Algunas creencias afirman que el cuerpo es solo un envase para el espíritu, y que al morir el cuerpo carnal, el espíritu que fue encerrado queda libre para pasar a la otra vida y continuar con el ciclo, hasta que sea llamado de nuevo al mundo de los vivos.
Si todo eso es cierto, entonces ¿existe la manera e reencontrarse con las personas queridas? ¿Quién es el que decide si debemos o no volver a este mundo? ¿Cómo podemos llegar a ese ansiado lugar?
Si el espíritu reencarna, entonces ¿dónde quedan el cielo y el infierno?
Sencillo, el cielo o el paraíso son los lugares donde se encuentra tu persona amada... el infierno se refiere a estar alejado de aquella persona, sin saber cómo se encuentra, sin saber que hace, sin saber quien le hace compañía, sin saber si está triste, enojado, sin saber si te extraña o no.
El rubio entonces se dio cuenta, que ahora se encontraba en un infierno, casi toda su vida estuvo en el.
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Trajeron pajas secas, junto con unas cuantas ramas, ya había una buena cantidad, pero al parecer no era suficiente.
Los guardias llevaron al condenado hacia el pilar, lo colocaron de manera que la espalda del rubio este chocando al frio mármol que aún conservaba las manchas negruzcas de las anteriores ejecuciones, carne humana que conoció la crueldad de las ardientes llamas; uno de los guardias cogió sus manos y se las colocó encima de su cabeza mientras el otro ataba las delgadas y lastimadas muñecas, lo hizo sin cuidado alguno, asegurándose de que se encuentren bien sujetas. Pasaron cadenas alrededor de su cintura y de su pecho, también alrededor de sus piernas y las ajustaron fuertemente.
El ex mago gimió débilmente cuando ajustaron las cadenas, al punto de dejarlo casi sin aire.
Luego, comenzaron a arrojar cantidades de paja seca a sus pies mientras otros guardias se aseguraban de que estén lo más cerca posible al rubio.
"pongan este tanto aquí"
Dijo uno cuando traía en sus espaldas un saco, un enorme saco, cuando lo abrieron había aun más paja y la distribuyeron alrededor del pilar.
Mientras los observaba... alzó la vista, todos los presentes observaban con ¿resignación? Si, debía de ser eso, nadie se atrevía a contradecir la sentencia de los ancianos... también, por las expresiones que hacían, era obvio que hablaban en voz baja, sabía que podría escucharlos, pero estaba tan cansado como para poder concentrarse en escuchar, que simplemente se limitó a observar.
Sus ojos comenzaron a cerrarse, tenía sueño y mucho, quizá moriría mientras dormía, lo cual no le pareció malo, pero...
"¡¡...!!"
Algo llegó a su rostro, parecía agua, pero cuando se percató de lo que hacían, era evidente que no era el líquido vital que su garganta seca deseaba... era aceite, para que el fuego encuentre con facilidad el camino a su cuerpo.
Sonrió, vaya destino, vaya vida ¿Cual vida? Fue utilizado como una marioneta, hizo cosas de las cuales se arrepentía con toda el alma, no recuerda la última vez que agradeció por estar vivo, eso nunca lo hizo ¿verdad? Ni siquiera cuando conoció a esas personas tan especiales para él, por leves momentos deseaba que eso durase para siempre, pero para él no, imposible, la felicidad es algo que está vetado, no la puede siquiera rozar.
Tal vez estuviese feliz si Kurogane le hubiese dejado morir, fueron repetidas las ocasiones que lo salvó, una muerte súbita era mucho mejor que observar como preparan la horrible forma de morir que escogieron para él.
Tal vez si Ashura nunca lo hubiese sacado de ese lugar, de la torre.
Tal vez si nunca hubiese tenido un gemelo, tal vez si nunca se hubiese robado su identidad...
Tal vez si nunca hubiese nacido...
Tal vez...
"¡Celes, escuchadme!"
La voz de Ashura resonó en el patio, todos voltearon a ver, los guardias se alejaron del pilar, el rubio agachó la cabeza.
