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I will make you cry por Erena

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Notas del capitulo:

Este ya es el ultimo capi ^^ sé que he tardado bastante T_T pero esque no sabía como continuar este epi Y_Y

 En fin, quiero avisar que no va a haber conti ^^U este es el ultimo capitulo que subo de este fic, lo siento ^^UUUUU

Espero que os guste ^0^ Dejadme comentarios dando buestra opinión ^^

 

Se acaptan amenazas de muerte ^^U (sin pasarse eh? ¬¬)

Las cámaras mostraban a la mujer caminar por el pasillo, mientras que, detrás suyo, un encapuchado la apuntaba con una pistola.

La rubia tragó saliva y continuó hasta estar en frente de las puertas del cuartel.

 

 

-¡¡NEAR!!

 

 

El peliblanco giró ante el alarmante grito de Rester, y en su inexpresivo rostro se hizo una leve mueca de asombro. ¿Realmente era el? No podía creerlo, llevaba tanto tiempo esperando este momento que ahora le parecía imposible lo que sus ojos le mostraban.

 

 

-Dejémosles entrar.

 

 

Ambos policías se miraron como buscando una causa convincente de por que Near había dicho esto, pero ninguno la encontró, así que sin mas, dejaron entrar a Linder con su captor.

 

 

El peliblanco se quedó de espaldas a este, sin dejar lo que se encontraba haciendo en ese momento.

 

 

-Bienvenido Mello.

 

 

Inmediatamente, los ayudantes de Near sacaron sus armas y apuntaron al rubio con ellas.

 

 

-¡¡SUELTA LA PISTOLA!!

 

 

Near, aun sin prestar atención a lo que pasaba a sus espaldas habló.

 

 

-No solo Mello. Soltad todos las pistolas. No tiene ningún sentido que haya un baño de sangre aquí.

 

 

-Pe... Pero él asesinó a nuestros compañeros… y no sólo eso, también secuestró y mató al director de la policía japonesa.

 

 

Near cogió un mechón de su cabello y comenzó a juguetear con el, retorciéndolo, como ya era habitual en el.

 

 

-No tenemos pruebas de ninguna de estas cosas y el asesinato del director fue probablemente cosa de Kira… aunque eso no importa en realidad. No me lo hagáis repetir, por favor. Nuestro objetivo es arrestar a Kira. Matando ahora a Mello no sacaríamos absolutamente nada. Debemos  mostrarle respeto por que tuvo uno de esos cuadernos en las manos y se acercó a Kira más que cualquiera de nosotros. Apuntarle con las pistolas es un acto deleznable de insubordinación.

 

 

Tras las palabras de Near todos quedaron en silencio, hasta que Gevanni y Rester decidieron bajar las pistolas.

 

 

-…

 

 

-Muy bien…

 

 

Mello, mientras retiraba la pistola no de muy buen humor, miraba a Near, que aún seguía girado.

 

 

-… Que labia tienes Near. ¿Hasta ahora ha salido tal y como tu pensabas que saldría?

 

 

-Si. No tenía previsto que acabaras viniendo aquí, pero… Gracias a todo lo que has estado haciendo, he podido estrechar bastante el cerco sobre Kira.

 

 

-“¡¡Maldición!!”

 

 

-¡¡Near!!-. Estas palabras las había dicho cargadas de toda la furia que tenía en esos momentos, mientras en un movimiento brusco le apuntaba con la pistola.- ¡¡yo no soy ninguna herramienta para ayudarte a montar tu puzzle!!

 

 

Ante el acto de Mello, las pistolas volvieron a alzarse amenazadoramente contra el rubio.

 

 

-Comandante Rester, no me haga repetirlo, por favor suelten esas pistolas. Mello, si quieres dispararme, hazlo.

 

 

La expresión del que empuñaba la pistola era de ira completamente.

 

 

-“¿Por qué Near? ¿Por qué esa frialdad de nuevo? No puedo soportarlo… Tu distancia… me voy a volver loco.”

 

La mano con la que sostenía la pistola tembló, y su vista se fijaba en la espalda del chico que tenía delante.

Estuvo a punto de dispararle, pero Linder le detuvo a tiempo.

 

 

-Tienes razón Near… en realidad solo he venido a buscar una cosa.

 

 

El peliblanco giró mientras mostraba en su mano una foto en la que se veía un niño rubio.

Al cogerla, Mello pudo ver que detrás tenía una escritura.

 

 

-Ya tienes la foto, y ya me ocupé de todos los que podían conocer tu nombre.

