Cuando desperté del profundo sueño que me mantuvo callado todo el viaje en bus, sentía mi cabeza como una bomba.
el aire encerrado dentro del bus me pateaba el hígado-por no decir otra cosa un tanto mas indecorosa- y los constantes hematomas que el golpear del bus había logrado con mi cabeza y la ventana en cada bache ates de que Akira se ofreciera a prestarme sus piernas de almohada, estaban ahí, latiendo, regalándome un dolor bien poco agradable.
Me levante con cuidado, Akira estaba durmiendo. Vaya manera de cambiar, este chico es un ángel cuando duerme.
Bota baba y ronca, si,.
Pero al menos no esta divirtiéndose metiéndonos en problemas o haciendo alguna estupidez, a lo peor haciendo bulling a alguien o a mí.
Me levante con cuidado y pase por sobre sus piernas, no temía despertarlo, Akira estaba muy lejos del mundo en este momento.
Entre la gente del pasillo que sacaba sus cosas de los maleteros del techo, estaba Shima, me ayudo a bajar mi maleta y me pregunto si Akira dormía.
Le respondí que si, maravillado por como a diferencia de mi el estaba fresco como una lechuga, llevaba su pelo totalmente liso y ordenado como cuando subimos al bus, algo revuelto pero seguía viéndose genial.
No tenia cara de nauseas ni nada, traía sus gafas de sol súper-estilosas y su polera rosada con su chaqueta blanca encima. Daba envidia.
Baje del bus y fui a buscar mi maleta grande antes de ir a reconocer terreno. Para mi sorpresa quien bajaba las maletas era Kai, con fuerza de vaya a saber uno donde y su sonrisa servicial acostumbrada.
Mientras esperaba a un lado del bus a que quedara menos gente para así poder recoger mi maleta sin tantos empujones vi bajar a Akira, fue demasiado gracioso.
se tambaleaba de sueño y se notaba que aun no estaba del todo despierto, traía el cabello revuelto y Shima atrás dándole empujoncitos para que no se rezague...
Me saco más de una sonrisa que en vano trate de ocultar, acabe riéndome en voz alta...
Cuando Akira se despertó totalmente se puso a ayudar a Kai a sacar las maletas del resto de los chicos, ahora que lo pienso,...
Akira de verdad ha cambiado mucho desde que lo conozco...
Recuerdo el primer día ese chico que parecía empeñarse en hacerme la vida complicada tanto como le era posible, como luego me hice amigo de Takashima y comencé a pasar mas tiempo con el, como terminamos yendo mas de una vez juntos a la biblioteca y yo me quedaba escuchándolo a escondidas en las butacas mas oscuras sin ser descubierto por el o por mi cuando estaban en ensayo del taller de jazz.
Si lo pensaba bien, era algo casi estupido el que no me hubiese dado cuenta antes. Acabe teniendo un sentimiento por una persona que prometí odiar, y esa persona al parecer ha dejado de odiarme tanto a mi también.
Pero, aunque hubiese la remota posibilidad de que llegara algún lejano y poco probable día a... sentir algo por Akira, no esta bien, los hombres no pueden estar con hombres.
No es que tenga nada contra Kai, o contra Shima, o con cualquiera de esas personas en esa condición que yo conozco, sino porque no quiero agregar otra complicación a mi vida, y se que una relación, por minima que fuera con Akira, acabaría haciéndome sufrir.
El juega con la gente, con todos. Y yo no seré uno más de su juego.
Suspiro pesadamente, el dolor de cabeza esta cediendo un poco, es probable que me sienta mejor luego de beber algo de agua y olvidarme de esto...
Aunque no se que tan fácil sea lo segundo.
-hey, taka!- escucho que me llaman, pongo mi mano sobre mis ojos para hacerme sombra y poder ver la voz que recocí como la de Shima, estaba junto a Akira que sacaba las maletas, Kai estaba dando instrucciones a la gente que ya tenia sus cosas junto con yoshiki-sensei.
Fui donde el, tratando de arreglar mi pelo imposible, llegue a su lado creo que aun peor.
