Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Una cancion para tus ojos por knaxzerim

[Reviews - 32]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

kana.- wooolas, ne que estamos de vuelta 

zerim.- son las 1:20 de la mañana =.=U

yugi.- lo que es no tener nada que hacer 

yami.- es la hora perfecta para hacer muchas cosas =w=

zxk.- enjoy 

 Agitado se retiro las mantas de la cara, era algo terrible, y lo peor es que nadie excepto él y los espiritus milenarios sabían la identidad de esa persona, lo había subestimado, era claro, pensó que nadie fuera del circulo de las encarnaciones milenarias podía usar los artículos milenarios, pero comprobó que no era así, se le erizo la piel al recordar esa noche 

“_déjame…yahhha…tu…mmgh

Se ahogaban sus gritos con la boca del muchacho sobre la propia, no era correcto y se sentía como basura al no poder defenderse ante una oleada de magia tan insignificante, a comparación de las que él era capaz de generar en su mejor estado.

_creo que hoy tu mente y cuerpo no se pusieron de acuerdo Yami, mira ya tienes una erección bajo la pijama?”

Estaba soñando recordaba exactamente aquella primera vez, había tenido que recurrir al poder del cetro milenario para someter a su prisionero, pese a ello, su control no pasó mas allá del control de su cuerpo, y luego de un rato el tricolor había recuperado la conciencia y ahora se quejaba por el trato que estaba recibiendo.

Se había preparado para muchas cosas, desde la resistencia del chico, su negativa, incluso había pensado en que hacer si el afrodisiaco no surtía el efecto que deseaba, pero a final de cuentas recurrió a un truco que consideró bajo hasta para él.”

Se removía en la cama, recordando todo lo que había logrado hacer en esos dos años que estuvo en su poder, creyó tenerlo todo controlado pero, en realidad que ese hombre era persistente. El teléfono sonó por cuarta vez, había sido el causante de que no pudiera conciliar el sueño.

_que nadie piensa contestar!!!

Grito Yugi desde su habitación claramente molesto, él en su camino al despacho privado que se encontraba acondicionado para el dio unos golpes en la puerta para tranquilizar a su cuñado.

_no te desesperes, son las tres de la mañana, es obvio que nadie este despierto, por que no vas a dormir?

_tal vez sea él, sería descortés que lo dejáramos en la línea

_yo veo quien es, y si es él yo te aviso, vete a descansar ya

Al llegar a la habitación tomó la bocina, sabía perfectamente quien era el que estaba del otro lado, así que no respondio y espero que el otro hablara.

_aun no logro localizarlo, tu hermano está hospedado en el hotel de siempre y por lo que vi, está solo, nadie de la escuela ha respondido a la oferta que se hizo en la sucursal, el otro está en europa cuidando de su hijo.

_bien, mañana giraré la orden para que te hagan el deposito, dile a Bakura que pasado mañana tiene que venir, necesito que haga algunas cosas.

_pero Ryu no puede volar, aun está muy débil

_no dije que tenía que traer a su familia? O si?  

_¡¡¿piensas dejar al niño solo?!!

_consíguele una nana, o que tu esposo se valla a cuidar de él

Contesto con el desenfado de quien resuelve crisis peores a esas, el sujeto del otro lado del teléfono solto un bufido de conformidad.

_no creería esa actitud de ti, si no te conociera desde hace tanto

_has lo que te dije y rápido, no sabes que hora es aquí

_si lo se, las tres de la mañana, pero después de todo, no creo que hallas podido dormir, al menos no después que se escapó

_cierra la maldita boca, Marik te juro que si no lo encuentras antes que mi hermano se entere de mi estado, te mato, pero primero mato a Malik frente a tus ojos

_le he buscado por todas partes, y como se supone que lo vas a evitar, cuantos meses tienes tres? Cuatro?

_eso no te importa, así que has lo que te dije o atente a las consecuencias

Colgó fúrico, y en las penumbras de aquel pasillo sujetó su cabeza con desesperación, ambas manos haciendo presión sobre su cráneo, para después caer de rodillas frente a la mesita que servía de soporte para aquel teléfono, a pesar de lo poco avanzado de su estado ya era visible aquella pequeña barriga que asomaba sobre la camiseta de algodón que le servía de pijama.

