CAPITULO 20.- BESO.
Al colgar el teléfono por fin se sintió aliviado, era una sensación muy extraña la que le recorría el cuerpo momentos atrás. Se recordaba sumido en la indecisión de utilizar aquel dato que tenia en las manos, de hecho recostado en el sillón contenía la duda entre seguir y parar. Pero ahora ya había sucedido, y de algún extraño modo se sentía aliviado he increíblemente feliz, era como haberse complementado por extraño que pareciera.
Entre tanto Yuki oprimió el botón de la contestadora para que pudiera escuchar todos los mensajes guardados gracias a su larga ausencia, le dedico unos minutos para poder escuchar detenidamente los mensajes dándose cuenta que eran de su editora quien entre mas avanzaba el tiempo se escuchaba más desesperada pidiendo se reportara con ella e inclusive suplicándole regresara de sus “vacaciones”.
-si como no- dio la ultima fumada a su cigarrillo colocándolo en el cenicero para apagarlo- aun no he terminado de leer la primera parte ¿Cómo voy a escribir la continuación?, ¡maldita amnesia! – Se recriminaba recorriendo con sus manos la abundante cabellera -¿Quién soy en verdad?... –paso algunos minutos tratando de recordar, de aventurarse en aquel mar de confusiones hasta que se dio cuenta de un hecho importante nadie sabia que había sufrido un accidente y menos de tal magnitud.
-¿Por qué nadie lo sabe?, ¿Qué fue lo que paso realmente? – tengo que hablar con Tatsuha – tan rápido como pudo busco en su agenda el numero del pelinegro, un minuto mas tarde desistió de sus intentos dándose cuenta que no conseguiría nada pues muy seguramente su hermano estaría con su cuñado derrochando pasión y ¿a quien le gusta que lo interrumpan?, aparte que conociendo el descaro de su hermano era capas de contestar el teléfono y no tenia ganas de escuchar gemidos que no fueran producidos por el.
En otra parte de la ciudad el peli rosa se movía de un lado a otro apretando los ojos sin poder conciliar el sueño, hasta que arto de la situación decidió pensar en aquello que le atormentaba, de igual forma sabia que no podría dormir esa noche.
¿Y ahora que hacer?, ¿como comenzar a tratarle?- tomo la pose de brazos cruzados -¿Cómo un amigo cualquiera?, si como no –cambio de pose – como si eso fuera tan fácil.
Paso dos minutos tratando de digerir esa idea sabia que no tenía otro camino.
-amigos… simplemente amigos…
Porque al fin y al cabo eso habían pasado a ser desde esta noche una decisión precipitada tal vez, pero tomada forzado por las circunstancias.
-En momentos como este me gustaría tener una maquina del tiempo para volver el tiempo atrás…
-el problemas seria que tanto tiempo atrás- escucho una voz respondiendo a su pregunta, alarmado reviro a todos lados hasta que pudo dar con el culpable recargado en el marco de la puerta.
-¡Hiro, me asustaste!
-te escuche hablando solo y pensé que necesitabas ayuda – sonreía el pelirrojo dándole la pauta para que confiara en el como siempre lo había hecho, Shuichi estuvo tentado en decirle todo tal cual había sucedido pero sabia que algo era cierto su amigo ya no tenia tanta paciencia y el solo escuchar el nombre del escritor le haría enervarse así que prefirió solo voltear a un lado y contestar una mentira piadosa pero al fin y al cabo mentira.
-solo estaba soñando Hiro no es nada.
-¿seguro?
-¡Hi!
-cuando estés listo se que lo dirás sin que pregunta- y cerro despacio la puerta para dejarle descansar.
-ojala pueda algún día Hiro- contesto al aire.
Algunos días después.
Se encontraba parado frente a la imponente puerta cada vez más grande, cada vez más difícil traspasar.
Muy bien ya estoy aquí, vamos Shu tu puedes nada mas va a ser poco tiempo recuerda hay que respirar profundo en caso de tentación....- voy a tocar el timbre si… puedo hacerlo.
-¿que se supone que haces?- de la nada salió la voz del rubio sacándolo de su vital concentración.
-ahh!!! Yuki pues iba a tocar el timbre.- exaltado y ahora apenado el pobre peli rosa.
-si y llevas alrededor de 5 minutos o tal vez mas y no te diste cuenta que abrí.
-ah… vas a salir...
