Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Falling again por Sayuri De Vais

[Reviews - 68]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

AAAAHHHHH... LO SIENTO, GOMENASAI, GOMENASAI... en verdad que quería actualizarlo pronto, pero... AAAAAAAHHHHHH, GOMENASAI, GOMEN... ¬¬ sigo insistiendo que la "U" perjudica, pero bueno, aca les traigo otro capítulo...

Gracias por los comentarios, en verdad me dan mucho ánimo, espero que el capítulo les guste y me envían más comentarios por favor.

Bueno, ahora al capítulo...

Aclaró que Yami No Matsuei no me pertenece, solo tomo prestados a los personajes para esta historia que no tiene fines de lucro.

 

Nee... Tsuzuki... hace mucho que no hablamos...

 

El clima cambio ¿ya se acerca invierno? El frío aumentó y te cala los huesos...

 

No me gusta el frío, no me gusta... odio sentir frío, lo odio...

 

...

 

Lluvia... es lluvia lo que escucho... entonces el invierno aun no llega... pero aun así hace frío...

 

La lluvia comenzó a tomar fuerza, tal vez no pare por toda la noche...

 

Nee... Tsuzuki...

 

Recuerdo que a ti te gustaba la lluvia... ¿estás parado bajo ella en estos momentos?

 

Envidio a la lluvia... la envidio... se atreve a acariciar tus suaves cabellos y tu rostro... no sabes cuánto deseo convertirme en lluvia en estos momentos...

 

Como deseo volver al día que ambos nos encontrábamos en la baranda mientras la lluvia nos empapaba poco a poco, después de nuestro primer encuentro con él...

 

Esa vez, fue la primera vez que disfrute de la lluvia, de mis cabellos mojados y sentirme completamente empapado...

 

...

 

...

 

Nee... Tsuzuki...

 

...

 

...

 

¿Sigues enojado?

 

{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}

 

Parada frente a la puerta de la habitación, con una charola en las manos, sopa caliente y un vaso con un poco de leche; esperando al señor Konoe para que la escolte; ayer, entrada la noche, le que le dijeron que no podría entrar al cuarto de Hisoka ella sola.

 

- ¿dónde está ese hombre? La sopa se enfría

 

Miró con algo de preocupación el caldo hecho a base de verduras, preparó la sopa con las hortalizas más frescas que pudo encontrar, esperaba que Hisoka coma aunque sea una sola cucharada; pero Konoe seguía sin aparecer.

 

-  No sera lo mismo si la recaliento

 

Se acercó a uno de los ventanales a manera de matar el tiempo, esperando que la sopa no se enfríe, contemplando los eternos árboles de cerezo cuyas rosadas hojas eran llevadas con el viento.

 

"¿Por qué un árbol de cerezo?"

 

"Porque los amos tienen gustos por ellos"

 

- ... Hina_sama...

 

- Chio_san

 

- ¡ah!

 

La dama hizo temblar un poco la charola, pero gracias a su buen equilibrio ésta no se derramó.

 

- lo siento, no era mi intención asustarla

 

Konoe le sonrió de una manera muy simpática, cosa que a la dama le causó un ligerísimo sonrojo.

 

- llega tarde, la sopa se enfría

 

- lo siento, tenía unos asuntos que atender- se disculpó llevando una de sus manos a su nuca- hmm... sopa de verduras, se ve delicioso

 

- lo estará más si la toma caliente, ¿entramos?

 

- sí, seguro

 

Ambos caminaron hacia la puerta, Chio tras Konoe el cual cogió la perilla para girarla y abrir camino hacia la oscura habitación, pero antes de entrar...

 

- disculpe si me entrometo... pero...

 

- ...

 

- ¿Quién es Hina_sama?

 

- ... era una mujer que conocí hace años... simplemente recordé algo sobre ella...

 

- hmmm... bueno, creo que ya podemos entrar...

 

Konoe cedió el paso a la dama, quien antes de entrar miró fijamente a Konoe para intercambiar unas palabras con él.

 

- ¿es todo lo que va a preguntar?

 

- no es todo, usted sigue siendo sospechosa en este caso, solo le doy el debido tiempo para que nos diga toda la verdad, cuando sea seguro

 

- ... le di mi palabra y pienso cumplirla, diré todo lo que sé... pero... en verdad...- presionó la bandeja, temblando- ... en verdad ¿puedo confiar en ese hombre?

 

- se lo dije una vez y lo volveré a repetir, Tsuzuki ama a ese chico, no lo dejará por nada; el error que cometió lo hizo por amor... solo que tomo el camino equivocado...- Konoe preparó un pergamino que sacó de uno de sus bolsillos, debía estar preparado, no sabía cómo reaccionaría Hisoka esta vez- por la forma en que actúa, querida Chio, me parece como una madre celosa de su hijo

 

- entremos

 

Y, haciendo caso omiso a las palabras de Konoe, la mujer entró a la habitación oscura.

 

Konoe suspiró para luego ir tras ella.

 

- Hisoka, tesoro, levántate

 

Fue el suave y cariñoso murmullo que se escuchó en la oscura habitación. Mientras que fuera de ella, el gatico mostraba sus dientes y garras, mientras su pelaje se le erizaba por completo, nunca entraría a esa habitación, nunca más lo haría.

 

{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}

 

- ¡agh! ¡Estúpidas muestras, no revelan ni una pizca, todo es lo mismo que las anteriores!

 

- calma, Zuo_san, ya encontraremos algo

 

- pero, Watari ¿¡No estás cansado!? ¡Revisamos una y otra vez y nada, todos tienen los mismos efectos! ¡Me voy a volver loco!

