Titulo: La Venganza
^^ Basado en una novela Bianca de Susan Napier...cuando la leí lo primero que pensé es Hana-Ru... (no recuerdo el nombre ^^) esto es nuevo para mí, así que me encomiendo a Kamisama para que resulte (soy fanática lo admito, así que Sra. o Srta. Napier no me demande...)
Capítulo N° 2: ¿Qué te parece ser el centro de mi atención?
Rukawa se sentó en el asiento de su deportivo y tomó las llaves... ¿que él había arruinado su matrimonio?... pero si el nunca se había casado, el muy idiota le culpaba de algo que jamás habría resultado... maldijo al sentir nuevamente dolor en la mano con la cual había golpeado a ese mono pelirrojo, pero sin embargo cualquier dolor valía la pena- pensó...
Además detener una ceremonia matrimonial no era lo mismo que entrometerse en un matrimonio ya hecho. Cuando Kaede había intervenido para impedir que Hanamichi Sakuragi y Haruko Akagi se casaran y cometieran un error irremediable sinceramente había creído que esa era la única salida...
Un hombre como Hanamichi Sakuragi con el temperamento de un volcán jamás podría haber tenido una vida feliz con alguien tan pasiva como Haruko Akagi, su amiga habría chocado y sido destruida irremediablemente por esa personalidad dominante. Si Haruko hubiera estado enamorada de Sakuragi, él habría apoyado ese matrimonio a pesar de sus dudas, pero sabía por los propios labios de Haruko que más que estar enamorada estaba intimidada por el hombre con el cual sus arribistas padres la estaban obligando contraer matrimonio
Haruko le había dicho que Sakuragi le había declarado su amor apenas conocerla y posteriormente le había propuesto matrimonio, sin embargo la unión financiera Sakuragi-Akagi y la cantidad de tiempo que su futuro marido le dedicaba al trabajo, desplazándola, había abierto serías dudas en la joven, pero, como ya era costumbre Haruko casi no había puesto resistencia al camino que había sido elegido por sus padres para ella, sino hasta el último momento dónde sus débiles intentos resultaron inútiles... Kaede jamás había percibido la profundidad de la desesperación de la joven sino hasta la noche anterior a la boda cuando Haruko Akagi había aparecido en la puerta de su casa, mojada, con el rostro inundado de lágrimas y pálida como un fantasma... hacía meses que ellos no hablaban, la verdad Kaede nunca hablaba con nadie, pero esa niña había sido su única amiga desde la infancia, por eso no dejó de sentir una punzada de culpa al ver a la joven tan desecha en un momento que se supone debía estar radiante de felicidad...
Aunque se había visto forzado a encargarse de la dirección de la empresa Rukawa Corp y dejar sus sueños debido al ataque al corazón sufrido por su padre, era este hombre quien realmente dominaba la empresa, siempre con sus comentarios ácidos y críticos dejaba bien claro quien mantenía el control de la situación... cuando murió, Kaede sólo tenía 23 años y se vio forzado a demostrar a los clientes y competidores que él era tan bueno o mejor que su padre... debido a esto pasaba más de doce horas dentro de la las oficinas. Se había sentido triunfante cuando sus esfuerzos comenzaron a dar frutos económicos, sin embargo debido a su carácter frío y cerrado y el trabajo, su vida social se vio reducida a nada... entonces comprendió que Haruko no era su amiga... sino su única amiga... la culpabilidad lo golpeó como un ladrillo y fue así como le prometió que buscaría una solución en... 8 horas... le sugirió escapar de esa boda, pero su amiga dejo muy claro que prefería un matrimonio forzado antes de alejarse de su madre..., luego le sugirió que ambos se hicieran pasar por novios... con el tiempo romperían el compromiso... entonces ella lo soltó... estaba enamorada de otro... su sueño era poder desembarazarse de ese matrimonio y poder concretar su amor... Kaede había perdido a su madre a los 6 años, no podía privar a nadie del lazo maternal... aunque fuera el de una víbora y maliciosa mujer como la madre de su amiga... personalmente él pensaba que ya era hora de cortar el cordón, que eso la haría madurar y crecer pero no había podido convencerla...
