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Time over love. por shudyeer

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Capítulo 16

Empezaba a acostumbrarme a mi nueva vida. Los días pasaban y yo cada vez daba más crédito al sentimiento que se instalaba en mi corazón.

Me gusta esto, me agrada esa sensación de cariño, muy diferente a lo que vivía en mi realidad. Despierto entre los brazos de mi nuevo esposo, recibo un beso de buenos días y el calor de su cuerpo me abandona lentamente. Entre sueños,  escucho cada movimiento que hace Seto en su arreglo personal, su máquina de afeitar y el sonido al cepillarse los dientes. Imagino las  gotas de agua resbalándole por el cuerpo al terminar de bañarse y la forma en la que la toalla seca cada parte de su piel, si entre abro mis ojos puedo ver su silueta mientras se viste  detrás de la puerta del baño. Adoro el olor de su colonia y la forma traviesa en la que me mira por el espejo cuando termina de arreglar su corbata y esta a punto de irse. En definitiva, estoy completamente enamorado.

Después de su partida me encierro un rato en el estudio, mi estudio, donde se supone trato de pintar. Yo no sé ni cuales son los colores básicos pero si voy a seguir con esta mentira de menos los sirvientes no deben de darse cuenta de mi cambio de conducta. Por las tardes voy al laboratorio de Tristán y aunque todos están muy ocupados me gusta ir,  cada vez me acostumbro más a ver a mi amigo y a Duke juntos, había olvidado lo cómico que es verlos juntos.

Hoy también la rutina se esta cumpliendo, sólo que me siento algo inquieto. Cuando llegue a este universo por vez primera Kaiba era todo un lobo pervertido, parecía que tenía sexo telepático con mi otro yo, siempre estaba insinuándome cosas y tratando de meterme mano pero desde hace unos días lo veo algo decaído, me pregunto si estará bien.

Ha pasado una semana y cada vez se ve más decaído ¿Me habrá descubierto? Ojala que no, he sido cuidadoso y de hecho estoy muy asombrado de mi mismo ¡al fin pude pintar un cuadro! Sentí como que llevaba mucho tiempo pensando en esa escena, aún le faltan muchos detalles pero no me la creo  todavía.

El día de hoy Seto se ha despertado más tarde de lo usual, ha hecho el ritual matutino pero no se ha puesto un traje, viste de modo casual.

—     ¿Me acompañarás?

—     Sí.

Respondí temeroso, no sabía a dónde pero no podía preguntar, hoy esta más serio que nunca.

Me aliste lo más pronto que pude y lo seguí en silencio. El día de hoy no ha habido ni un solo beso, también estoy preocupado por eso.

Se dirigió a su auto personal, a pesar de que el chofer estaba dispuesto a llevarnos. Manejó en silencio, parecía no percatarse de que todo el tiempo lo estaba mirando, me preocupaba demasiado su actitud.

—     Todo estará bien. — Dijo al fin con una débil sonrisa, estacionando el auto.

No entendí a que se refería, de igual modo le respondí con una sonrisa triste, me dolía el alma el verlo así y me dolía más no saber la razón.

Bajamos del auto, lo seguí. Seto cargaba un ramo de azucenas. Al principio no estaba seguro de dónde estábamos exactamente, lo confirmé hasta que entramos por completo al lugar. Era un enorme jardín, estaba lleno de lápidas, sin embargo, el sol se reflejaba hermosamente entre los arboles que brindaban su sombra, las capillas eran hermosas y los cristales relucientes.

Seguimos avanzando entre el crujir de hojas que anunciaron nuestra llegada, al fin nos detuvimos y comencé a comprender mejor. Visitábamos a un pariente de Seto, quizás su padre adoptivo, aunque no sé hace cuanto que murió ¿Tanto le afecta? Quisiera poder saber la historia  y así reconfortarlo.

Seto encendió un par de inciensos y los colocó en la lápida, me apresuré a leer los nombres como él dejaba las flores con sumo cuidado en la lápida.

Gozaburo Kaiba, Dane Kaiba, Mokuba Kaiba.

¿Mokuba Kaiba? ¿Había leído bien? Volví a leer los nombres, con calma, letra por letra y no había duda, allí decía Mokuba Kaiba. Miré a Seto, expectante, quería preguntarle tantas cosas y a la vez no podía no controlarme a mi mismo ¿De verdad la persona que estaba allí enterrada era  su hermano, el Mokuba que yo conocía? ¿Cómo había pasado eso? Mordí mis labios fuertemente y escondí mi rostro entre mi cabello, las lágrimas empezaban a brotar y no quería que él me viera llorar ¿Debía de ser fuerte? ¿Cómo podía ser empático con él? ¿Debería decirle algo? Ya han sido algunos años según la lápida, no sabía que hacer y entre tantas preguntas algunos recuerdos se colaron a mi mente, vi el cuerpo de Mokuba caer al piso y la sangre expandirse, voces se escuchaban difusas a mi derredor y un sentimiento de culpa se implantó en mi conciencia.

