Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Promesas inevitables por Manabuu

[Reviews - 1152]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

 

 

¡De qué Kai-kun estás hablándome y cómo que es nuestro batero, acaso he dado yo mi aprobación, ¿ahora te quieres convertir en dictador?!

 

 

 

Inevitable XXX

 

 

"Un nuevo batero"

Observé a Ruki tomar compulsivamente su tercera lata de café, estuve tentado a calmarlo, mas, estábamos en la calle y después no quería recibir miradas extrañas de la gente pensando que... que teníamos otra clase de relación.

Sí.

El estudio de Rino-san me había dejado traumado y eso que sólo estuvimos cuatro días casi durmiendo en la puerta para obtener un cupo de una hora para practicar. Las personas que se paseaban por los alrededores nos daban unas miradas que mataban y eso que nos comportamos más masculinamente que de costumbre...  Bueno tampoco es que seamos unos afeminados.

Río con la idea.

Jajaja, Akira no pudo acercarse a Ruki-chan en toda la semana, ya que había cierta fobia a los homosexuales por los alrededores. Y lo digo con pruebas, porque me tocó ver una paliza a una pareja de chicos que andaba de noche por estos lares y en serio que no me hubiese gustado estar en sus zapatos... aunque para Yuu estuvo de lo mejor, me dijo de mala gana que por fin tendría un descanso de ellos, jaja...

Fue tan extraño ver a Ruki-kun portarse tan seriamente... que ahora que lo veo bebiendo como desaforado...

 

Oye, Ruki-chan...

...

Si bebes tanto café, luego te dará ganas de ir al baño y dónde vas a hacer... ¿en el árbol del frente?... ¡Eh, que hoy te quedas en vela y no por Akira...!

No te preocupes... le pido de favor a.... ¡Uruhaaa!

 

Di un salto cuando él me gritó.

 

Gazette ya tiene nuevo batero.

Estás que repites eso como un disco rayado desde hace media hora. Y no te entiendo, lo correcto sería decir: necesitamos un batero nuevo.  Hay que ponernos a buscar hoy mismo.

¿Y si el batero nos busca primero?

 

Observé los ojos de mi amigo.

¿A qué se refería?

 

No te entiendo.

Me han llamado hace menos de una hora.

¿Y?

¿Te acuerdas de Kai-kun?

 

¿Kai-kun?

Kai-kun... Kai-kun, Kai-kun... Kai-kun...

¡Me di un golpecito en la frente!

¡Kai-kun!

 

¿Sí?

No. ¿Quién es Kai-kun?

¡Uruha, pensé que sí... ¿eres tonto?!

No. ¿Y quién mierda es Kai-kun?

Nuestro nuevo baterista.

¡Qué!

 

Me puse de pie como un resorte.

¿Cómo que nuestro nuevo batero, pero si yo no sabía quién diablos era ese tipo o tipa?

 

¡Aguanta, ¿desde cuándo es?!

Desde hoy.

¡¿Cómo que desde hoy?, ¿no te acuerdas?, Ruki, llamado a Ruki, nuestro batero se largó hace menos de dos horas, después de haberme golpeado!

Ya lo sé. Y gracias...

¡Gracias mi trasero!

Sí ya sé... aunque también fue gracias al chico que trabaja con Rino-san...

¡¿A ese ogrooo?, pensé que venía a ultimarnos!

 

Grité, ¡ya me había acordado! Por casi y me quedaba sin un ojo por culpa de ese desgraciado que estaba a punto de darle una paliza completa a Ruki, oh, pero si Akira se entera, ¡lo mataaaa!

 

Ese chico solo nos quería ayudar y suerte que se metió, porque sino Tomo-san te asesinaba. Y eso que se veía tan flaquito ¿no? Quién pensaría que te tumbaría con el primer golpe.

...

 

Me sonrojé de la furia.

¡Encima que le ayudaba y criticaba, según él, mi poca técnica en la pelea, jaaa, pero claro... cómo él no puede mover ni un solo dedo!

Le miré enfadado.

 

¡Es un batero, qué esperas, tiene brazos fuertes!

Pero Yune-chan... ah, es cierto, ¿te acuerdas esa vez que Yune se metió solito con esos tontos que se pusieron a hacer escándalo en el night club? Jajaja, fue tan chistoso, pensaron que Yune iba a ser pan comido y se tiró al suelo a tres, jaja... ah... Qué estará haciendo Yune-chan ahora, ¿no?

 

Volví a sentarme.

Ahí iba Ruki-chan... de nuevo recordando a Yune.

Suspiré.

La verdad es que Yune había sido, también en parte, el problema mayor para aceptar a otro baterista. 

Y no por mi lado. Eso no.

Yo sabía perfectamente que teníamos que cerrar esa etapa, Yune fue nuestro amigo, a veces enemigo y tocaba genial, componía y demás, pero era tiempo ya de dejarlo ir y empezar algo nuevo.

Después de todo, Yune nos prometió volver... y para tener que escucharme sus burlas de que somos unos fracasados, ¡pues jamás!

Sonreí a medias.

 

Él está bien.

Mmm... Extraño llamarlo...

 

Suspiré en silencio.

Le di un golpe suave a Ruki en el hombro y... ¡recordé lo que estábamos hablando!

 

¡Enano chantajista!

¿Yo?

¡De qué Kai-kun estás hablándome y cómo que es nuestro batero, acaso he dado yo mi aprobación, ¿ahora te quieres convertir en dictador?!

No es eso. Solo que necesito de tu voto de apoyo.