Kaede hecho su cabeza hacia atrás y cerró los ojos recordando ese fatal día... la hermosa iglesia antigua estaba arreglada con el más exquisito gusto, obviamente bajo la dirección del novio... (no quiso ni pensar como hubiera estado de haber sido de su futura suegra)... las familias más importantes se encontraban ahí... Kaede al entrar inconscientemente busco una salida... tenía la impresión que resultara o no su plan tendría que salir rápidamente. Miro a los padres de la novia... esa la Sra. Akagi le lanzo una mirada de disgusto... cuando eran niños Kaede siempre fue bien recibido en esa casa, pero a medida que fue creciendo y la mujer se dio cuenta que era imposible unirlos de manera amorosa paso a estar al otro lado de la baranda... dejando muy claro que sólo era un invitado en su casa... y no un amigo de la familia, Kaede era demasiado directo, intimidante e inteligente para ser sólo amigo de una dama conservadora como estaba siendo criada Haruko... si su padre no hubiera sido un rico hombre de negocios ni siquiera hubiera tolerado su amistad..., pero Junko Akagi era tan mercenaria como esnob, por lo cual Rukawa se preguntaba a quien había salido Haruko...
Al final no había habido boda, ni recepción, ni luna de miel y Kaede se sintió aliviado al ver que no le habían llegado las facturas del millonario desastre por la cabeza... la primera parte de la ceremonia Kaede había estado sudoroso y más pálido de lo habitual, se había puesto el mejor traje que tenía a modo de escudo por si en algún momento comenzaban a caerle rayos de fuego... sordo frente a las palabras del cura juntando valor para hacer lo que tenía pensado... ¿por qué demonios no se había negado a hacer algo como eso? se preguntó... y entonces recordó el rostro de Haruko al entrar a la iglesia... y pasar junto a él lanzando una tímida sonrisa... entonces supo que ella tenía toda su confianza en que él haría lo que fuera por ayudarla...
- Si alguien tiene algún motivo para oponerse a este matrimonio y que estas personas se unan para toda la vida... que hable ahora o calle para siempre...
Los segundos parecieron minutos y Kaede vio como Haruko se tenso esperando lo inevitable... se lo armó de valor para salir al pasillo y declara las palabras que serían su perdición...
- Yo conozco un impedimento para que se realice este matrimonio...
Un murmullo general recorrió la sala, vio como la madre de la novia se removía en su asiento... no quiso mirar a Haruko, ya que si lo hacía se tomaría con los ojos ambarinos del novio y eso lo habría hecho flaquear... volvió a tomar aire... su rostro más pálido de lo habitual hacía resaltar sus profundos ojos azules... y inconsciente sus labios se movieron...
- No se pueden casar porque sería una mentira ante Dios... - resonó con una increíble convicción de una manera tan sería que helaría el infierno... - ellos no se pueden comprometer así porque uno de ellos ya esta comprometido con otra persona...
Kaede abrió los ojos y apoyo su frente en el volante de su deportivo, conciente que ese incidente había sido el comienzo de una pesadilla hacía ya tres años, ese día él sabía que se llevaría poderosos enemigos al salir de la iglesia, pero jamás pensó cuan poderosa y despiadada sería la venganza de Hanamichi Sakuragi. Por suerte, aunque ahora era persona poco grata en la casa de los padres de Haruko también lo era Hanamichi Sakuragi. La humillación y la mentira habían sido tan terribles y fragrantes que los Akagi intentaron borrarlo de su memoria.
Después de la fallida boda Kaede lentamente dejó de sentir temor frente a las represalias, Sakuragi se había mudado a Inglaterra para levantar su empresa que había sido desequilibrada económicamente después de la ruptura... durante un año estuvo afuera para recuperar su fortuna, tras lo cual volvió a Tokio... Kaede se llevo una horrible sorpresa... Hanamichi Sakuragi había vuelto dispuesto a vengarse sin piedad, le había robado sus clientes, los mejores ejecutivos, compró sus hipotecas, bloqueó sus movimientos financieros y competido con cada una de sus oportunidades comerciales... incluso recorrían rumores sobre su estabilidad mental, su vida privada y supuestos vicios de las más diversas clases, drogas, alcohol, etc... el desastre apareció en las empresas Rukawa Corp. al mismo tiempo que Hanamichi Sakuragi volvía a Tokio... Kaede llegó a sospechar que recibía información desde adentro... en dos años su vida perfectamente organizada y tranquila se había hundido en el más profundo de los agujeros negros... del cual ahora no veía escapatoria...
