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high music PSC school por chibi-chibi

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Notas del capitulo:

seh, me vole con no subir, eh?

muchisimo tiempo sn hacerlo, echenle la culpa a mis profes dementes y sus pruebas mas dementes aun...

au asi este capi tiene 26 hojas, no pueden quejarse xDD

el titulo es el nombre de una cancion de tatu, ignorenlo porque no tiene nada que ver

la idea era que ese titulo salia de la mente de taka porque ni muerto diria que el es un "chico gay"

entonces porque no decirlo en ruso?!

ademas la cancion es realmente pegajosa jaja xDDD

y la coreografia es apra morirse tambien jaajjaja

y bueno, ya esta empezado el otro capi, tengo qe respoder sus rws del anterior, voy a eso...

no le eche una ultima revisada asi que si tiee algo raro es pr eso xD

ami gusto quedo desabrido el capi D: asi que luego me comentan y de paso me putean por ni subir, vale?

las amo y los amo, bye.

lean!

Para ser sinceros, esto era todo mi culpa.
No es algo grave, pero podría arruinarle a todos el paseo, por no decir que el hospital más próximo al que me tendrán que llevar, está a unos 5 kilómetros...
Si tan sólo hubiese revisado como se debe mi tobillo cuando llegue a casa ese día...
Si tan sólo no me hubiese matado de nervios cuando Yuu me acorralo...
Si tan sólo hubiese sido por una vez sincero con mis miedos
Si tan sólo no lo amase así de locamente.... pero los tan solo ya no sirven de nada...
Estaré una buena temporada con el pie inmovilizado, y ya andaré dándoles lata a todos.
Lo peor no es solo eso, sino, a lo peor cuando volvamos a la escuela me derivaran a enfermería, y no tengo idea de cómo hare para evitar los turnos de Yuu...
Es que sencillamente no soy capaz de verle a la cara. No puedo.
Y la peor parte; su novia, Omi, también es de enfermería.
Si no está uno, estará el otro, o peor, estarán los dos.
Y con qué cara los voy a mirar? ¿Y que si Aoi le dice a ella? ¿Con que cara le miro cuando ella sepa que por mi culpa van a terminar?
Me siento una mierda de persona ahora mismo. Tengo que encontrar un modo de hablar con ella antes de que Yuu lo haga, para advertirle que no debe creerle...
Y que le voy a decir, eh?
"no creas nada de lo que Yuu te diga de mi, desde que lo raptaron los ovnis, todo lo que dice tiene un significado al revés"
Muy inteligente Shima.
Admítelo, estás muerto, tienes una causa perdida.
Ahora no solo no podrías estar con Yuu, vas a tener a una chica que te odia detrás...
Y como hablar con ella si ni la conozco? a lo más se que su nombre es Omi, es bien ruda y es la novia de Yuu. A veces la he visto hablar con Taka durante los recreos, pero es algo bien casual...
aaaaaaaah mi vida acaba aquiiii.....
No habrá forma de que el esguince me mate?
-hm, Takashima... san...- ay no que mal, se está excitando.
Inmediatamente la separo de mi, comerle la boca a una persona mientras piensas en otra o en un tema totalmente distinto puede parecerles a ustedes lo más cruel y descorazonado que una persona puede hacer, tienen razón, en este momento esa chica debe estar sintiéndose especial, querida, o cosas así pero... pero...
-Kuri...-le hable, como supuse, estaba en las nubes- Kuri...- repetí
-si?- ya era hora, no podía dejar que se ilusionara mas conmigo, eso no le haría para nada bien....
-yo... tu y yo no podemos seguir....- suspire pesadamente. Era ridículo decir algo así cuando llevábamos solo horas, lo sé. Pero por eso mismo, no quiero dañarla...tanto
-qué?! Por qué?? ¿¿Qué paso??- y aquí vamos de nuevo...
-kuri no eres tú, soy yo.- ese maldito pero inevitable cliché, el mismo aburrido dialogo...- no quiero hacerte daño preciosa...-
Y ahora yo me callaba y soportaba/escuchaba, sus quejas, sus confesiones de amor, que, aunque yo no lo creyera por el poco tiempo ella en serio se había enamorado de mi, todo ese tremendo discurso que cada chica me había dado sin lograr llamar mi atención.
Y es penosamente posible que pronto yo esté dando ese mismo discurso, aun no tengo claro a quien; si a Yuu o a su novia, no quería pensar en eso ahora.
Y en honor a eso tal vez...
Por una vez... por una vez... tal vez debería....
-yo pensé que de verdad te importaba!! ¿¿Por qué me haces creer cosas que no son??- sus palabras taladraban mi cabeza, este sentimiento de culpa tan grande es nuevo...
Y de a poco se vuelve difícilmente aguantable
-y ahora destruyes todo lo que te llegue a querer, ¡no eres más que un-
-puto gay.- termine la frase por ella.

Todas las chicas decían lo mismo y todas tenían razón, mas yo no podía admitirlo, la principal razón de que las ilusionara era para ocultar mi condición, pero para dejar de sentirme así de mal, el primer paso era...
-kuri, me gusta un hombre, yo soy gay. Debí habértelo dicho antes.- lo solté todo de una vez con el aire que había estado reteniendo en mis pulmones, ese que ahora en mi boca sabia a podrido y culpable, sabia a muerte.
Ella solo me miro con los ojos muy abiertos, su boca abierta hasta abajo.
Una negra lagrima empapada de rímel camino abajo por su mejilla, sus cabellos agitados por el aire marino.
Y desapareció, corriendo por la playa, seguro a llorar sus penas sola.
Suspire pesadamente, eso era algo nuevo. No me habían abofeteado, ni insultado as de lo que yo mismo había admitido.
Quizás se compadeció de mi condición de inválido tirado en el piso...
y que tanto se quedaron haciendo el par de mierdas que me dejaron así de solo y sintiéndome tan mal?!
Digo, smiley y Shou andan por allá paseando con la pobre niña que Akira se agarro, de verdad está algo chica como para el... puto pedófilo...
Me refiero a que, por favor, tiene 13 años, si tiene la misma edad de Taka... y la verdad ahora que lo pienso
¿No se parecen mucho? tienen los mismos ojos... y parte de la forma de sus caras, también se parecen bastante...
De pronto un ruido me saca de mis cavilaciones, algo muy parecido a un rugido lejano, pero no era un rugido, aquel sonido se me había grabado demasiado bien en la memoria como para olvidarlo.
Era lo que creaba ese ruido del demonio cuando vi el parachoques plateado y brillante a menos de un metro de mi nariz. Eso era el motor de un auto, y no de cualquier auto...
Trate de apoyarme sobre mis brazos para levantar mi cuerpo lo más posible, gire mi cabeza y estire al máximo el cuello, y ahí, por el sendero de piedras, venia amenazador y monstruoso, el auto que para mi mala suerte, reconocí de inmediato como el chevrolet captiva de Yuu
Pero ¡¡que bellas sorpresas de la vida!! Quien manejaba no era ni más ni menos que mi querido amigo de la infancia Akira, con Taka en el copi....
¿¿Quien estaba en el copiloto??
Quise morirme, era ella, era Omi. Una de las dos personas menos quería ver si se podía por el resto de mi vida.
No es que sea una mala chica, es simpática según me han contado, y no es que sea la chica más linda del instituto, pero de un raro modo, es bonita, quizás interiormente, pero no quita, ella ¡¡ES PARTE DE MI DILEMA EXISTENCIAL!! -por adolescente que suene algo así-
Mientras veía acercarse el vehículo, se me pasaron todos los momentos en que la vi, la primera vez, cuando Yuu se probaba sus vestidos vaya yo a saber porque, hasta esos furtivos encuentros en las fiestas, en los pasillos, siempre estaba con Yuu en la enfermería y era rara la vez que no hacen turno juntos.
Maldita sea, eran la pareja perfecta!!
¿¡Y ahora tendría que decirle que no casualmente enamore a su novio?!

