Al llegar a la puerta del despacho, tocó la puerta y esperó. “Pase” dijo la voz del director. –Ah Harry, por fin llegas, tienes visita- dijo señalando al hombre sentado frente al escritorio. Harry esbozo una sonrisa y corrió a abrazarlo.
-Sirius- dijo Harry abrazando a su padrino
-Hola cachorro, ¿Cómo estas?- saludó Sirius.
-¡¡Muy bien!!- dijo el chico
-Bueno, los dejaré para que conversen- dijo Dumbledore.- creo que quieren privacidad.
-No es necesario Albus- dijo Sirius.-¿Te parece si damos una vuelta por el lago? – le preguntó a Harry. El moreno asintió y salieron del despacho del director conversando.
Hablaron de muchas cosas mientras caminaban hacia el lago, de los padres de Harry, de sus travesuras, de la vida de Sirius ahora que era un hombre libre, de la orden, hasta llegar al árbol donde siempre se sentaba Harry.
-Entonces Snape giró de cabeza en el aire mientras tu padre y yo reíamos, pero Lily siempre le reclamaba a James- decía Sirius cuando se vio interrumpido por Harry.
-Sirius, hay algo de lo que quiero platicar contigo- le dijo el moreno
-Claro pequeño, dime que ocurre.- respondió el mayor.
-Bueno, es que… estoy saliendo con un chico- le dijo Harry nervioso. Al ver que su padrino solo lo miraba continuó- bueno, de hecho, es mi novio, llevamos casi tres meses- dijo.
-Harry, ya deberías haber aprendido que lor prejuicios de los Muggles no son los mimos del Mundo Magico- dijo Sirius- aquí nadie te va a reprochar porque te gusten los hombres o las mujeres, o ambos en su caso, la Comunidad Magica es mucho mas abierta a eso que los Muggles, y yo como tu padrino te digo que no tengo ningún problema.
-Lo se- dijo Harry inseguro- gracias, pero creo que el verdadero problema es el quien es el chico.
-Vamos Harry, dimelo, ni que fuera el hijo de Lucius Malfoy.- dijo Sirius bromeando, pero enmudeció al ver que el menor no reia, si no que bajaba la mirada y se mordía el labio.- Caray Harry, ¿En serio? ¿Te enamoraste de Draco Malfoy?- preguntó sorprendiso Sirius, a lo que el moreno solo asintió con un pequeño movimiento de cabeza
-¿Te molesta?- dijo Harry con unan nota de tristeza en su voz.
-No, - dijo Sirius- solo que me sorprende, ustedes dos son como el agua y el aceite, no puedo creer que acabaran juntos.
-Creo que nunca lo odié realmente- dijo Harry- solo me enojaba su manera de ser con mis amigos, por eso peleábamos, pero, creo que en el fondo siempre lo amé.
-Bueno Harry, yo no soy quien para decirte con quien estar y con quien no- dijo Sirius tratando de reconfortarlo- mientras seas feliz, lo demás no importa cachorro- le dijo con una sonrisa, tras lo cual Harry lo abrazó.
-Gracias Sirius, sabia que ibas a entender- dijo Harry sonriente.
-A demás Harry, yo también tuve algo que ver con un Slytherin en mis tiempos de estudiantes, asi que seria hipócrita de mi parte rechazar tu relación con Malfoy.- dijo Sirius.
-Se hace tarde Sirius, deberíamos volver.- le dijo Harry, tras lo cual se levantaron y regresaron al castillo. Sirius acompañó a Harry a su sala común, y antes de despedirse le dio otro caluroso abrazo. Harry pronunció la contraseña y entró, donde Ron y Hermione lo esperaban.
-Amigo, estábamos preocupados- le dijo Ron
-¿Dónde estabas?- preguntó Hermione.
-Vino Sirius- les dijo Harry-hable con el de mi relación con Draco… y me dijo que no hay problema.
-Oh Harry- dijo la castaña- que bonito, es como si todo estuviera a favor de ustedes.
Ron la miró y después los tres se soltaron a reir, cuando vieron entrar a Neville notoriamente sonrojado y con una nota en sus manos.
-¿Siguen llegándole notas como el del Gran Comedor?- preguntó Harry
-Si, hoy van 3 que le llegan y siempre es lo mismo, se sonroja y sonríe. Dijo Hermione
-Vaya, al parecer si hay una chica interesada en Neville- dijo Ron
-O chico- dijo Hermione y al ver que sus amigos la miraban interrogantes aclaró- Por dios, la caligrafia de las notas es de un hombre, la letra de una mujer es mas estilizada.
Los chicos la miraron y después Ron dijo:
-Tengo hambre, bajemos a cenar.
-Acabas de ir a las cocinas ¿y ya quieres cenar?- dijo Hermione reprendiéndolo
-Tengo hambre- dijo ron encojiendose de hombros.
-Ay Ron, eres un barril sin fondo- dijo Harry y los tres empezaron a reir.
Neville entraba a su habitación con la carta en la mano y tremendamente sonrojado, la ultima carta era un poema hermoso, el cual le encantó al chico. Se dejó caer en su cama, no dejaba de pensar en el autor de esas cartas, definitivamente estaba enamorándose de el, aunque no supiera quien fuese.
