Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

iNuKaI nO aI por Tori Marutinesu

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Todo parece ser de color de rosa después de un suceso que ocurrió en el capítulo anterior, hasta que Fuji decide intervenir :/

 

Capítulo 3: Cuando un problema termina, es cuando un nuevo problema comienza.

 

 

Volvemos a donde nos quedamos en el capítulo 2, que era sobre un chismoso que quería correr un rumor de inmediato sobre dos chicos que estaban muuuy entretenidos en el suelo detrás de un árbol. En fin, cuando el de noveno se reunió con los otros, fue cuestionado a dónde había ido y dónde estaban los otros dos y se le ocurrió decir que fue justamente a buscarlos pero que no podía encontrarlos y pensó que se habían perdido, entonces los demás se dispusieron para buscar a los titulares faltantes. A esto se sumaba la preocupación que se había acumulado porque aún no podían encontrarlos, ni si quiera detrás del árbol. Esto último también preocupó al que los había visto allí, hasta que de repente se aparecieron por detrás asustando a los otros con un simple ‘Hola.’ De Sadaharu.

 

 

-¡Santos cielos! ¿Dónde se habían metido?-

 

-Oishi tiene razón. ¿Por qué les gusta preocuparnos de esta manera? Yo me asusté mucho y pensé que se cruzaron con animales peligrosos.- Lloriqueando con sus típicos chillidos.

 

-¡Kikumaru!-

 

-¡Lo sentimos! Es que tuve que hablar con Kaidoh de algo importante. Teníamos que ‘aclarar’ un asunto muy importante.-

 

-Inui, Kaidoh, no quiero que esto se vuelva a repetir. Y esto va para todos. No se separen del grupo sin previo aviso.-

 

-Sí, Tezuka.- Dijeron todos al unísono a la vez que reverenciaban al de noveno.

 

-Bien. Ahora sí podemos proseguir.- Se puso en marcha junto con los demás, pero Inui y Kaidoh caminaban detrás de los demás y otro de noveno se puso a caminar junto a ellos.

 

-Oigan, quiero hablar con ustedes. ¿Inui, ya terminaste de aclarar tus asuntos con Kaidoh?-

 

-Sí. ¿Qué sucede, Fuji?-

 

-Bueno, solamente quería decirles que fui testigo de su ‘asunto’ personal.- Los otros se miraron por un momento confundidos hasta que descubrieron de lo que Fuji estaba hablando.

 

-¿Dime qué fue lo que viste?-

 

-Pues. . . todo.- Con una gran sonrisa.

 

-. . . ¿Por qué no dijiste nada?-

 

-Pues supe que no era bueno ser inoportuno y quería que prosigan con su privacidad, así que luego me retiré del sitio donde los estuve observando para no cuasar molestias ni para que se detuvieran ni nada por el estilo.-

 

-¡Fushuuu! Ese argumento no me hace sentir mejor.- Ruborizado y molesto al mismo tiempo.

 

-Está bien lo que nos hayas dicho, pero supongo que aún no marcaste un punto final.-

 

-Así es, Inui.-

 

-¿Y qué es lo que piensas hacer ahora?-

 

-Pues. . . sólo mencionaré lo que he visto para que todos sepamos.-

 

-¡¿QUEEÉ?!- Por su puesto que los otros no estuvieron de acuerdo y habían levantado la voz, lo que llamó la atención a otras dos personas.

 

-Sí. Lo que oyeron.-

 

-¿Pero por qué?- Kaidoh estaba más nervioso que Inui.

 

-Porque así lo quiero. ¿Algún problema?- Seguía con esa sonrisa burlona, pero esta vez tenía los ojos abiertos.

 

-*Humph* ¿Hay algo que podamos hacer para que no lo hagas?- Sadaharu también lucía molesto y al acomodarse los lentes un brillo hacía que sus lentes resplandecieran e hicieron un sonido de destello.

 

-Pues. . . sí, hay algo que quiero que hagas, Inui.-

 

-. . .- Kaidoh se sintió preocupado desde ese momento. ¿Qué querría Fuji de su Inui?

 

-¿Qué es?-

 

-Pues. . . si no te importa, Kaidoh. . .- Le mira sonriente y con los ojos cerrados. –No te preocupes. No me meteré con tu novio. Mi objetivo es otro y para eso necesito a Inui. Es sólo que aún no quiero que lo sepas. Sucede que- Ahora mira a Inui. –él también me descubrió con una persona.