 

 

El peliblanco s quedó de espaldas, tal y como había permanecido todo el tiempo, esperando a que el rubio se marchara por donde había venido y así poder continuar tranquilamente con las investigaciones, pero este se quedó allí de pie sin hacer ni decir nada.

 

-¿Quieres algo mas Mello?

 

 

-… En realidad, he venido a tratar otro tema.

 

 

-Bien, ¿De que se trata?

 

 

Mello dirigió una mirada hacia lo tres policías que estaban en la sala con ellos, y después miró a Near. Este suspiró.

 

 

-Entiendo. Linder, Gevanni, Rester; Sería necesario que nos dejaran a solas.

 

 

-¡Pero Near! El va armado, podría disparare en cualquier momento.

 

 

-No tiene de que preocuparse, ahora, por favor, tenemos que discutir un asunto.

 

 

Los tres se miraron, y frustrados, giraron en dirección a la salida; solo Linder se quedó unos segundos en el marco de la puerta observándoles, hasta que Mello le dirigió un a mirada y desapareció.

 

 

Los dos se quedaron en silencio, como si en la sala no hubiera nadie.

 

 

-¿Piensas quedarte callado sin decir nada? Tengo cosas importantes que hacer.

 

 

-No me digas… Near ¿Por qué?

 

 

Este no contestó, ni siquiera se giró para poder ver a Mello.

 

 

-No entiendo a que te refieres Mello.

 

 

-Lo sabes perfectamente, ¿Por qué te tienes que mostrar tan frío ahora?

 

 

Mello se acercó a Near y hizo que se girara para poder mirarle, peor este desvió la mirada.

 

 

-Eres más infantil de lo que me imaginaba, podrías mirarme a la cara al menos.

 

 

Near dirigió sus oscuros ojos hacia los del rubio, y por primera vez, Mello pudo ver una mirada de odio en Near.

 

 

-¿A que se debe esa mirada Near? ¿Se puede saber que te he hecho yo para que tengas esta actitud hacia mí?

 

 

El ceño del peliblanco se frunció aún más y apartó la mano del otro de un golpe.

No sabía por que lo había hecho, en su mente solo se regia la lógica, pero Mello… Mello le hacia enloquecer, que toda lógica careciera de sentido con el… No estaba bien, le hacia mostrar sus sentimientos, y el no quería ser débil.

 

 

-¿Qué que me has hecho? Muy bien Mello, te lo diré si eso te va a contentar. Me hiciste sentir como nunca nadie lo ha hecho, me hiciste sentir cosas que jamás he sentido y después desapareces sin más… ¿Te parece suficiente motivo?

 

 

Near no había perdido el tono frío y duro en que decía las cosas, sus palabras sonaron como siempre, pero a Mello le dolió mas que nunca aquél tono frío y distante.

 

 

-Near…-. Mello alzó su mano y rozó la mejilla de el chico, mientras este le devolvía una mirada gélida.- Yo ya… no aguanto mas…

 

 

Lentamente, Mello encaró a Near y se acerco con suma lentitud hasta pegar su rostro contra la del chico.

 

 

-Mello.- La cara de Near no cambiaba de expresión pese a la cercanía del otro.- no sé que es lo que pretendes pero que sepas que yo no pienso colaborar en ninguno de tus malditos planes sin ton ni son que causan muchas molestias a los demás y…

 

 

-¡Por el amor de dios! ¡Calla de una vez Near!

 

 

-¡¿?!

 

 

Sin mas dilación, Mello unió sus labios contra los de Near en un tierno beso.

 

 

-“¿De dónde he sacado yo la delicadeza?”

 

 

El beso duró a penas unos segundos, pero después de eso, se quedaron abrazados.

 

 

-¿Por qué lo has hecho Mello?

 

 

-¿Nh? ¿A caso necesito un motivo para hacerlo?

 

 

-Deja de decir estupideces…

 

 

El rubio sonrió con su típica sonrisa de superioridad.

 

 

-Lo he hecho por que aún no he podido olvidarme de lo bien que besabas…

 

 

-… Basta… No sigas…

 

 

-Ni de los ojos con los que me miraste aquella vez….

 

 

-He dicho que es suficiente…

 

 

Mello se acercó a el oído del ojinegro y le susurró.

 

 

-¿O acaso tu lo has olvidado?

