Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

mi loco amor de verano por Karura

[Reviews - 22]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo: hasta aqui todo bien como decía el primer capitulo ¿que le esperara a ese tecladista tan responsable de bad luck?

 

 

Aclaraciones antes de comenzar:

[*] = pensamientos del personaje.

[-] =los personajes hablan.

 

La serie Gravitation no me pertenece, pero me encantaría que fuera mia jaja... bueno, esop que disfruten el fan fic 

 

La noche había transcurrido con taciturna calma, todos sumergidos en su propio mundo de sueño, aunque el mundo del pequeño Fujisaki se estaba volviendo más caliente de lo normal… 

En su sueño el cantante entraba a la sala de grabación de Ng destinada a Bad luck donde tocaba su teclado como de costumbre, no había nadie allí excepto ellos dos.

No le miraba con inocencia como solía hacerlo, su mirada era la de un hombre hambriento de placer, comenzaba a acercársele con peligrosas intensiones acorralándolo contra la acolchada pared, sentía su respiración tan real contra su cuello, además de su intoxicante aroma a champú de fresas penetrando en su nariz, tenía miedo de su cercanía, pero al mismo tiempo le gustaba sentirse en su papel de víctima, ansiaba sus caricias, lo deseaba con pasión… en aquél sueño él le sonreía con complicidad borrando el miedo del comienzo y lo besaba como si su labios fueran a desaparecer en cualquier momento. 

Suguru sentía como le desabrochaba el pantalón con urgencia y él se dejaba hacer sin más… que le importaba que entrara pedro, Juan o diego… o si entraba K con su queridísima mágnum, le importaba un puto comino, no se detendría y punto… si era un sueño tampoco quería despertar, le rodeó con los brazos el cuello atrayéndolo a su joven cuerpo, buscando su lengua con la suya, sintiendo las manos del castaño recorriéndolo entero por debajo de la ropa… 

-sugy-chan… eres un chico guarro después de todo ¿ne?-siseó el cantante en su oído mientras le frotaba insistentemente la erección con la mano, el muchacho atinó a gemir conteniendo sus jadeos…

Aquel fue su sueño aquella mañana y un Ryuichi Sakuma recién bañado se encontraba sentado a los pies de la cama contemplando divertidamente como el cuerpo del adolescente se estremecía entre sueños. 

-¿con que crees que sueña kumagoro?-preguntó al conejo de felpa sobre su cabeza con suma inocencia, pero no tardó mucho en descubrirlo… su carita inocente desapareció arqueando divertidamente una ceja y esbozando una atípica sonrisa lasciva… su mirada lujuriosa repasó la sábana que lo cubría notando lo evidente… después de ver la “mancha” y el “bulto” volvió a ver la cara del chico, sus mejillas sonrojas lo delataban. 

-*con que un sueño húmedo… ¿Quién habrá sido tu amante en tus sueños pequeño?-pensaba el cantante contemplando sus labios finos y suaves… sintió un cosquilleo en el estómago y respiró pesado ante la sensación de placer que sucumbía su cuerpo, justo en el instante el jovencito se despertó reparando en que el castaño ahora con su forma infantil jugaba en la alfombra del cuarto con kumagoro. 

-¡ya te despertaste Sugy-chan! ¡Vamos a desayunar na no da! -haaa… esto… yo… me quedé dormido…-dijo algo turbado con sus mejillas sonrojas sin atreverse a mirarlo directamente, el recuerdo de sus sueños le torturaba. 

-No importa, además se veía que estabas teniendo un agradable sueño ¿verdad que si kuma-chan? ¡Bueno Ryu-chan y kumagoro prepararán el desayuno na no da!-dijo retirándose de la habitación llevándose al peluche sobre la cabeza…  

Una vez que estuvo solo repasó lo dicho por el vocalista… “No importa, además se veía que estabas teniendo un agradable sueño ¿verdad que si kuma-chan?”… acto seguido: recordó el susodicho sueño, reacción: rojo hasta las orejas, pasó de pronto su vista por la habitación y de reojo miró las sábanas O////////O ¡ahí se le cayó el mundo encima!...  

Con horror contempló que su erección aun seguía latente y que para variar chorreaba… ¿lo habría visto y por eso dijo esas cosas? ¿Cómo podría tener tan mala suerte? ¿Se le estaría pegando la idiotez de shindou-san? eran todas las preguntas que se formulaba. 

-jajajajaja… y yo que pensé que esas cosas solo le pasaban a shu…-reía Hiro mientras el pelinegro empuñaba la mano irritado.  

