Sabía que por algo me había quedado a conversar con Jae en la puerta de la escuela, apenas dejó de contarme lo que escuchó Ji Yong salí corriendo hacía el lugar que me dijo. Eso no podía ser, corría a todo lo que podía tenía que impedir que le hicieran algo, si lo tocaban primero los mataría para luego seguirles yo, al llegar me encontré con Hechuul en frente de la puerta como si estuviese vigilando que nadie entre, inmediatamente fruncí el seño al verme se puso nervioso
-C-Changmin ¿Qué haces por aquí si ya terminaron las clases?
-vine por un libro pero la pregunta sería ¿Qué haces tu aquí?
-eh… yo pues veras esto de- no pudo continuar debido a un sonido que llamó la atención de ambos
-¡AYUDAAA!- esa era la voz de Tae, en ella se podía notar miedo y desesperación, Hechuul inmediatamente se centró en mi y cuando intente abrir la puerta me lo impidió
-déjame entrar
-no
-lo harás por las buenas o por las malas, pero de que lo haces lo haces- y de nuevo se oyó un pedido de ayuda al igual que Hechuul mi volvió a impedir que abra la puerta. Ya con la poca paciencia que tenía lo empujé cayendo así en el piso, abrí la puerta y lo que vi me dejo en un estado de shock más grande del que tuve cuando vi a mi “mami” Jae “jugando” con Yunho. En el piso de la biblioteca se encontraban un Seungri de rodillas con la camisa abierta y la espalda de Taemin sobre su torso mientras que Minho descendía por el torso de mi amado lamiendo todo a su paso. Estaban tan entretenidos que no se habían percatado de mi presencia, los ojos de Tea estaban cristalinos y cerrados sin mencionar que no dejaba de llorar. Fue un impulso que tuve el alejar primero al estúpido de Minho, jalándolo de los hombros y empujándolo de modo que cayera a distancia de donde estaba entes, Seungri abrió los ojos y se quedo sin moverse lo cual aproveché para agarrarlo y tirarlo junto a Minho. Tae seguía llorando y sin abrir los ojos, me fui donde estaban los dos malditos que aun seguían en el piso que sin más me lancé hacía ellos y comencé a golpearlos con toda mi fuerza dejándolos inconcientes, al voltearme me encontré con un Hechuul golpeando a Tae
-¡DETENTE! – le grité a la vez que corría hasta el y lo agarraba do los brazos- ¿Qué no ya no sentías rencor hacía Taemin?
-¡eso era mentira, por culpa de ese maldito no te puedes fijar en mi!
-¡no es su culpa!
-si lo es- me dijo con lágrimas en los ojos
-no lo es, la culpa es mía pero entiende nunca te quise y nunca te querré
-¿Por qué?, ¿Qué tiene él que no tenga yo?
-mucho, más de lo que te imaginas- lo solté y de inmediato cayó al piso y me dirigí a Tae, este estaba dormido y sin su camisa así que quite mi chaqueta que me acababa de dar Jae y se la puse para luego cargarlo, cuando iba a salir Hechuul me volvió a hablar o eso aparentaba ya que perecía que hablaba más con él mismo
-Eres diferente, todos los hombres no se oponen a mí y e tenido sexo con la mayoría sin importar su estado, pero tu…
-nunca cometería esa estupidez teniendo a alguien a quien amar- le dije dándole la espalda con Tae un mis brazos
-ya veo
-además, esa es una de las razones por las que nunca me gustaste… se que encontraras a alguien que te quiera solo debes cambiar
Salí de ahí con calma, me encontré con Jae en la puerta junto con Yunho esperándome y después de explicarles lo que pasó y de impedir que ambos vallan a matar a los tres causantes en especial a Jaejoong me dirigí a la casa de Tae ya que según mi madre los papas de mi amor salieron de viaje y no volverían hasta el viernes de la próxima semana. Al llegar a su casa me dirigí a su habitación ya que todavía recordaba donde se encontraba cuando me la mostró hace tiempo. Lo recosté en su cama y lo abrigué con una cobija ya que a pesar de que todavía faltase un mes más para la temporada de frío Tae estaba helado, jalé una silla que estaba junto la cama y me senté, pasaron alrededor de 30 minutos cuando empezó a abrir sus ojos.