 

 

-¡Basta Mello!-La voz de Near había cambiado por completo y Mello, sorprendido lo separó de su cuerpo para poder mirarle a los ojos. Near tenía una expresión de dolor insoportable.- ¿Crees que yo lo he olvidado? Nunca te he podido olvidar… te amé, y te sigo amando… pero tu… me abandonaste, te fuiste sin mas y sin dar una explicación.

 

 

El rubio quedó conmovido por esas palabras, sabía que todo era verdad, pero el en ningún momento quiso herir a Near.

 

 

-Near…- Se volvió a acercar a su rostro para besarle, y este no le rehuyó, más bien al contrario, le abrazó contra su cuerpo.- Perdóname…

 

 

Ninguno de los dos dijo nada mas, las palabras sobraban, pues sabían, que entre ellos, estas no funcionaban.

 

 

-“¿Algún día me dejaras conocerte Near?”

 

 

-Espera Mello… No… Si me besas… ya no podré olvidarte…

 

 

-De eso se trata pequeño.- Mientras dejaba ir una pequeña risilla.

 

 

El rubio se sacó los guantes con los dientes, mientras miraba a el chico que había delante suyo, fue acariciando su rostro hasta llegar a su boca, se dedicó a reseguir sus labios con un dedo, para después acabar introduciéndolo en su boca.

 

 

-Vamos Near… Abre la boca…

 

 

El chico, muy sonrojado, abrió la boca muy lentamente, para así dejar paso a la lengua del otro, dejarla juguetear con la suya.

Near estaba tan asombrado de la acción del otro que no sabía como reaccionar, podía notar todos y cada uno de los movimientos de Mello, pero no sabía como actuar.

 

 

Mello estrechó mas aquel cuerpo entre sus brazos y hizo perdurar el beso hasta que no pudo contener mas la respiración.

 

 

-M-Mello… me ahogas…

 

 

-Ah... lo siento…-. Casi sin darse cuanta, los colores le habían empezado a subir, dándole una expresión de ternura jamás vista en el, a la que Near no pudo evitar sonreír ligeramente.

 

 

-Debería darme satisfecho… al menos ya te he hecho sonreír… pero... no puedo aguantarme solo con eso…

 

 

-Tranquilo, se que eres impulsivo por naturaleza.

 

 

-Si...yo...no lo hago a propósito...-.sonríe.- es mi encanto natural

 

 

Near se abrazó a el, sintiéndose amado de nuevo.

 

 

-Pero... hoy no pareces Mello… estas mas calmado de lo normal…

 

 

Mello le miró con una cara divertida.

 

 

-¿Tu crees? El de ahí abajo no opina lo mismo...-. Desvió la mirada hacia abajo, y después miró a la cara a Near, que había adoptado una expresión de… ¿De miedo?

¿Era posible que Near le tuviera miedo?... No le culpaba… había sido muy cruel con el.

 

 

-Yo…

 

 

-Tranquilo...solo te advierto que si sigues acercándote… no se si voy a poder controlarme.

 

 

Near juntó su frente con la de Mello y cerró los ojos.

 

 

-No sé… si quiero…. Que te controles, Mello.

 

 

-Tú lo has querido.

 

 

El rubio comenzó a deslizar lentamente su mano por encima de la camisa, aun sin tocar la piel del chico, mientras que este ahogaba los suspiros que pretendían salir de su boca.

 

 

-Ei, la cosa no tiene gracia si te reprimes… vamos, déjalo salir…

 

 

-No, Mello…

 

 

El rubio adoptó una expresión maliciosa mientras se quitaba los guantes con la boca y los arrojaba al suelo.

Se acercó lentamente al cuello de Near y dejó caer su aliento sobre el, haciendo que este se estremeciera.

 

 

-¿Aún te empeñas en contenerte…?-. Se acercó aún más y lamió su cuello-. ¿…Near?

 

 

-Nhh… Basta Mello, no hagas eso…- Aforrándose a su espalda.

 

 

-Claro que voy a hacerlo… casi no puedes contenerte ¿verdad?- se rió para si mismo y miró a los ojos a Near- Vamos, hazlo por mi… quiero oírte.

 

 

El pálido chico se lo quedó mirando unos instantes, después se acercó a el rubio un poco mas y besó suavemente su clavícula, con una timidez que Mello no imaginaba que este poseía.

 

 

-¿tengo que interpretar esto como que vas a colaborar?- dijo con un tomo gracioso en su voz.

 

 

-Deja de decir las cosas de esa manera tan malsonante Mello, voy a colaborar…

 

 

Mello miró a Near con dulzura y besó su frente para seguir bajando hasta llegar a sus labios, pero antes de besarlos los mordisqueó un poco.

