Fuego vivo II...
Luna...
*Kyo...*
Desde hace un tiempo, siento algo que cosquillea mi pecho y mi estómago, era casi lo mismo que sentía cuando conocí a mi hermosa, novia, Yuki, pero ahora se volvió mucho más fuerte, es imposible que este enamorado de otra persona que no sea ella... me siento un poco frustrado, esos sentimientos solo aparecen en determinadas situaciones, y en todas ellas, esta mi enemigo, Iori Yagami...
Mi corazón comenzó a latir tan fuerte, que no podía respirar, busque la razón del porque esa acción, y la encontré, los ojos de Yagami, miraban fijamente, donde estaba, supuse que vendría a pelear, pero me equivoque, vi una mano pequeña tomar su mano, era una niña dulce, en sus ojos rojos se notaba un dejo de travesura e inocencia, tenía el pelo largo de color rosado, supuse que era la hermana de Yagami, la vi alejarse con él al salón de maestros...
Me sentí, triste; no sé por qué, antes de que comenzaran las clases, subí a la azotea, con mi alumno, Shingo, pues quería hablar conmigo, me recosté por la reja, me relaje y cerré mis ojos, no oigo la voz de nadie es como si estuviera durmiendo; veo unos ojos del color del fuego, sus labios finos, susurran, en mi oído, y luego, siento un golpe en el suelo, abro los ojos, y veo a Yagami, empujo a Shingo y lo observa como si quisiese matarlo, la campana sonó, observo y pregunto a Yagami el porqué de sus actos, me molesto que me ignorase, le dije a Shingo que nos fuéramos, el hizo un tono de berrinche, pero de igual manera obedeció, luego que se fuera...
-bien, ¿ahora tratas de matar también a mi alumno?- dije, de nuevo se hacía presente en mí, esos sentimientos enmarañados, no podía respirar, quería salir de allí, pero también quería estar allí, con el... aprieto mis puños y noto algo raro en Yagami era como si quisiese golpearme, o algo...-Yagami...- dije y el desvió la mirada...
-vete... quiero estar solo... aléjate de mí...- dijo, simplemente, no quería hacerlo, quería pelear, quería sentir, sus golpes... tal vez me volví un masoquista... pero buscaría la forma de ver ese brillo, esa sonrisa, que me dicen algo más que "te odio...", escuchar mi nombre en sus labios... era... en fin, buscaría la forma de pelear...
-no eres nadie, para ordenarme...- dije, y mi corazón se aceleró, dolía respirar, pero a la vez sentía algo placentero subir por mi estómago, sentí su mano sobre mi estómago, luego la reja tras de mí, mis nervios aumentaron, sentí un calor subir a mis mejillas, respiraba entrecortadamente, se acercó a mi rostro, sentía su aliento rozar mis labios, estaba impaciente, quería que me besara, quería... no sé lo que quería, ¿que rayos estaba pasándome...?
-haz silencio...- dijo, y todo lo razonable abandono mi mente, quería que sucediese, lo que fuera que iba suceder, siempre que el este allí...
-Yagami...- susurre, respiraba agitadamente, quería que me quitara todo el aire si era posible, quería sentir un beso de Yagami, me volví loco (y es que recién me doy cuenta), quería que el... perdí la razón, al sentir sus labios sobre los míos, ya no sabía que pensaba, quería seguir allí, besándolo, sentí su mano detrás de mí cuello, y la otra en mi cintura, mis manos temblorosas por la nueva sensación se colocaron en los brazos de Yagami, quise volver en mi pero no podía estaba embriagado por su sabor, quería profundizar ese beso, pero no podía la razón estaba ganando a la locura en mi mente, y luego un golpe, en la puerta nos separó, lleve la parte trasera de mi mano a mis labios, queriendo retener ese sabor, el observo, la puerta estaba cerrada, y luego a mí, lo observe, quería que antes de que la razón, ganara por completo se acercara a mí y... cuando me di cuenta lo había golpeado...
-supongo que me lo merezco...- dijo, pensé que me golpearía, pero no fue así, trate de calmar a mi corazón...
