¿Por qué a el?... ¿Qué había echo el para merecer ese trato? ¿ese odio?.- eran las preguntas que acudían a su mente mientras su cuerpo era embestido con fiereza, las uñas de aquel hombre se clavan en su cuello evitándole incluso el paso del aire, la otra mano con una fuerza semejante aferraba su cintura obligándole a seguirle en aquel doloroso vaivén, las lagrimas no corrian por su rostro al parecer se habían secado al mismo tiempo que su vida, sus ojos ardían pero era incapaz de soltar una sola lagrima, las emvestidas se hicieron mas fuertes mas violentas y de pronto pararon… no entendía nada de lo ocurrido, pues Kyeran aun no conseguía llegar a su climax, cuando su cuello fue liberado dio una gran bocanada de aire, como si pudiera morir si no lo hacia… el pelirrojo se levanto de la cama dejando ese cuerpo blanco temblando de dolor pero solo un momento sus manos aferraron sus brazos asiéndole incorporarse y colocarse boca abajo, sostenido en manos y rodillas, para envestirle de nuevo casi inmediatamente el peso de aquel cuerpo sobre el suyo, le hacia agachar el torso, hundiendo su rostro en las sabanas en una posición que el considero “humillante” … aferro sus manos una a la sabana y la otra a la cabecera de aquella cama con una fuerza enorme, los labios de kyeran lamian su cuello perdiéndose en su nuca y regresaban para desviarse a un hombro donde se prendió de la piel blanca dejando una marca roja que se voveria morada en unos momentos mas
-¿te gusta?, si, se que te gusta…- las embestidas continuaban.- eres como todos, una vez que me conocen, ya no pueden dejarme
-“por favor basta”.- eran los pensamientos de shun sentía como si cuerpo se quejaba a tales acciones, sus tejidos e abrían y sangraban a la intromisión de aquel cuerpo
Por fin aquel tormento termino, aquel liquido espeso de derramo en su interior y escurrió por su pierna, mientras Kyeran dejaba caer su cuerpo sobre el de shun quien tuvo que cargar con el a pesar del temblor de su anatomía asi se mantenían ambos unidos apoyados en sus rodillas y respirando agitadamente, el pelirrojo fue el primero en controlar su respiración, se incorporo acariciando la espalda de shun mientras salía de su cuerpo permitiéndole con esa acción recostarse de lado con la respiración aun entrecortada, Kyeran se recostó a su lado mirándolo a la cara, sonriendo de con una lascivia asquerosa
-nunca me hartare de ti, ángel, pensar que iba a matarte, que desperdicio hubiera sido.- sujeto ese rostro entre sus manos dándole un beso agresivo mordiendo sus labios, hasta hacerlos sangrar después de eso se levanto, y se coloco una bata
-¿Por qué?.- shun se atrevió a preguntar, ¿por que yo?
-eso no es lo importante ángel, lo importante es que no pienso perderte, ahora eres mio, y yo no te soltare hasta que me aburra, y créeme que no será pronto.- camino hasta la puerta de la habitación y se detuvo.- será mejo que tomes un baño, pero no tienes permitido salir de la mansión, mas vale que no me desobedezcas, Ángel, no querrás conocerme enojado
Shun lo miro casi con odio, no entendía el por que de esa advertencia si de cualquier modo siempre que salía lo dejaba encerrado en esa habitación, esa noche no fue la excepción ya tenia dos días con esa rutina
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En cuanto llego a la mansión, corrió a la habitación de su padre donde la rubia, amiga de su hermano le esperaba con el agotamiento reflejado en sus ojos, y la angustia en su corazón
-joven ikki.- la joven se levanto de su silla, mirándolo con tristeza en la cama el cuerpo de su padre perdía vida a cada momento no habían logrado parar la hemorragia, y sabían que seria casi imposible que pudiera volver a recuperar la conciencia,
-june, sal de aquí, déjame con el.- la voz de ikki era firme no demostrando nada de lo que sentía al ver a su padre en esas condiciones
La rubia dio un asentimiento de cabeza saliendo del lugar y dirigiéndose a su cuarto, saco una mochila de bajo la cama, de la que saco un traje que no se asociaría para nada con su uniforme de mucama, un pantalón y una blusa entalladas de un material mas grueso que cualquier tela usada en ropa común, se recogió el pelo en una alta coleta, de la misma maleta saco un látigo que enrollo con cuidado y aseguro en su cinturón, y una especie de pistola y una mascara que metió en una mochila mas corta, debía encontrar a su joven amigo, y debía hacerlo pronto, sabia que la corporación estaba trabajando en un suero que evitaba aquella degeneración de los glóbulos rojos que sufrían los vampiros, y causa principal de su necesidad de alimentarse de sangre, pero solo tenia éxito en casos leves… ente mas tiempo pasara, las posibilidades de que pudiera ayudar a shun eran menos, ikki estaría ocupado con su padre, dependía de ella ahora, se colgó esa mochila al hombro y salió de la mansión aun sin saber adonde dirigirse
