Capt 3: “Milo & Loim”
Al rato regresaban exhaustos después de un buen partido, no debería haber subestimado al pequeño, jugaba bastante bien, tan bien que le dio una paliza.
-¿y ustedes?-preguntó Noriko.
-fuimos a jugar vóley-ball, ¡sugy-kun es bastante bueno no da!
-nos pudieron haber invitado, que egoístas se llevan toda la diversión.
El hiperactivo sonrió comiendo su cereal de colores mientras Suguru optaba por una hamburguesa.
-buenos días muchachos-saludo Tohma cerrando su celular.
-¡hola Tohma!-dijo el hiperactivo tirándosele encima. -Ryuichi-san ¿serías tan amable de bajarte?
-jajaja… gomen Tohma-se disculpó avergonzado.
-Me acaba de llamar Nakaito-san preguntaba si vamos a ir a su fiesta de verano, esa que da todos los años.
-por mí no hay problema pero tendríamos que ir a la tienda por algo de ropa-centelleo de ojos y sonrisa de extremo a extremo por parte de la peli violeta.
-yo tampoco tengo inconveniente ¿tu vas suguru?-preguntó en un tono casual, pero mirándolo con secreta sensualidad.
-supongo que esta vez sí que asistiré, el año pasado me refregaste en la cara que era un niño, todo depende de ti primo-dijo el menor algo indignado.
-pues yo soy partidario de rechazar esa invitación, especialmente si se conoce el terreno, temo por que suguru-kun no pueda manejar la situación, ustedes ya conocen a los hijos de Nakaito-san, saben cómo tratarlos, sin embargo…-el rubio miró a su primo con preocupación.
-vamos a la fiesta Tohma, yo protegeré a suguru, prometo estar a su lado.
-yo también echaré un ojo a ese parcito de pervertidos.
-¿¡pervertidos!?-se asustó Fujisaki.
-aparentemente son amables con todos, pero sus intenciones ocultas suelen ser un poco… ¿Cómo podría decirlo? …hem… algo sado-mazos...-habló la peli violeta sonrojada. Ryuichi tenía la mirada seria, sabía muy bien de lo que ese par de criajos era capaz, había aprendido a no fiarse de las apariencias… miró al jovencito, al parecer estaba un poco asustado, para calmarlo le sonrió amistosamente y le acarició el cabello.
-no temas… vamos a divertirnos en esa fiesta, creo que irán bandas en vivo y que vamos a cantar un par de canciones, tú podrías acompañarnos en los teclados.
-primo…
-está bien, Sakuma-san te lo encargo ¿sí? Bueno preparémonos para salir al centro comercial-ordenó Tohma bajo su típica sonrisa.
Ya en el centro comercial.
-suguru-kun usas demasiados tonos ocre y negro, deberías usar colores más vivos, es verano después de todo-opinó ella con ojo crítico.
-¿pero no se verá muy chillón?
-que chillón ni que nada, además la fiesta es casi informal, con unos pantalones verde oscuro, holgados con bolsillos y una camisa granate de mangas cortas te verás de maravilla.
-¿y Sakuma-san? A él no le dices nada Ukai-san.
-Si hay algo en lo que no debo meterme cuando salimos de compras es en los gustos de Ryu-chan… él decide qué tipo de ropas usar para la mejor ocasión, ya sea escandalosa o refinada-ambos se quedaron contemplando como un adulto Sakuma Ryuichi hacía elección de sus prendas para esa noche.
-me quedo con esto, esto y esto, ah… y esto también, además desearía que me mostrara aretes sin par.
-claro Sakuma-san, déjeme mostrarle, tengo aretes de gancho y atornillados…
-no se moleste, son dos de gancho y uno atornillado, ambos de plata y el atornillado que sea de 0,5 milímetros, con rubí incrustado color ciruela… debe ser de plata, no aceptaré otro material.
-…ha… por supuesto que tenemos de esos ¿se los quiere probar ahora?
-no, los llevaré en sus cajas-dijo mientras Noriko y Suguru cuchicheaban a sus espaldas.