Kaede sintió como alguien golpeaba el cristal de su deportivo... levantó la vista para encontrarse con un hombre que le hacía gestos para que bajara el vidrio...
- ¿Kaede Rukawa... 5 de Tsukigami Park Lane? ¿Antigua propiedad de Rukawa Corp?
Kaede subió una ceja en una fría expresión...
- ¿Si?
Kaede experimento el horrible presentimiento que tenía ante las catástrofes...
- Toha Toriyama... Falcon Security, me temo que tendrá que salir de este auto para entregárselo a su actual propietario... - dijo el hombre mientras le pasaba un pequeño papel por la ventanilla... mientras el intentaba leer la pequeñísima letra el hombre abrí la puerta y le invitó a salir del auto...
- Maldición... – pensó mientras bajaba del convertible... - y ahora como volveré a casa... vivo al otro lado de la ciudad... - volvió a maldecir internamente...
- ¿Qué esta sucediendo aquí? - escuchó una profunda y aterciopelada voz...
Para horror suyo vio como Hanamichi Sakuragi se acercaba por detrás del hombre. Aquel beso no había sido suficiente, todos debían pensar que ambos habían ido juntos a algún lado...
- Nada... -
- Estoy embargando su coche... - dijo el hombre...
Kaede le lanzó una mirada que helaría el infierno, frente a lo cual el hombre sólo murmuró algo y se retiro mientras le hacía señas a su compañero que se encontraba en un camino para que empezara a remolcar el auto...
- Vaya, vaya Kitsune... veo que no tienes con que irte... pero somos hombres de negocios y puedo ser compasivo con un camarada de actividades... - dijo con tono sarcástico... - yo te llevaré a casa...
- ¡Vete al infierno do'aho! - dijo mientras se daba vuelta y sacaba su abrigo de la parte trasera del coche... - este abrigo no esta bajo mis propiedades... así que no lo pueden embargar... - dijo mientras se lo colocaba... - supongo que no debo presentar papeles para demostrar esto... - dijo al recordar como había sido escoltado pro dos hombre de seguridad para asegurarse que no se llevaba nada al momento de ser desalojado de su oficina...
- ¡Vamos ahí está mi coche! - dijo el pelirrojo mientras una limosina negra se estacionaba ha algunos metros...
Kaede no contesto nada, se dio media vuelta y comenzó a caminar en dirección opuesta al hotel... lo único que deseaba en ese momento era alejarse lo más posible de Hanamichi Sakuragi y después pensar que hacer... Estaba un poco alejado del centro y había poca gente en la zona... tendría que encontrar un teléfono pronto... el aislamiento comenzó a intensificarse... decidió que sería mejor caminar cerca de las farolas, en ese momento se topó con un coche lleno de muchachas jóvenes que cruzó a toda velocidad delante de el invitándole a subir... a su falta de respuesta se alejaron entre carcajadas... pero casi inmediatamente se paro otro coche al lado esta vez el solitario conductor hizo una invitación mucho más sofisticada y persistente... Kaede ya había soportado demasiado por ese día, otro idiota más era mucho... se acerco a la ventanilla y vio a un hombre corpulento, casi tan alto como él, de edad mediana...
- Maldito idiota que no entiendes que te largues... - dijo cortante y frío
- Vamos niño lindo... - dijo mirando a Kaede de manera lasciva... - en cuanto te vi supe que eras el que buscaba... seguro debajo de esa frialdad hay algo de lo que busco...
El joven ojiazul estaba apunto de sacar al infeliz del auto y matarlo a golpes cuando volvió a escuchar esa maldita voz...
- ¡Perdone!, pero él ya esta comprometido para esta noche...
Maldita sea su perra suerte... de nuevo la última persona que quería ver y para colmos ayudándole... la limosina de Hanamichi Sakuragi se había detenido detrás del auto y este había metido su brazo por la ventana y agarrado al hombre de la solapa de su chaqueta susurrándole algunas frases al oído al hombre que palidecía a cada segundo... en cuando lo soltó el hombre partió echando chirridos con las llantas...
Hanamichi Sakuragi todavía de pie en la calzada estaba con ambas manos en las caderas, su cabello no dejaba ver sus ojos, entonces susurro entre dientes...
- Metete a la limosina Kitsune...