 

 

-Nhhh…

 

 

-Sabía que no podrías resistirte a mis encantos de seducción jeje

 

 

-¡¡Mello!!

 

 

Este le sacó la lengua y siguió bajando hasta llegar a su cuello, que fue besando y mordiendo suavemente mientras desabrochaba la camisa de Near. Deslizó delicadamente la blanca prenda por la suave piel del chico, casi con miedo de estropear aquella luz que parecía irradiar su cuerpo.

 

 

-Mello, tu chaleco.

 

 

El  peliblanco comenzó a bajar lentamente la cremallera el chaleco de Mello, a una velocidad desesperante para el rubio, la ropa le molestaba mas que nunca.

 

 

-Déjame a mi Honey- Mientras guiñaba un ojo.

 

Rápidamente se quitó la prenda y la arrojó lejos, para luego tumbar a Near en el suelo y recostarse sobre el, sintiendo así el contacto de la suave piel.

Acercó una mano a la cara de el chico, para su asombro estaba temblando, y temía tocar esa tersa piel.

 

 

-Mello, vamos, ¿tienes miedo de mi?- La mirada de Near hacia denotar cierta “burla” hacia Mello, y el no lo iba a permitir.

 

 

-¡Ha! No me hagas reír, ¿miedo de ti? ¿Yo?

 

 

El peliblanco rió para sus adentros, sabía que el orgullo de Mello no iba a desaparecer tan fácilmente, aunque esa era una de las cosas que más le gustaban de el.

 

 

-Entonces demuéstramelo.

 

 

Mello rozó el dorso de su mano contra la cara de Near, y este ladeó la cabeza.

 

 

-No sabía que fueras tan pervertido Near…- Su voz sonó tan seductora que el albino casi se desangra en el instante.

 

 

-Deja de decir idioteces de una vez Mello.

 

 

La mano del rubio fue acariciando la cara del chico muy suavemente, para continuar deslizándose por su pecho, su abdomen, su ingle, el interior de los muslos de Near…

Este no dejaba de retorcerse debajo de Mello y dejaba ir pequeños suspiros de placer, mientras Mello moría por ir a mas y mas cada vez. En aquella habitación empezaba a hacer demasiado calor…. O Puede que fuera el foco que emanaba tanto calor.

 

 

-Near…

 

 

-Nh… ¿si?

 

 

-Levanta las caderas, voy a desnudarte del todo…- La voz de Mello sonaba ronca por la excitación, y ahogada por el deseo de poseer ese pálido cuerpo.

 

 

-Esta bien…- Tímidamente, levantó las caderas mientras ayudaba a Mello a Bajarle los pantalones junto su ropa interior, aunque se detuvo un momento antes de seguir bajando.- Es que…- En sus mejillas relucía un intenso sonrojo que resaltaba su palidez.

 

 

El rubio comprendió a lo que se refería Near con esa mirada y sonrió. Se acercó a su cara y le besó larga y profundamente.

Se separaron, ambos con la respiración agitada.

 

 

-Tranquilo, no creo que haya una parte de tu cuerpo que no pueda gustarme. Eres hermoso Near.

 

 

-Vale, vale, ya me desnudo, pero deja de decir esas cosas Mello, que me das miedo cuando te pones en plan romántico.

 

 

El rubio alzó una ceja.

 

 

-¿Eso quiere decir que te gusto mas cuando soy malvado y cruel contigo? No sabía que fueras masoca…

 

 

-¡Calla! Déjalo… continúa Mello.

 

 

El rubio le sacó la lengua y volvió a unir sus labios con los del peliblanco, mientras bajaba hábilmente las dos únicas prendas que cubrían aquel cuerpo, no sin conseguir que sus manos dejaran de temblar ante tal momento.

 

 

Near quedó desnudo ante Mello, aunque su vergüenza no había desaparecido del todo, y seguía intentando cubrirse con algo mientras, sonrojado, miraba hacía otro lado.

El rubio había quedado sin palabras, el cuerpo que tenía ante el era aún mas hermoso de lo que había podido imaginar.

 

 

-Mello… di algo… me siento tan…

 

 

-Near…

 

 

-… ¿Si?...

 

 

Hubo un largo silencio. Near alzó la mirada para ver a Mello, el cual tragó saliva.

 

 

-… ¿Me dejas tocar?

 

 

En los ojos de Near surgió un brillo que el rubio jamás había visto, y volvió a mirar hacia otro lado mas sonrojado aún que antes.