-¿que rayos, fue eso...? ¿por qué me besaste...?- dije tranquilamente, pues en el fondo, quería que me interrumpiera de nuevo con ese beso, pero de nuevo la razón se hizo presente... se dirigió a la puerta, sabía que estaba cerrada, que no se podía abrir de este lado, eso no me asusto, lo que me asusto era estar a solas con Yagami, allí en la azotea luego de ese beso; nos observamos, suspiramos, de nuevo la locura iniciaba una pelea con la razón, para evitar nuevamente ese beso me senté alejado de Yagami, quería que todo se terminara, pasaban las horas, y la locura comenzó a hacerse presente, llego la noche y con ella el frio infernal de esa época del año, quería sentir ese aroma de Yagami, sus labios de nuevo, quería abrigarme en su calor, era obvio que la razón perdió...
- ¿tienes, frio...?- dije, sin saber porque, me sonroje, y mire a mi derecha, sin decir nada, trataba de reprenderme a mí mismo por lo dicho, sentí su calor cerca de mi cuerpo y no pude hacer nada, me embriague con su aroma, escondí mi rostro en mis brazos, apoyados sobre mis rodillas, sonreí sin que él pudiera notarlo, me gustaba esta paz temporal entre ambos, es más disfruto de su compañía, de su calor... pasada la medianoche, Iori, dejo que durmiera en su hombro, no sé cómo sucedió, pero no lo recuerdo con claridad; al amanecer, el encargado nos retó a ambos, pero eso no nos importaba, lo que nos importaba era que ambos disfrutamos del silencio, y la paz... el director, nos dejó marchar temprano, pues estábamos cansados, sin embargo se hizo otras imágenes de nuestra velada, pues comenzó a palmar el hombro de Yagami, y se sonrojaba al mirarme, por un instante, pensé que Yagami lo golpearía, pues afilaba su mirada cada vez que se sonrojaba, así ambos nos dirigimos a la salida, al llegar allí nos detuvimos sin mirarnos, al parecer él quería hablarme de algo, y era obvio que también yo...
-Kyo...- dijo con esa voz, penetrante, lo observe, el hizo lo mismo, luego desvió su mirada y siguió su camino... sin saber cómo responder a eso, hice lo mismo, al llegar a mi hogar, no podía hacer otra cosa más que pensar en él, en su calor, en su voz, en sus ojos... sentí el calor recorrer mis rostro, rápidamente, fui a mi habitación y luego de darme un merecido baño, dormí, pensando en él, soñando tal vez con algo que jamás llegara. Al despertar me di cuenta de que eran la cuatro de la tarde, me levante renovado, me di una ducha y baje a comer algún bocadillo, me encontré en la sala con mi madre, a pesar de su seriedad, y su imagen de "me importa poco lo que te suceda", sé que puedo hablar con ella, y así lo hice, hable con ella de lo que había sucedido, con mi enemigo, Yagami, ella, rio al contarle que trato de golpear a Shingo, pero omití el detalle pequeño pero importante de que nos habíamos besado, al terminar mi historia se dirigió a la alacena, y con su acostumbrada seriedad, me tomo de la mano y suspiro...
-¿madre... sucede algo...?-
-veras, Kyo... tu padre y yo decidimos mandarte a Alemania... para que puedas entrenar con tu primo, allí; entiendo que no quieras ir, por tu novia, pero tu padre quiere que vayas, así que piénsalo, por favor...- me quede sin habla, en cualquier situación hubiese dicho que sí, sin dudar pero algo, mejor dicho estos nuevos sentimientos, no dejaban que tomara una decisión; mi madre se alejó, recosté mi cabeza en el sofá... el boleto era para antes de fin de mes por lo que tenía que apresurarme en mi decisión; suspiro, no quería irme, pues he descubierto que en Yagami, hay algo más que solo odio, y peleas...
Los días pasaron, sin darme cuenta, solo faltaba una semana para darles mi respuesta, y prácticamente, me obligan a ir...
-no es justo...- golpee con fuerza el árbol de cerezo del colegio, suspire y escuche una voz tras de mi...
-pensé que solo a mi golpearías así...- dijo sarcástico, cierto pelirrojo, lo mire desafiante, quería golpear a alguien, para desquitarme esta combinación de frustración, y los latidos acelerados de mi corazón, así que respondí del mismo modo...