 

Así que era por eso.

Le miré confundido... ¿para qué mi voto de apoyo? Si el tipo era bueno y con el correr de los días no se convertía en un matón cualquiera, por mí que se quedara.

 

Sí me agrada le diré que sí.

Ya sé... pero creo que sería bueno que Kai-kun... ah, es que...

¿Qué?

 

Ruki-chan lucía nervioso.

¿Y ahora qué diablos pasaba? Primero me medio obligaba a decirle que sí al nuevo y después no sabía cómo convencerme.

 

¿En serio no te acuerdas de Kai-kun?

 

Ahí de nuevo con lo mismo.

 

Que no. Si te digo no, es no. No puedo acordarme de todo el mundo hombre, dónde lo vi... ¿en una tocada? Sabes que no le tomo mucha atención a la gente ahí porque me pongo nervioso.

...Y eso que conversaste con él.

¿En serio? Qué grave estoy... ya Ruki, suéltalo, deja el drama y dime quién miércoles es Kai-kun.

 

Ruki volvió a abrir una lata de café, dio un sorbo largo y luego me alcanzó el resto a mí.

Bebí un poco y él empezó a hablar... Sin embargo con cada explicación vaga que me daba, menos podía hacer memoria de quién era.... hasta que...

 

¡¡Qué, jajaja, ya me acordé, jaajaja, ¿ese es Kai-kun?, jajajaja!!

¡Cállate y deja de escupirme!

¡Jajaja!

 

Dejé a un lado la lata y comencé a reír como un loco.

¡Cómo podía haber olvidado al gran Kai-kun que le sacaba canas a verdes a Akira, jajaja, pero qué es de infarto, de todas las personas que imaginé no podía ser él!

 

¿Puedes hacer silencio ya o debo esperarte?

Va, jajaa... de acuerdo. Ya.

Bien a lo que voy...

¡Jajajaja! Me acuerdo cuando te perseguimos con Akira, jajaja, yo le decía que seguro era tu nuevo amante y encima te invitó a comer y te compró dulces, jajaja.

¡No me compró, yo lo compré!

¿O en serio?

 

Ruki me dio un golpe en la canilla y entonces ya dejé de reírme.

 

¿Entiendes mi posición entonces?

Algo.

¡¡¿Algooo?!!

 

Tapé mis oídos.

Ya estaba de nuevo histérico. Como cuando cada batero que venía se volvía a ir...

Hasta se me viene  a la mente aquella frase que nos dejó asustados a todos:

 

Si no conseguimos un batero, yo volveré a la batería...

 

Por casi me da algo cuando lo vi tan serio al decirlo.

¡Y fue por eso que Yuu se decidió por el mal nacido de Tomo!

Sabía a la perfección que Ruki no se iba con juegos y que sus palabras eran una sentencia para él. Después de todo, el sesenta por ciento de negativas eran de su parte. El otro porcentaje restante provenía de Akira... y aunque suene estúpido mencionarlo, él se ponía de acuerdo con Aoi cuando se daba cuenta que los novatos iban más por Ruki que por mí! Vale... que no por mí, si no por Gazette.

Jajaja... sí, es una risa amarga.

¿Qué le verían a Ruki-kun?

 

Es que es tierno.

¿Tiernooo?

 

Aún me hierve la sangre al ver en mi mente la cara de Taro cuando me lo dijo muy suelto de hombros.

 

No pongas esa cara, es la verdad, tiene una combinación muy especial, ¿sería como una dualidad? Puede ser tierno y fiero a la vez. Cuando canta parece que nos va a atravesar con la... ¿Takashima?

...

¿Te enfadaste?... ¡Oye tú me preguntaste!

 

Sí... maldito Taro.

A pesar que todavía no quería que viviéramos juntos como antes, nos veíamos un par de veces a la semana y hablábamos un poco de lo que nos pasaba.

Ah... Taro... es difícil para mí vivir sin ti... no poder controlarte a diario, o dormir juntos, incluso besarnos...  y me vengo a enterar por tu boca bendita que tienes debilidad por el odioso de Ruki...

 

¿Uru-chan me vas a apoyar?

...

 

Rasco mi cabeza en modo pensativo.

Lo que debería hacer es hacerte sufrir enano del demonio.

 

¡Uruha-san!

No me llames así.

¿Entonces?

 

Sonreí maliciosamente.

 

Qué me darás a cambio....

¡No tengo nada de dinero!

Ok... mira, Ruki, voy a ser sincero contigo...

 

Empecé.

 

Si Kai-kun me cae bien y principalmente toca la batería bien, pues lo acepto y normal.

¡Uru-chan, gracias!

Pero si no, es no.

¡Oye! El es un buen batero, te lo aseguro, lo he escuchado y suena bien, presiento que se acoplara bien a Gazette. Además es un buen chico.

¿Si tú lo dices?... Tanto que lo conoces...

¡Oye!

 

Bromeé una vez y acompañé finalmente a Ruki a que tomara el tren para Setagaya.  Tan solo me había citado para contarme todo lo de Kai-kun y ahora debía volver a casa o sino Akira se ponía como loco de la ansiedad.

Compadecí a Yuu.

Después de los meses que estuvieron separados ese par de tórtolos, era normal que tuvieran ganas a todas horas, jajaja y con el aguafiestas de Yuu por ahí mortificándoles. Más tarde molestaría al estúpido de Yuu y me burlaría de su mala suerte.

Observé mi móvil y me fijé en la hora.

Aún temprano y no quería volver a casa todavía. Sonreí... ¡Le llamaría a Taro, después de todo tenía muchas cosas que contarle!