-no, de hecho el que te gano a tocar fue el gato.
-¿gato?
-si, mira...-esto lo hizo tomando al hermoso gato para cargarlo, mientras lo acariciaba continuo -lo trajo Paul según Tatsuha estaba en casa y como no podía estar aquí solo se lo llego un rato y bueno ya esta de nuevo aquí.
-¡TU OTRA VEZ!- lo dijo señalando al hermoso gato quien al verle le dedico un pequeño gruñido de disgusto.
-no es posible – se llevo la mano a la cien – ¿tienes problemas con mi gato?
-no es tu gato Yuki.
-¿Cómo lo sabes?
-Porque… te voy a dar sus características tiene ojos azules, una cicatriz en la pata izquierda si tiene eso no es tu gato.
-aja, ¿y eso que?.
-te cuento la historia cuando te mudaste entre las cosas trajeron tu escritorio que tenia un recubrimiento en vidrio los cargadores pensaron que estaba pegado llegaron a tu estudio y como no entraba de frente lo de ladearon el vidrio resbalo rompiéndose curiosamente este pequeño estaba muy cerca al escuchar el ruido que hizo el caer del vidrio se sobresalto y cayo en donde estaban los vidrios se lastimo, tu fuiste el único que pudo acercársele te lo llevaste al veterinario lo suturaron y bueno cuando estuvo curado lo dejaste libre y de vez en cuando venia a visitarte lamentablemente – lo ultimo lo dijo entre dientes.
-pues noticias ahora es mío...
-dile eso a la dueña del gato vive en el 1er piso.
-no creo que lo quiera mucho pasaron ya 2 meses y nunca vino a reclamar, además debe estar acostumbrada a su ausencia este gato es un vago...
-igualito a ti.
El ojimiel lo volteo a ver con mirada asesina...
-jaja ya te estas recuperando esa mirada ahora si la reconozco.
Yuki solo movió la cabeza dándole el paso a su acompañante, también le había causado gracia esa situación, de pronto le parecía muy encantadora la sonrisa que tenia ese chiquillo de hecho ahora que lo pensaba bien, tenia un cuerpo apetecible y... volvió a mover la cabeza en señal negativa para quitarse esa idea de la cabeza.
-¿pasa algo?
-nada.
Tiempo después en NG.
-Entonces ya esta todo listo para el concierto dentro de un mes.
-así es Sakano
-las localidades fueron agotadas en 4 días nunca había pasado esto con Bad Luck.- decía emocionado el productor.
-Bueno todo se lo debemos a la presentación especial de Ryuichi Sr K.-complementaba el guitarrista.
-¿soy yo o the pink boy se ve muy feliz?
-si, quien sabe que se trae entre manos, hoy por ejemplo tenia mucha energía y al dar las 6:00 pm salió corriendo bueno eso hace últimamente.
-no se pero esto me huele a novelista...
-¿como se le ocurre sr K? si Shindou-san se molesto demasiado cuando hace una semana saco el tema de Yuki Eiri.
--no problem, para salir de dudas será mejor averiguar que esta sucediendo-esto lo dijo sacando su fiel rifle de asalto que tenia limpiando mientras platicaba.
-Sr K tenga cuidado con eso puede matar a alguien.
-no se preocupe Sakano en caso de dispararse la bala no seria para usted.
Intervino en la platica Fujisaki.- ¡oh genial Sr K gran consuelo!, tal vez deba recordarle el incidente por el cual sufrió una seria reprimenda por parte de Tohma.
-ese fue solo un error de cálculos yo que iba a saber que este edificio no resistiría una pequeña bomba.
-claro y que tuviera que venir la policía y los medios alarmados todos pensando que era un ataque terrorista fue solo exageración suya.
-exacto Fujisaki.
-era sarcasmo.
Tras la puerta con la mano en la perilla escuchaba una a una las sospechas de ambos empresarios sintiéndose un ligero escalofrió recorrer toda su faz, sabia que Shuichi estaba raro en cuanto a sus actitudes pero no a tal grado.
-no lo creo, es demasiado, incluso imposible.
Pero aun una hoguera ya casi consumida puede nuevamente reanimarse, con este término decidió poner cartas en el asunto, el castaño sabia que tenia que comprobar que tanta razón tendrían Sakano y K.
