Después de muchas horas de pasión y amor desenfrenado, los esposos Uesugui-Shindou finalmente dieron por superada su primera rencilla de problemas matrimoniales, rendidos de cansancio y dormidos uno muy junto al otro esperaban el amanecer que llegaría en poco más de una hora… sin duda que K tendría que ir a despertar al pelirosa y romper la bella atmósfera de ese nido de amor… en cuanto a suguru y a ryuichi ambos seguían dormitando preparándose para el día siguiente en el que suguru alistaría sus cosas para mudarse a su nuevo hogar, junto a él.
Continuara…
Capítulo19: “Y la vida pone obstáculos… difíciles de pasar”
3 semanas después…
Había pasado casi un mes desde el cumpleaños de Suguru, unas semanas bastante ajetreadas llenas de giras improvisadas y ensayos había sucumbido a los integrantes de Bad Luck, por ende Ryuichi apenas podía ver a su niño de ojos marrón y eso lo frustraba, sabía que tohma lo hacía a propósito para agotar a su pequeño de modo que cuando llegara la noche éste no quisiera intimar con él, pero ocurría lo contrario, se morían por estar juntos aun si solo charlaban un poco o se arrullaban disfrutando de un buen baño de espuma, cada momento, inclusive el desayuno era recibido con felicidad.
Aquellos arranques pasionales a veces solían darse con tan solo mirarse un poco al cruzar el pasillo o en plenas salidas a terreno donde supuestamente Bad luck grabaría su nuevo video… ahí en el bosque, lejos de las cámaras y a gente daban rienda suelta a sus pasiones soportadas arduamente bajo la presión laboral.
Como presidente de NG Tohma no tenía ya la paciencia para seguir sonriendo, su estado anímico caía cada vez más bajo y las pobres secretarias huían despavoridas al ver su semblante, ni siquiera se atrevían a preguntar que le pasaba, pero sin duda el más perjudicado con la actitud de Seguchi era Sakano, él siempre tan leal y servicial tenía que aguantar el estrés de su jefe, ya no le quedaban dedos para contar las veces en que lo echaba despectivamente de la oficina o las veces en que en un arranque de ira terminaba estrellando la taza de café contra el muro y luego con su elegante sonrisa le pedía que lo limpiara… el pobre hombre desilusionado se repetía una y otra vez por qué diablos seguía trabajando allí, afortunadamente la sonrisa y gentileza de Suguru le tranquilizaba y le devolvía la esperanza…
Si, Tohma estaba perdiendo los estribos, no solo por ver que el amor entre Ryuichi y su primo crecía cada vez más, sino por que aún no recibía noticias del encargo que le pidió al misterioso hombre.
Ahora como integrante de Nittle Graspper Tohma sinceramente estaba mucho peor… ya no podía controlar las ganas de borrarle cuanto rastro de felicidad a Sakuma, envidiaba esa sonrisa genuina y quería eliminarla… pensaba justamente en eso cuando en medio del ensayo falló en una de sus notas, Ryuichi frunció el ceño en la mitad de la canción y se giró a mirarle con frialdad, Noriko también se vió obligada a parar de tocar.
-Tohma si vuelves a fallar me voy y no vendré a ningún ensayo en lo que reste de la semana…-habló en tono serio.
-pues lárgate si quieres-respondió tajante el rubio mientras Noriko comenzaba a mirarlos como si fuera un partido de tenis.
-muchachos basta ya… parecen un par de críos… ¿en donde quedó su lado profesional?
-¡Noriko tiene razón na no da! To-chan debería dar el ejemplo… ¿verdad kuma-chan?-dijo inocentemente provocándole más si podía y de mala gana el rubio se puso a tocar, aunque mucho más por inercia que por gusto…
-¡¡¡¡NO NO NO NO NO NO NO Y NOOO!!!!!! ¡ASÍ NO!... ¡tiene que ser como lo hace Sugu-chan, si no Ryuichi no cantará na no da!-expresó con voz berrinchada.
Tohma simplemente se mordió el labio con ganas de partirle la cara de un puñetazo, contó mentalmente hasta 10 y respiró profundo volviendo a tocar esta vez con un poco más de normalidad, pero Noriko y Ryuichi seguían pensando que el acople se oía algo dispar de lo normal… el castaño también estaba harto de esos estúpidos celos y ese mutismo que mostraba ¿“su amigo”?
