Remembranza
El rubio se cruza de brazos y empieza hacer recordatorio de los hechos, se mueve por todos lados, la cabeza la gira hacia arriba, cierra sus ojos, tal parecía que le estaba costando trabajo pensar en algún suceso un cambio. Es así que retrocedemos algunos meses antes de los hechos.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.
Un día nuevo se asomaba por Konoha, los primeros rayos de sol comenzaron a filtrarse por unas enormes ventanas de la habitación principal, ahí se encontraba una pareja durmiendo plácidamente. Es en ese momento aparece un dulce niño asomando su cabecita por la puerta, con esos enormes ojos azules visualiza los dos cuerpos acostados, y mostrando una sonrisa traviesa corre y se lanza sobre ellos.
La pareja que estaba en lo profundo de sus sueños, se despertaron; pero un rubio se sobresalto tanto que se cayó de la cama directo al frio piso, a lo que el niño se rio estrepitosamente.
-Ittttteeeee- se soba su retaguardia que sufrió más daño- Ita-chan, ¿cuánta veces te hemos dicho que no entres así?- se queja su rubio padre.
-Jajajajajajajajajajaja- no dejaba de reírse el pequeño- es que….. es que….. es divertido ver la cara de oto-chan….. caer al suelo-. Y es verdad, para Itachi no era la primera vez que hacia eso, le encantaba entrar y hacer ese tipo de travesuras a sus padres, pero sobre todo a su rubio padre.
-Eres un dobe- decía su esposo- cuantas veces te he dicho que cierres la puerta con llave- se quejaba el azabache revolviéndose los cabellos, tratando de quitarse ese mal despertar que le provoco su hijo.
En ese momento el pequeño se paro en la cama y comenzó a brincar en ella –¡es hoy!, ¡es hoy!, ¡es hoy!- brincaba más y más. Naruto se levanta de su lugar y ve la cara de felicidad de su hijo y este al verlo se le lanza a sus brazos, este lo atrapa y se ríe con él.
Sasuke le encaba ver esa escena en las mañanas, ya que jamás se imagino que tendría una vida así, casado y con un hijo adorable, en eso un rubio notó la mirada negra y profunda de esos ojos, así que fijo su vista en ellos, percatándose de un brillo que denotaba su alegría, aunque no lo expresará abiertamente. Eso es lo que la experiencia hacia, el convivir juntos y entenderse el uno al otro sin necesidad de usar las palabras.
-Oye Ita-chan, así que hoy es el día-dattebayo- baja a su hijo –entonces ve a prepara las cosas que deje en tu armario anoche- le decía muy sonriente.
-Hai, oto-chan- en eso se volta- Oto-san, tu vas a venir verdad- decía con unos ojos suplicantes.
-Sí Itachi, voy a asistir con ustedes- corto y conciso fue el mensaje, pero suficiente para que el niño saliera corriendo por sus cosas gritando por toda la casa.
-Los tres vamos a ir a la escuela, los tres vamos a ir a la escuela- hasta que se escucho la puerta de una habitación cerrarse.
- Vaya que lo has hecho muy feliz, casi siempre evitas al ir a este tipo de reuniones en la escuela- decía muy directamente el rubio con ojos acusadores, recordando el año pasado en que no asistió a varias de la reuniones por irse de misión.
-La vieja, no me la quiso dar- dijo algo molesto.
A Naruto se le salió una pequeña sonrisa nerviosa, ya que él fue el culpable de que no le dieran la misión a su esposo, porque fue alegando con lagrimas en los ojos a Tsunade que su querido azabache no quería ir con Itachi y él a las reuniones que se hacían en la escuela, que era un padre desobligado al no querer atender las necesidades de su hijo y una sarta de tonterías más; pero eso fue suficiente para convencerla de no darle por un tiempo misiones y se la pasara con su familia.
A los dos años de haber nacido Itachi, se creó en konoha un instituto de alto rango para hijos de shinobis, ahí se impertirían muchos tipos de clases, incluidas las de ninja, para todos aquellos padres que tuvieran que salir a misiones por largos periodos, tenía incluidos habitaciones para los niños y alimentación balanceada incluida, pero esta maravilla de escuela no era barata y por lo mismo fácil para que los niños ingresen, por lo que hacían rigurosos exámenes a los niños. Así que al cumplir Itachi tres años, Naruto y Sasuke decidieron ingresar a su hijo a esta escuela, esperando que su hijo aprobara el examen, pero cuál fue la sorpresa de Naruto y para orgullo de Sasuke, el saber que su hijo a esa corta edad, era poseedor de un inteligencia inigualable, ya que su IQ resulto ser más alto del de un niño de su edad. Pero esto no termina aquí, ya que parte de esta escuela era requisito que los padres, cada que lo solicitaran, asistieran para diversas pruebas con sus hijos, ya que eso aumentaba su fuerza y seguridad en sí mismos.