-bueno, me dijiste que te contara lo que me pasaba y aquí me tienes, sin embargo, será mejor que me vaya, solo estoy perdiendo el tiempo. 

-gomen… gomen…, lo siento además fuiste tú el que empezó a contar detalles, yo no te los he pedido suguru-kun-le dijo sonriendo, el tecladista volvió a sonrojarse y suspiró. 

-¡es que confiaba en ti!, pero veo que ya no puedo ¡me voy! 

-matte, matte lo juro que no me he burlado de ti, en serio, es solo que como nunca habías confiado en mí para decirme estas cosas tan intimas… confíamelo todo… si quieres desahogarte con alguien sobre tus pormenores no hay problema, somos amigos, sabes que jamás te haría daño ni a ti, ni a Shu. 

-está bien, pero no te burles ¿es que nunca has tenido sueños húmedos con Ayaka-san?-Hiro se quedó de piedra…  

El sonrojo llenó sus mejillas mientras en su mente desfilaban muchas imágenes de índole intimas y xxx, no era que fuera un pervertido como tatsuha, pero ya llevaba saliendo más de un año con la muchacha y aun no ocurría nada de lo que sabemos, tan solo algunos besos apasionados en el sofá y luego ella lo detenía diciéndole que quería guardarse para el matrimonio… y simplemente comprendía y dejaba pasar, porque el amaba muuucho a Ayaka y esperaría pacientemente hasta el matrimonio ¿cierto?... ¡¡¿CIERTO?!! Se lo estaba comenzando a plantear cuando la mirada expectante del jovencito lo sacó de sus pensamientos. 

-es… algo normal ¿no?, bueno, prosigue ¿Qué más ocurrió?-dijo el pelirrojo cambiando de tema sintiéndose algo incómodo. 

-etjum…-tosió-…a ver… cuando bajé a desayunar él estaba comiendo su kellog`s no sé qué cosa, con su leche achocolatada extra no sé qué y me dije: “actúa natural, actúa natural” y entonces… 

Durante el desayuno no ocurrieron mayores acontecimientos. Tohma estaba leyendo el periódico en la terraza oeste acompañado de Noriko disfrutando de un simple desayuno de café con tostadas, Sakuma disfrutaba de sus Kellog`s con miel extra y leche achocolatada con extra calcio, Suguru optó por una leche simple y tres bolitas de arroz rellenas de dulce, bastante tradicional pensó el castaño observándolo de reojo, pero le gustaba la forma con la que comía, se parecía a Tohma, con la única diferencia que esos ojos marrón le parecían de fantasía… otra vez el sol iluminando esas orbes ¡por dios, que chico tan lindo! Suspiró inconscientemente. 

-¿le ocurre algo Sakuma-san? 

-¿Oye sugy-chan? Hace un lindo día… t… te gustaría ir a…  

-con que ya están desayunando, Noriko y yo nos preguntábamos si les gustaría ir de buceo con nosotros, el yate de ryofumi-san viene en camino y nos hizo la propuesta…

-Ryuichi se había quedado con la boca abierta a punto de hacer una invitación al pequeño, pero el rubio le tomo la delantera. 

-¿bu… bucear?-balbuceó el menor atónito… 

-¡viva! ¡Wiii!! ¡Ryu-chan y kumagoro podrán ver a los pececitos NA NO DA! 

-primo, ¿Quién es ryofumi-san? -es el propietario de un balneario que está a cinco kilómetros de aquí, allí alquila yates, motos de agua y otras embarcaciones, hace mucho que le conozco ¿Qué opinan? 

-¡kumagoro y yo dicen que si na no da!! -también yo estoy de acuerdo-dijo la peli violeta. 

-pero primo, tu sabes que no se me da bien nadar. 

-descuida, estarás conmigo todo el tiempo y además tendremos oxigeno como para tres horas. -Está bien. 

-entonces está decidido-dijo el rubio tecladista con su elegante sonrisa. 

 

Bajo el mar el rubio cogía de la mano al menor desplazándose por los cardúmenes y arrecifes. Ryuichi de la mano con kumagoro jugaba con los pececitos de colores y Noriko le seguía asegurándose de que no fuera a meterse en problemas, afortunadamente no los hubo. 

Al atardecer ya se encontraban navegando hacia la casita de verano, una vez llegado a la orilla se quitaron los trajes de buzo quedándose en bañador y se despidieron del empresario prometiendo que volverían a visitarlo uno de esos días. 