Ya no sabía como considerarlo… tal vez rival… sin darle más vueltas al asunto se puso serio, tomó sus cosas y se fue dejando a una atónita Noriko y a un sulfurado Seguchi que víctima de su frustración liberó su ira contenida contra lo primero que encontró y ante la mirada desencajada de todos los presentes lanzó de un manotazo su propio teclado, arrojándolo con tanta fuerza que el instrumento se descompuso al instante…
Noriko tembló de impresión al ver la escena, ese no era el Tohma que ella conocía… sintió que sus lagrimas se le escapaban de los ojos y sin más salió corriendo de la sala dando un fuerte portazo…
El ojiesmeralda se quedó mirando el suelo tratando de calmar su respiración, en eso llamaron a su celular y lo contestó sin esperar un segundo.
-¿diga?
-ya tengo lo que me pidió, veámonos en el hotel excelente Tokio, la habitación será la 315, tráigame el efectivo en un maletín… adios.
-si, allí estaré…-el rubio cerró la llamada y se encamino con paso rápido a su oficina.
-Sakano-san encárgate de todo mientras yo no estoy, vendrán los organizadores del evento de fin de año toma, aquí están las pautas de las actividades-decía entregándole unas carpetas.
-p… pero jefe.
-solo hágalo Sakano-san, sé que puedes hacerlo, además confío en ti-Sakano sonrió con la mirada lagrimosa reconociendo a su jefe de siempre.
-si, ahora voy a la sala de reuniones a prepararlo todo…
-así me gusta Sakano-san, ahora si me permites-Sakano salió de la oficina con una reverencia dejando solo a Seguchi quien al verse libre quitó un cuadro de la pared y tras él había una caja fuerte, marcó la clave respectiva y sacó el maletín con los 10 millones en su interior… por fin había llegado el día en el que haría el jaque mate.
Era ya el décimo suspiro que el jovencito de ojos marrón daba en toda la tarde, sentado en una silla con las manos apoyando su cabeza no podía dejar de pensar en el vocalista de Nittle Graspper, ni en todo lo que había vivido esas semanas, dormir con él, despertar a su lado y sentir su aroma a frutillas silvestres emanando de su pecho, desayunar, bañarse juntos, salir a caminar bajo la noche estrellada… “quiero estar con él” se repetía esa frase en su cabeza.
Pero a pesar de toda esa felicidad había algo que preocupaba al tecladista y es que durante esas últimas semanas se daba cuenta que habían cosas que su cantante le guardaba… recordó algunas de esas noches donde despertaba agitado por sus pesadillas…
Flash back…********
-… o…. onegai… tatskete… i… itai…-gemía el cantante aún dormido, Suguru preocupado intentó despertarlo y cuando lo consiguió tuvo que calmarlo en un abrazo.
--Ryu, escucha solo fue una pesadilla, estoy aquí contigo… ¿Ryu?-se sorprendió el muchachito al escuchar sus agitados sollozos y sentir su cuerpo temblando de terror, aferrándose a él como si la vida se le fuera en ello.
-tranquilo Ryu… mírame… estoy aquí… estas a salvo…-el castaño parpadeó atónito viendo la cara preocupada de su novio.
-discúlpame, tuve una pesadilla ¿verdad?-sonrió sacando la lengua de manera avergonzada.
-si, solo fue una pesadilla volvamos a dormir…
-voy… por unos analgésicos…
-espera yo te los traigo…
-¡no! Yo… yo lo haré tu sigue durmiendo bebito…-dijo sonriendo de manera nerviosa y e metió al baño… una vez allí se mojó el rostro… cada vez eran más frecuentes esas pesadilla y esos recuerdos tan horribles… ¿por qué ahora? ¿Por qué cuando empezaba a ser tan feliz?...
Abrió el armario de las medicinas y buscó en el fondo un frasquillo con sus píldoras de siempre, las tomaba de pequeño y cada vez que tenía ese tipo de recuerdos ¿qué diría su niño acerca de todo eso? ¿Cómo reaccionaría? Cuando volvió al cuarto, encontró a Suguru aparentemente dormido y se acercó a depositar un beso en su mejilla…
-mejor que no lo sepa-susurró el castaño dando un suspiro y se metió con él a dormir, pero el jovencito aún estaba despierto… y muy preocupado por lo último que dijo…
Fin del Flash back********
-¿Suguru pasa algo?-le preguntó el pelirrojo viendo que el menor tenía la mirada como si estuviera recordando algo, su expresión se veía algo afligida.