 

¿Dónde estás?

Hola, por el centro...

Ya veo, ¿puedo verte ahora? También estoy por el centro.

Mmm...

 

Ya me quería poner trabas...

 

Vamos Taro, tú escoge el lugar... ¿un café?

Ok, pero me esperas media hora, estaba haciendo un par de asuntos.

Bien, Café Monet, la última mesa junto al cuadro, ¿oka?

De acuerdo. Nos vemos.

 

Levanté el puño.

¡Había ganado una cita con mi novio!

La verdad es que me resultaba difícil la situación.

Taro no quería contarme sus motivos o razones por no querer pasar tiempo conmigo, lo que yo podía intuir era que él tenía miedo. Y juntando otras piezas vagas de las conversaciones raras que se daban con su amigo Shino-san, puedo confiar la respuesta a mis padecimientos al otro mal nacido, Yani.

Si bien ya no lo veíamos por lo de Matina y suerte que Tazawa-san tuvo que prescindir de sus servicios, debido a que ya  no contaba con el dinero para pagarle; él seguía como una sombra en mí.

Estaba seguro... él tenía que ver con el comportamiento raro de Taro...

Me mortificaba recordarlo junto con Yani, no importaba cómo, pero el puto ese se le metía por los ojos...

 

¡Buenas tardes!

Buenas, un café con crema.

¡A la orden!

 

Contemplé el cuadro que estaba a mi lado izquierdo, colgado en la pared.

No hacía mucho, caminando para buscar un empleo en la noche, descubrí este café muy tranquilo y serio. Entré y me gustó lo que servían... incluso a Ruki le agradó venir la semana pasada aquí para celebrar al nuevo batero...  Quién pensaría que se portaría tan vilmente con nosotros.

Cuando me presentaron a Tomo, no imaginé que sería mayor que nosotros. Su apariencia lo hacía ver como un tipo de unos veinte años, sin embargo, él ya llevaba bastante tiempo como baterista. Estuvo en un par de bandas que no duraron mucho y después en otras como miembro de apoyo. Al enterarse que necesitábamos un baterista él mismo nos contactó. Habló primero con Tazawa-san y a él le cayó bien, después él me llamó a mí y me dijo que parecía alguien muy maduro y que mejor era que lo comprobáramos nosotros mismos. No me tomó menos de veinte segundos llamar a Ruki y exigirle que se viniera al centro para hacerle la prueba, Akira no podía salir de su trabajo, por lo que su voto estaba en manos de su novio.

El único en dar quejas fue Yuu, como siempre.

No obstante, al día siguiente cuando empezamos a practicar con él en lo de Rino-san nos dijo que le daba igual y que se quedara, ya que perder más tiempo buscando a alguien más apto no nos iba a dar resultado. 

Y así fue como Tomo se unió pacíficamente... mas no duró mucho.

¡Qué el quería hacer correcciones por todas partes!

Que el sonido de la segunda guitarra no andaba bien, que no la rasgaba bien, que el bajo a penas se escuchaba, qué como yo no podía tener más creatividad, que Ruki debería aprender a modular mejor la voz... etc y etc...

Sí... hasta ese punto se podía decir que el único que le hizo caso fue Akira, que no dejó de preocuparse, según me informó Ruki vía móvil. Por mi lado, solo le dije que bien y punto, no iba a cambiar una canción entera porque el quería, además todos habíamos ayudado a componerla... Se podría decir incluso, que Yuu se comió su orgullo, ya que el historial de Tomo le daba el crédito de ser más experimentado... Me preguntó qué diablos hubiera sucedido en un futuro si Tomo se quedaba con nosotros... No obstante, se metió con quien no debía... y tengo que decirlo... algo bueno hizo Yuu...  ¡Qué ya era hora, que todo el año pasado se la pasó de cretino con el pobre de Yune! Y sí... se metió con Yune y ahí todos, incluyéndome, piteamos.

Tomo ya iba tres días en la banda, por su cuenta no cesaban las correcciones, hasta que empezó a cambiar las partes de la batería de todas canciones que lanzamos. Nos citamos ese día en la mañana, lo recuerdo bien. El nos llamó en la noche a cada uno y acordó una reunión de urgencia, nosotros le dijimos que normal, ya que nuestro estado era de verdad desesperante, necesitábamos una nueva tanda de canciones y seguro él quería coordinar o preguntar cómo era el modo de composición.

¡Cuánto no fue nuestro asombro al mostrarnos las nuevas versiones de todos los singles que dimos a luz!

Ruki se quedó anonadado al ver que hasta sus letras estaban corregidas...  Akira parecía querer tirarse a llorar y Yuu... Yuu...

 

¿Qué mierda es esto?

Lo que deberían haber lanzado.

¿Ah?

No puedo creer que tuvieran un poco de éxito con lo ineficientes que son...

¿Qué?

 

Me aproximé a Yuu para calmarlo... Logré darle palmaditas en la espalda, pero él me largó al infierno con una mirada.

 

De suerte que su antiguo batero los dejó. Un vez lo vi en una presentación, fue hace tres años y daba pena, cómo pudieron enlazarlo a ustedes, ni siquiera sabía darle al...

¡Cierra tu puta boca ahora!

¡Aoi-saaan!

¡Shiroyama!

 

Fui lanzado a un lado por Yuu... incuso me cayó un golpe de Tomo que iba para él.  

Yuu se puso como loco... Y no dejó de decir que si volvía a meterse con Yune se las iba a ver con él. Claro, luego de echarlo ¿no?