 

Los médicos forenses, inundados en cantidad de papeles, instrumentos de laboratorio y demás herramientas necesarias para el trabajo, revisando una y otra vez para dar con una pequeña pista que los lleve con el asesino.

 

- me rindo, Watari, iré por un café ¿quieres un poco?- sonriendo, Zuo se quitó la bata blanca para salir

 

- claro, con crema por favor

 

- ¡sí! ¡Lo que digas, Watari hermoso!- y salió corriendo

 

- ... gracias, creo...

 

Una vez solo, el shinigami sacó un pequeño CD que contenía material de sus propias investigaciones en los laboratorios de Meifu, insertó el disco en la computadora que trabajaba para poder comparar resultados. Comprobó las muestras que tomó de Hisoka con las de la última víctima, sus ojos se afilaron... coincidían.

 

Las marcas hechas en las de la víctima, eran las marcas de la maldición de Hisoka, lo más extraño era que no presentaba error alguno, como si la hubiese calcado... como si lo hubiese hecho por primera vez, era perfecto.

 

- ¡¿...?!

 

Un ruido lo asustó, se encontraba tan concentrado que se abstrajo completamente... extraño, siendo un shinigami notaría al instante la presencia de cualquier ser...

 

- ¿Zuo_san?

 

...

 

...

 

- ... ¿Zuo_san?

 

Se levantó para dirigirse hacia la puerta y salir a los pasillos, pero antes de hacerlo... el ruido, que parecía de algo rozando los tubos de ensaño como si fuesen campanillas, lo obligó a darse vuelta y dirigirse al lugar de donde provenía.

 

- qué raro, quizá sea el viento

 

Imposible, las ventanas estaban cerradas, solo se las abría cuando el trabajo se acababa y las muestras eran guardadas, para ventilar el ambiente.

 

... De nuevo, ese sonido... había alguien o algo en la habitación... Watari comenzó a avanzar, siguiendo los estantes donde reposaban las probetas, los tubos de ensayo y demás material... fue cuando se fijo en un rincón obscuro de la habitación... y creyó ver algo... algo que estaba acurrucado al rincón...

 

PUUM

 

La puerta se abrió de golpe

 

- ¡ah!

 

- perdona, no quería asustarte

 

- no, no importa- por leves instantes volteó para poder escuchar... el ruido desapareció por completo, y la esquina estaba vacía, tal vez el cansancio...

 

- disculpa ¿sabes dónde está Zuo?

 

- ... ¿eh? ¡Ah! Perdón, no te escuché, estaba distraído

 

Cuando el shinigami pudo enfocar la vista, vio a un hombre alto y esbelto, los cabellos azabaches en ondas le llegaban a los hombros con un mechón que caía elegantemente sobre su ojo izquierdo... estaba vestido con un terno plomo y encima una gabardina negra... Watari se sonrojó...

 

- disculpa, primero entro dando un portazo y encima ni siquiera me he presentado- llevó una de sus manos a su rostro para levantar el mechón que le impedía ver por completo, fue cuando Watari notó los preciosos ojos ambarinos- mi nombre es Alessandro Terranova, médico forense

 

- Yutaka Watari, un gusto

 

Ambos se saludaron con un apretón de manos...

 

...

 

...

 

- ¿pasa algo?- preguntó al ver al rubio inmóvil

 

- ... no, nada

 

Al estrechar su mano, Watari tembló, no sabía por qué... pero ese hombre lo ponía un poco nervioso, no de miedo, sino de respeto... sobre todo sus ojos, hermosos ojos ambarinos, pestañas largas y cejas negras como si hubiesen sido delineados.

 

- Watari, traje café con... ¡Ale ¿cuándo llegaste?!- Zuo por poco y suelta ambas tazas con café humeante y un pequeño sobre abultado que debía contener algunos bocados dulces para acompañar.

 

- hola Zuo, comiendo como siempre durante el trabajo

 

- jajaja, sabes que no importa cuánto coma, siempre tengo hambre; ¡ah! Veo que conociste a Watari, es el nuevo médico forense que nos ayuda en este caso  

 

- sí, ya nos presentamos- volteó para sonreírle al rubio que lo miraba como si de un completo fenómeno se tratase- pero, creo que no le caigo muy bien, es una lástima, eres en verdad precioso

 

- ¡Ale, que te quede claro que yo lo vi primero!- Zuo fue a pararse delante de Watari

 

Fue cuando el shinigami recordó el nombre de Terranova, estaba tan sorprendido y levemente asustado que lo olvidó por completo.

 

- etoo... entonces ¿tú eres el forense extranjero?- preguntó ya una vez repuesto e intentando que su voz suene segura.

 

- sí, estuve en Italia para arreglar unos papeles, el gobierno de mi país me pidió que continúe apoyando a Japón para resolver este caso, para ser más precisos, el estudiante italiano Maximilian Kohler era hijo de un peso pesado de las fuerzas armadas italianas y el padre no quiere quedarse de brazos cruzados.

 

- ¿era italiano? Por su apellido no lo parece- Watari ahora estaba algo sorprendido, no se había percatado de tan pequeño pero importante detalle.

 

- bueno, ahora debo preocuparme por resolver este caso y volver a Italia, espero que podamos llevarnos bien en el trabajo y quizá...- Ale lo miró de arriba abajo- ... quizá, tenga la fortuna de que me concedas una cita.

 

- ah... bueno... yo... Tatsumi, ayuda- el nervioso shinigami solo retrocedió unos pasos, en definitiva, Ale era amigable... pero tenía una presencia que denotaba autoridad.

 

- ¡Ale! ¡Te dije que yo lo vi primero!- autoridad que no afectaba en nada a Zuo.