Entonces, llegamos a este día, en el que nuestros protagonistas llegan a la escuela de su hijo, Itachi iba agarrado de las manos de sus dos padres, columpiándose de vez en cuando en el camino, y llegando a la entrada visualizaron a sus demás compañeros de equipo.
-Hola Naruto-kun- decía Sai con su típica sonrisa, pero lo curioso es que traía en sus brazos, cargada a Mizuno (la hija de Sakura y él), muy linda niña de pelo negro y ojos aguamarina –Ah si, o te había visto Uchiha- así bajo a Mizuno y corrió al lado de Itachi.
-Hola Itachi- decía muy sonriente hacia su compañero – mira también está aquí Kyo- apuntaba hacia el niño de pelo café y poseedor del byakugan- ven vamos con él- así es que fue arrastrado por el brazo para ir con su compañero.
-Estás listo para perder en esta ocasión Naruto- decía una animada Sakura.
-Por supuesto que no-dattebayo- decía el rubio alzando una mano al cielo – este año te ganaré en ese concurso-. Así es la reuniones eran concursos de habilidad que los padres hacían con sus hijos, de esta manera incrementaban las habilidades de los niños por medio de competiciones.
- ¿qué quiere decir con perder usurantonkachi?- pregunto de forma molesta, conociendo a su Naruto era seguro que este perdiera junto con su hijo y manchara el apellido Uchiha.
-N….. nada teme….. no prestes atención a los comentarios- así este se solo sacaba una sonrisa nerviosa.
-Lo que pasa es que en la competición pasada, Naruto-kun, perdió ante mi esposa- decía de manera orgullos Sai.
-Dobe- con una gran vena en la cabeza -por qué no me dijiste eso antes, hubiera asistido con tal de que mi hijo ganará- a Naruto le molesto un poco el comentario, ya que su esposo no estaba pensando en su hijo sino en su estúpido orgullo Uchiha.
En eso dos personas se iban acercando con tres niños pequeños entre ellos –con quienes crees que estas tratando Uchiha- comento un serio Neji.
-Neji, Hinata, hola-dattebayo- saludo cordialmente Naruto olvidando rápidamente su enojo, en eso bajo su vista hacia el pequeño –Hola kyo. Vaya que estas grande, cada día t pareces más a tu mamá, que bueno que no sacaste la cara enojada de tu padre- decía animadamente agachándose a la altura del niño.
-Konichiwa- saluda muy cordialmente el pequeño. Cuando Kyo presento el examen junto con Itachi, resulto ser el segundo con la más alta puntuación.
Al momento de levantarse, Naruto sintió un mareo y como las fuerzas se le iban, esto fue notado por todos, pero el que rápidamente reaccionó fue Sasuke sosteniéndolo de los hombros, Itachi también corrió rápidamente hacía él.
-Naruto, ¿qué tienes?- pregunto rápidamente el azabache.
El rubio solo se sujeto la cabeza con su mano, en ese instante se acerco Sakura y le analizo con su chakra –No Sakura, no tengo nada- dattbayo-.
-Dime….. tuviste una misión recientemente- este solo asintió con la cabeza – no te preocupes solamente tuviste un desnivel de chakra, todavía sigues cansado, debes de reposar más tiempo.
-Entonces el dobe no tiene nada, ves cuando regresaste de esa misión t dije que descansaras- le dijo en forma de reproche.
-Teme, seguramente tu me ayudas mucho con Itachi y los quehaceres de la casa, no sabes lo difícil que es además de ir a las misiones- con eso tuvo para reponerse rápidamente.
- aaahh, Naruto-kun, Sasuke, Sakura, Sai- llamaba la atención una tímida Hinata que por fin se dignaba hablar, así todos voltearon a verla- Aaa…..ahora que estamos reunidos aquí, Neji y yo queríamos darles una noticia- en eso se puso toda colorada.
-Si Hinata dinos, no andes con tanto rodeos-dattbayo- como siempre muy desesperado.
-Está embarazada, tiene 4 meses de gestación- decía un serio Neji.
-¡Felicidades!- se animaron a contestarle todos los presentes menos Sasuke.
Así siguieron hablando y conversando sobre el embarazo de Hinata y el por qué no había avisado antes, que ni se le notaba el embarazo, entre otras cosas. Entonces al termino ingresaron a la institución y vieron a la directora del lugar, una hermosa mujer de pelo morado i rizado hasta la cintura, se veía feliz por ver a tanto padres de familia.
Todos los padres se quedaban embobados por tanta belleza por lo que de vez en cuando sus esposas les propinaban buenos golpes, en este caso tampoco pasaron desapercibidos nuestros protagonistas, el primero fue Sasuke quien nunca la había visto, el segundo fue Sai y por último por sus cambios de humor que sufre su esposa Neji.
-Bienvenidos, sean todos ustedes- empezó hablar la directora – es un gusto ver que todos hayan venido en este lindo día, así daremos abriremos con la primera competición entre padres e hijos, y esta consiste en…
Continuará…