"¡Esta ejecución es para demostrar el castigo que se merecen los traidores a la corona, el hombre que veis ahí no es otro que Yuui D. Flowrite, quien robó la identidad de su hermano Fye, este hombre tomo el lugar de mi prometido y engañó a todo Celes para luego huir pretendiendo asesinar a quienes aun lloramos!"
La masacre que ocurrió y la razón por la que encerró a Ashura, sus sueños por renacer Valeria y volver a ver a su hermano, Ashura solo intentó asesinar a toda su gente para que no sufrieran los últimos días de Celes, el mundo que está a punto de desaparecer...
Por su culpa...
Ocasionó la locura de un hombre...
Flash Back
"Tú no eres Fye ¿verdad?"
"..."
"Entonces... el chico... el niño que salvé de ese lugar y el que dejé ahí..."
"... lo siento..."
"por... qué... ¿por qué?"
"yo..."
"¡fui ahí para salvar a la persona que más quería en este mundo, y en su lugar te saqué a ti!"
"no encontré otra salida..."
"Me mentiste... ¡¡Te hiciste pasar por la persona que amo!! ¿¡¡Cómo te atreves!!?"
"¡El ya estaba muerto para cuando tú llegaste!"
"¿¡¡Por qué no me dijiste tu verdadero nombre!!?"
"¡¡No quería seguir ahí encerrado!!"
"ME MENTISTE, A MI Y A TODO CELES ¿POR QUE? ¿POR QUE TU ESTAS VIVO Y NO EL VERDADERO FYE? ¿POR QUE? ¿POR QUE? ¿POR QUE? ¿POR QUE? ¿POR QUE?"
"ASHURA"
"¡¡¡¡¡¡¡¡¿¿¿¿POR QUE????!!!!!!!!"
El dolor se convirtió en locura, fue la primera vez que vio a Ashura perder el control, él mismo tuvo que detenerlo aunque lo lastimó al hacerlo. Pasaron cerca de veinte días para que el rey despertase, al hacerlo, vio al rubio sentado a su lado, como lo llevaba haciendo por veinte días...
"... Fye"
"..."
"tuve un sueño muy extraño, soñé que tú... no eras tú en realidad... extraño ¿verdad?"
"...sí, extraño"
"porque tú eres Fye ¿cierto, Fye?"
Se tomaron de las manos, llegando a entrelazarlas... el rubio sonrió...
"sí, Ashura... mi nombre es Fye"
"...lo sabía"
Desde ese día, Yuui comenzó a morir un poco para dar espacio a Fye, el que era amado, el que merecía ser amado. Por primera vez fue un poco egoísta, por primera vez él sería amado mientras, por esa única vez él sería amado por la persona que le profesaba amor a su hermano.
Y al mismo tiempo de sentirse querido... se sintió miserable...
Solo estás recibiendo misericordia ¿cierto?
End Flash Back
Ahora comprendía, la locura de Ashura fue provocada por él, sabía que vivía en un engaño, un engaño que casi le costó su verdadera esencia, porque llegó a creer que él era el verdadero Fye, debía serlo, debía velar porque Ashura no sufra, que nadie sufra y piensen que el gemelo que era luz estaba vivo.
"¿Por qué yo?"
Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando vio algo brillante cerca de Ashura, cuando alzó la vista... vio que el rey de Celes sostenía una antorcha que crepitaba en rojo fuego.
"Tu condena pronto te llevará a tu fin, oremos porque tu alma encuentre paz y que la desgracia desaparezca de nuestra vidas"
Y Ashura arrojó la antorcha en dirección al pilar...
El fuego llegó a tocar las pajas secas...
Pronto el brillo rojizo comenzó a devorar lentamente lo que había a su paso...
Y el rubio... solo cerró los ojos y bajó la cabeza...
"Después de todo... así tenía que ser ¿verdad?... Kurogane, no creo que puedas salvarme esta vez"
Por primera vez... deseo ser salvado para vivir un poco más.