 

- creo que debemos volver al trabajo Alessan...- Watari intentó calmar el ambiente tenso que se formó entre ambos colegas.

 

- dime solo Ale, es más fácil recordarlo, no te preocupes Zuo, en otra te invitaré a ti también.

 

- ¡no hablo de eso, suficiente!- se giró sobre sus talones y cogió la bata blanca que colgaba de una de las sillas- ¡volvamos al trabajo, Ale, tienes mucho para ponerte al día!

 

- sí, sí, lo que digas- se quitó la gabardina y el saco, para luego dirigirse a uno de los armarios, seguramente para colocar sus cosas en su respectivo sitio y prepararse para la investigación, Watari le siguió con la mirada

 

- ¡vamos, Watari!- Zuo volvió y lo cogió por la muñeca para luego arrastrarlo hacia su puesto de trabajo

 

- vamos, Zuo, ni siquiera he intentado robarle un beso- se quejó en tono lastimero mientras se colocaba la bata, Ale veía la escena con agrado y picardía

 

- ¡ya te dije que yo lo vi primero!

 

- Tatsumi, ayuda por favor...- Watari mantenía, como podía, una sonrisa nerviosa ante los nuevos sucesos.

 

{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}

 

- ¡¡ ¿Renunció?!!

 

- calma, Rin_chan

 

La muchacha golpeó la mesa con tanta fuerza que los comensales comenzaron a murmurar entre ellos y dirigiendo miradas para nada agradables a los jóvenes que se encontraban en la barra.

 

- sí, esta mañana solo vino a presentar su renuncia, dijo que no podría debido a problemas fam...

 

- ¡mentiroso, él sabía que hoy también vendríamos!- Rin apretó los puños con rabia- nunca debí creerle

 

- Rin_chan- Wakaba posó una de sus manos en el hombro de la muchacha

 

- disculpe, ¿no tiene alguna dirección o algo para que podamos comunicarnos?- Terazuma, por primera vez en su vida, trató cordialmente a una dama- es de suma urgencia contactarnos con él

 

- ... pues... etoo...

 

Mientras la camarera encargada hablaba con Terazuma, las dos muchachas decidieron ir a tomar asiento, no tardaron en ser atendidas por una simpática mesera que les sonrió como era su costumbre y luego proceder a tomar la orden.

 

- un té verde por favor y... Rin_chan ¿qué vas a...?

 

- café... café tinto

 

- enseguida- anotó lo debido y luego se fue en dirección a la barra

 

Una vez solas, la sacerdotisa miró con tristeza a la muchacha que estaba en frente suyo, con las manos en sus cabellos, agarrándolos con fuerza y tirando de ellos, estaba frustrada.

 

- Rin_chan...

 

- nunca debí fiarme de él, nunca debí creerle... nunca debí dejar a Kyouto_kun con él...

 

Necesitaba desahogarse, contar lo que sabía, no era algo que tenía relación con los asesinatos sino algo que le aquejaba...

 

- tranquila, seguro debe estar asustado, por eso él...

 

- ¡no!- nuevamente golpeó la mesa- ¡nada de esto hubiese pasado si yo...! Si yo...

 

- ...

 

Pasó un momento de silencio, mientras una tiraba de su cabello, la sacerdotisa pensaba las palabras de aliento que podría darle para que no se desanime...

 

- perdona...

 

- ¿eh?- Wakaba estaba algo sorprendida, la muchacha se disculpaba en apenas un susurro y, si sus oídos no le fallaban, intentaba contener sus sollozos

 

- je... sabes... estaba tan contenta por haberles señalado a Ryuka... la verdad es que yo soy la única que sabe... o más bien sabía de su relación...

 

- te... refieres a...

 

- al hecho de que eran novios, sí, yo era la única que lo sabía...- cubrió sus manos por su rostro para luego erguirse hasta que su cabeza chocó con el respaldar del asiento- nunca debimos dejar que escapara, debimos presionarlo para que nos lo cuente todo el día de ayer.

 

- dijiste que él era el único que la policía no interrogó ¿cierto?

 

- sí, tampoco lo delaté ante la policía, fui muy estúpida al hacer eso- su voz no podía oírse muy bien debido a que su rostro estaba cubierto por sus manos.

 

- Rin_chan

 

El silencio, otra vez, se apoderó de la mesa, la colegiala con ambas manos en el rostro parecía que no hablaría más, al menos, es lo que pensaba Wakaba.

 

Y los pensamientos de Wakaba no pudieron evitar la conversación de ayer.

 

Flash Back

 

Esperaron cerca de dos horas para poder hablar con él, la petición era simple...

 

"Dejen que acabe mi turno al menos"

 

Ryuka, que seguía en un estado nervioso considerable, atendió a los demás clientes con calma y cordialidad, pero estaba bastante tenso a la vista de los tres presentes.

 

Cuando por fin acabó la jornada laboral, Ryuka se dirigió a los vestidores, cambió sus ropas y luego salió para encontrarse con sus visitas, sus muy inesperadas visitas.

 

- te tardaste- regaño la colegiala- no lo vuelvas a hacer

 

- ... vamos a fuera, el lugar está por cerrar

 

Ryuka se alejó de la mesa y los otros se levantaron, al salir, vieron que el muchacho se acercaba a una máquina de esas que contiene diferentes jugos. Sacó jugo de manzana.

 

- Ryuka...

 

- ...- levantó la vista hasta toparse con la muchachita que, con una suave voz, lo llamó- ... hola...

 

- hola... mi nombre es Wakaba y él es Terazuma- analizó a ambos con la mirada.

 

- como ya saben, Arato Ryuka- respondió forzando una sonrisa- ¿son de la policía?

