimamente. Recuperando la calma. Draco se movi� liberando el miembro de Harry, lo observ� por un par de segundos con intensa satisfacci�n. A�n estaba algo hinchado y con un tono levemente rojo.
�Harry eres lo m�s delicioso que existe� tenerte dentro es como ir a la luna y volver �dijo Draco levantando la vista finalmente para mirar los ojos brillantes y llenos de pasi�n del chico moreno.
Harry sonri� con satisfacci�n.
�Pues yo siento igual, me llevas al infinito con tu pasi�n.
Draco sonri�.
�Creo que es lo m�s cursi y rid�culo que nos hemos dicho� aunque no puedo estar seguro pues no me acuerdo.
�Es cierto, pero decir cursiler�as de vez en cuando no est� nada mal, es parte de amarnos. Aunque me enloqueces con esas obscenidades que dices cuando me tienes dentro.
��Cu�les? Pierdo la cabeza no s� lo que digo.
��No te acuerdas? �Te gustar�a que te las recordara? �dijo Harry con tono juguet�n.
�Hazlo.
�Pues veamos� �Harry� hhhmm dame m�s duro, m�s fuerte� ll�name� �dijo Harry imitando la voz del rubio.
��As� que yo digo eso? Pues t� no te quedas atr�s� �hmm� Draco eres tan delicioso� eres tan estrecho� en todo caso no es mentira� soy delicioso.
�Oh ya c�llate mira que se me va a poner dura otra vez�
��De verdad? Yo ser�a feliz �dijo Draco restregando su miembro sobre el de Harry.
�Draco� no� �Por Merl�n! la tienes dura otra vez� no puedo creerlo�
�T� tienes la culpa �dijo el rubio ech�ndose sobre Harry para besarlo en el cuello.
�Pues me alegra que suceda� porque te quiero dentro de m� Draco �tomando con brusquedad la cabeza del rubio para buscar sus labios con lujuria. �, vamos a la cama�
Draco dej� de besarlo y mir� al muchacho sorprendido, la invitaci�n iba en serio. Salieron de la ba�era y con el agua y la espuma escurri�ndoles por el cuerpo se dirigieron a la habitaci�n, todo comenzar�a otra vez.
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Un poco antes del mediod�a y despu�s de tomar un suculento desayuno Harry y Draco fueron llamados ante la presencia del director. Al momento de entrar al despacho, se encontraban personas a las que Draco no pudo reconocer, pero que imagin� que deb�a conocer. Durante la pasada noche hab�a �conocido� al director y la jefa de la casa Gryffindor, a la que hab�a pertenecido Harry. Ahora tambi�n estaba en el despacho un hombre alto de facciones sombr�as que vest�a una toga negra. Pero adem�s de �l hab�a una mujer que se hab�a levantado de la silla en cuanto ellos hab�an entrado.
Draco mir� a la mujer de cabello rubio y ojos azules, era la misma de la fotograf�a de su graduaci�n, esa mujer rubia era su madre, la que Stefan le hab�a hecho creer que hab�a muerto. Sinti� un estremecimiento en el coraz�n, un estremecimiento de felicidad. Dentro de toda esa mentira que Stefan hab�a tejido en derredor suyo �l siempre hab�a a�orado a esa madre que hab�a perdido.
Narcisa avanz� despacio hacia su hijo que se hab�a quedado mir�ndola sin reconocerla en realidad. Era doloroso para ella saber que Draco, al que adoraba con toda su alma, no pod�a recordarla, Stefan la hab�a borrado de los recuerdos del chico seg�n lo que le hab�a explicado Albus Dumbledore.
�Draco� �llam� la mujer con un tono doloroso.
El chico rubio sinti� que el coraz�n casi se le paralizaba de tanta alegr�a, hab�a sido muy doloroso creer a su madre muerta, le hab�a hecho tanta falta durante ese tiempo que pod�a recordar creyendo que su vida era la que Stefan le hab�a forjado.