-tengo que encontrarlo- se decía a si mismo tomando camino a la parte superior del edificio encontrándose con el peli rosa recargado en el borde perdido en el horizonte, trato de calmarse un poco sabia que perdería mucho mas si se exaltaba, era absurdo que estuviera viendo a esa persona, el innombrable.
Shuichi seguía estático y pensativo en todo aquello que estaba sucediendo hasta el momento todo era tan real, tan idóneo que necesitaba en ocasiones pellizcarse para darse cuenta que era una realidad palpable, un suspiro llego de improviso dejándolo salir sin siquiera tratar de ahogarlo.
-Shu-chan esta soñando ¿verdad Kuma?- el castaño decía en secreto y con tono aniñado a su pequeño muñeco rosado- vamos a despertarlo.
Parado justo a un lado de el comenzó el dialogo.
-Shu-chan.
-mmm… - contesto sin mucho afán.
-¿en que sueñas?
-en nada en particular.
-K dice que tu pensamiento se llama Yuki Eiri – le soltó en tono burlón sin saber que había dado en el punto exacto.
No recibió respuesta todo quedo en silencio.
Tratando de encontrar un rastro de mentira lo miraba con ojos escrutadores buscando verdades dándose cuenta que con aquel silencio decía todo.
-¿en verdad?
-no… pero ¿y que si fuera cierto?
-que cometerías un error garrafal.
-las personas cambian.
-no ese tipo de personas, no sabes lo que dices.
El peli rosa guardo silencio mientras continuaba el castaño tratando de convencerle.
-Shuichi se mucho mas de lo que quisiera y por ello por favor déjalo todo por la paz- cada palabra que salía de sus labios era tan seria ahora si representaba la edad que tantas veces se veía negada por sus actos infantiles.
El peli rosa le dio la espalda a aquel comentario sabia que Ryuichi y los demás le dirían esa serie de cosas sin siquiera imaginarle la magnitud de la situación, en realidad nadie la sabia a ciencia cierta, paso un rato caminado sin rumbo fijo pues era demasiado temprano, miro su muñeca marcándole las 9.00 a.m.
-¿y que se supone que haga hasta las 6 de la tarde?, - se puso a pensar un rato sabia que no seria buena idea regresar a la disquera pues todos al sospechar la situación lo acabarían a preguntas, además esperaba esa salida la tomaran como un día libre y antes de que pudieran decirle algo escribió un mensaje al manager uno que tal vez demostraba que tan inmaduro era con respecto a la responsabilidad del trabajo pero no estaba en su mejor momento y seria mejor que todos lo tomaran tan literal como lo describía el mensaje.
“me tomo el día libre y les aconsejo todos lo hagan nos vemos mañana temprano bye”
-¿y ahora que? – Masticaba un chicle para tal vez poder pasar un rato - ¡esta bien me rindo!, voy a ver a Yuki para hartarme, hartarlo y terminar con esto ya.
-mmm... que suave...
El ojimiel estaba acostado en su cama durmiendo muy plácidamente cuando... unas manos pequeñas le acariciaban el rostro, se resistía a despertar el sueño que tenia era muy bueno...Muy bueno...
-Shuichi...
El peli rosa corría y Yuki tras de el logro alcanzarlo, lo tomo en brazos y después el peli rosa tomo su cara entre sus manos y le dio un dulce beso en la boca, apenas si estaba rosando sus labios.
-Shuichi... -pero el beso se sentía muy real para ser un sueño, abrió los ojos y ahí estaba el culpable de despertarlo. Su pequeño sobrino, claro las pequeñas manos eran de el y como estaba soñando que lo besaban alzo un poco sus labios y el pequeño reacciono igual que con su mamá que siempre que le pedía un dulce beso era de ese modo...
-Oh genial estaba en lo mejor del sueño y... tenias que despertarme así, ya estoy grave mira que tener este tipo de sueños casi diario y para colmo el primer beso que me dan después de casi tres meses me lo da mi sobrino... bueno Ayaka también me beso en Kioto y... pero a todo esto ¿que haces aquí bola rubia?
Busco algo que le indicara el por que el pequeño estaba con el camino por toda la casa hasta que llego a la cocina y ahí estaba la nota:
“Yuki cuida a Kotaro, Mika lo dejo a nuestro cuidado despidió a la niñera y tenia que ir con Tohma a una reunión yo regreso en un rato si tiene hambre en la nevera esta la fruta procura cortarla en pedazos pequeños, si quiere tomar algo dale un jugo o si le da mas hambre hay galletas pero ojo dijo Mika que cuidaras no comiera muchas galletas así que dale máximo 4 ok.”