 

- ... no precisamente- Terazuma sacó un nuevo cigarrillo- solo queremos hacerte unas cuantas preguntas.

 

- ... entiendo...- había algo raro en su tono de voz ¿culpa o remordimiento? Tal vez un poco de ambas-  entonces... ¿por dónde empiezo?

 

- podría ser por la última vez que viste a Kyouto Okazaki- esta vez Wakaba empleó un tono más severo y frío.        

 

- ... fue como hace dos o tres meses...

 

- ¿tanto? ¿Por qué te separaste tanto de Kyouto_kun?- preguntó Rin un poco alarmada- ¿se pelearon o algo?

 

- je, pensaba que él te contaba todo... la verdad... es que rompimos...

 

- ¡¡ ¿Qué cosa?!!- la colegiala se acercó al muchacho y lo cogió del cuello para encararlo mejor- ¡Dices que rompiste con él así por así, mentira, no puede ser, él me lo habría dicho!...

 

- ¡no te lo dijo porque sabía que vendrías a echarme la bronca!

 

- ¡obvio que lo haría ¿cómo pudiste dejarlo? Sabías bien que estaba enamorado hasta la médula!

 

- ¡no tenía otra opción, dentro de poco tendré que ir a Alemania, sabes bien que fui becado para estudiar allá!

 

- él hubiese entendido, solo tenías que habérselo explicado.

 

- ...precisamente porque no entendió... de hecho fue él quien propuso romper...

 

- ... ¿qué?- la colegiala deshizo su agarre, retrocedió unos cuantos pasos con los ojos abiertos denotando confusión- pe... pero...

 

- Rin, no todo era miel sobre hojuelas... desde que me ofrecieron la beca, bueno... tenía que escoger y...

 

El tono de un celular se hizo presente, interrumpiendo la conversación, el muchacho sacó el aparato de uno de sus bolsillos, leyó el número de la pantalla y contestó de inmediato.

 

- mamá... sí, acabo de salir... seguro, puedo pasar por ahí camino a casa, no... no, no te preocupes, yo...

 

Se alejó un poco para poder hablar con un poco más de privacidad, les dio la espalda dando unos cuantos pasos, alejándose un poco cosa que los shinigamis aprovecharon para hablar con Rin que aun no salía de su asombro.

 

- Rin_chan... ¿Rin_chan?

 

- ... oye, reacciona, no es el momento para ponernos alterados- Terazuma la tomó del hombro.

 

- ah... lo siento... es solo que...

 

- disculpen- Ryuka se acercó al trío- ... etoo... ¿podríamos continuar mañana con la plática por favor? Mi madre acaba de llamarme y quiere que vaya por unas medicinas que mi abuelo necesita...

 

Rin, saliendo de su ensoñación, volvió a tomar la mirada fría que le dedico desde que le comentó que había roto con su amigo, pero a simple vista podía notarse que estaba temblando, de ira, de coraje... de tristeza.       

 

- ma... mañana, lo prometo- pese a que la conocía de tiempo, esa chica era la única a la que no podía enfrentar, algo en ella lo obligaba a bajar la mirada y sus defensas, aun no podía creer que Kyouto tenía una amistad estrecha con ella.

 

- Rin...

 

- mañana entonces... iremos al café... y tendrás que confesarnos todo- fue lo último que declaró la colegiala para luego girar sobre sus talones y caminar en sentido contrario.

 

End Flash Back

 

El enojo de la muchacha era evidente, demasiado, cuando la camarera les trajo el pedido, se tomó el café caliente de un solo trago, ignorando por completo cuan caliente estaba.

 

- Rin... Rin_chan, te dolerá el estómago... ¿...?- el celular de la sacerdotisa emitió el timbre de llamada, contestó sin prisa esperando que sean noticias sobre la investigación- hola, habla Wakaba.

 

- ¡Wakaba, te llamé mil veces!

 

- Mi... Miku_chan...

 

- ¡Nos veremos dentro de veinte minutos cerca al colegio Fuyuka, date prisa o Mirian_sama se pondrá furiosa!

 

- sí, claro, estaré allí.

 

- ¡No tardes!- y colgó, Wakaba se quedó con el celular pegado a la oreja ¿qué tan urgente era? Miku no es de las personas que se alteran fácilmente, lo que significa que Miri_chan estaba... molesta o muy emocionada.

 

- ¿quién era, Wakaba?- Terazuma se acercó a la mesa, con una sonrisa de oreja a oreja, cosa que hizo enfurecer a la colegiala.

 

- Miku_chan, tengo que verme con ellos dentro de veinte minutos, pero...

 

- no te preocupes, Rin y yo nos encargaremos de Ryuka- dijo mientras sacaba un pequeño papel del bolsillo, Wakaba y Rin miraron el trozo de papel con extrañeza a lo que Terazuma sonrió aun más si se podía- es la dirección de ese idiota.

 

- ¡¿cómo... cómo lo conseguiste?!- Rin se levantó de golpe y cogió el diminuto papel para leer la dirección una y otra vez.

 

- Terazuma...- la sacerdotisa miraba a su compañero como si estuviese tratando con otro ser, era sabido que Terazuma no tenía tacto con las mujeres, hoy se vivía un día histórico, Terazuma Hajime había logrado obtener el favor de una mujer.

 

- jajaja, me llevó tiempo, pero logré convencer a la encargada para dejarme ver los datos personales de ese muchacho- sacó el paquete de cigarrillos de su bolsillo, para luego llevárselo a la boca, siguió explicando mientras buscaba el encendedor- lo que en verdad me sorprende es que Rin no conozca la dirección de ese tipo.