-¿qué te dije? Él es de esas personas que saben exactamente qué y cómo comprar, es un cliente Premium en esta tienda, las dependientas ya conocen su talla, su peso, su estilo de vestir, sin mencionar que se las cae la baba cuando lo espían en el probador, en fin una pila de babosas con uniforme, pero ¡ay de ellas! si no está conforme con la atención o los productos, Ryuichi se pone el triple de problemático de lo que se pone en NG, podría mandar cualquier tienda a la quiebra con solo lloriquear un rato… así que según Ryuichi este local es el mejor del centro comercial-Suguru aunque escuchaba y entendía perfectamente las palabras de la peli violeta, no estaba allí del todo pues se encontraba admirando el serio semblante del cantante que lograba ponerlo en ese curioso estado de excitación…
Nunca había sentido cosas así con él y ahora ese maldito viajecito le estaba haciendo experimentar “cosas” que ni con una chica había imaginado sentir…
¿Sería el calor del verano? (Ndkarura: o_O puede ser, jejeje >///< tibio, tibio)
¿Sería el estrés que le provocaba trabajar con un inútil como Shuichi, un desinteresado como Hiro o un explotador como K?...
(Ndkarura: o_O puede ser)
¿O acaso era que había sucedido sin más?
(Ndkarura: en hora buena chico haz acertado!!!!^_^)
(Ndsuguru: bueno, me vas a dejar continuar Karura-san???… ¬//¬)
(Ndkarura: está bien, ¡pero no te pongas como ogro hombre! O_O)
(Ndsuguru: entonces ya no te cuento nada ¬ ¬)
(Ndkarura: vale te dejo de fastidiar, ¡¡¡pero cuenta, cuenta o nuestras lectoras se quedarán colgadas!!!! >///< Entiéndanlo el pobre está estresado U-u…)
(Ndsuguru: U_U)
Mientras tanto, Tohma también había terminado sus compras escogiendo un sombrero que le llamó la atención para añadirlo a su preciada colección.
Llegó la noche, hasta ese momento todo seguía marchando bien, sentados en la sala Tohma y su primo esperaban a que Noriko terminara de vestir al hiperactivo… todo era un caos en el segundo piso…
-¡Noriko-san, Sakuma-san, es tarde debemos irnos!-llamó el rubio.
-¡que no me llames Sakuma que se oye muy feo!!-chilló con voz infantil.
-¡ven para acá muñequito o voy a tener que usar lo que no te gusta!!
-¡no, eso no Noriko-chaannn… duele muchoooo!!!!! ¡¡¡BUAAAAAAAA!!!!!!!!!
-¡pues hace caso entonces y ponte la ropa de una condenada vez!!-gritó eufórica la peli violeta, abajo en el primer piso Tohma y suguru sonreían con un tic nervioso en el ojo y unas cuantas gotitas sobre sus cabezas denotando su estado de irritabilidad nivel 1, el 2 ya era más notorio, pero más exaltado, el nivel 3 ya era algo como: “¡MEJOR SALGAN CORRIENDO DE MI VISTA ANTES DE QUE LOS MATE!”, aunque casi nunca lo usaban.
-¿crees que alguien así podría protegerme?-señalo al segundo piso.
-no conoces a Sakuma-san… más te vale no ser su enemigo, si eso ocurre probablemente termines en el hospital…-sonrió mientras su anonadado primo comenzaba a sentirse arrepentido de sus vacaciones.
-¡listo na no da!-suguru se volteo a verlo, suspiro involuntariamente al ver aquella camiseta de tela negra transparente y holgada con vuelitos dejando a la vista su perfecto ombligo adornado con un pircing de plata y un pequeño diamante incrustado en él…
pantalones ajustados de brillante cuero negro y cinturón de cadenas, un collar de gato con cascabel plateado en el cuello le daba la impresión de ser un sensual gatito blanquinegro… llevaba además los aretes sin par comprados aquella mañana y unas finas hawaianas (sandalias) negras con incrustados de zircón, simplemente no podía dejar de mirarle, de hechizarse, porque de verdad ya no tenía fuerza para hacer frente a las arremolinadas sensaciones que lo torturaban, su corazón latía a mil por hora, sus manos transpiraban y una serie de escalofríos se deslizaban por su espina dorsal, provocándole una ligera erección que lo puso aún más nervioso. Para disimular el sonrojo miró a la peli violeta que llevaba un hermoso vestido de noche color lavanda y un peinado que dejaba caer sus desordenados rizos sensualmente sobre sus desnudos hombros.