-si no te conociera, diría que estas celoso...- él sonrió, para mi sorpresa, coloco una mano sobre mi hombro, y me indico que me sentara...- ¿no vas a atacarme...?- pregunte con desconfianza, él se sentó en un banco cercano...
-no hoy... ¿que te sucede...?- pregunto, me senté a su lado, negué con la cabeza, no quería decirle del viaje, pues seguro que ni le importa, lo observo, cierra sus ojos y disfruta del viento, hago lo mismo-Kyo...- susurro...
-¿mh...?- digo, disfrutando del viento, que disminuía, aun me sentía frustrado, siento una presión en mi muñeca... observo a Yagami...- ¿Yagami...?- digo mirándolo con curiosidad...
-ven, faltaremos al colegio hoy...- ¿que... qué rayos estaba diciendo...? me deje llevar por él, sin decir nada, llegamos a la estación de tren, y subimos, no pude fijarme, a cuál de las direcciones, por la confusión de la velocidad, una vez allí, lo observo con seriedad, pidiendo una explicación en silencio... me observo con arrogancia, sonrió...
-Yagami... ¿que hacemos aquí...?-dije por fin, pues el nerviosismo, de nuevo apareció, me perdí en su calor, observaba sus labios, hasta que respondió...
-no me interesa tener un oponente, que se deprime, cada luna nueva...- lo mire desconcertado, el solo sonríe, no pude evitar perderme en sus ojos, ahora se con seguridad lo que siento... no reconocí, el lugar, trate de preguntarle, donde estábamos, pero no me dio tiempo, me llevo hasta un parque de atracciones, antes de verme arrastrado por el nuevamente, tuve la oportunidad de ver el gran letrero del lugar; era mi parque de atracciones de niño, siempre había querido venir a este lugar de nuevo... lo observe asombrado, el me observo por el rabillo del ojo, y sonrió...
-¿como supiste...?- pregunte, el solo me mira confundido...
-¿a qué te refieres...?- pregunto deteniendo nuestra carrera, desvío mi mirada...
-este lugar, era mi favorito de niño... había venido una sola vez con Benimaru, mi amigo...- dije esperando obtener una respuesta...
-vine con mi nana...- me sorprendí, es cierto que esperaba una respuesta, pero no esperaba que me respondiese...-pensé que si te traía a este lugar, te divertirías, y al final del día volverías a discutir...- note un sonrojo, en sus mejillas, sonreí, solté su mano, y comencé a correr, hacia los autos chocadores, el me observo sorprendido... me detengo a mitad de camino, y grito...
-Yagami... el que llega último, es un tonto...- y sigo, antes puedo ver una sonrisa en él, eso me hizo más que feliz, mi corazón latía a mil, parecía que tenía una cita con el... fuimos a casi todos los juegos, del parque, el sol comenzaba a ocultarse... detuve mi carrera, cuando note a Yagami cansado...-¿estás bien...?- el asintió...-Yagami, llévame, allá...- señalo una atracción con montañas rusas de color blanca con diseños en color celeste, pero eran lentas y terminaban en un túnel largo, tal vez era una nueva versión de la casa de los espantos, distinguí a varios grupos de chicas y chicos en grupo de dos... lo observo, esperando una respuesta...
-¿nunca fuiste con tu novia...?- lo miro, extrañado...
-nuestras citas, nunca fueron en un parque de atracciones...- respondo con tranquilidad...
-eso lo explica, todo...- dijo... encendió un cigarrillo, y comenzó a caminar...- si subimos a esa atracción, deberás pagarme un precio muy alto...- sonrío con nerviosismo, sé que exageré con mis caprichos, pero no sabía que me pediría dinero...
-tengo curiosidad, si veo que me aburro... hacemos lo que quieras...- apenas termine la frase él sonrió de manera extraña y me recorrió un escalofrío, en la espalda... ¿en qué problema me metí...? al llegar allí, se había formado una fila, no tan larga, y tras de nosotros había ya mucha gente, esperando subir a la atracción...
-pregunto de nuevo para saber si estás seguro... ¿en serio nunca subiste a esta atracción...?- lo miro, ¿por qué insiste tanto en eso...?