 

- Kyouto nunca quiso dármelo por más que le obligaba o amenazaba, nunca lo hizo, fue por eso que le quite la agenda pero no pude ver nada porque él no dejaba de perseguirme- se colocó el saco del uniforme y se arregló el cabello- ¿nos vamos?

 

- etoo... Rin_chan, el colegio, ya pasó el primer periodo...

 

- faltaré, no es importante por ahora, no te preocupes que me las arreglaré, Wakaba- la colegiala le regaló una sonrisa, ahora se la veía llena de energía- después de todo tú tienes que ir donde esa tal Miku, yo y Terazuma iremos a ver a Kyouto para hablar y darle una paliza por no cumplir su promesa.

 

- tra... trata de no lastimarlo mucho por favor, Terazuma, cuida de ella- ahora estaba un poco más tranquila, pero no debía bajar la guardia, debía cuidar que Rin no se meta en algo peligroso por ayudarles.

 

- sin problema, vámonos.- Terazuma encendió su cigarrillo para luego caminar hacia la salida.

 

Salieron del café y tomaron caminos distintos, Wakaba vio como, Rin y su compañero, cruzaban la calle para luego perderse entre las personas que transitaban.

 

Pero, la preocupación aun agolpaba sus ideas, se supone que para un shinigami el involucrar personas era demasiado riesgoso, ahora ya tenían a bastantes personas, Rin, el jefe Iruka, el compañero de Watari, Miri_chan, Miku, Kyo; esperaba no involucrar a nadie más, sobre todo si el sospechoso y culpable llega a ser Muraki, ese humano era demasiado peligroso. Ese hombre despiadado que había hecho daño a Tsuzuki y a Hisoka.

 

- Hisoka... aun no le dije a Tsuzuki que vi a Hisoka, pero ¿en verdad era él? ¿Fue Hisoka el que me dio la agenda de Kyouto_kun?... aquello que vi ¿era en verdad Hisoka?

 

Demasiados pensamientos, demasiado misterios y dudas, lo que pasaba por la cabeza de la muchacha eran preguntas y más preguntas que esperaba responder pronto. Caminó hacia un callejón, miró a todas las direcciones para asegurarse que nadie la viera, una vez segura el área, cerró los ojos y desapareció, su destino, el colegio Fuyuka.

 

{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}

 

- ¿sabe usted dónde se encuentra su hijo en estos momentos? ¿Sabe si volverá directo a casa o tomará un atajo para cortar camino? ¿Sabe si está con sus amigos y todos ellos están en los videojuegos?

 

Cambió de canal...

 

- la policía aun no ha dado una clara explicación acerca de los muchachos asesinados, se especula que...

 

Cambió de canal...

 

- ¿entonces la policía no encontró pistas?

 

- al parecer, la policía está más perdida que a un principio, lo único que pueden hacer por el momento es tomar medidas preventivas.

 

- entonces, eso explica la seguridad impuesta en los establecimientos educativos.

 

- precisamente, por eso...

 

Apagó el aparato... todos los canales hablaban de lo mismo, los asesinatos de los cuatro jóvenes, de los ojos que se les eran arrancados, a ese paso era más que seguro que los shinigamis ya estaban buscando su rastro. El doctor sonrió, satisfecho, tal vez así pueda ver al shinigami de ojos amatista, aunque sea una vez, pero dudaba poder compartir un té con él, como ocurrió en Nagasaki, cuando lo obligó a pasar la tarde con él, y Tsuzuki accedió solo para poder rescatar al mocoso impertinente... Muraki sabía desde ese momento que Tsuzuki estaba enamorado de ese mocoso, escogió al muchacho que, no podía negar, era hermoso en todos los aspectos... odiaba a ese criajo, lo odiaba.

 

Pero, ahora...

 

- hn...- la puerta que conectaba a la sala principal se abrió despacito, para luego mostrar un muchachito con un yukata de color blanco como la nieve, el obi que lo acompañaba era rojo, sus cabellos de trigo y los ojos cerrados dejando ver las largas pestañas, su piel delicada y suave a simple vista- despertaste ¿tomaste tu medicina?

 

- ...- asintió más de una vez.

 

- ¿tienes hambre?

 

- ...- negó más de una vez.

 

- ¿aun tienes sueño?

 

- ...- esta vez no hizo movimiento alguno.

 

- ¿Hisoka?- se levantó del cómodo sillón donde se encontraba y se acercó al muchacho, una vez frente a él lo miró de arriba abajo- creo que debería hacerte una revisión... ¿hn?

 

Tomó con delicadeza el brazo derecho de Hisoka, lo levantó y corrió las mangas del yukata a la altura de los codos. Hizo una mueca, en el delgado brazo, desde la muñeca hasta casi llegar al codo, había un moretón, el color entre morado y verde no se definía, pero aun así...

 

- lástima, hiciste un excelente trabajo- llevó sus manos al rostro del muchacho y lo obligó a alzar la mirada- creo que puedes resistir un poco más, Hisoka.

 

- ...

 

No hubo respuesta.     

 

{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}

 

- ¿ya te vas, Tsuzuki?- Konoe miraba al de mirada amatista a las puertas del edificio ocupado por los shinigamis.

 

- me ausente demasiado, debo tomar responsabilidades y no puedo dejarle a Tatsumi todo el trabajo- dijo con una sonrisa mientras buscaba sus gafas de sol- me encontraré con ellos dentro de media hora e intercambiaré lugar con Tatsumi, espero que el Jefe Iruka no haya sido muy duro.

 

- tranquilo, Tatsumi sabe como arreglárselas y Watari debió ayudar- rió el jefe al notar la preocupación de su hijo mayor.