-llego la ayuda patoman!!- salto Akira del auto mirándome con cara de héroe, si supiera que en vez de salvar el momento estaba matándome
Rápidamente se bajo también Omi, llevaba para variar su ropa negra, pero unas botas vaqueras que metían los pitillos, y las gafas de sol, le daban el toque de alguien que viene preparado a todo.
De atrás para mi sorpresa bajo Takanori, Akira y Takanori se pusieron a mi alrededor.
-ya moriste desangrado?- dijo Akira, seguro por mi cara
-donde están todos?-pregunto Takanori ignorando a Akira
-¿me ves muerto? creo que terminaron liándose con tu novia Akira... y con las otras chicas.- tanto Takanori como Akira pusieron la misma cara de inexplicablemente graciosa confusión
-QU…?- dijeron al tiempo. Quise reír, parecían conectados
-oseea que Shou y Kai...- balbuceo Takanori
-... se fueron... se fueron con las chicas?!- ah, y ahora llenaban la frase del otro? puse mi mejor cara de celos.
Aquí el mejor amigo soy YO.
-así parece, nosotros teníamos prisa, recuerdan?- escuche la grave voz de Omi, los chicos se apartaron y me dejaron con ella que se acababa de sacar las gafas de sol.
-Hola Shima- me saludo... por mi apodo? con una leve y amable sonrisa antes de irse de frente sobre mi pie apenas dándome tiempo de retroceder, la práctica de enfermera le había quitado el sentido del espacio personal al parecer...- ah, ya empezó a supurar...- dijo apesadumbrada, ¿¿qué significaba eso??
-Taka, ayúdame a subirlo...- dijo Akira tomándome por las piernas y poniendo cuidado con mi pie
Tanto Takanori como Omi y yo le quedamos mirando con algo de lastima por creer que podía darle una tarea así a Takanori, pero si no lo hacia el entonces...
-será mejor que Taka-chan abra la puerta, vale?- dijo tratando de sonreír sin ofender, Takanori desapareció en el acto y antes de yo siquiera notarlo, ella estaba tras de mi pasando sus brazos por debajo de los míos
-uhm, lindos brazos, haces pesas?- comento divertida- listo Akira?- Akira se acomodo entre mis piernas agarrándome de los muslos en la posición más gay que le voy a ver hacer en su vida, y asintió mirándola- uno, dos...- entre los dos me levantaron del piso, me llevaron hasta dejarme en el asiento trasero del auto, una vez que Taka abrió la puerta y ayudo a acomodarme dentro...
-eh, creo que será mejor que yo vaya con él, Taka....- escuche con horror su voz fuera del auto, para luego ver la cara dubitativa de Taka mientras yo rogaba porque dijera algo, y finalmente acababa por virarse e ir al copiloto. Ella se acomodo en una esquinita del asiento examinando mi tobillo con interés, yo la miraba con suplica... Takanori subió al copiloto y Akira hizo rugir el motor, en sus ojos podía verse y casi sentirse, que le encantaba el auto, sip, Akira es de esos afanados por estar al poder de una maquina como esta...
-voy a tocar aquí, me dices si te duele...-me dijo antes de hacer una especie de forma rara con sus manos y empezar a enterrar sus dedos en mi pantorrilla y luego los pies
-AHHH!- grite cuando llego a cierto punto que yo ya sabía, ella me miro un poco asustada y sonrió compadeciéndose
-parece que no es en grave pero...-ella volteo y miro a Takanori en el copiloto, este como si le hubiesen avisado, se dio vuelta y le sostuvo la mirada ¿¡porque mierda todos entienden cosas y yo no?!- te habías caído antes o tenias un esguince de hace menos de 6 meses?
Entonces lo entendí... seguro lo que sea que tenía en el pie delataba que el esguince se había hecho porque no había puesto cuidado a la herida anterior, cuando escape del auto de Yuu...
-me caí un poco fuerte el otro día y me molesto desde entonces...- mentí
-por eso no querías montar, y no caminabas normalmente- razono en voz alta Takanori, como era de esperarse, el pequeño lo había notado mucho antes con su súper mente veloz de niño genio que es
-si no quieres hacer alguna locura conmigo pato, solo tienes que decirlo, no es como si me fuera a enojar... tienes idea del paro que me dio?-
-uy, si- dije sarcástico, él sabía que no era nada grave, ya me había acompañado en muchísimas situaciones así...
-ah, Yuu no va a estar feliz...- solo escuchar ese nombre en sus labios me erizo la piel, la mire preocupado- el realmente se preocupa por ti, sabes? siempre está hablando de lo distraído que eres y de como siempre tiene que estar cuidando que no hagas cosas peligrosas... creo que me se tu vida gracias a él- rio, me hace sentir cada vez mas culpable.... ella es una buena chica, no merece esto...
-que pasa Shima?- Taka, ay no.... seguro él, como es de despierto ya lo descubrió todo...
Lo mire con ojos de "ayúdame"
El me miro entendiendo y.... empezó a chillar en el oído de Akira...
-QUIEROOO EEESCUCHAAAAR MÚSICAAAAAA!!- salto de repente, yo tuve que aguantarme la risa, eso fue una mezcla de todas las etapas ocultas de Taka-chan que no suele mostrar, con ese toque de que este pequeño a veces no sabe como mentir para salir del paso.
Luego de una discusión sobre qué escuchar, porque que "escuchemos música" que "estamos escuchando música" y que "música de verdad idiota! a esto le dices música?!" hasta que de no sé donde encontraron el CD de SADS de Yuu y lo pusieron para probar, como era ruidoso, fue perfecto.
-Omi- susurre despacio para probar la atmosfera y cuanto de lo que yo decía se escuchaba adelante; nadie en el auto reacciono. -Omi- dije esta vez a volumen normal, ella me miro, pero tanto Takanori como Akira iban absortos. Perfecto.
Ella se acerco hasta estar cerca de mí para oírme, no sabía cómo empezar...
-necesito tu ayuda...- me dio vergüenza de mi mismo tener que decírselo, pero ya no había vuelta atrás...
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El pelinegro mantenía su expresión seria, a pesar de que por dentro era un torbellino de emociones. El otro hombre en la sala, solo lo miraba sonriente como siempre, a veces la gente se ahogaba en vasos de agua, y esa vez, tenía un ejemplo perfecto enfrente.
Analizar la postura del chico era realmente divertido, cada gesto que hacia concentrado en sus pensamientos delataba completamente todo lo que pasaba en su interior, y con las conjeturas que llevaba podía empezar a hacerse historias mentales, y por lo que evidenciaba la preocupación podía partir sus divagaciones con que su alumno Shima no era una persona cualquiera para el ayudante de enfermería más destacado del colegio.
Pero él no lo había llamado al campamento para eso, y ambos lo sabían. Puede que de momento Yuu hubiese dejado cualquier otro pensamiento que no fuera aflictivo o de preocupación en su mente, pero él aun tenía el tema principal bien claro.
Se paró de su asiento, y en el ensimismamiento profundo del otro pudo notar que ni siquiera lo había percibido. Suspiro sonriente "ces't le amour" casi pudo escuchar a un imaginario Yoshiki a su lado riendo con él.
Avanzo lentamente hasta estar a su lado, donde recién el pelinegro salió de sus cavilaciones para mirarle hacia arriba con la boca abierta, visiblemente desorientado. Sonrió de nuevo.
-eh... Hizaki-san....- balbuceo tratando de averiguar si el otro le había hablado y el no había escuchado o solo llegaba recién.
-mientras esperamos, te llame a que vinieras porque necesito un favor Yuu- se sentó en la cama donde recibirían luego al castaño, dándole un hilo de conversación al cual aferrarse al desorientado chico.
-por supuesto, que pasa- Yuu tenía esa costumbre de hablar con los profesores informalmente, aun con toda su educación, desde que el tuviera 7 años, llevaba conociendo a esas personas a fondo y viéndolas día a día, se le hacía difícil no verlos como familiares...
-es sobre Takanori, la directora estuvo hablando conmigo por algo que quiere que haga...- dijo introduciendo un poco en lo que estaba metiéndolo
-ay no, es otro de los planes raros de la directora?- Yuu ya conocía las consecuencias catastróficas que solían seguir a ese tipo de anuncios; no era la primera vez que la directora-persona a quien nunca había tenido la oportunidad siquiera de ver cara a cara porque se la pasaba en cualquiera lado- lo metía en líos, pero no había caso, el tenia que obedecer.
-me temo que de nuevo somos sus marionetas... pero esta vez yo se lo he pedido. Veras, hay algo con Takanori que no me parece...- trato de insinuar, pero al parecer el chico no caía
-a que se refiere?- pregunto confundido
-ya lo averiguaras... pero por ahora... necesito que le des esto... sólo tu...- le paso la carpeta que había dejado sobre la mesa minutos antes.- tú, y solo tú se lo darás, y solo ustedes dos lo verán, entendido?- dijo con un cierto tono normativo.
Yuu abrió la carpeta algo asustado por la seriedad del asunto, mas al ver el contenido solo levanto sus cejas en un gesto de sorpresa mientras reía para sí mismo- pero esto es una tontería...el se va a dar cuenta de inmediato, no es ningún despistado-
-como quieras, Yoshiki también aposto por Takanori. Pero si recuerdas, ¿cuántas veces se ha equivocado la directora con sus intuiciones?- alzo ambas cejas divertido, mientras veía entrecerrar los ojos de Yuu leyendo detenidamente el papel entre sus manos
-está bien, lo hare. Pero todavía me voy al lado de Takanori.- dijo firmando el papel como algo ahora oficialmente emitido de enfermería.
-uhm...- Hizaki se asomo a la ventana viendo el auto negro llegar desenfrenadamente con la radio a todo volumen y un conductor con las hormonas más que desordenadas.-ya llegan, ven, necesito que te desaparezcas un rato conmigo para terminar de arreglar...-
-pero quien va a atender a shi...- interrumpió el pelinegro enseguida
-deja que Omi se encargue de el pre-diagnóstico, vale? tenemos que ver todavía como llamamos a Takanori...- interrumpió de vuelta el otro, jalándolo hasta estar fuera.
-ya lo hizo Takanori...- dijo mientras era jaloneado fuera
-pero deja que lo haga de nuevo, ¡¡y ya deja de ponerme trabas!!- bufo molesto enredándose con su vestido al salir. Se toparon cara a cara con Takanori y Akira que venían entrando
-Shiroyama-san! los veníamos busca...-el rubio parecía aliviado de verles
-dile a Omi que la cabaña de Shima en su pieza!- grito antes de desaparecer con Hizaki
-...ok...- ambos rubios se miraron confundidos
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6:56 pm
-ay, ay, con cuidado...- pedía el castaño mientras reía junto al rubio y la pelinegra
-"este vehículo está retrocediendo"- imito la voz de una grabación la chica antes de dejar al paciente sobre su cama.
-misión cumplida!! Ahora a esperar a Yuu...- dijo la chica satisfecha ahora que había hecho amistad con los tres chicos en el camino y de paso había logrado bien su trabajo como enfermera.
A Shima sin embargo, estas palabras le crisparon el rostro.
-por favor Omi- pidió llamándola por su nombre sin formalidades, con lo sociable que se había vuelto la chica, aunque le doliese saberlo, se tenían algo de confianza.- revísame tu...-
-pero que es eso que no quieres que Yuu sepa?- inquirió la pelinegra contrariada en voz baja, consciente de que Takanori y Akira estaban en la misma habitación conversando
-va a preocuparse por nada, tu mejor que nadie debes conocerlo...- suplico a la chica -no dejes que venga, por favor.-
-tiene que venir- dijo la chica casi como una disculpa- él es el enfermero en jefe después de la enfermera oficial del colegio, y yo confió mas en Yuu que en la señora que me hizo reiki cuando me indigeste.- rio la chica
-pero Omi nooo!- se quejo
-lo siento Shima-chan... eh, Aki- llamo al rubio que debatía otra de sus maduras peleas con el pequeño Takanori, se volteo a verle de inmediato.-puedes ver que mierda le pasa al cretino de Yuu que no viene?- dijo con su habitual lenguaje...único.
-a sus ordenes señorita- entono divertido, no sabía porque amaba a las mujeres que no tenían miedo a expresarse con groserías, pero le encantaba.
Se levanto de la silla y se quedo ahí como esperando algo, al rato de quedarse ahí ante la atenta mirada de paciente y enfermera, el menor de los cuatro se digno a mirarle hacia arriba, reaccionando como un resorte al pararse de inmediato, extrañado de que el mayor quisiera su compañía y esperara por él.
Ambos rubios salieron mientras empezaban a enfrascarse en otra conversación.
-sabes... me pone celoso- comento el castaño mirando por donde los dos chicos se habían ido- Akira no aceptaba a nadie nunca, me tomo años ganarme su confianza y al principio ni me miraba de lo antisocial que era... llevamos siendo amigos por años, solo los dos, el y yo. Sin nadie más.- trato de obviar el resto, sonaba asquerosamente egoísta si lo decía el.
-y llega este chico de la nada y se vuelven el parcito en cosa de horas, no?- dijo Omi mientras acomodaba el aparato para medir la presión en el brazo del castaño- conozco varios casos así...-
-no, no es eso, es.... al principio, también lo odiaba, de hecho gracias a mi fue que Taka y Akira se conocieron, porque de primeras no se querían ni ver-
-y eso?- pregunto extrañada
-habrás oído de que Akira es casi el encargado de hacer bulling a todo nuevo y/o ser viviente que sea extraño a su mundo, no?- dijo sarcástico
-hay muy pocas personas de nuestro colegio que no sepan de Akira.- comento a modo de respuesta.-y si es normal que te molesta?-
-qué? no me molesta es solo... bueno, si me molesta un poco... ahora se la pasa cuidándolo, con lo delicado que es Taka, ya no es muy como antes, de hecho, desde que Taka llego Akira se ha vuelto una persona casi casi pseudo madura.-
-mientras estés en el cuadro no tienes de que preocuparte, anda, tu y el son amigos de años según se...-
-pero aun así... aguanto que Akira tenga cuanta novia amante o mujerzuela quiera, el tiene sus razones de ser así y yo lo entiendo cuando me deja plantado en una fiesta por una de ellas, igual el volverá a estar conmigo al día siguiente o a la hora después cuando ya se haya aburrido de esa chica, pero esto... un amigo nuevo... se siente como la dimensión desconocida.- concluyo con un deje de melancolía
-es como que ya no eres el único amigo de confianza para Akira...-
-y ni siquiera quiere aceptarlo! él no se ha dado cuenta de que Taka ya es parte de su mundo como yo...-
-pov uruha.-
-me inquieta algo…-
-sobre ellos?- creí que había perdido el tema...
Ella negó con la cabeza, y no necesitaba decirlo entonces
-sobre ti y Yuu.- me sentí desfallecer cuando oí nombrarme junto a él en esa frase, con esa voz.
-qu-qué con él?- tartamudeé sin querer, visiblemente nervioso.
-por qué no quieres que te revise?- pregunto sin expresión, yo sabía que debía responder con la verdad, sin embargo...
-mi tendón... acabo con el esguince por no hacerle caso...- eso fue omisión, no mentira.
Ella me quedo mirando dudosa.
Iba a responder pero entonces pareció pensarlo mejor, me miro con esa aterrorizante mirada analítica que a veces te dan las mujeres cuando parece que pueden ver por tus ojos directo a tu mente y tu corazón, mis hermanas solían hacerme eso cuando querían averiguar algo...
-por favor no dejes que me quede solo con el...- pedí ya rendido, estaba seguro de que ella ya se había terminado de armar todo el rollo
-no puedo hacer eso Shima...- me dijo con... lastima?
Quede confundido, pero entonces...
Ay ay ay.