 

-. . .- Kaidoh seguía sin entender nada. –Bueno, será mejor que me valla.-

 

-Pero. . .- Mientras ve a su pareja irse e intenta tomarlo del brazo, pero es a él a quien lo toman. -¿Por qué no puede oír?-

 

-Lo hubiera dejado escuchar nuestra conversación si Yuushi los hubiera visto a ustedes junto a mí. Sólo por eso.-

 

-Pues, no veo que tenga que ver eso con esto, pero no importa. ¿Qué es lo que quieres que haga? Otra cosa, debemos caminar más rápido si queremos llegarles a los demás. Nos hemos quedado parados aquí.-

 

-Ah. . . sí, tienes razón, ¡jej! Bueno, mientras caminamos, te lo cuento. . .- Como lo dijo Fuji, mientras caminaban, hablaban.

 

 

Los otros se habían detenido cerca de otro lago, pero había menos árboles. De esta manera evitarían perderse. Cuando Kaidoh llegó, que fue a los pocos segundos, sólo se quedó parado cerca de su compañero de clases, quien, después de mirarle por un tiempo, se le acercó acompañado de uno de séptimo.

 

 

-¿Y?- Con las manos en la cintura.

 

-¿Y qué?- Le mira con su mirada seria de siempre.

 

-¡Vamos! Sabes de lo que estoy hablando. Dijiste que le darías fin a lo que te molestaba.-

 

-¡Ah, eso! Pues sí, lo hice. Creo que ya todo va a estar bien, pero aún así creo que hay que darle un poco de tiempo hasta que se acostumbre.-

 

-Ya veo. La verdad es que me alegra oír eso. Ahora, lo que no entiendo es por qué él actuaba de esa manera con migo cada vez que me veía con tigo.-

 

-Sí, pues. . . es extraño de explicar, pero eso no importa. Lo que importa es que ya no habrán problemas, o al menos hasta que todo esté bien.-

 

-¿Eh? ¿Quieres decir que aún no pudiste solucionarlo?-

 

-Ya te lo dije. Sólo hay que darle tiempo.-

 

-Si tú lo dices, por mí está bien. ¿Pero tiempo para qué? Es decir, ¿qué es lo que tengo que hacer durante ese tiempo?-

 

-No te preocupes, Momoshiro. Las cosas entre nosotros pueden seguir así como estaban. Me refiero a que él tiene que tomarse su tiempo para que cambie su forma de pensar y de actuar.-

 

-¿Su forma. . . de pensar?-

 

-Sí. Bueno, no puedo contarte mucho por el momento. Es una larga historia.-

 

-Pues, cuando Oishi notó que tú, Inui y Fuji faltaban, de inmediato se lo avisó al capitán. Yo iba a entender por qué tú e Inui faltaban, pero no por qué Fuji no estaba.-

 

-Y yo no entiendo nada de lo que están hablando.-

 

-Fushuuu. . .- Miraba a otra parte mientras que el otro de octavo se le quedó viendo.

 

-Ni si quiera se para qué dijiste que viniera si sólo estoy escuchando una conversación ajena a la que no participo.-

 

-¡Jajaj, lo lamento, Echizen! Es que sólo quería hablar con Kaidoh, pero luego la conversación se profundizó.-

 

-¡Vaya que sí se profundizó! Ya que mencionaron a Inui y a Fuji, ¿es cierto que ustedes dos formaron una pareja?-

 

-¡¿QUEEÉ?!- Los dos mayores gritaron al unísono.

 

-Pues es lo que Fuji andaba diciendo.-

 

-¿Desde cuándo? ¿Por qué no lo dijiste antes, pequeño mocoso?- Lo agarra del cuello con un brazo y con una mano empuñada le frota violentamente la cabeza al menor.

 

-¡Fushuuuuu!- Se puso de brazos cruzados y lucía molesto.

 

-¡Ahh! ¡Oye, Momoshiro, me estás haciendo daño!- El pobre luchaba por su libertad y pudo lograrlo. Ahora los tres estaban molestos. El más joven sólo quedó de brazos cruzados. –Fuji lo dijo al terminar las prácticas, cuando poco tiempo después de que ustedes estuvieran hablando de un trabajo que debían presentar un lunes y que luego Inui intervino porque quería ver sus trabajos. Después se alejaron un poco y ahí fue cuando Fuji lo dijo. Pero lo que yo dije es que Kaidoh se ve mejor con Inui.-

 

-. . . Fushuuu. . .- Se había ruborizado por completo y los otros se le quedaron viendo por un rato, pero después siguieron discutiendo. Mientras que la serpiente se había perdido en sus pensamientos, ruborizándose cada vez más.