Salió corriendo al jardín, ese era su sitio favorito, jamás supo por qué, pero aunque no lo cuidara: las rosas y demás plantas parecían comprenderlo, le cubrían con sus hojas y le acariciaban suavemente, nunca se fijaban si estaba feliz o triste, siempre le trataban igual, cerró los ojos, recordando aquellas mañanas en las que su hermano y él se recostaban en aquella maleza y miraban el cielo, soñando el día que fueran adoptados, o el día en que por fin pudieran escapar  de Gozaburo Kaiba; el día que encontró a su hermano mirando solitario la nada, cuando le contó de Yugi, de lo hermoso que se veía en sus brazos, la necesidad que tenía de protegerlo y al mismo tiempo de molerlo a golpes, le había quitado su título de campeón, y nadie tenía ese derecho, él no era una persona débil, Seto nunca lo había sido, recordó las aventuras en las que su hermano se vío involucrado por culpa de su obsesión de   derrotar a “enano de cabellos parados”, los dioses egipcios, el sello de oricalcos, el torneo en Kaiba Land, aquella vez en Egipto, cuando por fin supo que el chico que lo salvó tantas veces del reino de las sombras era real, que no era simplemente Yugi Motto, si no que era otro hombre, mas apuesto y con la seguridad de un rey, un antiguo rey de Egipto. Cerró los ojos, a pesar de que era su deseo, el que hubiera escapado, le llenaba de preocupación, él ahora no tenía voluntad propia, él solo servía para lo que su dueño decidiera, y su dueño era él.

 “acercó lentamente su boca a la de ese chico, le importaba lo mismo si trataba de resistirse, había esperado ya mucho tiempo, un mes en el hospital general de Dominó, dos mas en la clínica de la familia de su amigo, ocho en aquella casa, casi un año y el pobre no se recuperaba del todo, los médicos le habían dicho que era extraño, aquellas heridas debieron sanar después de cuatro meses cuando mucho; pero después se preocuparía por como arreglar el estado de SU faraón, ahora le urgía ser suyo, tantas veces soñando con poder pertenecerle, con darle un hijo a ese dios frente suyo.

Él sabía de la posible relación entre los dos tricolores, sabía que su hermano estaba enamorado del menor de ellos, que le protegió y que incluso se acostó con él (z.-oigan es la versión de kaiba ¬¬ a mi no me vean, s.-¬¬*** ), cuando los amigos lo invitaron a la fiesta, los espió y no tardó mucho en arreglar su plan, su hermano deseaba a Yugi, y por su alma que lo tendría, su hermano merecía todo lo que en su vida le fue negado, el amor era algo que debía garantizarse al castaño de ojos azules

Retiró la playera y lamió los pezones del mayor, estaba tan nervioso, que incluso sus movimientos le parecieron torpes, pero era su sueño, darle su virginidad como el máximo regalo de amor, él se entregaría por completo al faraón a diferencia de Yugi, que le había engañado; al escuchar los ahogados gemidos de Yami supo que el afrodisiaco estaba haciendo su trabajo, restregó su cadera contra la excitada pelvis del mayor, logrando incluso que arqueara la espalda para dejar circular una holeada de placer por todo su cuerpo

_te gusta Yami, dime que si

_y…yo….n…no…esto no esthhha..b..bieeehn

_que mas da, disfruta conmigo Yami, yo te daré aquello que Yugi nunca pudo, yo seré tuyo para siempre…siempre y tu serás mío también… 

_a…que te…refieres?

_Yugi estuvo con mi hermano antes de entregarse a ti, no lo notaste?

_eso no me importó…se que él me ama…yo tamb…ngh

Había sujetado su miembro con ligera brusquedad y eso le hizo detenerse en medio de la frase, para él escuchar que amaba al chico de ojos escarlata arruinaría el momento y eso era lo que menos quería. Luego se incorporó un poco, retirando de su cuerpo la única prenda que le impedía estar en igualdad de condiciones que su amante, se posicionó nuevamente sobre él y llevando su mano (k.- la de Yami) a su boca, donde lamió todos y cada uno de los dedos, impregnándolos de saliva, para después dirigir aquella ensalivada mano a su entrada, metiendo forzadamente uno a uno los dígitos, despacio fue acostumbrándose a la intromisión de aquella mano que aun contra su voluntad, sabía proporcionarle la preparación necesaria, luego de un rato sacó aquella mano lánguida de su interior, durante todo ese tiempo había reprimido los gemidos y gritos que aquella forzada preparación había propiciado.

Enpujó al tricolor sobre el respaldo de aquella silla, con tal fuerza que ambos cayeron al piso, el tricolor ahogo un grito de dolor luego del golpe, y en recompensa, el chico soltó un poco las vendas que cubrían sus ojos, la habitación en penumbras no hacía mas que delinear la delgada silueta que  recorría ávido de deseo su pecho y sus piernas, del otro lado de la ventana una luna en creciente iluminaba con destellos azules la cama y algunos de los adornos que de día recordaba.