Ese mismo día nos quedamos sin baterista.

No obstante, fue al cuarto día cuando sí rompimos definitivamente.

Tomo quedó con Ruki, a mí me olió mal aquello. Seguro pensaría que engatusando al enano podría volver a la banda, sin embargo no midió bien sus palabras y volvió a ensañarse con Yune... mala suerte, se metió con la segunda persona que no podía escuchar que se hablase mal de nuestro antiguo batero... Ruki se creyó demasiado, estuvo a punto de irse a los golpes con él, llegué yo... los recibí por él y Tomo se largó en definitiva... ah y también nos ayudó ese ogro del estudio... y está bien, debo admitirlo, pero nadie lo sabrá nunca... ¡si no hubiera sido por ese chico, de verdad que me verían en el hospital! ¡Pero qué fuerza que tenía el condenado ogro, hasta Ruki se lo agradeció con miles de reverencias mientras que yo me retorcía en el suelo! Mas... ¡fue amable y nos pagó el taxi hasta mi casa... basta lo dije! Y ahí muere la cosa...  pero todavía no... Falta ver si "Kai-kun", como cariñosamente le dice Ruki, es un cabrón o un buen tipo...

 

Hola, ¿tan pensativo?

¡Mierda!

 

Me asusto al escuchar a Taro y él ríe.

 

¿No te diste cuenta de cuando llegué?

No. Lo siento... espera que llamo para que te traigan un...

No, ya lo pedí. ¿En qué pensabas?

 

Taro acomoda un portafolio en la mesa, despeina sus cabellos y yo entonces... olvido el enojo estúpido y digo... vale, que Kai-kun sea nuestro batero.

 

En ti.

Tonto, jaja...

 

Taro se sonroja y mira a la calle.

Al poco la encargada le deja su taza de café humeante. El la mira en silencio, la toma entre sus dedos tan blancos y sopla... un leve calorcillo inunda mi cuerpo. De verdad, que no puedo entender como puedo estar tan encantado con él... 

 

Y qué hacías por el centro, ¿buscas trabajo?

 

Pregunto curioso señalando el portafolio.

 

Oh no, son asuntos de Shino.

¿No puedes contarme?

 

Vuelvo a preguntar.

¿De nuevo más secretos que no puedo saber?

 

Es con respecto... em...

Olvídalo.

No, es que no es ningún secreto. Últimamente, Shino se ha encargado de mantenerme metido en la producción de esas bandas que van a su estudio. No es que le este yendo de maravilla, pero ayer se ha incorporado un dúo nuevo y van a grabar su primer material ahí.

 

Me quedé sorprendido al escucharlo.

Así que Shino-san seguro no se abastecía él solo y tuvo que obligar a Taro a que lo ayudara. Reí por lo bajo, con lo mucho que le gusta socializar a Taro...

 

¿Y tú que haces ahí?

Administro. Ya sabes, fechas, encargos y demás... ahora venía de hablar con City music, necesitamos un par de amplificadores nuevos.

Parece que la haces, Taro-chan.

Algo así, ¡pero es agotador! Ahora entiendo a Tazawa-san, con razón el pobre tuvo que buscarse un...

 

Taro enmudeció antes de nombrar a Yani.

 

Tú lo hubieses hecho mil veces mejor que él.

No creo.

 

No iba a insistir.

No quería aburrirlo.

Apoyé el mentón en la palma de mi mano... Quería hacer las cosas bien, por lo que, tan solo me callé, aguanté las preguntas molestosas que siempre formulo y me dediqué a verlo. Una de las cosas que más estaba disfrutando de Taro, desde nuestras últimas salidas secretas, era el hecho de quedar... absorto en él. Y aunque resultase un tanto cursi, se había vuelto una necesidad...

 

¿No vas a beber más café?

¿Vamos a casa?

 

Sabía que insistía un poco, tal vez, lo dos podríamos estar más juntos en otro lugar sin tanta gente.

 

No empieces. ¿Cómo va la banda? ¿De verdad qué tuvieron una gorda con Tomo-san?

Qué rápido vuelan las noticias.

 

Dije no muy contento, a lo cual Taro solo se disculpó.

 

Yuu les fue con el chisme.

Algo así, estaba bastante mortificado, pero ya se le pasará, parece que le atacaron el orgullo, ¿o me equivoco?

¿Así que no sabes qué pasó en verdad?

 

Pensé en voz alta.

Ya me parecía extraño que Yuu les fuese a decir que todo el lío se armó por querer defender a su amigo. Ni muerto lo diría... sonreí, sería una perfecta joda para él.

 

¿No fue por eso?

Jaja, es tan divertido verte curioso.

No lo estoy. Y es tarde, debo coger el tren.

¡Taro!

 

Lo vi dejar la cuenta sobre la mesa y caminar rumbo a la salida.

Incluso me tocó perseguirlo y esquivar a la gente que pasaba presurosa por nuestro lado.

 

¡Oye, lo siento!

No es eso. Voy ocupado.

 

Lo jalé del brazo y lo hice ir a un lugar menos transitado. Le quité de las manos el portafolio y me senté tranquilamente.

 

¿Ya se te pasó el enojo?

No es enojo, Takashima, solo que...

Jeje, te conozco, y como te quiero tanto compartiré información contigo, jaja... Yuu mandó a la mierda a Tomo en primera porque no cesó de joderlo con que no rasgaba bien la guitarra, jaja... cosa que creo, Tomo tenía razón...

¡Takashima!