 

- bueno, como estamos en distintas áreas designadas no vemos mucho a Watari, no creo que hayan tenido tiempo de verse; las encontré- se colocó las gafas y luego prosiguió a colocarse la gabardina negra- y... quiero acabar con esto lo más pronto posible...

 

Konoe soltó un suspiro, la situación de Hisoka había alterado a todos y más que todo lo que pasaba últimamente, el muchacho había decaído, la fiebre era alta y no bajaba, su comportamiento era hostil, atacaba a todo aquel que intentaba acercarse... incluso a la señora Chio que en la mañana fue a darle un poco de sopa de verduras; Watari no tuvo otra opción que sedarlo e implementar sueros para asegurarse que obtenga las vitaminas y proteínas necesarias, aun así, el cuerpo de Hisoka continuaba desmoronándose a paso acelerado. En definitiva, Hisoka había dejado de ser Hisoka, eso es lo que pensaban.

 

- me voy, jefe, cuide a Hisoka de mi parte.

 

- ¿no te despedirás de él?

 

- ya lo hice, hace poco pero estaba dormido, tampoco pude acercarme lo suficiente debido al kekkai; cuídelo de mi parte por favor, volveré tan pronto como me sea posible.

 

- cuídate, Tsuzuki, yo también trabajaré aquí y les informaré cualquier cosa- ambos compartieron una sonrisa, una para darse fuerza y ánimo, luego, Tsuzuki se fue.

 

Konoe se quedó solo, o eso parecía.

 

- no está bien espiar las conversaciones ajenas, Conde- giró sobre sus talones y miró fijamente una esquina, se escucharon aplausos.

 

- no importa cuánto me esfuerce, Konoe, usted siempre da conmigo- la máscara y los guantes se acercaron al mayor para quedar lado a lado con él- así que Tsuzuki ya está mejor ¿verdad? El ataque que recibió de Hisoka me sorprendió, nunca pensé que ese principiante pudiese hacer algo así.

 

- ese ataque como usted le llama, no es conocido por ninguno de nosotros, es más, no lo calificamos como una técnica de combate.

 

- ¿entonces qué es?

 

- ... no lo sé.

 

- hn... bueno, Konoe, yo puedo ser de cierta ayuda para darle un nombre al ataque de Hisoka- ambos se miraron y el conde notó la mirada seria y recelosa de Konoe hacia él- acompáñeme, hay algo que le parecerá muy interesante.

 

- ¿qué es?

 

- es mejor que se lo muestre a que se lo explique, el Rey Shinkô acaba de mostrármelo esta mañana y...

 

- ¡¿los cuatro reyes están metidos en esto?!- esta vez Konoe ser alteró, él mismo había pedido una audiencia para hablar con os ancianos y los reyes, cosa que no le fue muy bien, solo le dijeron cuanto de tiempo le quedaba al shinigami, este noticia podría ser en verdad de gran ayuda.

 

- solo el Rey Shinkô, los demás se mostraron por demás recelosos de brindar información, sin embargo aun no saben a lo que se enfrentan ¿se imagina, Konoe? Los Reyes están confundidos, no solo los cuatro, los nueve reyes en total están preocupados y eso es decir mucho.

 

- y... ¿y Enma?

 

- Enma no ha hecho presencia desde tu visita, Konoe, se encerró en su palacio y se niega a salir, lo único que sabemos, tanto tú como yo, es que dijo que tomaría este asunto con sus propias manos ¿nos vamos ahora?

 

- ... bien.

 

Ambos salieron de la estancia, para dirigirse al salón de las velas, ahora Konoe estaba el doble de preocupado que antes, todo esto era un verdadero lío y ni siquiera sabían por dónde empezar a buscar a su principal sospechoso, estaban con el reloj en contra.

 

A decir verdad, el tiempo dependía de cuanto podrían mantener con vida a Hisoka, y las esperanzas ya comenzaban a menguar.

 

{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}

 

- Wakaba ¿me escuchas? ¡Wakaba!

 

- ¡ah! Lo siento Mirian_sama

 

- ya te dije que es Miri_chan, como sea, ya te pusimos al tanto ¿entendiste lo que hay que hacer?

 

- claro que entendió ¿no ves lo sorprendida que está?- aclaró Kyo mientras alistaba una de sus filmadoras y lo colocaba junto con el demás equipo.

 

- en algo que recopilé de casualidad, lo que me llamó la atención fue que esas chicas afirman que las víctimas lo jugaron- explicó Myku mientras revisaba su libreta de apuntes.

 

- bueno, bueno, vamos a trabajar, el que consiga más información recibirá un bono- dijo entusiasta la pelirroja para luego continuar, buscando con la mirada a Wakaba- ¿te sientes bien querida? Estás un poco pálida.

 

- no, no es eso... es solo que...

 

- Wakaba le tiene miedo a los fantasmas ¿verdad?- Kyo pasó un brazo por los hombros de la sacerdotisa- no te preocupes, estás conmigo y nada va a pasarte.

 

- lo dice el que se asustó cuando vio el cuarto de escobas y...

 

- ¡solo pasó una vez y además estaba muy oscuro!- interrumpió a Myku que junto con Mirian se puso a reír.

 

- te contaremos esa historia otro día, Wakaba, ahora solo ponte a trabajar- bajaron de la camioneta que los transportaba, Mirian se fue con Myku y Wakaba con Kyo.

 

- vamos Wakaba, obtengamos ese bono.

 

- s... sí...- la shinigami estaba demasiado exaltada, asustada. Apenas llegó y Mirian le informó sobre el juego "SokaSoka" o "HisokaHisoka" eso bastó para alterarla, aun no podía sacarse de la cabeza la silueta que vio en la casa de Kyouto, peor la sensación que tuvo, desde ese entonces sentía que algo la seguía, pero sabía bien que solo eran sus nervios. Ahora pensaba en las víctimas ¿el juego tenía en verdad relación con ellas? ¿Tenía relación con Hisoka, era por eso el nombre del juego? Y si todo era afirmativo, entonces ¿Hisoka era el asesino? No, eso no podía ser, no podía ¡Era imposible!

