Capitulo 3: una decisión errónea
*6 meses después de que yugi se fuera…*
Otra vez estaba acostado sobre aquella cama de seda, solo, tristemente solo, como cada noche, que después de hacer el amor, el ceo se levanta y lo deja sobre la cama, sin un beso, ni un cariño…
Solo… lo deja sobre la cama… desnudo y solo…
Como si el fuera un amante de una noche más…
Derramo una lágrima, la cual cae sobre las sabanas de seda, se acomoda sobre la almohada, ya no tenía caso llorar, eso es lo que le tocaba vivir si es que amaba al ceo…
Amor…
Desde que vive con el Ceo, pareciera que el significado de la palabra amor cambio para el…
¿Desde cuando el amor es tan frío y lejano?…
¿Desde cuando el amor no es mostrar cariño, pero si mostrar indiferencia?...
O acaso…
¿Aquello no era amor?...
Esa pregunta lo atormentaba y no lo dejaba dormir, tal vez lo que tenia con seto no era amor, sino simple pasión…
Un mar de confusión lo atormento mientras se acomodaba entre las sabanas de seda…
Más un recuerdo llego a su mente…
Un recuerdo… que había olvidado…
*RECUERDO*
Esa noche, se había despertado, tuvo una pesadilla... aun temblaba…
Se sentía como un niño nuevamente, soltó una pequeña risa, era patético, como un faraón podía sentir miedo de una pesadilla, era algo ridículo…
Pero… ¿Por qué no dejaba de temblar?...
Tenía miedo…
Soy un tonto, tengo miedo de algo así…-murmura el moreno mientras se ríe de si mismo.
Repentinamente… sintió unos brazos abrazar sus hombros…
No eres ningún tonto…-susurra en su oreja…
Yugi…-murmura el moreno
Todos tenemos malos sueños… -refuerza se abrazo- todos tenemos miedos, hasta un faraón…
Yami, siempre estaré aquí para cuando tengas miedo, para cuando la confusión y la soledad te atormenten… como lo he hecho estos 4 años…-el menor deja de abrazarlo y recuesta su cabeza en el hombro del mayor…
Aibou…-sonríe el moreno
Cuando me necesites… aquí estaré mi amor…-susurra el menor mientras se queda dormido
*FIN DEL RECUERDO*
Aibou…-murmura aquel tricolor de piel morena, mientras va cerrando sus ojos y el sueño le llega.
Aunque sea en un recuerdo…
Aquella pequeña luz…
Le daba un consuelo para poder dormir…
Yugi……-murmura el moreno mientras cae dormido.
*AL DIA SIGUIENTE….*
El moreno se encamino al comedor, el cual estaba vacío como siempre. Mokuba estaba en su escuela, los sirvientes haciendo sus labores y el ceo trabajando, claro como siempre sin despedirse de el…
Suspiro agotado…
Se sentía solo…
Muy solo…
Dio la vuelta y se encamino a su cuarto, tal vez si salía un rato, despejaría un poco su mente…
Toma un abrigo de su closet y a sacarlo algo cayo de el…
Se agacho y lo recoge
¿Una pulsera?...-murmura el mayor mientras toma la pulsera entre sus manos, se levanta y se sienta en el borde de su cama…
Era una pulsera muy sencilla, era de plata y tenia un corazón en el centro…
El ceo no se la había dado, eso era seguro…
Abre sus ojos de sorpresa al recordar quien se le había dado…
*RECUERDO*-
Aquel día era su 4to aniversario, el mayor como regalo lo llevo a un restauran elegante, ahora se encontraban en el parque de los árboles de Sakura, parados encima de un puente…
Yami…-murmura el menor- ten…-le entrega una caja envuelta en papel de regalo…
Yugi, no te hubiese molestado…-dice el moreno algo sonrojado.
Ábrelo...-le sonríe tiernamente
El mayor abre el regalo y se sorprende al ver que era un pulcera…
Aibou…murmura sorprendido
Perdón que no sea un pulsera muy hermosa, pero… es lo único que pude pagar con mi sueldo de mesero…-se disculpa el menor- quería demostrarte cuanto te amo… pero… ni teniendo todo al fortuna del mundo en mis manos… no podré darte un regalo que se compare con el amor que te tengo…
El mayor se sonrojo un poco y baja la mirada…
El menor lo mira y le sonríe tiernamente, sin pensarlo, toma la mayor en brazos…
Te amo…-murmura el menor en su oreja- te amo mi faraón… mi amada oscuridad…
*FIN DEL RECUERDO
Una lágrima cae de su mejilla, aquel niño lo amo más que nada en este mundo, aquel niño no solo le entrego su cuerpo, sino su lama corazón, aquel niño… fue el ser… que más amo en este mundo…
Aquel niño…
Sigue siendo el ser que más amo…
Lágrimas que caen sin medir el tiempo, sin medir el dolor pero si la soledad, lágrimas que invocaban recuerdos…
Palabras del alma…
Siempre que me necesites… aquí estaré mi amor…
Que sus oídos escucharon, más su corazón no…
Ahora se daba cuenta de varias cosas, como por ejemplo, de que siempre que estaba solo pensaba en yugi, creía que lo hacia por la costumbre, que solo extrañaba la costumbre de su antigua vida…
Pero no…
El no extrañaba la costumbre…
¡¡Extrañaba a yugi!!
Derramo su última lágrimas, una decisión errónea, le costó a su verdadero amor, se limpio el rostro, tomo su abrigo y salió de allí, con todas la fuerza de su piernas…
Llego al edificio de Kaiba Corp, sin dudarlo entro allí…
Terminaría todo de una vez…
Ya basta de sentir tanta soledad…
Ya basta de estar lejos de quien ama en verdad..
Ya basta de estar ciego ante las cosas…
Llego a la oficina de seto kaiba, le importo poco lo que la secretaria le decía, llego aquella oficina y lo vio…
El ceo besaba el cuello de joey, mientras quitaba lentamente su camisa y la tiraba lejos…
Sin arma un escándalo (aun después de todo es un faraón, sabe cuando mantener su postura) pero si guardando una gran rabia, abrió la puerta de la oficina, sorprendiendo a ambos presentes…
Terminamos…-murmura el moreno mientras sale de allí…