Vale, de acuerdo y en segunda, porque se metió con todos nosotros, aunque la chispa que inició el incendio forestal fue Yune.

¿Qué?

 

Cómo adoraba hacerle favores a Yuu.

 

Vaya...

Se puso como una fiera, cuando el imbecil dijo, "oh, ese bueno para nada de batero que tenían, daba pena en su antigua banda", ajajaja, seguro no reconoció a Yuu, él también había estado con Yune en esa banda, jaja, así que le dio directo en el orgullo y de paso que el tipo quería cambiar todo en Gazette, como si fuera el enano.

Jajaja... ah, Takashima, en verdad que cuando te pones en ese plan no sé si estás enfadado o divirtiéndote por los líos que tienen.

 

Reí con Taro.

Qué podía hacer, solo me quedaba el buen humor, poniéndome enfadoso como Yuu no iba a llegar a ningún lado.

 

¿Qué les contó Yuu a ustedes?

 

Pregunté con cara de niño bueno, Taro solo movió negativamente la cabeza mientras me quitaba el porfolio. Sí... de acuerdo, no puedo cambiar así de fácil, por siempre seré un curioso.

 

Pues nada de lo que tú dices. Lo único en que coincidimos es que Tomo era un tío idiota. Jajaja...

¡Jajaja!

 

Verlo reír hasta sonrojar... podría contarlo todas las cosas tontas que hace Yuu solo por verlo de buen humor.

 

Takashima, en serio debo irme...

Sí hasta parece que soy el otro y tu esposa te espera en casa...

Shino es mi esposa, jaja, seguro debe estar jalándose los cabellos porque no llego aún. Jajaja, en serio que andamos locos y Shino no quiere contratar a nadie más, no quiere gastar.  

¿¡Entonces ni te paga!?

 

Taro resopla pensando que debo ser imbecil.

 

Obvio que me paga, además vivo ahí. No puedo exigir mucho.

Su novia debería ayudarlo.

Créeme que Hana intentó convencerlo, incluso ella tiene algunos contactos que también lo son de Shino, pero él está empecinado en hacerlo todo, dice que necesita el dinero.

Vale. Te acompaño a la estación.

 

No me quedó de otra.

Parecía que no era un buen momento para convencer a Taro, pero si podría hacerme la víctima para que la próxima vez él pudiera quedarse más tiempo conmigo. Sonreí para mis adentros y le hice un ademán para que me siguiera; y empezamos la caminata en silencio. Coloqué mis manos en los bolsillos y miré al frente. En verdad no tenía que fingir mucho, pensé que tendríamos más tiempo con nosotros y me doy de cara con solo quince minutos...

 

Bueno, nos llamamos.

 

Le dije serio, al frente de la estación.

Sus ojos negros brillaban un poco...  ¿dudaría?

 

Ok.

Cuídate y suerte.

 

Ni siquiera podía besarlo en público.

Di media vuelta y pensé en irme a la estación de bus, ya nada me detenía en el centro, lo mejor era irme a casa... Mas, podría irle a joder a Yuu a Setagaya, sonreí, qué podría hacer...

 

¡Takashima!

 

Volteé asustado al ver a Taro tan cerca y más cuando él me arrastró...

 

¡Oye! ¡Ta-Taro!

Vamos a un baño público.

¿¡Qué!?

 

No puse resistencia, pero igual me intrigó ese arrebato que tuvo.

Abrí los ojos grandemente cuando de verdad observé los servicios.

 

¿Taro?

¡Entra!

Oye, mejor vamos afuer...

 

Pero no pude decir más...

De repente Taro estaba besándome mientras cerraba tras de sí y nos quedábamos ambos muy apretados en un cubículo. De lo sorprendido que estaba ni siquiera lo pude disfrutar a conciencia.

 

Takashima en serio debo irme...

 

Le dije que sí a todo mientras él murmuraba cerca de mis labios.

 

No es que...

Sí ya sé.

No, no sabes.

Ok, no sé... entonces cuéntame...

 

Acaricié su cabello largo...

 

Pero debo irme y...  pero en la noche tengo tiempo...

 

Volví a quedar estupefacto.

 

Puedo...

Obvio. Yo... sí puedes, Taro. Y conversamos...

 

Lo que menos haríamos sería conversar, ¡pero sí, obvio que tenía que ir a mi casa!

 

Ok. Entonces ahora sí, hasta más tarde.

 

Un beso rápido y el susto de abrir el cubículo y encontrarnos de cara con un hombre que nos miró con asco. Taro ni se dio cuenta y salió corriendo, dentro de poco el tren se largaría y después esperar por quince minutos no le convenía.

 

¡Maricones!

 

Escuché al tipo gritar en mi espalda.

Me volteé enfadado y le dije que si no quería que le diera.

Un mal chiste, después de eso me fui directo a casa a arreglarlo todo.

Estaba emocionado como un crío. Incluso me pasé por el market cercano a casa y me surtí de varias cosas preparadas para que pudiéramos comer un poco, no podía darme el lujo de cocinar ya que no tenía nada salvo, el hervidor, pero por lo menos Taro vería mi entusiasmo y se preocuparía por lo delgado que se me veía y entonces, muy remotamente querría volver conmigo... 

Sonreí mientras pasaba la aspiradora. Observé mi trabajo reluciente y las sábanas recién cambiadas.

Si hasta parecía que iba a tener mi primera noche en serio. Reí... Taro no había mencionado la hora, pero conociéndolo seguro se pasaba a eso de las ocho por aquí. Observe el móvil, tenía tiempo de sobra para acomodar el baño.