Al verme tratando de arreglarme, Shima rió con ganas y comenzó a arreglar mi pelo con sus manos, solo le deje, después de todo, el me ve, yo no.
Akira permanecía inclinado levantando cosas que se veían bastante pesadas, podía ver los músculos de sus brazos marcarse y su espalda volverse flexible con cada movimiento de balanceo que hacia....
...no es que lo quisiera notar, pero me dejo algo embobado su cuerpo, y el buen uso que hacia de el.
-ah... esta es la tuya?- dijo de pronto inclinado aun, me logro sacar de mis pensamientos, que trate de apartar lo mas rápidamente posible.
Comenzó a manosear el peluche de oso panda que tengo colgado de la manija, seguro buscaba un insulto por un objeto tan infantil. Mi panda, ese panda era igual a Kisaki, y me lo había regalado efectivamente mi querido hermano.
-si, esta debe ser la tuya- dijo riendo luego, su tono burlón me obligo a soltar un bufido cuando la dejo a mis pies.
Levanto la vista hacia mi y Shima, que seguía acomodando mi pelo.
Se quedo mirándonos unos segundos de manera... tierna?
-aw- dijo esa corta expresión de ternura luego, y sonrió de una manera....
Que no comentare!
Enojado conmigo mismo por estar notando AHORA esos detalles adorables y bonitos de Akira, siendo que nunca antes me había dignado siquiera a mirar su cara demasiado, me marche tomando mi maleta con fuerza y caminando hacia un lugar con alguna sombra refrescante, el sol me estaba matando.
“no es posible que me este enamorando, eso no le pasa a la gente a esta edad” a lo lejos vi lo que seria el recinto al que se dirigían todos, apure el paso sin saber de que huía. “yo no puedo enamorarme, eso es para la gente tonta, y es imposible que yo me fuera a enamorar de alguien así, es solo algo que no se asociar y que se pasara con el tiempo…. Akira no me gusta!”
Llegue a lo que parecía una cabaña de vidrio, solo el techo y las vigas no eran trasparentes, y dentro de los grandes ventanales, podía ver a mis compañeros sentados en extensas mesas, conversando cualquier cosa.
Busque a Kai con la mirada, lo encontré solo peleando con su maleta en el rincón de una mesa. Fui a sentarme a su lado, el forcejeaba con el cierre.
-se atascó?- pregunte. Justo eso me sentaría bien en ese momento, distraerme con algo más.
-esta imposible...- comento Kai haciendo pucheros-y tengo mi jugo adentro...- quise reír por lo infantil que sonó eso
-creo que yo puedo- le pedí que me dejara intentarlo, me miro subestimándome, es cierto, yo no tengo fuerza, pero seria tonto intentarlo así.
Se puso a un lado y me dejo con el cierre. Como supuse, solo era cosa de mover y torcer de cierta manera el broche, estaban mal acomodados los dientes del cierre.
La pude abrir enseguida, sin hacer fuerza.
-Woo!! Como lo hiciste!!- me miro sorprendido, le sonreí
- tenias que fijarte en el problema sin usar la fuerza bruta...- le respondí -¡¡quiero jugo!!- reímos luego
Bebimos de su botella de jugo y conversamos sobre el viaje, me limite a decir "dormí todo el viaje" cuando en realidad, habían sucedido tantos cambios mudos dentro de mi...
… eso NO es cierto porque Akira NO me gusta ni siento NADA por el.
De pronto escuchamos una exclamación de parte de todos, mucha alegría pareció brotar de la nada, y por la puerta vi aparecer a Yoshiki acompañado de una hermosa mujer, por su porte, era toda una dama.
Nuestros compañeros y compañeras se levantaron de sus asientos, dejando tiradas las maletas y cosas, especialmente las chicas, fueron donde la mujer, la rodearon y la llenaron de abrazos y besos, supe entonces, que ella era Hizaki, nuestra nueva profesora jefe.
-fin pov ruki-
Hasta Kai se fue de su lado para ir a saludarla efusivamente, luego de mucho esfuerzo, la joven chica logro pasar entre los chicos y fue al pequeño escenario que había en lo que Takanori estaba seguro era un comedor/salón de eventos.