_basta, por favor, no hagas esto

_no pidas cosas que no puedo darte Yami, disfruta el momento si?

_aun eres muy joven..n…yo…no…

_no me juzgues por mi edad

El chico había mordido uno de los pezones de Yami y lo había estirado un poco, lo que hizó gritar al mayor, no definiendo si de placer o de dolor. Después se incorporó sobre la cadera del mayor mirándolo desde arriba.

_si he tenido que recurrir antes a esto, no veo por que no lo haré ahora.

Aquel objeto que antes le había dejado inconsciente: el cetro milenario; supuestamente Marik era su guardián, que hacía ese chico con él?, sin embargo la mayor de todas las preguntas era: cómo rayos aprendió a usarlo?

_te sorprende?...este fue un regalo del gran guardian de tu tumba, dijo que debía estar con su dueño original y se lo dio a mi hermano, pero el ignoró el poder de este artefacto, algo que no hice yo, los he visto funcionar y como hermano del dueño, puedo ejercer cierta influencia en las personas…te gustaría saber que tipo de influencia?

Esa declaración; el guardián era Marik, eso lo tenía claro, el dueño original solo era una persona, y al afirmar el desprecio de su hermano a aquella antigüedad, solo bastaba unir las piezas

_m…mo…mokuba?

_al fin escucho mi nombre de tus labios Yami

_por qué?!!

_ya te lo dije, te amo, y haré que olvides a Yugi para que el pueda amar a mi hermano sin remordimientos

_no sabes el daño que has causado? Acaso no te da remordimiento?

_ciertamente si, pero no soy del tipo de personas que se dejan llevar por esos sentimientos tan básicos.

Ya no dijo nada mas encogió los hombros y se inclino para besar nuevamente al faraón, sin embargo Yami ladeó el rostro, eso no era correcto, eso no debía estar pasando, recordaba que Mokuba era un chico agradable, preocupado por todos sus amigos, que ganaba con hacerle esto, a él a Yugi. Mokuba soltó un suspiro cansado, el faraón aun estaba bajo los efectos del afrodisiaco, si jugaba bien sus cartas lograría su objetivo con o sin el consentimiento del otro, deslizó poco a poco su cadera hacia atrás, topándose con la aun exitada hombría del antiguo rey, posicionando su entrada se dejó caer  bruscamente sobre aquel caliente trozo de carne.

_haaaaaaiiii

_No!! Mokubaaahhg

El menor no entendía lo doloroso era, hasta que sintió su entrada desgarrarse de tajo, solo pudo emitir un gemido de dolor mientras Yami, muy a pesar de lo que su conciencia le dictara había disfrutado de aquella acción.

_n…no…no te muevas

Le ordeno al menor, con la respiración cansada y sus fuerzas al limite sujetó las caderas del moreno antes que se lo ocurriera hacer algo.

_por favor…hazme tuyo…ámame como amas a Yugi

La voz del pelinegro sonaba entrecortada, tratando de ahogar las lagrimas que estaban aflorando en su garganta, él un Kaiba rogando por amor, pero Yami lo valía. Sintió como el mayor trató de incorporarse, aun dentro de él y lo abrazó de forma protectora.

_Mokuba…yo…no puedo…no puedo corresponderte…necesito a Yugi cerca de mí

La anterior mirada de suplica se tronó a una llena de ira, para que diablos necesitaba a Yugi, si todo lo que ese tipo le pudiera ofrecer se lo daría él, respirando agitadamente se separó del abrazo, y sin el consentimiento del otro comenzó a mover las caderas sobre el miembro de Yami, quien simplemente ya no podía objetar nada, si abría la boca solo gemidos saldrían de ella.

_no necesitas a nadie, yo te daré todo lo que él te pueda ofrecer.

_no…no entiendes… aaahhhh!!

_vez? apuesto que él nunca te hizo gritar así…he…haaaa..yahaaami….

En aquellas arremetidas había encontrado un punto que en verdad le hizo olvidar su enfado inicial, necesitaba sentir eso de nuevo

_bahhasta…

_silencio…es mi turno de sentirme bien así que tendras que obedecerme

Tomó con manos temblorosas el cetro del milenio e invocó su poder…en aquel estado el faraón fue presa fácil.

_dime que me quieres Yami…

El faraón con los ojos vidriosos y ya sin ningún atisvo de voluntad respondió la pregunta.

_te…quiero

_ soy el único en tu vida….aaahh no amaras a nadie que no sea yo

Aquella danza lo estaba volviendo loco, él marcaba su ritmo, pero deseaba que Yami cooperara para hacerlo sentir mejor.