Desde mi estadía con el enano, casi ni me había dedicado a la limpieza, ya que mis ánimos estaban hasta el suelo. Y cuando Akira vino a acompañarlo para que se mudara con él y Yuu a Setagaya pues ni se me pasó por la cabeza el ponerme a limpiar... ya que vivía solo y qué más daba...

Reí al encontrar el pato de hule de Taka... aún lo conservaba... ah, este pato se había paseado por tantos lugares, lo moví para ver si aún traía shampoo dentro y sí, estaba lleno. Ya se lo llevaría después a Ruki...  Busqué el desinfectante, después de dejar el pato sobre la mesa de noche, y lo rocié por las losetas blancas...  Olía bien...  Cuando Taro llegase, seguro y se sorprendería... pero el sorprendido fui yo.

Escuché el móvil y salí disparado a contestar, la sonrisa se me desparramó del rostro al leer en la pantalla el nombre de Taro...

 

Hola, dime...

 

Dije más que entusiasmado, seguro me decía que ya estaba por el barrio o yendo a la estación.

 

Takashima, en serio perdóname, pero no podré ir...

 

Caí sentado en la cama.

 

¿Qué no?

Estamos en aprietos aquí, hasta tuvimos que llamar a Yuu y ahora... ¡ya voy, que ya voy! Lo lamento... ¿Takashima?

Vale, yo entiendo... entiendo muy bien.

¡Takashima!

 

No, no quería entender, pero no podía hacer nada...

 

¡Taroooo, ven aquí o me voy!

¡Que ya voy Yuu!... prometo compensar esto.

¡Tarooo!

Adiós.

Bye.

¡Taro niñaaaa, qué te dije, nada de llama...!

 

Y la voz del puto de Yuu se quedó como mi único miserable consuelo.

Tiré el móvil contra mi mochila.

¡Por qué tenía que tener tan mala suerte yo!

¡Oh sí, pero con Yuu sí es diferente, hasta se deja mandonear, maldito de Yuu, ¡ya vería!, le haría la vida a cuadritos por meterse con Taro!

 

¡Y ahora qué mierdaaa!

 

Grité yendo a recoger mi móvil que sonaba de nuevo.

 

¡Hable!

¿Cómo qué hable? ¡Muéstrame respeto!

¡Tú!

 

¡Por qué él, por qué siempre él!

 

Ahora no me digas que te llamé justo cuando estabas cogiendo a alguien.

¡Aj, porque no te vas a la mierda Yuu! ¡No estoy de humor ahora, así que si no quieres que Gazette se quede sin guitarrista mejor...!

¡Cállate la puta boca y vente a Setagaya ahora mismo!

¿Qué?

 

Pregunté más que asustado.

 

¡Yuuuuu!

¡Qué ya voy Shinooo! ¡¿Alo?! ¿Engendro Takashimaaa?

¡Qué mierda hablas, ¿has visto la hora?!

¡Obvio que he visto la hora y aún hay tren para aquí, así que te coges un puto tren y te vienes ahora mismo!

¡Yuuu, vienes o te voy a buscar ahoraaa!

¡Que ya voy, ¿no entiendes?!

 

Reí por lo bajo... al parecer Taro no era el único mandoneado.

 

¿Alo?, ¿alo? ¡Engendro!

Me vuelves a decir así y...

¡Ok, ok, ya vale, ¿una disculpa está bien?!

 

Miré mi móvil de nuevo, se habrían equivocado de llamada...  ¿Era mi imaginación o Yuu estaba disculpándose? ¡Iba a ser el fin del mundo, que los dioses del más allá iban a tragarnos enteros en medio del fuego y lava!

 

¿Alooo?

Estoy, imbecil.

¡Pues vente!

¡Yuuu, carajo, qué te dijeeee, nada de llamadas!

¡No te demores engendro!

 

Reí cuando el cortó.

Tomé mi bolso y me coloqué encima un suéter grueso, calcé mis pies y fui directo a la estación.

No podía creerlo, ¡jajaa, de todos modos vería a Taro!

Me detuve en seco.

¡Vería a Taro!

No dejé de pensar en eso durante el viaje y eso que fui de pie porque estaba repleto, no obstante, qué importaba aquel fastidio, todo podría compensarse con Taro ahí...

Llegué en menos de cuarenta y cinco minutos.

Mis manos picaban, si hasta parecía que iba a casa de una novia a presentarme a sus padres. Tuve suerte en no perderme, ya que las pocas veces que fuimos al estudio de Shino-san fue en auto. Sin embargo me ubiqué por la furgoneta estacionada en la entrada y también por el auto rojo de Hana-chan. Sonreí para mis adentros y me aproximé a la entrada, sin embargo antes de llamar por el interruptor alguien se lanzó encima de mí.

 

¡Quién...!

¡Qué pensabas hacer, tú!

¿Eh?

 

Shino-san me mostró su rostro y por casi se me salé el alma del susto.

¡Si ni parecía él, llevaba la barba crecida y encima iba despeinado y con... pero qué mierda era eso que tenía pegado en la frente!

 

¡Jamás toques el timbre, sí, sí lo sé, debo de tener una recepción, pero no consigo el dinero para expandir mi local... jeje!

Ok...

¡Pasa, pasa!

 

Entré con miedo y me encontré con un gentío de gente correteando por doquier.

 

En primera, apaga el móvil o ponlo en vibrador, no mejor silenciador. Sí, puede afectar al equipo y después no quiero problemas con que  zumbidos molestosos estén en plena grabación.