 

- ¡No puede!

 

- ... ¿Wakaba?

 

La muchacha se paró en medio del parque que estaba antes de llegar al colegio al que debían ir a hacer la entrevista, había gritado lo que pensaba, al menos la última parte, su corazón latía a mil por hora y su respiración era acelerada, los ojos abiertos y su piel palideció.

 

- ¿Wakaba, estás bien?

 

- ... perdona, Kyo_kun... estoy un poco nerviosa, eso es todo- intentó forzar una sonrisa para calmar a su acompañante el cual le devolvió el gesto.

 

- no te preocupes, la primera vez es aterrador, créeme, pero lo harás bien y después disfrutaremos del bono que nos dará Miri_chan.

 

- sí, gracias.

 

- de nada, ahora vamos antes que los estudiantes de ese colegio se nos escapen, tal vez encontremos a unos cuantos jugando a ese juego.

 

- sí... tal vez.

 

Si eso iba a encontrar, no dudaría y actuaría como la shinigami que es... por el bien de Tsuzuki y por el bien de Hisoka.

 

{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}

 

- ¡Tsuzuki!

 

- Wata... ¡aaahhh!- Watari se colgó del cuello de su amigo para luego comenzar a abrazarlo muy fuerte- ¡ya estás mucho mejor!

 

- sí, gracias Watari.

 

- lo estás asfixiando, Watari- Tatsumi caminó hacia ellos con paso calmado pero con cierta molestia en sus ojos, eran celos, tomó a Watari por su cintura y lo atrajo hacia él- que bien, ya estás mejor, Tsuzuki.

 

- hola Tatsumi, siento haberme tardado ¿tuvieron algún problema?- preguntó mientras intentaba recuperar el aire perdido.

 

- ninguno, solo debes ponerte al día con la investigación, no avanzó mucho, las pistas no llegan a dar cosas concretas.

 

- en el laboratorio también hay problemas, pero puede que llegue a algo, saque unas cuantas pruebas y las tendré listas esta tarde- Watari se zafó del agarre de Tatsumi con cuidado, la verdad era que las personas ya comenzaban a verlo y... estaba un poquito incómodo.

 

- cuento contigo, Watari- el de mirada amatista sonrió un poco más tranquilo- Tatsumi, yo me haré cargo ahora, gracias por todo.

 

- estaré con ustedes en cuanto pueda, trabajaré un poco más con Konoe para sacar toda la información que necesitemos- se acomodó las gafas para luego, de un rápido movimiento, tomar la barbilla de Watari, para acercarse y besarlo, fue corto, fue rápido... pero causó un tremendo sonrojo al científico, sabía bien que besarlo en público era lo que más le  molestaba al peli largo- nos vemos.

 

- ah... nos vemos- Tsuzuki se despidió de su amigo para luego verlo desaparecer entre el gentío- etoo... Watari...

 

- ...- Watari estaba más rojo que un tomate y tenía la mirada oculta entre sus cabellos- Tsu... Tsuzuki, ya se nos acaba el tiempo del almuerzo, de... debemos volver.

 

- cla... claro ¿estás bien?

 

- ... vámonos- y se fue a paso apresurado. Tsuzuki sonrió, pese a lo extrovertido que solía ser Watari, en situaciones como esta no sabía cómo reaccionar, además se lo veía tan lindo sonrojado, él se preguntaba ¿cómo reaccionaría Hisoka si él lo besara? ¿Cómo sabrían los labios de Hisoka?

 

Pero... es verdad... él e Hisoka... ya se habían besado.

 

- ¡vámonos, Tsuzuki!

 

- ¡ya voy!

 

Flash Back

 

Fue su culpa, él lo llevó a beber para festejar el éxito de otra misión, pero ¡oh, detalle! Hisoka no era bueno con el alcohol y a la tercera copa ya se encontraba completamente ebrio, eso lo divirtió en sobre manera, pero luego comenzó a molestarse por las miradas de otros clientes que caían en el joven shinigami, miradas que podían calificarse de ternura hasta de deseo y lujuria, las últimas comenzaron a notarse más. Tsuzuki tomó a Hisoka en brazos y lo sacó del lugar.

 

Osaka, la ciudad iluminada de Japón, las luces estaban encendidas las veinticuatro horas del día, nunca se apagaban, los farolillos rojos le daban un toque tradicional y los adornos de las calles hacían que todo fuese tan acogedor.

 

- hn... Tsu... Tsuzuki...

 

- Hisoka ¿cómo te sientes?- afortunadamente, se encontraba no muy lejos de un mirador, el cual tenía bancas para descansar, acostó a Hisoka en una de ellas y lo cubrió con su gabardina.

 

- me duele... la cabeza, quiero dormir... dormir...- nuevamente, cerró los ojos.

 

- je, no te preocupes, te llevaré al hotel- acarició los cabellos color trigo, esa escena la vivió antes, cuando se conocieron, el recuerdo momentáneo le causó una sonrisa, se acercó a Hisoka con la intención de besar su frente, pero...- ¡...!

 

No contó con que Hisoka iba a levantar sus brazos para abrazarlo y atraerlo cerca de su rostro, los ojos esmeraldas se abrieron a pesar de encontrarse adormilados, encontró a los ojos amatistas que lo veían con... adoración.

 

- es por el sake, está actuando así por el sake, por el alcohol, Hisoka está... Hisoka está...

