Capitulo 2 Hacia el Valle de Shibuya
Ban se encontraba manejando era una mañana hermosa y calurosa, Ginji sentía que ese viaje a las fuentes termales, era más que un trabajo eran unas vacaciones. De pronto antes de llegar Ban freno en seco el auto, haciendo que por poco el rubio se estampara con el parabrisas.
- Ban!
-Que pasa Ban? Después de reponerse de la impresión el rubio giro el rostro a su derecha para encontrarse cara a cara con su compañero.
Mido se quito las gafas y las dejo sobre el volante. Y miro al rubio de una forma escudriñadora como si pudiera leer sus pensamientos. Haciendo que el joven empezara a sudar.
- Quiero que me digas aquello que me has ocultado Ginji.
- Yo......Yo..... Yo
- Estas enamorado de mi? Pregunto de forma directa sin dar vueltas al asunto.
El chico trago duro, se ruborizo, sentía que su corazón se acelero amenazándolo con salir de su pecho.
-Si no me quieres responder, esto será tu responsabilidad....Y los labios de Mido se unieron a los suyos en una forma tan apasionada y ardiente que sintió como mordían su labio inferior, para obligarle abrir la boca. Estaba seguro que su labio empezaba a sangrar, Mido consiguió que abriera la boca que sin palabras su amado compañero le demandaba una vez dentro de la cavidad pudo sentir la lengua de Mido como pasaba por sus dientes y su paladar y se adentraba mas y luego el roce de la lengua de Mido sobre la suya hizo que despertaba a su propia lengua para unirse en una danza, que aceleraba aun mas su corazón y su respiración, el placer era indescriptible.
Sus ojos se cerraron y se dejaron llevar por esos ardientes besos, podía sentir como los dedos expertas de Mido se deslizaban por el cuello y de pronto sin que lo esperara su compañero había desgarrado su playera desde el cuello y después como fue resbalando la tela por los hombros, dejando la piel desnuda hasta los pectorales.
Por un momento Mido paro en seco, las caricias. El rubio lo conocía y sabia que le gustaba martirizarlo y abrió los ojos lentamente para suplicar al castaño que no se detuviera y .....
Estaba aun oscuro, sus labios húmedos por el pasar repetidas veces de su lengua y adoloridos se había mordido mas de una vez. Su corazón acelerado y su frente húmeda por el sudor.
- Rayos solo ha sido un sueño. Se dijo a si mismo mientras con los puños cerrados golpeaba el colchón.
Las lágrimas se empezaron a desbordar por sus ojos. Solo había sido un sueño.
De pronto sintió dolor en la parte baja de su abdomen. Levanto la frazada para conocer la razón y se dio cuenta como su cuerpo había reaccionado ante el erotismo de su sueño. Su miembro se encontraba firme, palpitante goteante, había mojado parte de su boxer.
El rubio tenia la inmensa necesidad de aliviar ese dolor, y como varón sabia exactamente como hacerlo. Pero no deseaba dejar ninguna evidencia. Así que se dirigió al baño. Bajo la tapa del inodoro para sentarse encima y se deslizo el boxer, liberando a su pene, lo acaricio un poco y jugueteo con el liquido que goteaba y lubricaba, luego lo sujeto fuertemente para empezar a masturbarse el mismo. El Chico volvía a sentir que estaba en la gloria, con las sensaciones que experimentaba y recreaba en su mente una vez más las imágenes del sueño.
Cuando escucho la voz de Ban, afuera del baño amenazándole con entrar. Se había olvidado de cerrar la puerta.
El rubio sintió que se moriría de vergüenza si Ban lo llegaba a encontrar en tal estado. Salto de su lugar corrió la cortina del baño, abrió la llave del agua a toda su capacidad y salto dentro de la ducha.
Cuando se dio cuenta el agua estaba helada, no le había dado tiempo a que se calentara.
El sentir lo frío del agua hizo que gritara.
- Estas bien Ginji? Pregunto el castaño quien sin pensar corrió la cortina, y se encontró al rubio titiritando de frío, pero eso no fue lo mas extraño. Si no que traía playera y boxer.
- Si, si, si Ba.a..ann No te preocupes. Externo mientras le castañeaban los dientes.
- En verdad estas bien Ginji?
- O es para lavar la ropa al mismo tiempo? El castaño corrió la cortina, sin esperar la respuesta y abandono el baño, realmente Mido estaba preocupado por su compañero de un tiempo al actual el rubio se comportaba realmente extraño.
Muchas veces se quedaba sumergido en sus propios pensamientos. Otras veces olvidaba con facilidad una orden. Y lo mas extraño ante los ojos del ojiazul es que el joven cuando le veía a los ojos, tenia una mirada ensoñadora su pupila se dilataba y eso le hacia ver entre lindo y bobo.
El castaño regreso minutos después, el rubio estaba de pie secándose el cabello, solo traía una toalla sujetada a la cintura. La ropa empapada la colgó en el tubo de la cortina.
- Anda vístete...
Le arrojo a la cama una muda de ropa interior que afortunadamente traía en el auto y una ropa negra extraña que nunca había visto.
- Y esto?
- Nuestro cliente me puso alerta sobre lo peligroso que será nuestra misión y esta ropa es mucho mas adecuada a la que acostumbramos..
El rubio sostuvo entre sus manos aquella ropa extraña la observo por algunos segundos y fue cuando se percato que Mido no traía su ropa usual.
Vestía pantalón negro ajustado de piel negra, botas parecidas a las suyas para escalar solo que negras. Y algo que parecía una chamarra de piel negra con protecciones en los codos. Y también protecciones en las rodillas el cuello de la chamarra era redondo . Y Mido la traía completamente cerrada, parecía un motociclista y ante los ojos del rubio se veía muy atractivo.
