Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Taiyou no Namida por katzel

[Reviews - 75]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Sawa descargó debilmente su puño cerrado sobre la cabeza de Katou.

- ¡Aho! (Tonto), cómo se te puede ocurrir una cosa así... estás demente...

- Es por Kyosuke...

- ¡Te crees que es tan fácil llevarse al heredero! ¡Has nacido ayer...!... oh dioses... la fiebre realmente te ha hecho daño.

Ahora Sawa le iba tomando la temperatura.

Yukihito reprimió una risita.

- Sawa aún no se da cuenta de las verdaderas intensiones de Katou.

- ¿Eh?

- No es sólo un capricho de Katou... la vida del señor Iwaki corre peligro... eso lo sabemos bien...

- No dejaré que nada malo le suceda... así que preparémonos para mañana... - dijo el rubio entrecruzando los dedos.

- ¡Mañana!... - casi gritó Sawa

- Si... mañana... puedo contar contigo...

- Peero... Katou, recapacita, si no lo logramos será el fin de todos nosotros... nos colgarán... no, primero mi ama nos mandará a freír en aceite y luego nos quemará... sabes lo que estás pidiendo...

- Lo sé... y sé que se lo estoy pidiendo a alguien de gran corazón... onegaii

- Mph... todo sea por que eres un dios rubio... pero pierde un poco de tu belleza y no cuentes conmigo nunca más.

Yukihito levantó la mano.

- ¡Yo también colaboraré con Katou!

Los tres se abrazaron sellando así una promesa.

Luego el rubio bajó la voz.

- Esta noche necesito hacer una visita...

----------------------------------------------------------

Iwaki se cepillaba los cabellos frente al espejo.

Antes era Katou quien lo hacía por él.

Pero ahora que no estaba no podía permitir que otro lo tocase.

Recordaba cuando por casualidad los dedos de su esclavo tocaban la blanca piel.

Se le antojaba ahora sentirlo deslizándose... cómodamente... hacia el cuello... ir bajando...

- ¡No!

Se detuvo y arrojó el peine lejos de sí.

Ya sabía donde terminaría eso...

Él, enredado entre las blancas sábanas, complaciéndose a sí mismo y pensando en Katou.

Intentaba evitarlo a toda costa.

Oleadas de calor atravesaban su cuerpo ruborizándolo.

"Estoy enfermo de amor..."

----------------------------------------------------------

Una sombra entró sigilosamente a la habitación acercándose a quien dormía.

Esgrimía una kodansha ligera y con el filo preparado.

Al destapar el futón, retrocedió.

Sawa estaba allí muy despierto.

- Que pasa... esperabas a Katou, sorpresa, él no está.

Yukihito cerró la puerta con la tranca.

- Buenas noches, señor, disculpe que sólo estemos nosotros.

El asesino embozado con un manto negro midió por un segundo a sus contrincantes.

Sawa se puso en pie ágilmente sacando un cordel fino.

- Lo que más odio de tipos como tú es que sacan lo peor de mí... justo cuando soy un fino estilista... qué no podríamos resolver esto con buenos modales...

El intruso atacó siendo evadido a duras penas por el joven.

Yukihito se ocultaba en la esquina de la habitación incapaz de hacer nada más.

Sawa logró rodear a su enemigo con el cordel.

Sin embargo se liberó con el largo puñal, tomó a Yukihito de escudo y salió por la ventana.

En vez de ir a perseguirlo el estilista prefirió ayudar a Yukihito.

- Te encuentras bien...

- Um... pero se ha ido...

- Tengo una idea de a dónde...

En ese momento el rostro de Sawa estaba diferente, muy serio y hermoso y al pintor le pareció encantador.

Como recordando su papel, el joven volvió a la expresión risueña y despreocupada de siempre.

- Regresemos... ojalá que a Katou le vaya bien en su entrevista nocturna.

Abrigó a Yukihito con una manta y lo llevó de vuelta.

- Oye Sawa... - dijo él muy bajo - ... quién eres tú...

--------------------------------------------------     Justo a la hora del cambio de guardia un joven y extraño soldado entraba a los aposentos del Señor Iwaki.

Logró deslizarse tras las columnas y trepó por el balcón de madera.

Leyendo y repasando algunos manuscritos, el padre de Kyosuke aún seguía levantado.

Su mano hábil para la caligrafía se movía en trazos perfectos.