¡Shino-sama por favor suba un momento, el señor Yuu-san le llama!

¡Que ya voy!

 

¿El señor Yuu?

¡Jajaja, ni que fuera un viejo!

Ambos usamos el elevador y bajamos al sótano. Sonreí al ver a Taro que nos recibía.

 

Se conocen, ¿no?

 

Preguntó Shino al vernos y mientras encendía un cigarrillo.

 

Claro.

 

Respondí dándole la mano.

 

Bien será más sencillo, te hicimos llamar porque Yuu es un incompetente.

¡Oyeee!

 

Ahí iba Yuu quejándose.

Mas me sorprendí al verlo con la mano vendada.

 

Qué te pasó.

Accidente de trabajo, nada grave, pero como vez no puedo coger la uñeta.

¡Jaaa, no es por eso, sino que no puedes sacar la puta canción y debemos hacer la mezcla hoy con el DJ!

¡Cállate!

¡Ay, por favor, no se pongan a fumar aquí!

 

Volteé al escuchar voces femeninas.

¡Demonios de dónde habían sacado tantas niñas! ¿Por catálogo a domicilio?

 

Demonios... ok, disculpen señoritas. Ni cagar puedo...

¡Shino!

 

Le gritó Taro.

 

Es que nos hace daño para la voz. ¿Ya empezaremos a grabar?

Sí, ahora mismo.

 

Ellas se quedaron calladitas al ver el modo tan terriblemente amable en que Shino-san les hablaba.

 

A lo que voy, su guitarrista no se apareció y encima no contesta el móvil, Le pedimos de favor a Yuu, pero mira cómo lleva la mano, así que eres nuestra única opción, Uruha-kun, ¿vale? Y no te preocupes que obvio que te pago.

No, bueno... gracias.

Yuu logró tocar la intro, pero el solo le salió fatal, así que te encargas de aquello tú, puedes hacerlo ahora ¿no?

¡Claro!

Yuu anda con él y ustedes señoritas... vamos al piso de arriba.

¡Ok!

 

Me pareció traumático ver tantas mujeres juntas, si bien eran lindas, no dejaban de ser bastante ruidosas. Seguro por eso Shino-san andaba con ese humor de perro, o quién sabe, si mal no recordaba Taro me había dicho que no solo era un solo grupo el que estaba grabando... sino también un nuevo dúo.

Suspiré agotado.

 

Deja que yo lo conecto.

Sientate ahí y estas son las notas, también toca la parte final porque mis dedos ya no responden.

Tanto te duele la mano.

 

Bromeé con Yuu, mientras Taro buscaba alcanzarme la guitarra.

 

Usa esta.

Gracias.

No es que me duela imbecil, sabes quien compuso la parte del guitarra... ¡cretino!

¿Eh?

 

Me senté sin entender nada.

Y comenzaron las quejas de Yuu. Que primero lo de su mano, que estaba cargando un par de cajas y entonces pisó mal y terminó en el suelo, no se dobló la muñeca, pero en el afán de sostenerse del pasamanos terminó por cortase la mano, que encima le retaron por no irse con cuidado. Después cuando pensaba que podría descansar en casa, resulta que ni siquiera por llegar temprano tuvo descanso, sino que apenas y abrir la puerta se encontró con los gemidos de "esos puercos transexuales", es decir Ruki y Akira, y no tuvo más que irse del lugar... y en el momento justo en que estaba a punto de...

 

¿Me ibas a llamar a mí?

No, iba ir directo a tu casa a joderte y que me invitaras a beber.

¡¿Eres imbecil?!

No, ¿pero a dónde iba a ir entonces?

 

Le miré para reprocharle, pero me quedé viendo las notas... 

 

Shino me llamó como loco y me dijo que necesitaba un guitarrista urgente para que tocara, vine y la cuestión es que terminé siendo estafado, ¡no querían alguien para tocar sino para componer!

¿Tú la escribiste?

¡No toda!

¡Pero hiciste un gran trabajo!

 

Interrumpió Taro sentándose a un lado de Yuu.

Miré como él le cogía la mano y le cambiaba el vendaje.

 

¡Pero es pop!

¿Y qué? Ahora suena genial.

Ya, ya Taro niña deja de hablar tonterías.

¿Y?

 

Dije que para que continuara.

 

Su guitarrista era el que debía terminar la composición y se largó, y no lo culpo.

Jajaja.

¿No que te gustan todas las mujeres del mundo?

 

Le piqué.

 

Sí, pero esas tías son unas brujas y además son muy nenas y aburren, no me dejaban en paz por lo que Shino tuvo que expandir el segundo piso y mantenerlas ahí para que no hicieran bulla, además que ellas no le hacen caso al manager.

¿Quién le hace caso al manager?

 

Ironicé.

Era la verdad, nadie, jaja, los tres reímos por un rato.

 

A lo que voy, solo tócala y punto, y ni te creas tanto que tu nombre o el mío van a aparecer por ahí, ya que los derechos son de no se quién, nosotros solamente estamos dándole los últimos arreglos.

De acuerdo.

 

Practiqué un par de veces la canción ante la mirada atenta de Yuu y Taro.

En un principio pensé que me pondría nervioso, mas... todo se dio naturalmente, no sentía vergüenza que la persona que mas me gustaba en el mundo se fijara tan atentamente a todo lo que yo hacía.

Incluso me sorprendí de Yuu al verlo tan serio escuchando y comprobando que yo no cambiara nada en cuanto él había escrito.

 

¡Bravo!

No sonó mal.