TATSUHA.
-mierda...- mascullo.
Después de un rato tocaron la puerta fue a abrirla con el pequeño en brazos pensando que era su hermano para relevarle.
-LA li o... ¿he? Kotaro-chan- se lo quito de las manos a Yuki mientras lo levantaba hacia arriba de su cabeza.
-¿lo conoces? bueno a ultimas fechas creo ya nada puede sorprenderme... pero sabes llegas en buen momento así que cuídalo un rato necesito un baño.
-¿por?
-digamos que tengo exceso de saliva gracias a el, entonces bola rosa cuida a la bola rubia y tu bola rubia cuida que no haga destrozos la bola rosa.
-¡QUE TE PASA YUKI!.
-créeme ya te he visto y no se quien va a cuidar a quien, así que solo ruego que al salir no encuentre un desastre.
El escritor no hizo mucho caso de las muecas que hacia Shuichi el caminaba directo al baño y como era su costumbre se iba desvistiendo en el camino de hecho a media sala ya no tenia la camisa que lo cubría dejándole el dorso al descubierto, era de esperarse que el vocalista se le quedara viendo, y como no a pesar del tiempo ese maldito rubio era su perdición.
Después de un rato el rubio salió del cuarto de baño únicamente con una toalla enredada en la cintura y la otra en los hombros camino a su cuarto abrió la puerta y ahí estaba Shuichi con el pequeño quien no paraba de reírse.
-ya deja de martirizarlo.
Shuichi volteo y le saco la lengua- no lo martirizo de hecho le gusta.
-ese niño esta más que rojo déjalo descansar un rato o juega con el algo mas tranquilo....
-Yuki...
-¿que?
-¿subiste de peso?
-si un poco pero... oye ¿y tu que te estas fijando en esos detalles minúsculos eh? mmm…y ¿como sabes que subí de peso?
-hay como no saberlo si ....-oh oh.. Acabo de regarla, piensa rápido Shu- a pues digo estas llevando una vida muy sedentaria haber estado en el hospital y después en casa a cualquiera lo sube de peso.
Yuki no dijo nada sobre esas palabras solo se dedico a cambiarse y en su interior guardo las palabras del peli rosa...
-por cierto, ¿y tu no piensas ir a trabajar?
-K nos dio el día libre, ¿y Kotaro porque esta contigo?
-no se mucho- busco en su pantalón de pijama la nota y se la entrego al peli rosa-solo se que desperté bueno me despertó estaba a mi lado encontré esa nota yo creo que Tatsuha era su nueva "niñera" pero el se lavo las manos y me lo dejo a mi.
-ya veo... ¿ya le diste de desayunar?
-no.
-¡COMO SE TE OCURRE YUKI! son las 11:30 de la mañana.
-tranquilo no se si lo que tengo en la nevera sirva para alimentarlo, mientras toma si te pide algo le das el jugo voy a ver que tengo disponible.
Algo molesto por la pequeña reprimenda que le habían dado el rubio comenzó a buscar entre su alacena y nevera para ver si había algo comestible para el niño, o mejor dicho para alguien, pero después recordó que había postergado ir de compras se la había pasado comiendo en restaurantes con tal de no ir, fue entonces que mejor tomo su billetera, celular y escribió una nota para cualquiera que llegara a buscar a Kotaro.
-Pues no hay nada que pueda comer, nadie de hecho así que nos vamos a desayunar a otro lado.
-déjame adivinar lo dejaste para después y solo hay cerveza.
-vamos que ya tengo hambre.
-entonces si lo postergaste.
Se encaminaron al estacionamiento donde estaba parqueado el fabuloso mercedes negro, llegaron al lugar en no mas de 15 min entraron tomaron la mesa disponible y comenzaron a ver el menú teniendo algo de problemas con lo que comería Kotaro.
-¿crees que pueda comer pasta?
-mmm... no, mejor busca algo con pollo que no este condimentado o algo blando como gelatina..
Shuichi algo arto término por dirigirse al menor.
-Kotaro-chan dile a tío Shuichi que quieres.
-si como no, como si te fuera a responder.
-¡LECHE!
-¿que? ya habla.
-pues claro, bueno es poco pero digamos que se entiende.