-tienes el pre-diagnostico, princesa?- entro Yuu mirando unos papeles, a diferencia de otras veces, hoy llevaba hasta la bata de doctor y porque no decirlo, la cara.
-solo son dos tendones Yuu- dijo ella como si nada, sin embargo, pude sentir como se censuraba al nombrarlo, estoy seguro de que ella también iba a decirle un apodo cariñoso...
-esguince completo?- eso lo había oído antes en una clínica, la vez pasada que me esguince... ahora es cuando me delataban
Mire a Omi, estaba mordiendo su labio inferior... acaso estaría... pensando si delatarme o no?
-puede... es decir... no estoy segura- mintió, o semi-mintio, por mi?
El se dio cuenta de la duda de su voz, y dirigió sus penetrantes ojos hacia ella y después de un segundo directo hacia mí, me asuste al punto de dar un brinco.
Porque esos no eran los ojos de Yuu.. No eran los ojos de mi Yuu... eran los ojos negros de alguien que en ese momento odia profundamente algo... seria a mi? seria a mi por haberlo rechazado? sentí mi corazón romperse un poco.
Se acerco directo a mi pie sin decir una palabra.
-Y-Yuu...- alcanzo a adelantarse ella, ¿qué haría...?
-qué?- dijo el seco con esa misma mirada de enojo
-por qué... no me dejas a mi revisarlo?, puedes darme las instrucciones.- estaba tratando de ocultarme, Dios... como puedo hacerle esto a alguien que aun así se está sacrificando por mí, aunque ya noto todo...
-Omi...- dijo él un poco áspero pero sin perder la seriedad- esto es importante-
Bueno... lo intento.
-pero Yuu- insistió!
-dije que no.- paso a topar mi pie con su brazo al apuntarle, di un grito de dolor, lo había torcido de nuevo y JODEERRR si que dueleee
Sin embargo no cerré los ojos, como para ver que el retrocedía de golpe, mientras su expresión cambiaba a una de miedo.
¿Qué es esto? ¿No lleva ya tres años como asistente de enfermería? ¿Y lo asusta el dolor del paciente? yo recordaba a Yuu tan profesional...
Y entonces me cayó de golpe la idea.
Por supuesto que está asustado. Por eso me ha estado buscando tanto desde ese día...
El sabía que cuando caí para atrás cuando casi me atropella esa mujer, me había lesionado el tobillo, y que sería cosa de tiempo, de cualquier caída para terminar de esgüinsarlo.
Y porque le espantaba tanto? tampoco es que no supiera yo sumar dos más dos, Yuu sentía que era su culpa...
Sentía que mi esguince era su culpa, y estaba así de enojado porque no había dejado que me revisara antes.
Mi cuerpo se entibio poco a poco, sentí como cada poro de mi piel suspiraba de ilusiones, aunque duela así, como me encanta estar enamorado...
Sin dejar ni a Omi ni a mi decir o hacer algo mas, la aparto y se inclino sobre mi tobillo levantado sobre el cojín, sin tocarlo, solo mirando.
-algodón y alcohol, por favor.- dijo con un tono que se notaba concentrado, quede admirado por como lo dijo...
Luego de que Omi cumplió con lo que pidió (dejándonos de momento, en un silencio sepulcral) se volteo de súbito al empapar el algodón a mirarme, y nuestras miradas hicieron contacto con tanta fuerza, que mis mejillas ardieron al momento.
Teníamos los dos, tantas emociones guardadas y mezcladas...
Acerco el algodón a mi pie, comenzó a limpiar con cuidado desde la planta, y hacia tantas cosquillas que Takanori y Akira, que estaban a un lado escuchando música, parecía que se reían por mí de solo ver mi cara...
Entonces Yuu dejo a un lado el algodón y lo reemplazo por uno nuevo, y se dirigió a mí
- aguanta, solo un poco Takashima...- "Takashima"... desde cuando soy "Takashima" y no "Shima"?
Me quede pensando en Yuu, en todo lo que había pasado, eso, hasta que un terrible dolor me hizo saltar.
-aaaaagh mierdaa!- llegue a levantarme un poco de la cama, Yuu había pasado el algodón de una sola vez por el lugar afectado para limpiarlo sin hacerme sufrir por mucho tiempo.
Comenzó a tantear mi talón con cuidado, aun así, joder dolía mas que si me lo arrancaran, tuve que apretar los dientes para no gritar de nuevo.
Su expresión cambio entonces radicalmente, estaba furioso.
Quise esconderme... ya se había dado cuenta...
Mas sólo dijo:
-esta herida estaba abierta de antes.- con su tono serio que parecía querer matarme de culpa- si lo hubieses tratado no hubiese pasado esto.- y siguió con lo suyo
-Yuu...- dijo Omi, pero él la ignoro por completo.