 

-Después de ese comentario que hice, Inui pidió que guardáramos silencio porque justo se acercaban el capitán y ustedes dos. Ahora que recuerdo, Inui quería hablar con migo, pero no se de qué.-

 

-¿Eh? ¿Inui también te persigue a ti?-

 

-¿Cómo dices? ¿’También’?-

 

-Es que. . .-

 

-¿A qué te refieres con ‘también’?-

 

-Pues. . . sucede que a Inui no le gustaba la idea de que. . . mira, la verdad es que a Inui no le gustaba algo entre mí y Kaidoh, pero lo malo es que no se qué es exactamente. Lo bueno es que sólo necesita tiempo para que nos deje en paz porque la serpiente ya habló con él.-

 

-Ah, ya veo. . . Mhm. . .- Mirando al otro, que por cierto miraba hacia el lago con los ojos brillantes y ruborizado.

 

-¿Qué sucede, Ryoma?-

 

-A mí nada, pero no se lo que le sucede a Kaidoh.-

 

-¿Eh?- También lo mira. -¿Oye, Kaidoh, estás bien?- Ninguna respuesta por parte de su amigo. –Kaidoh, te estoy hablando. ¿Qué tienes?- Le toma del brazo y lo sacude levemente. -¡Responde, serpiente!- Ahora lo sacude con más fuerza y notó que el otro se había ruborizado más, entonces lo sacude violentamente sólo para hacer que se pusiera completamente rojo. Echizen le tironea de la camiseta.

 

-Ah. . . Momoshiro. . .- El otro voltea y se da cuenta de que Inui lo estaba viendo de brazos cruzados y sus lentes brillaban como si fueran dos focos de luces. Luego se pone todo blanco y siente una tira de hielo recorrerle toda la columna desde la espina. Entonces decide salirse corriendo velozmente. -¡¡MOMOSHIRO, DEBEMOS AVISAR QUE. . .!!- Lo deja sólo para ir corriendo hacia el capitán, pedirle autorización y después marcharse de inmediato hacia la misma dirección en la que Momo se había ido a todo vapor. Esto sí que sorprendió a Tezuka, pero lo olvidó luego de seguir conversando con los demás.

 

-¡Vaya! Me pregunto por qué hay tanto sol.- Se acomoda un poco los lentes y se acerca a Kaidoh. -¿Kaidoh, qué te sucede? Desde lejos me llamó la atención el ver que Momoshiro te sacudía, pero parecías no reaccionar.- No recibe respuesta, pero sí una mirada tímida. –¡Ah. . . estás. . . todo rojo!-

 

-Fushuuuuu. . .- Baja la cabeza, pero el de lentes hace que lo mire levantándole el mentón sujetándole con una mano y le da un beso largo y suave en la comisura de los labios, haciendo que cierre los ojos y tome delicadamente su mano.

 

-¡Te amo!- Rozaba sus labios como una caricia delicada desde la comisura del menor hasta cerca de su oído para susurrarle, provocando en el otro un estremecimiento y escalofríos al sentir el cálido aliento de su superior chocar contra su cuello.

 

 

No muy lejos, alguien estaba observando a la pareja. Al comprender la situación, no quiso acercarse para no molestar y sólo se dispuso a pasar tiempo con los demás de noveno grado. Mientras tanto, Momoshiro y Echizen se habían perdido a saber donde. Bueno, digo ‘perdido’ pero no porque de veras se perdieron. Es tan sólo una expresión, lo dejo en claro. Ambos estaban sentados recostándose por un gran árbol. . . como un roble.

 

 

-¿Momoshiro, por qué te saliste corriendo de esa forma? Casi creí que no te alcanzaba.-

 

-¿Y por qué tuviste que perseguirme?-

 

-Primero porque tendrías problemas y segundo porque te hubieras perdido de haber estado solo por aquí.-

 

-Pues en eso tienes razón. En ningún momento se me pasó por la mente el pedir autorización para aislarme de los demás, ¿pero cómo puedes pensar que me podría perder por esta zona? Es de aquí de donde venimos y recuerdo perfectamente el lugar a donde están los demás.-

 

-Entonces no estabas huyendo de Inui después de todo, ¿cierto?-

 

-¿Eh?-

 

-Si hubieras estado huyendo de él, entonces no tomarías este camino. Irías a uno diferente. ¿Cómo volver de donde venimos? Siendo él, hubiera adivinado que vendrías por aquí si hubieras huido. Al menos eso es lo que supongo.- Se acomoda poniendo las manos detrás de cabeza para usarlas como almohada contra el árbol mientras el otro le quedaba viendo.