-por favor viejo despierta…- ikki se acerco a la cama de su padre mirándole ahí, nunca imagino verle en aquellas condiciones levanto la sabana y reviso el vendaje mirando aquella herida mortal lo que le hizo cerrar los ojos pero cuando una mano se aferro a su brazo los abrió con sorpresa
-ikki…- la voz susurrante y sin fuerzas apenas llegaba a sus oídos por lo que se inclino.- shu…shun
- ¿viejo que paso?.- el moreno sonaba angustiado
-salva a shun, el se lo llevó… sálvalo- la angustia llego al cuerpo del mejor cazador de vampiros, su peor temor se hacia realidad, su situación alcanzo a su hermanito y el no estuvo ahí para ayudarle
-¿donde esta viejo? Dímelo ayúdame a encontrarlo.- ikki trataba que su padre siguiera consiente
-el se lo llevo, shun pagara por mis pecados.- el hombre tosió en grandes espasmos.- yo los condene a ambos... shun no es el único que ignoraba cosas sobre nosotros… ikki tu también ignoras lo mas importante…
-viejo no te entiendo.- la paciencia se acabo, el tiempo se terminaba y su padre no había dicho nada que le sirviera para encontrar a su hermano.- dime donde esta, ¿Dónde lo busco?
- tu lo encontraras ikki, pero no por lo que yo te diga… si no por que por sus venas corre la misma sangre, ambos tipos de sangre y esta te llamara…
La mano que sujetaba el brazo de ikki se soltó quedando colgada en la cama y el hombre dirigió la mirada al techo despidiéndose de todo. Lamentando no poder hacer mas que dejar aquel peso en ikki, sufriendo por que al mayor de sus hijos le tocaría resarcir todo lo que ocasiono
-nunca olvides quien eres ikki, por que eso definirá lo que serás.- con esa ultima frase los ojos del hombre se cerraron, un hilo de sangre corrió por su nariz e ikki supo que eso fue todo, su padre acababa de partir,
le cubrió con la sabana y salió de la habitación encargándole a la servidumbre llamara al doctor solo para que diera fe del deceso, aquellas personas lo miraron sorprendidas, por aquella frialdad con que actuaba, sin saber que otro asunto llenaba sus pensamientos, ya no había nada que pudiera hacer por su padre, asi que su hermano era su prioridad, llego hasta el despacho de su padre, sabia que en ese momento solo le quedaba una cosa por hacer, llamaría al protegido de camus, era el mejor rastreador que conocía, o al menos el mejor que buscaría a su hermano sin dar reportes a la corporación, tomo el teléfono marcando aquel numero privado
-¿Hyoga?.- pregunto en cuanto escucho la voz que le respondía.- tengo un trabajo para ti, necesito que vengas lo mas rápido que puedas
Cuando llego a japon eran casi las 4 de la tarde, deseaba salir a buscar a su angel pianista, saber si había aparecido, si algo le había ocurrido, no había podido viajar de inmediato como el tal ikki por que primero tuvo que disculparse con sus “lideres” por los asuntos que devia atender, y en cuanto logro posponer todo ello, salió rumbo a esa ciudad… y ahora devia esperar que la noche le diera cobijo, odiaba su debilidad a la luz solar
Mientras esperaba trato de comunicarse con su amigo, saber si sabia algo al respecto… inmediatamente le marco por teléfono, a esas horas devia estar en su mansión preparándose para salir a casar… espero un momento a que le contestaran
“conversación telefónica entre shaka y Kyeran”
El teléfono sonaba insistentemente, cuando el criado que lo contesto le dijo que era el señor Shahani casi se le para el corazón, bueno lo haría si lo tuviera se acerco lentamente como si contestar esa llamada fuera lo ultimo que deseara y tal vez fuera asi
-bueno…. ¿shaka?.- trato que su voz sonara segura, se supone que andaría en francia… ¿por que le llamaría?
-kyeran, que bueno que te encuentro, acabo de regresar, estoy en el aeropuerto, necesito que me digas si acaso ¿has ido a ver a mi niño?
-¿ tu niño?.- una risa malvada resonó en su mente “shaka, ya no es tu niño… es mio”
-si, a mi angel pianista, ¿acaso fuiste a visitarle?