�Mam� �dijo el chico rubio en un hilo de voz mientras abrazaba a la mujer rubia con todas sus fuerzas.
�Hijo� por fin est�s conmigo� mi cielo no sabes cuanto so�� con este momento.
Draco abraz� m�s fuerte a Narcisa, �l sent�a lo mismo a pesar de no recordarla, so�aba con aquel abrazo.
Los que observaron la escena aunque estaban emocionados no se miraron unos a otros sinti�ndose como unos intrusos al presenciar aquello.
Aquel abrazo entre Narcisa y Draco se prolong� por unos minutos hasta que por fin el chico con los ojos llenos de l�grimas mir� a la mujer que era su madre.
�Mam� no puedo creerlo, no sabes cuanto deseaba poder abrazarte as�, pero cre�a que era imposible.
�No lo es hijo m�o, estoy aqu� contigo y jam�s nadie volver� a separarnos.
�No mam� nunca m�s� te lo juro.
�Mi cielo� cuanta falta me hiciste� pero ya est�s aqu� �dijo la mujer y con ojos llenos de l�grimas mir� a Harry y le tendi� la mano �, Harry� querido d�jame que te abrace tambi�n.
Harry sonri� y fue al encuentro de la mujer que lo bes� en la frente y lo atrajo hacia ella con un solo brazo.
�Harry lo lograste� trajiste a mi hijo de regreso.
�Le promet� que lo har�a.
�Y has cumplido Harry� siempre estar� eternamente agradecida.
�Este es el lugar de Draco� aqu� con nosotros �dijo Harry.
Draco sent�a culpa por no recordar a su madre.
�Mam� yo� quisiera explicarte que�
�No hijo no es necesario, el profesor Dumbledore me lo ha dicho todo� s� que ese hombre modific� tus recuerdos, te hizo creer que yo estaba muerta.
�S� y no s�lo eso, �l quer�a que yo fuese igual a mi padre.
Narcisa movi� la cabeza en se�al de negaci�n.
�Gracias a Merl�n eres muy diferente a �l hijo, siempre lo fuiste. Pero tengo confianza en que muy pronto recordar�s todo mi cielo.
Draco sonri� y volvi� a abrazar a su madre, la sensaci�n le resultaba maravillosa despu�s de creer que ella hab�a muerto, luego de nacer �l.
Harry tom� la mano de Draco y mir� a las personas reunidas en el despacho.
�Quiero darles las gracias a todos por lo que han hecho, sin la ayuda que me brindaron no hubiese conseguido traer a Draco de regreso �dijo Harry.
�Nosotros hicimos muy poco Harry, fuiste t� quien arriesg� todo �dijo el director.
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Narcisa dej� el despacho del director y acompa�� a los dos muchachos a la habitaci�n que ocupaban en ese mismo piso. Necesitaba conocer los detalles de todo aquello que le hab�a permitido volver a tener a su hijo junto a ella.
Harry no omiti� nada con respecto a toda la historia desde el mismo instante en que hab�a dejado La Madriguera aquella madrugada del mes de agosto. Le cont� a la madre de Draco todos los pasos que hab�a dado hasta que finalmente se encontr� con Los Custodios en la comarca de Riaz�n y fue llevado a la fortaleza donde hab�a encontrado a Draco.
Le relat� a la mujer con especial sentimiento lo que hab�a vivido y sentido la primera vez que volvi� a ver a Draco y lo doloroso que le result� ver que no era reconocido por el muchacho. En este punto Draco lo corrigi�, diciendo que s� lo hab�a reconocido, pues le hab�a visto con su verdadera apariencia, no como lo ve�an los dem�s en aquel lugar. Pues sus ojos le hab�an impresionado profundamente desde el primer momento pues bastante seguido so�aba con sus ojos aunque nunca llegaba a verle el rostro.
Por su parte Draco no tuvo ning�n empacho en relatarle a su madre como se hab�a enamorado de Harry otra vez a pesar de las ideas que Stefan le hab�a hecho creer. Narcisa lo escuch� con toda la atenci�n del mundo, sonriendo a veces cuando Harry interven�a para decir que a pesar de no recordarlo Draco no hab�a podido resistirse a sus encantos.