 

 

-…Si…

 

 

Mello se acercó a Near y bajó hasta que su cara estuvo a escaros milímetros de la del peliblanco. Sacó la lengua, y con la punta rozó la mejilla del peliblanco. Estaba ardiendo, siguió el recorrido hasta llegar a su oreja, y atrapó el lóbulo entre sus labios.

 

 

-¡Ahh! Mello…

 

 

-¿Sientes placer Near?

 

 

-Si, no pares por favor…

 

 

-Veo que has aprendido quien es tu amo jeje- rió para romper la tensión que se había formado entre ellos.

 

 

-Mello… en fin…- En el rostro de Near también se había formado una sonrisa.

 

 

-Te voy a matar a placer darling.

 

 

 

 

-¡¡Basta Mello!! Deja de decir cosas tan…

 

 

 

-¿Qué pasa? ¿Acaso te da vergüenza que te diga cosas bonitas?- Mirando maliciosamente a el chico.

 

 

-Ughh… Basta ya.

 

 

-Eres adorable.- Besó su pecho, mientras masajeaba uno de sus pezones.

 

 

-Ahh… Nh… Mello… es-espera un momento… ¡Ah!

 

 

-Near… No me pidas que espere… No puedo…- Muerde con brusquedad el cuello del albino.

 

 

-¡Ah! ¡Eso ha dolido! Mello, te he dicho que esperes.- Near deslizó su mano por el interior del muslo de Mello muy despacio, haciendo que un terrible escalofrío recorriera la espalda de este.- Mira como estás…- Mientras rozaba su entrepierna, casi como si fuera sin intención.

 

 

-Nhh… Near… si vas a hacerlo hazlo, pero no juegues conmigo…- Ahora era Mello quien se había sonrojado, y había bajado la cabeza, de forma que el flequillo cubriera sus ojos.

 

 

-Yo pensaba que sabías que mi especialidad son los juegos.- Decía Near mientras iba desabrochando los pantalones de Mello.

 

 

El rubio se mordió fuertemente el labio cuando notó la mano del peliblanco rozando su excitado miembro por encima de la ropa interior.

 

 

-Vaya… es realmente grande, Mello.- En su voz sonaba un tono de picardía que hacia que Near se viera mas sensual de lo que ya lo estaba viendo Mello en aquellos instantes.

 

 

El rubio, sin previo aviso, cogió la mano del chico y hizo que abarcase toda su superficie.

 

 

-Claro que es grande, ¿No te dan ganas de jugar con ella?

 

 

Near se sonrojó mucho y desvió la mirada hacia otro lado, pero Mello le sujetó por la barbilla y le hizo mirarle.

 

 

-Quiero saber si sabes usar para otra cosa que no sea deducir esa boquita tan adorable que tienes ¿Quieres?- Mordió el labio de Near lo suficientemente fuerte para hacérselo sentir, pero tan flojo como para no hacerle daño.

 

 

El peliblanco bajó la mirada con sus mejillas notablemente ardiendo en intenso carmín, después alzó la mirada de nuevo y miró al rubio.

 

 

-No sé si voy a saber hacerlo pero… lo voy a intentar…- Dicho esto bajó hasta quedar a la altura del miembro de Mello, y comenzó a acariciarlo tímidamente.

 

 

-Vamos Near, tu puedes.- Mientras le acariciaba la cabeza.

 

 

-Mello por favor me da mucha vergüenza, no me digas nada…- Miró a su alrededor hasta encontrar lo que buscaba.- Toma sujeta esto entre tus dientes.- Poniéndole su tableta de chocolate en la boca-. Y mas vale que no la sueltes… por que entonces pararé…

 

 

Mello asintió sintiéndose un poco tanto ante tal acción.

 

 

Near sujetó el miembro de Mello por la base y besó la punta muy suavemente, para después  sacar la punta de su lengua y lamer delicadamente toda su longitud.

 

 

-Nhhh!!- Mello tubo que controlarse para no dejar salir un profundo y sonoro gemido.

 

 

Near alzó la mirada para mirar a Mello, estaba completamente sonrojado, y mantenía los ojos fuertemente cerrados, mientras sostenía como podía la tableta de chocolate para que no se cayera. Aquella vista de Mello la pareció sumamente adorable a Near.

 

 

Continuó lamiendo la base del miembro de Mello y fue subiendo hasta llegar a la punta, entonces vaciló un instante, y se lo introdujo entero en la boca. Era un poco más grande de lo que había calculado, pero consiguió cubrir toda su superficie.