- no lo siento, sanes que tengo mejores cosas que hacer en la noche que ir a un concierto.- “como por ejemplo cenarme al pianista”
- escuche algo acerca de que desapareció, esperaba que tu supieras algo
- ¿desapareció?.- Kyeran no tuvo que hacer esfuerzo para sonar sorprendido, por que en verdad lo estaba, ¿Cómo es que shaka se entero? Un escalofrio lo recorrió, el que estuviera de regreso le arruinaba los planes, no tendría tiempo de penzar en un plan devia mantenerlo ocupado…. ¿pero como?
- lo siento amigo, solo quería saber si sabias algo, esta noche ire a su casa para ver si puedo haberiguar algo.- el rubio sono casi desesperado… y eso hizo sonreir al pelirrojo
-no te preocupes amigo, se que todo saldrá bien.- colgó el teléfono y una mueca de preocupación se dibujo en su rostro…
Camino rápidamente hacia la habitación de shun. Deva evitar problemas, estaba seguro que shaka ira a verle esa misma noche aun que sea para pedirle ayuda en buscar al angelito, y no podía permitir que le descubrieran, aun no terminaba de hacer los arreglos que había planeado en su casa, asi que tendrá que hacer algo mas humano… abrió la puerta de golpe asustando al niño que lucia una camisa larga de seda de color negro, la cual usaba de pijama (la que por cierto pertenecía al mismo Kyeran) la pijama roja que usara cuando llego la había mandado quemar en cuanto pudo
-¿Qué? ¿Qué pasa? .- pregunto con miedo ¿acaso ese hombre volveria a lastimarlo? No había sido suficiente… temblo al verlo acercarse pues, para lo único que entraba a su habitación era para “jugar” como decía el
- shun.- le llamo lentamente con la mano, al verlo pegarse a la pared su cabello húmedo denotaba que recién termino de bañarse, pero el peliverde no se movio, eso en lugar de enfadarle le hizo sonreir, sgnificaba que le tenia miedo avanzo acercándose al peli verde que cerro los ojos y sujetándolo del cuello le amarro a la cama con las sabanas de la misma
-¿mi señor?.- shun pregunto temblando peor no recibió respuesta solo un pedazo de tela en su boca formando una mordaza que fue sujeto al atar una segunda tela, todo su cuerpo temblaba no entendía lo que iba a hacer con el
-dioses angel, si vieras lo indefenso que te ves.- el susurro llego a el, antes que Kyeran besara la tela que cubria su boca.- porta te bien y no hagas ruido, si me obedeces te traire un regalito.- la sonrisa insana y la mirada sadica solo hicieron que shun ascintiera con temor.- bien, ahora ire a atender un par de cosas, nos vemos al amanecer mi angel
Cuando el cuerpo salió de la habitacion, shun pudo escuchar como le ponía cerrojo a la puerta, ¿de verdad pensaba dejarlo atado toda la noche?
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En el aeropuerto una nueva figura hacia acto de aparición, un chico rubio de ojos azules que llevaba un rosario colgado al cuello, caminaba con tranquildad pero sus ojos se mantenían alertas, en la sala de espera un chico peliazul y moreno le hacia señas, era ikki camino rápidamente hacia el con una maleta pequeña en la mano
-ikki… crei que nunca necesitarías de mis servicios, o al menos eso decias cuando entrenábamos en la corporación
-eso fue hasta que surgió este imprevisto rubio.- ikki no dio mas explicaciones comenzando a caminar hacia la salida del aeropuerto con el rubio tras el
-¿cual es la prisa? Es de dia, no creo que podamos hacer mucho ahora- le dijo pues lo traia casi corriendo
-devo llegar al entierro de mi padre- fue la respuesta seca que recibió, y con una mirada de sorpresa el rubio decidió no decir nada mas hasta que llegaran a la mansión del moreno y fuera el quien le explicara lo sucedido
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La oscuridad por fin cayo sobre la ciudad y dos vampiros se dirijieron a la misma casa, aun que venían de distintas direcciones, encontrándose en la esquna de aquella propiedad, al resguardo de un árbol
-kyeran, gracias por venir.- el rubio se acerco a su “amigo” estrechando su mano
-no es nada amigo mio, si es importante para ti, es importante para mi, te ayudare ya lo veras pronto lo encontraremos.- mintió con tal descaro que se sorprendió a el mismo
-¿que pudo haberle pasado?.- shaka trataba de acercarse mas, pero ahora que sabia que ikki andaría por ahí, le complicaba las cosas detrás de el Kyeran sonreía como quien sabe que ha ganado