Omi quedo mirando a Takanori, y este de inmediato supo qué hacer.
Se levantó y vino a tomar mi mano, la apreté fuertemente, lo que seguía era aun más doloroso, y yo ya lo sabía, tendrían que sacar al menos un poco del liquido de mi tobillo para revisar si había infección y luego inmovilizar, y la aguja se veía grande....
Me quede mirando fijo a Yuu, el me miro y luego quedo viendo la aguja e su mano casi con pena.
-Omi...- llamo- ...practicaras un poco hoy...-
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7:34 pm
El rubio chico cerró la puerta tras de sí, con cuidado.
-me llamaba?- dijo con su voz apagada, llena de dudas
-toma asiento Taka, pronto vendrá a revisarte Yuu...- dijo Hizaki sin levantar la vista de unos papeles señalándole un asiento a unos metros de el
-a...revisarme?- dijo dudoso, no recordaba nada de eso, pero no dudaría de nada hasta tener pruebas o una corazonada certera.
-no lo recuerdas? hoy es tu control, lo dicto enfermería- sonrió el mayor, enseñándole uno de los papeles que ordenaba.
Ruki se acerco, el no recordaba nada de ese papel, y algo le olía mal en todo eso...
Pero ahí estaba, la fecha de uno de sus controles, la emoción de enfermería autorizada por el hospital público, la firma de Yuu que estaba de turno, y su propia firma...
Por qué no recordaba nada de eso?
Tomo asiento mientras examinaba con minuciosidad el papel.
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7:34 p.m.

