Al dia siguiente
Se encontraba en el hospital esperando su turno para entrar al consultorio de la doctora Mishiro, si bien la cita ya estaba apartada esperaban a que saliera el paciente que estaba en el consultorio. Cuando vieron a la doctora llegar se pararon para saludar.
-buenas tardes - dijo Misaki y el escritor solo hizo un movimiento con la cabeza en señal de saludo.
-buenas tardes, Takahashi-kun y Usami-san - correspondió al saludo - por favor pasen
Al entrar notaron que había otra chica, posiblemente una practicante, que vestía una bata de doctor con un conejo bordado en uno de los bolsillos. De pelo negro y ojos azules resguardados por unos lentes de montura verde, era un poco más alta que Misaki, tez blanca y complexión delgada.
-buenas tardes, soy Matsumoto Kuromi y estaré auxiliando a Mishiro-sensei - declaró con un tono neutral que no denotaba mucha emoción o tal vez la seriedad con la que ejercía su trabajo.
-espero no les moleste - volvió a hablar Mishiro volteando a ver a la pareja - está especializándose en embarazo y estará a mi lado para ejercer lo aprendido.
Un poco sorprendidos y confundidos asintieron, uno porque querían saber qué pasaba en el vientre del otro y el segundo porque quería descartar cualquier anomalía.
-bien, Takahashi-kun, has el por favor beber esto- dijo pasándole una botella con agua - necesitamos que tu estómago esté lleno de agua para facilitar la ecografía
-de acuerdo- tomó la botella y se dio cuenta de que eran casi dos litros - es necesario que la beba toda.
-preferentemente, descuida sera rapido y podras ir al baño enseguida- declaró al ver los nervios del menor.
Acatando las órdenes se dirigió junto a la practicante al cuarto donde seria la ecografía, mientras Mishiro se quedaba junto al escritor para hablar de "ciertos" temas.
-pues si, aun se puede tener una actividad sexual siempre y cuando no aplasten el vientre, además de que no lo hagan en una posición donde Misaki tenga que hacer un sobre esfuerzo- contestó la duda del escritor y al ver el alivio en el rostro de este dio por concluido su trabajo.
- doctora, ¿qué posibilidad hay de que sean mellizos?- pregunto antes de que la doctora decidiera moverse.
-bueno... Siempre está la posibilidad, aunque aún no lo eh visto en un embarazo masculino - respondió, para pensar seriamente sobre lo dicho - aunque eso significaba que los cuidados deben de ser más... Y la actividad sexual se reduce a la mitad.
Una vez que Misaki se acostó en la camilla, le pidieron que alzara la camisa y que se bajase un poco los pantalones. El escritor sonreía al ver aquella marca rojiza en la cadera del menor. Kuromi sacó un gel y lo aplico en el estómago del castaño esparciendolo con un tipo de espátula.
-bien, ahora veremos como se encuentra - el monitor mostraba un fondo verdoso y se podía apreciar unas figuras negruzcas - todo parece normal, kuromi enciende el sonido para oír el corazón.
El sonido que salía era como de pequeños y un poco rápidos tamborileros, aunque se escuchaban un poco extraños.
-¿hay algo mal con mi bebé? - Misaki se preocupo al notar la mirada seria que tenía la doctora.
- no... Es solo que...- lo medito un poco - kuromi, cambia la imagen de 2D a 3D. La chica acató de inmediato la orden, ya que quería que ambos padres observan. - ¿vieron que había dos manchas en la pantalla?
-sí - respondió el editor, mientras Misaki tomaba la mano de este con fuerza.
-bien, quiero decirles que no están esperando un bebé... Ni dos... Si no que son tres - sonrió al dar la noticia - felicidades. Aunque el sonido de dolor que hizo el escritor al ser "agredido" por su pareja, provocó que ambas mujeres voltearon a ver al castaño.
- baka usagi - murmuró después de dar unos cuantos leves golpes en el hombro del escritor - ahora ya no podre ir a clases sin que me vean raro.
En otro lugar
Hotaru y Akemi se encontraban en una cafetería cercana, esperaban sus pedidos. El castaño estaba "molesto" con su padre, el mayor lo respetaba hasta cierto punto.
-¿no crees que es infantil enojarte por eso? - preguntó el de ojos morados, un poco incómodo con el silencio.
- No… - dictó el menor viendo desinteresadamente la mesa.
-pero... tu sabes que él no se llevaba muy bien con el abuelo, es normal que se negara - intento razonar.
- lo se, pero es injusto que nos quiera prohibir el contacto con él - respondió con molestia.
Hotaru soltó un suspiro, su hermano no era terco o rencoroso, pero si tenía un gran amor hacia su familia que le dolía saber que su padre no quiera saber nada de su abuelo. Los chicos sabían que el mayor se llegaría enterando y nadie podría detener o prevenir aquello, eso era algo que (para bien o para mal) no podían cambiar.
Extra: y el favorito es...
Aún no podían decidir entre alguno de ellos, cada vez que creían encontrar algo se daban cuenta su en realidad ambos tíos hacían lo mismo, las ideas se acababan y el golpe de la realidad los golpeaba.
-¿y si elegimos a papá y ya?- la idea del castaño no era mala, pero tenía un pequeño inconveniente.
-papá no cuenta, sería trampa - declaró Yayoi, poner a competir a Misaki sería ilógico e injusto para los demás concursantes, según el criterio de los infantes.
-mmm...- tenían que encontrar a un tercer miembro que pudiera ser mejor que sus tíos.
-¡niños, llegó su abuelo! - los llamo desde la sala del gran departamento, el cuarto de los menores estaba en la planta alta y sabía que bajaron corriendo al oír que el Usami mayor estaba en la casa.
Los trillizos al oír que su abuelo estaba, separaron dejando de lado la hoja que intentaban llenar. Salieron corriendo a su encuentro, bajando las escaleras lo mas rapido que podian.
-¡ABUELO! - gritaron mientras se lanzaban para abrazarlo, provocando que el mayor tuviera que buscar la forma de no caer.
-¿como estan mis nietos consentido? - pregunto mientras acariaba las cabecitas de los niños.
Fue en ese momento en que lo supieron, su abuelo hacía lo mismo que sus tíos y mas, les daba dulces de otros lugares, venia mas seguido a jugar con ellos, varias veces los recogió de la escuela para llevarlos de paseo, los deja estar en su oficina, les llegaba a regalar cosas que tenían que ver con osos (hasta a su papá le regalaba), pero sobre todo… les decía lo mucho que los quería y que de seguro su padre estaría muy orgulloso de ellos.
El abuelo les contaba sobre su padre y les enseñaba fotos de él cuando era niño (comparándolo con Hotaru, quien inflaba el pecho al saber que era la copia de su padre), tambien que habia leido desde la primera novela que publicó hasta la última. Les contaba cuentos e historias muy interesantes en ocasiones.
Si el abuelo Fujuhiko era el favorito de los trillizos….
...claro, después de sus padres.