-bien, nos vamos-dijo el rubio percatándose del sonrojo del menor, antes de subir al automóvil el cantante se acercó al menor.
-estás muy lindo sugy, pero te falta algo…-suguru bajo la mirada incapaz de sostenerla con la suya, no podía mirarlo sin que el corazón le saliera disparado.
-¿a si?... ¿y qué sería?
-es que… te ves muy formal con esto abrochado así… ¿me permites?-preguntó pasando sus temblorosos dedos por el suave cuello, el menor solo afirmó con la cabeza sintiendo como el primer botón de su camisa era desabrochado, aquellos dedos se deslizaron hasta encontrar el segundo botón… el tecladista de Bad luck casi tembló…
-listo, así te ves perfecto… ¿nos vamos?...-Sakuma le guiñó un ojo y el pequeño anonadado volvió a asentir mientras se le atragantaba la saliva en la garganta… ¿Cómo era posible que alguien que conocía de hace tiempo lo volviera loco solo con su presencia?
En el coche se escuchaba Sleeping beauty a todo volumen, Noriko se ponía la última capa de maquillaje, suguru reía con las ocurrencias de Ryu-chan, Tohma al volante riéndose con ellos… todo perfecto.
Llegaron a la fiesta, la mansión era enorme y con piscina, los jardines podados y bien cuidados se extendían por los alrededores, la música estaba alta, la gente entraba y salía con vasos de champaña u otro licor festejando, un aparca coches salió atentamente a recibirlos, entraron en la residencia en cuya recepción estaban las figuras más importantes de la fama nacional: actores, cantantes, modelos y artistas varios disfrutaban de la velada, el ambiente y la música de fiesta hizo que el hiperactivo tomara la mano de Suguru y se adentrara hasta la zona de la enorme piscina en las afueras, el ojimarrón se turbo al sentir la cálida mano de su ahora protector, lo miró de reojo como pidiendo una explicación, la expresión seria del cantante se suavizó dedicándole una encantadora e inocente sonrisa, sonrojo por parte del menor, optó por soltarse de su agarre adelantándose hasta su primo que no hacía más que saludar con su contagiosa sonrisa al igual que Noriko.
-¡hola Seguchi! Qué bueno que viniste a nuestra fiesta de verano ¿no le acompaña su esposa?-preguntó un hombre de avanzada edad, como de unos cuarenta y tantos, regordete que podía deducirse era el dueño de casa.
-oh Nakaito-san, es un placer venir a su fiesta este verano también, la verdad es que mica-san se quedó en Kioto a cuidar de su padre, pero traje a mis amigos y a mi primo Suguru-se volteó llamándolo con la mirada.
-le presento a Fujisaki Suguru, mi primo.
-ha…es… el tecladista de Bad luck, el grupo que estás promocionando ¿verdad?
-así es, ¿y cómo están sus hijos? ¿Vinieron a la fiesta?
-pues sí, desde Ámsterdam, pensé que este año se quedarían allá, pero les encanta venir todos los años así que, pues ni modo… no puedo decirles que se devuelvan…-habló el hombre con desgano, dicen que los padres siempre conocen a sus hijos, estén en la casa o en la última punta del iceberg… Tohma sonrió aunque por dentro le desagradaba el hecho de que ese par de mocosos pervertidos estuviera en el lugar, de solo recordar que el año anterior esos mellizos se hubieran querido pasar de listos con su mujer y que ésta con el carácter marca Uesugui que poseía, los haya mandado a volar de un golpe a la piscina… todo era entendible, si, Seguchi Tohma esta vez tomaría cartas en el asunto si ese par de diablillos quisiera sobrepasarse en especial con su primo.
Y es que desde que los conoció sabía que eran unos depravados bisexuales capaz de practicar cualquier idea sado-mazo nueva que aprendieran por ahí y ahora que se habían ido a Ámsterdam con mayor razón (Ndkarura: ¿Qué no lo sabían? Ámsterdam hoy es conocida como la capital del sexo XXX) Tatsuha, sin duda se llevaría excelente con ellos.
-buenas noches Seguchi-san, así que decidió venir después de todo-Un muchacho como de 17 años, ojos verdes y cabello rubio claro se acercó a saludar, sonreía con cierta malicia a Suguru, a continuación otro joven exactamente igual que el primero a diferencia de que este llevaba un pircing en la ceja izquierda, se acercó también mirando al grupo reunido.