-No te preocupes Nakano-san… es solo que extraño a Ryu… cuando el no esta, no sé como explicarlo, pero es como si me faltara el aire…
-sé por lo que estas pasando-dijo el guitarrista sobándole un hombro, mientras Shuichi se les acercaba.
-llevan más de un mes saliendo ¿no?
-sí y vivir con él ha sido todo un reto, como lo más grandioso que he experimentado…
-¡¿¿¿viven juntos???!-preguntaron a dúo sus compañeros de banda.
-¿no se los había dicho? Pues sí, me lo propuso en mi cumpleaños y ahora vivimos en su departamento.
-¿te causa muchos problemas? Es que todos sabemos lo hiperactivo que es…-declaró el pelirosa.
-pues ni modo, es un desordenado, deja sus crayones y sus dibujos en cualquier parte, cuando prepara algo la cocina parece un chiquero y deja las luces prendidas, pero no es algo que no se pueda solucionar, afortunadamente no me… cuesta dejar… todo… como estaba-dijo sonrojado, no se había percatado de cuando Ryuichi lo había abrazado por la espalda… el resto sonreía cómplice y con una gotita resbalando en sus cabezas.
-pero Ryu está aprendiendo na no da, kumagoro es testigo, no te enfades con nosotros Sugu-chan… T-T.
-¿quién dijo que estoy enfadado?-le dijo volteándose hacia él robándole un febril beso mientras los demás abrían sus ojos de par en par, en eso entró Noriko hecha un mar de lágrimas.
-¿Noriko-chan?
-Ryu, tenemos que hablar a solas…
-ahora voy… Suguru vendré a buscarte en unas horas más en cuando termine mi ensayo ¿te parece?
-esta bien-y volvieron a besarse con toda la pasión que pudieron…
***
Rato después en una sala con Noriko…
-y eso fue lo que pasó después de que te fuiste…
-ese desgraciado-masculló notablemente enfadado.
-Ryu, no vayan a pelearse por eso…
-… no te prometo nada Noriko, me estoy aburriendo de esa actitud estúpida de niño resentido… como si le hubiera quitado a alguien que encima rechazó… pobre idiota…
-¡Ryu!
-¡es la verdad na no da!-chilló frunciendo el entrecejo con su personalidad infantil…
***
En tanto Tohma había llegado al lujoso hotel donde habían acordado el intercambio, subió al ascensor y buscó la habitación respectiva… una vez dentro…
-¿trajo lo que le pedí Mizrel-san?
-véalo por usted mismo, pero antes quisiera ver lo que obtendré a cambio… y espero que sea lo que pedí.
-¿Cómo decepcionarlo? Si usted cumple con lo suyo, yo cumplo con lo mío, se nota que es la primera vez que hace negocios conmigo-le dijo con una sonrisa impecable, el hombre abrió el maletín viendo al rubio de reojo como si desconfiara y comenzó a comprobar si los billetes eran falsos con un haz de luz diseñado para ello.
-no se preocupe, no voy a delatarlo ni mucho más y espero que usted tampoco trate de pasarse de listo… por que si lo hace… en menos de lo que espera verá el infierno con sus propios ojos…-Seguchi chaqueó los dedos y un par de sombras aparecieron por el balcón de la habitación… el tipo sudó, más valía tener cuidado con el hombre de la sonrisa eterna… al final se marchó con el maletín lleno de yens mientras el ojiesmeralda seguía sonriendo tomando un sobre sellado que decía:
Instituto de Psiquiatría de la Ciudad de Osaka.
26 de octubre de 1983 Osaka, Japón.
Caso Nº 0908 De síntomas Psicosomáticos y Desequilibrio emocional agudo.
Otros síntomas: Hiperactividad compulsiva, Bipolaridad clase 2.Causas: Antecedentes pre traumáticos y post traumáticos en investigación.
Paciente: Ryuichi Sakuma.
Continuará…