Kaede se dio media vuelta y comenzó a caminar nuevamente, entonces sintió como un brazo lo jalaba bruscamente y lo arrastraba hacía...
- ¡Que te subas al auto, maldito Kitsune! -explotó - O te arrastrarte por ese negro cabello tuyo...
-¡Maldito do'aho suéltame!... – reclamó Kaede ante la brutalidad del pelirrojo...
Hanamichi arrastró a Kaede, que debido a todo lo que había hecho durante el día ha esas alturas ya no tenía fuerzas para oponerse, entonces lo metió a la fuerza dentro de la limosina... Hanamichi cerró la puerta por fuera y golpeó la ventana del chofer que le puso broche de seguridad de manera que Kaede no pudo abrirla... cuando se dirigió a la otra puerta Sakuragi se subió rápidamente al la limosina...
- ¡Maldito bastardo!- susurro Kaede sin cambiar su fría postura... - te gusta prolongar la agonía ¿verdad?... podrías haber arruinado Rukawa Corp en semanas en vez de hacerlo en dos años...
- Podría... - reconoció con una sonrisa en los labios... - pero no, me había causado ni la mitad de la satisfacción que siento ahora...
Su franqueza congeló a Kaede. Se desplomó en el asiento notando que la limosina arrancaba lentamente... pensó en todas las veces en los dos últimos años en que pensaba que saldría de los problemas y segundos después retrocedía el doble de lo avanzado... ... ahora comprendía que no había tenido ninguna oportunidad, esas pequeñas épocas de esperanza habían sido parte del plan para destruir no sólo su empresa sino también cualquier rastro de voluntad, cayendo directamente en las manos de las empresas de Hanamichi Sakuragi...
- Rukawa Corp no sólo era eso... - respondió Kaede- había mucha gente involucrada, gente que ha perdido el trabajo por tu culpa...
Hanamichi se encogió de hombros...
- Recogeré los restos de tu empresa... quiero decir ex-empresa... y la convertiré en una gran corporación viable... entonces contratare a la mayor parte de los antiguos empleados...
- A los que no has contratado ya... - dijo Kaede...
- Jajajajaaja... - rió Hanamichi... - exactamente... todo esta permitido en los negocios, ¿verdad Rukawa?... y desde luego la falta de lealtad de tus empleados fue patética... sabías que no eres un jefe muy popular... un antisocial, sin capacidad de delegación, tosco, sin sentimientos... ¿qué más?- dijo levantando una ceja y lanzando una mirada a Kaede- estas más pálido de lo habitual... quizás deberías tomar algo para recobrar algo del color...
Abrió un minibar y sacó una botella con un líquido ámbar... Rukawa abría recibido el vaso de cualquier otra persona, pero no había comido nada desde el desayuno unas simples gotas de alcohol en las venas le harían perder toda la postura helada que tanto trabajo le estaba costando mantener, necesitaba estar totalmente lúcido...
Maldición... – pensó- acaso sus empleados habían actuado de esa manera o sólo lo decía a manera de atacarle. El sólo había intentado mantener la empresa dentro de una de las más estimadas el mercado... nunca pidió más de lo que el mismo hacía, había querido imponer un toque personal a la empresa, pero en ese tipo de negocios no se podía tener piedad y eso había llenado su mente con metas de supervivencia en un medio tan competitivo...
- Como quieras... - dijo el pelirrojo ante el rechazo del vaso... - a salud de la victoria... - brindó antes de beber...
Maldito pelirrojo... es que nunca se cansaba... en cada uno de los encuentros que habían tenido durante los últimos dos años Kaede no había dejado de asombrarse de la vitalidad del empresario Hanamichi Sakuragi, Kaede recordó lo incomoda que se había sentido Haruko con la inquietante volatilidad de su carácter, su constante necesidad de retar al resto, su natural agresividad... en pocas palabras un hombre peligroso, Haruko había encontrado imposible enfrentarse a su naturaleza...
Kaede había entendido sus miedos, a él le había caído mal Hanamichi Sakuragi desde un principio por motivos propios, pero nunca le había tenido miedo, incluso ahora bajo su fría fachada se sentía más furiosos que asustado, porque sabía que su propia capacidades sobrevivir le ayudaría a pasar la crisis como le había ocurrido muchas veces en su vida desde su infancia...