—     Un año más, hermanito. — La voz serena de Kaiba llamó mi atención. Llevaba tanto tiempo en silencio que estaba preocupándome más. — pero no tienes de que preocuparte, muy pronto te traeremos de vuelta y será como si nada nunca hubiera pasado.

Limpie mis lágrimas con mi antebrazo, rápidamente, aprovechando que Seto  seguía perdido en sus pensamientos y antes de irnos únicamente pude susurrar un “Perdóname” no sé por qué lo hice, algo me dijo que era lo menos que podía decir pero ni así se aminoró mi sentimiento de culpa.

—     No tienes por qué esconder que has llorado. — Me dijo Seto, ya en el auto.

—     Yo no… — Iba a mentir,  cuando recordé que no era el momento para esconderme detrás de un gesto agresivo hice una mueca y miré por la ventana para decir al fin entre dientes. — no digas nada.

—     No tienes de que preocuparte, con los nuevos arreglos que tendrá la máquina podremos llegar al pasado de este mundo y así traeremos de vuelta a Mokuba.

—     ¿En serio? — Respondí con una enorme sonrisa. Al fin sabía para que querían esa loca máquina y me parecía perfecto.

—     Sí, lo único que debemos discutir es que momento llegaremos, antes de todo lo que pasó, justo en el momento que pasó o idear un plan para que jamás pase.

—     Ya veo.

Suspiré más asustado que aliviado ¿Cómo iba a preguntarles “¿y qué pasó?” cuando me preguntarán que íbamos a hacer? Ni siquiera sabía de mi participación en aquel embrollo.

Los días pasaban y Seto seguía igual de deprimido. Mi necesidad de estar con él, de ayudarlo, crecían a cada segundo. A veces, cuando lo atrapaba pensando en vez de trabajar, lo abrazaba por la espalda y le daba un gran beso en la mejilla, él me tomaba de las manos, las besaba y continuaba en silencio. Me gustaría hacerlo sentir bien, regresarle todo el amor que me hace sentir aunque en estos momentos él esta bastante esquivo.

~~Ø~~

—     Y entonces casi me corrió cuanto llegó Kaiba y yo todavía defendiéndolo. — Finalizó Joey su relato mientras terminaba de cambiarse.

—     Te dije que no le ayudaras — Acotó Duke molesto desde el sillón al fondo del camerino. —  es un malcriado, no sé por qué sigues creyendo que es tu amigo.

—     Supongo que hoy lo confirme,  sin embargo quiero recuperar nuestra amistad.

—     Tú sabrás. — Dijo el pelinegro dando por finalizada la conversación, empezando una nueva oración de modo travieso. — Oye ¿crees que ya pasó suficiente tiempo? Yo creo que ya eres más tú, esta mañana las cosas fueron muy bien y sabes que a mi me gustaría que reanudáramos nuestra relación.

Los colores se le subieron a Joey al rostro, parecía que había estado esperando esa pregunta. Ahora que sabía más sobre ese mundo, se daba cuenta que estar con Duke era lo mejor, estaba protegido, era necesitado y sobre todo amado.  Aunque aún pensaba en Seto se daba cuenta de que ese Seto no era, ni sería, su esposo, no después de todo lo que le hizo.

—     Lo hablaremos con más calma ésta noche ¿Te parece?

Dijo el ojimiel algo inseguro después de un sofocante silencio. Necesitaba más tiempo para convencerse de que eso era lo correcto. Duke sonrió y se le acercó para enmarcar su rostro con sus manos y atraerlo para besarlo una y otra vez.

La jornada laboral terminó, como siempre, Duke Deblin  se adelantó a buscar su auto que seguramente estaba perdido en algún estacionamiento lejos del set de grabación, con eso de las obras y todo el desastre que había, el pelinegro no tenía más opción que dejar su vehículo en ese garaje que era el único lugar seguro de la zona, aunado a que ese día tenía mucha prisa, estaba muy emocionado por que al fin recuperaría a su chico de los ojos ambarinos.

Joey Wheeler estaba listo para partir, el único problema era que no localizaba el auto de su representante y ya estaba empezando a aburrirse de esperar en plena calle.