Yoshiki mando a callar y sentar a todos, a ultimo momento, el pequeño rubio vio a Akira y Shima aparecer por la puerta y acomodarse en los asientos de atrás...
-hola chicos, los he extrañado-
Esa sola frase le helo la sangre a Takanori.
Ella.....ella.... ELLA ERA HOMBRE?!
Abrió mucho los ojos, quedo paralizado. Sus manos, cruzadas sobre la mesa, comenzaron a sudarle.
Luego de varios minutos de asimilación logro descifrarlo y sacar una conclusión.
Aquel era el travesti mejor hecho que hubiese visto jamás
De no ser por la voz, no podrías reconocer jamás que era hombre, por donde lo vieras, a excepción del pecho plano, era una chica, una mujer, bella, una dama.
No podía creerlo.
Su audio mental volvió a conectarse solo cuando escucho la frase que le hizo bajar frío por la columna vertebral.
- y también veo caras nuevas! ese pequeño de atrás ha de ser Takanori, verdad?- sonrió el profesor-profesora
Sintió un codazo de Kai que lo obligo a reaccionar, planto una sonrisa instantánea en su rostro.
-s-si, soy yo, mucho gusto Hizaki-sensei...- tartamudeo nervioso, escucho las risas traviesas de todos, con razón no le habían respondido si Hizaki-san era o no mujer…
-acércate, te noto tímido- sonrió desde el escenario con un tono bastante calido a parecer de Takanori. De no ser porque nunca lo había sentido o visto, diría que aquel hombre/mujer tenia cierto tono maternal a su alrededor que te hacia disipar todo instinto homofóbico por su aspecto de inmediato, sumando que como mujer, era hermosa.
Se acerco a la tarima a paso lento, no quería llegar, no sabia que pensar de esa persona, y Hizaki noto su indecisión. Miro a su lado, Yoshiki le sonrió de vuelta, supo de inmediato que todo lo que Yoshiki le había hablado de aquel pequeño con rostro de peluche y expresión contradictoriamente adulta, era cierto.
-así que tu eres mi alumno estrella…- dijo mirándolo de arriba abajo en el tramo que el pequeño caminaba los últimos metros de separación entre ellos- eres mas pequeño de lo que me dijeron.- bromeo
Takanori rió ya mas relajado, después de todo no había de que preocuparse, siendo una escuela tan extraviada del mundo real y normal como lo era su ahora querida PSC, el que el profesor no tuviese sexo definido, y que tuviera ese aura de tranquilidad a su alrededor, no tenia porque ser tan extraño en el mundo de al revés.
Sintió como el profesor apoyaba un brazo sobre su hombro atrayéndolo hacia si, diciendo luego al curso.
-oh, que orgullo tengo otro hijo, niños, han tratado bien a su hermano?-
Se escucho una risa general
-ya enserio chicos, quiero escuchar alguna opinión o noticia.- todos los ojos se voltearon repentinamente al puesto donde estaban Akira y Shima.
-aahh, respecto a eso…-dijo Shima- supongo que Yoshiki ya le hablo del episodio que nos ocurrió con taka el primer día que llego, no?- dijo al profesor
-si, pero esperaba que se acusaran solos, Shima…- rió el profesor-en fin, tenemos tres días para hablar de todo lo que queramos y de todo lo que me he perdido del año.- indico a Takanori que tomara asiento en su lugar al lado de Kai, Takanori se marcho agradado- ahora quiero que empiecen a hacer alianzas porque les tengo una sorpresa.- un murmullo de expectación recorrió el lugar, y todos los bateristas del salón regalaron un redoble de nudillos sobre las mesas de madera.
-¡¡dormirán en cabañas!! Si, se que estaba planeado que usáramos el internado que esta aquí cerca, pero hable con la directora y me dijo que nuestro presupuesto andaba mas que bien, así que podíamos elegir lo que mas nos gustara. elegí las cabañas, así que comiencen a formar grupos de 5 y luego Yoshiki los dirigirá ahí.- como era de esperarse, el desorden fue instantáneo, las chicas chillando emocionadas porque podrían tener pijamada cada noche, y los chicos ya saboreándose las maldades que harían.