- Bueno, ¿cuales son tus planes ahora?... - preguntó despreocupadamente el pelirrojo...
- ...
- Lo descubriré de todas formas... por supuesto tus opciones son bastante limitadas - murmuro- cualquiera que ayuda a Kaede Rukawa puede acabar igual que él..., tu arruinaste mi boda sin aviso, sin disculpa y ni siquiera una explicación... me haría feliz una acción de arrepentimiento...
Kaede se removió en su asiento y luego dirigió su mirada hacia la ventana...
- Por supuesto tú no te arrepientes de nada. ¿Verdad?... en lo que a ti te respecta, te saliste con la tuya...
- No me arrepiento de lo que hice... - dijo Kaede dejando helado a Hanamichi... - quizás de la forma, pero no del hecho. Haruko era mi amiga y sabía que no eras adecuado para ella...
- Así que mentiste. En la iglesia. Frente a mi familia, mis amigos, de la mujer con la cual compartiría el resto de mi vida... dijiste que mis votos eran falsos, que estaba cometiendo un pecado... - dijo mientras lentamente subía el tono de la voz y un brillo aparecía en sus ambarinos ojos...
Kaede volvió a mirar por la ventana... no podía negar esa acusación y la culpabilidad es algo que cargaría el resto de su vida, porque no había pedido consejo ni perdón a nadie. Su única excusa es que Haruko era débil y Hanamichi fuerte. …l había sobrevivido y triunfado como él esperaba que pasaría...
- Contaste toda esa sarta de mentiras y luego desapareciste, tu mejor que nadie sabías lo emocional que es Haruko y que se pondría histérica... tú eras su mejor amigo desde la infancia y eso lo utilizaste para humillarla junto con sus padres... después de eso no me quiso ver nunca más... óbviame un zorro solitario como tú estaba enceguecido por la felicidad de tú "mejor" amiga... y nos arruinaste a los dos públicamente declarando frente a todos que tu y yo éramos amantes...
Las mejillas de Kaede se tiñeron casi imperceptible de color carmín al recordar ese día en la iglesia...
"" Este hombre no se puede casar con esta mujer porque no la ama... ni siquiera le ha guardado fidelidad durante el compromiso... ya que tiene un amante...
- ¿Quién?... - preguntó una voz aguda... - la vieja víbora, madre de su amiga, estaba con el rostro deformado ante la intervención del moreno... – responde... - dijo suspicaz... - ¿quién?...
- Vieja zorra... - pensó para sí Kaede palideciendo drásticamente... - como no se la había ocurrido pensar en eso... aunque era un milagro que hubiera podido pensar en algo en 8 horas... respiro y soltó lo primero que se le vino a la mente...
- Hanamichi y yo tenemos una relación hace meses... ""
- ¿Por qué no lo negaste al instante? -dijo calmadamente intentando de defender lo indefendible... - sólo te quedaste ahí...
- Me quede tan asombrado como los demás. Era una mentira tan flagrante y estúpida que pensé que nadie la creería... mucho menos Haruko. Ella sabía que yo la amaba...
- Ja... - hizo una mueca Kaede... - si apenas la conocías... y le propusiste matrimonio... era un acuerdo comercial más que un matrimonio...
- Con eso te justificas - lanzo chispas por los ojos... - ¡la amaba maldita sea!, siempre supe que ella era para mi... preciosa, delicada y dulce... y eso no pudiste soportar cierto... que ella lograra ser feliz y tu no... que ella me amara a mi y a ti no ¿cierto?...
Kaede se quedo mudo ante la explosión... ¿eso pensaba?... ¿Qué habían sido celos?... idiota... no estaba ni cerca... acaso estaba tan enamorado como decía... bueno, eso explicaría su ansia de venganza... también el porque no se había enfrentado a Haruko cuando esta se casó al poco tiempo después... pero basado en lo que ella le había contado era poco probable...
- Dime Kaede Rukawa... ¿qué te parece ser el centro absoluto de mi atención?- dijo mientras lanzaba una irónica sonrisa...
Notas de la Autora: ... se me había olvidado poner algo muy importante... Hanamichi y Rukawa no me pertenecen (evitemos demandas)... gomen... cualquier comentario, duda, tomatazo, kamehameha (cualquier cosa menos virus)... dejen reviews... si quieren contactarme por msn: kotorimoonfics@hotmail.com...
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