 

 

 

— ¿Esperándome o aun trabajando?

La piel se le erizo al rubio en cuanto reconoció esa voz.

— ¡¿Kaiba?! ¿Q-Qué haces aquí?

Seto Kaiba apareció como por arte de magia frente a él. Fumaba un cigarrillo y  hablaba con un tono misterioso que se acentuaba con esa mirada glaciar.

— Observándote — Dio una bocanada a su cigarrillo sin despegar la mirada de Joey. — ¿No saldrás huyendo? ¿O esperas a que vengan a rescatarte?

— Ni-ninguna.

El ojimiel se encontraba más deslumbrado que alarmado. Articulaba las palabras con dificultad. Estaba a punto de tomar una decisión importante y olvidarse de ese que ahora lo interrogaba.

— Deberías temerme, salir huyendo como haces siempre.

— No tengo por…

Joey sintió un miedo injustificado, recordó el incidente de la violación, una nueva escena apareció en su mente:

“Todo se veía difuso, ya no estaba atado y todo me dolía. Me encontraba en una posición extraña, estaba recostado en las piernas de alguien y esa persona limpiaba mi rostro con cuidado.

—      Así no puedo ver tu rostro. — Escuché decir a lo lejos, la gasa seguía recorriendo mi rostro, lastimando mis heridas. — Eres tan hermoso, delicado e indefenso.

Sus manos dejaron de atender mi rostro y fueron hasta mis muñecas, heridas también por las ataduras, las besó lentamente, sus labios calientes se fundían con mi sangre.  Miré a la persona que besaba mis manos con arrepentimiento, era Seto, tenía tantas ganas de matarlo a golpes pero no podía moverme  ni articular bien las palabras, mi garganta dolía demasiado y mis labios estaban muy resecos. Él me atrapó mirándolo con recelo.

—     Incluso ahora eres perfecto ¿Ya podrás pensar sólo en mí? Esa mirada es perfecta también.

Se acercó a mi y me besó, lentamente, su saliva acabó con la sequía de mis labios.

—     Te amo… te amo tanto que no sé como afrontarlo.

Susurró sobre mis labios, más para sí mismo que para mi.  Allí me sentí ofendido y más humillado, me había torturado y violado y ahora decía eso como si realmente estuviera arrepentido ¿A qué demonios estaba jugando ese imbécil?  Saqué fuerzas de no sé donde y lo alejé con un manotazo, traté de pedir ayuda y lo único que salió de mi boca fue el nombre de Duke, Seto estaba anonadado y sus ojos se llenaron de furia. Usé tanta energía para lograr apartarme de Kaiba que pronto me desvanecí y desperté entre los brazos de Duke en un lugar solitario. “

Y en ese instante, al mirar los atemorizantes ojos azules sintió que estaba en mucho peligro, enmudeció  y fue como si algo que no recordaba  del todo se apropiara de él. Su pulsó se aceleró y su cuerpo comenzó a temblar.

Seto comenzó a disfrutar de las reacciones que causaba en el rubio. Se acercó lentamente, quitó el pitillo de sus labios y tomó al chico por la cintura para susurrar en su oído.

— ¿Ya lo recuerdas?

Joey continuaba estremeciéndose entre los brazos de Seto, luchando contra las dolorosas escenas que le mostraba su mente, tratando de recuperarse a sí mismo y poder ver a la misma persona con la cual estaba casado.

— Si— Continúo el oji-azul susurrando, disfrutando de la confusión y el terror que se apoderaban del rubio. — soy yo, la persona que más odias, la persona que no quieres ver de nuevo, soy yo quién tomó tu cuerpo a la fuerza y por  primera vez. ¿Correrás a abrazarme de nuevo? ¿Me provocarás una vez más?

Los ojos ambarinos de Joey se llenaron de lágrimas que también trató de reprimir a más no poder y dirigió sus manos hasta el rostro de Seto, arrebatándole el cigarrillo, aplastándolo con tanta fuerza, sin impórtale el quemarse, arrojó lejos la colilla. Cerró los ojos y evocó la emoción de estar cerca de la persona que amaba; lentamente unió sus labios con los del castaño, besándolo lentamente una y otra vez. La presión en su cintura aumentó y el beso también aumento de intensidad, sus labios se abrían lentamente para introducir su lengua en la boca de Seto. Sabía a cigarrillo, pero de todas formas seguía teniendo ese sabor que solo él reconocía.