 

El rubio apretó las manos y abrió un ojo para poder observar  Near, con los ojos cerrados suavemente y sus mejillas teñidas de carmín. Levantó una mano y la posó encima de la cabeza del peliblanco, enredando sus dedos entre las hebras del cabello de Near.

 

 

El chico albino comenzó a deslizarse sobre la longitud acelerando cada vez más el ritmo, mientras que Mello hacía todo lo posible por no gritar.

 

Near se sentía muy raro… nunca en su vida se había imaginado haciendo algo como eso, y menos con la persona a la que amaba… Buscó desesperadamente la mano de Mello y entrelazó sus dedos con los del rubio, para su asombro, no era el único que temblaba.

 

 

-¡¡Near!!-. La tableta de chocolate cayó al suelo, mientras Mello intentaba apartar a Near antes de que se manchara la cara, pero no llegó a tiempo.

Un espeso líquido blanco manchó el pálido rostro del chico.

 

 

-¡¡Uahh!!- Near se hecho un poco hacia atrás sorprendido.

 

 

-¡¡L-Lo siento de veras!! ¡Tendría que haberte avisado, lo siento Near!- Mientras decía esto limpiaba como podía la cara del chico, que estaba un poco sorprendido.

 

 

-Deja de preocuparte Mello- Se llevó la mano a la cara y recogió un poco de la blanquecina sustancia y se lo llevó a la boca.- ¿Puedes continuar o con una vez ha sido suficiente para ti?

 

 

-Solo con lo que acabas de hacer ya me he vuelto a poner a mil Near.

 

 

-Lo suponía-. Rió Near.

 

 

-Tú lo has querido, ven aquí. Ahora me toca a mi ser el malo.

 

 

Agarró a Near por la cintura y le besó ferozmente, para después hacerle darse la vuelta.

 

 

-¡¡Ei!! ¿Mello qué…?- Los nervios habían vuelto a invadir a el peliblanco.

 

 

-Tranquilízate de una vez, te va a gustar Honey.

 

Mello acabó de sacarse los pantalones y el resto de ropa, quedando el igualmente desnudo.

 

 

-¿Preparado?-. Se inclinó y mordió la espalda de Near muy suavemente.

 

 

-¡Ahhh! Si…

 

 

El rubio levantó con cuidado a el peliblanco, y le hizo agarrarse al borde de la mesa.

 

 

-Vamos Near, levanta ese trasero.- Asió delicadamente una de las piernas de Near y la levantó un poco hacia un lado para dejar mas espacio, después, dirigió tres dedos hacia la boca de este, rozando sus labios.

Este se giró para mirar a Mello con una expresión de miedo en la cara.

 

 

-Tienes que lamerlos, es… No quiero hacerte daño.

 

 

Near cerró los ojos y lamió insistentemente los tres dedos que Mello movía dentro de su boca. Una vez los consideró lo suficiente ensalivados dirigió un dedos a la entrada de el peliblanco y la rozó con el, para después introducirlo lentamente.

 

 

-¡¡Ugh!!

 

 

Near sintió un poco de molestia, pero no dolor, era una sensación extraña.

 

Aquél dedo se movía en su entrada haciendo que se dilatara, hasta que cupo el segundo dedo, y el tercero. Pronto entraban y salían sin la mayor dificultad, mientras que Near no podía dejar de emitir gemidos de placer.

 

 

-Ei, no te embales, que no quiero que te corras antes de que yo te pueda llegar a hacer algo; aunque si con tres dedos míos ya te basta es que soy mas bueno de lo que pensaba.- Mientras decía esto sacó los dedos.

 

 

-Mello… date prisa… unh….

 

 

-Claro, claro, no tienes que pedírmelo tan

insistentemente.

 

 

El rubio alzó un poco mas la pierna del peliblanco y dirigió su miembro a la entrada de este.

 

 

-Esta vez no van a ser tres dedos Near, va a ser algo mucho mas grande ¿Quieres que siga?

 

 

-¡Mello por favor hazlo ya! ¡Me vas a matar!

 

 

El rubio se sonrojó y no dijo nada mas, comenzó a introducir con mucho cuidado la punta.

 

 

Near cerró fuertemente los puños y serró los dientes, sabía que cuanta mas fuerza hiciera mas dolería, pero no podía evitarlo.

 

 

-¡¡¡AAAHHH!!- El dolor era evidente en aquel grito, y eso preocupó al rubio, que paró un instante.