-lástima que mica-san no haya podido venir ¿escuche que su suegro enfermó Seguchi-san?-preguntó el recién llegado, Tohma les sonrió cínicamente como sabía hacerlo.
-pues sí, enfermó, es una lástima ¿verdad? Con lo bien que se lo pasó la vez pasada empujándolos a la piscina…-Suguru miró a su primo sorprendido, aquella había sido una indirecta muy obvia, los mellizos fruncieron el ceño disgustados y siguieron charlando.
-¿y tú quién eres? No me eres conocido.
-ah, hermano ¿Cómo no lo vas a conocer? Lo hemos visto en el MTV Japón muchas veces, eres Fujisaki Suguru de Bad luck ¿no es así? Soy Milo, encantado de conocerte-el joven le ofreció la mano para estrecharla y el ojimarrón la correspondió, aunque después de ver la mirada reprobatoria de su primo optó por soltarla rápidamente, el otro par también se presentó…
-para mí también es un placer conocerte, me llamo Loim ¿te gustaría venir con nosotros a saludar a unos amigos que estarían felices de conocerte? Ellos adoran a Bad luck, les agradaría saber que está aquí su tecladista…vamos-el chico estuvo a punto de jalarlo del brazo ante la atónita mirada de todos, Suguru nervioso no encontraba escapatoria hasta que el brazo de alguien por la espalda lo retuvo en el lugar…
-¡Sugy-chan! ¿¡Dónde te habías metido na no da!? ¡Kumagoro y Ryu-chan estaban muy preocupados por ti na no da!!!-exclamo con su infantil vocecita de niño con berrinche…
-Sakuma-san…-tartamudeó al sentir el calor de su pecho tras la espalda, se sonrojo de nueva cuenta mientras el parcito los miraba enfurecidos por la frustración de sus planes, Sakuma sonrió desafiante y procedió a besar la mejilla del pequeño con evidente sensualidad…
-no te me pierdas de nuevo cielo ¿no ves que preocupas a tu novio?
El rubio tecladista de Nittle Graspper sintió un escalofrío en su espala al ver la escena, el dueño de casa sonrió arqueando una ceja con una gotita de sudor cayéndole por la frente, el par de chicos rubios miraba al cantante con odio mal disimulado, Noriko sonreía nerviosamente y Suguru, bueno Suguru…
Estaba en shock…
…de pronto sintió que el hiperactivo se lo llevaba de la mano al centro de la fiesta despidiéndose de los presentes.
-Tohma-chan, están tocando la canción favorita de kumagoro y nos pidió que lo acompañemos a bailar ¡¡¡¡bye, bye na no da!!!-una brisa fría corrió entre el grupito dejándolos anonadados, el presidente de NG no se esperaba esa salida por parte de su amigo, sabía que sin dudar protegería al pequeño, pero no sabía de qué manera… claro, era valido que haciéndoles creer a esos pervertidos que era su novio, pero tal vez si todo era una actuación las cosas podrían confundirse y eso le haría daño a su primo…
En tanto en una pista de baile llenísima de gente…
-¿¡por qué hizo eso?!-alegó el tecladista enfadado y sonrojo.
-¿hacer el que?-preguntó el castaño bajo su apariencia inocente y con el conejo rosa sobre la cabeza.
-¡el beso en la cara y decir que somos novios!
-haaa… eso… kuma-chan me dijo que era buena idea, así ese par de idiotas no se acercarán más a Sugu-chan.
-…pero… no somos novios en realidad…-El cantante con su faceta adulta miró su carita de desilusión, otra vez ese cosquilleo en el estómago, el corazón latiendo con prisa… sí, le gustaba ese niñato, había tratado por todos los medios de esquivar no solo las sensaciones si no también los sentimientos que cada día comenzaban a aflorar contra su voluntad comprendiendo que cada vez se volvía más vulnerable a él, a esos ojos marrón tan profundos.
-¿por qué dices eso Suguru-kun? ¿Acaso estás diciendo que quieres que sea tu novio?-preguntó esta vez con cierto tono travieso provocando que el aludido se escandalizara con evidente nerviosismo.
-¿he?...¡¡No, no malentienda! ¡No quise decir eso!
Continuará…