Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

bajo el muerdago por hitasan

[Reviews - 5]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

porfin lo termine, despues de no se cuanto tiempo( fue mucho) lo termine. espero que sea de su agrado, aunque yo quise que este capitul fuera mas largo la inspiracion no me ajusto bueno que lo disfruten

 

Por alguna razón comencé a sentirme mal, creo que él no desayunar no solo me afecto a mi si no a mi ni-san

-ni-san ¿estas bien?-dije mientras me acercaba hacia el

-co…co…comida-

Supongo que necesitábamos comer no podíamos seguir así necesitaba entretenerlo más tiempo, también necesitaba darle algo de comer a ni-san antes de que se desmallara, ¿Qué se supone que debía hacer? Entonces el embriagante olor de pan recién horneado me inundo por completo, pase el brazo derecho de ni-san por mi cuello para que me usara de muleta, seguí aquel delicioso aroma hasta llegar a una humilde panadería donde por alguna razón en el momento en el que entre por aquellas puertas de cristal me deje caer sobre mis rodillas, creo que no fue buena idea no haber desayunado ni cenado la noche anterior pero por suerte aun traía dinero, lo sufriente como para que el y yo comiéramos. Olvidaba que estaba en un lugar público, pero no me importo, gatee hacia el mostrador donde una amable joven me atendió y de inmediato me dio una bolsa con dos bísquets, cuatro bagels, un baguette, unos cinco muffins, una caja de galletas, dos expresos y muchos más panes. Le entregue el dinero a esa amigable chica y me fui felizmente comiendo una de las galletas que había en la bolsa.

Encontré una banca y ahí me senté, pero después de un rato me di cuenta de algo, ¡había dejado a ni-san en la panadería! Salí corriendo de regreso por donde vine, y hay seguía él, recargado en la pared con la mirada baja y los ojos cerrados, creo que está dormido, o eso aparentaba. Lo coloque en mi espalda y lo lleve a la banca donde deje los panes y las demás cosas. Cuando llegamos los desperté con el olor del café, y le di un beagel para que recuperara las fuerzas, casi no nos dijimos nada, estábamos ocupados comiendo y bebiendo café. Después de que ni-san se comiera la mitad de la bolsa, suspiro, se podía notar la satisfacción en su rostro, solo pude sonreír.

-al-

-¿mande?

-¿porque demonios terminamos aquí? ¿Acaso querías mostrarme una simple panadería? -ni-san fue un poco frio al pronunciar aquella frase, supongo que se esperaba más, pero esa no era la sorpresa.

Me quede callado,

-he esta no es la sorpresa-ni san mostro una mirada un tanto fastidiada -no te preocupes no vamos a correr otra vez-

 

Su expresión se volvió más tranquila y esos ojo se posaron sobre mi, esos dorados ojos hacían que me sonrojara, que mi cuerpo temblara, que quisiera abalánzame sobre el dueño de esa mirada y robarle un beso. Ésos ojos eran mi todo, mi universo.

-ne… ni-san-dije algo sonrojado-es hora de que volvemos a casa y veas tu sorpresa

En ese momento vi como a ni-san se le ilumino la mirada, creo que fue mas por llegar a casa, después de todo es se estaba muriendo de sueño.

 Mire el reloj que ni-san llevaba y me di cuenta que habíamos tardado mas de lo que esperaba, cuando estamos los dos juntos el tiempo parece no pasar. Ni-san se quedo dormido en la banca, siempre es así, lo subí a mi espalda y me fui tranquilamente hacia nuestro hogar, creo que ese fue un muy buen día pero aun faltaba que ni-san viera lo que tenia para el.

Abrí aquella puerta, por fin llegamos a casa, ni-san seguía dormido y parecía que dormiría hasta la mañana siguiente, decidí que lo dejaría dormir así que lo lleve a su habitación y lo deje reposando sobre su cama.

-Que descanses ni-san

Cerré la puerta y me dirigí a mi cuarto, aun tenia un par de cosas que hacer antes de darle la sorpresa a ni-san, pero no paso mucho para que escuchara la puerta abrirse y escuchar los pausados movimientos de mi hermano.

-¿ni-san que haces despierto?