-Takanori, puedes venir conmigo por favor?-dijo luego Hizaki, llamando al menor.
Takanori pidió a Kai que quedase con quien quedase, se asegurase de que quedaran los dos juntos y se marcho donde el profesor le indicaba.
Hizaki le guió hasta afuera y después a una oficina de ahí cerca, juntos entraron en lo que parecía una oficina rustica hecha totalmente de madera.
-lamento que esto no parezca una oficina real, pero es lo que arreglo Yoshiki para mi, si te fijas, es solo un escritorio.- rió nervioso abriendo la puerta con llave.
Ya adentro Takanori tomo asiento en un sillón individual de cuero que había frente a un escritorio. Del otro lado, Hizaki tomo asiento en su butaca roja.
-quieres tomar algo?- pregunto sirviéndose té
-no, gracias.- denegó amablemente el chico.
El mayor comenzó a rebuscar en las gavetas del escritorio.
-y, Takanori…- saco una carpeta azul- tengo que ponerme al día contigo.
-la verdad, no tengo mucho destacable…- trato de minorizar Takanori.
-no es lo mismo que me dijo la directora.- sonrió elocuentemente- me hablo mucho de ti, te conoce mucho mas de lo que crees.- levanto ambas cejas y hojeo el archivo, y no fue por que revisasen su expediente por lo que Takanori quedo petrificado.
Hizaki tenia un parecido increíble con su hermano, el gesto que acababa de hacer había sido tan idéntico, que casi había podido ver sus rizos castaños en vez del cabello rubio y lacio de quien en realidad tenia enfrente.
Un silbido de asombro se dejo escuchar de parte del más alto. Takanori de inmediato supuso que se debía a su desempeño académico, sin embargo…
-7 desmayos en tres meses? fiebres constantes? sabes? de tu expediente de 5 hojas, 3 las escribió enfermería.- echo un vistazo a las otras hojas- y no llevas mas de 5 meses aquí. Hay algo que quieras decirme?- cruzo las manos bajo su mentón apoyando ambos codos sobre el escritorio.
-si, bueno yo…- dijo algo nervioso, no esperaba otra cosa que halagos por sus logros académicos, aquello le había sacado un poco de foco.- soy algo delicado de salud.-
-algo?- dijo sarcástico el otro, volviendo a dirigir su mirada a las hojas- si tuviese que dar una estadística según esto, diría que 4 de cada 5 veces que has ido a parar a la enfermería, la doctora o los enfermeros te han encontrado anemia.- dijo serio, Takanori se alerto, la persona que tenia enfrente tenia mas de una faceta. Aquel modo de hablar, aquella manera rápida de pensar, los gestos explicativos y su buen pronunciar del lenguaje, todo indicaba que estaba frente a una eminencia, una persona de gran inteligencia, una posible amenaza para si mismo y su modo de vivir hasta ahora carente de reglas mas que las propias.
-sabes que mas soy a parte de tu profesor jefe?- dijo sin apartar su vista curiosa del chico –soy el orientador de la escuela, y también tu nuevo padre/madre- rió por su propia duda- parece increíble que aun con mi modo poco usual de vestir me hayan nombrado orientador, no? pero bueno, como orientador, yo sé distinguir cuando no es normal la salud de un chico. Y tu y yo sabemos que no estoy hablando de la parte física.- finalizo con sus ojos, chispeantes de inteligencia, directos en los ahora defensivos de Takanori.
-creo que me encuentro perfectamente bien si hablamos de salud mental, gracias.- dijo esas palabras tan educadas, sin una pizca del tono que debería acompañarlas.
-y yo no creo haber mencionado en ningún momento la salud mental, o si?- sonrió elocuente.
Takanori se maldijo mentalmente. Su nuevo profesor jefe era tanto o mas listo que el.
-a menos, claro, que la salud mental sea el tema que tu quieres tocar, lo cual me parece perfectamente bien, porque tengo mi especialización en psicología infantil.- la expresión defensiva del chico le hizo entender que Takanori era exactamente lo que esperaba.