Para el final del día Ryuichi y Suguru ya comenzaban a tirarse arena, jugando como unos críos junto a las olas, Tohma y Noriko en sus sillas de playa solo les observaban, en especial el rubio… la conducta de su primo había cambiado mucho de la noche a la mañana y sabía que el causante era Ryuichi… él poseía el don innato de atraer a la gente, como si fuera un poder mágico que hacía que se prendaran de él sin remedio, lo que no sabían era que el adolescente tal vez se estaba prendando… demasiado. 

 

Después de haber pasado casi todo lo que restaba de tarde en la playa el trío Nittle Graspper y el anexo Suguru regresaron para la cena. 

 -¿Cómo te lo has pasado Fujisaki-kun?-preguntó la peli violeta al muchacho de ojos marrón. 

-pues bien, me he divertido bastante, pero supongo que como hace tiempo que no me daba un buen paseo y estoy algo cansado. 

-debe ser la poca costumbre, no puedo decir lo mismo de este muñequito, “hiperactivo e incansable”-señaló la tecladista dejando ver a un Ryuichi que seguía metido entre las olas…  

-¿te gustan las ensaladas?


-me fascinan. 

-a mi también-dijo Tohma cogiendo las toallas y el quitasol… 

-pues vamos a preparar unas buenísimas de seguro Ryu-chan querrá helado, todavía hace calor. 

-oye Noriko-san ¿Qué te parece si le mostramos a Suguru-kun el video inédito de nuestra última gira? 

-eso sería fantástico ¿te gustaría quedarte a verlo con nosotros? 

-Claro, por mi no hay problema… 

-¡muñequito!!!! ¡Vamos a comer, sal del agua!!!! 

-¡Ya voy NA NO DAAA!!!!-chilló el cantante saliendo de entre las espumosas olas…  

Suguru miró hacia atrás contemplando como el ajiazul caminaba por la orilla con el agua chorreando por su dotado cuerpo proporcionándole una embriagadora sensualidad, Noriko le entregó una toalla al cantante, estaba acostumbrada a verlo en cueros y era ella la que a veces lo vestía como si fuera su hijo, en cambio el menor no podía opinar lo mismo… era curioso que un tipo como Ryuichi Sakuma pudiera provocarle tantas sensaciones con solo mostrar parte de su cuerpo. Ryuichi notó la mirada del joven tecladista y le sonrió como si cualquier cosa, dejando que su aire juvenil distorsionara lo que en realidad presentía. 

 

Rato después todos frente a un enorme televisor disfrutaban del susodicho video, descansando sobre los cómodos sillones blancos que adornaban la estancia. Noriko y el hiperactivo reían de buena gana al recordar sus travesuras durante los momentos vividos de aquella gira, Suguru contagiado por el ambiente también reía mientras Tohma se llevaba una copa de vino a la boca… 

-¡mira Tohma esta es la parte donde te tropiezas al entrar en el escenario!-reía el hiperactivo agitando al conejo rosa, los demás soltaron una carcajada mientras el rubio suspiraba resignado con un pequeño rubor en sus mejillas. 

-¿quieres helado? 

-¿he?..-atinó a decir desconcertado el más joven. -que si quieres helado… sé preparar unas bananas Split exquisitas-invitó el cantante. 

-¡ay, prepárame una con salsa de fresa Ryu-chan!-suplicó Noriko. 

-¡vale! ¿Tú Tohma? -no, gracias con esto ya he tenido suficiente. 

-bueno… ¿y tu… vas a querer sugy-chan?-preguntó inocente. 

-sí, ¿quieres que te ayude en algo? -^ - ^……. 

Solo bastó esa sonrisa y un gesto de “sígueme” para que el joven ojos marrón le acompañara a la cocina, en la nevera habían variados helados de todos los sabores posibles y distintos tipos de salsas en el compartimiento de más abajo, el joven suguru sacó las copas para helado y unas cuantos barquillos, Sakuma sirvió las porciones correspondientes junto con las bananas, la crema, las salsas y finalmente una guinda dulce en cada copa. 

-¡listo, no da!...-dijo lamiendo las sobras de una enorme cuchara. 

-vamos a servirlos… 

-…o yeeeeee…-sonrió coqueto. -¿eh? -tienes helado en la nariz…-señaló amablemente mientras el muchacho anonadado reaccionaba al fin. 