 

 

-Near ¿¿estás bien?? ¿Te duele?

 

 

-¡Claro que duele! ¿Que es lo que crees que tienes entre las piernas?-. Unas finas lágrimas comenzaron a caer por el rostro enrojecido de Near.

 

 

-Lo siento…. Ya casi está dentro, voy a ir con cuidado.- Acarició el vientre de Near y siguió introduciendo su miembro hasta que al fin consiguió que entrara todo.- ¡Ugh! Near… que… estrecho… eres…

 

 

-Lo siento… No puedo evitarlo… ¡¡AAHH!!...

 

 

-Tranquilo, tienes que relajarte… -. Agarró el miembro de el peliblanco y lo masajeó un poco para distraerle del dolor mientras se acostumbraba a la intrusión, pero ya no aguantaba mas, sentía la presión que Near ejercía sobre su miembro, y sentía la necesidad de moverse dentro de el.

 

 

-Ei… me voy… a mover. Lo-lo voy a hacer con cuidado… dime si te duele.

 

 

-¡No Mello! ¡Espera!

 

 

 

 

Mello comenzó a moverse, embestía muy lentamente para su parecer, que moría a ese ritmo tan lento, pero para el peliblanco era otra historia.

 

 

-¡¡Mello!! ¡Espera! ¡¡No te muevas!!

 

 

-¿Cómo quieres que me espere baka?

 

 

El rubio siguió moviéndose, mientras que las embestidas iban aumentando.

 

 

-¡¡Mello, me duele!! ¡¡AHH!!-. Los nudillos comenzaban a ponerse blancos por la fuerza con la que apretaba las manos.

 

 

-Near… ¿Tanto… te duele? Nh…

 

 

-Mello… -. Se giró a mirar al rubio, aunque se moría de vergüenza, Mello le estaba viendo llorar.

 

 

-Tonto…-. Sacó su miembro del interior de Near, haciendo que este gimiera un poco por la molestia, y le dio la vuelta, haciendo que quedara sentado encima de la mesa.- Vamos, no seas llorica, debería darte vergüenza a tus 17 años.- Mientras besaba sus labios con insistencia, volvió a introducir su miembro en el interior del peliblanco.

 

 

 

-¡¡Ai!!-. Esta vez lo había dolido mucho menos que antes, no sabía si el hecho de que estuviera rodeando el cuello de Mello tenía algo que ver.

 

 

-¿Te gusta?-. Dijo mientras comenzaba a moverse rápidamente.

 

 

-… Si, me gusta, me gusta mucho Mello.

 

 

-Jeje… pues esto no es nada.- Volvió a besarle, no quería perder este contacto nunca, los labios de Near se encajaban con los suyos y quemaban, si, quemaban, y mucho, hacían que su boca ardiera y pidiera por mas de esa droga que le dejaba atontado.

 

 

Con una mano tiró todo lo que había encima de la mesa, y hizo que Near se recostase mas aún sobre esta, apoyando toda la espalda.

 

 

-Vamos, abre mas las piernas.- Near obedeció al instante.- Near… Dios mío,  me voy a volver loco… eres demasiado.

 

 

-Me alegro de que tu también... l-lo estés... Nh…. Disfrutando…-. Alzó su mano y acarició la cicatriz del hombro de Mello.

 

 

-¡Ah!

 

 

Near retiró inmediatamente la mano.

 

 

-¿Te duele?

 

 

-En absoluto, sigue… me gusta.

 

 

Mello aumentó aun mas el ritmo, sentía que el final estaba cerca, y quería aprovechar al máximo. Mientras Near, iba acariciando aquella cicatriz, para mucha gente, esa cicatriz habría perjudicado el aspecto de alguien, pero para Near era una parte más de Mello, y era hermoso.

 

 

-¡¡Ahhhh!! Mello… yo ya… me voy a…. ¡¡Nhhhg!!

 

 

-Yo también estoy a punto… vamos aguanta unos segundo mas… solo un poco mas….

 

 

-N-No puedo…. Yo…

 

 

Near sintió como un extraño calor le invadía, y le hacia sacudirse, haciendo que ese calor se extendiera por todo su cuerpo.

 

 

 

-¡¡MIHAELLL!!- Se aferró fuertemente al cuerpo del rubio.

-Oh dios… Near… ¿como puedes acordarte de...? ¡Dios, Near! Si me aprietas así yo también voy a.... a... ¡AHHHH!