-¿tan malo es...?- dije, él sonrió, la próxima pareja éramos nosotros...
-no es eso, pero esto es solo para los novios Kyo...- explico tranquilamente... me sorprendí, trague en seco, y él sonrió... sinceramente no conocía esta atracción, siempre pensé que era muy trillado, las citas en los parques por eso nunca traje a Yuki... -bueno, somos los próximos... ¿quieres entrar... o no...?- dijo avanzando... mi curiosidad, era muy grande, como para hacer caso a mi voz interior, que repetía constantemente "no vayas...", tarde, mientras pensaba, había asentido, y Yagami había tomado mi mano, entregando el boleto a la persona en frente, esta nos miró desconfiada...
-¿son pareja?- pregunto, con un sonrojo extraño...
-si, lo somos...- dijo Yagami, me sorprendí...
-no les creo...- Yagami la miro con odio, y una sonrisa algo extraña, pensé que la mataría... intervine...
-si, somos...- grite y luego lo bese, al principio, no correspondió, pero luego, tomo mi rostro, se sentía muy bien, rodee su cuello con mis brazos, y me deje llevar por la locura, nos separamos, al escuchar los murmullos, mi corazón latía a mil, nos soltamos al entrar, era otro parque con diferentes atracciones, había juegos para parejas con premios, había la antes mencionada atracción, y muchas cosas más, me emocione, observe a Yagami, que prendió otro cigarrillo, el me observa... -vamos, a empezar con tu montaña rusa...- dijo divertido, lo seguí, tome su brazo sin darme cuenta, entramos y no era gran cosa, estaba oscuro, muy oscuro...
-que aburrido, pensé que era una nueva versión de la casa de los espantos...- dije desanimado...
-este lugar, es para que las parejas se pongan cariñosas, por eso el túnel es largo, y oscuro, y el recorrido lento...- dijo, solo veía la luz del cigarrillo...
-¿tú ya has venido a esta atracción...?- pregunte, su respuesta me ahogaba, quería que dijera que no, pero era imposible para alguien que sabía todo de esta atracción, no haya venido antes... mi cabeza hizo imágenes cariñosas de él y su posible acompañante, los celos me atacaban, y luego recordé que solo había venido con su nana, observe sorprendido, aunque no se bien que... -Yagami, ¿lo hiciste con tu nana?- pregunte, sin poder evitarlo, sentí un golpe en mi cabeza...
-no seas tonto... vine con una chica, pero nunca hicimos nada, ella no conocía esta atracción... subimos por curiosidad...- y luego silencio, al bajarnos se notaba melancólico, sin brillo en sus ojos, ya era de noche, nos distrajimos con las atracciones, para recuperar su brillo competimos por quien ganaba más premios, y subimos al mirador... lo observe a los ojos, había recuperado su brillo, y hasta se veía divertido...
-¿me dirás que te tenia así...?- dijo, y mi corazón latió con fuerza...
-¿si te contesto... sería mi paga...?- él se sorprendió sonrió y negó, suspire, supongo que puedo decirle...- mi familia quiere...- mi celular sonó, interrumpiendo, nuestro cómodo espacio... observo y es mi madre...- Madre...- digo, esperando que conteste...
-¿dónde estás, Kyo...?- sonaba, preocupada...
-estoy con un amigo...- observe a Yagami, el mantenía su mirada en la pequeña ventana...
-Yuki, llamo muy preocupada, dijo que no habías ido al colegio...- sonreí...
-madre, te llamare, luego, esta noche dormiré en casa de un amigo... buenas noches...- y corte, de nuevo me sentía ahogado, al salir de allí, planee, ir a casa de Benimaru, pero me preguntaría varias cosas, no era buena idea, Yagami se detiene, observo el edificio frente nuestro, era un hotel ¡!... me sonroje...- Yaga...- y antes de acabar mi frase, estábamos en una habitación con dos camas...
-no quieres regresar, a tu casa esta noche... así que...- sonrío lo había hecho por mí... me sentí muy feliz... y nervioso... el estar solos en una habitación, no era buena idea...
-gracias...- susurro, antes de entrar a bañarme...
Continuara: "Fuego vivo III: el estudiante nuevo..."
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