-¿en serio? ¡Hay que pena!-estaba a punto de limpiarse con el puño, pero… 

-¡no, quita, quita!, déjaselo a Ryu-chan na no da…-sugirió aún más coquetamente mientras tomaba cuidadosamente su rostro con las manos y se acercaba a darle un delicado lengüetazo en la nariz…

los ojos del ojimarrón se abrieron de par en par dejando entrever su grado de turbación, el corazón se le agolpó con fuerza, ni siquiera deseaba separarse, Ryuichi era un imán en el más amplio sentido de la palabra. 

-¡listo… ahora si vamos a comer helado!-declaró el cantante llevándose la bandeja con los postres…  

Cuando el tecladista reaccionó, estaba solo en la cocina tocándose todavía la nariz, percatándose de que algo no cuadraba… 

-*¡pero seré idiota! Todavía ni habíamos comido helado, así que no había mancha… ¿no había mancha?... entonces él… 

-¡tu helado se derrite sugy-chan!-anunció con su vocecita infantil apareciendo con el conejo en el marco de la puerta. 

-ya… ya voy…-su carita estaba al rojo vivo…

-*¡diablos! ¿Acaso se está burlando de mi?-bramó para sí mismo, odiándose por actuar como una colegiala enamorada, cuando todavía no se enteraba de lo que su propio corazón quería comunicarle… así son las cosas del amor, uno termina escuchando sus sentimientos bastante más tarde de lo que se debiera.   

Después de disfrutar el mantecado comentaron algunas anécdotas relacionadas con el video, a veces el muchacho se encontraba con la mirada del mayor y no podía despegarle la vista… y para disimular, sacaba a colación sus propias anécdotas sobre Bad luck, de cómo Shuichi siempre se metía en problemas antes de aparecer en el escenario o cuando les hacía pasar alguna vergüenza y con Hiro tenían que hacer como que ni lo conocieran, todos rieron de buena gana. ^^   

Poco después Tohma y Noriko se despidieron para descansar en sus respectivos cuartos, mientras Ryuichi y Suguru nuevamente comenzaban a experimentar una especie de nerviosismo, inquietud y ansiedad, como la sensación de tener gusanos danzando en sus propios estómagos. 

Suguru terminó de lavar las copas en la cocina y subió al cuarto, tomó su pijama de satín blanco y entró al baño… una vez dentro comenzó a sacarse la playera, cuando de pronto el sonido de la ducha corriendo lo desconcertó y más aún cuando esta se cerró…  

Algo le decía que debía salir de allí en ese preciso momento, pero antes de que pudiera reaccionar el cantante salió de la mampara en su traje de Adán, buscando una toalla que por accidente tampoco había llevado consigo.

 

 O//////////////////////////////////////////////O 

 

Ambos se contemplaron atónitos y un asomo de sorpresa se dibujó en el rostro de Ryuichi, aunque luego se relajó… 

-¿vas a ocupar la ducha Sugy-chan? Kumagoro y Ryu-chan ya están listos. 

-n…no yo… solo, venía a cambiarme…-expresó con dificultad sintiendo que su cara se encendía como una brasa al ver lo bien dotado que era… por delante.

>//////////////< 

-ha…bueno, na no da-sonrió pasando por su lado, tan cerca que el calor que su piel emitía hacía contacto con la suya… 

Al irse, la mirada marrón le siguió enfocándose en su bien cuidado trasero, como si hubiera sido esculpido por los dioses, en definitiva mirara por donde lo mirara ese hombre era perfecto. 

-*¿qué diablos me está pasando con este tipo? Hasta donde sé a mí me gustan las chicas… ¡no puedo entenderlo!-pensaba confundido el jovencito mientras se ponía la pijama. 

Cuando salió, el cantante ya estaba vestido con su pijama estampado de kumagoros. 

-siento haber entrado sin avisar, es que no escuche el sonido de la ducha. 

-no te preocupes por eso… no me afecta…-decía acomodando a su peluche entre los brazos  

-Buenas noches Sugy, kumagoro te desea “dulces sueños”-hizo énfasis en las últimas dos palabras de manera traviesa, dejando a un Fujisaki más avergonzado de lo que ya estaba, pobre chico…

O/////////O  

Se sentó en su propia cama y lanzó un suspiro, estaba inquieto, no tenía ganas de dormir y lo peor era que una ola de calor comenzaba a azotarlo haciendo que decidiera meterse a una ducha de agua fría, pero parece que fue para peor, su cuerpo reaccionó volviéndose más caliente. 