- Anda Ginji vístete que se hace tarde. Y sin más el castaño abandono la habitación.
El rubio se puso primero la ropa interior seca . Y después lucho por poner el ajustado pantalón que le tocaba usar, nada que ver con la comodidad de su ropa casual que acostumbraba, este era ajustado, tanto que hasta llego a dudar que le entrara. Igual que el que traía su compañero era de piel, pero en su caso era negro con vivos verde claro en la protección de las rodillas y en los tobillos y en los laterales de la pierna en forma de líneas.
Se observo en el espejo del baño no se veía nada mal. Después se puso las calcetas para calzar las botas de piel negra altas a la altura de los tobillos eran parecidaza a las tuyas, claro de mucho mejor marca se ato las agujetas.
Al final se acomodo la chamarra, con el mismo esfuerzo que para ponerse el pantalón. Corrió el cierre al igual que Mido hasta el cuello se sintió un poco asfixiado y metió lo dedos por debajo del cuello para tratar de aflojarlo.
Y abandono la habitación esforzándose por liberar un poco el cuello. La chamarra hacia un juego perfecto con el pantalón y tenia vivos verdes en el cuello, en el frente y en los puños.
- Ya viste lo bien que se ve Ginji Ban? Externo en forma inocente Natsumi ajena a los sentimientos del rubio hacia su compañero.
Mido dejo la taza de café en la barra y se detuvo a mirar al rubio quien bajaba la escalera, metido completamente en sus asuntos.
- Te ves bien Ginji fue el comentario de Paúl, sumado al de Natsumi.
- Gracias...Aunque es una ropa incomoda y además me da calor.
- Tu como te sientes con esta ropa Ban?
- Bah no tiene importancia Idiota. Mejor concéntrate en la misión.
- No será fácil te lo advierto.
El rubio, se sintió un estupido, algunas veces su amado compañero le hacia sentirse de esta forma. Pero fingió no darle la importancia, y continúo sonriendo y tomo el desayuno lo más relajado que pudo.
A eso de las ocho de la mañana un auto enviado por el cliente pasó por ellos al Honky Tonk y les llevo al helipuerto donde tomarían el helicóptero que les llevaría al sitio donde iniciaría la misión.
Todo el tiempo Ban se sumergió en sus propios pensamientos, solo hablo algunas pocas palabras para poner al tanto a su compañero. Se entero que se dirigían a Fukouka que se encuentra en el extremo norte de la isla de Kyushu. Cerca de Corea.
Que su misión era recuperar una urna que se localizaba en un antiguo templo oculto en un Valle que apenas aparece en el mapa.
- Pero por que es peligroso si solo se trata de un Valle olvidado? Pregunto el rubio.
- Se sabe poco del lugar solo que las pocas personas que se han aventurado a entrar no regresaron vivos.
- Se sabe que el Valle esta cubierto por una extraña neblina de color azul y que esta compuesta por gases que son venenosos tanto para la piel, como para las vías respiratorias. Por eso es tan peligroso adentrarse. Además que es probable que hayan otros peligros además de esa atmosfera venenosa Ginji.
-Entiendes por que te necesitaba que estuvieras al cien por ciento de tus habilidades. Pero que eso te puede salvar la vida.
- Comprendo Ban
- Ahora entiendes el por que de los trajes?
-Si lo comprendo amiguito.
El auto que envío el cliente el Sr. Ken Kioshihawa llego al helipuerto. El cliente les esperaba, en una sala de espera, les saludo y les invito a abordar el helicóptero.
El cliente se sentó al lado del piloto y Mido justo atrás del cliente. El rubio se ubico en uno de los asientos de atrás. Al lado de la ventana con la intención de disfrutar del paisaje.
El piloto dio unas rápidas instrucciones, el Sr. Kioshihawa las conocía de sobra, pero para los recuperadores era algo nuevo al menos para Ginji.
El helicóptero se elevo en forma vertical y dando vueltas en girando sobre su propios eje. El rubio observo admirado poniendo ambas manos sobre el cristal observando emocionado.
Mido observo al joven desde el espejo retrovisor del piloto. A pesar del amargo y frío carácter del heredero del jagan, el ver la actitud fresca e infantil del joven le daba calor a su corazón y le hacia sentir bien.
Después de un viaje aproximadamente de dos horas y media llegaron a su destino el aeropuerto Fukokua.
De allí nuevamente tomaron un auto que les llevo hasta el valle Shibuya.
-Ban el Valle se llama igual que la estación del metro! Externo en forma inocente el rubio con el acostumbrado asombro e inocencia en su rostro.
- Cállate Idiota.
Tomaron el auto y recorrieron una estrecha carretera en una montaña al principio fue ascender y acender en esa estrecha vereda que parecía que de un momento a otros el autos se le saldría una llanta del camino. Para después de llegar a la parte más alta, empezaron a descender.
El chofer les hizo la observación que lo que veía hacia abajo no era un lago, por lo azul. Era el Valle Shibuya.
- Tenias razón Ban, se ve azul, de un azul muy parecido al color de tus ojos Ban.! Externo el rubio mientras le miraba directamente a sus ojos ara comprobar su teoría.
-Esa neblina que da ese peculiar color es venenosa no lo olvides Ginji.
Cerca del Valle a un kilómetro antes el chofer descendió a sus pasajeros, con solo un celular y una pequeña y vacía mochila al hombro por equipo, después de todo, ambos eran los Get Backers y no necesitaban de ningún equipo extra.