Chocolate Liquido...
El pelirrojo estaba sentado en el piso del apartamento, jugando con sus videojuegos, como es costumbre; Mello había salido hace unos 45 minutos a comprar algo, no dijo que, solo dijo que volvería en menos de una hora. Como sea, cuando Matt está jugando con sus videojuegos pierde la noción del tiempo y su alrededor.
La puerta de abrió, dejando ver a un rubio con una bolsa mediana de mandado. Mello dejo la bolsa en una mesita y se sentó junto a Matt.
-….volví…..- Dijo para romper el silencio que era presente en esos momentos.
-…ok….- Matt le tomo poca importancia.
-….- Mello empezó a jugar con sus dedos en el piso, tamborileándolos [N/A: cuando haces ruidito con ellos], desesperado. Se puso de pie de golpe y fue donde su bolsa de mandado.
El pelirrojo vio de reojo la acción, y pudo notar que su compañero sacaba algo de la bolsa; no pudo distinguirlo del todo, ya que el rubio la escondió detrás de su espalda.
-¿Qué es eso?- Pregunto Matt, sin quitar los ojos de la pantalla del videojuego.
-Ho…nada importante…- Sonrió y se acerco a Matt -solo chocolate liquido…- Se puso en cuclillas para quedar a la altura de este y le susurro al oído. El pelirrojo sofrió un escalofrió.
-¿Para qué lo quieres? ¿Ya no te conformas con el chocolate en barra?- Dijo burlón, aun sin verlo, por estar en el videojuego.
-Simplemente se me antojo… creo que sea muy útil…- Sonrió gatunamente.
-¿Para qué? ¿Para ponerlo encima de tu chocolate en barra?- Rió un poco.
-No; para ponerlo encima de ´otra cosa´-
-¿Ha, sí? ¿Qué cosa?- Mello tapo la pantallita del PSP, y lo bajo un poco.
-Matt, mírame cuando te hablo- Dijo serio.
El pelirrojo suspiro, y dejo el PSP en el piso; se giro un poco para quedar cara a cara con el rubio.
-¿Qué?- No le tomo importancia al tono de voz de Mello.
-Quiero que utilicemos el chocolate liquido- Fue un comentario directo y serio.
-¿Cómo para que…?-
-…- Lo miro a los ojos seriamente, sin dar respuesta.
-… ¿A qué quieres jugar, Mello…?- Sonrió lujurioso -Tu pon donde quieras el chocolate, yo solo me quedare quieto…- Se recostó en el piso, estirando los brazos y cerrando los ojos.
Mello sonrió de oreja a oreja y se poso en 4 patas sobre el pelirrojo.
-¿En verdad me vas a dejar hacer lo que yo quiera…? ¿Poner el chocolate donde sea…? ¿Sin excepción alguna…?- Dijo mientras pasaba una manos desde la pierna hasta el pecho de Matt.
-Donde sea; como sea; y como quieras…- Acaricio los brazos de Mello -Sin excepciones…-
El rubio sonrió lujuriosamente; tomo la botella de chocolate liquido, y la abrió. Vertió unas gotitas por el cuello de Matt y las lamió.
-Mmmmm…. Mello… ¿el chocolate esta bueno…?- Acaricio el cabello del rubio.
-Bastante… ¿quieres probarlo…?- Vertió un poco en su dedo y lo coloco sobre su propio labio inferior.
El rubio beso bruscamente los labios de Matt, dándole a probar del dulce liquido; el pelirrojo lamía y mordía el labio de Mello, para tomar hasta la última gotita. Mientras el beso iba aumentando su intensidad, iba tocándolo por debajo de su camisa a rayas.
Mello se alejo del pelirrojo casi contra su voluntad, para poder ponerse de pie e ir nuevamente a la bolsa del mandado; Matt vio interesado todo lo que este hacia.
-¿Qué haces, Mello…?- Pregunto, mientras veía el rubio sacaba algo de la bolsa -¿Qué buscas…?-
-No solo compre chocolate liquido…- Sonrió lujurioso mientras le guiñaba un ojo y volvía a posarse sobre Matt.
-¿Qué mas compraste…?- Sonó curioso.
-Solo digamos que fui al sex-shop… y compre algunos ´juguetes´-
-Ya estamos grandes para jugar con juguetes- Sonrió pervertidamente.
-Estos son para personas de nuestra edad…- Le mostró unas cadenas.
-¿Jugaremos al esclavo…?- Su sonrisa pervertida iba creciendo.
-Ho, claro que sí; pero primero, quiero seguir con el chocolate…- Dejo las cadenas a un lado y tomo la botella de chocolate.
Mello le quito la camisa apresuradamente a Matt; luego vertió chocolate desde su ombligo, por sus pezones, hasta su cuello, en una fina línea. Lamió el chocolate lento, disfrutando del sabor de este. Con las manos iba buscando las cadenas que dejo a un lado. Cuando llego hasta sus pezones, los lamió, mientras abría las cadenas y las colocaba en las muñecas de Matt, aprisionándolas juntas cuando mordió ese bultito rosado, sacándole un gemido tanto de sorpresa como de placer, al pelirrojo.
-Mmmm… Mello… creí que no jugaríamos con las cadenas aun… ahh…- Gimió.
-Lo sé… pero… será mejor si combinamos las cosas…- Dijo mientras vertía mas chocolate sobre el pecho de Matt.
Volvió a lamer todo el chocolate, mientras bajaba las manos para desabrocharle el cinturón. Le desabrocho los pantalones y metió una mano dentro, tocando la zona levemente.