Eran más de las tres de la mañana y aún no podía conciliar el sueño, se revolvía en la cama sin saber qué hacer, se volvió a incorporar observando como la luz de la luna delineaba los perfectos rasgos faciales del ser que entorpecía su descanso nocturno…  

Evocó los recuerdos más recientes de su memoria… ¡por kami! ese ser tenía un cuerpo tan sensual, todo en él era perfecto, su mirada aguamarina intensa, su piel semi-bronceada… su miembro en semi-erección… ¡pero en qué diablos estaba pensando!... ¡rápido, rápido, tenía que salir de allí rápido, a cualquier parte, pero ya! Se levantó de la cama camino al balcón, se sentó en una silla tratando de calmar el ritmo de su agitado corazón, miró el mar con la enorme luna llena reflejada en él. 

-soy un idiota, tal vez debería haberme quedado en Tokio… 

-no digas esas cosas tan feas Sugy-kun… ¿no ves que haces llorar a kumagoro?-decía un lloroso hiperactivo apareciendo por los amplios ventanales que daban al balcón, el tecladista se giró atónito, de seguro lo había despertado con sus carreras por la alcoba, de seguro Shuichi de tanto acercársele lo estaba convirtiendo en un loco o algo… 

-lo siento si te desperté. 

-hace demasiado calor, Ryu no podía dormir, ni kuma-chan tampoco. 

-sí, creo que la noche está muy cálida-expresó recostándose contra el respaldo de la silla de playa, Ryuichi hizo lo mismo poniendo al conejo sentado en su pecho… hubo un largo silencio entre ellos… entonces… 

-supongo que necesitas a alguien cuerdo con quien hablar…-su voz se oía suave y madura, era el adulto Sakuma quien había abordado la conversación, ya no el pequeño Ryu-chan. 

-supones bien, pero tampoco quise decir que fueras loco… -déjalo y dilo… sé que no te caigo bien por esta faceta de niño que suelo llevar todo el día. 

-no, eso no es cierto… la verdad es que me parecía extraño, hasta cierto punto enigmático, pero no me desagrada… en serio… 

-¡qué alivio NA NO DA, pensé que yo y kumagoro te caímos mal!-exclamó sonriente. 

-tienes tu lado simpático a pesar de que a veces el sentido se te va por las nubes… 

-y tú tienes mucho mejor juicio que un adulto a pesar de tu edad, pero deberías divertirte más a menudo… 

-sí, tienes razón, los años intentando superar a mi primo pasaran tan de prisa que estoy seguro cuando llegue a ser anciano voy a seguir en las mismas… 

-nunca es tarde para un cambio ¿Por qué quieres ser igual a él?-le intrigó saber al castaño. 

-porque Tohma… es lo más cercano a un padre… que he tenido…-dijo casi en un hilo de voz, el castaño contempló la mirada del pequeño perdiéndose en el firmamento de la noche, había tristeza en esos ojos adolecentes... 

-comprendo na no da…

-dijo dedicándole una sincera sonrisa que fue correspondida con otra de igual virtud.  

En el horizonte rocoso y montañoso el sol hacía acto de aparición, mientras dos corazones latiendo con fuerza salían a recibir el alba…  

-no tienes nada de sueño ¿o sí? -para nada… 

-vamos a la playa, juguemos un partido de vóley-ball ¿sabes jugar? 

-por supuesto, aunque no soy muy bueno que digamos… 

-no te preocupes sugy-chan, Kumagoro y Ryu-chan te enseñarán a jugar ¡será divertido!  

-está bien, vamos-el par entró a la habitación buscando su ropa de playa, algunas toallas y cuando estuvieron listos bajaron a la cocina a buscar algunos refrescos, la pelota estaba en el jardín, así que nada más recogerla se encaminaron a la costa. 

Aquella invitación a jugar vóley-ball tal vez había sido una decisión acertada para esquivar ciertos temas que desconocía del pequeño, pero más que eso su objetivo era escapar de aquella magnética fuerza que lo atraía directamente, algo le pasaba con ese jovencito, casi no podía contener su excitación al tenerlo cerca, quería llamar su atención y adoraba cuando este lo escuchaba atentamente, le agradaba su compañía y el tono de su suavecita voz le provocaba cosquillas en el estómago…

¡un momento!... ¿acaso… acaso ese chico de ojos marrón le estaba empezando a gustar? ¡Imposible! Se dijo frunciendo el ceño mientras caminaba delante del tecladista, pero al girarse no pudo evitar contemplarlo suavizando su fría mirada para cambiarla por una alegre y descuidada. 

-¡que empiece el juego na no da! 

 

Continuará…

Notas finales: jeje... vaya con suguru-kun... me encanta ponerlo en situaciones dificiles jeje... no olviden dejar reviews!!!

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).