 

~~~XxX~~~

La actitud de Seto no cambiaba, siempre taciturno y  melancólico. Las cosas parecieron mejorar cuando Tristán le informó que todo estaba listo y que ya no habría fallos, pero que debían darse prisa antes de que se volviera a abrir otro portal que causara estragos.

  Esa misma noche su esposo mencionó el tema y le preguntó su parecer acerca del plan de acción para rescatar a Mokuba. Joey estaba perplejo, no tenía ni idea de que contestar, estaba a punto de ser descubierto y no quería terminar con toda su felicidad, tenía pánico de la actitud que pudiera tomar Seto contra él y peor que lo regresaran a su universo sin haberle confesado que lo amaba, sin haber tenido la oportunidad de disfrutar a la persona que amo hace siete años y que lo desilusionó y ahora se mostraba en una versión perfecta de él, no iba a permitir eso y contario a todo,  tampoco iba a permitir que el plan de regresar a su cuñado se echara a perder por su culpa.

—     Creo — Respondió al fin la pregunta hecha por Seto. — que deberíamos de llegar un poco antes del incidente y evitar que suceda.

—     Suena peligroso — Dijo el oji-azul no muy convencido. Se recostó en la cama con las manos en la nuca y miró el techo, buscando otra solución. —   a decir verdad esperaba que pudiéramos evitar que todo eso pasará.

—     Pero también es peligroso, crearíamos más mundos alternos. — Refutó el rubio, acercándose lentamente a su esposo.

—     Tienes razón pero…

—     Te prometo que todo saldrá bien, evitaremos que nos quiten a Mokuba.

Joey profirió esas palabras completamente inconsciente, su único objetivo era tener a Seto esa noche, ya mañana le confesaría la verdad y esperaba que aun así pudieran salvar a Mokuba juntos.  Se miraron por un largo rato y el ojimiel se colocó encima de su esposo, robándose sus labios en un par de candentes besos de duración considerable. Mientras maniobraba con su lengua dentro de la boca de su esposo, Joey comenzaba a tomar la iniciativa, quitándole a su amante la ropa.

Las manos de Seto se posaron en las caderas del travieso cachorro, haciendo una presión que en seguida excitó al chico, abandonando los labios de Kaiba no sin antes darles una sugestiva mordida en la parte inferior.

—     ¡Lo tengo! — Pensó el rubio, regocijándose por su victoria.

—     ¿Tú de verdad me tomas por idiota? — Espetó el oji-azul.

—     ¿De que me hablas?

—     No finjas demencia. — Esta vez elevó el tono de voz y con sus manos seguía eludiendo los movimientos del chico que se encontraba encima. — Podrás parecerte todo lo que quieras, pero tú no eres el Joey Wheeler con el que me casé.

—     No te entiendo.

Joey se sentía desfallecer, estaba atrapado.

 

~~Ø~~

—     ¿Qué haces?

—     Lo que debí haber hecho siempre.

Declaró el CEO y arrastró consigo al rubio a su automóvil, encerrándolo en la parte de atrás.

—     ¡Te demandaré si me tocas!

—     Ya no puedo soportarlo más, todo es tu culpa.

—     ¡Maldito loco!

Joey pateo y golpeo a su agresor desde el asiento de viajero hasta que le hizo perder el control del auto y fueron a estamparse en un callejón, ambos cerraron los ojos, esperando el impacto. El auto quedo hecho una completa chatarra, en su interior no había nada.

Sus cuerpos se estrellaron juntos en el piso. Seto estaba encima de Joey y éste luchaba por zafarse.

—     ¡Estate quieto maldito perro! — Gritó Kaiba como trataba de controlar las extremidades del joven.

—     ¡Eso me dolió, imbécil!

Cuando se notaron en esa posición comenzaron a inspeccionar su entorno. Una habitación, elegante y bien decorada, demasiado familiar para Joey.

—     ¡Estoy en casa!

Exclamó el ojimiel con alegría. Sé levantó animoso para comprobar su hipótesis y en la cama vio una escena que no debía de causarle celos, empero, sí le provocaba celos porque sabía que ese que estaba encima de  Seto no era él.

Continuará>>>

Notas finales:

Hola!!! Hoy sí ya me tardé, así q nadamas pasó de rápido a actualizar!!

Gracias a todos por leer y gracias a las personas que me dejan un review, en verdad me animan a seguirle. Gracias por su apoyo.

Y el preview!!

Y ahora sí, dos capis más y esto se acaba.  ¿Qué harán los cuatro ahora que se han encontrado?? 

Descubranlo en el sig cap!!!

 

Cuidense!! Disfruten sus vacaciones, si es que tienen, diviertanse!!! 

Nos leemos en la semana, byebye


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