-ya esta.- dijo el pelinegro limpiando sus manos con la toalla.
El castaño suspiro aliviado y soltó la ya adolorida mano de su rubio amigo a su lado, quien a su vez suspiro de igual forma al verse liberado.
-quieres que yo limpie?- se ofreció Omi simpática.
Yuu no dudo en su respuesta
-por favor.- y lo único que se vio después de él fueron sus largos y negros cabellos ir a paso rápido a la puerta y desaparecer, dejando a una atónita Omi y un aun mas estupefacto Shima.
-qué demonios le pasa?- pensó en voz alta la chica, el castaño se sintió culpable.
-así que ahora te puedo firmar?- dijo Akira mirando el inmovilizado pie del lisiado
-no Akira, es vendaje... cuando me pongan el yeso en la clínica, vale?-
-ah ok... entonces te quedaras en tu cama hasta que termine el paseo?- dijo poco animado
-así parece...- dijo el castaño resignado
-oh.. le digo a las chicas que te seguían que estas e cama o...?-
-prefiero que no sepan mas de mi- dijo el castaño recordando la reciente ruptura
-bueno... entonces me quedare contigo, man.- dijo decidido
-dejaras a perla?-
-sí, ya ha durado mucho...-
-ve antes de que sea demasiado tarde...- dijo el castaño con algo de lastima
-man, odio esta parte- se quejo el rubio, Omi escuchaba todo en silencio, reprochando mentalmente, mas no aguanto
-ustedes se lo buscan, perros- dijo recelosa antes de salir del cuarto luego de llevarse todos los objetos médicos.
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8:07 pm
Reviso su teléfono celular, por fin un rato libre, ahora solo debía dejar el archivo e su lugar y habrían terminado...
Ah, demonios, llamadas perdidas de Byou, más valía llamar antes de que su hermanito hiciera alguna locura, y... un mensaje de texto?
Reviso el remitente, pudo sentir como su garganta se apretaba mientras su pulso se aceleraba rápidamente
"MIKO-CHAN"
Abrió el texto con los dedos temblorosos
" llamo a tu casa y tu hermano me dice que estas con el primero medio? creí que en las mini-vacaciones podríamos salir a pasear juntas... buu...y...que haces? :3"
Comenzó a teclear la respuesta, mas iba en eso cuando algo la detuvo.
Al abrir la puerta del despacho temporal de Hizaki, se encontró con nada menos que Takanori a medio vestir, y Yuu con el estetoscopio en su espalda.
Ambos le miraron sorprendidos.
-yo...- la chica no hallaba que decir, hasta donde ella sabía, Yuu nunca hacia algo sin decirle nada, eran mejores amigos...
-oh princesa, deja eso por allá- dijo rápidamente el pelinegro quitándole importancia al asunto, mas a Omi le pareció extraño...
Sin embargo paso y dejo el archivo con el expediente sobre el escritorio del profesor, y quedo mirando al pelinegro desconfiada
-no necesitas nada, Yuu?- dijo recelosa
-no, gracias....- dijo el pelinegro a espaldas del rubio con un claro gesto de "luego te cuento" en su rostro.
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8:07
-pov Akira-
Ya estaba oscuro, y por donde buscase, Perla parecía haberse esfumado en el aire....
Estaba harto de distracciones, hoy mis amigos me habían necesitado todo el día y yo perdiendo el tiempo con alguien que se que no durara... Takanori tiene razón, debería darme un tiro y no tener sepultura...
No había remedio, tendría que ir hasta sus cabañas.
Me metí las manos a los bolsillos y abrí mi chaleco, una noche particularmente calurosa esta...
Aun así, quiero terminar con ella todo para llegar antes del fogón.
Me encamine hacia las cabañas donde la había encontrado...
Mire a mi izquierda los trigales, bajo la luna tenían un aspecto que invitaba a la poesía y el misterio... por ese mismo lugar estaban las marcas que Takanori y yo habíamos dejado al jugar.
Después de todo si es un niño... es un niño atrapado en su propia cárcel de adulto, no entiende que no vivirá su niñez de nuevo... debería disfrutarlo...
Me pregunto qué tanto puedo ayudar yo en eso?
Y ¿qué demonios paso con él cuando llego perla?
Es como si la repeliese, en cuanto llego se puso celoso de inmediato.
Porque no vamos a decir que no era eso, recuerdo aun las reacciones de Shima cuando empecé a ser así de...perro.
Quizás la odió de inmediato porque aunque sea difícil de asimilar... ellos son muy parecidos.
No sus personalidades, Perla es una chica mas, quizás un poco mas astuta pero no al punto de Taka... y sin embargo, lo que note en ella fueron sus ojos...
Esos ojos hermosos iguales a los de Takanori... me hechizo bajo sus largas pestañas...
Ahh demonios, ¿porque siento que estoy metido en un embrollo?
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8:28
Salí del despacho de Hizaki realmente confundido, sabía que tenía todo lo que Yuu había mencionado en cuanto a enfermedades crónicas e insinuaciones de otras pero...
¿Crisis nerviosa? no esperaba un diagnostico así...
Menos si no tenía esos síntomas de los que Yuu me había hablado... o no había sentido nada por el estilo... qué raro...
Decidí darme una vuelta por ahí para calmar mis neuronas.
Y sin saber cómo, llegue a los galpones...