 

-. . . Pues. . .- Mira a otro lado. –La verdad es que sí estaba huyendo de él.-

 

-¿Eh?- Le mira.

 

-Sí, esa es la verdad. Sucede que en lo único que estaba pensando, cuando descubrí que me estaba viendo mientras le sacudía a Kaidoh, era en alejarme de él de inmediato. No quería tener problemas con él. Ya es bastante con tan sólo hablar amistosamente con la serpiente, pero con eso de que lo sacuda, por ejemplo, de la manera en que lo hice. . . ¡sería peor!- Se toma el cabello y adopta una postura de pensativo y se pone a recordar momentos en los que Inui le acechaba cada vez que estaba con Kaidoh por más que no estuvieran haciendo nada juntos.

 

-Bueno, si es de eso de lo que hablaban tú y Kaidoh, en mi opinión tendrías que hablar con Inui y preguntarle cuál es su problema.- Mira qué tan alto es el árbol, pero no lo logra. Sólo ve una cantidad de ramas.

 

-Pues. . . ¡No! Actualmente no me atrevo a acercarme a él. No quiero correr el riesgo de tener que beber sus jugos.-

 

-Pero hasta en el día de hoy estuvieron hablando y. . . a ver. . . si mal no recuerdo, sólo te había hecho una pregunta. Creo que era sobre tú y Kaidoh. Luego Fuji mencionó algo de los jugos de Inui. No creo que eso sea tan malo.-

 

-La verdad es que ya no se qué pensar. Sólo quiero que el tiempo que se valla a tomar sólo sean unos minutos. Pero las cosas toman el tiempo necesario. Lo único que resta es que yo sea paciente.-

 

-Mhm, puede ser.- Momento de silencio. –Me pregunto qué habrá sucedido después de que te perseguí hasta aquí.-

 

-¿Eh? ¡Ah! Dejamos solo a Kaidoh con Inui. Espero que el maníaco de los jugos no se le haya ocurrido agarrárselas con la serpiente por mi culpa.-

 

-¿Y por qué ha de ser así? Tú fuiste quien lo sacudía a él y ni si quiera reaccionaba. Además Inui sólo estaba observando. ¿Qué tiene eso de malo?-

 

-Echizen, aún no lo entiendes y no puedo explicártelo como para que lo entiendas. Debes darte cuenta por tu propia cuenta. . . ¡Dije dos veces la palabra cuenta!-

 

-¡Jej! Al menos tienes sentido del humor.-

 

-¡Jaj! Pues sí.- Se miraron sonrientes. –Bueno, creo que ya es hora de volver.- Levantándose para marcharse y su joven amigo le seguía a su lado. –Creo que ya fue suficiente tiempo el que nos alejamos de los demás y no quiero que el capitán se moleste.-

 

-Es cierto. Sería tu culpa, Momoshiro.-

 

-¿Eh? ¿Cómo que mi culpa?-

 

-Si me regañan será tu culpa. Sabías que yo te seguiría.-

 

-No es cierto. No es mi culpa si me sigues o no y yo no te pido que lo hagas.-

 

 

Y así estos dos siguieron discutiendo por todo el camino. Incluso cuando llegaron donde los otros que seguían en lo suyo. Inui seguía acurrucando entre sus brazos a Kaidoh, quien se preguntaba ¿de qué habían hablado sus superiores? Fuji le había dicho que no se preocupara, pero esas palabras, de alguna manera, no podían convencerle. Eso era lo malo. Por más que se encontraba entre los brazos del otro, no podía estar del todo bien. Cuando que al fin creyó haber solucionado algo que lo incomodaba, ¿por qué tenía que aparecer otra preocupación cuando en esos momentos tendría que ser la persona más feliz del mundo? En fin, Fuji lucía como si nada hubiera pasado. Charlaba animadamente con los demás. Inui realmente se sentía la persona más feliz del mundo. Sólo que tenía que superar la relación entre Momoshiro y Kaidoh, pero no tenía ni la menor idea de cómo se sentía el último mencionado. Eso lo averiguaría después (¡Claro! Porque a él no se le escapa ningún dato).

 

Notas finales:

¡Esa sí que es una dulce amargura con la que mi hij. . . ''KAIDOH'' tiene que lidiar! >.< Pero bueno. Las cosas apuntan para bien, así que no hay que preocuparnos. . . ¿o apuntarán para otro lado? ¡Descúbranlo! ;D


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).