Su mutismo era parte de lo lógico para alguien que se enfrenta a su oponente sin conocerlo, y notaba el aire analítico que el chico tomaba al sentirse desnudo ante el. Lo mas probable era que muy pocas veces, sino nunca, se hubiese topado con alguien competente, mínimo a su altura, era un niño y vivía en un medio lleno de niños normales, pero ahora mismo estaba en una escuela llena de talentos, y aun así mantenía esa actitud disimuladamente arrogante que se podía observar en el rubio aún cuando caminaba, aquel porte que aun siendo mas bajo, lo hacia sobresalir de los demás.
-creo…que eso no le servirá.- podía detectar cierta duda en el tono seguro del menor, el cual por primera vez se volvía completamente serio.- he tenido 10 años de vida para leer tantos libros de medicina y psicología como habrá podido usted.- dijo seriamente, Hizaki no pudo reprimir una sonrisa.
Había encontrado al verdadero Takanori, aquel que se ocultaba tras palabras humildes y gestos amables, estaba sacando su peor lado.
-tienes razón, no te lo niego. Ya me habían comentado que habías comenzado a leer a los tres años.- siguió su juego – y tu edad mental aproximada estimo yo que va por los…19 años?- comenzó a juguetear con su lápiz observando la expresión dubitativa del menor, el estaba apuntando obviamente a mas.- coeficiente intelectual?- pregunto como un dato pareciendo obvio
-139- respondió secamente el menor, con un deje de orgullo mínimo, pero suficiente para ser notado por Hizaki.
-ahh…- dijo el mayor fingiendo sorpresa, como si no se lo esperase.- tendré entonces que usar los test para adultos, verdad?- formulaba cada pregunta esperando y conociendo la respuesta, Takanori le recordaba demasiado a cierta persona de su pasado, lo suficiente como para conocerlo como si fuera de toda la vida.
-se de memoria todas las respuestas de los test de adultos también.- dijo simulando simpleza- lo cual lo deja sin armas para analizarme.- sonrío satisfecho de si mismo
-vaya, debes haber vuelo locos a varios psicólogos, no?- bromeo un poco para tratar de relajar al ambiente
-un par…- respondió para su sorpresa el menor, Hizaki quiso echarse a reír, Takanori era igual a aquel chico que recordaba tan bien…
-que bueno entonces que yo no considere el conocimiento como un arma. Pero según veo, has entablado una pequeña guerra conmigo ya, no?-
-si usted así lo considera, podría decirse que si- sonrió Takanori echándose a sus anchas sobre el sillón y cruzando las manos sobre su regazo mas relajadamente.
-bueno, como dicen, no hay mejor psicólogo que uno mismo, y creo que en tu caso, tienes suficiente información en tu poder para hacer valer esa palabra como literal.-
Takanori sonrío. “ahora, esta hablando mi idioma”- sin embargo, que sepas siempre Takanori, que estaré aquí para hablar de lo que quieras, como amigo, como familiar o como oponente, se lo difícil que es no tener a nadie con quien conversar un tema serio de vez en cuando.- sonrió afablemente- puedes irte a tu cabaña con tus compañeros, siento haberte quitado tiempo con esto, pero la directora me pidió que lo hiciera.-
-y que tal se leen los resultados de mi análisis?- pregunto Takanori agarrando por sorpresa a Hizaki. Aun cuando no había ni hecho alusión a esa palabra, Takanori supo desde el primer momento cual era el efecto de tanto cuestionario.
-los considero buenos. Pero es lo que la directora me ha pedido y una vez escriba tu informe, Será leído solo por ella.- Hizaki se puso de pie y avanzo hasta el ventanal cerrado con gruesas persianas. abrió imperceptiblemente una pequeña rendija en ella y miro.- como lo veo, te esperan tus amigos, no esperaba que te metieras con los problemáticos del curso y a la vez con los de tu tipo- observo cada rostro de los cuatro chicos afuera, Shima, Akira, Kai y Shou.- luce como que has unido los extremos opuestos de la clase común, no?- bromeo
-no se como acabaron siendo mis amigos- dijo medio en serio medio en broma el menor levantándose de su asiento y mirando por entre la persiana también.- será mejor que me vaya, no quiero dejarlos esperando al sol. Sonrió al profesor, volviendo a su guardia habitual y afable
- diviértete mucho y ten cuidado quieres? no queremos mas accidentes! jejeje…-
Takanori quedo algo atontado cuando su mejilla fue besada por el mayor. Ni Yoshiki-sensei hacia eso.