-Valla… ¿Qué tenemos aquí? ¿Otro juguete…?- Tomo el miembro de Matt sobre la tela y lo acaricio; el pelirrojo gimió -¿Sabes? Tengo curiosidad… ¿Qué pasaría si vertiera chocolate sobre ´tu juguete´-
Mello le quito lentamente los pantalones, dejando a la vista sus bóxeres y el bulto entre sus piernas. Se agacho hasta la altura de su entrepierna; saco su húmeda lengua y lamió el miembro de Matt por encima de la ropa, dejándola mojada por su saliva.
-Ahh…M-Mello…- Intentaba controlar sus gemidos -Lo haces muy… ahh… l-lento…-
-El esclavo no puede darle ordenes a su carcelero ¿sabes por qué?- No espero que contestara y dijo -Porque son castigados por su insolencia…-
De un tirón brusco despojo al pelirrojo de sus bóxers.
-C-Castígame todo lo qu-que quieras…-
El rubio sonrió y vertió chocolate lentamente por toda la extensión del miembro del pelirrojo, torturándolo.
-Eres un chico malo, Matt… por eso serás castigado- Empozó a lamer todo el chocolate que tenía el pelirrojo en su entrepierna, sacándole sonoros gemidos.
Vertió más chocolate, desde la punta, para que fuese bajando lentamente. Antes de que llegase a la base, lo lamió hacia arriba, llegando hasta la punta, la cual lamió hasta que no quedara rastro del dulce liquido.
-¡Ahh…Me-Mello…! Ahh… Mmmm… ahh…- Gemía cada vez con más fuerza.
Sin previo aviso, el rubio se metió todo el miembro de Matt a la boca, para luego sacarlo y repetir la acción unas cuantas veces más; el pelirrojo se estaba volviendo loco, tener a Mello torturándolo de esa forma, lo hacía perderse por completo del mundo entero.
Mello dejo el miembro de Matt, y volvió a subir hasta su cuello, lamiéndolo todo a su paso.
-M-Me-Mello… n-no te de-detengas…- Dijo agitadamente.
-No pienso hacerlo- Dicho eso, se sentó sobre el miembro erecto del pelirrojo, sacándole un gemido. Empezó a mover sus caderas, adelante y atrás, creando fricción. Se levanto separándose un poco de las caderas de Matt y volvió a sentarse, simulando una penetración que no llegaba a serlo.
-Ahh… ¡Mello…! Mmmm… ahh…- El pelirrojo estaba completamente extasiado y perdido en el placer.
De pronto el rubio se detuvo y se quito de encima; se quito los pantalones y los bóxers. Tomo una silla que estaba cerca y se sentó e ella, con las piernas algo abiertas, mostrando su erección.
-Súbete- Le ordeno a Matt.
El pelirrojo con mucho esfuerzo logro ponerse de pie, ya que las cadenas aprisionando sus muñecas le impedían usar las manos para ayudarse; camino lenta y dolorosamente hasta el rubio, gracias a su gran erección; como pudo se sentó en el regazo de Mello y empezó a besarlo apasionadamente.
Mello empezó a mover las caderas, intentando rozar lo que fuera para calmar el ardor en su entrepierna; después de intentos desesperados y fallidos, rozo su miembro con el de Matt, causándole placer a ambos.
-Matt…- Dijo al separa sus bocas -Quiero hacer un “69” El pelirrojo se sorprendió u poco; no le desagradaba la idea, pero le incomodaba tener que moverse estando tan duro. contigo…-
Matt asintió y como pudo se puso de pie. Camino hasta el sillón y se recostó en el; Mello hizo lo mismo que Matt, pero se coloco sobre este, de modo que sus miembros estuvieran frente a la cara del otro.
El pelirrojo empezó succionando lento, probando la punta con su lengua; el rubio cerro los ojos por el contacto, y se olvido de atender el miembro de Matt, hasta que sintió algo duro rozando sus labios reacciono, engullendo todo lo que podía.
Después de un rato así, el pelirrojo se corrió en la boca del rubio, quien succiono y trago todo; ya que Mello aun no llegaba, Matt se puso boca abajo y levanto las caderas, dejando libre su entrada. El rubio se incorporo pronto y se coloco detrás del otro, lo tomo de las caderas y lo penetro lentamente; quería meterlo todo de una vez, pero Matt era demasiado estrecho para eso.
Empezaba a moverse cada vez más rápido, mientras que con cada embestida, creí que llegaría al clímax; la temperatura del ambiente aumento mas, cuando Matt empezó a gemir cuando Mello tocaba ese punto que lo enloquecía, despertándolo de nuevo.
En una última estocada el rubio se corrió dentro de Matt, dejándose caer sobre su espalda, recargando un brazo en el respaldo del sillón, para no aplastarlo por completo.
El pelirrojo aun no llegaba e intento atenderse solo, pero las cadenas en sus muñecas y esa posición se lo impedían.
-M-Mello… a-ayúdame…- Susurro agitado.
-¿A que?-
-…-
El rubio sonrió, y en esa misma posición empezó a acariciar la entrepierna del pelirrojo. Mientras empezaba a moverse dentro de el nuevamente….
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Sus cuerpos completamente sudados, se movían en un mismo compás, lento y suave; habían gastado ya toda su fuerza, y solo querían correrse para poder terminar con esa demostración de ¿amor? O ¿lujuria? Cuando ya no pudieron controlar sus cuerpos, por el placer y el cansancio, llegaron al clímax, recostándose uno sobre el otro en el sillón.
Mello salio lentamente del interior de Matt, y siguió recostado sobre este; intentando ambos normalizar su respiración.
-Matt…- Jadeo el rubio -Aun queda chocolate…- Sonrió para si.
-Primero quítame las cadenas…-