¿Porque, si yo temo a los caballos, tengo ese tonto placer por mirarlos?
Solo mirarlos, me hace feliz hacerlo de lejos...
Me dirigí a la extensa puerta, iba a entrar pero una voz demasiado familiar me obligo a pegarme a la pared del lado contrario conteniendo la respiración
"¿no lo entiendes? no fue real."
Sus ojos se cristalizaron al tiempo que tapaba su boca, ese era Akira, sin lugar a dudas era la voz de Akira, acompañada de sollozos, profundos sollozos de mujer.
-pe-pero Akira...- la chica no podía hablar sin tartamudear, su voz temblaba, su pena era tan contagiosa que al momento lagrimas cayeron de sus ojos.- yo te...-
-tú no me quieres, ni me amas, así como yo no siento nada por ti.- dijo severo el rubio, Takanori comenzó a odiarlo por tratar así a la chica- así que lo mejor para ti es que te alejes...-
-pero tú dijiste...-
-mierda, es que no lo entiendes?!- alzo la voz, Takanori lloraba en silencio y apretaba los puños, Akira estaba siendo tan detestable, tan... inhumano...- no quiero nada contigo, te use para pasar el rato!!- apenas lo hubiese dicho uno de los sollozos del menor escapo de sus labios, pero se confundió entre los ahora enormes suspiros de la chica. Se atrevió a asomar mínimamente sus ojos por el filo de la viga, pudo ver como la chica lloraba desgarradoramente cubriéndose la cara con una mano y aferrando a Akira por la ropa con la otra, él la miraba hacia abajo con aire de superioridad y desprecio. Sintió tanta pena por ella, se sintió mal, pésimo, la actitud de Akira lo estaba asqueando...
-eres un maldito...- lloro ella
-la vida es maldita- respondió el, arrogante
Ella salió corriendo del establo, pasando a un lado del discreto rubio que ahora cerraba fuertemente los ojos aguantando la rabia.
Seco rápidamente sus mejillas con el puño blanco de su chaleco, y se dispuso a irse de ahí antes de que alguien lo viese...
No había ni pensado en irse cuando con un movimiento del brazo boto un balde metálico con agua, haciendo un gran estruendo.
-...quién está ahí?- escucho su ronca voz serena. Era tan estúpido hacer como que no estaba ahí.
-pov Ruki-
Con paso lento, salí de detrás de la viga para dejar solo unos metros de distancia entre nosotros. Me miro sorprendido, supuse que nunca me había mostrado así de enojado con el...
-Takanori...- susurro
-me das asco.- sin pensarlo siquiera, escupí esas palabras que sentía en ese momento, el desvió su mirada al piso metiendo sus manos a los bolsillos del jean negro, note que lo había herido.-ser maricón es poco al lado de lo que tú le hiciste a esa chica...-seguí insultándole sin importar que pasaba con él, quería detenerme, pero no podía, la rabia me inundaba los poros y hacia fluir por mis venas adrenalina, que a su vez presionaba mis puños...
Pero yo no hería a golpes. Porque el dolor psicológico hería aun más.
El me miro a los ojos por un momento, y camino hacia un lado luego, el que rehuyera así el tema solo me hacia desear hacerle sentir mal mas.
- ella te quería Akira, no haces las cosas porque tengan un propósito, lo haces solo por probar que puedes.... tienes un horrible complejo de inferioridad- dije mordaz, viendo como él solo desataba un caballo y le acomodaba la rienda un poco.
-porque lo haces?! Cuál es el gusto de ser un grandísimo hijo de puta?!- le interrogue mientras sentía que mis lagrimas volvían a caer sin que yo supiera porque. Volvió a mí con las riendas en una mano y el animal tras él.
Se acerco peligrosamente, pude notar nuestra diferencia de altura, pero aun estado aterrado por el animal enorme que sujetaba y el que me mirase de ese modo muerto desde arriba, no me deje intimidar. lo mire fijamente, odiando sus ojos serenos.
-golpéame.- me dijo sin expresión, me mantuve igual, mis lagrimas comenzaron a caer más abundantes aun.
Se agacho un poco y apunto su mejilla al tiempo que ladeaba su cara.
-golpéame aquí, Takanori. Golpéame.- repitió, mi mirada se ofendió ante la insolencia que representaba su reto.
Volvió a enderezarse y de un hábil salto subió al caballo, retrocedí con pánico, ese animal era enorme, y ahora estaba frente a frente mío.
El animal relincho y yo cubrí mi cabeza con ambas manos, me encogí y cerré mis ojos con fuerza, sentí las grandes patas del animal acercarse ruidosamente, mi corazón estaba en mi cuello.
Y entonces...
Sentí como era suavemente tomado por los hombros de pronto, y comenzó a elevarme...
Abrí los ojos, y me di con las crines frente a mi.
-QUE MIERDA CREES QUE HACES IMBECIL, SOY ALERGICO AL PELO DE ANIMAL!!- le grite a mas no dar cuando me vi subid al caballo con Akira a la fuerza.
-tenias un perrito.- fue todo lo que me dio por respuesta, antes de hacer a la tremenda bestia andar y yo aferrarme sin opción de la cintura de Akira, sentado de lado sobre el lomo del caballo, entre sus piernas.
-DEMONIOS AKIRA! ¡¿Crees que tienes potestad sobre todo y todos?! Que dispones de nosotros?! No son juguetes! no son tuyos! es exacto lo que haces con las chicas!! También me usas cuando trato de entender?! ¡¿No te importa que sea el único hijo de puta que trata de entenderte?!- grite esto y mis lagrimas de desesperación por bajarme y rabia por la impotencia que tenia ante Akira comenzaron a caer furiosas, más que antes, me costaba respirar entre los sollozos, y no lo aguante mas.
Formando un puño con cada mano lo golpee, golpee su pecho, su estomago, su rostro, lo sacudí, lo sujete con fuerza, lo abrace, lo apreté contra mí, llore en el, llore desesperado... lo abracé de nuevo, lo golpee más, creo que hasta lo bese en el rostro... sin que él lo notara nunca, seguía impasible con los ojos en el camino dirigiendo las riendas del caballo, y yo agradecía eso pues ya era de noche y solo se podía ver la orilla de la playa gracias a la tenue luz de luna.
No me dijo nada, en ningún momento. Me dejo llorar mientras yo no entendí que demonios pasaba o a donde me llevaba, me dejo robarle su calor cuando mis lágrimas cesaron y el frio me tomo en sus brazos, me dejo esconder mi rostro en su cuello cuando la vergüenza por la escena que acababa de hacerle tiño mis mejillas.
-quieres saber?- pregunto cuando me mantuve quieto, abrazando mi minúscula cintura, cansado de llorar y gritar impotente y frustrado.
-qué?- respondí arisco en voz baja
-porque hago eso, porque soy así.- volvió a hablar con ese tono monótono que usaba desde lo que viese recién.
-...- no respondí, de pronto el paro al lado de unas rocas y bajándose del caballo, me tomo e brazos hasta dejarme en el piso, yo me sentía como un muñeco de trapo cuando él con cuidado me sentaba en la arena luego de tender su chaqueta para que no me ensuciara, quito las riendas al caballo y golpeándolo levemente, lo dejo correr hasta que lo vimos desaparecer detrás de las dunas.
Se sentó a mi lado, yo miraba el mar, como azotaba las rocas con su blanca espuma mientras la luna se reflejaba difusamente añadiendo destellos de plata a la noche ya salpicada de estrellas.
Pude ver su aliento hecho vaho escapando de sus labios, igual que el mío, me miro unos segundos y yo no me quise virar, finalmente la tentación me venció y gire mi rostro para verle a los ojos.
Nos miramos unos segundos en total silencio, yo sentía aun mis ojos irritados y acuosos, los suyos eran graves y serenos.
-tienes frio- dijo en una entonación mitad aseveración y mitad pregunta, yo no respondí de inmediato
-un poco...- me escuché a mi mismo débil y así mismo me sentí.