 

 

La presión que Near había hecho sobre su miembro hizo que no pudiera aguantar ni un segundo mas, dejándolo ir todo dentro del peliblanco.

 

 

Ambos se dejaron caer, respirando agitadamente.

 

-Ei… Near… ¿estás vivo?

 

 

-Mas o menos…- Rodeó a Mello con sus brazos.

 

 

-¿Por qué me has llamado por mi nombre?-. Acarició su cabello.

 

 

-No lo sé… me salió solo…. ¿Te ha molestado?

 

 

Mello negó con la cabeza.

 

 

-Oye, espero que no quieras una segunda ronda, por que estoy muerto.

 

 

-Normal, apuesto a que es la primera vez que te mueves tanto. Jejejeje

 

 

-Mfh…-. Near miró malhumorado a Mello, pero con una expresión muy graciosa, que hizo sonreír al rubio.

 

 

Mello levantó a Near de la mesa y lo recostó en el sofá.

 

 

-Vamos, necesitas dormir, se te ve en la cara.

 

 

-Mello, ya sabes que yo a pena duermo…

 

 

El rubio resopló, claro que lo sabía, el lo sabía casi todo a cerca del peliblanco, se había pasado los días observándole con disimulo en la Wammy’s House .

 

 

-Near, tienes que dormir, si no acabarás poniéndote enfermo.

 

 

-Si prometes estar ahí cuando me despierte… dormiré.

 

 

-Te lo prometo.

 

 

Mello se recostó a su lado y se abrazó a el, mientras Near se acurrucó en su pacho, y ambos se cubrían con el abrigo de Mello.

 

 

-Duerme bien.- Dijo el rubio mientras besaba sus cabellos.

 

 

Poco a poco, el sueño fue venciendo a el chico, mientras que el embriagador aroma de Mello le invadía.

 

 

-Te quiero…

 

 

Esas palabras susurradas, tan fácil decirlas, y sin embargo muchas veces carentes de sentimientos, aquellas palabras surgieron de los pálidos labios del chico, cargadas de sentimientos. Mello lloró silenciosamente, lo había hecho por fin lo había hecho, había conseguido entrar en el corazón de Near. Por fin le había dejado comprender lo que sentía, lo había mostrado sus sentimientos.

Solo lamentaba tener que ser el quien le iba a hacer mas daño.

 

 

-Te quiero Near, te quiero…

 

 

Diciendo esto, una y otra vez, abrazó a Near.

 

 

 

 

 

 

 

*.*.*.*.*.*.*.*.*.*.*.*.*.*.*

 

 

 

La luz que el televisor emitía era la única luz que había en la sala.

 

Eran las noticias, el sonido de la voz del presentador al hablar resonaba en las paredes haciendo que se amplificase.

 

 

Comunicaban la muerte de un chico que había secuestrado a una presentadora de televisión, y poco después, el camión en el que viajaban se había estrellado y incendiado.

 

 

En aquella habitación no había nadie, solo una única persona, que miraba fijamente la pantalla con mirada ausente.

 

Near observaba atentamente el televisor, como si no hubiera escuchado lo que acababan de decir, y mientras su rostro no cambiaba de expresión, una lágrima cayó lentamente por su inexpresivo rostro hasta caer sobre su rodilla.

 

 

-Mihael…

 

 

 

Fue la persona a la que más odió, y a las que más reproche guardó durante muchos años, pero sin embargo, era  al único a el que había amado, y el único al que amaría en toda su existencia.

Aquella lágrima dio lugar a otra, y esa otra a otra mas y aquella a muchas mas, dando lugar a un amargo pero silencioso llanto, haciendo que aquella habitación estuviera mas vacía que nunca, y así de vacía se quedaría el interior del alma de Near. Mello ya no estaría para besarle.

 

 

Y entre ese lastimero llanto juró y perjuró que aunque le llevara toda su vida, atraparía a Kira.

 

 

 

“Aún puedo sentir tu calor en mi cuerpo, haciéndome sentir que de nuevo estas aquí, pero cuando busco tus labios, se que no te voy a besar; cuando busco tus ojos se que ya no me vas a poder mirar, y cuando busco tus manos, ya no voy a recibir caricias… siempre te amaré… Mello.”

Notas finales:

Que tal?? a mi la personalidad de ambos no me acaba de convencer ^^U he intentado no cambiarla demasiado, pero no sé si lo habré conseguido ^_^Dadme vuestra opinión, es muy importante para mi T_T 

Ja ne!!

 

 


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