-no creo encontrar eso en el menú.
En eso estaban cuando llego la mesera a solicitarle la orden, así que Yuki como no tenia de otra se dirigió a la chica aclarando y dulcificando su voz.
-¿puedo tomar su orden?
-claro, únicamente que tenemos un pequeño problema no encontramos que pueda comer el pequeño.
-lo siento pero por el momento solo puedo ofrecer lo disponible en el menú.
-¿estas segura de ello?- se la quedo mirando con una pequeña sonrisa de lado y clavando su hermosa mirada dorada.
-este eh... no le aseguro nada veré que puedo hacer, ¿que le gustaría?
-Kotaro dile a la señorita que quieres.
-LECHE... GALLETAS.
-no galletas no todo el camino te la pasaste comiéndolas mejor fruta o gelatina.
- ¡GALLETAS!
-fruta.
- GA-LLE-TAS.
-sueña…
Los interrumpió el peli rosa
-Yuki no pelees con el...
Solo se escucho un ligero bufido por parte del escritor.
-calla y observa.
-Kotaro si comes lo que te traiga la señorita después te compro un helado ¿te gustaría?
-¡SI HELADO!- gritaba el pequeño.
-listo por favor traiga fruta y si puede algo sin condimentos como pollo tal vez.
La chica estaba que no se aguantaba la risa por la pequeña escena que presencio.
-veré que puedo hacer.
El desayuno transcurrió sin pormenores como era de esperarse la chica pudo traer la orden completa incluyendo claro el desayuno del pequeño de los Seguchi, salieron del lugar con una sonrisa dibujada en sus rostros, subieron al auto.
-Bueno ahora de regreso a casa.
-no
-¿como que no?
-recuerda que le prometí comprarle un helado.
-¿y que propones?
-llevarlo al parque de diversiones, vamos Yuki será divertido.
La cara que tenia el peli rosa en ese momento fue todo lo que necesitaba el novelista para tomar la decisión, encendió el auto y tomo camino para el parque de diversiones guiado claro por el peli rosa, de hecho era extraño el querer cumplir ese ligero capricho, no sabia el por que pues aun le era inexplicable, pero de algo estaba seguro, le encantaba la compañía.
-llegamos- dijo triunfante Yuki después de pasar casi media hora manejando, pago las entradas, comenzaron la caminata había tantas cosas que ver, entre juegos mecánicos, algunos puestos interesantes, de hecho el peli rosa parecía un niño mas en el parque, corría de un lugar a otro y Yuki tras de el, tomando el cuenta que Shuichi era quien llevaba a Kotaro en los hombros si los perdía entre el mar de gente sabia que Mika se pondría furiosa y siendo sinceros si daba algo de miedo su hermana.
Por 2 horas estuvieron de un lado a otro entre subiendo a Kotaro en los juego que pudiera estar por su corta edad, riendo por las cosas que Shuichi hacia entre haberse maquillado, haber salido corriendo de "la casa de los sustos" y Yuki botado de la risa por haber ganado una apuesta y la cara de Shuichi espantado abrazándole recargándose en su pecho, a el rubio sinceramente le agrado el contacto por lo que con la mano que tenia libre también lo abrazo.
-ya tranquilo no creo que salgan los monstruos de la casa para comerte.
-lo dices en broma por que tu no entraste.
-no entre por que no puedo dejar a Kotaro solo, pero ven sigamos.
En su camino hallaron un puesto donde los helados se veían deliciosos.
-ahí esta por lo que veníamos.
-¡HELADO!- gritaba Kotaro.
Tomaron asiento en una banca.
-¿no te han llamado?
-ni una vez.
-Yuki...
-¿si?
-¿has ido al medico?
-si, ayer.
-¿y?
-sigue sorprendido por mi caso, según el era para que ya hubiera recobrado mis recuerdos o la mayoría pero....
-pero aun no...
Se dedico a asistir.
-¿te preocupa?
-un poco, ya no como antes...
-¿que te recomendó?
-que trate de llevar la vida normal de antes, frecuentar los lugares, hacer lo que antes hacia, ver fotos... inclusive me recomendó llevar una especie de "diario".
-¿para que un diario?
-para anotar los avances si es que hay o si llego a recordar algo para así ejercitar la memoria, pero... aun tengo muchas preguntas.
-¿por ejemplo?
-¿porque sabes tanto de mi?