Alzo su mano y con su dorso acaricio mi mejilla, note como el frescor de mis lágrimas desaparecía al paso de su cálida mano.
La mantuvo ahí, sujetando mi rostro, seguramente sintiendo el contraste de nuestras temperaturas....
Entonces se acerco, despacio, sin que yo supiera cómo reaccionar, y abriendo sus labios, atrapo mi boca.
Sentí como mi corazón se disparaba a latir furiosamente, mientras él no se movía, sus labios quemaban sobre los míos.
Retrocedió para quedar a centímetros de mis ojos, lo mire lleno de preguntas, pero su mirada grave seguía impasible.
Me empujo suavemente, sujetándome con su brazo a la vez, hasta dejarme sobre la arena recostado y el sobre mí, entregándome su calor.
Me miro a los ojos de nuevo, mis mejillas me ardían y mis ojos comenzaban a aguarse de nuevo -vaya yo a saber por qué-. Se acerco de nuevo y volvió a atrapar mi labio inferior, yo le correspondí y por un momento en que el tiempo pareció detenerse, nos besamos.
Se separo de mí y apoyo su cabeza en mi hombro, toda la mitad de su cuerpo estaba ahora sobre mí.
Me hablo sin mirarme.
-no es que no te quiera... eres mi amigo, aunque me haya dado cuenta de que es muy tarde.- estaba hablando con poca coherencia, y en parte, mis sentimientos se alocaban de tal forma que me costaba entender...-yo te pregunte en la tarde si eras de esas personas que explotan contra sí mismo en vez de contra los demás... y no me respondiste. Bueno, yo soy el tipo del que explota contra los demás.-
Se alejo de mi para tenderse sobre la arena mirándome a la cara, al faltarme su calor me acurruque en su chaqueta, olía como el...
-el por qué daño siempre tanto a las personas... en parte es porque a mí me hirieron mucho también, alguna vez....- me miro esperando a ver si yo le decía algo, preferí callar y escuchar que tenia para decir.
-una vez hace mucho yo.... me enamore.- dijo con aire de quien recuerda años oscuros de su vida.- apenas tenía 9 años... pero me enamore como si el mundo dependiese de sólo esa persona. Ella se llamaba Hisumi... y tenía 21 años por ese entonces.- sin duda lo que me decía no era para menos, pero seguí callando, esperando a que continuase sin sentirse presionado.
-ella era quien cuidaba de mí y a mi hermana cuando nuestros padres estaban en el trabajo, y siempre me trataba a mí con especial cariño... Un día, cuando mi hermana había salido con sus amigas, se acerco a mí, y dijo que me amaba...- sonrió de un modo desgarrador, sus ojos parecían llorar en silencio.- fui tan tonto... y le creí...- hablo mas para sí que para mi mientras volteaba al cielo contando los puntos luminosos de él.
-tu si creíste amarla...- murmure en voz baja, lo que creí que no saldría de mis pensamientos
-no Taka, yo realmente me enamore. Aun hoy, no he vuelto a sentir eso por nadie mas... pero ella a mi no me amaba, yo era su juguete, su fetiche, su secreto...- le costaba expresarse entre murmullos, yo hacia lo posible por oír sin inmutarme...
-cuando mi hermana se iba a dormir, ella subía a mi cuarto, me acostaba…y me besaba... me decía cosas que hacían que me sintiera bien, algunas veces hacia cosas raras que no recuerdo con claridad... me tocaba... y dolía... a veces me cortaba y me decía que era un tipo distinto de amor... que si mis padres preguntaban tenía que decir que me había caído en la bici... que era muy pequeño para entender, pero ya tenía edad para sentir...- lo mire sintiéndome más frio aun que antes, era posible acaso...?
-ella me quito mi virginidad cuando era aun muy pequeño...- su voz ahogada, pude ver su manzana de Adán subir y bajar en lo que tragaba un sollozo amargo- me enseño que las personas no son otra cosa que entretenciones, juguetes... y me dejo esta maldición... no puedo sentir nada por una mujer, por nadie... Shima es la única persona a la que dejo entrar a mi corazón, y no siento nada por nadie más, a veces por mi familia... pero a veces me encuentro a mi mismo como una persona totalmente ajena a todo y todos... soy una máscara para las persona de alguien que nunca seré. Soy un lobo con piel de oveja, que daña a quien se le acerque... y lo peor es que luego no siento ningún remordimiento...- por primera vez, vi atónito una lágrima que parecía seca, resbalaba lentamente por su mejilla.
-puedo hacer sentir a todas esas chicas que las quiero, porque aprendí a mentir y fingir cariño como la mejor de las mentiras...- volteo y se acurruco enfrente mío, me estremecí por su sinceridad, era este el Akira que siempre se escondía? - y creí que no volvería a sentir nada nunca. Porque hace años tampoco que no lloro ni me conmuevo... no me había pasado... hasta que llegaste tu a joderme la existencia.- se encrespó hasta el más mínimo centímetro de mi ser, y no fue por el frio, eran tantas las sensaciones...- eres la única persona que aprendió a defenderse de mí, y me obligas a pensar antes de hacer algo que te dañe, me obligas a meditar antes de decirte algo, porque siento que siempre puedes ver a través de todo, en especial a través de mi... llevas menos de un año obligándome a notarte cuando parece que sólo te quieres esconder y pasar desapercibido, de algún modo que no creo que ni tu entiendas, brillas con solo estar en un lugar, cuando sonríes me alegras, y en tan poco tiempo me apegue, a las malas debo decir, a ti. y cuando no estás te extraño, y si estas quiero ignorarte, porque no me gusta cuando siento que cada vez te quiero más, y de a poco te vas convirtiendo en algo tan importante para mí como lo es Shima, que es desde hace años mi amigo, como lo es la misma música...-
-pero...- quise preguntar algo, lo que fuera, pero él no me dejo interrumpir.
-no me malinterpretes cuando parece que te odio... ni cuando me comporto como un puto con las chicas, tienes toda la razón para odiarme por eso, no soy otra cosa que la sombra de ella, si ella fue mierda en mi vida, yo estoy por debajo de la mierda.... mi punto es... te traje aquí para explicarte que no lo hago sin ningún motivo, aun cuando no es una excusa para hacerlo.- finalizo mirándome casi como con una disculpa en su expresión. Yo no sabía cómo mirarle, ¿estaría esperando que yo lo disculpara o algo así?
-el beso...- fue todo lo que salió de mi, necesitaba una aclaración con urgencia.
-oh...- vi sus mejillas teñirse de un rosado pálido mientras desviaba su mirada a la arena, Akira estaba en un estado tan vulnerable... que no parecía el sino otro, un Akira que por primera vez, no tenía ni señales de ser un completo superficial e imbécil o un cretino arrogante...-antes de que pienses cosas que no son… No es que lo haya hecho con asco... pero en ese momento pensaba en que ellas no te hicieran nada... y luego... luego no sé...- me miro tímido y sostuve su mirada confundido- no lo sé.- la única conclusión que logro darme... y no bastaba para figurarme cosas que no son, soy realista.- ahora sentí que estabas tan frio... y no sabía cómo acercarme, sé cómo eres de delicado de salud...-aquel comentario me saco un poco bastante de foco
-dime algo- le pedí sin especificar qué.
-...lo que quieras...- me respondió dudoso
-qué te dijo Kisaki cuando salieron sin mí? Y no creas que no me di cuenta de que se demoraron bastante más de la cuenta....- dije receloso, no me gustaba que se supieran mis cosas y eso era un asunto que me traía pendiente desde hace rato como para ignorarlo ahora, y si Akira estaba siendo sincero...