 

Me levanté rápido y dejé la guitarra en el trípode.

 

No es tan complicada como nuestras canciones.

Obvio, es simple. Y no porque yo...

¡Ya lo sabemos Yuu!

 

Dijimos al mismo tiempo Taro y yo.

Sin embargo, no todo quedo ahí. Luego tuve que tocarla en serio en presencia de Shino-san y el equipo de esas niñas cantantes. Al final tuvimos que ajustar una que otra parte y grabarla esa misma noche. Y aunque el trabajo no era pesado para mí, sí lo fue para los que se encargaron de hacer la mezcla. Aun lado solamente me quedé viendo como Shino manejaba su equipo, sí, me hizo recordar cuando íbamos al estudio del centro y grabábamos ahí, eran los técnicos quienes hacían el resto, después que nosotros entregáramos nuestras partes. A veces solo esperaba a que mi parte estuviera lista y me iba, dejando al enano que se encargara de lo demás, y no porque fuera un inconciente o no me interesase la banda, sino que tenía trabajo y debía irme pronto...

 

Ya casi son las tres de la mañana.

¿En serio?

 

Dije sin mirar a Taro.

 

¿Un poco de café?

Gracias.

 

Lo recibí de sus manos y me sentí confortado.

La noche oscura estaba hermosa. Fría y hermosa, se podían ver claramente las estrellas, incluso la brisa helada no hacía más que embellecer la noche.

 

Hiciste un buen trabajo.

Y espero mi recompensa.

Jaja... ok.

 

Sí, quería mi premio...  No obstante no podía reclamar lo mío ya que nos encontrábamos rodeados de muchas personas por doquier. Ah, pero el solo tenerlo a mi lado en silencio ya era bastante.

Sentía que ya no había nada que ocultar...  Tan solo un par de hombres, lado a lado... buscando algo de felicidad y tranquilidad... cómo podríamos causar daño...

 

Te invitaré a comer.

Vale, y después a casa.

Jajaja, solo piensas en eso.

¿Tú no?

 

Me giré para verlo.

Taro tenía ojeras...  sus manos blancas sostenían la taza celeste.

 

¡Muero de cansancio y al fin están...!

 

Maldije cuando Yuu se apareció.

 

¿Es café?

Sí.

Bien...

¡Vaya qué modales tienes!

 

Dije sin pensar.

Yuu no había tenido ni siquiera la decencia de pedirle a Taro que le diera un poco de su taza, y ahora se lo bebía de lo más feliz.

 

¿Qué hablas? ¿Necesitamos de eso Taro?

Por supuesto que no.

¡Ves, no te metas con nosotros, engendro!

 

Yuu se apoyó en el hombro de su amigo.

Y una envidia sin nombre me llenó...

 

... estúpido.

¡Engendro!

¡Baboso!

¡Oigan ya!

 

Los tres reímos.

Como ya no podía irme a casa, me dieron un espacio en el sótano para que descansara.

Mañana o más tarde sería un buen día... sí todo marchaba bien, tal vez podría raptarme a Taro por unas horas.

 

Ahora que lo pienso, ¿ustedes se conocen?

¿Eh?

Dios, en serio que hoy andas tarado por el golpe.

 

Le dije mortificado. ¿Acaso no era notorio que sí nos conocíamos?

 

Qué estas tratando de decirme.

Que sí Taro y yo estábamos conversando es lógico que nos conozcamos.

¡Eh, eh, deja de estar diciéndole Taro, eres un maleducado!

¡Mira quién habla!

 

¿Peleas sin fin?

Parecía como si toda la vida Yuu y yo no pudiéramos estar en paz.

Ni sé cómo dormí esa noche.

Tan solo recuerdo haberme recostado en el mueble del sótano y después abrir los ojos por los ronquidos que daba Yuu del cansancio de la noche anterior.

Demoré un tanto en reconocer el lugar, mas después...  supe que mi día feliz no lo sería tanto.

¡Descubrí como cinco mensajes de texto en donde Ruki me citaba a la prueba de Kai-kun! Y no se le pudo ocurrir mejor horario que a las doce del mediodía. Tuve tanta pereza al ver que eran las diez y media. Solo me quedó despertar a Yuu y decirle que teníamos una cita con Ruki.

No dejo de gritarme y más cuando en camino a la estación le dije de qué trataba el asunto.

 

¿Que qué?

Como lo oyes.

 

Dije refregándome los ojos.

 

¡Pero quién se ha creído ese tipo, solo yo puedo decir si se queda o no!

Como digas... aunque para Ruki ya está dentro, jaja, encima el tipo llama y le dice, o mejor dicho le exige ser el batero de Gazette.

¡Ya verá, novato imbecil!

 

Sonreí a mis adentros... 

No es que  no confiara en Ruki, pero teníamos que ser objetivos.

 

¡Apúrate engendro, qué haces pensando en las maripositas, corre!

 

 Algo me decía que el día estaría muy animado... y no solo por la prueba de Kai-kun.

 

Continuará...


 

 

Notas finales:

 

Hola a todos.

Gracias por los reviews y a las personas que se acuerdan de mi fico.

...

La verdad ando muerta...  ¡hacer una revista es complicado! Por lo que seré breve. Este es más un capítulo de transición que otra cosa, también un bonus completo de Yuu, Taro y Shimita. Así que una vez preparado el terreno la próxima semana ya veremos de lleno la entrada de Kai-kun a Gazette.

Gracias por leer y nos vemos la próxima semana, el día jueves.

Bye.

Manabuu. 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).