-nos vemos Takanori!- lo despidió en la puerta el profesor.
-hasta luego…- dijo suavemente volteando al cuarteto de chicos parados sobre el pasto afuera de la cabaña.
-te retaron?- pregunto Shou
-te suspendieron?- como era de esperarse, Akira lanzo su opinión sin importarse si eso lo ofendía.
-no sean tontos, seguro solo fue papeleo…- dijo Kai, a su tiempo, Shima se guardo sus palabras.
-y bueno, ya volvemos?- dijo Akira ansioso
-a donde?- pregunto Takanori sin entender
-el par de sementales se toparon con un grupo de chicas en las piscinas externas. Tuvimos que prácticamente arrastrar a Akira aquí- rió Shou mientras caminaban
-no se hubiesen molestado…- dijo sarcásticamente el mas bajo
-anda, seguro encontramos una para ti…- dijo Akira hablando de “ellas”
-yo paso, gracias…- dijo carcomiéndose la conciencia Takanori, justo ahora, no sabia siquiera si le gustaban las mujeres…- donde esta mi…?- el castaño oscuro no le dejo terminar la frase
-en la cabaña, nosotros cuatro hicimos grupo y te incluimos…- dijo Kai como siempre, sonriendo
-Kai y yo te llevamos allá, así el par se puede ir a follar tranquilos…- dijo entre despectiva y burlonamente Shou
-no, yo quiero ver la cara de taka…- dijo sonriendo Shima dejando a Akira solo en su campaña de volver a la piscina
-pero shiiiiimaaaaaaa!!!- se quejo el rubio siguiendo al grupo
-mi cara respecto a que exactamente?- pregunto el menor mirando dudosamente a todos
-ya veras, ya veras…- ambos castaños claros le llevaban a empujoncitos
En cosa de minutos luego de pasar por el lado de varias otras cabañas, llegaron a la suya, hicieron entrar a Takanori a la fuerza, que desconfiando de los comentarios sobre la impresión que se llevaría se negaba a entrar sin hacer entrar a alguien antes que el.
Finalmente Akira tuvo que entrar y sacar la serpiente saltarina que había puesto en la puerta para convencer a Takanori de que no quedaban trampas.
Finalmente el pequeño avanzo, inspeccionando todo con sus curiosos ojitos rasgados, caminando despacio, no había nada fuera de lo que esperarías de una cabaña normal. Una muy bien adornada por cierto.
-que tiene esto de especial?- dijo desconfiado aun
-aun no, aun no.- Shima le tapo los ojos contra su voluntad, y caminando a tientas, sintió como lo llevaban a un piso bastante irregular, y hacia mas frío.
Le destaparon los ojos y lo primero que hizo fue mirar el piso bajo sus pies.
Se dio cuenta de que eran tablones muy delgados pintados de rojo, y abajo había varios metros de espacio antes de ver una pendiente que bajaba.
Se asusto un poco al ver que debajo de el, varios metros mas abajo corría tormentosamente un caudal de agua, pero al levantar la vista al frente suyo, todo eso quedo en un segundo plano.
Frente a si tenia el paisaje mas bello que en su vida hubiese visto.
Pero no era una fotografía o la televisión, era real, podía respirar lo fresco del aire, podía ver el relucir de las verdes hojas colgando de los árboles, podía oír el murmullo del agua escurrir y las aves trinar, fue una visión tan impresionante y alejada de lo acostumbrado que se vio obligado a sonreír ampliamente sin siquiera notarlo.
El riachuelo que partía desde una napa subterránea debajo de la cabaña, tenia su comienzo justo donde se comenzaba a levantar sobre pilares de madera la terraza sobre la que estaba parado, corría debajo de ellos y se perdía a lo lejos, entre árboles matorrales, flores y verde vida, pinos altísimos, árboles milenarios, y allá en el horizonte, se alzaba majestuoso e imponente golpeando sonoramente las olas; el mar.