 

Los pensamientos de Tsuzuki se ofuscaron ante la hechizante mirada esmeralda, los labios de Hisoka estaban entre abiertos, sus ojos adormilados y sus hermosos cabellos eran hondeados por la brisa nocturna.

 

Tsuzuki comenzó a acercarse al menor, sus respiraciones se fundieron, ambos cerraron los ojos... y sus labios se encontraron en un suave beso... las luces de la ciudad desaparecieron, dejaron de escuchar el ruido de las calles, solo estaban ambos y ese beso, solo los dos, pero, el agarre de Hisoka comenzó a menguar, primero cayó un brazo, cosa que le dio tiempo a Tsuzuki para sostenerlo, el mayor poso una de sus manos en la nuca del menor y la otra en su cintura para levantarlo un poco, para no romper el beso. Los labios de Hisoka sabían a Sake de cerezo, le encantaba, le embriagaba... pero... el beso no duraría para siempre, por más que quisiera, se separó del menor lentamente... cuando lo observó mejor, notó que Hisoka se había quedado dormido, rendido a causa del sake que ingirió.

 

Tsuzuki sonrió, había besado a aquel que tanto deseaba, pero por desgracia no podía tener, mantener a Hisoka a su lado era condenarlo, lo amaba más que a cualquier cosa en este mundo o en el otro, pero no podía tenerlo a su lado, no podía condenar a alguien que ya había sufrido demasiado.

 

Tomó de nuevo a Hisoka en brazos y se dirigió al hotel, lo acomodó en su cama y él se fue a dormir a la suya, con lo que pasó en el mirador no podía sacarse la sonrisa de la cara, claro que no pudo dormir, pensando en Hisoka y en lo maravilloso que habría sido si el shinigami menor hubiese correspondido al beso. Al día siguiente, Hisoka tenía una resaca de cinco estrellas, Tsuzuki agradeció que el joven shinigami no lograba recordar lo que pasó la noche anterior.

 

- mejor así...

 

- ¿dijiste algo, Tsuzuki?

 

- no, nada ¡vamos a desayunar!

 

- ¡no grites!

 

- go... gomenasai...

 

Fin Flash Back

 

Claro que... fue un beso robado a un muchacho que se encontraba confundido a causa del alcohol.

 

{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}

 

El viejo almacén donde se encontraban las cosas para las clases de educación física era el lugar ideal, nadie iba a ese lugar por las tardes, aprovecharía ahora para hacerlo de nuevo, el otro día debió equivocarse por eso paso nada, pero ahora estaba más seguro.

 

- se coloca el espejo delante y luego...

 

Acomodaba las cosas que necesitaba para jugar, debía ser muy cuidadoso ya que no quería equivocarse por segunda vez, aunque no estaba muy seguro sobre en que se había equivocado la semana pasada.

 

- listo...

 

Debía admitir que se encontraba nervioso, no era chico al que se le podía llamar valiente después de todo, pero... pero... El dolor era demasiado, quería deshacerse de él a como dé lugar. Sacó la libreta donde se encontraba la pequeña oración que debía recitar, la leyó un par de veces para memorizarla, luego la cerró y se concentró en lo que debía hacer.

 

- "Aquello que lastima mi corazón, aquello que no me deja ser feliz... aquello que..."

 

Y comenzó el juego "SokaSoka".

 

{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}o{}{}{}

 

"SokaSoka"

 

¿hn?...

 

"SokaSoka"

 

Me llaman... me están llamando, Tsuzuki, alguien me llama... es una voz joven y muy dolida, casi tanto como yo...

 

"SokaSoka"

 

Está sufriendo, como yo...

 

"SokaSoka"

 

Está solo... como yo...

 

"SokaSoka"

 

Y está con el corazón roto... casi como yo... mi corazón, hace mucho que no lo escucho, no late ni brinda calor, en este lugar no hay calor, Tsuzuki, no hay luz. Odio este lugar, lo odio, pero... es el único lugar donde puedo estar... ne, Tsuzuki ¿podrías venir aquí? Solo una vez, solo te pido una vez, o importa si no me hablas, me conformo con verte solo una vez, no te pediré más...

 

"SokaSoka"

 

Me llaman, me llaman, me están llamando, Tsuzuki... me están llamando...

 

"SokaSoka"

 

Me llaman... me llaman... ya voy... me duele todo el cuerpo, pero aun puede moverme... ya voy, te ayudaré a recuperarte, te ayudaré a que tu corazón ya no esté adolorido, te ayudaré, te ayudaré...

 

"SokaSoka"

 

Te ayudaré, así no sufrirás más... te ayudaré...

 

"SokaSoka"

 

Y así... y si ayudo a las personas... si las ayudo...

 

"SokaSoka"

 

¿Podré verte una vez más, Tsuzuki?

 

"SokaSoka"

 

"SokaSoka"

 

"SokaSoka"

 

...

...

...

 

Continuará...

Notas finales:

Bien, acepto de todo: Críticas, felicitaciones, amenazas, bombas, cuchillazos, chocolates, arañas, sapos, dulces, ajos o cebollas...

En verdad que me esmero en escribir los capítulos,aunque la inspiración no siempre quiere colaborar ¬¬, pero en fin, espero que les haya gustado y por favor dejen comentario para saber que tal lo hago... Y si quieren saber algo con más detalle, pueden escribir a mi correo:


Sayuri_De_Vais@hotmail.com

Decidí habrirlo en Hotmail porque creo que la mayoría lo tiene ahí, si quieren escriben cartas, ^^ me alegraría mucho.

Bueno, nos Vemos Lectores Míos, un abrazo y un beso a la distancia.

Atte.

Sayuri De Vais.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).