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Aquella noche mientras despu�s de cenar junto a Narcisa que hab�a pasado todo el d�a junto a los chicos, recibieron en la habitaci�n en que alojaban la visita de todo el clan Weasley. Harry se sinti� algo avergonzado al verlos llegar, sobretodo cuando se encontr� frente a Molly Weasley. Hab�a abandonado el hogar que ellos tan generosamente hab�an compartido con �l sin decir ni una palabra, por eso la primera palabra que le vino a la mente al muchacho fue un sincero �lo siento�.
�Harry� �Por Merl�n! Finalmente lo lograste cielo �dijo Molly abrazando al chico con fuerza.
Harry la abraz� lleno de alegr�a.
�Los extra�� mucho� a todos �dijo el muchacho de ojos esmeraldas pasando su vista por cada uno de los miembros de la familia que le miraban sonrientes.
�Y nosotros a ti Harry �dijo Ginny abrazando a su turno al chico.
�Harry fuiste muy valiente al irte solo en busca de Draco �dijo Arthur palmeando la espalda del chico �, arriesgaste mucho al ponerte en el camino de esos sujetos.
�Era necesario se�or Weasley, era la �nica forma. Le confieso que tem� que no lo comprendieran y me considerar�n un traidor por irme as� sin decir nada.
�Que tonter�a Harry, jam�s hubi�semos pensado eso de ti, hiciste lo que tu coraz�n te ordenaba y contra eso no hay cr�tica posible �dijo Arthur.
Draco miraba a todos los pelirrojos Weasley con curiosidad, tampoco los recordaba. Fue Ginny la primera que se acerc� al muchacho rubio y lo abraz� con la espontaneidad que la caracterizaba.
�Oh Draco me siento tan feliz de que est�s de regreso �dijo la chica mientras abrazaba al rubio con efusividad �, Harry sin ti era un sombra�
Draco la mir� sonriendo a pesar de que no la reconoc�a, Ginny not� que el muchacho actuaba diferente con ella.
��Qu� sucede? �pregunt� Ginny mir�ndolo con preocupaci�n.
Harry se adelant� y tom� a Draco de la mano.
�Ella es Ginny� escribiste en el diario sobre ella �dijo Harry, provocando con estas palabras extra�eza en todos los Weasley.
Draco asinti� con la cabeza sonriendo.
��Qu� sucede Harry? �pregunt� Ginny volteando a mirar a sus padres con preocupaci�n.
�Bueno lo que pasa es que Draco no recuerda nada de su pasado� Stefan le cambi� los recuerdos �explic� Harry.
Todos los Weasley se miraron con tristeza.
�Es cierto �dijo Draco �. Ese loco modific� mis recuerdos con un hechizo que a�n tiene efecto sobre m�.
��Y entonces c�mo fue que t� y Harry est�n aqu�? �pregunt� Ginny confusa.
Draco mir� a Harry y sonri� para sorpresa de los Weasley.
�Bueno� simplemente Harry hizo que me enamorara de �l� otra vez �dijo Draco.
Harry al escuchar eso dese� besar efusivamente al muchacho, pero se contuvo hab�a demasiada gente presente, s�lo le apret� la mano con fuerza.
Los Weasley se miraron unos a otros sin saber si deb�an sonre�r. La modificaci�n de recuerdos a veces era irreversible, esperaban que este no fuera el caso.
La visita de la familia de pelirrojos s�lo se prolong� por algunos minutos m�s. Imaginaban que los chicos despu�s de todas las vicisitudes que hab�an enfrentado deseaban tranquilidad por encima de todo. Pero Molly no abandon� la habitaci�n sin hacerles prometer que en cuanto todo ese asunto terminara y aquel grupo estuviese en Azkaban, que era donde merec�an estar, los chicos visitar�an la Madriguera y Narcisa los acompa�ar�a.
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