-te dije que teníamos que escoger esta cabaña- escucho a su lado, Akira, echado sobre la barandilla de la terraza conversaba con Shima, a su lado en la misma posición, ambos miraban cruzados de brazos al menor sonriendo disimuladamente.
-tenias, razón, le gustó.- dijo el castaño por su parte.
Emocionado al punto de no saber que decir, seco sus ojos aguados, con la manga de su polerón y les sonrió en agradecimiento, luego siguió observando la belleza e aquel paisaje con ojos perdidos.
-bueno, supongo que ya podemos ir a la piscina, no?- dijo Akira entrando a la cabaña de nuevo.
-vamos, taka?- preguntaron Kai y Shima al menor, este se volteo algo dudoso
-si… adelántense, voy en un rato…- luego se volvió al riachuelo de nuevo y comenzó a observar el correr del agua con fascinación.
Los otros cuatro entraron en la cabaña riendo, particularmente Shou recordaba también el verano pasado, en que habían llegado ahí como viaje de estudios, y todos habían quedado igual de impactados con la vista que tenia aquella cabaña en especial.
Se sorprendió bastante al momento en que Akira sugirió tomar esa cabaña sacrificando la cercanía con la multicancha y el comedor solo para que Takanori pudiese ver aquel lugar al menos una vez también, era un detalle que no se esperaba de alguien como su amigo.
-si le encanto- rió Takashima mientras los cuatro iban a la piscina- esperemos que con eso se relaje un poco…-
-ves? mi instinto no falla- respondió el rubio ufano
en la parte posterior de la cabaña, Takanori seguía fascinado con el panorama, había dejado de lado sus prioridades; tender y asegurarse una cama cómoda, ordenar sus cosas, recorrer el lugar caminando... todo estaba borrado de su mente para apreciar aquel pequeño oasis de hermosura.
-pov ruki-
"la eligió Akira... para mi?" porque esa frase me hacia sentir cálido? el tener algo del aprecio de Akira, no puede significar tanto...es decir, solo ha elegido una cabaña bonita porque sabe que me gustan estos lugares diferentes...
Este lugar es perfecto para todo, en esta terraza podría pintarse una obra maestra, o componer una sinfonía, se podrían hacer tantas cosas... cautiva toda mi imaginación en un solo lugar...
Y a la vez quedo marcado como un lugar que es casi un regalo para mí de Akira.
Que tan especial puede ser eso?
"no es hora de que averigües que sientes?"
No todavía, no quiero apresurar nada...
Me levanto y a mi pesar atravieso la puerta corrediza de vidrio hacia el interior de la cabaña, estoy en una especie de living más pequeño.
Hay dos cuartos, uno tiene una cama y dos literas y el otro dos camas, como supuse, dejaron mis cosas en la habitación de tres camas, y no debo ser un genio para averiguar que estoy ahí con Shou y Kai~
Acomodo mi maleta en la litera de arriba, me gusta la altura en estos casos, aunque me cuesta bastante subir a falta de escalera...
La abro y saco mi ropa, la acomodo doblada sobre la cama para airearla un poco y quitarle las arrugas, entre eso encuentro mi diario de vida.
Sin dudarlo dos veces lo abro y para mi sorpresa, caen al menos 5 papeles doblados de el sobre mis piernas.
Reviso uno y adivino que son el resto, todos son poemas que he encontrado en la biblioteca leyendo libros, debo admitir que he llegado a buscar un patrón de tipo de libro o autor donde este poeta anónimo deja sus obras, pero al parecer es completamente al azar.
Los poemas que escribe, son tan cautivantes, embriagadores, sino excitantes y adversos, curiosos... son todos únicos...
Se que no es mi derecho robarme sus creaciones, pero creo que en cierto modo me he enamorado de su modo de escribir...
OH, seria tan cursi decir "me he enamorado de alguien que no conozco" que sencillamente, no usare esa frase.