- Diga quién es y qué quiere - dijo sin levantar la vista y prosiguiendo con su tarea.

- Soy yo... amo - el joven se arrodilló en el piso inclinándo su cabeza en varias reverencias.

- Katou... hay maneras menos sacrificadas de venir a verme... pero si has elegido esta es por que algo sucede en la casa... algo que nadie más que tú se atreve a contarme.

- Mi señor, mil veces bendecido...

- Basta de títulos... acércate... y dímelo...

- Señor Iwaki... alguien está armando un complot en contra de Kyosuke... ejm...deeeel joven amo... han intentado matarlo.

Apenas oído esto se levantó.

- ¡Qué!...

- Así es... están intentado acallar este asunto por la boda del amo... pero si no hacemos algo le asesinarán...

- Sasame lo sabía... mi esposa ha preferido poner en peligro su vida con tal de no arruinar esa ceremonia... qué fría... y qué inhumana... veremos hasta donde es capaz de llegar... ahora retírate...

------------------------------------------------     Kyosuke estaba a punto de sucumbir a sus pensamientos.

El aire frío de una rendija de la ventana abierta le hizo volver un poco en sí.

Se miró nuevamente al espejo y tras de él vio el rostro de Katou.

"Estoy... cayendo en la locura..."

Cuando sintió el beso cálido depositado en su cuello sintió ganas de gritar de placer.

- Por lo visto... no puedes dejar de pensar en mí - le dijo Katou mientras mordía el borde de su oído.

- Katou... pero...

- Pero nada... hoy nos interrumpieron en la cascada, estábamos en medio de algo importante.

- ... detente... para qué has venido... por qué...

El rubio le hizo girar quedando delante suyo.

- He venido por que tu cuerpo me llama.

- Siempre diciendo tonterías... yo...

No lo dejó terminar y se colocó encima de él besándolo y jugando con su cintura.

- No es una tontería decir que te amo...

Mordió su pecho succionando las partes más sensibles de su amo que reprimía los sonidos placenteros que esto le causaba.

- Katou... unm...

Estaba bajando cuando el pudor hizo que el heredero intentara alejar a Katou de su cuerpo.

Éste, abrazó a Iwaki echándose sobre él en el futón.

- No te preocupes, no he venido por tu virtud... el día en que tú y yo nos unamos, será luego de haberme comprometido ante las leyes de los hombres y los dioses a ser tu hombre por la eternidad... y luego de ese día nadie podrá separarnos... así sera, Kyosuke, y no antes... yo voy en serio contigo.

Luego de darle un beso en la frente se separó de él.

- Debo irme, la noche avanza y pronto será de madrugada, hasta entonces, ya nos veremos...

Iwaki se derritió en un suspiro.

"Cómo te atreves a dejarme así... completamente excitado e irte... siempre has sido un baaka... Katou..."

Sonrió pensando en cómo había respetado su pureza.

"Si hubieses insistido me habría entregado a ti... ambos lo sabemos..."

Luego cubrirse bien se quedó tendido sin ganas de nada.

"Por qué me haces sentir como un adolescente inseguro... no tienes derecho a avergonzarme así..."

-------------------------------------------

Sawa se despertó con Yukihito echado en sus brazos.

Se habían dormido sobre el futón esperando a Katou.

El estilista lo colocó extendido para que descansara y fue a ver a su ama. Estuvo tentado de besarle pero a duras penas se reprimió.   Fue al pabellón de las Damas.
 La señora de la casa estaba con el ceño fruncido.
- Buenos días ama...

- Anoche - empezó ella -...

- Anoche mandó uno de sus asesinos a que exterminara a Katou... si no fuese por Yukihito, su hombre estaría muerto... por favor, no me haga cometer un acto tan horrible como ese ante sus ojos... es un niño puro y sensible, no mataré a nadie frente a él.  - Sawa... veo que has olvidado tu juramento de fidelidad.

- No, yo dije que protegería a Iwaki Kyosuke, su hijo y el heredero, de todo lo que le hiciera daño, y Katou... no es una amenaza para él, todo lo contrario...

- Mucho cuidado, Sawa, no interfieras conmigo... puedo autorizar a Urushisuki y sus métodos si sigues tomando decisiones absurdas, sabes lo efectivo que es mi hijo en esos aspectos...

El joven se sumió en un reflexivo silencio.

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).