Me miro callando un momento, como meditando que esto iba a pasar tarde o temprano.
-me hablo de ti...- dijo luego de una larga pausa dándome a entender con su tono de que con "de ti" eso se refería a mucho más de lo que yo tenía permitido decir a Kiki...
-no quiero que me veas con lastima- no quise seguir indagando sobre cuanto sabia, porque suponía que Kiki, conociéndolo, no se había medido en detalles. Quería dejar mi punto claro.- no soy ningún tipo de huérfano de ojos tristes ni un pobre niño derrotado por la vida, así que no quiero tu lastima.- le espete con un tanto de rabia, el no tenia porque saber todo eso que Kisaki le dijo
- pero si yo no te...- su cara lucia un tanto confundida, pero cada vez que ese tema salía o se insinuaba, no podía evitar saltar a la defensiva...
-no quiero que lo digas- lo corte al instante, esta conversación se había vuelto incomoda y no quedaba mucho más que decir...
-oye, cállate un momento.- dijo serio, sin notarlo enmudecí en ese mismo instante, la forma en que lo había dicho me había intimidado por completo.- sonara a chiche y todo lo que quieras, malinterprétalo si te da la gana. Pero yo quiero cuidarte y no porque te tenga lastima, Takanori yo...- se mordió el labio levemente tragando nervioso- ...eres mi amigo y te quiero. Y no quiero que te pase nada.- mi estomago dio un retorcijón, mis mejillas ardieron de nuevo y ya no distinguía donde terminaba el cielo y comenzaba la oscuridad, porque todo contrastaba demasiado con su piel clara, su cabello ligero y sus ojos oscuros. Estaba perdido en ellos...- es por eso que quieras o no, yo me quedo contigo. ¿Entendido?- aquello que pretendía ser una amenaza, tenía el tono más cálido que en mi vida... incluyendo mi infancia y lo poco que llevaba de adolescencia, había oído jamás.
Se acerco y me abrazo acurrucándome contra su pecho, lo escuche reír ligeramente mientras se encargaba de que yo no tuviese frio usando la chaqueta en la arena para tapar mi espalda....
-sabes? siempre me pareciste tierno, tienes cara de peluche... por eso a veces te abrazo sin razón- me confesó ocultando su rostro en mi pelo, y efectivamente, me sentí como un peluche... uno inmensamente feliz.
¿En qué momento Akira? ¿en qué momento comenzamos a aceptarnos? ¿En qué momento comencé a quererte así? ¿Cuándo dejaste de verme con desagrado?
"yo no quería que me gustaras, pero parece que es cierto... aun si me ves solo como un amigo." apreté su espalda restregando mi frente en su polerón "aunque sufra en silencio, quiero seguir contigo... aun si nunca llego a tenerte, no quiero dejar de intentarlo." pensé un tanto amargamente en ese momento, y mis lagrimas comenzaron a salir, sin suspiros, sin sollozos, sin sonidos.... lagrimas de alegría, rabia y dolor.
-¿Taka?- pregunto cuando sintió su polerón húmedo, me aparto para ver mi rostro, y yo desvié de inmediato mis ojos de los suyos.-¿qué pasa?-dijo extrañado, corriendo algunos mechones que se pegaban a mis mejillas por las lagrimas.
No supe que decirle, aunque la idea la tenia, y era lo justo así que...
-yo... yo te odie cuando te vi rompiendo con ella... porque yo también ame alguna vez...- no era por eso por lo que lloraba... pero si él me iba hablar de sí, no quería que se sintiera tan expuesto y solo.
Me miro sin saber que decir, no lo necesitaba.
Empujándolo suavemente logre que se tumbara en la arena, apoye mi cabeza de lado sobre él, para no poder verla la cara.
-su nombre era Reila... y también fue cuando tenía más o menos 9 años... la conocí en oncología, ella era la única chica que me hablaba, y tenía leucemia... nos enamoramos y te imaginaras el resto...- me dolía recordarla, pero para mí ella era de mis únicos recuerdos de luz y alegría... esas tardes riendo juntos, los inocentes besos en la mejilla...-murió antes de que pudiera decirle lo que sentía por ella... pero siempre me hablaba de que no le temía a la muerte, ella me enseño a ser fuerte, me conto como era de cruel el mundo... y es a quien le debo el que este donde estoy...me infundio la fuerza que me faltaba para vivir, irónicamente, al tiempo que se extinguía la suya...-me sentí... desnudo... ahora Akira parece ser la única persona que sabe más de mí que Kisaki...
Así que esto es tener un confidente... pensé que se sentiría peor...
-¿estamos ya a tregua?- pregunto con su voz ronca luego de regalarme un silencio lleno de sonoro oleaje de fondo para repensar todo lo que sucedía
-hum....- lo deje en el aire
-dime qué piensas?- me dijo serio
-dime un secreto.- le impuse como condición. Lo mire a la cara, nos sonreímos como dos niños jugando.
-una vez robe una cadena en una tienda- dijo riendo
-tengo la manía de cantar cuando estoy solo-
-ja! no es nada, yo canto en la ducha-reí y él también
-no puedo evitar mirar a veces el cuerpo de las chicas...- dije avergonzado
-y eso es un secreto?!- se rio estridentemente y me sonroje
-oye yo todavía soy un púber!!- le grite molesto
-cierto, yo ya pase por eso... oh cierto, cuando iba ahí solía masturbarme hasta detrás de las puertas porque una chica se agachaba a recoger un lápiz- rompió a reír, yo también me reí bastante
-el mío es bastante pequeño...-
-es porque primero crecen los testículos, tonto, todavía te falta...- se rio
- le tuve miedo a la oscuridad hasta los 9 años!!- este juego era bastante divertido
- yo le tenía un miedo mortal a los gatos!- y de pronto estábamos compitiendo por quien tenía el secreto más vergonzoso...
-los animales grandes y las medusas me dan pánico! en especial las eléctricas...-
-tranquilo, en esta playa no hay haha y ya había notado que le tienes miedo a los caballos- sonrió con ternura y rebusco en su mente algo que decir, sus cejas se juntaron en una expresión que parecía incrédula hacia si mismo-...alguna vez fantasee con tener sexo con la niña del aro...-
-jajajaja en serio?! yo hace meses no logro ver una película de terror entera! como estoy solo en casa, me da mucho miedo...-
-un día de estos podríamos...-
-podríamos- afirme, y sin querer, ya lo tenía invitado a mi casa...
-hace frio...- me dijo frotando sus brazos
-y deben estar preocupados, es mejor que volvamos...- le dije sintiendo en lo mas hondo mis palabras
-quiero quedarme otro rato contigo...- pidió aferrándose a mi cintura y apretándome contra sí, me sonroje muchísimo, pero tenía que volver a ser yo.
Lo aparte mirándolo sin poder esconder mi sonrojo, él lo noto y rio por lo bajo mirándome.
-gay.- le espete antes de pararme y comenzar a caminar sin esperarlo mientras me reía....
"y a pesar de todo es cierto... me gustas. Ya lo dije... me gustas..."
Notas finales:

se me ocurrieron preguntas xD

¿ a que se referia shima con "Si tan solo hubiese sido por una vez sincero con mis miedos"??

¿como es que omi y shima se hacen amigos tan rapido??

¿¿cual es el super plan de la msiteriosa directora del colegio??

¿¿como es que hizaki es como la marioneta de sus malvados planes??

¿¿es esto para dañar a taka??

¿¿hizaki es alguien en quien confiar??

akira ya esta enamorado, esta confundiendo las cosas o solo esta aceptado que son amigos con taka??

¿¿es bueno o malo que yuu se haya enojado por el susto que le hizo pasar shima??

¿¿que necesitaba byou que llamaba tanto a omi??

¿¿que pretende miko??

¿¿que personajes esperan qe empiecen a salir mas frecuentemente ahora??

¿¿¿que pasara??

yo ya se todas als respuestas, muhajajajja...


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