-por que... estuve contigo mucho tiempo.
-¿que tanto?
-bastante diría yo, este... creo que ya es tarde hay que irnos.
-y vamos a lo mismo... ¿por que no quieres hablar de esto?
-recuerdas que te dije que había cosas que no podía decirte, si no hasta que tu recordaras.
-si.
-esta es una de ellas.
Llegaron al departamento de Yuki aun acompañados por los últimos rayos de sol, pasaron al lugar Shuichi tras Kotaro corriendo uno persiguiendo al otro mientras Yuki encendía al fin su cigarrillo la abstinencia de nicotina lo estaba matando.
-¡al fin en casa!- saco lentamente la bocanada después reviro en dirección a la contestadora dándose cuenta que no había ningún mensaje nuevo en ese momento confirmo que le quedaba un muy buen rato mas como “cuidador de niño” y como era de esperarse no tenia ni la mas remota idea de cómo hacer dormir a su sobrino.
-¿sabes como ponerlo a dormir?
-prende el televisor y pon Sherk.
-¿eso es todo?- le dedico una mirada de incredulidad.
-a la media hora se dormirá.
-espero sea cierto, yo estoy muerto.
-me voy entonces para dejarlos descansar.- trato de zafarse.
-quédate hasta que se duerma.
Shuichi dudaba en aceptar.
-si te vas no se que pueda pasarle a este niño, además es muy temprano.
Sabia que era cierto por mucho que Yuki hubiera cambiado su poca paciencia con el infante podría ser peligrosa y no quería llevar en su conciencia algún incidente que pudiera llegarle a pasar, así que sin mas encendió el televisor ingresando en el reproductor de video la película deseada, al revirar pudo darse cuenta de la pequeña fechoría que estaba sucediendo.
-Yuki…
El rubio respondió mirándole irónicamente.
-esos dulces son de Kotaro.
-eran…
-son-
-eran, los aposto cuando entraste a la casa de los sustos, además quiero que duerma y yo soy el que necesita energía con urgencia.
Al darse cuenta que abría una ligera disputa prefirió tomar asiento en medio de los rubios, esperando empezara la película y llegar a una especie de paz temporal, pero con su sobrino corriendo por toda la sala y su ex amante ignorándolo sabia que eso tal vez no llegaría.
Una hora después…
Lentamente levanto los parpado para despertar de aquel sueño reparador, trato de moverse pero no pudo al sentir el peso de su acompañante en su pecho al enderezarse un poco para ver la posición literalmente Shuichi descansaba en su pecho y el tenia su brazo en pose protectora.
-¿Cómo llegue aquí?
Trato de cuestionarse pero solo sabia que se había quedado dormido alrededor de 15 minutos después de iniciada la película, se había perdido literalmente por el cansancio del día eso era lo único que sabia hasta que un pequeño movimiento lo saco de sus pensamientos, saco de la parte frontal de la chaqueta el móvil del peli rosa al abrir el teléfono era una llamada, hizo una mueca de lado desviando la llamada.
Nuevamente comenzó a vibrar un poco arto contesto la llamada.
INICIO CONVERSACION TELEFONICA.
-Shu…
-el no puede contestar llámale mañana.
-¿Qué?, ¿Quién eres?
-eso no importa, solo llámale mañana.
-pásamelo.
-esta cansado no creo que quiera contestar.
-¿y como estas tan seguro?
-porque duerme a mi lado.
-CLICK.
FIN DE LA CONVERSACION TELEFONICA.
-cretino- hablo entre dientes abrazando aun mas a su presa embriagándose de ese aroma tan exquisito que emanaba se sintió envolverse por la esencia cerrando lo ojos tratando de volver a conciliar el sueño.
Media hora después…
El peli rosa despertó de golpe asustado por la oscuridad sabia que tal vez seria tan tarde que no podría regresar a la casa de Hiro pero el reloj frontal le dio la respuesta estaba aun muy a tiempo eran alrededor de las 8:30 p.m. justo el tiempo para despedirse.
Ahora se daba cuenta de la situación, poco a poco quito el brazo del escritor para poder salir no pensaba despertarle pues solo ocasionaría quitarlo de su descanso así que resignado tomo sus cosas y salió del departamento espero un poco para salir del asesor y encaminarse a casa hasta que se topo con quienes menos esperaba, ahora si no sabia que hacer.
CONTINUARA…