-vamos no eres mi mama como para pregunta eso

El tenia razón, soné como una madre que le pregunta a su hijo que hace despierto tan tarde.

-¿Cuánto tiempo llevo durmiendo?- dijo mientras se sentaba junto a mí

- no mucho, como una media hora

Ni-san se acerco un poco mas, pude notar que estaba titiritando, sus automail estaban helados y el temblaba, saque una manta de mi armario y se la di. Nuestra casa no es muy caliente, pero es acogedora y con eso nos conformamos, tal vez no es el mejor lugar para vivir pero a nosotros dos nos gusta.

Por alguna razón ni-san se caía de sueño, supongo que no durmió lo suficiente, pero no iba a dejar que se durmiera, aun tenia algo planeado para ambos.

- Ne, ni-san- dije mientras me ponía sobre el – tengo algo para ti

-¿al?

- no te preocupes yo me encargo te todo

El sonrió de una manera muy provocadora, esa parte de ni-san me encanta, yo realmente lo amo, desde que éramos niños siempre lo quise pero ahora es diferente, ahora daría lo que fuera por el.

Ya habíamos hecho esto antes, ya teníamos experiencia, pero me sentía nervioso, ¿será que esa noche era especial? o ¿tal vez el hecho que ni-san temblara me ponía algo extraño? realmente no tenia idea de que hacer en esos momentos.

-al ¿estas bien?-Por fin la angelical vos de mi hermano me saco de un trance.

-a si

Sus ojos me miraron pero no con esa dulce mirada de lujuria que pide mas, fue con esa mirada de extrañeza y preocupación con la que me miro, esa mirada que tenia cuando se ponía en situaciones incomodas, esa era su mirada.

Contemple sus dorados ojos por un par de segundo, pero no podía moverme, estaba demasiado nervioso, tanto que comencé a sudar. Por fin me arme de valor y lo bese. Luego comenzaron las caricias y todo empezó a tomar forma. Ya comenzaba a sentirme mas confiado y después de haber recorrido cada rincón del muy bien torneado torso de mi hermano, me dispuse a bajar sus pantalones de pana oscura. Cada suspiro, cada caricia, cada beso, todo estaba saliendo como debía, podía sentir como ni-san se sentía cada vez mas excitado.  Pero no era suficiente, aun debía hacer más que eso, quería que disfrutara cada momento de esta noche inolvidable. Supongo que todo iba bien asta que alguien toco la puerta, mierda ¿Por qué demonios siempre interrumpen cuando estamos ocupados?

-yo abriré- dijo ni-san mientras se levantaba

Se puso la camisa y los pantalones, abrió la puerta de a habitación y salió. Aun no entendía muy bien lo que acaba de pasar pero decidí bajar a recibir a la persona que arruino la noche.

El timbre comenzó a sonar una vez más.

-si si, ya voy- grito ni-san

El abrió la puerta y para nuestro asombro era la teniente hawkeye.

-buenas noches muchacho-nos dijo con un tono un poco mas serio de lo normal- siento molestarlos a  estas horas pero estoy buscando a el coronel, pensé que estaría aquí ¿no lo han visto?-

-no, ¿Por qué la pregunta?-

-ya lleva desaparecido desde hace ya tres días y no  hay rastro de el-

Ella se veía serena pero seguro que debajo de toda esa calma había preocupación extrema por el asunto. Todo el cuartel sabe que la teniente y el coronel tienen un romance, pero es más divertido mantener el secreto.

-y… ¿que hiso el coronel antes de desaparecer?- pregunto ni-san

-pues llego al cuartel y se fue en jornada regular, como todos los días-

La teniente se veía un poco nerviosa por la pregunta de mi hermano tal vez ella tenia que ver con el caso, pero supuse que solo fue por algún detalle que ella olvido poner en el informe o algo.

-bueno gracias por su tiempo- dije ella mientras se retiraba- que tenga una buena noche

Después de despedirnos de la teniente, regresamos al segundo piso. Ya no había más distracciones y ni-san estaba esperando, nada podía arruinar el momento dos veces.

 

Notas finales:

bien aqui queda pendiente la historia, espero poder empezar en cuanto anter el siguiente capitulo, espero que les guste el siguiente


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).