Pero debo decir, que una persona capaz de escribir cosas así... seguramente encanta desde la primera vista...
Será una chica o un chico? podría ser una chica de ojos de un profundo negro, tan tristes que debe recurrir a un mundo de tinta del color de su mirar anochecido y papel de su piel lechosa para desahogar sus penas...
O podría ser un chico sensible que se oculta del mundo y de los demás, paseando su ligera silueta por las terrazas de modo que jamás lo vean, una sombra lúgubre en su aula, un poeta escondido y invisible...
Un suspiro me sorprende al escapar de mis labios sin autorización, sacudo mi cabeza riéndome de mi mismo y por puro capricho, leo uno de sus poemas echado en el colchón.
“son sentimientos agarrados a estos folios
Una historia tan fantástica donde no existe el odio
Faltan paginas en este cuento que los dos llenamos,
Cada paso, cada beso, cada abrazo es un relato
Que narra mi cabeza y escribe este corazón,
Porque la única razón de seguir es esta relación
Nuestra unión…el vinculo que nos une,
Quiero bajarte la luna y elevarte hasta las nubes!"
Me río ligeramente de mi mismo otra vez, quien me viera quien me ve, el chico serio y maduro apretando un trozo de papel contra su pecho soñando con amores imposibles...
Mas ahora que desgraciadamente entiendo que es posible que mis sentimientos no sean dirigidos a una mujer...
Quien sabe, viendo esto, esta persona podría estar hasta muerta...
No creo, el papel se ve de una calidad mas o menos reciente... y cuadriculado...
río por mi ocurrencia, debo ir donde están los demás antes de que a alguno se le ocurra ver si estoy vivo y me encuentre en mi faceta de chico enamoradizo...
Comienzo a guardar los papeles y encuentro uno mas grande que el resto, recuerdo este, asaba en una enciclopedia y en el momento no lo pude leer porque era largo y yo no tenia tiempo...
No hay mejor momento que el presente, ¿verdad?
Lo abro con mi corazón latiendo con fuerza
"Eres tan grande para mi, que en mi corazón no cabes,
Quiero alejarme junto a ti a un lugar donde no haya nadie,
Aunque entre tu y yo haya distancia,
Nunca nos va a separar,
Ojala el tiempo se parara para poderte besar eternamente,
Porque es mi corazón el que te siente,
Es que quiero estar contigo cada momento para siempre,
Haces explotar sentimientos donde no podían haber,
Las mariposas vuelan libremente, tu formas parte de mi ser,
Porque TU eres mi sol, entre millones de estrellas,
Pero entre ellas solo se te ve a ti por ser la más bella,
Imaginemos que forma tienen las nubes desde el suelo
Porque sentirte tan cerca es como flotar por el cielo,
Quiero que seas mí pasado presente y futuro,
El ayer el hoy y el mañana, gracias por estar juntos,
En un edén sin fin con el fin de dar sin pedir a cambio,
Quiero respirar el aire que contienen tus labios,
Te quiero mas que todo y mas que nada en este mundo,
¿Cómo te puedo querer tanto? , a veces me lo pregunto,
Quiero verte, tenerte, hacerte de mi para siempre
Porque tu ocupas cada momento que existe en mi mente,
Por ti lo dejaría todo atrás, porque cuando estoy contigo
Siento que no importa nada lo demás,
En un cuento de hadas perfecto se que nadie nos entiende,
Esto es lo único que importa porque nuestros corazones se quieren,
Contigo el tiempo pasa rápido ¡y eso me jode!
Y cuando no, pasa muy lento y en contra se nos pone,
Estas por encima de lo que existe y de lo que no va más allá de las palabras
Aunque el amor se exprese con un Te quiero."
Cierro mis ojos y las lágrimas caen, me siento patético.
Mientras leía, sintiéndome cerca de esa persona que no conoceré jamás...
Ojala algún día, quizás alguna vez podría sentir esto yo por alguien que no sea imposible....
La imagen de Akira se me viene a la mente y la espanto con malos recuerdos
Quizá alguna vez podría yo sentir eso por alguien que no sea imposible... o un completo idiota.
Amor Yaoi
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