-¿d-donde estoy?- intentó levantarse pero se lo impedí
-descansa debes de estar cansado
-¿C-Changmin?- de repente sus ojos se llenaron de lágrimas y se veía el miedo en ellos- ellos…ellos
-tranquilo- me coloqué a su lado en la cama y lo abrasé pegando su rostro en mi pecho, pero me alejo de un golpe y mi vio con terror- tranquilo- le volví a decir- no te voy a hacer lo mismo que esos tipos… te quiero- esta vez me volví a acercar y lo abrasé, esta vez se dejo y de inmediato se aferró a mí, así que yo le comencé a acariciar el cabello- tranquilo
-pero… ellos
-no te hicieron nada, llegue a tiempo
-fui in iluso, un idiota, ya decía yo que nadie me podía haber mandado esas notas- en ese momento se me ocurrió algo
- Por una mirada, un mundo; por una sonrisa, un cielo; por un beso... yo no sé
qué te diera por un beso- lentamente se apartó de mi
-eso… eso- tomé su rostro entre mis manos
-este es en el que más me inspire, no se si lo recuerda se llamaba: “NO ME PIDAS QUE TE OLVIDE”- sus ojos se abrieron y mostraban ¿felicidad?
-eres tu… todo el tiempo fuiste tu
-si – y de repente sentí como una almohada dio contra mi rostro haciéndome caer al suelo
-¡maldito! ¿Por qué no me dijiste que eras tu?- me decía con lágrimas en los ojos pero con una sonrisa ¿Qué acaso se le había pegado la bipolaridad de Jaejoong?, pero no pude seguir pensando ya que sentí sus labios sobre los míos dejándose caer sobre mi y rodeando mi cuello con sus brazos, obviamente le respondí rodeando su cintura con mis dos brazos, separándonos de a poco
-¿Qué fue eso?- pregunté incrédulo
-un beso- me respondió con simpleza
-no me refiero a eso, si no a que parecías molesto y luego me besaste
-es que… ¿recuerdas que te dije que me gustaba otra persona a parte de ti?- inmediatamente fruncí el seño y puse más fuerza en la cintura de Tae atrayéndolo más a mi
-si
-pues resulta que esa persona eres igual tu- mi estado de shock se activo
-¿eh?
-si, por que esa persona era la que me dejaba las nota y resulta que esa persona eres tu- ahora entendía, no pude evitar soltar unas carcajadas que ni yo me reconocía y ahora Tae era el que no entendía, así que me decidí a explicarle
-veras después de que me dijiste que te gustaba “otro” quería matar a ese al igual que Jae, en pocas palabras me iba a suicidar- cuando termine de hablar ahora el se comenzó a reír lo cual me lleno de calma al parece no le afectó tanto lo sucedido.
Me levanté y lo volvía recostar an la cama, le di un beso en su frene y me iba a ir cuando sentí como me tomaba del brazo así que me volteé a verlo y quedamos con los rostros cerca, sentía como mis mejillas se calentaban un poco y las de él estaban rojas, se veía tan lindo
-quédate conmigo
-¿seguro?
-si- me dijo cortando la distancia pegando nuestros labios, besándonos con amor y pasión
-esta bien- le dije separándome y comenzando a quitarme la ropa
-ven- me dijo haciéndome espacio en la cama, una vez que estábamos un la cama se me acordó algo y me senté asiendo que Tae se siente igual - ¿Qué?
-párate- lo hizo al igual que yo- no puedes dormir así – y le comencé a quitar los pantalones, sus rostro estaba muy rojo así que lo hice lo más rápido que pude
-g-gracias
-ahora si vamos a dormir- de nuevo en la cama lo bese con todo el amor que sentía por él, si se que es cursi en especial de mi parte pero era la verdad
-Min- me inunde de felicidad pues ya tenía tiempo que no escuchaba ese apodo por parte de él
-dime
-¿podemos faltar a clases mañana?
-claro, después de todo es viernes
-te amo
-yo igual te amo- de nuevo lo bese, volviendo rodear su cintura y el mi cuello