_muevete, Yami hazme sentir bien

Yami le sujeto de la cintura y lo recostó en la alfombra, para seguir con las embestidas contra aquel cuerpo delicado, mas fuerte, mas rápido, todas y cada una de las peticiones del moreno eran cumplidas, sus cuerpos perlados por el sudor ahora despedían la misma esencia, deseo ansiedad, lo que fuera que los llevara a esta situación les hizo volver a sus instintos mas básicos, a convertirse en uno a contra de la voluntad del antiguo espíritu, Mokuba no soportó mas se liberó con fuerza sobre su abdomen, presionando aquel hinchado miembro que igual reclamaba liberación, sintió como la esencia de Yami llenaba totalmente sus entrañas, se sintió tan pleno y feliz, pero al mismo tiempo dolido, tuvo que controlarlo para que accediera a hacerle el amor…mentira, aquello no era hacer el amor, eso había sido sexo y nada mas. Sonrió triste para después solo buscar el calor protector de aquellos brazos pero era tarde, y Yami no se movia, acerco su rostro y se percato que estaba inconsciente.

Al encender la luz, pudo ver que de la boca del mayor un pequeño hilo de sangre se liberaba, al parecer había sido mucho esfuerzo para aquel cuerpo. Llamó con urgencia a sus sirvientes, no importándole que lo encontraran desnudo a él y al que suponían un familiar enfermo; el medico que le atendía llegó después de 10 minutos a revisar al tricolor, indicando que si en lo póstumo deseaba tener sexo con el chico, tenían que ser mas cuidadosos y esperar a que su recuperación fuera casi total”

Su primera vez, la primera y había logrado que el faraón se debilitara al grado de caer en cama por lo menos por un mes más y en esta ocasión con fiebre, dos de las costillas del faraón aun astilladas no había soportado toda aquella faena y se habían fracturado otra vez, y cuando él mayor recuperó la consciencia el menor se mantenía siempre a su lado, pidiéndole disculpas y agradeciendo que aquel incidente le permitiera estar mas tiempo cerca del tricolor. Aun sobre el pasto, sonrió frotando su vientre, casi año y medio tardó en que el cuerpo del faraón ya no requiriera de cuidados especiales, otros tres meses para que el lo convenciera de dejarle salir. Y hace poco su amado había escapado, y temiendo lo peor (z.-lease que se encuentren Yami y Yugi ¬¬) decidió matar las esperanzas del mayor apresurando el compromiso de su hermano. Debía hacerlo por el bien del niño que ahora portaba en sus entrañas. 

Por otro lado Bakura acababa de colgar el teléfono, Marik le informó de la nueva petición de su amo; suspiro pesadamente y se llevo las manos al puente de la nariz.

_si solo pudiera deshacerme de este maldito remordimiento

_Bakura?...dónde estas…

_Ryu, mi hikary, aquí estoy, que pasa?

_ese sueño, yo lo tuve otra vez

_nadie te hará daño mientras esté contigo, duerme

_pero…

_que ocurre?

_dónde esta mi  niño?

_él está durmiendo en casa, te está esperando

_Bakura, te…te doy asco?

_por que habría de darme asco la criatura mas hermosa de la tierra

_yo estoy manchado, no soy digno de ti…Bakura…te mereces a alguien mejor

_shhhh, no hay nadie mejor que tú, te esperare siempre, por favor solo recupérate.

El mayor de los albinos abrazó con fuerza a su luz, todo lo que estaba pasando había sido en parte su culpa, y aunque en la antigüedad nunca sintió remordimiento  ahora tenía a su hikari y al su hijo que aunque no llevara su sangre, llevaba la de su amado Ryu y eso a él le bastaba.

“Se que traicioné el pacto que tenía con ese mocoso, se que Marik y Malik corren peligro, que el faraón y el estúpido enano también, se que contactar a ese chico Alister no era lo mas correcto; pero ya no puedo mas, no soporto que sea por mi culpa que Ryu sufra tanto. Faraón, Marik por favor cuando arreglemos este enredo solo les pido curen a mi hikary, no me importa si en el proceso tengo que morir”

Notas finales:

kana.- jojojo si ya se esta cada vez mas enredoso 

zerim.- pero siendo francos no tanto como la otra vez 

yugi.- es mas hasta esta un poco obvio no? 

yami.- fui abusado sepsualmente!!! 

yugi.- como seme se puede violar? 

kana.- pos ya vez que si 

zerim.- cualquier duda aclaracion o amenza 

zxk.- no se olviden de rewiar 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).