-“Espero que seas tu… nada me haría mas feliz”- pensó mientras visualizaba la imagen de cierto Slytherin castaño del cual estaba enamorado desde hacia ya dos años
En la sala común de Slytherin, un rubio y un moreno se encontraban viendo incrédulos a un castaño, que tenia la mirada baja y se mordía el labio.
-Dilo de nuevo- exigió Draco.
-Me gusta Neville- murmuró el castaño
-Repitelo, y que esta vez podamos escucharlo- dijo Blaise
-Me gusta Neville Longbottom- dijo el chico castaño alzando la mirada y mirándolos a los ojos- sus novios son Gryffindor también, asi que no pueden reprocharme.
-No es eso- dijo Draco- es que nos sorprende que justamente sea el.
-Llevo amándolo en secreto dos años, es hora de que lo sepa, si me acepta o me rechaza, es algo que estoy dispuesto a averiguar, pero no voy a segur ocultándoselo.-dijo el castaño con determinación.
Aquel dia, Harry estaba buscando un libro de Transformaciones en un estante alto, cuando de pronto cayó, para su suerte, Draco lo vio y alcanzó a atraparlo, cayendo ambos al suelo.
-¿Por qué siento que esto ya lo vivimos antes?*- dijo Draco ironico.
-Ni idea- dijo Harry tomando a su novio del cuello y besándolo. Comenzaron a besarse tiernamente cuando oyeron la voz de la bibliotecaria.
-Jovenes esto no es Hotel de paso, retírense por favor- dijo enojada.
-Lo siento. Dijeron ambos, se levantaron y recogieron sus cosas. Estaban dispuestos a salir cuando vieron entrar a Theo.
-Oye Theo, ¿podrías sacar un libro de transformaciones para Harry?- preguntó Draco
-Amm.. si…. Claro…- dijo Theo nervioso
-Gracias Theo- dijeron ambos y se fueron, mientras a su lado pasaba Neville apurado.
Neville iba apurado hacia la biblioteca, tenia que terminar su tarea y le faltaban unos cuantos libros por consultar.Al entrar, vio a Theo subiendo la escalera donde se encontraba uno de los libros que buscaba.
-Ho.. Hola Theo- dijo Neville nervioso.
-Hola… Neville- dijo Theo
-Yo… necesito un libro que esta en esa sección…- dijo Neville
-Ah.. si… emm.. ya bajo…- dijo Teho comenzando a bajar de la escalera
-No... yo… vengo luego- dijo Neville dando media vuelta y dispuesto a salir de la biblioteca
-Neville espera- dijo Theo corriendo a alcanzarlo y tomandolo del brazo, quedando sus rostros peligrosamente cerca
-…- Neville miraba los ojos de Theo y sus labios alternadamente
-Yo… Harry me pidio que le buscara un libro… ¿Podrias dárselo?- dijo Theo alejándose un poco del Gryffindor
-Ahh… claro- dijo Neville desilusionado, tomó el libro que le daba Theo y se dispuso a salir.
-Neville…- dijo Theo
-¿Si?- dijo el moreno deteniéndose en la puerta
-… Gra.. gracias- dijo el Slytherin
Neville le sonrió y se fue, dejando a Theo con el corazón a mil por hora.
-“Dios hiele tan bien… casi lo beso… aahh.. tranquilo Theo, todo a su paso”- pensó el chico. Recojió sus cosas y se fue, pensando en que tal vez el Gryffindor sintiera algo por el.
-Draco…- dijo Harry.
-¿Si?- preguntó el rubio
-Acabas de ver lo mimo que yo ¿verdad?- preguntó el moreno a su novio
-Si te refieres a que Theo y Neville se ponen nerviosos ante la presencia del otro, si, y yo se que Theo esta enamorado de Neville.- dijo Draco
Y así pasaban los días, Theo poco a poco fue ganándose el amor del Gryffindor con las notas secretas, y Neville, cada dia se enamoraba mas del chico castaño. Pasó la temporada de exámenes y todos los chicos y chicas del colegio estaba estresados como siempre, sobre todo Hermione, pero nuestros protagonistas pasaron sin problemas. Llegó el fin de curso y los chicos se despedían de sus amigos, hacían planes para el verano, o simplemente recogían sus cosas. Excepto un rubio y un moreno que se encontraban en la Sala de Menesteres.
-¿Te voy a ver en el verano?- preguntó Harry a la vez que acariciaba el pecho de su novio, sobre el cual se encontraba recostado
-No lo se león- dijo Draco preocupado- sabes que a mi padre no le agrada en lo mas minimo nuestra relación, aunque no creo que mi madre ponga pero.
-¿Y si vas a La Madriguera conmigo y Ron?- preguntó ilusionado el moreno
-No creo que sea bien recibido Harry.- dijo el rubio
-No digas tonterías, la mamá de Ron me adora y no creo que diga nada si voy con mi novio ¿no?
-No lo se Harry- dijo Draco.
-Te amo Draco Malfoy- dijo Harry mirando a su novio a los ojos.
-Tambien te amo Harry Potter- dijo Draco devolviéndole la mirada a su novio. Ambos se besaron con mucho amor.
Unos instantes después, se levantaron y salieron rumbo al Expreso de Hogwarts, a reunirse con sus amigos. Para Harry y Ron sería un largo verano sin sus novios, lo que no sabían, era la sorpresa que tenían estos preparada para los leones.